Nuevos sistemas educativos nicaragua.

 Por:Juan Carlos Casco

El futuro de todos está en la educación, sin embargo nadie se la toma en serio. Estamos en la antesala de un nuevo paradigma educativo, una coyuntura sumamente compleja, pero que ya hemos comenzado a abordar con líderes educativos y países que tienen el coraje y la responsabilidad histórica de iniciar este cambio. Es el caso de Nicaragua, un país que aunque parte de grandes dificultades, tiene la decisión y la convicción de asumir el desafío. La empresa es titánica, aunque se trata de un largo recorrido, toda gran travesía se inicia dando el primer paso.

La dejadez de los gobernantes en sus responsabilidades con la educación y su actualización, está conduciendo a la juventud y la sociedad en general a un desastre sin paliativos. Nuestros sistemas educativos nacidos del influjo de la Ilustración y la Revolución industrial, generaron un modelo educativo para producir ciudadanos sumisos capaces de realizar tareas estándar, sin capacidad crítica, faltos de iniciativa, carentes de liderazgo. Un modelo de individuo resuelto a reproducir patrones pero incapaz de habitar el mundo desde la creatividad y la innovación.

La falta de liderazgo y visión de futuro se hace patente en las políticas educativas de los países. Cuando la educación se abandona por una acción errática u omisión, y esto incluye la falta de coraje para hacer los cambios necesarios en el sistema, se está hipotecando el futuro del país (donde no hay visión la gente perece). Nuestros responsables políticos e institucionales nos están condenando a transitar una senda sin futuro.

El cambio de paradigma educativo en el marco de la transformación global y el cambio civilizatorio.

Vivimos una transformación sin precedentes, las coordenadas de nuestro mundo conocido se han quebrado (aceleración del tiempo histórico, ruptura del concepto centro/periferia, crisis de las carreras, revolución tecnológica, desaparición de los empleos y formas de vida tradicionales…).

Obviando todas estas realidades históricas con las que convivimos, nuestra educación ha evolucionado muy poco a lo largo de los siglos. El modelo de Boecio y Casiodoro (Trivium y Quadrivium), los planteamientos de la Ilustración que generaron el estándar de conocimiento académico (inservible para enfrentar el mundo de hoy), la Escuela prusiana enfocada en producir personas obedientes y soldados disciplinados, las exigencias de la Era Industrial demandando trabajadores para hacer tareas repetitivas en las cadenas de montaje y la administración…

Todas estas visiones reduccionistas de la educación, que tuvieron su validez para dar respuesta a las necesidades de otros momentos históricos, constituyen la base de un paradigma educativo en el que estamos atrapados, una jaula que impide nuestro desarrollo humano y acceso a las oportunidades que ofrece la Sociedad del conocimiento.

Todo cambio en la infraestructura (economía, sociedad), ha de venir secundado por un cambio en la superestructura, y esto incluye a la educación. Sin embargo ese cambio no se ha producido, creando una anomalía histórica. Una sociedad nueva sigue funcionando con un paradigma educativo arcaico y esa disfuncionalidad no se puede mantener en el tiempo, so pena de sufrir una crisis monumental y un ajuste traumático.

Nuestros viejos modelos educativos están parcheados, en un proceso de descomposición, remendados a base de medidas cortoplacistas, gobernados por personas incapaces de entender que el cambio educativo solo se puede acometer desde un nuevo paradigma. No se trata de hacer las mismas cosas y seguir los viejos planteamientos, con este pensamiento antiguo, aunque multipliquemos los recursos para la educación el problema subyacente continuará vivo.

Brotes verdes del nuevo paradigma educativo. Nicaragua.

Nicaragua fue referente mundial en la educación de adultos, un ejemplo en la década de 1980 para el mundo, sin apenas recursos. Hoy, vuelve a asumir otro reto, esta vez no en materia de alfabetización, sino algo todavía más difícil y complejo: comenzar en serio a abordar el cambio de paradigma educativo supeditado al desarrollo humano desde una visión holística de la educación como epicentro del progreso social y económico.

Las personas (como tú y yo) y las organizaciones que estamos comprometidas y trabajando en dar forma a la creación del nuevo paradigma educativo, permanecemos atentos a los movimientos (escasos) que se están produciendo en el mundo, dispuestos a sumar esfuerzos y aportar nuestros recursos y experiencia. Nicaragua es un país que desde sus limitaciones está comenzando a dar el paso, por eso se convierte en un teatro de operaciones para la comunidad mundial que está preocupada por la educación (queremos dar las gracias al gobierno de Nicaragua y las autoridades educativas del país por la confianza depositada en nosotros para contribuir a este difícil pero ilusionante y motivador reto).

La dificultad de avanzar en un nuevo paradigma depende de lo afianzado y arraigado que esté el antiguo. Por eso es más fácil instalar un modelo partiendo de cero que hacerlo desde viejas prácticas, porque ello conlleva un coste de desmantelamiento de lo antiguo; hay menos obstáculos que superar, y por tanto, menos costes de todo tipo.

Algunas claves que estamos abordando para la innovación y el cambio.

+ Una educación que ayuda a construir los proyectos de vida de los ciudadanos, constituyendo un medio no un fin en sí misma. Esta tarea nos convoca a desarrollar nuevos programas formativos donde el alumno diseña su proyecto vital a medida que aprende.

Se da la opción al alumno de cursar las materias en las que quiere formarse y se le ofrece un itinerario paralelo para adquirir competencias genéricas, elaborar un proyecto emprendedor o un proyecto de liderazgo real, listo para aplicarlo y llevarlo a la práctica en su vida. Al finalizar los estudios, el alumno recibe una doble certificación (la específica de sus estudios más la que le acredita la adquisición de las otras competencias). En definitiva se prepara a las personas para diseñar un plan de vida que pueda llevar a cabo de manera autónoma.

+ Una universidad donde los alumnos pueden confeccionar sus carreras “a la carta” en función de su proyecto vital.

+ Una educación que incorpora la igualdad de oportunidades, posibilitando que el desarrollo de las competencias clave para el desarrollo de las personas en el siglo XXI, el emprendimiento y el liderazgo sean patrimonio de todos, no únicamente de las élites de los países.

+ La aplicación de las nuevas tecnologías a la educación para acompañar el proceso, incorporando nuevos formatos, contenidos, formación masiva y abierta (MOOC).

+ Incorporación de las lecciones aprendidas y las visiones de las vanguardias y los principales líderes educativos mundiales (Robinson, Gerver, Freire…).

Todos estos planteamientos, además de nuestro modelo basado en los 6 Dominios y 9 Niveles de excelencia los estamos poniendo en práctica para instrumentalizar el proceso.

La Universidad Abierta en Línea de Nicaragua es uno de los programas emblemáticos en los que estamos sumando nuestros esfuerzos, liderado por el Ministerio de Educación, el Instituto Tecnológico Nacional (INATEC), el Consejo Nacional de Universidades (CNU), y el apoyo técnico de AUPEX y EMPRENDEDOREX. Incorpora todos los planteamientos anteriores, suponiendo un modelo nuevo de universidad abierta para todos los bachilleres del país, con capacidad para extender el desarrollo de nuevas capacitaciones y competencias al conjunto de la ciudadanía.

El futuro de la educación se está construyendo a través de experiencias que comienzan a surgir de forma diseminada en el mundo, como ecosistemas aún incipientes, pero que debemos contribuir a impulsar y ayudar a crecer.

Fuente:http://www.el19digital.com/articulos/ver/titulo:48377-nuevos-sistemas-educativos-nicaragua

Imagen: http://www.el19digital.com/files/articulos/149075.jpg

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Juan Carlos Casco

Liderazgo práctico para personas y organizaciones