¿Profesores por qué…? Homenaje al maestro

Por: Yolanda I. Crespo D.

¿Profesores por qué…? Homenaje al maestro : libro de ensayo psicopedagógico del Dr. Samuel Pinzón Bonilla, una de las mentes más preclaras de la carrera de Psicología. Consagrado catedrático de la Universidad de Panamá, se distingue como experimentado psicoanalista, escritor, panameño, inteligente, creativo, celebra sus cuarenta y un años como psicólogo clínico. Licenciado en Psicología por la Universidad Nacional Autónoma de México, prosiguió sus estudios de magisterio y doctorado en Psicología Clínica. Emprende una fundamental investigación sobre la educación, la sexualidad masculina y las relaciones maestro, padre e hijo. Hombres , su obra anterior fue muy ponderada.

Aborda la historia de la educación y las características de los buenos educadores. El Dr. Pinzón hace un análisis exhaustivo de un gran número de películas, libros relacionados con el arte de la enseñanza aprendizaje.

Obra de imprescindible lectura, testimonio de una inmensa cultura producto de décadas de estudios.

En el prólogo del Dr. Alfredo Figueroa Navarro, al referirse al catedrático, resalta al autor como un ‘Educador nato e idealista, insigne psicólogo panameño, brinda sus reflexiones acerca de la figura del maestro y del profesor en la vida contemporánea y en el pretérito. Homenaje a los educadores, a través de este libro cuyos capítulos evocan los escenarios cotidianos’.

La enseñanza es la servidumbre de las profesiones. Los maestros y los padres transmiten su amor al niño, hacia la vida, al saber, lo motivan aprender, a buscar la sabiduría, la disciplina necesaria para el trabajo y las distintas facetas de la existencia. Toleran los errores, tratando de llevarlos a la senda del conocimiento.

La vocación de maestro está relacionada con el amor a aprender y seguir aprendiendo a través de la enseñanza.

Acertadas meditaciones sobre el papel del maestro. Realiza semblanzas de eminentes maestros desde la Grecia clásica hasta la actualidad, atesora un sinnúmero de tareas de enseñanza-aprendizaje. El educador cumple una función social, pedagógica y psicológica complementaria en la crianza de niños y adolescentes, sostenedora, en el desarrollo de aprendices adultos.

Elucidar los infinitos métodos pedagógicos en estos tiempos, desde computadoras portátiles y tableros electrónicos, considerando las innúmeras técnicas de evaluación, el método de exámenes, pruebas y trabajos prácticos. Asedia las multifacéticas calificaciones que generan los ámbitos escolares y universitarios.

El Método Mayéutico: técnica socrática basada en el interrogatorio, búsqueda del porqué. Mayeusis: parto. Sócrates buscaba hacer parir ideas.

Recursos audiovisuales. El uso de láminas, videos, películas contribuyen a vitalizar una presentación y a realzarla.

La educación en los Aztecas tenía como propósito fundamental formar la personalidad del individuo, ‘alcanzar el rostro y el corazón’, conformar la personalidad. Conocer su interioridad psicológica, estar en armonía con los buenos sentimientos alojados en su corazón.

Había hombres ancianos, elegidos por sabiduría, a quienes se les hacía cargo de orientar, de ayudar a los niños a tener una identidad propia.

El maestro debe enseñar, nunca adoctrinar. El niño desea ser aceptado, reconocido, recompensado, señalado como un buen alumno, se muestra dispuesto a trabajar basado en la necesidad de amor.

Los profesores, por exigencias curriculares, son sometidos a evaluaciones de su desempeño, esto puede ser objeto de revanchas, manipulaciones y actos punitivos que perjudican al maestro.

En muchos pueblos ostentan monumentos, estatuas y esculturas dedicadas al maestro y a distinguidos pedagogos. Cada país dedica un día a festejarlo. Nosotros lo festejamos el día primero de diciembre.

La puntualidad, el orden y el aseo del docente serán patrones básicos que se transmitirán a los alumnos.

No debemos permitir que las personas que hacen daño a los educandos, tanto a nivel personal como en cuanto a sus necesidades de aprender, continúen en sus puestos.

Los dieciocho valores axiales son: honestidad, tolerancia, libertad, agradecimiento, solidaridad, bondad, justicia, amistad, responsabilidad, lealtad, respeto, fortaleza, generosidad, laboriosidad, perseverancia, humildad, prudencia y paz.

El maestro afirma sus convicciones, no debe imponérselas a su discípulo ni buscar adeptos, no puede formar copias de sí mismo, sino inteligencias independientes, capaces de ir por su propio camino.

Felicitamos al Dr. Pinzón por este aporte capital, verdadera joya bibliográfica.

Fuente: http://laestrella.com.pa/opinion/columnistas/profesores-homenaje-maestro/23974023

Foto de archivo

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Yolanda I. Crespo D.

Psicóloga, Escritora y Docente Universitaria. Panamá