Chile: El Perito Moreno, pionero de la educación popular

“La fuerza y la grandeza del mañana de la Patria dependen de la escuela de hoy”. Así lo expresaba. Breve. Contundente. La frase sintetiza la fe que en la educación deposita su autor, Francisco P. Moreno, de cuyo fallecimiento se cumplieron el 22 de Noviembre 100 años. Fue «el Perito” por antonomasia.

Pero la misma no refiere a la educación en abstracto. No es una mera frase altisonante. Su autor sabía, por su propia experiencia personal, que la falta de educación formal no es un obstáculo para el progreso de quienes tienen la fortuna de nacer en una clase social acomodada. Si bien culminó sus estudios secundarios, Moreno nunca asistió a la Universidad, pero ello no le impidió la publicación de trabajos científicos, la creación y dirección del Museo de la Plata, el acceso a la banca de diputado o ejercer el cargo de Vicepresidente del Consejo Nacional de Educación ni, por supuesto, ser un eficiente defensor de los intereses del país en la cuestión de límites.

Ha observado y tiene clara conciencia de ello, que todo lo contrario ocurre en las clases más postergadas. Cuando dice “educación” se refiere a la educación popular, y es este aspecto (junto a su labor filantrópica, de la que va de la mano), el menos conocido de su fecunda labor por su patria y por su pueblo.

El joven Moreno, a quién su padre llamaba cariñosamente “Pangolín”, debió haber escuchado repetidas veces, cuando visitaban la casa familiar personajes como Domingo F. Sarmiento, Bartolomé Mitre y Juan María Gutiérrez, comentarios y reflexiones acerca de lo peligrosa que resultaba para el progreso de las naciones la ignorancia de los pueblos.

Por eso el ímpetu creador de escuelas que serían «templos del saber y de la virtud cívica» de esa época. No se trata sólo de enseñar sólo para comunicar conocimientos, se trata –sobre todo- de formar ciudadanos útiles a la democracia y al proyecto de Nación que la generación del ´80 se propone construir.

La labor educativa de Moreno se expresa en los niveles superiores a través de su proyecto de Museo, que concretará en La Plata. Un sitio donde no sólo se hagan expediciones e investigaciones, sino también un lugar donde el lego pueda contemplar y aprender acerca de la Naturaleza, en un modelo que se inspira en la Smithsonian Institution de los Estados Unidos, y que Moreno complementa con otras ideas, que no lograría concretar, como la creación de un Servicio Científico Nacional, que podría considerarse el primer antecedente del actual CONICET.

Se expresa también en su interés en introducir las actividades de campamento en la escuela 6 de Barracas, lo que le lleva a su activa participación en la creación de la Comisión Organizadora del Movimiento Scout en la Argentina, que luego preside y que, en brevísimo lapso y trabajando con el apoyo de la Asociación Cristiana de Jóvenes (de la que Moreno es miembro), concreta la institucionalización del movimiento scout a nivel nacional en el año 1912, apenas cuatro años después de la visita de F. Baden Powell, creador en 1907 del movimiento scout en Inglaterra, a la Argentina.

Pero donde se hace evidente con mayor rotundidad el altruismo de Moreno es en la educación primaria, concretada con la creación de las Escuelas Patrias, proyecto que comienza con la instalación de comedores escolares en la quinta familiar (ubicada donde se levanta hoy el Instituto Bernasconi) y para cuyo sostenimiento vende las tierras que el gobierno le había otorgado como pago por su labor de perito. Instala también otros comedores en barrios populares muy humildes, como Barracas, y crea las Cantinas Maternales, donde las madres que trabajaban podían dejar a sus hijos al cuidado de nodrizas cuyo sueldo pagaba Moreno. Son los primeros comedores escolares y guarderías de la República Argentina. Es, también a propuesta suya siendo diputado, que se incorpora la copa de leche en las escuelas públicas. “Un niño con la barriga vacía no puede aprender a escribir la palabra pan” dice, y Moreno es de los que dicen lo que piensan, creen firmemente en lo que dicen y actúan en consecuencia. Tomemos ejemplo.

José Sellés-Martínez Dpto. de Geología/Fac. de Cs. Exactas y Naturales-UBA

Fuente: ttps://www.clarin.com/opinion/perito-moreno-pionero-educacion-popular_0_n03Ve6n4.html

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