Page 1 of 9
1 2 3 9

¿Leer o no leer? Esa es la cuestión

Por: Mariana Sofía Jiménez Nájera

 

¿Continuar o dejar de leer un libro que no nos gusta? Los sentimientos negativos que emergen al sentirnos atascados con una obra pueden atrasar el progreso de convertir la lectura en un hábito.

 

Todos hemos estado en esa situación donde por fin nos acomodamos para dedicarle tiempo a la lectura con todas las comodidades del mundo a nuestro favor: una taza de té caliente, tu sofá favorito, silencio en tu hogar. Sin embargo, hay un pequeño gran detalle que puede arruinar esta experiencia, y es que el libro que estás leyendo no te gusta.

Que un libro no te guste es normal, y no hay un deber-ser o regla que indique cuál es la mejor opción para enfrentar este tipo de casos, sino que cada persona debe evaluar las razones que más se apeguen a su personalidad. Esto, con el fin de no cuestionarnos constantemente entre dejar o continuar leyendo una obra y alentar el proceso de convertir la lectura en un hábito.

Como la mayoría de las personas a las que les gusta leer han pasado por situaciones similares a esta, existen opiniones diferentes al respecto. Mientras que una de las resoluciones más populares es aumentar la cantidad de libros leídos, siempre van a existir lecturas que a pesar de ver la sinopsis antes de comenzar, la cual parece atractiva o la recomendación entusiasmada de tu amigo sonaba increíble, no serán de nuestro agrado. Por lo que al ser lectores y comprometernos con la lectura nos preguntamos: ¿lo dejo o continúo?

La lectura, esencial en la educación y muchas veces parte del trabajo de miles de personas, también es un hobby para muchas personas; y un pasatiempo no debe de ser tedioso ni provocar sentimientos negativos (ya si debes leer para sacar una calificación aprobatoria o por cuestiones laborales, es otra cuestión). Sin embargo, ambas posturas: continuar leyendo o no, aunque no lo creas, tienen sus beneficios.

¿Y si lo abandono?

En un mundo lleno de expectativas y perfeccionismo mostrado constantemente en redes sociales, sería inaudito dejar el libro que explícitamente pusiste en tu lista por leer en aquella story de Instagram y no acabarlo.

Inventarte excusas, reemplazar ese tiempo procrastinando o plenamente evitar el libro, pueden ser tus señales para dejarlo. La idea no es que sea una obligación, sino una actividad recreativa para relajarte, aprender cosas nuevas o fomentar el hábito de la lectura. Especialmente, si estás comenzando con integrarla en tu rutina, dejar un libro con el que estás batallando por continuar es una buena opción, ya que al forzarte estarás inculcando en ti mismo que leer es una tarea difícil y aburrida en vez de placentera.

Mientras que a lo largo de la vida estudiantil a veces se nos imponía un libro o si no reprobábamos, ten en cuenta que mientras que estés leyendo sea por placer, no habrá repercusiones, lo dejas de lado. Puedes buscar otra recomendación o incluso seguir adelante con tu pila de libros que están pendientes y olvidarte del que dejaste o incluso retomarlo tiempo después.

La idea es que un libro no alente tus propósitos lectores o que retrase la construcción de este hábito. Recuerda que mientras que aquella obra no te gustó, puede ser que lo siguiente que leas pueda ser una experiencia transformadora que te brinde tranquilidad, enseñe algo nuevo o simplemente disfrutes.

“Entre tantas distracciones y exigencias en nuestra vida diaria, leer ya es lo suficientemente difícil. El libro que leer no debería hacer ese esfuerzo más difícil”.

 Ginni Chen.

 …¿Y si continúo?

Puede ser que seas una persona que realmente disfruta de los retos, aunque te sea difícil seguir adelante con una lectura que te disguste, existen beneficios al continuar sin que sientas que todo está perdido.

Estarás abriendo tu panorama lector hacia nuevas maneras de escribir e historias a las que no estás acostumbrado. Incluso, te estás regalando la oportunidad de explorar nuevos géneros a los que, probablemente, encuentres obras de ese estilo que sí sean de tu agrado.

La paciencia apremia. Estarás entrenando tu resiliencia para leer obras que no sean de tu agrado y, aun así, comprenderlas o facilitar la resistencia hacia lecturas que te parezcan tediosas o aburridas, por ejemplo, algún ensayo larguísimo y aburrido o una investigación científica difícil de comprender para tu trabajo. También, es posible que aquello que leas no  te guste al inicio, pero al seguir progresando puede que te topes con tan solo un capítulo tan interesante que haya hecho que toda la experiencia haya valido la pena.

De igual manera, si esta actividad ya se ha convertido en un hábito en tu vida diaria, con el paso del tiempo será más sencillo pasar las partes aburridas, ya que tu tolerancia y velocidad al leer incrementará.

Al leer obras que no son de tu agrado, no solo aprenderás sobre nuevos géneros, maneras de escribir y autores. También te darás la oportunidad de hacer un análisis más profundo para conocerte a ti mismo con respecto a la manera en que criticas a un libro de acuerdo a la forma en que escribe el autor, sus valores y perspectivas. Al estar en desacuerdo, podrás comparar tus ideales con aquellos plasmados en la obra y entender el porqué estás en desacuerdo con el escritor.

Leer es beneficioso para todas las personas

A pesar de ambas decisiones, de las cuales no hay buena ni mala, lo más importante es continuar leyendo y recordar que aunque decidiste continuar o dejar un libro por otro, esta actividad trae consigo muchos beneficios. Algunos de ellos son:

  • Ampliación del vocabulario y mejora de la ortografía: Con la lectura se está más expuesto a nuevas palabras y por ende, tiene un impacto positivo en el vocabulario, ortografía y redacción de las personas.
  • Incrementa la concentración y habilidad para enfocarse: Al estar acostumbrados a los videos cortos e información rápida, leer hará que practiques tu concentración, en donde podrás permanecer enfocado por cada vez más tiempo.
  • Mejora el sueño: Leer en sí es una actividad relajante, y estudios revelan que integrarla en tu rutina antes de dormir ayudará a mejorar la calidad de sueño.
  • Promueven la empatía: Conocer nuevos mundos, personajes e ideales hace que las personas comprendan las situaciones planteadas en una obra literaria.
  • Impulsa y mantiene el funcionamiento cognitivo: Al tener que recordar detalles y situaciones del libro e imaginar escenarios, estarás ejercitando tu cerebro constantemente.

¿Ninguna de las dos opciones te convence? La escritora Nancy Pearl recomienda aplicar lo que ella ha denominado la regla de los 50: leer cincuenta páginas de un libro y al llegar a este número, preguntarte a ti mismo si te interesa realmente lo que está ocurriendo con la historia, algún personaje, te agrada la manera de escribir del autor, etc. Si las respuestas ante estas preguntas son negativas, déjalo y comienza una nueva lectura.

No hay malas ni buenas respuestas, es el lector quien debe tomar la decisión final al momento de querer abandonar un libro. Es cuestión de cada persona elegir los beneficios que más se apeguen a su personalidad, y así como la gran diversidad de libros que existen, también existen diversas maneras en que las personas leen.

Cabe mencionar que al leer por tu cuenta te complaces a ti mismo y no a los demás; y mientras que una amiga te recomienda un libro que le guste, lo hará para que pases un buen rato y no lo opuesto, es válido que tengas sentimientos diferentes. Es importante no dejarse llevar por lo que decidan los demás, ¡elige lo que te haga sentir mejor y te ayude a alcanzar tus metas literarias!

Fuente de la información e imagen:  https://observatorio.tec.mx

Comparte este contenido:

Reflexiones en torno al 8M: Día Internacional de la Mujer

Por: Karina Fuerte

«Invertir en las mujeres es un imperativo desde la perspectiva de derechos humanos y la piedra angular para crear sociedades inclusivas. Los avances para las mujeres benefician a todo el mundo».

 

En el mensaje editorial del mes pasado les compartí unos datos que me dejaron helada: «La igualdad de género se está estancando: faltan 131 años para cerrar la brecha». Sigo pensando en ese número: 131. Como el ritmo del cambio se ha ralentizado, se calcula que no será sino hasta el 2154 que las mujeres alcancemos la paridad (si es que esta se alcanza).

Disculpen si sigo un poco pesimista, pero es que a pesar de años y años de lucha, las cifras actuales no son muy alentadoras:

  • Al menos 4.050 mujeres fueron víctimas de femicidio/feminicidio en América Latina y el Caribe (CEPAL, 2023).
  • Entre el 63 % y el 76 % de las mujeres ha experimentado algún episodio de violencia por razón de género en distintos ámbitos de su vida en los países de la región (CEPAL, 2022).
  • El 8 % de la población femenina mundial (+340 millones de niñas y mujeres), vivirán en pobreza extrema en 2030 (Panorama de género 2023).
  • La brecha en el ingreso laboral medio entre mujeres y hombres es de 82,6 % en América Latina (promedio simple) en 2022 (CEPAL, 2023).
  • La principal barrera para la inclusión laboral de las mujeres es la carga de trabajo de cuidados, según datos de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL).
  • Las mujeres dedican 3 veces más tiempo que los hombres al trabajo doméstico y de cuidados no remunerado (CEPAL, 2023).
  • Las mujeres rurales producen más del 45 % de los alimentos en los países en desarrollo, por lo que las sequías, inundaciones y otros fenómenos las afectan de manera considerable (ONU Mujeres, 2022).
  • Los eventos naturales y climáticos extremos cobran proporcionalmente más vidas de mujeres que de hombres.
  • De los 110 líderes mundiales que asistieron a la COP 27 solo 7 eran mujeres (United Nations Climate Change Conference COP 27, 2022).
    Fuente: ONU Mujeres

Estas son solo algunos de los datos y cifras publicados por ONU Mujeres en el marco del Día Internacional de la Mujer (8 de marzo) que este año lleva el lema: «Invertir en las mujeres: Acelerar el progreso”. Y es que ninvertir en las mujeres, no solo en tema de equidad y brecha de género, sino también para erradicar los problemas e injusticias a los que nos enfrentamos, es para beneficio de toda la sociedad, no solo para nosotras las mujeres. «Invertir en las mujeres es un imperativo desde la perspectiva de derechos humanos y la piedra angular para crear sociedades inclusivas. Los avances para las mujeres benefician a todo el mundo», señala un comunicado oficial de ONU Mujeres.

Quienes nos siguen desde hace tiempo saben que en el Observatorio IFE nos preocupan (y nos ocupan) problemáticas mundiales como la desigualdad, la equidad de género, la discriminación y la brecha de género, el cambio climático, la pobreza, los estereotipos, sesgos, la violencia de género, y un largo etcétera. Estos son problemas que tenemos presentes día con día, y que por lo tanto, buscamos darles visibilidad los 365 días del año, en la búsqueda de respuestas, soluciones y con el objetivo de crear consciencia sobre estas grandes problemáticas.

El mes de marzo, por supuesto, no es la excepción. Por eso, esta semana estaremos publicando contenidos relacionados al Día Internacional de la Mujer, con reflexiones muy interesantes de parte de nuestro equipo de redacción y de otras áreas dentro y fuera de la institución. A continuación te comparto algunas de estas publicaciones:

 

Hasta la próxima,

Karina Fuerte
Editora en jefe, Observatorio del Instituto para el Futuro de la Educación

Fuente de la información e imagen: https://observatorio.tec.mx

Este artículo del Observatorio del Instituto para el Futuro de la Educación puede ser compartido bajo los términos de la licencia CC BY-NC-SA 4.0 

Comparte este contenido:

Apps prácticas para personas neurodivergentes

Por: Melissa Guerra Jáuregui

Octubre fue el mes de la concientización sobre el TDAH, por lo que es importante visualizar que existen aplicaciones que pueden apoyar a personas neurodivergentes a desarrollarse plenamente.

Una persona neurotípica o neurodivergente es aquella que tiene un desarrollo neurocognitivo atípico, por tanto, se podría decir que su cerebro funciona de manera diferente para procesos emocionales, de pensamiento, aprendizaje y procesamiento de información. Aunque pueden tener dificultades para realizar ciertas tareas, también es importante mencionar que estos individuos tienen fortalezas únicas, por lo que no deben considerarse como personas enfermas.

Ahora bien, la neurodivergencia abarca un paraguas de condiciones, tales como autismo, TDAH, dislexia, TOC, entre otros. A continuación, presentaremos algunas aplicaciones muy útiles para personas que presenten alguna neurodiversidad.

Todoist

Es una aplicación de organización para gestionar tareas. Todoist tiene una interfaz muy simple y agradable a la vista. Esta herramienta te permite dar orden y prioridad, a la vez que se puede catalogar y subdividir tareas, así como etiquetar personas en actividades.

Lo característico de Todoist es que puedes tener la aplicación en todos tus dispositivos (MacOs, Windows, Linux, Android, iOS, en navegadorescomo Safari, Edge, Chrome y Firefox, en weareables para Apple Watch y Android, así como enel correo, a manera de extensión, para Gmail y Outlook), por lo que la sincronización con tus actividades es más certera y eficaz.

Tiene varias interfaces y opciones de visualización; una de ellas es Hoy, la cual muestra todas aquellas actividades que tienen fecha límite para el día en curso. La interfaz Próximo muestra un tipo calendario con las tareas que se estarán realizando durante la semana.

Por su parte, Filtros y etiquetas muestra si hemos sido etiquetados por alguien más o si tenemos alguna etiqueta o filtro activos. En esta opción se puede emplear la inteligencia artificial (IA) para crear filtros más efectivos.

Todoist utiliza paneles estilo tablero Kanban para hacerlo más interactivo y dinámico, las cuales a su vez se pueden personalizar. Del mismo modo, se puede vincular y sincronizar con el correo y el calendario para tener todo mucho más organizado.

Imagen tomada de Todoist.

Otra característica de esta app es que puedes ver tus tendencias de productividad, historial de actividad y archivos de tareas realizadas. Por último, esta herramienta de gestión tiene integración con AlexaZapier e IFTTT. Es importante resaltar que, aunque las herramientas son muy prácticas en su versión gratuita, la versión de paga ofrece la opción de Recordatorios y Ubicación.

Aplicaciones similares: Tick TickMicrosoft To DoAny.Do y Google Keep.

Focus Keeper

Esta es una aplicación de gestión de actividades que utiliza el método Pomodoro para que se puedan completar exitosamente las tareas. Focus Keeper tiene como objetivo mejorar la productividad mediante la concentración, manteniendo la motivación y evitando el burnout.

Tiene una interfaz muy simple que puede ser personalizada para que se adapte a tu forma de trabajar. Una ventaja de esta app es que se puede usar tanto en teléfonos móviles (iOS Android) como en escritorio.

Imagen tomada de Focus Keeper.

Además, Focus Keeper te permite visualizar tu productividad, a manera de gráficas diarias, semanales y mensuales, con el objetivo de mantener la motivación, así como ajustar/personalizar tus objetivos.

Aplicaciones similares: Engross, Pomodoro Timer, Forest, Pomodoro Timer Pro.

Cboard

Es una aplicación especializada en AAC (advanced audio coding), la cual apoya a infancias y adultos con problemas de audio o lenguaje mediante símbolos y texto a voz. Cboard puede ser descargada para Android, iOS, Windows y Amazon Fire. Funciona con más de 40 idiomas y es de código abierto.

Imagen tomada de Cboard.

Aplicaciones similares: Special words, Choice Works, Avaz AAC, Sono Flex (iOs).

Otsimo

Es una aplicación de juego certificada para personas diagnosticadas con trastornos y discapacidades del aprendizaje, déficit de atención, autismo, síndrome de Down, Asperger, etc. Es importante destacar que se enfoca en infantes.

Cuenta con un catálogo muy completo de actividades que refuerzan y desarrollan habilidades cognitivas, motoras y sociales mediante la gamificación.

Imagen tomada de Otsimo.

Aplicaciones similares: Speech Blubs, ABA Problem Solving.

Natural Reader

Esta aplicación se especializa en codificar texto en audio usando IA. Tiene una gran variedad de idiomas y funciones. Además, su uso puede ser personal o de uso comercial. En Natural Reader puedes agregar archivos (PDF, texto copiado o escrito, imágenes, páginas web) y escucharlos en el idioma meta, lo cual puede ser muy útil para personas con dislexia.

Imagen tomada de Natural Reader.

Esta app cuenta con versiones de escritorio, extensión de Chrome y disponibilidad tanto en iOS como Android. Sus opciones premium y plus permiten escoger voces creadas por IA o voces humanas para su función de texto a voz, así como otras opciones personalizadas como: descargar en formato MP3, escáner de texto, filtrado de texto por IA, entre otras.

A saber, la integración con Chrome (la cual es gratuita) permite escuchar páginas web, Google Docs, libros Kindle (online) y correos electrónicos.

Aplicaciones similares: Speechify, Voice Dream Reader, Proloquo4Text.

GG OCD

Esta app se enfoca en el trastorno obsesivo compulsivo (TOC) y la ansiedad. Su objetivo es aprender a gestionar los pensamientos obsesivos y desecharlos. GG OCD maneja módulos (TOC, sueño, ansiedad, confianza, etc.) para personalizar la experiencia y cuenta con más de 500 retos diarios sobre cada módulo.

Asimismo, GG OCD tiene ejercicios para la relajación, así como para ayudar a lidiar con la salud mental y un mood tracker. Se puede descargar en Android y iOs.

Imagen tomada de GG OCD.

Youper

Es una aplicación que utiliza un chatbot impulsado por IA para tratar la salud mental. Youper se basa en la terapia cognitivo conductual (TCC) para mejorar la salud mental de las personas, brindando asesoramiento personalizado para conocer los síntomas y ajustarse a las necesidades.

La dinámica de Youper se basa en platicar con un chatbot especializado, el cual apoya mediante intervenciones terapéuticas basadas en evidencia. La app tiene diversas funciones, tales como monitoreo de síntomas, asesoramiento, así como información destacada sobre la salud mental, emocional y conductual para generar conciencia y resiliencia.

Youper se encuentra en iOS y Android.

Imagen tomada de Youper.

Clear Fear

Es una app especializada para controlar la ansiedad, la cual emplea un marco de comportamiento cognitivo para lograr los objetivos.

Clear Fear ayuda a monitorear los niveles de ansiedad y cuenta con ejercicios integrados de mindfulness. La única desventaja es que aún no soporta multi idiomas, por lo que solo se encuentra en inglés.

Imagen tomada de Clear Fear.

Aplicaciones similares: NOCD, Daylio, Sanvello, Calm, 7mind.

En la actualidad, las aplicaciones, sobre todo las móviles, ya no tienen un enfoque meramente de ocio, ya que gracias a los avances de los desarrolladores se pueden encontrar diversas herramientas para apoyar las necesidades específicas de cada persona.

Es necesario resaltar que cada persona es única, por tanto, algunas aplicaciones pueden funcionar mejor que otras en función del grado de personalización o preferencias de una persona. No obstante, sí pueden formar parte de la red de apoyo según sea el caso.

Fuente de la información e imagen:  https://observatorio.tec.mx

Comparte este contenido:

Falso o verdadero: La alfabetización mediática

Por: Mariana Sofía Jiménez Nájera

La alfabetización mediática es una herramienta esencial para navegar de manera segura por el Internet y evitar la desinformación.

La manera en la que consumimos noticias ha cambiado drásticamente con el paso de los años, los periódicos se han convertido en aplicaciones en nuestros celulares e incluso algunos conductores de noticieros han optado por crear sus propios canales de YouTube. Sin embargo, estos no son los únicos medios para mantenerse informados: para muchas personas, las redes sociales también son una valiosa fuente de información para mantenerse al tanto de los acontecimientos del momento. Internet permite a las personas enterarse de lo que está pasando en cualquier parte del mundo en tiempo real, y la propagación de la información es más rápida que nunca. No obstante, esto es un arma de doble filo, ya que mientras que tener toda esta información al alcance de tu bolsillo es maravilloso, puede ser contraproducente por la gran cantidad de comunicados falsos que cualquier persona puede publicar; convirtiendo a la alfabetización mediática en una herramienta primordial para navegar el Internet de manera segura.

Las noticias falsas o fake news

El concepto de fake news fue muy sonado debido a su constante uso por Donald Trump durante la campaña de las elecciones presidenciales de Estados Unidos, por lo que se hizo viral. No obstante, este concepto existe mucho tiempo antes de que este fuera tan popularizado. El diccionario de inglés Oxford lo define como “noticias que transmiten o incorporan información falsa, fabricada, deliberadamente engañosa o caracterizadas como tal o acusadas de serlo”. Hoy en día, el Internet ha sido susceptible a este tipo de noticias debido a la voz que este medio le da a cualquier persona para comentar y crear contenido.

Desafortunadamente, mientras que existen fake news que pueden parecer inofensivas e insignificantes para algunos tales como la ruptura entre dos celebridades o el avistamiento de aliens en zonas rurales, reportes indican que también existe información falsa esparcida a través de redes sociales de carácter sensible, tales como la desaparición de personas o mascotas que en realidad no están desaparecidas, asesinos en serie sueltos o la propagación de enfermedades letales que no existen. Esto es sumamente grave para personas que genuinamente buscan a sus seres queridos, dado que, debido a la saturación de comunicados, lo legítimo se pierde entre tantas publicaciones similares, las personas se desensibilizan e incluso los anuncios reales llegan a ser ignorados. De igual manera, mucha de esta desinformación sirve meramente para asustar e incitar el miedo y el pánico en los usuarios.

Un ejemplo muy claro fue durante la pandemia global de COVID-19. Al ser un evento de importancia mundial, el celular se volvió clave para estar enterado de la información al momento con respecto a los nuevos descubrimientos de este virus. Miles de noticias engañosas circularon a través de todas las redes sociales, desde recomendaciones sobre cómo cuidarse a través de la ingestión de desinfectante hasta que los termómetros infrarrojos causaban cáncer, e incluso desmintiendo la existencia del virus. Este tipo de información fue compartida sin parar; lo cual tuvo consecuencias graves y letales para algunas personas.

Igualmente, mientras que las inteligencias artificiales han llegado para quedarse y son benéficas para áreas como la educación, manufactura, medicina, etc., muchas personas han comenzado a utilizarlas para crear imágenes y videos falsos que se ven tan reales que es difícil comprobar su veracidad a simple vista. Hace unos meses se hizo viral una fotografía del Papa Francisco utilizando una chamarra de marca, la cual recibió miles de likes y comentarios, e incluso personas que pensaban que era real. Aunque esto puede parecer tan solo una broma inocente, representa un peligro para las personas, ya que también pudieran utilizarse para reafirmar la confiabilidad de los fake news en temas más delicados como salud pública o seguridad.

Por lo que la información que encontramos en Internet no solo se reduce a textos o fotos ya editadas con Photoshop, sino también pueden ser imágenes y videos generados desde cero; lo cual, desafortunadamente, las complementa y beneficia para que las personas crean que este tipo de noticias sean verídicas.

Entonces, ¿por qué hay personas que difunden noticias falsas? La respuesta recae sobre los creadores de dichas publicaciones. Al contener temas sumamente alarmistas, este contenido suelen tener un alcance mucho más amplio y rápido, generando un gran número de seguidores, likes, comentarios, etc.; los cuales además de crear atención hacia ellos mismos, en ocasiones también pueden ganar dinero debido a los clics de las personas que ingresen a los enlaces proporcionados, los cuales pueden estar llenos de anuncios. Asimismo, estos también crean confusión, incentivan conflictos sociales, e incluso llegan a influenciar en la forma de pensar de las personas con respecto a temas sociales, políticos, ecológicos, entre otros.

Si bien cualquier persona puede ser víctima de este tipo de engaños, los adultos mayores pueden ser un grupo vulnerable puesto que gran parte carece de las habilidades digitales que tienen las generaciones más nuevas, por lo que les es difícil distinguir lo verdadero y lo real. Sin dejar de lado que cualquier persona puede caer en engaños al no verificar sus fuentes, confiar en sitios de dudosa procedencia, etc. A pesar de ello, no todo está perdido y todos podemos desarrollar habilidades de alfabetización mediática para combatir la desinformación.

La alfabetización mediática

La UNESCO define a la alfabetización mediática como “el conjunto de competencias interrelacionadas que ayudan a las personas a maximizar ventajas y minimizar daños en las áreas informáticas, digitales e información. […] cubre competencias que permitan a las personas interactuar de manera crítica y efectiva con información, otras formas de contenido, las instituciones que la facilitan y el uso reflexivo de las tecnologías digitales”.

Siendo el mundo actual tan errático y complicado, la alfabetización mediática es una habilidad necesaria para todas las personas, la cual permite que usen su pensamiento crítico para evaluar la información y que puedan compartirla responsablemente, manteniendo una postura neutra para evitar ser manipuladas.

Es por esto que la impartición de clases sobre alfabetización mediática es tan relevante, y aunque por el momento no es una materia o tema que se da en muchas escuelas, maestros se han encargado de darle la debida atención a este tema, puesto que es una valiosa herramienta para el día a día en el mundo digital.

NAMLE (por sus siglas en inglés National Association for Media Literacy Education) es una organización que desde 1997 se ha dedicado a impulsar la alfabetización mediática en Estados Unidos, la cual propone cinco componentes básicos para interactuar con las noticias:

  • Acceder: Se refiere a la frecuencia, tiempo, manera y lugar en el que las personas acceden a Internet.  Es decir, la forma en que las personas navegan por la red para encontrar información, las restricciones que puedan tener en sus países en cuanto a qué información puedan recibir, así como el conocimiento que tengan con respecto a la alfabetización mediática, entre otros.
  • Analizar: El proceso de preguntar al momento de consumir noticias para cuestionar su veracidad. Algunas de ellas pueden ser:
    • ¿Cuándo y dónde se subió esta información?
    • ¿Quién es el autor y cuál es su credibilidad en los medios?
    • ¿Cuál es el objetivo del autor?
    • ¿Cuáles son las fuentes en las que está basada la información?
    • ¿Hay evidencia de esta información en otros sitios confiables?
    • ¿Qué técnicas utiliza esta nota para atraer atención?
    • ¿Cuál es el lenguaje del contenido?
  • Evaluar: Aquí nuestros juicios y maneras de pensar se involucran con los datos encontrados, esto después de llevar a cabo los dos pasos anteriores. Esto implica las vivencias, valores e interpretaciones del mundo de cada persona. Después de reflexionar sobre estos datos, se interpretan los mensajes a través de preguntas como las siguientes:
    • ¿Qué tan creíble es este mensaje?
    • ¿Es una opinión o un hecho?
    • ¿Cómo impacta mis emociones?
    • ¿Es propaganda o busca cambiar mi manera de pensar?
    • ¿Se puede confiar en esta fuente?

Al momento de evaluar también se busca identificar el subtexto o mensajes más sutiles que puede tener la información encontrada. Además de comprender las conexiones que los medios tienen con las diferentes ideologías que existen.

  • Crear: La forma de expresión para comunicarse a través de los medios y las herramientas digitales a nuestro alcance para crear nuevas narrativas a través de videos, textos, podcasts, compartir publicaciones, comunicarse con otros, etc. No solamente aplica para la creación de contenido, sino nuestra interacción con los medios a nuestro alcance y qué hacemos con la información:
    • ¿Mi mensaje es un hecho o una opinión?
    • ¿Quién se beneficiará o dañará con este mensaje?
    • ¿Cuáles son mis fuentes de información?
    • ¿Cómo quiero que las personas reaccionen y/o actúen con mi mensaje?
    • ¿De qué otras maneras se podría interpretar mi mensaje? 
  • Actuar: Aquí el proceso culmina, y donde se tiene una interacción previamente reflexionada responsable con la información recibida. De esta manera, también es importante incentivar la alfabetización mediática en los demás y disminuir la desinformación.

Del mismo modo, NAMLE proporciona una hoja de ejercicios para utilizar en clase, la cual puede ser de gran conveniencia para examinar noticias con los alumnos a mayor profundidad y poner a prueba sus habilidades de alfabetización mediática.

Otros tips para confirmar la veracidad de noticias

  • Comprobar la veracidad del sitio: es mejor obtener datos de instituciones confiables en vez de blogs o páginas en redes sociales. Las fuentes confiables tienen por lo general terminación en sus enlaces: .gov (gobierno), .org (organización sin fines de lucro), .edu (educación), entre otros.
  • Si la noticia no aparece en más de un sitio o dos, lo más probable es que no sea auténtica. Revisa fuentes confiables para comprobar si es real o no.
  • Checar la manera en que está escrita la nota: si cuenta con muchas letras mayúsculas o si el sitio a donde te lleva la noticia tiene muchos anuncios o pop ups, hay probabilidad de que sea falsa. Al igual que utilizar títulos e imágenes que propicien el clickbait de manera exagerada.
  • Revisar si las fotografías utilizadas parecen cuestionables, debemos recordar que hoy en día las imágenes generadas por IA son cada vez más comunes. Si las ves detenidamente, muchas veces puedes notar inconsistencias en la edición o puedes verificar usando Google; donde puedes arrastrar la foto en cuestión en el buscador e identificar en qué otros contextos se ha utilizado.

La alfabetización mediática es necesaria para lidiar con nuestro a día a día, y es esencial que sea aprendida desde temprana edad debido a la facilidad de la propagación de fake news que existen; en especial ahora que el Internet es vital durante todas las etapas por las que pasamos las personas, por lo que evitarlo es imposible.

Sin duda alguna vivimos en una época que nos reta intelectualmente, la saturación de noticias puede afectar nuestra salud mental a través de datos falsos, el pesimismo, e incluso estafas. Es nuestra responsabilidad con nuestra comunidad cuestionar lo que consumimos en Internet y verificar las fuentes de la que nos informamos para evitar caer en la desinformación; además de crear contenido de calidad que beneficie más de lo que dañe a los demás.

Fuente de la información e imagen:  https://observatorio.tec.mx

Comparte este contenido:

Del leviatán y el naufragio COVID-19

Por: Stefany Ocampo Hernández

“Estrategia de apoyo al profesorado durante la pandemia que debe persistir para mejorar la educación y el aprendizaje en línea. Esto no acabó con la pandemia, al contrario, debe mejorarse y evolucionar para adaptarse a las nuevas necesidades educativas”.

Tal y como el leviatán genera caos y desesperación en lo profundo del océano atemorizando a los marineros, este sentimiento puede ser comparado y trasladado a la incertidumbre que generó la pandemia por COVID-19 en el personal docente universitario. Nos sentimos acorralados a la vez que el deber nos exigía el cómo resolver el daño generado del barco fuertemente golpeado y engullido por este monstruo devorador; la emergencia nos exigía trasladar nuestras prácticas educativas de la presencia física a la completa virtualidad a pie de página. ¡Todo a babor! Esa fue la apuesta en un intento por mantener a flote el gran Barco Educativo con los ya destrozos generados por la serpiente marina y así fue como nosotros, los valientes docentes nos tiramos al agua.

«Antídotos contra la magistralidad, es una estrategia gestada en una incubadora de innovación pedagógica a partir de la creación de una pócima para acortar las “distancias cognitivas, físicas y emocionales».

Dime qué quilla anda y te diré cómo navega

Leviatán del hebreo “enrollado” muestra a una criatura mitológica que en su fuerza asesta y evidencia dos golpes claves que dan probablemente paso al naufragio COVID-19: 1) la falta de conectividad motivo de las consecuencias de la injusticia social y, por otra, 2) una quilla que no logra sostener el esqueleto de ese barco que no estaba preparado para ser forzado a las aguas virtuales. El famoso refrán habla por sí solo, el problema no fue el monstruo, fue la quilla. Sin ton ni son, se opta como medida de contención las sesiones virtuales en variedad de plataformas. Los docentes despliegan su didáctica y los aprendientes, intentan solucionar cómo tener una computadora con conexión (en el mejor de los casos) mientras prestan atención, todo al mismo tiempo.

La científica Nazareth Castellanos, menciona que la atención plena se controla en la corteza prefrontal y que la interpretación interna que cada uno hace de la realidad se basa en la relación constante entre cerebro y organismo. Ante esto, los neurocientíficos denuncian que se debe acabar con la dicotomía entre mente y cuerpo, ya que las sensaciones del cuerpo son memorizadas y tenidas en cuenta por el cerebro para tomar decisiones… Imaginemos este escenario: un aula de cuatro paredes y una presentación de 40 diapositivas; estudiantes que en apariencia escuchan; ahora saltemos a la virtualidad con el único cambio del uso de una plataforma que permite la conexión virtual sincrónica. ¡EUREKA!

Fuimos ingenuos al creer que la serpiente daba tregua ante la calma y silencio de una pantalla negra, sin respuestas, ni emociones. ¿Por qué continuamos subestimando el cuerpo y sus emociones? Si se reconoce que el cuerpo es el lugar donde está enmarcada la experiencia (Castellanos, 2022). El leviatán espanta sí, pero ni la serpiente marina ni el virus crearon el naufragio, lo cierto es que ese barco ya estaba hundido antes de zarpar. Anclados a un paradigma reduccionista lo más obvio era apostar a la estrategia de la exposición magistral, pero eso no es suficiente para alzar el barco educativo y evitar que se siga hundiendo ante los desafíos del siglo XXI.

Acompañando a los valientes marineros

Se propone un traslado de la visión de la enseñanza hacia el aprendizaje, del uso poderoso y potenciador de las herramientas digitales. Lo anterior, requiere un acompañamiento personalizado al profesorado, un estar en compañía ante la desazón y no presencia en la virtualidad. Hay conexión, pero no hay personas conectadas, gran diferencia.

Se comparte aquí una experiencia para acompañar al personal docente titulada: “Antídotos contra la magistralidad”, gestada en una incubadora de innovación pedagógica, un Laboratorio de aprendizaje. Ahora bien, la propuesta incluye actividades como la simulación, escucha activa de la explicación acerca del uso de la herramienta para la mediación pedagógica, y finalmente, construcción de un recurso pedagógico para las sesiones de clase. Nace de la intención de mostrar una estrategia alternativa a las clases centradas en la magistralidad para acortar “distancias cognitivas, físicas y emocionales” (Badilla, 2016). La ruta de aprendizaje (Imagen 1), señala los diferentes momentos de la experiencia, de esta manera el profesorado trae como parte de sus recursos una presentación (formato PDF o PowerPoint) para transformarla en un antídoto que integre actividades evaluativas interactivas a través del uso de la herramienta Nearpod. Concretamente, se muestra cómo agregar contenido: diapositiva clásica, video interactivo y las actividades de tablero colaborativo y encuesta.

La consigna final consiste en crear una pócima de manera simultánea con los facilitadores, como parte del reto y presentarla a los demás colegas. Asimismo, durante el acompañamiento, se insta a los docentes a mantener sus cámaras encendidas, esto porque al tener la cara y manos, más recursos neuronales que otras zonas, es trascendental vernos, sonreír. (Castellanos, 2022). Aunado a lo anterior, se favorece un ambiente de aprendizaje de confianza, apertura y un uso interactivo de otras herramientas digitales (Google Forms y Geniall.ly), las cuáles permiten al equipo encargado (gestores pedagógicos) llevar el “pulso” y captar constantemente la atención de los docentes quienes se asumen en el rol de aprendientes.

Imagen 1. Ruta de aprendizaje que muestra los diversos momentos del taller, dicha secuencia didáctica va guiando a cada docente hasta crear su propia pócima. (Creación propia, 2023).

En la socialización de sus antídotos se recalca la necesidad de:

  • Realizar actividades de comprobación de lo explicado en clases. Las personas tendemos a olvidar un 40 % de la información por lo que crear actividades que resulten emocionalmente agradables, será resaltado por el cerebro, mientras que lo aburrido llevará cuesta arriba el aprendizaje (Castellanos, 2022).
  • Promover pausas intencionadas que generen reflexión, asimilación y conexión de ideas. Hacer pausas entre lo explicado y las expectativas de aprendizaje son necesarias ya que el cerebro no es un sistema inmediato, las transiciones son muy importantes. Para Zinn (2009), la atención plena es consciencia y atención, cultivarla implica conectar con el mundo que nos rodea, con nosotros y con el otro.

Esta estrategia sirvió como apoyo docente durante la pandemia, sin embargo, debe persistir para mejorar la educación y el aprendizaje en línea, esto no acabó con la pandemia, al contrario, se debe mejorar cada vez más.

Si educar es seducir con lo valioso (Rojas, 2016), se espera que este insumo y la figura del Leviatán sean de inspiración; así como nuestra experiencia didáctica planteada en este artículo conlleve a la reflexión. Es importante aclarar que, aunque fue una experiencia que apoyó la labor del profesorado durante la pandemia, está en mejora continua, debe seguirse evaluando con el fin de adaptarse a las necesidades de los aprendientes y al acompañamiento que brindan los docentes. Las universidades continuamos enfrentando desafíos ante los rezagos de la pandemia, así como el legado de un paradigma tradicional insuficiente para atender los desafíos del siglo XXI. Sin embargo, son el miedo, la incertidumbre, el no acceso a la conexión (traducido a una injusticia social), la desinformación, el poco acompañamiento al rol docente y a los estudiantes, quienes continúan acechando y acentuando una de las crisis más grandes del sistema educativo. Al fin y al cabo, el Leviatán es un mito, pero sin una quilla que ciña la fuerza de las velas seguiremos navegando sin ningún puerto definido.

Pero… ¿Quién es la criatura que ronda los mares y está atemorizando a la educación actualmente?

Hace poco se compartió en las noticias el caso de un docente de una universidad pública quién reprobó a 18 estudiantes por usar Inteligencia Artificial (IA) para responder un examen. Ante esto, se lanzó una bandera blanca que invita a un diálogo crítico y sostenido que corte con la visión de islas académicas con que trabajamos las instituciones de educación superior para abrirnos paso a un mar de conocimiento. ¿Cuál es el mundo pospandemia que se está fraguando? ¿Están las universidades reconociendo, reflexionando y validando las nuevas tecnologías de IA para la educación? Se educa para qué: para saber, para hacer, ¿para ser? Y ante esto, ¿Cuáles son los saberes necesarios para responder a los desafíos del siglo XXI? Creíamos que el Leviatán era una pandemia, pero el mundo continúa y sigue anclado a una visión arcaica y tradicionalista desde hace mucho tiempo. Esta nueva criatura que emerge y arremete contra los docentes universitarios y la educación del futuro, parece ser una emoción muy visceral reconocida por todos los seres humanos. ¿Podría el nuevo Leviatán ser las herramientas basadas en inteligencia artificial que cambiarán el paradigma de la educación actual?

“El gran leviatán es la única criatura del mundo que irrevocablemente debe quedar sin ser pintada” – H. Melville.

Acerca de la autora

Stefany Ocampo Hernández (socampo@castrocarazo.ac.cr) es graduada de la carrera de Educación Inicial de la Universidad de Costa Rica, magíster en Pedagogía por la Universidad Nacional de Costa Rica. Desde el 2017 se dedica al acompañamiento a docentes universitarios y a la investigación de herramientas digitales que potencian los aprendizajes, sobre todo los mapas conceptuales como herramienta que permite la representación gráfica del conocimiento a partir del desarrollo de habilidades de pensamiento de orden superior. Actualmente, es estudiante del doctorado en Educación de la Facultad de Filosofía y Letras en la Universidad de Buenos Aires.

Referencias

Badilla Saxe, E. (2016). Educación sin distancia. https://www.castrocarazo.ac.cr/web/vida-universitaria/noticias/educacion-sin-distancia

Castellanos, N. (2022). Neurociencia del cuerpo: como el organismo esculpe el cerebro. Editorial Kairós.

Rojas, E. (2016). Cinco consejos para potenciar la inteligencia. Editorial Planeta.

Zinn, K. (2009). Mindfulness en la vida cotidiana: donde quiera que vayas, ahí estás. Gaia.

Edición


Edición por Rubí Román (rubi.roman@tec.mx) – Editora de los artículos Edu bits y productora de los Webinars del Observatorio- «Aprendizajes que inspiran» – Observatorio del Instituto para el Futuro de la Educación del Tec de Monterrey.

Fuente de la información e imagen:  https://observatorio.tec.

Comparte este contenido:

Soy muy viejo para aprender

Por: Mariana Sofía Jiménez Nájera

El edadismo, además de ser la forma de discriminación más aceptada del mundo, es un grave obstáculo para el aprendizaje continuo de los adultos mayores.

Discriminación por número: el edadismo

Cuando conocemos a alguien por primera vez y por mera curiosidad le preguntamos: “¿de qué edad me veo?”, y si la persona contesta que aparentas una edad más joven, nos sentimos orgullosos de ello; pero si contestan que te ves mayor de lo que realmente eres, podemos sentirnos decepcionados y hasta ofendidos.

Las cremas faciales antiarrugas, espectaculares con la moda de hoy y hasta las películas en cartelera siempre retratan a protagonistas jóvenes; los medios de comunicación promocionan que el ser joven determina el valor de las personas. Desde siempre ha existido el rechazo hacia los adultos mayores, pero ha sido tan normalizado que pasamos por alto el elefante rosa que ocupa la habitación entera: el edadismo.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) define el edadismo como “los estereotipos (cómo pensamos), prejuicios (cómo sentimos) y discriminación (cómo actuamos) hacia otras personas o nosotros mismos basados en la edad”. Mientras que este tipo de discriminación afecta a todas las personas desde la niñez en adelante, este es mucho más notable en el sector de la tercera edad; donde globalmente, 1 de cada 2 personas discrimina a otros basados en la edad. Lo cual resulta irónico, porque nadie se salva del envejecimiento y al final, sería como discriminarse a uno mismo.

Pensémoslo. Cuando vemos a una persona mayor utilizando las redes sociales del momento nos impresionamos, o también cuando les hablamos de manera lenta y pausada desde el primer momento lo consideramos como un estilo de “etiqueta” hacia estas personas. Estos son algunos ejemplos de edadismo que hemos adoptado y estandarizado, pero debemos tener en cuenta que puede tener consecuencias negativas en la salud, bienestar y derechos humanos de la persona; incluso en la percepción de ellos mismos.

A causa de cómo los medios de comunicación han retratado al sector de la tercera edad a lo largo de los años, los estereotipos que los caracterizan se enfocan en el deterioro de su salud mental y física, retratándolos como incompetentes, inútiles, olvidadizos, no atractivos, aislados, etc. Esta mentalidad es muy dañina por lo que se ha demostrado que personas que adoptan esta manera de pensar llegan a morir alrededor de 7.5 años antes de lo que lo harían otras con una perspectiva más positiva hacia el envejecimiento.

No puedes enseñarle trucos nuevos a un perro viejo… ¿o sí?

Siendo la forma de discriminación más aceptada en el mundo (incluso más que el racismo y el sexismo) según la OMS, el edadismo demuestra que bloquea a las personas para seguir desarrollándose en nuevas áreas, o como dice la frase: “no puedes enseñarle nuevos trucos a un perro viejo”. Lo cual está equivocado ya que, sin importar nuestra edad, toda la vida podemos seguir aprendiendo, incluso se ha creado un concepto para eso, el cual es el aprendizaje a lo largo de la vida.

Anteriormente, se pensaba que el cerebro era una estructura rígida al llegar al final de la etapa de desarrollo a los 25 años de edad. Empero, estudios han demostrado que no es así, y que nuestro cerebro en realidad continúa desarrollándose toda la vida. Incluso, a una edad avanzada, el cerebro todavía es capaz de crear nuevas conexiones neuronales para responder a nuestro entorno; sin embargo, para lograrlo debemos continuar aprendiendo continuamente, ya que al no hacerlo el cerebro se encoge y las conexiones comienzan a disiparse.

Debido a lo que nos han adoctrinado sobre la vejez, podemos pensar que es imposible aprender cosas nuevas como resultado del deterioro físico y cognitivo. También, aunque existen padecimientos que deterioran el proceso cognitivo de las personas como el Alzheimer o la demencia, esto no sucede para todas las personas; dejando libre el camino para aprender. Asimismo, existen deficiencias físicas, como por ejemplo, no es lo mismo correr un maratón en tus veintes que a tus cincuentas, eso no impide que puedas realizar este tipo de actividades, solo serán en menor intensidad.

¿Y por qué una persona mayor debería de aprender si ya sabe cómo trabajar o está cómodamente retirado? Fácil, para tener un buen estado emocional y tener una mente y cuerpo sano para esta etapa de la vida. Cabe recalcar que no es suficiente con mantener una mente sana, sino que debemos hacerla crecer. Hemos escuchado que, con el fin de evitar el declive cognitivo, las personas mayores deben activar su mente a través de actividades como crucigramas o manteniendo una dieta saludable, sin embargo, aprender habilidades que hagan crecer el cerebro es mucho más beneficioso que mantenerlo activo. De hecho, estudios comprueban que aprender habilidades del día a día (usar un smartphone, aprender un idioma, pintar, etc.) mejoran los procesos y habilidades cognitivas de adultos mayores.

Otra razón para continuar aprendiendo durante esta etapa de la vida, es para que la persona pueda vivir su independencia. En vista de que todo hoy en día es tan cambiante y dependiente de la tecnología, es necesario actualizarse constantemente en las nuevas tendencias para no incentivar la dependencia funcional en otras personas y poder hacer las cosas uno mismo.

El edadismo en el aprendizaje

No obstante, siendo el prejuicio más aceptado en el planeta, el edadismo presenta diversos obstáculos cuando se trata de aprendizaje. No solamente existe la barrera interna que hace que una persona se menosprecie por su edad, sino que también existen barreras externas.

Se dice comúnmente que los infantes son como esponjas que absorben habilidades y aprendizajes muy rápido, lo cual se debe parcialmente a que los infantes son constantemente animados por sus familiares y maestros en entornos estimulantes donde se le da la máxima prioridad a su desarrollo cognitivo. Por otro lado, para los adultos mayores es todo lo contrario, puesto que ellos por lo general se encuentran en entornos desalentadores para su aprendizaje y el acceso a recursos y maestros es mínimo.

Otro obstáculo que puede ser muy desmoralizante para continuar aprendiendo a edad avanzada, es el trato que en muchas ocasiones se les da a estas personas en el campo laboral. Desafortunadamente, es a ellos a quienes se les dan menos oportunidades para seguir afinando sus habilidades por medio de capacitaciones, ya que hay preferencia por los empleados más jóvenes.

La negatividad que ocasiona el edadismo puede ser extremadamente desmotivante para muchas personas y hacerlas dudar de ellas mismas, creando en los adultos mayores un sentimiento de rechazo hacia el aprendizaje y pensar que “son demasiado viejos para aprender”.

No todo se torna gris

El tiempo es un gran maestro. Es gracias al paso de los años que atravesamos por diferentes etapas de nuestras vidas, las cuales significan nuevas experiencias y enseñanzas que ayudan a que nuestras habilidades incrementen. Algunas de estas son:

  • Vocabulario: Será más extenso y floreado, y mejorarán tus habilidades de comunicación con el tiempo.
  • Razonamiento inductivo: Basándote en la experiencia adquirida, será más sencillo resolver problemas y tomar la mejor decisión más rápido.
  • Matemáticas: Tendrás más tiempo practicando matemáticas que las personas más jóvenes.
  • Optimismo: En general, los adultos mayores tienen una perspectiva más positiva de su entorno, a diferencia de los jóvenes.
  • Satisfacción: Te sentirás más contento con lo que has realizado a lo largo de tu vida, lo cual impulsará que quieras continuar aprendiendo nuevas cosas.

Es importante hacer hincapié en que es gracias a la tecnología que existe hoy en día que el aprendizaje se puede obtener a través de diversos medios como: cursos, MOOCs, audiolibros, etc., lo cual hace que aprender nuevas habilidades sea más accesible a través de una infinidad de plataformas. Asimismo, en los últimos años se han visto esfuerzos de parte de universidades en todo el mundo para integrar programas académicos (y muchos de bajo costo) para adultos de la tercera edad.

Debemos aprender a valorar y apreciar cada etapa de nuestras vidas, incluyendo la vejez. Las personas no tenemos una fecha de caducidad para el aprendizaje, y siempre podremos descubrir un nuevo talento o algo en lo que no sabíamos que teníamos facilidad para hacer. Dejemos que la vida nos sorprenda y evolucionemos constantemente, y como dijo el cantante británico David Bowie: “Envejecer es un proceso extraordinario en el cual te conviertes en la persona que siempre debiste ser”.

Fuente de la información e imagen: https://observatorio.tec.mx

Comparte este contenido:

“Nadie lo ignora todo, nadie lo sabe todo. Por eso aprendemos siempre”

Por: Karina Fuerte

 

El aprendizaje es un proceso que nunca acaba, todas las personas somos aprendices de por vida.

La semana pasada pude finalizar un objetivo que tenía pendiente desde hace mucho tiempo: la publicación del reporte Edu Trends sobre aprendizaje a lo largo de la vida. Inicié el primer borrador del reporte en el 2019, empecé a hacer entrevistas, visité varias universidades (principalmente en España), tuve un sin fín de videollamadas con personas interesantísimas, intercambié información por correo con otras tantas, y leí. Leí mucho. Pero luego llegó el 2020 y con él, la pandemia.

Con la llegada de la pandemia guardamos en una carpeta este reporte para dar prioridad a lo que acontecía en ese momento. Cuando por fin pude retomar el proyecto, habían pasado tantas cosas que no me fue posible simplemente continuar donde me quedé. ¿Cómo retomarlo así nada más, cuando el mundo había cambiado tanto?

Retomar el reporte me costó mucho más trabajo que iniciarlo. Tenía todavía más preguntas que cuando lo empecé a escribir. Pero este proceso de relectura y reescritura, en un mundo pospandemia, me reafirmó la importancia de escribir sobre este tema.

No quiero extenderme mucho más, pues me parece raro escribir sobre algo que yo misma escribí. Si quieren saber más sobre este reporte antes de descargarlo, les recomiendo el artículo que Andrés García Barrios escribió al respecto. Él, mejor que nadie, pudo resumir en un par de cuartillas, de qué va este reporte y su relevancia. Aprovecho para agradecer a Andrés por sus palabras, pero sobre todo, por el acompañamiento durante los últimos meses.

Para quienes quieran echar un vistazo previo a este reporte Edu Trends sobre aprendizaje a lo largo de la vida, a continuación, les comparto el prefacio.


Prefacio

Nadie ignora todo,
nadie sabe todo.
Por eso aprendemos siempre.

Paulo Freire

Inicio este mensaje con palabras del filósofo y educador brasileño Paulo Freire, no solo porque quedan como anillo al dedo al tema que analizaremos en las siguientes páginas, sino para que nos sirvan como humilde recordatorio de que el aprendizaje es un proceso que nunca acaba, que todas las personas somos aprendices de por vida.

El primer esbozo de este reporte nació en 2019, en aquel mundo prepandemia que hoy parece tan lejano, y en el que ignorábamos la crucial experiencia que estábamos por vivir como humanidad. Durante los peores meses de la pandemia de COVID-19 este reporte pasó a modo hibernación, pues había muchas otras prioridades que atender; sin embargo, el tema estuvo siempre rondando en mi cabeza (y creo que nunca saldrá de ella).

Cuando retomé el proyecto y reinicié mis lecturas de investigación, fue agridulce darme cuenta de lo mucho que ignoraba sobre la historia del aprendizaje a lo largo de la vida. Escribir este reporte fue un proceso fascinante e incómodo a la vez, pues advertí que conocía solo una mínima parte de lo que abarca ese concepto, ese nombre de moda que tanto escuchamos últimamente: lifelong learning. Durante este tiempo aprendí mucho y desaprendí todavía más. A cuatro años de aquel primer borrador, les presentamos el resultado de ese proceso intermitente de aprendizaje/desaprendizaje que culmina en este reporte.

El aprendizaje es una necesidad social, nos dice Peter Jarvis; los seres humanos aprendemos a ser y a estar en el mundo. Solo recientemente ―quizás a raíz del alud de información que permite la tecnología― la humanidad empieza a revalorar la sencillez de la vida diaria y de sus lecciones permanentes. Las enseñanzas de la vida, la escuela de la vida, han vuelto a hacer su aparición con gran fuerza. Hoy más que nunca, después de lo vivido desde 2020, necesitamos reaprender todo esto. He ahí la relevancia de la tendencia que esperamos poder reivindicar en el presente reporte. Demostrar que se trata de mucho más que una palabra de moda es el objetivo de las páginas que vienen a continuación.

 

Karina Fuerte
Editora en jefe, Observatorio del Instituto para el Futuro de la Educación

Fuente de la información e imagen:  https://observatorio.tec.mx

Comparte este contenido:
Page 1 of 9
1 2 3 9