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Reforma educativa o tóxico del conocimiento

Por: Darío Balvidares

Si todos los caminos conducen a Roma, entonces destruyamos Roma”

(aforismo implicado)

Alfredo Grande

De lo que vamos a tratar aquí es de la continuidad tóxica de la reforma educativa, de la macropolítica y desposesión de la educación pública, en el marco de las políticas que organizan la acumulación por desposesión. Del flujo permanente hacia la privatización del conocimiento y la estandarización de las subjetividades sociales y colectivas.

Hace varias décadas, por lo menos tres, tomando como referencia la Cumbre de Jomtien, Tailandia 1990, “Educación Para Todos”, en que la avanzada reformista se hace visible con las leyes de educación y sus propuestas transgénicas.

La utilización del término “transgénico” aplicado en una interpretación sobre la reforma educativa está asociado, de manera metafórica (tal vez, no), a los organismos modificados genéticamente, no por su evolución natural, sino por la intervención de las corporaciones extractivistas. Especialmente, por las necesidades de esos “nuevos” productos que requieren la paradójica intervención de venenos para subsistir. Así que toda alusión a los componentes tóxicos del agro-negocio, son directamente aplicables al proceso reformista de la educación.

Todos sabemos para qué se desmontan territorios y la consecuente modificación de su ecosistema; el proceso de sojización creciente, el monocultivo que necesita de los agrotóxicos para vivir. ¡Curioso! El veneno como fuente de vida y devastador al mismo tiempo. La palabra griega φαρμάκων (fármakon) resume que es toda sustancia que altera la naturaleza de un cuerpo, remedio y veneno, lo saludable y lo perjudicial al mismo tiempo.

No se ignora lo que provoca el glifosato (uno de los venenos letales utilizados en las fumigaciones) en la tierra y en sus nutrientes; no se ignoran los efectos en los humanos y los seres vivos en general. En nuestro caso, las pruebas están en los Pueblos Fumigados con el crecimiento en los índices de cáncer y enfermedades respiratorias y en la piel (probados con informes científicos). La reciente mortandad de peces en el río Paraná y afluentes, que los funcionarios gubernamentales adjudicaron al “intenso calor”, pero que no fue la interpretación de los ambientalistas, que adjudican el fenómeno a la cantidad de agrotóxicos que se encuentran en las aguas.

Una prueba de esto es que “un estudio del Conicet publicado en la revista internacional Environmental Pollution reveló que el peligroso herbicida glifosato se acumula en los campos argentinos, sobre todo en Entre Ríos y más precisamente en Urdinarrain (…) El equipo de científicos también ubicó rastros del herbicida en aguas de superficie… 1 El resultado es que esa localidad entrerriana está entre las primeras más contaminadas del mundo.

Similares efectos provoca la mega-minería; de hecho en el marco de las protestas se realizó una extensa marcha en bicicleta, con el lema “Jáchal No Se Toca”, desde la provincia de San Juan (“provincia minera”) hasta la Ciudad de Buenos Aires, para culminar en el Congreso de la Nación el 27 de febrero. A propósito de los reclamos de los habitantes de la ciudad de Jáchal por la contaminación de sus ríos producto de las actividades y derrames de cianuro provocados por la empresa Barrick Gold y por sobre todo en defensa de los glaciares, para que la actual ley, poco respetada por las mineras, no sea, además, modificada con un proyecto del gobierno para ampliar, aún más, los beneficios a esas corporaciones de manera que además del pasivo ambiental que provocan sus actividades, también intervengan en los glaciares, reservorios del agua pura del planeta.

En este sentido, los procesos de acumulación capitalista a gran escala no sólo aseguran mayor concentración de la riqueza, sino que, además, funcionan como un eficaz instrumento de dominación y desposesión territorial.

Las continuas represiones a toda forma de protesta y la etiqueta del enemigo interno adjudicado al pueblo mapuche2, son la exposición del paradigma político en el que también ingresa la reforma educativa.

Los despidos masivos en el Instituto Nacional de Tecnología Industrial (INTI); en los Yacimientos Carboníferos de Río Turbio (YCRT); en el Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (CONICET); en ministerios y distintas dependencias gubernamentales; en el Hospital Posadas.

La reforma del cálculo en los haberes de los jubilados, que les quita 100 mil millones de pesos y que pone las históricas y paupérrimas jubilaciones, que percibe la mayoría, en peores condiciones; los aumentos obscenos de las tarifas en favor de las corporaciones que obtienen millonarias ganancias por servicios que deberían ser públicos y no privatizados: luz, gas y agua.

El aumento de los medicamentos y los combustibles en manos de las corporaciones, que tienen sus CEO en el gobierno.

A todo esto y mucho más (que por economía del artículo es necesario que los lectores completen con lo que seguramente ha quedado implícito, no omitido en esta breve descripción de la coyuntura), sumemos la decisión del cierre de escuelas en la provincia de Buenos Aires; la decisión de cierres de los Institutos de Formación Docente (IFD) son más que marcas de las políticas de desposesión. En este sentido cabe recordar que la política de “desaparición” de las paritarias nacionales está en el proyecto de Ley, llamado “Plan Maestro” (2017)

El último acuerdo marco nacional, se acordó que el salario mínimo de un docente será siempre un 20% mayor al salario mínimo, vital y móvil definido anualmente por el consejo del salario y la Nación garantizará esto, con fondos del nuevo Fondo Compensador. Por otra parte, el Ministerio del Interior negoció con las provincias beneficiarias del antiguo Fondo Compensador la disminución gradual de los fondos girados por este concepto según la siguiente escala: 2016 mismo monto que en 2015; 2017 = 75% de este monto; 2018 = 50%; 2019 = 25% de este monto y en 2020 desaparece este concepto” Plan Maestro (pág. 30)

El decreto del ejecutivo 52 / 2018 lo que hace es adelantar, en época de (des) negociaciones paritarias, lo que ya estaba escrito en el proyecto de ley que el ejecutivo envió al congreso para su discusión este año, para legalizar el final de las paritarias nacionales, aunque sin legitimidad puesto que no había necesidad, ni urgencia de adelantar compulsivamente lo que está en un proyecto para debatir en el parlamento, salvo en la “necesidad” y la “urgencia” de los mandatos estandarizados que suscriben.3

Pero… mientras vastos sectores sufren la desposesión…

Por el contrario, la avanzada de las universidades privadas, fundaciones y ong corporativas aparecen como la contraparte emergente de las políticas que ellas mismas diseñan, bajo el influjo de instituciones transnacionales como el Banco Mundial, la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), el propio FMI, el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y las corporaciones empresariales que formulan sus mandatos y el gobierno ejecuta como parte de la trama.

Lo que “informa” (recomienda–afirma-impone) el Banco Mundial4

Uno de los últimos informes del BM, inscribe, literalmente, las políticas que se llevan a cabo en la reforma. La constante del documento es, luego de señalar las diferencias en los desarrollos de “aprendizaje” entre “países pobres” y “países ricos” y de aclarar que: “El equipo se basó en el análisis, investigaciones y revisiones bibliográficas de investigadores y especialistas de todo el mundo” (pág.10); con lo que nos encontramos es con más de lo mismo: “la crisis educativa”, “la ‘mala’ formación de los docentes”, etc. etc.

En las siguientes citas no seguimos el desarrollo lineal del documento, puesto que intentamos rastrear las definiciones ideológicas del Banco que aparecen diseminadas en todo el libelo que no hace más que reorganizar sus posiciones respecto de lo que viene expresando desde los comienzos de la reforma mercantilista de la educación.

El objetivo internacional es generar desprestigio en los docentes como causa de lo que llaman “crisis educativa” al mismo tiempo que los ponen como pieza fundamental del sistema y del cambio ¡fármacon!, es decir que aquellos que se adapten al proceso de desposesión serán considerados “saludables” y los que no, “perjudiciales”. Por supuesto que esto lo venimos escuchando de nuestros funcionarios vernáculos, en este proceso de reorganización escolar.

El Banco Mundial en lo que pretende ser un documento actual, actualiza lo mismo que hace 30 años ya expresaba: “…En el aula, los docentes no están lo suficientemente capacitados para evaluar el aprendizaje de manera eficaz, sobre todo cuando las evaluaciones se enfocan en destrezas más complejas (…) No hay una manera eficaz de integrar los resultados de la evaluación formativa que los docentes realizan en el aula con este tipo de información confiable sobre todo el sistema…” (pág. 30)

Con “información confiable” remite a la recogida en las pruebas estandarizadas, para asegurar el negocio de la estandarización y la reingeniería de las subjetividades individuales, primero; sociales después. Como se verá más adelante (o atrás en el libelo).

La segunda parte de la cita refuerza la poca credibilidad de la “evaluación formativa docente”: “No hay una manera eficaz de integrar los resultadosde la evaluación formativa que los docentes realizan en el aula con este tipo de información confiable sobre todo el sistema…” (pág. 30)

Parece ser que lo que los docentes hacen en el aula no es confiable, puesto que la única información confiable es la estandarizada (que los docentes no construyen, ni diseñan); sin embargo la evaluación de los docentes es formativa, tal vez porque se funda en saberes y no en competencias, como la “información confiable”.

“…las evaluaciones nacionales pueden ayudar a controlar la calidad de las evaluaciones subnacionales poniendo de relieve los casos en que las tendencias o los niveles de los logros de los estudiantes difieren de un tipo de evaluación a otro”. (pág.30)

El control es la categoría utilizada en la reforma, nunca se habla de, por ejemplo, mirada pedagógica. Puesto que la calidad, sólo es la calidad de los resultados estandarizados.

¿Por qué? Porque la única mirada es la de la pedagogía instrumental, la de rendición de cuentas y los resultados.

Las evaluaciones internacionales también suministran información que ayuda a mejorar los sistemas. Las evaluaciones internacionales (como las del PISA, el TIMSS y el PIRLS) y las regionales (como las del PASEC en África occidental y central, y la del Laboratorio Latinoamericano de Evaluación de la Calidad de la Educación [LLECE]) brindan una perspectiva adicional sobre el nivel de aprendizaje de los estudiantes. (…) Además, pueden ser herramientas poderosas desde el punto de vista político: dado que a los dirigentes de los distintos países les preocupan la productividad y la competitividad a nivel nacional, las comparaciones internacionales pueden generar conciencia sobre el nivel de retraso que experimenta un país con respecto a otros en la promoción del capital humano.”(pág. 30)

¿Acaso, es el neo darwinismo social el que genera la era de la posverdad, o al revés?

Una interesante reflexión, tomada de un dicho popular, que aparece en el documento mundial dice: “… ‘sólo se puede gestionar lo que se puede medir’ y ‘no se engorda a un cerdo pesándolo más veces’, encierran algo de verdad” (pág.28)

Por supuesto que en el apartado documental, el “dicho popular” lo relaciona con otro remanido concepto reformista que es la “rendición de cuentas”, que en el tóxico campo semántico de los reformadores se asocia a vigilancia. Pero, claro que no están hablando de vigilancia epistemológica, sino de “vigilar y castigar” en el sentido más foucaultiano de la significación. Porque el proceso de reforma ha descalificado el “saber” y lo ha sustituido por las “competencias” y ha anulado los tiempos pedagógicos y los ha transformado en una carrera estandarizada hacia su objetivo común, la “rendición de cuentas”.

Todo el reformismo educativo, pletórico de estándares y resultados, es un proceso de toxicidad permanente, en el que el eslogan (“el sistema educativo no sirve más”, afirmó el entonces ministro de educación – hoy senador por la provincia de Buenos Aires – Esteban Bulrrich y reafirmó la gobernadora, María Eugenia Vidal) y el campo semántico de la crisis, los maestros mal formados, las escuelas del siglo XIX, la necesidad de conocimientos socialmente productivos y las bondades de la competencia entre escuelas y docentes han manipulado hasta el hartazgo a la población y vulnerado la subjetividad social para producir el desplazamiento continuo hacia el mercado privado de la educación, incluso la propia gobernadora de la provincia de Buenos Aires lo reivindica utilizando esas operaciones lingüísticas en su discurso de apertura de sesiones de la legislatura bonaerense.

Pero, volvamos al documento para verificar la neoliberal concepción bancaria (mundial) de la educación: “La educación debe equipar a los estudiantes con las competencias que necesitan para llevar una vida saludable, productiva y significativa. (…)Tienen que saber hacer cuentas, de modo de poder comprar y vender productos en los mercados, elaborar presupuestos familiares, interpretar convenios de préstamo o escribir códigos de ingeniería de software. (…) Y necesitan las competencias socioemocionales (como la perseverancia…) el aprendizaje que se supone debería garantizar la escuela (ya sea que esas expectativas se basen en los programas académicos formales, en las necesidades de los empleadores o simplemente en el sentido común) a menudo no ocurre”. (Pág. 16).

Al parecer esta cita resume todo el pensamiento reformista; lo que debe ocurrir, no ocurre.

¿Entonces los docentes no están capacitados para formar a sus alumnos en matemática aplicada para que aprendan a comprar y vender productos en los mercados? Lo que desde el punto de vista del Banco sería enseñarles a llevar una vida saludable.

¿Tampoco tienen las competencias necesarias para que sus estudiantes sean capaces de interpretar convenios de préstamo o escribir códigos de ingeniería de software o para adiestrarlos en la perseverancia de adaptarse a las necesidades de los empleadores?

¿Cuál es el rol de la nueva educación bancaria?

Equipar a los estudiantes con competencias

Ya no se trata de saber, no se trata de formar en conocimientos, entonces, de qué aprendizaje se trata.

Se trata de adiestramiento, de “aprender” una secuencia de “instrucciones” para estar disponible para el mercado, para lo que los “empleadores necesitan”, mano de obra adaptable y flexible, incluso capaz de “escribir códigos de ingeniería en software”, pero no de pensarlos.

Tal vez, la nueva concepción bancaria de la educación sirva para diseñar los “escribientes” del siglo XXI, incluso capaces de diseñar una ojiva nuclear o un motor de licuadora, pero incapaces de saber los alcances de cada diseño, puesto que la nueva concepción bancaria anula el desarrollo del pensamiento crítico.

Y como no lo va a anular, si no hay contenidos, si lo que nos proponen los reformadores es una educación pública carente de contenidos, incluso carente de docentes. La propuesta de la “Nueva Escuela Secundaria” sobre tiempos de enseñanza – aprendizaje distribuye un 30 por ciento a cargo del docente y el 70 restante desde plataformas digitales.

¡Celebración de la educación Mario Bros!

Otra prueba de los componentes tóxicos de la reforma remite a algunos de los participantes del documento bancario: “En las reuniones de consultas estuvieron representadas, entre otras, las siguientes OSC: Action Aid, la Campaña Mundial por la Educación, Education International, la Fundación Bill y Melinda Gates, la Fundación LEGO, la Fundación MasterCard, ONE Campaign, Oxfam, Save the Children, Teach for All, y World Vision. Asimismo, un grupo diverso de OSC participó en la sesión del Foro de las OSC realizado durante las Reuniones de Primavera de 2017 del Banco Mundial y el FMI, así como en un foro virtual que tuvo lugar en marzo de 2017…” (Pág. 10)

No valen mayores comentarios, el lector sabe otorgarle la significación a las organizaciones que allí aparecen como aportantes de “ideas” reformistas, muchas de ellas subvencionadas por el propio Banco Mundial o por el Departamento de Estado de los Estados Unidos y el Reino Unido.

Sin embargo es importante destacar que dos de las organizaciones5, “preocupadas por la educación”, que figuran en el documento bancario, Oxfam Save The Children, fueron protagonistas cuando contrataron servicio de prostitutas, incluso menores de edad, mientras prestaban “servicios humanitarios” en Haití, así como incidentes de acoso.

Así las cosas, cabe preguntarse por el dicho que cita el documento bancario: “…no se engorda a un cerdo pesándolo más veces…” ¿De qué cerdos habla?

¡No más tóxicos!

Es imprescindible salir de la reforma que desde hace 30 años ha puesto en crisis la educación pública, con sus toxinas capitalistas, para convertirla en un activo financiero y de generación de recursos humanos para servir a los intereses de las corporaciones empresariales, fundaciones y ong, dispositivos que se expanden como los agrotóxicos en el proceso de fumigación.

La neoliberal concepción bancaria de la educación es un decálogo contra lo público, lo común y un ariete contra las subjetividades individuales y colectivas, a eso, algunos intelectuales, cooptados por la colonialidad del poder, lo llaman “la educación del siglo XXI”.

Parafraseando el epígrafe de Alfredo Grande, si todos los caminos conducen a la reforma, entonces destruyamos la reforma, antes de entrar en la era del pospensamiento.

Notas:

1 http://www.eldiaonline.com/segun-conicet-urdinarrain-la-tierra-mayor-indice-glifosato/

2 Tipificado en el lonko encarcelado, Facundo Jones Huala, juzgado, por segunda vez (en la primera había sido sobreseído) para ser extraditado a Chile. De hecho, fue en el marco de la protesta por su liberación en la que se produjo la desaparición seguida de muerte de Santiago Maldonado en el contexto represivo llevado a cabo por la gendarmería en el PuLof Resistencia Cushamen (provincia de Chubut – agosto de 2017). Y unos meses después el asesinato del joven mapuche, Rafael Nahuel, perpetrado por el grupo “Albatros” de la Prefectura Naval Argentina (Lago Mascardi – provincia de Río Negro 25-11-2017)

3 Incluso, el incentivo ofrecido en provincia de Buenos Aires en la paritaria es, además de, del todo inaceptable, 15%, la incorporación del presentismo escalonado, para aquellos docentes que no hagan uso del derecho a la licencia, que por estatuto le corresponda. Mientras que en la Ciudad de Buenos Aires, es del 12%; en ambos casos sin “cláusula gatillo”, es decir, el reacomodamiento salarial según el aumento de la inflación.

4 Banco Mundial 2018, Informe sobre el desarrollo mundial 2018: Aprender para hacer realidad la promesa de la educación, cuadernillo del “Panorama” General”, Banco Mundial, Washington DC: Licencia: Creative Commons de Reconocimiento CCBY 3.0 IGO.

5 “El escándalo de Oxfam en Haití destapa otras 120 denuncias de abuso en ONG británicas” en www.eldiario.es/desalambres/ 11/02/2018

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América Latina y las políticas públicas educativas

Por: Jorge Cachinero

En América Latina se ha producido una mejora destacada de las competencias acumuladas por los individuos, a través de la educación reglada y de la experiencia profesional, aunque, en algunos de sus países, este proceso no se ha desarrollado ni tan rápidamente, ni tan universalmente como hubiera sido deseable.

Es necesario abordar las razones del porqué de esta brecha y sobre cuál ha de ser el papel que los estados pueden desempeñar en acortarla con las políticas públicas adecuadas.

Para empezar, el problema de la educación en América Latina no es de dinero.

El gasto público y el esfuerzo que realizan las familias latinoamericanas en educación están a la par con los de la media del resto del mundo y son importantes.

Obviamente, no todas las familias gastan en educación lo mismo ya sea en cantidades absolutas o en proporción a sus ingresos.

Las familias más ricas latinoamericanas suelen gastar en educación veinte veces más que las más pobres.

Otro factor de diferenciación social entre familias latinoamericanas es el tiempo que los padres dedican personalmente a la educación de sus hijos.

No todo es un problema de incentivos sino, más bien, de ser más eficiente en el gasto. En Latinoamérica se debe gastar mejor en educación y no, necesariamente, más.

Para ello, es necesario contar con elementos de medición del retorno de la inversión (ROI, return on investment, en inglés) para los estados de su gasto en educación, por un lado, y con elementos de medición del impacto de dicha educación en el progreso económico y social de sus sociedades, por otro lado.

Por ejemplo, hace años, en Perú se repartieron computadoras portátiles, por valor de USD $200 cada una, a un millón de niños. El coste de aquel programa fue de $200 millones.

Sin embargo, el impacto de ese programa sobre el desarrollo de las competencias académicas de los niños fue cero porque dichas computadoras no fueron acompañadas de los correspondientes programas o aplicaciones informáticas que las hubieran hecho funcionar y los docentes que debieron haberlas utilizado como herramienta de formación no contaban con la capacitación necesaria.

En contraste con lo anterior, el programa “Expande tu mente”, desarrollado, también, en Perú, durante 2015, y dirigido a los niños para que aprendieran que el cerebro es un músculo que puede desarrollarse con la práctica y con su uso y que, por tanto, dicho ejercicio es necesario para ampliar su capacidad cognitiva, con vídeos explicativos de USD $ 0.20 de coste por niño participante en el programa, tuvo un potencial de impacto mucho mayor que el reparto, sin más, de material que no pudo usarse correctamente o que no contó con instructores necesarios para guiar a los niños en su uso.

La medición de los retornos a la inversión (ROIs) para los estados y la medición de los impactos para los beneficiarios y para la sociedad son elementos imprescindibles para poder desarrollar mejores y más eficientes políticas públicas educativas, que estén formuladas sobre evidencias y sobre datos contrastables. Éste es un reto, no sólo en materia educativa, y no sólo en América Latina, o en España, también, para los gobiernos en el momento presente.

Los adultos adquieren y aprenden las competencias críticas para sus desarrollos profesionales, fundamentalmente, en las empresas, en las universidades y en las escuelas de negocio. También, en América Latina.

Desgraciadamente, la informalidad, tan extendida en sus entornos empresariales, y, por razones obvias, el tamaño y la dimensión de las organizaciones empresariales son obstáculos para que las empresas cumplan en Latinoamérica esa función de capacitación y de recapacitación de los individuos. Las diferencias en la inversión en formación dentro de las empresas y el impacto sobre los incrementos salariales de los trabajadores pueden llegar a ser múltiplo de tres dentro de las mejores en relación con las demás.

Las políticas públicas, idealmente, deberían seleccionar programas educativos, por ejemplo, sobre criterios de cálculo coste-beneficio de los mismos -sin que, necesariamente, se incluya el incremento de la jornada escolar, por costoso-, que incorporen la tecnología -siempre guiada por monitores capacitados y que cuenten con los programas y aplicaciones necesarios-, que garanticen una mejor organización de las clases, que pongan el foco sobre la motivación de los alumnos o que atajen el abandono escolar, que es el gran desafío de la educación secundaria en Latinoamérica.

Éstos programas deberían complementarse con proyectos de crianza que ayuden a los padres a estimular la educación de los niños -en Jamaica ya los hay-, con proyectos de mejora que integren a padres y a adolescentes en la educación de éstos y que ayuden a gestionar los riesgos del abandono educativo y con proyectos de desarrollo de habilidades socioemocionales para reforzar la ambición y el autocontrol.

América Latina es la única región del mundo en la que se está produciendo una disminución palpable de la pobreza y de la desigualdad y en la que el populismo, hasta ahora, aunque con desagradables excepciones, está en retroceso. La educación ha de ser un rubro en el que se debe ser más eficiente para que esto siga siendo así.

Fuente: http://abcblogs.abc.es/jorge-cachinero/2018/03/15/america-latina-y-las-politicas-publicas-educativas/

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El método mexicano para enseñar mejor las matemáticas a los niños

Por: M. Palmero

Los científicos han descubierto que este sistema potencia las capacidades de análisis y abstracción de los alumnos y, por ende, es útil para enseñar cálculo.

Lo más seguro es que estés leyendo esto porque 1) tienes niños y no sabes qué hacer para que aprendan matemáticas de una vez, 2) se te dan mal los números y quieres dejar de usar el móvil para hacer hasta unas simples restas, o 3) tienes demasiado tiempo libre o te aburres en el trabajo.

Sea como fuere, esto te va a interesar. Los científicos han descubierto que el sistema matemático que utilizaba la población maya potencia las capacidades de análisis y abstracción de las personas y, por ende, es útil para enseñar matemáticas a los más pequeños. Esto se explica por las características táctiles y simbólicas del sistema maya.

Los niños indígenas se sientan en plena selva a escuchar al profesor, quien les enseña cómo hacer el «ábaco maya», una tabla pintada sobre la tierra

Fernando Magaña, catedrático de la Universidad Autónoma de México (UNAM), promueve la enseñanza de este método en los colegios. El experto explicó a Efe que con este sistema, la memorización cede el paso al entendimiento, al análisis puro y a la abstracción. «El pensamiento abstracto facilita el razonamiento de las cosas, nos ayuda a tomar decisiones, a hacer esquemas, a programar causas y efectos…», aseguró Magaña.

El catedrático dio clases de matemáticas mayas a profesores en comunidades indígenas de 2010 a 2015 como parte de un programa de la Secretaría de Educación Pública del estado de Yucatán.

¿Cómo funciona el método?

Los niños indígenas se sientan en plena selva a escuchar al profesor, quien les enseña cómo hacer el «ábaco maya«, una tabla que los menores pintan sobre la tierra o en un periódico viejo. En dicha tabla se llenan tres tipos de fichas con un significado concreto y con las que realizan las operaciones matemáticas a través de desplazamientos entre las distintas columnas. El punto (cuyo valor es 1) lo puede representar el botón de una camisa, la raya (de valor 5) una judía, y el caracol (cuyo valor es 0), con una pequeña piedra.

Este método educa el razonamiento matemático, facilitando que el cerebro se acostumbre a analizar y a deducir desde muy temprana edad

Como vemos, el sistema, además de ser bastante barato, libra a los niños de aprender las tablas para poder realizar operaciones como sumas, restas, multiplicaciones, divisiones y hasta raíces cuadradas.

Al contrario, observan, interpretan y desplazan los objetos sobre la tabla para obtener los resultados y, mientras, razonan sobre lo que se está haciendo. «Se trata de un método más táctil, más concreto, pero que, a través de lo táctil, permite llegar al pensamiento abstracto«, expuso Magaña.

Si se enseña a los niños así desde la infancia, se educa el razonamiento matemático y el cerebro se acostumbra a analizar y a deducir desde muy temprana edad. «No tienes que memorizar las tablas de multiplicar; todo es puro análisis, así desarrollas la inteligencia analítica», matizó.

Las tablas, «un problema a nivel mundial»

El investigador dijo que la enseñanza de matemáticas con base en la memorización de tablas de multiplicar es «un problema a nivel mundial». «Apenas el niño sabe contar lo empezamos a entrenar en la memoria. Le decimos que eso son matemáticas, lo cual es un engaño«, aseveró.

Aprenden a sumar y restar en tan solo una hora, a multiplicar en otra y en tres o cuatro horas están capacitados para realizar una división

Además, el sistema maya es más rápido de asimilar por los niños. De hecho, aprenden a sumar y restar en tan solo una hora, a multiplicar en otra y en tres o cuatro horas están capacitados para realizar una división. Así, «en un lapso de dos o tres meses, un niño de cuatro años ya puede salir representando números del uno al diez mil».

«¿Por qué vamos a poner cárceles al cerebro?», se preguntó Magaña indignado.

Fuente: https://www.elconfidencial.com/alma-corazon-vida/2018-03-14/metodo-maya-ensenar-matematicas-ninos_1534804/

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Pensar críticamente: la capacidad creadora arraigada en la Filosofía

Por: Sebastián Fernández

Señor Director: 

En el marco de la discusión por la permanencia de la filosofía en la malla escolar de tercero y cuarto medio, nos hemos encontrado en estos días con una columna interesante llamada “Filosofía en la escuela: argumentos y sofismas” publicada en El Mostrador. Según la apuesta de su autor, existiría una limitante, e incluso una imposibilidad, en defender a la filosofía como una disciplina que promueve el pensamiento crítico, puesto que esta afirmación dejaría estéril una bandera esencial para la defensa de la misma. Esta bandera se izaría bajo el argumento de que en otras disciplinas, la filosofía juega un rol fundamental, porque en la historia del pensamiento, existieron problemas ideológicos a los cuales la sociedad ya se ha enfrentado y estos problemas son recolectados por la filosofía para presentarlos al mundo y evitar que en cualquier campo, éstos vuelvan a ser las piedras en el camino con las que el pensante se tropiece. En relación a esta tesis, no puedo sino estar de acuerdo y a la vez en contra, en tanto reconozco que si bien esta defensa se afirma en un argumento de peso, esto no provocaría que hablar de pensamiento crítico signifique pisarse la capa o contradecirse en nuestros intentos de defender la asignatura. Afirmar la filosofía como una disciplina que promueve el pensamiento crítico, trae consigo como una de sus consecuencias, precisamente evitar que volvamos a encontrarnos con problemas que ya han sido resueltos o sorteados por nuestros antepasados. Pensar críticamente significa poner en tensión lo ya establecido y entonces, tiene por consecuencia, indagar en la raíz de los problemas que ponen en tela de juicio aquello que ha sido asumido como tal. En términos generales, repensar la sociedad, nos obliga a comprender la raíz del pensamiento y de cada una de las disciplinas que emanan de él. Entonces, como recientemente afirmé, estoy absolutamente de acuerdo con el autor en que la filosofía es indispensable para evitar que volvamos a caer en los vicios ideológicos con los que la sociedad ya ha tropezado, pero, esto no es fundamento para erradicar la idea de que la filosofía promueve el pensamiento crítico, sino, por el contrario, es afirmar que sin este pensamiento crítico, no existe comprensión de los problemas ya superados.

Probablemente detrás de esta afirmación que contiene en su léxico el término “crítico”, exista un estigma o un rechazo social, en tanto, se podría entender que la filosofía es nido de sublevaciones, levantamientos o conflictos. Sin embargo, esta disciplina se afirma en una riqueza superior a estas ideas apresuradas. Ya lo recordara Martin Heidegger en su obra “Que significa pensar”(1952), quien nos advierte que el pensamiento trasciende a la lógica, y por tanto, nos lleva a aquellos caminos que no están establecidos. Incluso, y encontrando un nuevo desacuerdo con el autor de la columna, la filosofía no responde solo a esta racionalidad que heredamos de Sócrates, en su defensa de la virtud como arte del pensar, sino también a los cuestionamientos presentes en las poesías de Hölderlin o posteriormente en las obras de Nietzsche. Lo que nos lleva a hablar de un brazo irracional, pero muy profundo acerca de los estudios de la pasión, la verdad y el poder.

Entonces, y con la intención de evitar que se mal interprete mi postura como una crítica vaga a otro columnista, retomo su propia idea inicial y defiendo acérrimamente la disciplina en cuestión. La filosofía es crear, es comprender, es convivir y también es crecer. Es aquello que Kant caracterizaría como “La Ilustración” en aquellos tiempos joviales en los que el arte, la música, la arquitectura y otras especialidades sorprendían al mundo. Que a nuestros estudiantes se les prive del único espacio que no solo se arraiga en la “lógica”, sino también en la libertad del pensar, es acabar ignorantemente con el alma que nos define como seres dentro de la tierra. No es un secreto para nadie que el mundo en la actualidad gira en torno al “hacer”, a la utilidad, pero no hay “hacer” sin un “pensar” y nuestra educación debería no solo incluir a la filosofía como ramo, sino también, sustentarse de ella como columna estructural de todo lo que dura el proceso escolar. La vida se juega en la cancha del sentido común y la filosofía se ha encargado históricamente de construir este sentido, de establecer ideas y a la vez de criticarlas, cuestionarlas y si es necesario, demandar cambios en bien del progreso común.

¿Por qué nos educamos? ¿Para qué trabajamos? ¿Por qué nos constituimos a través de un Estado? ¿Qué es la familia? Son preguntas que el día de hoy generan consensos gracias a la crítica filosófica predecedera. Entonces, la filosofía es la encargada de cambiar al mundo y es de una irresponsabilidad sin límites, extirparla de nuestras aulas. Todo lo contrario, el llamado debería ser a conservarla y velar porque se mantenga vigente y activa. No casualmente en los anales de los años 80, el auditorio del Collège de France, se repletaba esperando las cátedras del profesor Foucault, tampoco es casualidad que el Contrato Social de Rousseau siga dando vida y justificación a la presencia del Estado como consenso social. Y así, tantos otros ejemplos que son fuente de maduración para nuestra sociedad. Eliminar las pocas horas de filosofía de nuestros liceos, es subestimar la capacidad de nuestros propios niños y jóvenes y considerarlos como mero animal laborans atentos a las instrucciones para echar a andar su obediencia robótica.

Fuente: http://www.elmostrador.cl/noticias/opinion/2018/03/09/pensar-criticamente-la-capacidad-creadora-arraigada-en-la-filosofia/

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Reflexiones sobre la internacionalización de la educación a nivel global: Chile en un punto de inflexión

Por: Philippe Werner

El actual escenario global de la educación superior se caracteriza por la existencia de varios factores: entre ellos proyectos internacionales de investigación colaborativa, universidades binacionales, desarrollo de redes, programas de movilidad global, centros regionales de excelencia y centros internacionales de educación. Ello está impulsando la creación de políticas supranacionales para la reforma de la educación superior, enfocadas en un marco interdependiente. El posicionamiento de la educación superior, según Jane Knight, como un instrumento del poder blando en estas condiciones, no alcanza a constituir una visión integral del compromiso internacional de la educación superior, opinión con la que coincidimos plenamente.

En este contexto cabe preguntarse ¿Por qué el enfoque del poder blando no logra-necesariamente dar una visión integral para la internacionalización de la educación? ¿Qué rol cumplen las universidades nacionales al momento de verse inmersas en la dinámica internacional? ¿Están las universidades chilenas involucradas en aportar dentro de la agenda internacional? ¿Pueden nuestras universidades constituirse en agentes de cambio y facilitadoras de la gestión diplomática, como complemento activo dentro del contexto planteado? Para responder a dichas interrogantes, resulta necesario indagar en distintas áreas, las cuáles serán tratadas en los siguientes párrafos.

  • Hacia un enfoque más adecuado: pasar del Soft Power a La Diplomacia del Conocimiento.

A nivel político, el constante aumento de la movilidad estudiantil requiere que los gobiernos busquen balancear los intereses nacionales con los asuntos internacionales. Debido a ello muchos países han adoptado estrategias de poder blando con el objeto de lograr influenciar a la comunidad internacional de los beneficios que significa formarse fuera de las fronteras. Ejemplo de ello son las becas ofrecidas por la Comisión Fullbright de Estados Unidos y el Consejo de Becas del Gobierno Chino, entre otras. Sin lugar a dudas, la imagen país juega un rol fundamental para poder establecer intereses dentro de la sociedad internacional. Al margen de lo anterior, existen nuevos enfoques, más adecuados a las actuales circunstancias y que merecen la pena conocerse, entenderse y por supuesto, difundirse adecuadamente.

Siguiendo las bases indicadas por Joseph Nye, el poder blando, en su naturaleza, busca atraer sin la necesidad de ejercer fuerza y por medio de la persuasión. Empero, sigue siendo poder, lo cual inexorablemente nos lleva a la idea de dominación. Por ello, el enfoque diplomático resulta más interesante y adecuado para poder efectuar el equilibrio entre cooperación e intereses. Aquí se hace interesante el enfoque de Knight, quien plantea que la diplomacia del conocimiento toma fuerza, en el contexto en que los agentes internacionales pretenden llevar a cabo sus respectivas agendas con un foco centrado en la negociación y entendimiento; en estrategias basadas en mediación, colaboración, compromiso y facilitación.

Nuestra pregunta es: ¿Qué actores paralelos están trabajando para fomentar la internacionalización de la Educación chilena de manera integral y coordinada?

  • Capacidades y desafíos nacionales para una internacionalización educacional

Chile, gradualmente se ha visto inmerso dentro del proceso globalizador. Nuestra economía es una de las más abiertas del mundo. Los flujos migratorios muestran que nuestro país es el destino más codiciado, a nivel regional. Asimismo, nuestro país está siendo uno de los agentes internacionales que van a la vanguardia en temas globales, como, por ejemplo:  energías renovables, asuntos antárticos, investigación astronómica, entre otros. Como consecuencia de lo anterior, la internacionalización de Chile por medio de las universidades está jugando un rol clave; la marca sectorial “Learn Chile” o el “Parque Científico Tecnológico” son ejemplos de ello; uno por medio de la promoción de un consorcio de universidades que busca posicionar al país en el extranjero, y el otro por medio de la colaboración en proyectos de innovación y desarrollo.

Sin embargo, no existe una política de Estado que se enfoque estratégicamente a la internacionalización de la educación. Si bien muchas universidades, centros de investigación, ONGs, y otros actores buscan abordar temáticas de interés internacional, donde Chile tiene mucho que aportar, la falta de coordinación hace que muchas de las iniciativas no logren tener un apropiado impacto internacional. Adicionalmente, a veces, las estrategias de internacionalización se quedan en la promoción de intercambios académicos -muy importantes, por cierto-, pero que no ahondan en iniciativas innovadoras.

  • ¿La necesidad de contemplar agentes facilitadores de la internacionalización?

Adicionalmente, el tema logístico es de gran importancia y de una envergadura poco común. Ocurre que muchas universidades tienen vinculaciones con sus pares en el extranjero. No obstante, no existe la capacidad de acción para atraer una masa crítica de expertos, ya que algunas universidades no tienen el know how para tratar con los servicios anexos tales como alojamiento, visados y traslados, entre otrosPor ejemplo, las relaciones entre China y Chile, en cuanto a movilidad académica, no han prosperado adecuadamente. Ejemplo de ello según fuentes del MINEDUC, sólo un 0.4% de los estudiantes extranjeros en Chile vienen de China. Ello se explica en que no existe la capacidad para recibir una masa crítica desde otra cultura (de alojamientos, visados, etc). Chile se encuentra en un punto de inflexión, y para forjar su rol internacional, la cooperación educacional no puede ni debe quedarse atrás.

No basta con crear estrategias de marketing si no se pueden abrir las fronteras culturales. Chile posee una diversidad de ventajas comparativas. No obstante, el desafío es poder concretar nuevas iniciativas y abrir espacio para un accionar coordinado entre las partes interesadas. Esto, con el objeto de que la internacionalización de la educación superior pueda aportar al desarrollo de una sociedad del conocimiento -con estudiantes internacionales y movilidad académica – que perpetúe la lógica de los beneficios mutuos. Por ello las universidades deben transformarse en activos agentes de nuestra Diplomacia Pública y del Conocimiento basadas en la educación internacional, la diversidad cultural, los proyectos de investigación, y el desarrollo y la innovación. Nuestra pregunta es: ¿Qué actores paralelos están trabajando para fomentar la internacionalización de la Educación chilena de manera integral y coordinada?

Fuente: http://www.elmostrador.cl/noticias/opinion/2018/03/03/reflexiones-sobre-la-internacionalizacion-de-la-educacion-a-nivel-global-chile-en-un-punto-de-inflexion-2/

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¿Pedagogía judicial o proletarización docente?

Pablo Messina

 La resolución del juez Gerardo Álvarez forzando el pasaje de grado de una estudiante de cuarto año de Los Maristas sintetiza una multiplicidad de problemas y contradicciones presentes en el sistema educativo. En el presente artículo me centraré en la discusión sobre la “autonomía técnica” del docente.

El despojo al docente. Cuando pensamos en un “robo”, en general nos imaginamos situaciones en las que a alguien le son extraídas pertenencias materiales por un tercero, como las joyas del Conrad. Lo cierto es que la literatura sobre las condiciones de trabajo de los docentes viene mostrando que el “robo” admite también elementos simbólicos.

Para ser claros, la desvalorización de una profesión, en este caso la docente, puede ser cuantitativa o cualitativa. En el primer caso, implica que sus condiciones materiales de reproducción se ven aminoradas, o sea, su poder de compra desciende, o se “empobrece”. En el segundo caso, la desvalorización implica el “despojo” de algo que da cierto “poder” al docente: su conocimiento específico. No sólo sobre la asignatura sobre la cual puede tener (o debería) pericia técnica, sino también sobre el “saber dar clases” y todo el entramado de actividades que conlleva (planificación, manejo didáctico en el espacio del aula, evaluación de procesos y saberes, entre otros.). Esta segunda forma es conocida como “proletarización docente” (Donaire, 2007).

PROLETARIZACION DOCENTE. En primer lugar, hay trabajos que analizan los aspectos subjetivos, o sea, la identificación de clase de los docentes. Sobre esto puede decirse que a nivel global operó un proceso en el que éstos pasaron de organizarse en asociaciones profesionales a hacerlo en sindicatos y adoptar métodos típicos de lucha proletaria: paros, ocupaciones y huelgas. Esto es relevante porque hasta los ochenta era usual considerar que los docentes eran “pequeño-burgueses”.

En segundo lugar, la masificación de la educación en todos sus niveles ha traído dos fenómenos que contribuyen a la creación de un “mercado educativo” en lo que hace a la “fuerza de trabajo docente”. Primero, el número de docentes ha aumentado (en consonancia con la tendencia global a universalizar la enseñanza primaria y secundaria), y también aumentó el número de personas con formación terciaria en general. La existencia de un importante contingente de población con estudios terciarios reduce la “escasez” de fuerza de trabajo y facilita el “mercado”, por tanto, la posibilidad de contratar y sustituir docentes como una fuerza de trabajo calificada es cada vez más sencilla.

Junto con ese aumento de la matriculación docente y terciaria en general, ha ocurrido un cambio en el “reclutamiento”. En buena parte del mundo los docentes han pasado a reclutarse de forma creciente en familias “proletarias”. Esto también contribuye a explicar sus cambios identitarios (y organizativos).

En tercer lugar, la masificación ha traído aparejado (no siempre, pero en muchos lados) un deterioro importante en las condiciones de trabajo que abarcan al ambiente escolar, pero lo trascienden e incluyen aspectos de salud laboral conocidos como burn out, o “quemazón”.

En cuarto lugar, todas estas problemáticas se combinan con lo que se conoce como “descualificación” (Braverman, 1974). En el caso de los docentes, implica asumir que éstos tienen un “poder” –conocimiento específico– que les otorga cierta “fuerza”. Por ejemplo, si los docentes fueran fácilmente sustituibles, la amenaza de la esencialidad hubiera sido efectiva –porque se los echaría a todos y pondrían a otras personas en su remplazo, lo mismo que se echa a un peón en una obra–. Como no lo son, fue una medida, además de autoritaria, poco inteligente.

Desde esta perspectiva, “proletarizar” al docente implica “despojarlo” del saber específico y, de alguna forma, precarizarlo. ¿Cómo? La literatura especializada admite distintas posibilidades, pero que pueden sintetizarse en la creación de una industria editorial de manual de texto para uniformizar la tarea docente, volviéndolos aplicadores de manuales y ejecutores de planes de estudio y de programas, sin capacidad de elaboración propia ni de crítica (véase Apple, 1983; y Perrenoud, 1996). Esto se conjuga, a su vez, con lo que se conoce como “intensificación educativa”, que implica que los docentes ven aumentada “la explotación” en la jornada de trabajo, debido a que deben realizar cada vez más tareas: dar clases, responder a emergentes sociales más complejos, llenar procesos administrativo-burocráticos crecientes, etcétera (Giroux, 1988).

¿Y en Uruguay? En nuestro país existe muy poca literatura sobre las condiciones de vida y de trabajo del docente, y desconozco la existencia de trabajos que discutan la proletarización. Por lo tanto, sólo me basaré en algunas elaboraciones que venimos desarrollando como “hipótesis de trabajo”.

De las causales mencionadas en el punto anterior, todas parecerían tener algo de lugar. En Uruguay, desde mediados del siglo XX las asociaciones profesionales de docentes fueron mutando hasta conformarse en sindicatos (Yaffe et al, 2006). Sin la existencia de trabajos recientes que estudien la identificación de clase de los docentes, se puede conjeturar que la intensificación de los paros, ocupaciones y huelgas, así como el fortalecimiento reciente de algunos sindicatos históricamente débiles –Sinteptal vez sea el caso más paradigmático– parecen dar cuenta de que dicha identidad se ha ido fortaleciendo.

Por otra parte, el Censo de Docentes de 2007 y encuestas a estudiantes dan cuenta de que el “reclutamiento” en sectores populares ha ido in crescendo(algo similar ocurre a nivel universitario). Asimismo, desde la ley 14.101, que habilitó el ejercicio en educación secundaria a docentes no titulados, la existencia de docentes sin título ha pasado a formar un rasgo estructural del sistema.

Pero a esta especificidad del caso uruguayo se agregan tendencias que son globales, ya que ha ido operando una nueva “división del trabajo” en el proceso enseñanza-aprendizaje. El fallo judicial apelando al acta 119 es por demás elocuente, ya que si bien mantiene la decisión final de la repetición en la maestra, también la restringe: “para adoptarla utilizará información proveniente de diferentes ámbitos, entre los que se incluye a la dirección escolar, maestro de apoyo, maestro comunitario, psicólogos y asistentes sociales”. Dicha restricción es la demostración fehaciente de que los actores del sistema educativo se han multiplicado con otros profesionales y trabajadores. No hay nada malo en esto, pero tiene como correlato la pérdida de centralidad del docente en el sistema educativo, lo que evidencia que quienes están pensando en maestros autoritarios y déspotas –que los habrá– mantienen en la retina una visión desactualizada de cómo funciona la educación (o están mirando mucho The Wall, entusiasmados por la venida de Roger Waters).

Además, esta nueva división del trabajo trae aparejadas otras figuras que son más complejas, y problemas nada despreciables. Junto a psicopedagogos y psicólogos también han aparecido otras figuras, como los talleristas, altamente precarizados, que son otra manifestación de la “desprofesionalización” docente. De hecho, un conjunto de actores cada vez más significativo viene “de otro palo”, no regido por el “estatuto docente” y, la mayoría de las veces, con relaciones contractuales inestables. Docentes y talleristas son víctimas de esta nueva división del trabajo. Y, si bien no es algo totalmente consolidado, la sustitución parcial de unos por otros es una práctica creciente. Para poner un ejemplo ilustrativo, el año pasado hubo denuncias de docentes del liceo 53 porque se les permitía optar a los estudiantes entre asistir a clases de matemáticas o a talleres de inclusión financiera, brindados por la empresa Pronto. Algo similar ocurre en el 65 con los talleres financiados por Pepsico, y la lista es larga.

Por eso el conflicto por el fallo judicial sintetiza un aspecto de la lucha docente no siempre tan visible. Nos hemos acostumbrado a la reivindicación de mejores salario y presupuesto, pero ahora estamos ante una protesta por una forma más sutil pero mucho más terrible del despojo: la pérdida de autonomía técnica del docente.

Si a esto sumamos una ministra de Educación autoritaria, para quien ser “maestro de escuela” es casi un insulto –como manifestó en sus altercados con un ex jerarca del Mec–, y un discurso mediático que criminaliza a los docentes, que existan padres que entiendan que los docentes “no saben lo que hacen” y que un juez –amparándose en la normativa de 2017– se meta a educador, no debería llamarnos la atención. Es una perlita más en un proceso de reforma educativa que tiene en los docentes uno de sus principales obstáculos.

En Uruguay la discusión educativa se ha centrado en aspectos cuantitativos. Si bien presupuesto y salarios son muy insuficientes, el déficit más duro en lo que hace al “modelo educativo” ha sido la ausencia de debate pedagógico. Antes se pensaba que los derechos de los padres y los estudiantes eran importantes, y se peleaba por autonomía y cogobierno. Hoy dichos derechos se delegan en la voluntad de un juez. Dejar todo como está no es mucho mejor que permitir que las concepciones tecnocráticas avancen. Hay que volver a preguntarse, ¿qué educación queremos?, ¿para qué sociedad educamos?, ¿cuáles son los actores relevantes para dicha transformación? Quienes abogamos por una sociedad más justa e igualitaria debemos reivindicar la centralidad de los docentes y los estudiantes y dejar de entregarles en bandeja las respuestas a los mismos de siempre.

* Economista. Integrante de la cooperativa Comuna.

Fuente:https://brecha.com.uy/pedagogia-judicial-proletarizacion-docente/

Imagen tomada de: https://encrypted-tbn0.gstatic.com/images?q=tbn:ANd9GcQ53fNh7tOScUJuPZDqt7gmDxT5u6DsnQwabrQyNB8PoUudvQzs

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Reflexiones post #8M: Feminismo, Machismo, Patriotismo y otros desvaríos

Por Adrian Cordellat

En casa vivimos el #8M a flor de piel. Emocionados desde buena mañana con los testimonios de mujeres y hombres que se hacían escuchar en Hoy por hoyLuego emocionados también en la concentración de nuestro barrio, leyendo pancartas emotivas e ingeniosas, sumándonos a los cantos reivindicativos de mujeres, hombres, niñas y niños. Ya por la tarde-noche, a través de la radio (de La Ventana, de Hora 25) y de las imágenes que nos llegaban vía smartphone, orgullosos de todos esos millones de mujeres que tomaron las calles, las hicieron suyas, y durante el jueves convirtieron a España, un país irrelevante en el escenario internacional, en epicentro mundial de una revolución ya imparable.

Sí, imparable. Por más que algunos (incluso algunas), con mucho poder (y otros con no tanto), prefieran seguir como siempre. Boicotear el cambio. Confundir. Me sorprendió en ese sentido escuchar un día antes del #8M a la Ministra de Igualdad de España (¡De Igualdad!) decir que ella lucha por la igualdad real y efectiva de las mujeres, pero que no se siente feminista, que eso es una etiqueta, un estereotipo. Uno puede esperar ese comentario de alguien como Paula Echevarría, pero nunca de una Ministra de Igualdad. Alguien debería haberla hecho dimitir de inmediato si en este país dimitir fuese un verbo conocido en política. Por ignorante. Por dotar al feminismo de una connotación negativa que no tiene. Por confundir desde su poltrona a mucha gente que parece pensar que el feminismo es lo mismo que el machismo solo que a la inversa; que si se impone el feminismo las mujeres matarán a hombres, los acosarán sexualmente, los violarán en masa. Pobres.

El 8 de marzo, para todos aquellos que se encargan de manipular, para todos aquellos que solo buscan confundir a la población, para la señora Ministra, Fundeu, el buscador urgente de dudas en español, publicó un post: feminismo no es lo contrario que machismo. En él aclaraba que según el Diccionario de la RAE feminismo es el ‘principio de igualdad de derechos de la mujer y el hombre’ y el ‘movimiento que lucha por la realización’ de esa igualdad. Machismo, por su parte, se define como ‘actitud de prepotencia de los varones respecto a las mujeres’ y ‘forma de sexismo caracterizada por la prevalencia del varón’. Usted, señora ministra, con sus estereotipos y etiquetas, es posible que aún no lo sepa, pero es feminista. Con todas las letras.

EL #8M SÍ, ORGULLOSO DE SER ESPAÑOL

He dicho muchas veces en este blog que no entiendo de patrias ni de banderas, que no concibo el patriotismo como tal, que mi única patria son mi familia y mis amigos, que al final son los que dan sentido a todo. Por tanto, nunca he tenido necesidad de sentirme orgulloso de ser español. Ni tampoco, la verdad, me han dado demasiados motivos para ello. Esta postura me ha causado no pocos reproches en las sobremesas políticas familiares. Pueden estar tranquilos. El #8M, sin embargo y posiblemente por primera vez, sí me sentí orgulloso de ser español. Quizás porque me van más los delantales colgados de los balcones que las banderas de una absurda guerra de símbolos que no significan nada. Quizás porque me conmovió y me emocionó hasta puntos que no sabría explicar ver la movilización generada por las mujeres de nuestro país, apoyadas por muchos hombres; ver como España acaparaba la atención de medios de todo el mundo, ¡y no por el fútbol, sino por sus mujeres, convertidas en abanderadas de una lucha que no entiende de fronteras!.

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Gracias a todas por regalarnos este #8M. A las que organizaron, a las que estuvieron en concentraciones y movilizaciones de barrio, a las que asistieron a las manifestaciones, a las que dejaron de trabajar para hacer ver que son imprescindibles, a las que no pudieron porque los cuidados no entienden de huelgas, a las que no les dejaron ejercer su derecho y también a las que no quisieron ejercerlo porque ellas no sienten ni experimentan esa desigualdad. A éstas últimas me gustaría recordarles que las manifestaciones, las huelgas y las movilizaciones no se hacen por ellas, sino por todas las que siguen muy lejos de rozar esa igualdad, por todas las que chocan cada día contra techos de cristal, por todas las que sufren cada día la brecha salarial, por todas las que se enfrentan cada día a situaciones de violencia por el mero hecho de ser mujeres. Hoy por ti, mañana por mi.

Este #8M Mara vivió su primera huelga y asistió a su primera concentración. Probablemente no se enteró de nada. Un día, sin embargo, tarde o temprano, verá en algún libro de historia lo que significó este 8 de marzo de 2018. Y se sentirá orgullosa de haber estado, a su manera, en él. Mucho de lo que pueda conseguir dentro de dos o tres décadas se lo deberá a todas las mujeres que lucharon por sus derechos desde tiempos inmemoriales. También a aquellas que aquel 8 de marzo de 2018, cuando ella solo era una niña de 4 años, hicieron historia y, como dijo una mujer en Hoy por Hoy, dieron por comenzado, con 18 años de retraso, el siglo XXI.

Fuente: https://www.unpapaenpracticas.com/8m-feminismo/#more-4762

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