Page 1988 of 2663
1 1.986 1.987 1.988 1.989 1.990 2.663

Comunicado de Tzk´at, Red de Sanadoras Ancestrales del Feminismo Comunitario desde IXIMULEW-Guatemala – no fue el fuego, fue el femicidio estatal

Comunicado

Para amanecer el día de hoy 10 de marzo por la mañana, son 37 femicidios estatales registrados de las niñas que fueron calcinadas por la misoginia expresada en la falta de inoperancia, negligencia e incapacidad por parte de las instituciones para el resguardo de su vida en el “Hogar Seguro” Virgen de la Asunción.

Niñas provenientes de familias empobrecidas, algunas también indígenas de varios departamentos a nivel nacional, con historias de violencia sexual, abortos forzados, embarazos por violencia sexual, trata, huyendo del reclutamiento forzado de las maras, o que el crimen organizado había cooptado a falta de oportunidades para una vida digna.

Desde este feminismo comunitario que es territorial, expresamos nuestra rabia e indignación ante los hechos de grave violencia que se suscitaron desde el día 7 de marzo que conllevó la fuga masiva de 50 niñas, quiénes fueron “recapturadas” por la Policía Nacional Civil y que para el 8 de marzo se encontraban hacinadas en un solo salón sin comida, sin poder asistir al servicio sanitario, sin bañarse como parte del castigo impuesto por las autoridades del lugar.

Denunciamos a éste Estado femicida en Guatemala, porque mientras los funcionarios de las instituciones como La Secretaria de Bienestar Social, encargadas de éste tipo de centros de “Protección a menores”, ganan salarios impresionantes, por compadrazgos y pagos de favores políticos con el gobierno de Jimy Morales, han contratado asesores sin el expertíz y capacidad para el abordaje de las graves problemáticas de niñez y juventud en éste país.! Exigimos su destitución Ya!.

Las niñas se agruparon porque denunciaban malos tratos, falta de amor, falta de comida, enfermedades, violencia sexual, intentos de suicidio, olvido de la sociedad. Se agruparon porque querían vivir, porque todavía tenían sueños como otras niñas en el mundo que disfrutan en libertad y alegría.

Demandamos que el Estado de Guatemala se responsabilice de ésta tragedia que enluta a las familias de las niñas y al pueblo de Guatemala, y que asuma con pertinencia la entrega de toda la documentación necesaria para los procesos de investigación que se están llevando a cabo.

Demandamos y exigimos un cuidado y protección integral para el resguardo de las 17 niñas que se encuentran entre la vida y la muerte hospitalizadas en los hospitales nacionales como víctimas de ésta tragedia, que se asuma a largo plazo y se garantice el resarcimiento y reparación tanto para ellas como para sus familias.

Saludamos a las hermanas, organizaciones, movimientos, comunidades y medios de comunicación que han respondido a nuestra convocatoria y se han pronunciado de diferentes maneras, les invitamos a seguir informando a la ciudadanía de los diferentes países que se han manifestado frente a las embajadas y Consulados de Guatemala; Honduras, Nicaragua, Salvador, Costa Rica, Argentina, Montreal Canadá, Chile, para seguir haciendo fuerza, denuncia y demanda de justicia por la vida de las niñas y porque este femicidio estatal no quede en la impunidad.

Seguimos convocando a que, desde cualquier lugar del mundo, encendamos veladoras blancas para acompañar a las niñas en el camino de su dimensión espiritual y que acuerpemos el duelo de las familias y del pueblo de Guatemala que demanda Justicia.

Porque sanando tú, sano yo, sanando yo sanas tú; es la reciprocidad de la sanación.

Vivas nos queremos, libres nos queremos, ¡NI UNA MENOS!

Iximulew 10 Ajpu, Guatemala 10 de marzo de 2017

¡35 niñas de Guatemala, nos faltan en el mundo!

¡Ni olvido ni silencio; justicia por las niñas de Guatemala!

1. Kimberly Odalis castillo Rodríguez 15 años

2. Anabela Maribel Leal Rax 17 años

3. Yesenia Paola Barrios 14 años

4. Jazmín Noemí Vásquez 14 años

5. Emily del Cid 16 años

6. Yamilet Cu Luan 15 años

7. Rosmery López 16 años

8. Brenda Carrizal 16 años

9. Noemí Fuentes Minas 16 años

10. Eva Rosa Antun Leal 16 años

11. Jenifer Julisa Macarte Korea 14 años

12. María Vanesa Torres Suchité 15 años

13. Indira Jarisa Pelicó

14. Daria Dalila López Meda

15. Sonia Hernández García

16. Mayra Aidé Chután Urías

17. Skarleth Yajaira Pérez Jiménez

18. Yohana Deciré Cuy Urizar

19. Sarvia Isel Barrios Bonilla

20. Ana Nohemí Morales Galindo

21. Wendy Anai Vividor Ramirez de 16 años

22. Velveth Judith Aguirre Elias de 13 años

23. Erika Elizabeth Aguirre Elias de 15 años

24. Erick Eliseo Aguirre Elias de 17 años

25. Lorena Sanchez Pereira de 14 años

26. Yusbeli Jubitza Merari Makin Gomez de 14 años

27. Osbin Daniel Gomez Jimenez de 11 años.

28. Rosa Julia Espino Tobar

29. Indira Jarisa Pelicó

30. Ashely Gabriela Méndez Ramírez

31. Mayra Aidé Chután Urías

32. Rosalinda Victoria Ramírez Pérez

33. Madelin Patricia Hernández Hernández

34. Pendiente Inacif (Instituto Nacional de Ciencias Forenses) informe su identidad

35. Pendiente Inacif, (Instituto Nacional de Ciencias Forenses) informe su identidad

36. Pendiente Inacif, (Instituto Nacional de Ciencias Forenses) informe su identidad

37. Pendiente Inacif, (Instituto Nacional de Ciencias Forenses) informe su identidad

Fuente: http://jubileosuramericas.net/tzkat-red-de-sanadoras-ancestrales-del-feminismo-comunitario-desde-iximulew-guatemala-no-fue-el-fuego-fue-el-femicidio-estatal/

Fuente imagen: http://www.semmexico.com/SemWork/uploads/925_1.png

Comparte este contenido:

Cómo animamos a escribir

Por: Lenín Wladimir Paladines Paredes

En un modelo educativo en donde se favorezcan los espacios para crear antes que aquellos que buscan solamente repetir y memorizar.

Escribir juega un papel importante, porque involucra procesos que apliquen los conocimientos teóricos en productos reales. Para esto, el profesor debe tener claro por qué y cómo animar a escribir a los estudiantes. Y como decía Víctor Moreno (1994), si bien es imposible enseñar a escribir, el profesor puede propiciar los espacios y el ambiente dentro del aula, así como impartir los conocimientos y entregar las herramientas para que los estudiantes se desenvuelvan en la tarea planificada.

Pero, uno de los consejos más importantes de Moreno, es que el profesor debe practicar lo que predica, involucrarse en el proceso de animación a la lectura y a la escritura, y para ello, debe leer mucho. Y si no es posible determinar qué debe leer, o qué novelas le descubrirán el camino por el que andar para motivar a sus alumnos, se pueden sugerir obras que hablen de la literatura misma, y que permitan entender al profesor la necesidad de practicarla y de estudiarla.

Está, por ejemplo, Punto y aparte, de Ítalo Calvino (1980), que agrupa ensayos escritos por el italiano entre 1955 y 1980, haciendo una reflexión sobre la literatura y la sociedad.

También está A la hora de escribir, de Bioy Casares (1988), que recoge conversaciones entre el autor y otros escritores, respondiendo a las cuestiones de por qué y cómo se escribe, así como reflexiones del papel de la escritura y su técnica.

Opiniones contundentes, de Vladimir Nabokov (1977) recopila entrevistas hechas al autor, en las que explica, con cierto sentido del humor, cuestiones relacionadas a la literatura, la lectura, su forma de escribir y su pensamiento respecto a la literatura y la sociedad.

Finalmente, está la recomendación de Ejercicios de estilo, de Raymond Queneau (1949), en donde se desarrollan una serie de estrategias para escribir una misma línea argumental de maneras completamente distintas, dando ideas al lector de cómo encontrar una forma de escribir y transmitir un mensaje específico.

Esto serviría para contagiar al profesor de la necesidad de involucrar a sus alumnos en el proceso de creación literaria dentro del aula, de manera que no sea una imposición o una tarea obligatoria, sino una forma de compartir el conocimiento de manera agradable y con un sentido realista y beneficioso.(O).

Fuente: http://www.cronica.com.ec/opinion/columna/columnista/item/17963-como-animamos-a-escribir

Comparte este contenido:

¿Es la educación tecnológica motor de movilidad social?

Por: Pedro Flores Crespo

Debido a un imponderable (la lluvia), la Biblioteca de México tuvo que alojar el Primer Encuentro que el secretario de Educación Pública, Aurelio Nuño, sostuvo con estudiantes de los institutos tecnológicos, universidades politécnicas y universidades tecnológicas. Se trataba, en palabras de Nuño, de sostener un “diálogo abierto” con ese “ejército de innovadores” y presentarles la visión que tiene el titular
de la SEP de ese subsistema de educación superior.

Es mejor que existan conversaciones y diálogos entre servidores públicos y estudiantes a que por temor no se convoquen. De hecho, al tomar la palabra, Salvador Jara, subsecretario de Educación Superior, dijo que era importante que los jóvenes “ejercitaran su pensamiento” en encuentros como estos que, entre otras cosas, sirven para despejar dudas sobre la política educativa del país. Porque luego, afirmó Jara, hay mucha “charlatanería”.

Lamentablemente, la dirección Comunicación Social de la SEP sólo tiene publicada la larga participación de Aurelio Nuño y lo más interesante de ésta es, a mi juicio, la intervención que hicieron los jóvenes y las respuestas que ofreció el secretario Nuño. El encuentro, en extenso, aparece afortunadamente en YouTube.

¿Qué se observó en este encuentro? Al menos dos cosas llamaron mi atención. Primero, que mientras los estudiantes se concentraron en problemas muy particulares y específicos de sus instituciones, Nuño aprovechó cada pregunta para hablar de la Reforma Educativa que, hasta donde se sabe, está enfocada al nivel de educación básica y media superior.

Cuando una chica de Nayarit quiso conocer que propondría el titular de la SEP para detener la fuga de cerebros, el secretario primero dijo que era necesario crear mejores condiciones de vida y luego se alargó ensalzando las 13 reformas que el presidente Enrique Peña Nieto ha promovido y todas, dijo, están “integradas”. Así también, cuando Marco Antonio lo cuestionó sobre un problema muy bien documentado de las universidades tecnológicas y que es la falta de expresiones culturales en sus planes de estudio, el “responsable de la política educativa” del país les habló de las políticas de Jaime Torres Bodet, citó fechas de manera exacta (cosa que apantalla) y luego dijo que al proponer el Nuevo Modelo Educativo, se va a incluir un componente de educación cultural y artística para la educación superior. ¿A poco? ¿Y los intentos previos (y fallidos) no los conoce el secretario Nuño? ¿Y ya les preguntaron a las universidades autónomas sus experiencias con respecto a la difusión y extensión cultural?

Segundo punto que me llamó la atención del encuentro con estudiantes fue, por un lado, la queja de los estudiantes de las universidades tecnológicas sobre la falta de equipamiento e infraestructura. Paola de la UT de Tecamachalco afirmó que cuando ella estudió no había laboratorios y que pese a ello, se han logrado avances notables. De hecho, ella participó en programas de intercambio estudiantil, imagínese “¿qué se lograría con apoyo?”, remató. Por otro lado, fue interesante que Nuño recurrentemente hablaba de que esos jóvenes formaban parte de la primera generación de su familia en ir a la universidad. Es decir, la educación superior tecnológica, en particular las UT, están contribuyendo, ciertamente, a la movilidad social intergeneracional y esto, como afirmó Julio Rubio (2006), es mayor en las UT que en las universidades públicas autónomas.

Sin duda alguna, la movilidad intergeneracional es un rasgo de avance social que no puede soslayarse y si una opción educativa de corta duración y vocacional contribuye a que los jóvenes alcancen mayores oportunidades educativas que su padres, es digno de reconocerse. Ahora, un punto complementario a la movilidad intergeneracional es la de tipo intrageneracional, es decir, el movimiento que logran los individuos dentro de su mismo grupo y no en relación a la generación pasada. ¿Se mueve ascendentemente el grupo de los técnicos en la estructura social de México?  ¿Por estudiar una opción tecnológica, tenemos la posibilidad real de cambiar de clase social? Hacen falta mayores estudios al respecto, pero el estudio de Cortés, Escobar y Solís (2007) encontró que una variedad amplia de empleos técnicos y profesionales ya no brindada el estatus, los ingresos y la seguridad que otorgaba hace treinta años.

Ojalá este tipo de temas y preocupaciones se aborden en el segundo encuentro con jóvenes universitarios. Sin equipamiento, cobrándoles cuotas muy altas, alejados de las grandes urbes y dejando de lado la formación integral y el pensamiento crítico será muy difícil que la educación tecnológica sea un motor de movilidad social intrageneracional. Por más importantes que sean, los programas de becas anunciados por el secretario Nuño en el encuentro, no van a la raíz del problema.

Fuente: http://campusmilenio.mx/index.php?option=com_k2&view=item&id=3912:es-la-educacion-tecnologica-motor-de-movilidad-social&Itemid=152

Comparte este contenido:

La academia indigenista, ¿es ingenua de su función sociopolítica?

Por: Ollantay Itzamná

El indigenismo como corriente sociopolítica consiste en la defensa que se hace del indígena vencido frente a sus vencedores. Esta corriente posiblemente nació, a inicios del siglo XVI, con los frailes dominicos Antonio Montesinos y Bartolomé de las Casas, defensores de indígenas.

Los indigenistas, sean blancos o con fenotipos y ropaje indígena, no necesariamente buscaban, ni buscan, la liberación u autodeterminación de los pueblos indígenas. En muchos casos, por sus dispositivos paternalistas, miran en el indígena a un “vencido para siempre”, incapaz de ser sujetos de su historia, de tener voz y decisiones propias. Para el indigenista el indígena es un sujeto de caridad que inexplicablemente porta una idílica herencia comunal que se debe salvaguardar.

En la segunda mitad del pasado siglo, ante la evidente complicidad de los indigenistas con el sistema de dominación, emergió la corriente indianista basada en los idearios teórico políticos del legendarios binomio Túpac Katari-Bartolina Sisa.

El indianismo plantea la liberación y autodeterminación de los pueblos indígenas como sujetos y actores de sus propias historias.

El o la indianista no opta por el indígena, sino es un indígena que ha resistido a la domesticación cultural y política del sistema hegemónico. Que ha despertado y despierta (aguijonea) a sus hermanos y hermanas desde las comunidades con perspectivas plurinacionales, pluriregionales y globales, hacia su liberación como pueblos.

Mientras los indigenistas (académicos o no) se enorgullecen de ser apolíticos (sin organización política), los indianistas promueven caminos sociopolíticos como herramientas de lucha y disputa colectiva por el poder. Conviven en sus comunidades impulsando procesos de decolonización.

La academia de ropaje indígena como recurso para la despolitización de los movimientos indígena campesinos

Ante los simultáneos e imparables procesos de resistencias territoriales que el sistema capitalista neoliberal está activando en los pueblos indígenas, los agentes del sistema-mundo-occidental ensayan todos los métodos posibles para desmovilizar y evitar “se repitan fenómenos sociopolíticos de Bolivia y Ecuador” en otros país latinoamericanos.

Promueve becas de estudios en el extranjero para indígenas “victimizadas”. Los reúnen en programas doctorales “especializados” en estudios indígenas. Luego de titularlos y promoverlos como “nuevos intelectuales indígenas cualificados”, los contrata como consultores y/o conferencistas.

Con dichas insignias de poder (títulos y consultorías), los indigenistas reingresan a las comunidades y pueblos indígenas en resistencia para anunciar el mensaje salvífico del nuevo adoctrinamiento: “Nosotros como auténticas comunidades indígenas, no debemos meternos en política. No necesitamos participar/disputar el poder político nacional… Somos apolíticos. No somos de ni de la derecha, ni de la izquierda. Somos seres superiores. Estamos por encima de la política”.

Con este mensaje, el agente indigenista termina desmovilizando y despolitizando a las comunidades indígenas en resistencia. En especial cuando algunos dirigentes/lideres comunitarios conoce/gusta de los viajes, desayunos o almuerzos pagados en los hoteles…

Ataque indigenista contra cualquier intento de la consolidación de incómodos gobiernos “progresistas”

Los indigenistas, sean como becarios o como consultores, organizan y participan en congresos, foros y diálogos sobre pueblos indígenas, incluso llevándose consigo a algunos “dirigentes” indígenas, como “evidencia creíble” de su espiche, y propagan la elucubrada idea académica de: “Los pueblos y comunidades indígenas no necesitamos del Estado”. “Las comunidades indígenas somos de origen milenario, y superiores al Estado”, por tanto “no estamos de acuerdo con ninguna propuesta de construcción o refundación del Estado, mucho menos de Estados Plurinacionales, porque no es nuestra idea”. “Esas ideas de refundación o fundación del Estado Plurinacional son intromisiones de ideas de gobiernos corruptos de Bolivia y de Ecuador”, suelen repetir.

Y, para afinar el ataque a los incómodos gobiernos progresistas propagan falacias como: “Evo Morales es un gobierno corrupto y dictador”. “Los gobiernos progresistas mataron a los movimientos sociales y son enemigos de las comunidades organizadas” “En los gobiernos progresistas no hay, ni libertad de organización, ni libertad de opinión” “Los gobiernos progresistas son malos ejemplos que debemos evitar”…

Así azuzan a sus lectores y auditorios desde testeras académicas internacionales integradas por indigenistas también becados o consultores provenientes incluso de los países de gobiernos progresistas.

Caso patético es lo que ocurre con muchos estudiantes y ex estudiantes del doctorado que dirige la Sra. Raquel Gutiérrez (ex pareja sentimental del actual Vicepresidente de Bolivia, Álvaro García Linera) que hipnotizó a muchos indigenistas con su investigación sobre “entramados comunitarios autogestionarios en Bolivia”. Así resurgieron las y los comunalistas que ahora ven idílicas e intangibles “tramas comunales” por todas partes de Latinoamérica indígena.

“Teorización” idílica de la comunalidad indígena como recurso para desactivar cualquier intento de construcción genuina de estados soberanos.

A las anteriores consignas, se suma el slogan de: “Las comunidades indígenas fuimos y seremos esencialmente comunidades armoniosas autogestionarias. No necesitamos de ninguna estructura estatal o supra estatal”.

Estas son, aunque el lector no lo crea, algunas conclusiones de tesis doctorales que hacen feeling con las nuevas prioridades financieras de la cooperación y con algunas tácticas de las corporaciones transnacionales toreadas por gobiernos progresistas y/o resistencias locales.

Al capital del sistema-mundo-occidental le conviene la comunalización atomizada de los incómodos indígenas que viven en áreas de su interés geográfico. Mucho más si éstas son “apolíticas”.

A muchos dirigentes indígenas les motiva que los presenten y paseen en eventos internacionales como representes de “de la idílica reserva social, moral y ecológica” de la humanidad. Aunque en los hechos, ellos y nosotros, sabemos que los indígenas no somos ni dioses, ni demonios, sino sólo humanos. Humanos con huellas ecológicas, y también configurados por el capitalismo colonial que nos habita aún. Eso sí, con sueños por mundos mejores, en muchos casos.

Pero, esos sueños de mundos nuevos (Sumaj Kawsay, decimos en quechua) se construyen peldaño a peldaño con procesos de organización, concientización, movilización y construcción de nuevas relaciones de poder. De abajo hacia arriba.

Los folclorismos “apolíticos” o “antiestatales” de las comunalidades o de las nostálgicas identidades del “buen salvaje”, son idealizaciones socioantropológicos con fines de perpetuar la permanente colonización de los pueblos y sus territorios.

No podemos decir que defendemos el agua o la vida en la comunidad, y al mismo tiempo promover la despolitización o antiestatalidad en las comunidades. Esto no es lo que exactamente plantean John Holloway, Boaventura de Sousa o José Carlos Mariátegui. Hará bien releer las persuasiones que, en el pasado siglo, hiciera Guillermo Bonfil Batalla a los indigenistas.

La Vida y el sistema tierra están en riesgo. No hay tiempo para utilizar como escalera “novedosas” modas literarias para el seelfie o sólo para “subir”, luego patear la escalera, y así evitar que el resto de indígenas también “suban”, porque no hay “huesos”, ni espacio, para todos en el banquete neoliberal.

Fuente: http://www.rebelion.org/noticia.php?id=223182

Comparte este contenido:

Aniversarios patrios

Por: Roberto Rodríguez

Quizá porque el culto a los símbolos de la nación ha caído en desuso y ha dejado de formar parte de las estrategias de promoción del Estado y de las fuerzas que integran el tablero político del país. Tal vez porque el cúmulo de noticias sobre los problemas, riesgos y amenazas que enmarcan nuestra coyuntura ocupa el centro de la atención pública. O acaso porque la preocupación sobre el aprendizaje de matemáticas y ciencias se considera la prioridad de la educación básica. O por todo ello, el hecho es que en México los aniversarios importantes de nuestra trayectoria histórica están pasando más bien desapercibidos, con escasa atención pública, deslustrados, de bajo perfil.

Así ocurrió con el bicentenario de la Independencia, del que solo quedó la tristemente célebre Estela de Luz. El centenario del inicio de la gesta revolucionaria de 1910 fue todavía más deslucido, si ello es posible. ¿Qué decir del centenario de la Constitución de 1917? Se conmemoró con una edición facsimilar de la versión original, con algunos discursos en las cámaras y con varios eventos académicos.

Pero el acto principal, la celebración en el Teatro de la República de Querétaro, sede del debate del diecisiete, encabezada por el presidente de la República el 5 de febrero, fue omitido por un número significativo de invitados, entre ellos los coordinadores en el Senado del PRD y el PT, los coordinadores parlamentarios de la Cámara de Diputados representantes del PAN, PVEM, Morena, Nueva Alianza, MC y Encuentro Social. Tampoco fueron los gobernadores de Baja California, Coahuila, Chihuahua, Nuevo León, Quintana Roo y Zacatecas, ni los presidentes del PAN, PRD, MC, y Encuentro Social.

Esto viene a cuento porque este año se deberían conmemorar múltiples aniversarios de relevancia para la historia nacional. El principal, los 150 años de la restauración de la República. Luego de las victorias de las fuerzas republicanas en varios puntos del territorio nacional, de la aprehensión y fusilamiento de Maximiliano, y tras la toma de la Ciudad de México encabezada por Porfirio Díaz, Juárez consigue instalar, en julio de 1867, las bases del gobierno federal, liberal y republicano que, bajo la égida de Juárez y Porfirio Díaz, predominó en la segunda mitad del siglo XIX mexicano y hasta entrado el siglo XX.

También es el 150 aniversario de varias de las normas, instituciones y actos de gobierno que tuvieron lugar en el primer año de la República restaurada. En materia educativa es de resaltarse, en primer lugar, la expedición de la Ley orgánica de instrucción pública del Distrito Federal, publicada por decreto del 2 de diciembre de 1867. El ordenamiento plasmó la intención del gobierno de Juárez de dar unidad, estructura y enfoque al sistema educativo nacional. Esta ley fue producto del trabajo de la Comisión General de Estudios, establecida en septiembre de ese año, en la que participaron, entre otros ilustres personajes, Antonio Martínez de Castro, recién designado Ministro de Justicia e Instrucción Pública, los hermanos Díaz Covarrubias, el doctor Leopoldo Río de la Loza, Alfonso Herrera y Antonino Tagle. A la comisión se sumó Gabino Barreda, a quien se encargaría la tarea de reformar la enseñanza preparatoria en México.

Del trabajo de Barreda resultó la Escuela Nacional Preparatoria, cuyo proyecto fue aprobado al finalizar 1867 y por ello este año celebra su aniversario 150, aunque las clases se iniciaron al año siguiente. Barreda sería el primer director de la ENP y prolongaría su mandato por diez años, periodo en que fue posible implantar y ajustar un plan de estudios influido en lo esencial por la doctrina positivista.

La Biblioteca Nacional de México, bajo custodia de la UNAM, también celebra este año el mismo aniversario, en conmemoración al decreto suscrito por el presidente Juárez que asigna al proyecto el templo de San Agustín y ordena que el primer fondo de la Biblioteca se integre con los libros de la antigua Universidad de México, los del Colegio de Santos y con obras expropiadas en el marco de la desamortización de bienes eclesiásticos. Por cierto, el actual Instituto de Investigaciones Bibliográficas de la UNAM tiene contemplado realizar, en este año, exposiciones y actos de homenaje relacionados con el aniversario, y también se iniciará un proyecto importante: la creación del Centro de Preservación Documental, en Juriquilla, Querétaro, al cual se trasladará al menos un cuarenta por ciento de las colecciones de libros que ingresan por depósito legal. Los fondos históricos van a permanecer en el recinto de Ciudad Universitaria.

Aunque no estrictamente vinculado al relevo nacional republicano, pero tampoco ajeno a tal contexto, hace 150 años se fundó el Instituto Literario de Yucatán, antecedente directo de la actual Universidad Autónoma de Yucatán, la UADY. El instituto fue fundado bajo el auspicio del gobernador Manuel Cepeda Peraza, general del ejército juarista, en reemplazo del previo Colegio Civil Universitario (1862). El instituto integró, en un solo conjunto, las principales instituciones de enseñanza media y superior el estado: la Escuela Preparatoria, la Escuela Especial de Medicina, la de Cirugía y Farmacia, la Escuela Especial de Jurisprudencia y Notariado, así como la Escuela Normal de Profesores (Wikipedia, entrada Instituto Literario de Yucatán), y sería el paradigma regional de una institución laica, pública, e integral de la educación superior y los inicios de la investigación científica y humanística del estado. Duró hasta 1922 en que fue reemplazado por la Universidad Nacional del Sureste, paso previo de la Universidad de Yucatán.

Fuente: http://www.educacionfutura.org/aniversarios-patrios/

Comparte este contenido:

Años de educación y aún no sabemos amarnos a nosotros mismos

Valeria Sabater

Suspenso. No apto. Hiperactivo. Baja motivación. Desafiante. Son muchas, muchísimas las etiquetas que reciben los niños a lo largo de su educación escolar y muy pocas las miradas que se detienen a comprender qué emoción se esconde detrás de cada alumno difícil.

Resulta curioso cómo desde desde escenarios como la empresa o la política se valora ya a la Inteligencia Emocional como algo imprescindible y vertebrador para todo profesional, mientras que las Instituciones Educativas, cojas en este aspecto, no contemplan la Inteligencia Emocional como una competencia a potenciar.

El peso de las competencias cognitivas siguen siendo algo esencial para el sistema académico. Las emociones, por su parte, se ven como ese aspecto “tabú” que es mejor restringir al ámbito privado, a la soledad de cada niño en su delicado intento por conocerse a sí mismo en un mundo cada vez más complejo.

Una educación que forma mentes pero no personas

Los niños y adolescentes de ahora son hábiles estrategas en las nuevas tecnologías. Los emoticonos en sus mensajes de texto son muchas veces su único acercamiento al mundo de las emociones. Pero, cuando se alejan de los dispositivos móviles, son incapaces de gestionar o prevenir situaciones como por ejemplo, el bullying.

Begoña Ibarrola, psicóloga e investigadora, nos indica que en aquellos centros que han integrado la Inteligencia Emocional en las aulas y en el currículum escolar, las conductas de acoso han desaparecido y el rendimiento académico ha mejorado de forma notable. Resulta esperanzador, no hay duda.

La educación tiene como propósito formar personas que cambiarán el mundo el día de mañana: instruyamos entonces personas felices, aptas en alegría, diestras en el respeto y brillantes en esperanza.
Compartir

Si nos preguntamos ahora la razón por la cual no se da el paso a esta transformación tan necesaria en nuestra educación, hemos de detenernos en estos aspectos para reflexionar unos minutos:

  • El diseño curricular está determinado en muchos casos por una tendencia política que pauta el tipo de plan de estudio que considera más adecuado.
  • El peso de lo cognitivo sigue muy arraigado en nuestro sistema escolar a pesar de que teorías como “las inteligencias múltiples de Gardner”, nos hablan de la clara necesidad de trabajar la Inteligencia Emocional en los niños de forma temprana.

Hemos de tener en cuenta, además, que todo cambio a nivel institucional requiere tiempo. Se necesita de una clara concienciación social, porque invertir en emociones es invertir en convivencia, es aprender a ser más aptos en relaciones humanas, en respeto y en ese cambio de enfoque donde se deje a un lado la necesidad de educar niños perfectos para formar personas felices.

Eduquemos niños únicos, no alumnos iguales

En una sociedad cambiante como la actual y con una altísima competencia profesional, no nos sirve de mucho formar alumnos iguales, especialistas en las mismas materias. Es necesario primar el valor humano, el potenciar las capacidades naturales del niño para que por sí mismo descubra qué es lo mejor de él y lo ofrezca al mundo para que “sea único”.

Un aspecto a tener en cuenta es que muchas veces dejamos caer sobre las instituciones académicas todo el peso de la educación de un niño. Es un enfoque equivocado: todos somos agentes educadores, siendo la familia ese escenario esencial e idóneo que hemos de tener muy en cuenta.

La familia, primer escenario en Inteligencia Emocional

Desde el ámbito de las neurociencias nos lo dejan bien claro: el contexto emocional y facilitador en el que crezca un niño en sus primeros años de vida, determinará en buena parte su desarrollo posterior e incluso su personalidad.

  • El reconocimiento, la reciprocidad el apego seguro y la comunicación emocional son hilos de equilibrio que permitirán al niño crecer en libertad y madurez.
  • Si deseas dar al mundo un niño capaz de respetar a los demás, de escuchar y de usar el afecto por encima de la agresión, sirve de modelo. Cuida de tus palabras, de tus juicios y tus acciones, sé el mejor ejemplo.

La escuela, un microcosmos del escenario social

La escuela será para el niño un claro ejemplo de ese mundo al que habrá de enfrentarse el día de mañana. Las relaciones con sus iguales y con las figuras de autoridad (los maestros y profesores) le servirán para adquirir nuevas e importantes competencias.

  • En los centros donde se aplican ya hábitos y herramientas emocionalmente saludables, nos demuestran que los niños son muy receptivos a este tipo de conocimientos.
  • Los integran en el día a día porque ven que les funciona, que son estrategias útiles con las que mejorar sus relaciones y ser más asertivos a la hora de prevenir agresiones o entablar amistades.
  • La Inteligencia Emocional se convierte en un hábito capaz de optimizar su forma de aprender, de canalizar la ansiedad o los nervios. Todo ello propicia que sus resultados académicos sean mejores y de que su personalidad, sea mucho más segura. Un dato realmente alentador.
Educar es aprender a dejar huella en el corazón de los niños
Fuente del articulo: https://lamenteesmaravillosa.com/anos-de-educacion-y-aun-no-sabemos-amarnos-a-nosotros-mismos/
Fuente de la imagen: https://lamenteesmaravillosa.com/wp-content/uploads/2016/02/niña-con-luz-del-universo-en-las-manos.jpg
Comparte este contenido:

El eurocentrismo de Slavoj Zizek

Atawallpa Oviedo Freire

“La sociedad humana misma advierte a la periferia como el centro de acción, porque ahí existe la conectividad de las cosas, que han sido aisladas de manera sublimada por las culturas predominantes”. Jaime Vargas Condori.  

El intelectual marxista de origen sloveno Slavoj Zizek, en su artículo “PIENSA LOCAL, ¡ACTÚA GLOBAL!” señala lo siguiente, y que es lo medular en la fundamentación de su discurso, como asimismo para darle título a su artículo: “En los años 60, el eslogan del incipiente movimiento ecologista era ¡Piensa global, actúa local!. Trump promete hacer exactamente lo contrario: Piensa local, actúa global.” [1]

Cuando surgió este axioma: “piensa global, actúa local” por un grupo de ecologistas de origen europeo, fue cuestionado y rechazado por otros ecologistas e intelectuales, principalmente de Sudamérica, que veían el carácter eurocéntrico y hegemónico de aquel principio, pues el “piensa global” significaba que había un solo pensamiento en el mundo o de que todos debían llegar a pensar de una sola manera. Evidentemente, el pensamiento global o “pensamiento único” que debía ser incorporado y asimilado por resto de la humanidad, era el de los autodenominados: primer mundo, desarrollados, civilizados, europeos, occidentales; ya que todos los demás eran tercermundistas, subdesarrollados, atrasados, primitivos, inferiores. En definitiva, dicha frase representaba una clara expresión homogeneizadora, monocultural, antropocéntrica, totalitaria.

Este cuestionamiento llevó a pensar por cierta intelectualidad que más bien podría ser al revés: “piensa local, actúa globalmente”. El “piensa local” significaba que en el mundo habían varias formas de concebir la vida y de vivirla, de que había que partir de la realidad cultural de cada pueblo, de que los procesos eran milenarios y diferentes en cada región del planeta. El “piensa local” no podía quedarse en un individualismo o un encerramiento para “actuar localmente”, sino que tenía que haber un “actuar globalmente”. Ese era, acompañar o apoyar otros procesos en otros lugares de fuera de lo local. Pensar desde su cultura o proceso histórico, pero estableciendo relaciones con todos los pueblos en el mundo, en la conciencia de que estamos en un solo mundo.

Pero, para las racionalidades de las “naciones primeras” además no se trataba de un “pensar individual” en cualquiera de las formas descritas anteriormente, sino de un “pensar colectivo” pues nadie piensa ni existe por sí mismo sino a partir del otro, en la conciencia de que en la interrelación o en el compartir se descubre a sí mismo y descubre a los demás. Pero este “pensar colectivo” no se circunscribe al “ser humanidad” sino al “ser natural” integral, el cual no solo es la materialidad sino la espiritualidad que extraña. Por tanto, no solo es un pensar sino un sentir, los cuales no están separados sino que están conectados en un “senti-pensar” o un “pensi-siento”.

No solo el ser humano “piensisiente” sino que en la vida todo es conciencia, habiendo tipos y dimensiones de la conciencia de acuerdo a la posición geográfica y a la altitud de cada región. Esta condición determina los procesos de cada sistema de vida en su relación con ese espacio o ambiente particular, pero no solo con el mundo de abajo-tierra sino con las fuerzas de arriba-estrellas. En lenguaje académico: al humano integral no le interesa solo el texto sino el contexto y el subtexto. Por lo que no hay separación o exclusión entre el pensar-actuar y lo local-global, sino un conjunto integrado y armónico.

Siendo justamente éste el conflicto de Zizek y del occidente en general, de que dichos conceptos o principios siguen guardando una separación entre el pensar y el actuar, entre lo local y lo global, entre lo individual y colectivo, entre el pensar y el sentir, etc. Terminan siendo expresiones dualistas, por ende, eurocéntricas, ya que siguen la misma lógica cartesiana del “pienso luego existo” o “existo luego pienso”. Es decir, son parte y prolongación de la misma visión dicotómica de lo que representa occidente o de cómo surgió la civilización, ya que antes de ello no existía esta concepción de exclusión en ninguna parte del mundo. Lo que nos da cuenta, que además hay un “pensar de inclusión” y un “pensar de exclusión”.

En la historia mundial, solo lo que dio en llamarse “civilización occidental” procedió a dividir y especializar a la vida, a la naturaleza, a lo sagrado, a la “realidad”; pues antes de ello todos los pueblos del planeta la veían complementariamente. Concebían la existencia de la diferencia y de la oposición, pero no de la fragmentación ni de la separación, en la medida de que entendían que todo estaba interrelacionado y de que todos dependían uno del otro. Siendo esta la divergencia fundamental, que marca la distancia y la ruptura entre el “pensamiento occidental” y el “pensisiento no-occidental”. Y a partir de ello dos sistema-mundos totalmente diferentes y excluyentes uno del otro.

El “pensamiento de exclusión” es el generador y el responsable de la actual situación de caos ambiental y global. El desajuste a los ecosistemas y su desequilibrio, la ha originado una manera de ser y de existir. La manera de concebir a la naturaleza y su relación con ella, es la que ha provocado el cambio climático y todas sus secuelas. La cosificación y mercantilización de la naturaleza, es el mayor acto de destrucción ambiental -por ende humana- llevado a cabo por el occidentocentrismo. Caos que en nuestros días ha llegado al clímax, con la posibilidad progresiva de que seamos la generación que vea la desaparición de la especie humana o una buena parte de ella, si es que no se cambia a tiempo con este pensamiento “contranatura” y se retoma el sentido de vivir en el “continuo de la natura” o “continatura”. Ese el dilema de la humanidad actual.

En este sentido, cuando Zizek utiliza estas analogías como fuente argumentativa de su discurso y de cómo las relaciona con Trump, deja ver otra parte de su euro-occidentocentrismo. Así, en dicho artículo habla de América, pero América es solo EEUU. No existimos los latinoamericanos y los indoamericanos. Los EEUU se apropiaron de todo, hasta del nombre América y hay quienes la validan y la reconocen como tal. En la práctica, para cierto “pensar globalmente” los centro y sudamericanos seguimos siendo el “patio trasero” de EEUU. Referirse a los estadounidenses como americanos, es una manera muy eurocéntrica de expresarse, con todo lo que ello implica o envuelve. Pero además significa que él acepta y reconoce al pensamiento europeo como el centro de todo y que las demás racionalidades o “pensisientos” son periféricos, es decir, menores. Zizek es crítico de la dicotomía centro/periferia, pero como su mentalidad es eurocéntrica no se interesa por conocer a cabalidad el pensamiento de la alteridad y peor de experimentarla en un ser. Sigue en la lógica de externalidad del fenómeno de estudio o de objeto de conocimiento. No sabe lo que es la relación sujeto-sujeto (inclusión) y solo conoce la de sujeto/objeto (exclusión).

En el fondo, él y toda la intelectualidad siguen “pensando” y “actuando” centradamente, es decir, eurocéntricamente. La periferia es básicamente un discurso para cuestionar la centralidad de los países ricos y de la derecha occidental sobre los países pobres y la izquierda, pero no para cuestionar verdaderamente el centrismo de todo occidente sobre el resto del mundo. Y esto se debe, a que no se cuestiona al dualismo centro/periferia desde el “pensisiento” o conciencia de “afuera” o de los “otros”, sino desde el mismo pensamiento de “adentro”. Y eso también es eurocentrismo. Algo muy típico en la izquierda y en los marxistas. Dicen que luchan por los olvidados, los ninguneados, los indios, los colonizados, pero lo hacen desde un pensamiento externo a ellos. Los “otros” son objeto de conocimiento analizados desde la externalidad y desde la lógica del pensamiento de exclusión o dialéctico.

El objetivo de las izquierdas es construir el socialismo y luego el comunismo en todo el mundo. Teorías éstas, provenientes o construidas en Europa. No les interesa que los “otros” continúen o profundicen en sus procesos milenarios y autónomos. Por el contrario, deben olvidarlos y lanzarse a hacer realidad las teorías y los experimentos de la “clase más avanzada” y del “pensamiento más adelantado”. O, como quizás diría Zizek: “seguid nuestro sueño de izquierda”.

Por ello, todo se desenvuelve en la dialéctica eurocéntrica: derecha / izquierda, capitalismo / socialismo, liberalismo / marxismo, idealismo / materialismo, episteme / doxa, etc. Debiendo todos inscribirse en esas categorías, y si alguien se sale de ellas -las izquierdas apuntan con el dedo y dicen-: “en el fondo es un derechista” o alguien que le “hace juego a la derecha”. Y luego gritan como machos alfa: “patria o muerte”, mientras en la alteridad se respira “matria y vida”. El eurocentrismo se dedica a orar a su “Cristo muerto en la cruz”, a su “Dios ha muerto”, a la “filosofía a muerto”, al “fin de la historia”, etc.; mientras en otros lares se dedican a la fiesta, el ritual, la ensoñación, el homenaje a la vida. Lo cual nos da dos mundos: uno vital y otro necrológico, uno animista y otro escatológico. Una cultura de la vida y una civilización para la muerte.

No pueden ver más allá, de ahí su miopía y anorexia. Y quién no responde a esta lógica eurocéntrica es simplemente: atrasado, extremista, fundamentalista, o un retro-revolucionario que quiere regresar al pasado, que no quiere desarrollarse y evolucionar. Típica forma para desvalorizar y minimizar a quienes piensan diferente al “pensamiento único” o “global”, de izquierda o de derecha. El dualismo, la dicotomía, la diastasis, la bifurcación, la dialéctica, etc., son para el eurocentrismo las únicas teorías sociales válidas de análisis y de síntesis. La “ley de la competencia” y de los “antagonismos sociales”, son las únicas fuerzas y motores que permiten el progreso y el crecimiento de la humanidad, o del “mundo civilizado” en palabras de Zizek. En suma, solo “la lucha de contrarios” hace posible la vida y su evolución permanente. Y todo lo que salga de ese molde, no es: académico, científico, serio, objetivo, verdadero.

En general, no conocen o entienden qué es la “armonía de contrarios”. No pueden ver que la civilización u occidente surge como substitución o reemplazo de este milenario y mundial principio, por el de “lucha de contrarios”. Siendo esta la base ontológica del sistema-mundo civilizatorio que en su cúspide de la modernidad gobierna a todos y hace que todo funcione en esa proyección: guerras, conflictos, sufrimientos, enfermedades, sequías, etc.

El objetivo de la derecha es someter o superponerse al “otro” o “menor” o “inferior”, y de la izquierda el de liberarlos o emanciparlos a partir de someter o dominar a los de arriba o explotadores. En la lucha capitalista los de abajo deben sostener a los de arriba, unos son los que dirigen y otros son los trabajadores. En la lucha socialista, los de abajo deben pasar arriba y éstos deben ser desplazados hacia abajo. Es lo que llaman la “democracia liberal” y la “dictadura del proletariado” –respectivamente-, pero que a la final son dos maneras de sometimiento o exclusión. Es decir, el sometimiento de unos contra otros, como práctica indefinida de vida. Aunque Marx soñaba que un día los sometedores proletarios convencerían a los sometidos burgueses de terminar con el Estado, el partido único, y la democracia. Es decir, cuando todos se volverían comunistas y con ello se terminaría para siempre la “lucha de clases”. Amén.

Por tanto, nos parece equivocado el señalamiento de Zizek de que Trump “piensa local y actúa globalmente”. Trump es super occidentocéntrico, piensa globalmente y actúa globalmente. Piensa que EEUU debe dirigir el mundo, que debe seguir mandado a todos, y de que no debe permitirse que sea desplazado como primera potencia mundial por la China u otro.

Un antiinmigrante y racista como Trump, quiere que en el mundo solo hayan “blancos”. Desprecia profundamente a los negros, hispanos, árabes, indios, chinos, y todo cuanto represente lo “no-blanco”. Trump piensa desde su ego y actúa en la búsqueda de un mundo a su medida. En este sentido, utilizar una frase nacida y cuestionada en un contexto para reproducirla en otro, es más de lo mismo y no una ruptura con la dicotomía cartesiana. Mucho más, al no tomar en cuenta la racionalidad de la alteridad o conciencia de la otredad. A los eurocéntricos, les interesa muy poco “descubrir” y “aprender” de los “otros” de los “diferentes”, pues están convencidos que la alteridad es la izquierda. Por eso Zizek llega a decir en el referido artículo: “La gran ironía es que los izquierdistas que durante tanto tiempo criticaron a Rusia Unida por sus pretensiones de convertirse en el policía global podrían acabar añorando los viejos tiempos en los que, con toda la hipocresía que conllevaba, Estados Unidos imponía valores democráticos al resto del mundo.”

Como básicamente conoce Europa y “América” (EEUU), y solo tiene ciertas referencias de los demás pueblos no-occidentales, Zizek también “piensa globalmente y actúa globalmente”. De ahí, su “obligado” apoyo que ofreció a Hillary, ya que para él “América” es el timón del mundo y lo que pase entre republicanos y demócratas es lo que marca el destino de la humanidad. Los occidentales son el centro y ellos marcan el destino de todos, hasta del planeta mismo y muy pronto del cosmos. Los demás países de fuera de occidente son la periferia de la periferia, los cuales tienen como misión el seguir a la derecha o izquierda si quieren salir de esa condición. Deben dejar de ser la alteridad para pasar a ser izquierdas liberales o marxistas. Puro eurocentrismo.

Aunque esto para él es una crítica absurda: “El eurocentrismo se ha acabado, estoy harto de que ante cualquier cosa que pase, Europa tenga la culpa”. [2] Zizek no entiende que la inmigración de ahora y de ayer, de que los ataques que sufren por parte de los fundamentalistas…, son el bumerán de lo que ellos hicieron cuando colonizaron el mundo. Los pobres y los extremistas de fuera de occidente, han llegado a ello o son consecuencia del proyecto occidentalocentrista o la globalización. Si ellos no hubieran colonizado el mundo, habría alguien que quiera salir de esa situación? Si ahora los chinos están colonizando el mundo, los occidentales no están temerosos de perder su majestad de potencias? Si los chinos someten a los occidentales, no se despertarán las ansias de descolonización y les regresará el bumerán a los chinos?

Es cierto, el capitalismo se ha vuelto global, pero el nacionalismo, el culturalismo y el centrismo también. Pero el problema no solo es del capital y/o del nacionalismo-culturalismo-centrismo, sino principalmente de una manera de concebir la “realidad”, entre los que han roto con las leyes naturales a través de su pensar global, totalitario, absolutista; y los que guardan respeto y comunión a través de la armonía y el equilibrio complementario. Resolviéndose esto, se resuelve todo lo demás. Y no al revés como cree el eurocentrismo y/o antropocentrismo de derecha e izquierda.


[1] https://lalineadefuego.info/2017/02/09/piensa-local-actua-global-por-slavoj-zizek/
[2] Slavoj Zizek critica la “falsa empatía” por los refugiados

Fuente del articulo: http://www.rebelion.org/noticia.php?id=223356

Fuente de la imagen: http://www.6yka.com/img/s/724×420/upload/images/0000000000000 avgust 2015/slavoj-zizek-livros.jgp

Comparte este contenido:
Page 1988 of 2663
1 1.986 1.987 1.988 1.989 1.990 2.663