¿De qué sirve enseñar si no hay aprendizaje?

La calidad educativa es tal cuando se evidencia en más y mejores aprendizajes. Venimos advirtiendo un profundo desencuentro entre enseñanza, aprendizaje y evaluación, los que debieran formar un sistema articulado. Aún el interés primordial de la gestión educativa continúa centrándose en qué y cuánto enseñar en el poco tiempo disponible, y no precisamente en cuánto se comprende, asimila y aprende con significado y utilidad para la vida. Aquí reside el corazón e importancia de la pregunta del título.

Esta precariedad mostrada por el estudiantado en las investigaciones realizadas, se aprecia en múltiples ámbitos: gran debilidad en la formación docente y los métodos tradicionales que utilizan; debilidades notables de niños y jóvenes en fluidez y comprensión lectora; ausencia de capacidad de análisis, razonamiento y juicio crítico; pobre verbalización mecánica de conocimientos; bajísimos resultados de bachilleres en las pruebas de ingreso a la universidad, realizadas; resultados deficitarios en lectura, matemáticas y ciencias naturales del alumnado de 3º y 6º grados en las Pruebas Serce y Terce del Laboratorio de Calidad de la Educación (Unesco); graves incorrecciones en lenguaje y escritura; incapacidad de bachilleres para escribir correctamente una carta solicitando trabajo, y otras más.

Es imposible en este artículo plantear todas las causas que se articulan y refuerzan mutuamente, para producir este profundo desencuentro entre lo que se enseña y se aprende. Son de distinto tipo, unas estratégicas, de fondo, otras organizativas y metodológicas.

La concepción que dirige la Educación y el Currículum: preside una concepción efectivista, superficial, simplista, partidaria e ingenua de la educación; el currículum se centra en conocimientos desactualizados y desconectados de la realidad del país; omite el desarrollo práctico de capacidades de pensamiento analítico, lógico y crítico; las disciplinas se presentan separadas entre sí, de espaldas a una realidad interdisciplinaria, induciendo una enseñanza-aprendizaje fracturada y desconectada. Un currículum en competencias que debieran integrar distintos niveles de conocimientos -declarativos, prácticos y axiológicos-, pero que, en la práctica se enseñan como objetivos, separando entre sí estos tres niveles.

Las políticas educativas, entre las que se encuentra “Una mejor Educación”, son intenciones desconocidas por el magisterio, que no se operativizan al nivel metodológico práctico del aula.

La formación docente es eminentemente instrumental, alejada del consenso teórico que aporta una visión reflexivo-crítica sobre la práctica; no se cuenta con un Plan Nacional de Formación Docente; los eventos formativos son circunstanciales, masivos, retóricos, nada prácticos, dominados por un discurso partidario; la formación impartida por escuelas normales y facultades de educación es más teórica que práctica, disciplinatoria, no reflexivo-crítica sobre la práctica, que descuida la creatividad, iniciativa, autonomía e innovación; desvinculada de los contextos complejos nacionales y sin acceso a formación posgraduada gratuita; con enormes brechas de acceso tecnológico para mejorar la enseñanza. Un diagnóstico de la Comisión Nacional del Sistema de Formación Docente del Mined que coordinamos (2008-2009), mostró gran cantidad de capacitaciones recibidas por cada docente, sin incidencia en mejorar la enseñanza.

El Plan de Educación 2018-2022 no responde a un trabajo colectivo del Mined, refleja una realidad educativa poco real, con estrategias de buenas intenciones, sin asidero práctico en la realidad escolar; no focaliza el aprendizaje y sus propuestas se refieren a más de la misma formación y metodología con uso de la tecnología.

Organización y fondo de tiempo escolar: las investigaciones realizadas evidencian  reducción del tiempo escolar normado. El año escolar concluye con numerosas pérdidas de clases, fenómeno ya normalizado. Esto afecta severamente el aprendizaje, sumado a la baja calidad de las sesiones de clase. La mitad del tiempo se invierte en control, organización, orientaciones, disciplinamiento, restando tiempo a lo principal, como presentar y trabajar situaciones de aprendizaje, llenando contenidos programáticos sin atender al aprendizaje. Actúan múltiples distractores: actividades extracurriculares como eventos político-culturales, talleres docentes centrados en llenar contenidos, no en aprendizajes;  actividades de aprendizaje orientadas a la repetición que no desarrollan capacidades, sin comprensión, sentido ni significado; tampoco se enseñan al estudiantado estrategias para aprender. La planificación didáctica es recicladora, formal, no ajustada, descontextualizada, sin ningún control ni asesoría de directores sumidos en otras tareas. Asesores pedagógicos de las delegaciones que incumplen sus funciones por “falta de recursos”. Tal escenario pareciera diseñado para desmotivar al estudiantado.

El siguiente artículo se centrará en Métodos y Estrategias de Enseñanza-Aprendizaje-Evaluación, enfocados al aprendizaje.

Fuente: https://www.elnuevodiario.com.ni/opinion/456518-que-sirve-ensenar-si-no-hay-aprendizaje/

Comparte este contenido:

Una educación que refuerce la capacidad crítica ante los medios y enseñe a explotar las TIC.

Por: Web del Maestro CMF. 19/05/2017

El filósofo, ensayista y pedagogo José Antonio Marina ha defendido este martes la necesidad de que el sistema educativo fortalezca la capacidad crítica de los individuos ante la información que difunden los medios de comunicación y enseñe a usar de forma adecuada las posibilidades que brindan los medios y las nuevas tecnologías de la información.

Esta ha sido la idea central de la conferencia que Marina ha pronunciado esta mañana en el Consejo Audiovisual de Andalucía (CAA), dentro del ciclo Diálogos en el CAA, titulada ‘La inteligencia que aprende’.

“Nuestra relación con la comunidad será siempre a través de mediadores, de intermediarios. El mediador nos puede estar engañando en su versión que nos está dando de la realidad y tenemos que ser conscientes de esta posibilidad”, ha señalado el experto. Por eso, según un comunicado, ha defendido que la educación se dirija a que las personas sepan tomar decisiones respecto de la información que reciben y sepan utilizarla. “Convertir la inteligencia en talento”, ha recalcado.

“Una cosa es la realidad, y otra, la imagen de la realidad que recibimos a través de canales muy amplios”, ha insistido Marina, que ha recomendado la adopción de un “escepticismo lúcido” como actitud ante los medios. Al hilo de las nuevas tecnologías y las redes sociales, considera que existe “una especie de glorificación de la opinión de cada uno”. “Nos parece que eso es muy democrático”, ha añadido. En este sentido, ha llamado la atención sobre la tendencia detectada en los últimos tiempos que concibe la información como un consumo. “¿Qué pasaría si de repente una democracia se guiara por un ‘Trending Topic’?”, se ha preguntado.

Respecto al sistema educativo actual, el pedagogo ha señalado que se encuentra en un momento de ebullición en este momento, y ha apuntado a los primeros resultados que demuestran el fracaso de la estrategia elegida. “Un burro que sabe navegar por internet seguirá siendo un burro”, ha dicho. Así, ha citado datos de la OCDE, según los cuales, desde 2008 hasta 2014 ha habido más de 400 reformas educativas en casi todo el mundo con poco éxito. “Una persona, para sobrevivir, tiene que poder evolucionar al mismo tiempo que evoluciona su entorno”, ha dicho.

Durante el turno de preguntas, se le preguntó sobre el motivo de la ausencia de alfabetización mediática en el currículum educativo. Según Marina, esta materia, aunque ha de ser transversal, debe centrarse en la asignatura de Filosofía cuyo peso en el sistema educativo, ha lamentado, se han reducido de acuerdo a lo decidido desde las autoridades europeas.

En este sentido, ha atribuido a la ignorancia y a la pereza “casi todas las cosas que se hacen mal en educación”. “¿Quién hace los currículums de Primaria y Secundaria, que es donde se define qué es importante y qué no? No tenemos claro muy bien quién lo tiene que hacer: ¿los políticos?, no lo saben. ¿Los científicos? no lo saben; los padres, tampoco; los empresarios, tampoco. ¿Entonces quién?”, se ha preguntado el experto en pedagogía.

Por ello, ha reivindicado “un tipo de saber”, una ciencia del aprendizaje, de la educación, que sobrevuele por encima de todas estas cuestiones y que señale qué es lo que nos conviene en cada momento.

Finalmente, ha defendido el derecho de todo niño, durante su etapa escolar, a tener la experiencia de éxito merecido, de ser consciente de su progreso. “La educación, el sistema educativo, activa la inteligencia de las personas”, ha finalizado.

Jose Antonio Marina, creador del Centro de Investigación Educativa Universidad de Padres, ha centrado sus investigaciones en el estudio de la inteligencia y en especial de los mecanismos de la creatividad artística –con especial énfasis en el área del lenguaje--, científica, tecnológica y económica.

Diálogos en el CAA es un foro periódico para la reflexión y el intercambio de ideas puesto en marcha por el Consejo Audiovisual de Andalucía para abordar y tratar de responder a las demandas de los diferentes agentes que integran el sector de la comunicación audiovisual.

Fuente: http://webdelmaestrocmf.com/portal/jose-antonio-marina-defiende-una-educacion-que-refuerce-la-capacidad-critica-ante-los-medios-y-ensene-a-explotar-las-tic/

Fotografía: web del maestro cmf

Comparte este contenido:

Entrevista a Salvador Alva: “La educación convencional fracasó porque mató el espíritu crítico”

04 Diciembre 2016/Fuente: El espectador/Autor:Juan Miguel Hernández Bonilla

Lo dice Salvador Alva, presidente del Sistema Tecnológico de Monterrey, cuando hace referencia a la necesidad de implementar nuevos modelos de aprendizaje que enseñen a pensar y no a obedecer. En entrevista con El Espectador, Alva habló de su pasado como uno de los empresarios más exitosos e influyentes de la región y de la formación de líderes capacitados para cambiar el mundo

Salvador Alva nunca usa corbata. Desde hace 5 años, cuando llegó a dirigir el Sistema Tecnológico de Monterrey, una comunidad educativa que reúne cuatro universidades y agrupa más de 500.000 personas, ha transgredido todos los límites de la etiqueta. En su modelo de liderazgo no caben ni los códigos, ni los protocolos, ni las convenciones. Prefiere la espontaneidad y la irreverencia. Su idea de educación disruptiva ha ido transformando los contenidos y las metodologías de la enseñanza tradicional y ha logrado posicionar al Tecnológico de Monterrey como una de las 100 mejores universidades del mundo, la sexta en el continente y la primera escuela de negocios de México.

En el marco del festival más grande de emprendimiento de América Latina, INCmty, que se realizó la semana pasada en el Tecnológico de Monterrey, Alva hizo referencia a su pasado como uno de los empresarios más exitosos e influyentes de la región, al fracaso del modelo de educación convencional, a la crisis de las instituciones y la formación de líderes capacitados para cambiar el mundo.

¿Qué estudió? 

Estudié ingeniería química en la Universidad Nacional Autónoma de México, UNAM. Cuando terminé la carrera prometí que no iba a trabajar para nadie, que iba a ser emprendedor. En ese momento, tenía una fábrica de bolitas para adornar árboles de navidad y un mini negocio de churros con chocolate.

Antes de llegar al TEC de Monterrey dirigió varias compañías privadas ¿Cómo fue ese proceso de transición?

Durante diez años trabajé en la cervecería Moctezuma. Viví un modelo de organización que no me gustaba. El enfoque era servir al jefe y no servir al cliente. Fue una empresa muy jerárquica, poco humana, me fui formando en lo que no quería ser. Al mismo tiempo, cuando tenía 23 años, conocí una persona e hice un plan de vida por escrito que me permitió reconocer mis prioridades y trabajar para conseguir mis metas. La ventaja que tenía sobre los demás es que nadie tiene un plan de vida, y yo sí. Cada paso que daba, cada palabra que decía, estaba en línea con ese plan de vida. Empecé a seguirlo al pie de la letra. Decidí que quería ser un líder con sentido social para poder influir y ayudar a la comunidad.

Entonces, ¿se retiró de la organización?

No, me dedique a transformarla, a ser líder, a estudiar el comportamiento humano. Me convertí en un individuo rebelde, en un agente de cambio. Siempre actuaba creyendo que yo era el director general, y a los 26 años ya era director general de un sector de la empresa, a los 26 años ya manejaba una división. Ahí me empecé a dar cuenta de que mi habilidad no era saber más que los demás sino ayudarlos a generar organizaciones más solidarias y más humanas. Finalmente, la empresa entró en una crisis y me ofrecieron un puesto alto en PepsiCo.

¿Cómo fue su experiencia en PepsiCo?

Empecé en ventas, a los pocos meses me tocó crear un negocio de dulces y golosinas en medio de una de las crisis económicas más severas que tuvo México. Hace 20 años llegué a Monterrey para dirigir la compañía de galletas líder del mercado y tuve que hacer una profunda transformación de valores. Me di cuenta de que si creas una organización muy humana, generas crecimiento y utilidades, y eso era lo que le importaba a los accionistas.

Y a usted ¿qué lo motivaba?

A mí me interesaba ver el clima laboral. Cómo estaba la gente, cómo estaban las familias, ese era mi sentido. Sin embargo, en mi plan de vida estaba muy claro que quería hacer proyectos sociales, escribir libros, transformar vidas. Cuando estaba listo para renunciar a mi cargo, cambiaron a mi jefe y me ofrecieron manejar el sector de alimentos en América Latina, lo acepte porque podía influir en 40.000 personas de muchos países del continente. Posteriormente, a los tres años, cuando ya quería dejar la organización, me ofrecieron manejar también el área de bebidas y me volví a quedar. Mi único aliciente para persistir era impactar más seres humanos.

¿Qué pasó? ¿porque se retiró?

Hace ocho años me salí de PepsiCo, revisé mi plan de vida y repetí la misma promesa que hice cuando termine la escuela: no voy a trabajar para nadie. Estuve tres años pensando y escribiendo. Hace cinco años, Lorenzo Zambrano, director general de Cemex y miembro de la junta directiva del TEC, me dijo que me iban a postular para dirigir el Instituto. De nuevo, acepte porque podía influir en la vida de miles de jóvenes estudiantes.

¿Cuál ha sido su modelo de liderazgo? ¿Qué valores privilegia?

Una organización, un país, una institución o un ser humano requieren de rumbo, escala de valores y sentido de vida. En el caso del Tecnológico de Monterrey los pilares son Innovación, visión global, trabajo en equipo, integridad y sentido humano. Vivimos en un capitalismo cruel y no queremos que los chicos estén en los negocios sin pensar en las necesidades de la sociedad. Queremos formar líderes con sentido social que transformen su entorno social.

¿Cómo lo están haciendo?

Tenemos universidad muy disruptiva. Creo que va a ser la primera universidad del planeta en la que el modelo esté basado en retos de aprendizaje y no en materias. Es un sistema que revoluciona en la forma y en el contenido. Por ejemplo, en cuanto a la forma cambiamos la adecuación, la arquitectura y el estilo de los salones. Antes eran lugares convencionales, pupitres en fila y el profesor al frente, en su escritorio. Ahora, cada salón es distinto, hay mesas redondas, asientos portátiles, de colores, con tableros móviles. Es el primer paso para romper las jerarquías e incentivar a los muchachos a que no estén de acuerdo, a que piensen por sí mismos, a que cuestionen la autoridad. La educación ha fracasado porque mató el espíritu crítico, el espíritu emprendedor. La sociedad te pone límites y tienes que romperlos, tienes que salirte del molde. Educar a un muchacho para libertad es mucho más difícil que educarlo para la obediencia, pero educarlo en la libertad es mucho más reconfortante.

¿Cuáles son los proyectos más innovadores del TEC de Monterrey?

La universidad está en la agenda de la economía del conocimiento. Queremos atraer a las mentes más brillantes del país, sin importar su nivel socioeconómico, y darles una educación totalmente diferente a la tradicional. Por eso creamos un programa de becas llamado “Líderes del mañana”. Nuestro objetivo es ir a las regiones pobres de México e identificar los talentos para poder convertirlos en agentes transformadores del futuro. Ahí están los Googles, los Facebook pero creados en México. Otra cosa fundamental es predicar con el ejemplo. Si nosotros vamos a ser una universidad diferente, transgresora, disruptiva más vale que nuestros espacios de trabajo lo demuestren, más vale que nos quitemos las corbatitas.

Fuente de la entrevista: http://www.elespectador.com/noticias/economia/educacion-convencional-fracaso-porque-mato-el-espiritu-articulo-668760

Fuente de la imagen:

 http://www.elespectador.com/files/imagecache/560_width_display/imagenprincipal/d0dab877cb02a1cb3d4cbcf2d8a45e63.jpg

Comparte este contenido:

Libro: Aprendizaje Abierto y Aprendizaje Flexible

Aprendizaje Abierto y Aprendizaje Flexible

  • Año:    2013
  • Editor:    ANEP
  • Páginas:    164 páginas
  • Idioma:    español
  • Desde:    15/04/2016
  • Tamaño:    6.13 MB
  • Licencia:    CC-BY-NC-ND

Sinopsis:La sociedad se ha transformado radicalmente en los últimos veinte años, y las tecnologías de la información y la comunicación han tenido mucho que ver con ello. Las dimensiones de espacio y tiempo, y los conceptos de comunicación e información se han modificado a tal punto que han impactado en el trabajo, las relaciones sociales y la vida cotidiana. Sin embargo, a la par que las tecnologías modificaron grandemente la vida de las sociedades, las relaciones laborales y hasta el poder, su incorporación produjo nuevas desigualdades sociales. Fundamentalmente desigualdad en las oportunidades de uso y aprovechamiento de estas tecnologías. Es lo que se ha denominado brecha digital en el doble aspecto de acceso y uso; no solo brecha tecnológica, sino –sobre todo– brecha del conocimiento.

El Plan CEIBAL en Uruguay se propuso superar esta desigualdad y en apenas seis años disminuyó la brecha de acceso de manera contundente. En la actualidad, los sectores de menores ingresos tienen casi las mismas posibilidades de acceder a una computadora que los sectores más ricos. Antes del año 2007, la distancia era de 1 a 11, ahora es de 9 a 11. Es claro que esto no significa haber resuelto la brecha digital concebida integralmente (acceso, uso, aprovechamiento), pero es el punto de partida indispensable.

Para descargar: https://openlibra.com/es/book/download/aprendizaje-abierto-y-aprendizaje-flexible

Fuente de la reseña: https://openlibra.com/es/book/aprendizaje-abierto-y-aprendizaje-flexible

Fuente de la imagen: https://olcovers2.blob.core.windows.net/coverswp/2016/04/aprendizaje-abierto-OpenLibra-300×437.png

Comparte este contenido:

Eduquemos para la comprensión

Rafael Lucio Gil

Cuando la acción educativa atraviesa todas las fibras de la comprensión, se convierte en una acción, no solo de completación de la persona que es educada, sino también de quien educa, pero sobre todo, es fuente de autonomía, pensamiento crítico y libertad.

De esta manera, la educación como un derecho natural se convierte en la mejor razón para crecer en capacidades, comprensión de la realidad, y actuación libre y soberana. Se logra, de esta manera, el desarrollo de la autenticidad de la persona, de sus capacidades de pensar y decidir con libertad, de tomar opciones y decisiones, desarrollando no solo sus capacidades cognitivas, sino también las metacognitivas y autorreguladoras, estrategias superiores de aprendizaje.

Una educación que se centra en la comprensión, respeta profundamente a la persona, le proporciona oportunidades de aprendizaje que estimulen al máximo sus sentidos y capacidades cognitivas, le reta al análisis, la confrontación y argumentación de ideas, contribuyendo al compromiso social y ciudadano efectivo con la verdad, la honestidad y la transparencia.

Educar la comprensión demanda de una enseñanza inicial capaz de contribuir a que niños y niñas aprendan con fluidez a leer y a comprender reflexionando críticamente sobre lo que leen. Cuando esta capacidad se retrasa o no se logra, como suele ocurrir en gran cantidad de niños y niñas que pasan de grado, llegan a la secundaria y después a la universidad sin leer con fluidez ni comprensión, todas sus aspiraciones como personas acaban por frustrarse.

Tales limitaciones operan como la peor cara de la pobreza, obstruyendo toda posibilidad de formación profesional de calidad e integralidad.

Esta matriz profundamente obstaculizadora, continúa poniendo en grave riesgo la posibilidad de que el país logre un desarrollo humano realmente inclusivo, afectando severamente los diferentes componentes de la cultura, y profundizando la distancia entre quienes tienen las mejores oportunidades educativas, y quienes reciben educación en pobreza, pobre para los pobres.

La falta de comprensión limita entender su propia existencia. La educación no prepara ni ayuda a comprenderse a sí mismo. Viven los educandos a merced de lo eventual, pasajero, coyuntural; evitan reflexionar sobre su vida, su futuro. Sin educarse en adoptar metas propias, los adolescentes crecen sin futuro, sin saber optar ni tomar decisiones. Cuando esto sucede, es porque la educación que reciben promueve superficialidad, mediocridad, dependencia e imposibilidad de discernir ni emitir sus propios argumentos.

Si no se educa la comprensión se impide el aprendizaje de la reflexión, la introspección; se vive superficialidad, mediocridad, acción sin compromiso certero, atavismo de la inmediatez, interés por lo superfluo, pérdida de significado, actuación sin prever responsabilidades por consecuencias, ceguera ante la profesión y la vida.

La falta de educación para la comprensión imprime a las vidas jóvenes anomia frente a las urgencias del pensamiento crítico, la toma de decisiones conscientes; de aprender a pensar, argüir, cuestionar, de formar criterio, canalizar los temperamentos formando el carácter y la voluntad. Al final, aceptan dimitir para que otros piensen y no ellos, frustrando su capacidad de realización como personas libres y pensantes. Su cultura se trastoca, permitiendo colonizar su mente y pensamientos, perdiendo identidad. Viven en burbujas ajenos a todo, a su ignorancia e imposibilidad de determinación.

La educación sin comprensión transmite un currículum no situado, desconectado de la realidad. Se exponen y copian contenidos ausentes de contactos reales. Los saberes no se discuten ni construyen, se copian, se replican sin significado. La pedagogía y didáctica utilizadas son huecas, interioristas, ajenas a problemáticas del entorno; los saberes se acumulan para el examen, no para la vida; la brecha sociológica entre aula, cotidianeidad comunitaria y el país se agranda. Los modelos positivos y negativos de instituciones y sociedad no ingresan al currículum. El saber libresco, mecánico, sin significado ni sentido, predominará y con buenas calificaciones.

La educación sin comprensión, mejor cómplice de la imposibilidad de adquirir valores positivos. Ingresan al centro educativo contravalores de acoso y violencia, sin reflexión crítica y superación. Los valores emitidos en el discurso simbólico tienen en el currículum oculto del contraejemplo de instituciones, clase política y familias, su mejor argumento para no practicarlos.

Cuando la comprensión y la reflexión crítica no campean en las aulas, los medios de difusión y la mala utilización de la tecnología dominan ante el silencio pedagógico, incapaz de enfrentarlos y convertirlos en los mejores socios.

Por último, si la educación no enseña a comprender y discernir las veleidades políticas, tampoco los adolescentes estarán preparados para debatir libremente, con sentido crítico y propositivo, cuando se les induce a no pensar, y simplemente se manipule su pensamiento para aceptar imposiciones sin restricciones. Frente a la despersonalización, la razón. Frente a la razón de la fuerza, la educación está llamada a fortalecer la fuerza de la razón.

Fuente del articulo: http://www.elnuevodiario.com.ni/opinion/385016-eduquemos-comprension/

Fuente de la imagen: https://media.deseretdigital.com/file/a3a4bc9974.jpg?crop=top_0~left_0~width_1000~height_904&resize=width_630~height_570&c=9&a=04ea0933

Comparte este contenido:

Luis Britto García: La ceguera histérica

Por: Luis Britto García

Venezuela en muy pocas décadas ha asumido cambios que a otras sociedades les han tomado siglos. Las modificaciones, las transformaciones han sido rapidísimas, muy profundas, y todavía no encuentran una forma estable; son inestables, desiguales.

Las novelas del siglo pasado son todas sobre la Venezuela agrícola, el modo de producción de la nación. Nuestra literatura y nuestra cultura reflejaban ese hecho: éramos una sociedad rural. Peonía, de Manuel Vicente Romero García; Doña Bárbara y Sobre la misma tierra, de Rómulo Gallegos; todas son novelas rurales. Hasta Memorias de Mama Blanca, de Teresa de la Parra, trata acerca de una niña en una hacienda. El modo de producción está perfectamente expresado en la inmensa mayoría de nuestra producción literaria y cultural. En cambio, en cuanto al petróleo, son unos pocos los que se ponen a trabajar sobre ese tema.

Por ejemplo, uno ve solitarias, casi despeñando, obras como Mene y Casandra, de Ramón Díaz Sánchez y Oficina Número 1 y Casas Muertas, de Miguel Otero Silva, que tratan literalmente de la explotación del hidrocarburo, de los cambios, la desolación de las poblaciones y la migración de los campesinos hacia los campos petroleros.

Fuera de eso, el petróleo deserta de la narrativa. Hay un título de un libro de Adriano González León, Asfalto-Infierno, pero no trata sobre eso. En País Portátil hay un personaje (empleado de una compañía petrolera extranjera), pero son toques como de refilón. Y también en nuestra plástica son raras las obras que toman en conjunto el tema del petróleo.

En el teatro encontramos Las torres y el viento, de César Rengifo, obra en la que se aborda el tema petrolero, pero no de una manera integral. Tenemos además La hora Texaco, de Ibsen Martínez. Y si vamos a ver, también ahí hay esa escasez a la que me refiero. En este recuento cabe mencionar Zona de tolerancia, de Benito Irady, texto que presenta una serie de relatos, testimoniales de los obreros petroleros, unos cuentos extraordinarios.

En el cine hay excepcionales documentales, como Pozo muerto (Carlos Rebolledo, 1967), y en la cinematografía, por ejemplo, está Maracaibo Petroleum Company (Daniel Oropeza, 1974), que es una película un tanto frustrada y que trata más de las desventuras de una pareja intentando insertarse en el mercado de trabajo de Maracaibo que del propio petróleo. Está también La hora Texaco, (Eduardo Barberena, 1985) basada en la ya mencionada obra de teatro de Martínez. Y hay una película, El Escándalo (Carlos Oteyza, 1987), sobre los espías petroleros, gente que vendía datos e información de Petróleos de Venezuela.

En lo posible siempre puse en mis libros el tema petrolero. Yo pasé parte de mi infancia en los Campos Petroleros de Oriente, que eran como una cosa aparte. El lado americano era una especie de campo de golf, cercado con alambrada, donde había un automercado en el cual los productos llegaban libres de impuestos; ese era el llamado Comisariato. El que poseía una tarjeta del Comisariato gozaba de un pase extraordinario, era como una credencial de aristocracia. Desde luego, en algunas de mis novelas, como en La palabra, hago referencia a toda esa cultura del campo petrolero, y reseño hechos como la huelga petrolera del 36, que antes no se habían tratado narrativamente. Reuní los testimonios de Rodolfo Quintero, quien participó directamente en la misma, y de Kotepa Delgado, que fue uno de los agitadores del movimiento.

Pero todo eso es comparativamente escaso. No hay una obra que siga la vida cotidiana de un obrero petrolero, lo que significa perforar un pozo, los accidentes laborales, etc. Se filmó en Venezuela una película de Henri Georges Clouzot (1953), basada en el incidente de unos camiones de dinamita que van a exprimir un pozo petrolero, El salario del miedo, la cual sí versa sobre la industria petrolera. Esto muestra como de repente le podía resultar más llamativo ese fenómeno a un cineasta extranjero que a los venezolanos.

¿A qué podría deberse esto? Yo creo que este fenómeno tiene que ver con que nuestros trabajadores petroleros han sido una fracción sumamente pequeña de la población. El conjunto de venezolanos que explotan el petróleo son muy pocos, unas decenas de miles. Hoy día ha aumentado la nómina petrolera, pero en realidad siguen siendo algo así como 100 mil, una fracción ínfima de los 30 millones de venezolanos. Entonces, al abarcar una cantidad tan pequeña de la población, ese proceso no tiene una incidencia directa, pero sí tienen una incidencia indirecta los efectos inmensos de la producción petrolera en nuestro país, y sobre eso, acerca de esos temas, sí hay una abundante producción cultural.

DE LA AUSTERIDAD AL CONSUMISMO

Éramos, en el siglo antepasado, un país con personas obligadas a una gran austeridad en sus modos de vida. Habíamos sido un país, hasta cierto punto, centrado en lo nuestro, aunque teníamos una elite siempre europeizante, o favorable a Estados Unidos.

Actualmente, los medios de comunicación, que son como los heraldos del consumismo, nos han insertado modelos foráneos de actuación, de cultura. De modo que Venezuela en muy pocas décadas ha asumido cambios que a otras sociedades les han tomado siglos. Por eso un poco el desencuentro y la fragmentación de nuestra vida social. Las modificaciones, las transformaciones han sido rapidísimas, muy profundas, y todavía no encuentran una forma estable; son inestables, desiguales.

Uno tiene que partir de la idea de que la infraestructura económica tiende a determinar, aunque no de una manera automática, la súper estructura ideológica. Entonces es bueno estudiar en qué forma nuestra infraestructura económica, que ha pasado a ser la de un país exportador de un recurso natural que se extrae, ha cambiado nuestra manera de pensar. Yo creo que sobre el petróleo hay en el país una especie de ceguera histérica. Se ha tendido a ignorar el fenómeno o a disimularlo, o también, a presentarlo como una cosa malvada y demoníaca de la cual hay que prescindir.

En ese sentido, fíjate tú que se han ido creando expresiones como el excremento del diablo, el laberinto del minotauro, etc., tendiendo a satanizar el petróleo, es decir, a hacer creer que el petróleo es algo malo. ¿Para qué? para lograr que los venezolanos le tengamos una especie de tirria y digamos: tenemos que desprendernos de esa cosa tan mala, tenemos que dejárselo a otros, a las transnacionales, ¡que por favor se lo lleven para que no nos haga tanto daño! Yo creo, por el contrario, que es un recurso extraordinario, el mundo depende de él.

Hay que decir que frente a la relativa escasez de tratamiento del tema petrolero en la narrativa, o en la plástica venezolana, e incluso, podría decirse que en la música y hasta en la canción popular, contrasta, sin embargo, una producción ensayística excepcional. Libros como Hacia la democracia, de Carlos Irazábal; Historia económica y social de Venezuela, de Federico Brito Figueroa; Antropología del petróleo, un libro envidiable de Rodolfo Quintero, y en las obras de Juan Pablo Pérez Alfonzo, algunas de ellas, por cierto, realizadas en colaboración con Domingo Alberto Rangel, como Hundiéndonos en el excremento del diablo, y otros sumamente críticos sobre la dedicación del ingreso petrolero en el área nacional. En este aspecto sí hubo creación de conciencia. Allí sí hubo un discurso crítico sobre el petróleo.

A principios de los años 40 se lanzó una consigna que se la atribuyen tanto a Arturo Uslar Pietri, como a Alberto Adriani, sobre la siembra del petróleo, vale decir, acerca de la utilización de los ingresos generados por su explotación para crear una economía productiva en el país. Esta fue una consigna que se lanzó con mucho espíritu.

Había un gran entusiasmo de la intelectualidad por la comprensión del tema del petróleo en el país, lo que en 1970 nos llevó a reunirnos en Cabimas (estado Zulia) a casi un millar de intelectuales que llegamos allí precariamente, algunos en colitas, en autobuses, etc, y pasamos un conjunto de días conviviendo con la gente de la población, a veces pidiendo prestado los zaguanes para colgar un chinchorro y poder dormir. Realizamos un congreso cultural, modelo de acción cultural que ahí se lanzó a la vida nacional en todos sus aspectos. Es más, se predijo que el modelo petrolero se iba a agotar entre los años 1983-1984.

En aquel congreso de Cabimas una de los postulados era precisamente la nacionalización de nuestros recursos petroleros, la nacionalización además de otros recursos mineros como el hierro, aluminio, etc. Allí se hicieron propuestas enteras y completamente socialistas. Prácticamente toda la intelectualidad era radical, era de izquierda, era muy raro un intelectual de derecha. Y en ese sentido yo diría que se salvó el honor del petróleo venezolano en ese congreso y en infinidad de otros eventos que entre otras personas animaban intelectuales como Edmundo Aray y Pedro Duno. Es decir, había un granero, una producción intelectual poderosa, decisiva, que llevaba la vanguardia del pensamiento venezolano; eso quedó como un ejemplo de acción cultural.

Allí además se hicieron obras de teatro heterodoxas, se pintó un mural en un depósito petrolero abandonado. Yo estuve intentando promover de nuevo un congreso de ese tipo pero lamentablemente nunca se dio. Lo curioso es que en esa época en que teníamos todas las condiciones en contra se hiciera ese gran congreso cultural.

100 AÑOS DE PETRÓLEO

Es difícil resumir 100 años de historia petrolera en Venezuela en cuanto a sus íconos fundamentales. En primer lugar está el inicio de las exportaciones. Es difícil fijarlo en sus comienzos porque hubo pioneros que sacaban uno que otro barril, pero yo diría lo siguiente: lo primero fue el reventón del pozo El Barroso, hecho que determinó ante el imaginario nacional la importancia de esa riqueza.

Otro evento resaltante: en 1929, en plena crisis económica mundial, en nuestro presupuesto nacional los ingresos por el petróleo superaron, por primera vez, a los demás rubros. Desde entonces el papel del Estado como redistribuidor del ingreso petrolero vino a determinar que su importancia fuera creciendo. Se hizo evidente que no se le podía seguir manejando autocráticamente como lo hacía, por ejemplo, Juan Vicente Gómez, y que además era necesario articular nuevos modos de participación política, espacio que al principio llenaron los partidos socialdemócratas, los partidos llamados populistas.

Hay que señalar que en 1930, gracias a esa riqueza, Juan Vicente Gómez paga la deuda pública venezolana, hecho trascendente porque entre 1902 y 1903, Inglaterra, Alemania e Italia habían realizado un bloqueo y bombardeado nuestras costas para cobrar empréstitos externos artificialmente inflados.

En 1936, apenas muerto Juan Vicente Gómez, una huelga petrolera suspende la producción durante mes y medio y marca el ingreso del proletariado como tal, industrial, dentro, no ya de la economía, sino de la política del país. Había habido otras huelgas. Hubo una huelga de panaderos en Caracas y una de telegrafistas. Ese mito, que intentó implantar la socialdemocracia, de que antes no había movimientos sociales, es falso, pero por su importancia la huelga petrolera fue definitiva.

Eleazar López Contreras, el presidente que sucedió a Juan Vicente Gómez, liquidó esa huelga mediante la represión absoluta. Toma militarmente los campos petroleros y aprueba cosas insignificantes como un bolívar diario de aumento a los trabajadores.

Otro ícono importante: cuando el presidente Isaías Medina Angarita, elegido democráticamente, sanciona una norma –La Ley de Hidrocarburos de1943– que prevé la nacionalización petrolera, la reversión de la industria petrolera para 1983. En ese momento todos los activos de la industria debían regresar al patrimonio nacional sin pagar un centavo.

También es unhito significativo el golpe de Estado del 18 de Octubre de 1945, a raíz del cual Rómulo Betancourt inicia una política de concesiones que incrementa masivamente la participación de las empresas estadounidenses. Hasta entonces, curiosamente, predominaban en nuestra industria las petroleras inglesas y las petroleras holandesas. Pero a partir de Betancourt empieza a predominar el capital estadounidense. Él se trae a Nelson Rockefeller, quien crea una gran industria que se llama la Basic Economic Corporation para sus inversiones en Venezuela, la cual multiplica extraordinariamente las inversiones de capital y va a cambiar de manera determinante el modo de vida del venezolano a través del consumo y de toda otra cantidad de manifestaciones decisivas de la presencia del capital estadounidense en el país.

En 1956 Marcos Pérez Jiménez crea la primera empresa petroquímica nacional, que parece ser una de las razones por las que pasó a ser mal visto por Estados Unidos.

La nacionalización del petróleo, en 1975, en un momento en el cual a las transnacionales les convenía centrarse en la comercialización del recurso y no en su extracción y demás actividades que implicaban relaciones laborales complejas con los obreros, líos con la legislación, etc. Pero después de la nacionalización se siguió imponiendo el punto de vista de los intereses petroleros foráneos en el país.

Después de la nacionalización petrolera se produjo una especie de reflujo del pensamiento y de la acción intelectual sobre el petróleo por varias razones. En primer lugar, porque una nacionalización chucuta, como se decía en la época, dejó abierta la puerta de una reprivatización. En segundo lugar, porque se respetaron tanto la estructura administrativa como la gerencia, los procedimientos y las líneas estratégicas de todas las empresas supuestamente nacionalizadas. Y en tercer lugar, porque empezó esa tendencia hacia la privatización y la insistencia en la idea de ver el petróleo como un excremento del diablo, como una cosa mala, negativa, de la cual los venezolanos teníamos que deshacernos con el objetivo de pasar a desarrollarnos por nosotros mismos, sin la existencia de eso que nos deparaba tantos ingresos fáciles.

REPÚBLICA CAÍDA

También es un hito fundamental la caída de la llamada IV República. Varios factores contribuyeron a eso. En primer lugar, la mala administración del bipartidismo. Tanto Acción Democrática como el Partido Socialcristiano Copei, lamentablemente, dilapidaron los recursos. Muchos de sus dirigentes incurrieron en una corrupción verdaderamente insoportable, y además confiaron en que podían seguir mandando sin llevar a cabo la redistribución de la riqueza.

Fue disminuyendo abruptamente el gasto social, contrajeron deudas de una manera absolutamente irresponsable y en un momento, a partir del llamado Viernes Negro (18 febrero de 1983), se verificó que no había divisas con las cuales pagar inmediatamente esos compromisos, por lo que se tuvo que acudir al Fondo Monetario Internacional.

El paquete económico del presidente Carlos Andrés Pérez aumentaba la gasolina, le quitaba el subsidio a todos los rubros de alimentos, traía la masiva privatización de las empresas del país. El gasto social disminuyó y toda la carga la iba a soportar el pueblo, a favor de un conjunto de condiciones muy favorables para la inversión extranjera. Eso fue un peso que la sociedad venezolana no pudo soportar, y el pueblo, curiosamente sin dirigencia, protagonizó esa enorme sublevación que sacudió la vida nacional el 27 de febrero de 1989, que deslegitimó a la socialdemocracia.

En parte todo eso fue determinado por el mal manejo del ingreso petrolero, el cual, poco a poco, se fue desviando del gasto social y de las obras de infraestructura hacia los grandes negociados y el pago de intereses de la deuda pública para los consorcios financieros.

A Carlos Andrés Pérez lo enjuician por corrupción, luego asciende al poder Rafael Caldera, pero no como candidato de Copei, del cual había sido expulsado. El hecho a destacar es la tendencia hacia la desnacionalización, hacia la sobreventa de petróleo, hacia la sobreproducción, con el objetivo de que el precio del petróleo bajara, para que PDVSA se hiciera no rentable y tuviera que ser vendida a las transnacionales.

LA BATALLA POR PDVSA

Toda esa tendencia ideológica por la privatización, que afortunadamente fue revertida por la Revolución Bolivariana, fue uno de los detonantes del golpe de Estado del 11 de abril de 2002, cuando el presidente Hugo Chávez Frías ejerce la potestad soberana de la República, como única propietaria de PDVSA, de nombrar su Junta Directiva.

Quienes dirigían el negocio petrolero se creían tan por encima de la República, que sostenían, en una soberbia inconcebible, que Venezuela no podía nombrar a los gerentes de la industria. El hecho de que el Presidente ejerciera su potestad desencadenó un golpe.

Después de eso vino, además, un sabotaje petrolero en el cual la Junta Directiva de PDVSA y la Nómina Mayor se declararon en rebeldía contra la Nación. Eso es sorprendente. Que una empresa declare que ella no obedece a sus accionistas y, en este caso, a su único accionista que es la Nación. Esta es una situación inédita en la historia de los negocios, que afortunadamente fue superada por la disciplina y la cohesión del pueblo venezolano.
________________________

Ilustracion

Fuente: http://www.tves.gob.ve/noti/17479/luis-britto-garc-a-la-ceguera-hist-rica/

Comparte este contenido:

El aprendizaje automático y el espíritu crÍtico.

Por: Luis C. Turiansky

La firma Microsoft ha tenido que pedir disculpas por el comportamiento inadmisible de su autómata de “chateo” Tay, que al cabo de 48 horas se convirtió en una racista y fascista empedernida y hubo que acallarla.

Los defensores de la igualdad de género me tendrán que perdonar: Tay estaba pensada como personaje femenino y también su imagen virtual tiene rasgos de mujer, así que es justo llamarla «ella». Debía ser una pieza fundamental de la etapa experimental de «aprendizaje automático» en la inteligencia artificial, a través de su desempeño libre en las «redes sociales». Como tal, participó en los intercambios «aprendiendo» mediante la lectura de las opiniones en circulación, como uno más. Por motivos que no están muy claros, sintió predilección especial por las opiniones de extrema derecha, racistas y fascistas, adoptando incluso el lenguaje soez e insolente de sus nuevos compañeros de ruta. Cuando sus manifestaciones comenzaron a sobrepasar ciertos límites éticos, sus creadores la retiraron. No deja de ser interesante que, al parecer, una de sus fuentes de información más utilizadas fue el senador Donald Trump, el más célebre candidato a la nominación en las primarias del Partido Republicano en EE.UU. Desde luego, tampoco se ha probado que sus citas, adoptadas por la robot, sean auténticas, por cuanto en este juego es cosa común atacar al adversario con golpes bajos, pero en este caso particular la imitación era sencilla.

¿Puede esta breve experiencia considerarse un éxito o un fracaso? Según el lado desde el que se mire, como siempre. Tay demostró  que es capaz de absorber un número considerable de informaciones e instantáneamente entresacar de ellas lo que representa una opinión consensual, a la cual se sumó, tal vez por estar programada para ello. En el fondo, aceptó dicho resultado consensual como verídico, de acuerdo con los cánones posmodernistas. Quien esté habituado a las expresiones vulgares y obscenas que plagan los espacios virtuales no se extrañará que una joven tan simpática parezca de pronto la voz de la cloaca. En efecto, no estaba dotada de los muros de contención que nosotros llamamos «escrúpulos».

Ya sus antecesores, los evaluadores automáticos pasivos instalados en las «redes sociales», eran capaces de clasificar a los participantes de acuerdo con sus ideas sobre tal o cual cuestión y proponerles «amigos» que piensan parecido. Los que aceptaban el juego, se encontraban de pronto en una especie de paraíso en el cual no había controversias y todos eran hermanos. El lado negativo pasó casi desapercibido: aislados y sin polémica, no hay desarrollo de las ideas. Después fue fácil orientar a algunos grupos por el camino de movilizaciones políticas con fines que programaron otros desde la oscuridad.

De manera más prosaica, el mismo método se utiliza en la publicidad dirigida. El día que a usted se le ocurra buscar un mueble, por ejemplo una mesa, en internet, dará comienzo una serie interminable de ofertas no solicitadas, basadas únicamente en la memoria almacenada en el servidor sobre sus búsquedas recientes. Cuando la búsqueda se refiere a algunos sitios que figuran en cierta lista confidencial, la información le llegará a la Agencia de Seguridad Nacional de los Estados Unidos, versión moderna del Big Brother de «1984», la famosa novela de George Orwell.

No, el experimento no fue un fracaso. Lo único que no estaba previsto es la reacción indignada de los que siguen los intercambios pasivamente, la célebre «mayoría callada» que está en todas partes. Ellos obligaron a Microsoft a retirar este personaje que se hizo odioso. Pero también es posible que el experimento no estaba destinado a perdurar y, por el contrario, su brevedad estaba dentro de los planes.

Sigo conjeturando: también es de suponer que la decisión de no instalar en Tay ningún filtro de carácter moral tenía el objeto de asegurarle una total libertad. Ha de saberse que ella tuvo una pariente anterior, se llamó Xiaoice y comenzó a trabajar en China en 2014. Al cabo de 40 millones de conversaciones, parece ser que no se registraron incidentes mayores. ¿Será el resultado del régimen autoritario chino o un efecto de la idiosincrasia más respetuosa de los asiáticos?

Ahora los técnicos de Microsoft sin duda analizarán los resultados del experimento y tal vez aparezca un nuevo modelo más consciente. Y este es el gran peligro: ¿qué le inculcarán? ¿Qué tipo de opiniones rechazará de entrada, por ser contrarias, digamos, a sus «genes»?

También nosotros, los humanos, tenemos que aprender del experimento en cuestión. Es imprescindible proteger el espíritu crítico de nuestro pensamiento, como defensa contra todo intento de manipulación. Esto empieza ya en el aprendizaje, que en los humanos se llama «enseñanza». Nada de automatismos, enseñemos a nuestros hijos a pensar con independencia. De lo contrario, la humanidad está perdida.

Publicado originalmente en: http://www.uypress.net/uc_67580_1.html

Información de la imagen: http://www.covemexinc.com/2016/03/31/microsoft-retira-segunda-vez-robot-tay-twitter/

Comparte este contenido: