¿El minimum minimorum de la educación en México?

Por Eduardo Backhoff

En el caso de la educación, los países del primer mundo, también llamados industrializados, pueden pensar en contar con escuelas de lujo.

Ahora que próximamente iniciará AMLO un nuevo gobierno, que ha prometido resolver de manera contundente los principales problemas que padece nuestro país, entre los que se encuentra la baja calidad de la educación –que ha sido ampliamente documentada en todos los estudios internacionales y nacionales que evalúan el aprendizaje de los estudiantes–, es importante poner los pies en la tierra y exigir que el nuevo gobierno garantice al menos construir un piso mínimo e indispensable para que el Estado pueda ofrecer servicios educativos, si no de alta calidad, al menos decorosos para todos los niños y jóvenes de la población mexicana en edad de cursar la educación obligatoria.

Como dice el dicho “ofrecer no empobrece, lo que aniquila es dar”. Por ello los candidatos siempre ofrecen lo que no pueden dar y después se justifican con diversos argumentos. Últimamente, AMLO ha dicho que no se podrán ver realizadas todas sus promesas de campaña debido a que “el país está en bancarrota”. Independientemente, de si quiso decir que teníamos un quebranto económico o uno moral (según Lorenzo Meyer), lo importante es no perder de vista que todos los servicios que el Estado está obligado a proporcionar a la ciudadanía deben de contar con condiciones mínimas o básicas que permitan a la ciudadanía utilizar servicios decorosos que satisfagan sus necesidades primarias.

 

En el caso de la educación, los países del primer mundo, también llamados industrializados, pueden pensar en contar con escuelas de lujo. Es decir, con edificios elegantemente construidos, con material pedagógico nuevo, con personal docente y administrativo de sobra, con canchas deportivas variadas, laboratorios de ciencia y talleres de artes, con computadoras para cada maestro y estudiante, con conexión a Internet de alta velocidad, etcétera.

 

Sin embargo, los llamados países emergentes o de mediana economía, como es el caso de México, deben aspirar a construir este piso básico de la educación, al que le llamo el “mínimo minimorum”. Este piso no nos permitirá ser competitivos en las evaluaciones internacionales de aprendizaje, toda vez que nuestra base social padece de muchos rezagos educativos, lo que nos pone en desventaja respecto a las sociedades cuyos ciudadanos no tienen poblaciones analfabetas o con graves retrasos escolares. Sin embargo, el “mínimo minimorum” sí nos podrá asegurar que TODOS los escolares cuenten con las CONDICIONES MATERIALES SUFICIENTES y las OPORTUNIDADES DE APRENDIZAJE indispensables para poder aprender lo básico del currículo nacional. Y cuando digo lo básico, me refiero a la base de conocimiento mismo, es decir, que los estudiantes: sepan comprender lo que leen y a expresarse oralmente y por escrito; puedan resolver problemas básicos de matemáticas, conozcan lo estrictamente esencial de las ciencias sociales y naturales, y que puedan aplicar lo aprendido a la vida real.

 

Este piso básico, a mi manera de ver, consiste en lo siguiente: 1) atender al 100% de los niños y jóvenes en edad de asistir a la educación obligatoria y retenerlos dentro de las escuelas, 2) lograr que todos los profesionales de la educación obligatoria tengan una excelente formación inicial y continua, que les permita dominar lo disciplinario y lo pedagógico, 3) asegurar que los normalistas y especialistas en educación mejor preparados sean quienes ingresen al sistema educativo, 4) cumplir con la normalidad mínima en el total de escuelas, lo que implica cumplir con 100% del calendario escolar, y que los docentes lleguen temprano a clases, permanezcan en sus aulas y utilicen herramientas pedagógicas modernas, 5) contar con supervisores y directores, que actúen con independencia gremial, y cuya principal función sea la de apoyar a que todos los estudiantes tengan las mismas oportunidades para aprender, 6) tener un currículo de educación básica con pocos contenidos, que permita dominarlos a profundidad y que esté orientado a la adquisición de habilidades de razonamiento y de solución de problemas, 7) asegurar que todos los centros educativos tengan la infraestructura, el equipamiento y los materiales pedagógicos elementales y funcionales y 8) lograr incorporar a los padres de familia en la educación de sus hijos y a la sociedad civil en la toma de decisiones de los centros escolares. Por supuesto, esta lista se puede extender más, pero es suficiente para entender a lo que me refiero con un mínimum minimorum de la educación.

 

Si bien éste es un piso mínimo para la educación, es necesario advertir que, en una sociedad desigual, también se requiere tener políticas educativas compensatorias que favorezcan la equidad. Es decir, que las poblaciones más desprotegidas y vulnerables tengan mejores condiciones escolares que aquellos que la vida les ha favorecido social y económicamente por distintas razones. Solo así, podremos aspirar a contar con un sistema educativo decoroso, del cual nos sintamos orgullosos todos los mexicanos. Creo que no es pedir demasiado y es bastante realista. ¿Lo podrá cumplir el gobierno de AMLO?

Fuente del artículo: https://www.sdpnoticias.com/nacional/2018/10/04/el-minimum-minimorum-de-la-educacion-en-mexico

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Asseco Spain y Colegios Brains: La transformación tecnológica para llegar a la excelencia educativa

Por Redacción Interempresas

A día de hoy, si hay algo que queda claro, es que la tecnología es el motor del cambio que permite a los alumnos desarrollar creatividad y competencias diferenciales. No obstante, la falta de asesoramiento hace que las instituciones caigan en el error de adquirirla sin tener claro su uso dentro de las aulas o el papel que jugará en el aprendizaje de los estudiantes.

“Nos encontramos tecnología en los centros pero en muchos casos no saben cómo usarla ni cómo adaptarla a las nuevas metodologías de enseñanza” comenta Fernando Gómez del departamento de educación de Asseco Spain. “Es por eso que el asesoramiento y la formación del profesorado es vital”.

Hay centros que, por el contrario, llevan años apostando por una evolución tecnológica cuidadosamente planificada y apoyada en profesionales tanto del mundo IT como el de la pedagogía. El colegio Brains es un claro ejemplo de diseño de un recorrido tecnológico coherente y con una meta clara. Luis Tolmos, secretario general de Brains International School, lo explica de la siguiente manera: “A nivel pedagógico, nuestro objetivo es crear un único estándar tecnológico que nos permita consolidar a nivel grupo un plan de contenidos y servicios llave en mano para nuestro principal y único cliente, el alumno”.

Precisamente para este fin, colegios Brains y Asseco Spain, empresa de soluciones IT, han llegado a un acuerdo para los próximos años en el que ambas entidades trabajarán codo con codo para llevar los estándares educativos a otro nivel. La razón principal de que haya sido Asseco Spain el elegido para esta andadura ha sido su capacidad de ofrecer soluciones integrales en proyectos educativos, siendo mucho más que meros suministradores de hardware. La empresa lleva años ayudando a sus clientes en transformaciones similares al reto propuesto por la Dirección de los Colegios Brains, hecho que garantiza el éxito de tan ambicioso proyecto.

Otro de los factores diferenciales de Asseco Spain y reconocimiento a sus capacidades tecnológicas es su pertenencia a exclusivos programas de Apple. La certificación que le acredita como experto en soluciones educativas es el Apple Solution Expert in Education (ASE) que, junto con la certificación Apple Authorised Enterprise Reseller (AAER) orientada al sector empresarial, hace de Asseco Spain el partner ideal para proyectos globales.

Y es que es precisamente Apple y su ecosistema una de las bases del proyecto transformador del Brains. En el grupo de colegios cuentan con un equipo de ADEs (Apple Distinguished Educator) propio que se adaptan a su método de enseñanza y confían en los dispositivos Apple como herramientas.

Aunque los pasos más importantes del proyecto se darán a partir del año 2019 con desarrollos a medida, ya son varios los meses que llevan los técnicos de Asseco Spain colaborando con el colegio. Tras una consultoría técnica de infraestructura de redes, desde Asseco Spain se ha gestionado la migración a un MDM así como la puesta en marcha de dispositivos Apple, un paso crucial para la continuidad del proyecto.

Por su parte, Román López, de la vertical de educación de Asseco Spain, destaca la importancia y compromiso por el proyecto del grupo Brains: “El hecho de que Colegios Brains haya decidido apostar por Asseco Spain denota que han sabido ver las capacidades que ponemos a su disposición y conseguir de esta manera consolidarse, más si cabe, como un referente en el sector educativo. Esta colaboración hará que Asseco Spain guíe al Colegio Brains de la Moraleja (Alcobendas, Madrid) en su andadura para conseguir la certificación Apple Distinguised School. Este reconocimiento acredita a los centros como un referente a nivel internacional en lo que al uso de equipamiento Apple y su empleabilidad en el medio educativo se refiere».

Además, el proyecto del Brains supone asimismo una fuerte apuesta por el futuro del mundo laboral ya que se sustenta en un modelo de nuevos perfiles profesionales cada vez más demandadas por la sociedad. “Nuestra idea -comenta Tolmos- es la de crear nuevas experiencias formativas orientadas a la innovación de nuevas profesiones, apostando fuertemente por el emprendimiento desde las aulas y acompañar a nuestros alumnos en las profesiones del mañana”.

Asseco Spain y el colegio Brains continuarán trabajando en este proyecto conjunto para lograr una integración perfecta de la tecnología en el mundo educativo e impulsar el desarrollo personal y profesional de sus alumnos.

Fuente de la reseña: https://www.interempresas.net/Tecnologia-aulas/Articulos/223179-Asseco-Spain-Colegios-Brains-transformacion-tecnologica-llegar-excelencia-educativa.html

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