Convocatoria abierta para presentar artículos científicos, académicos y/o sistematizaciones de experiencias, para el primer número de nuestra revista arbitrada Pedagogías Críticas y Educaciones Populares

Por: Otras Voces en Educación 
Invitamos a tod@s nuestros seguidor@s, investigador@s, docentes, educador@s popular@s, estudiantes y luchador@s sociales a sumarse a esta iniciativa.
Los trabajos se recibirán hasta el 15 de agosto y deben ser enviados al correo: contacto@otrasvoceseneducacion.org

Presentación y Normas de Publicación de La Revista Arbitrada Pedagogías Críticas y Educaciones Populares: Voces En Contravía

Conceptualización:

Pedagogías Críticas y Educaciones Populares: voces en contravía es una revista arbitrada que espera indexada en el corto plazo

Propósito de la revista

Ser un órgano de circulación e intercambio académico para los trabajos científicos, proyectos, avances y/o productos de las investigaciones, innovaciones y reflexiones que son desarrolladas por actores sociales involucrados en las pedagogías críticas y las educaciones populares.

Los trabajos a publicar serán el resultado de una convocatoria pública y el arbitraje doble ciego de pares académicos(as), investigadores(as) y la experticia del movimiento social.

Estructura Académica:

La revista cuenta con un comité académico-editorial que coordina el trabajo de arbitraje, edición, diagramación y publicación de la revista.

La composición del Comité Editor será la siguiente:
1) Tres (03) miembros directivos del Centro Internacional de Investigaciones Otras Voces en Educación, 2) Dos (02) miembros del proyecto permanente Red Global/Glocal por la calidad Educativa, 3) dos (2) miembros del Observatorio Internacional de Reformas Educativas y Políticas Docentes (OIREPOD) y 4) dos (2) integrantes académicos del Grupo de Contacto Internacional (GCI).

Normas para presentar trabajos en las convocatorias

  1. Artículos
  • Los artículos deberán ser inéditos y no podrán ser publicados en otra revista o medio hasta que se publique el número de la Revista Arbitrada Pedagogías Críticas y Educaciones Populares: voces en contravía para la cual postuló.
  • La extensión del artículo será presentado en formato libre en el programa Word, de diez páginas, tamaño carta, con letra arial 12, con espacio interlineado sencillo.
  • Los artículos estarán escritos en un lenguaje académico, cumpliendo con las normas APA de presentación y citas.
  • El artículo contará con cinco (5) palabras claves y un resumen de un máximo de 200 caracteres.
  • El artículo deberá contener debajo del resumen una reseña del o los y las autores (as), de un máximo de 100 caracteres.
  • La temática abordada en el artículo estará relacionada con la agenda de convocatoria de cada número.
  • Por lo menos la mitad de las citas deben ser de publicaciones de los últimos cinco años.
  • Los(as) autores seleccionados recibirán una constancia escrita de la revista con el dictamen que acredita que ha sido seleccionada su trabajo.
  1. Reseñas
  • Las reseñas pueden ser de libros publicados el último año, o de algún texto histórico de referencia con el tema que aborde el número de la revista para el cual postula el texto.
  • También se podrán incorporar como reseñas eventos académicos, encuentros del movimiento social pedagógico, películas, obras de teatro, recitales o cualquier otra manifestación cultural ocurrida en los últimos seis meses.
  • Las reseñas tendrán una extensión mínima de una página, tamaño carta y un máximo de tres páginas. Escritas en letra Arial, tamaño 12
  • Los(as) autores seleccionados recibirán una constancia escrita de la revista con el dictamen que acredita que ha sido seleccionada su trabajo.
  1. Ilustraciones
  • Podrán presentar trabajos artistas gráficos que tengan obras que deseen ser publicadas en la revista arbitrada y tengan relación con el tema que convoca en cada número.
  • Deberán ser presentadas en formato digital en un programa que sea compatible con los programas de edición de libros y revistas.
  • Los artistas seleccionados recibirán una constancia escrita de la revista con el dictamen que acredita que ha sido seleccionada su obra.
  1. Informes de resultados de investigación
  • En un máximo de tres hojas tamaño carta, en letra Arial 12. Deben contener: título de la investigación, resumen, investigadores involucrados. Proceso de la investigación y resultados más relevantes.
  • Los(as) autores seleccionados recibirán una constancia escrita de la revista con el dictamen que acredita que ha sido seleccionada su trabajo.
  1. Conclusiones de eventos
  • En un máximo de una hoja tamaño carta, en letra Arial 12. Deben contener: título del evento, resumen, investigadores involucrados. Conclusiones más relevantes.
  • Los(as) autores seleccionados recibirán una constancia escrita de la revista con el dictamen que acredita que ha sido seleccionada su trabajo.
  1. Serán realizadas por solicitud expresa del Comité Editorial de la Revista.

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Presentación y normas de publicación de la Revista Arbitrada Pedagogías Críticas y Educaciones Populares: Voces en Contravía

Revista Arbitrada de Otras Voces en Educación  

¿Quiénes somos?

En el año 2016 nace el portal Otras Voces en educación como un espacio informativo plural, que se convierte a su vez en la más importante base de datos en español, sobre el cambio educativo. Casi cincuenta mil contenidos publicados (noticias, artículos, reseñas, entrevistas, podcast) y 35 millones de visitas al portal dan cuenta del enorme esfuerzo realizado en los últimos años. Se crea el proyecto asociado Red Global/Glocal por la Calidad Educativa que ingresa a la Campaña Latinoamericana por el derecho a la Educación (CLADE).

En el año 2019 se conforma el Centro Internacional de Investigaciones Otras Voces en Educación (CII-OVE), como una iniciativa que da continuidad y amplía el trabajo iniciado con el portal. Ahora, además de lo comunicacional se construyen caminos e instancias para el desarrollo de investigación y la formación, no solo educativa sino en el plano de las ciencias sociales y humanas.  Cuatro líneas de investigación concentran el esfuerzo: 1) formación permanente de docentes en contextos de cuarta revolución industrial, 2) movimiento social y sindical del magisterio; 3) migraciones, juventudes, feminismos y racismos y 4) Movimiento social y luchas emancipatorias. El CII-OVE es reconocido en el año 2020 como centro miembro del Consejo Latinoamericano y Caribeño de Ciencias Sociales.

En el año 2020, con una beca otorgada por CLACSO se realiza una investigación sobre la Migración de jóvenes venezolanos (as). Adicionalmente, se lleva a cabo un inventario de actores sociales por el derecho a la educación. Se crea el Grupo de Contacto Internacional (GCI) como espacio de encuentro entre gremios, sindicatos y colectivos de pedagogías críticas – educadores populares (de América Latina, Caribe y el mundo. En ese contexto, se realiza de manera virtual, el Primer Congreso Mundial contra el neoliberalismo educativo y en defensa de la educación pública, con la participación de 12.000 personas.

Así mismo y, en este año referido, en medio la pandemia del COVID-19, se impulsa el canal de YouTube de Otras Voces en Educación, nicho del canal de televisión digital en educación. Más de 15.000 suscriptores y un aproximado de trescientas producciones resumen el trabajo de un año.

En el año 2021, se reactiva el Observatorio Internacional de Reformas Educativas y Políticas Docentes (OIREPOD), creado en el año 2016. Como proyecto de envergadura y en alianza el Centro Internacional de Investigaciones Otras Voces en alianza con la Cooperativa de Educadorxs Investigadorxs Populares Histórica de Argentina, el Círculo de investigadorxs del Pensamiento Crítico de América Latica (CIPCAL) y la Red Global/Glocal por la Calidad Educativa, se lanza el primer Curso Internacional en Pensamiento Pedagógico Crítico, con una duración de 300 horas en total, conformado por ocho Escuelas, y su participación y/o aprobación es equivalente a Diplomado Internacional. El mismo, es inicio del programa permanente de formación en línea que cuenta con más de 130 estudiantes de 18 países.

También se relanzó el programa de conferencias internacionales, de libre acceso desde el canal de YouTube de Otras Voces en Educación en alianza con trece movimientos sociales de América Latina. Se inicia el proyecto de OVE Radio que aspira crear en los próximos años una radio por internet.

Para el segundo semestre se tiene pautado el lanzamiento del primer número de la Revista arbitrada de Otras Voces en Educación.

Conceptualización:

Pedagogías Críticas y Educaciones Populares: voces en contravía es una revista arbitrada que espera indexada en el corto plazo

Propósito de la revista

Ser un órgano de circulación e intercambio académico para los trabajos científicos, proyectos, avances y/o productos de las investigaciones, innovaciones y reflexiones que son desarrolladas por actores sociales involucrados en las pedagogías críticas y las educaciones populares.

Los trabajos a publicar serán el resultado de una convocatoria pública y el arbitraje doble ciego de pares académicos(as), investigadores(as) y la experticia del movimiento social.

Estructura Académica:

La revista cuenta con un comité académico-editorial que coordina el trabajo de arbitraje, edición, diagramación y publicación de la revista.

La composición del Comité Editor será la siguiente:
1) Tres (03) miembros directivos del Centro Internacional de Investigaciones Otras Voces en Educación, 2) Dos (02) miembros del proyecto permanente Red Global/Glocal por la calidad Educativa, 3) dos (2) miembros del Observatorio Internacional de Reformas Educativas y Políticas Docentes (OIREPOD) y 4) dos (2) integrantes académicos del Grupo de Contacto Internacional (GCI).

Normas para presentar trabajos en las convocatorias

  1. Artículos
  • Los artículos deberán ser inéditos y no podrán ser publicados en otra revista o medio hasta que se publique el número de la Revista Arbitrada Pedagogías Críticas y Educaciones Populares: voces en contravía para la cual postuló.
  • La extensión del artículo será presentado en formato libre en el programa Word, de diez páginas, tamaño carta, con letra arial 12, con espacio interlineado sencillo.
  • Los artículos estarán escritos en un lenguaje académico, cumpliendo con las normas APA de presentación y citas.
  • El artículo contará con cinco (5) palabras claves y un resumen de un máximo de 200 caracteres.
  • El artículo deberá contener debajo del resumen una reseña del o los y las autores (as), de un máximo de 100 caracteres.
  • La temática abordada en el artículo estará relacionada con la agenda de convocatoria de cada número.
  • Por lo menos la mitad de las citas deben ser de publicaciones de los últimos cinco años.
  • Los(as) autores seleccionados recibirán una constancia escrita de la revista con el dictamen que acredita que ha sido seleccionada su trabajo.
  1. Reseñas
  • Las reseñas pueden ser de libros publicados el último año, o de algún texto histórico de referencia con el tema que aborde el número de la revista para el cual postula el texto.
  • También se podrán incorporar como reseñas eventos académicos, encuentros del movimiento social pedagógico, películas, obras de teatro, recitales o cualquier otra manifestación cultural ocurrida en los últimos seis meses.
  • Las reseñas tendrán una extensión mínima de una página, tamaño carta y un máximo de tres páginas. Escritas en letra Arial, tamaño 12
  • Los(as) autores seleccionados recibirán una constancia escrita de la revista con el dictamen que acredita que ha sido seleccionada su trabajo.
  1. Ilustraciones
  • Podrán presentar trabajos artistas gráficos que tengan obras que deseen ser publicadas en la revista arbitrada y tengan relación con el tema que convoca en cada número.
  • Deberán ser presentadas en formato digital en un programa que sea compatible con los programas de edición de libros y revistas.
  • Los artistas seleccionados recibirán una constancia escrita de la revista con el dictamen que acredita que ha sido seleccionada su obra.
  1. Informes de resultados de investigación
  • En un máximo de tres hojas tamaño carta, en letra Arial 12. Deben contener: título de la investigación, resumen, investigadores involucrados. Proceso de la investigación y resultados más relevantes.
  • Los(as) autores seleccionados recibirán una constancia escrita de la revista con el dictamen que acredita que ha sido seleccionada su trabajo.
  1. Conclusiones de eventos
  • En un máximo de una hoja tamaño carta, en letra Arial 12. Deben contener: título del evento, resumen, investigadores involucrados. Conclusiones más relevantes.
  • Los(as) autores seleccionados recibirán una constancia escrita de la revista con el dictamen que acredita que ha sido seleccionada su trabajo.
  1. Serán realizadas por solicitud expresa del Comité Editorial de la Revista.

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La ciencia necesita tiempo para pensar: el movimiento que quiere acabar con la cultura de “publicar o morir”

Europa/22 Mayo 2019/Fuente: The conversation

El ritmo de la producción científica se ha disparado en las últimas décadas. Algunos estudios recientes estiman que hoy existen unas 30 000 revistas que publican al año más de 2 millones y medio de artículos científicos, con un índice de crecimiento anual de un 5 %.

La presión constante por publicar (el famoso “publica o muere”) fomentada por el exigente sistema de evaluación académico y la mayor competición entre el creciente número de grupos de investigación son algunas de las causas de esta sobreproducción de artículos y revistas. Por otra parte, hay que destacar también la aparición de revistas y congresos “depredadores” con las que algunos investigadores, ávidos por aumentar su número de publicaciones, intentan hinchar sus currículums con contribuciones científicas carentes de rigor y con una escasa revisión por pares.

Oras consecuencias de esta aceleración en la producción científica son el despiece de un mismo estudio científico en el mayor número de artículos posible (“salami slicing”), el plagio y la publicación de resultados difíciles de reproducir o incluso erróneos, muchas veces debidos a la precipitación a la hora de publicar.

Frenar la producción científica

En 2010, la Slow Science Academy de Berlín lanzó un manifiesto a favor de desacelerar este ritmo de producción en la ciencia.

«Decimos sí al flujo constante de publicaciones de revistas de revisión por pares y su impacto; decimos sí a la creciente especialización y diversificación en todas las disciplinas. Sin embargo, mantenemos que esto no puede ser todo. La ciencia necesita tiempo para pensar. La ciencia necesita tiempo para leer y tiempo para fallar. La sociedad debería darles a los científicos el tiempo que necesitan, pero lo que es más importante, los científicos deben tomarse su tiempo».

Al igual que los llamados “movimientos por la calma” Slow Food y Slow Fashion, el Slow Science tiene como objetivo que se valore más la calidad de los artículos científicos que su cantidad, para así promover una investigación mucho más reflexiva y pausada.

Una alternativa a la cultura del “publicar o perecer”

«Solo porque contar el número de publicaciones sea una forma fácil y rápida de evaluar la investigación, no significa que sea una buena forma de medir su calidad. La ciencia es un proceso lento, constante y metódico. No debemos esperar que los científicos proporcionen soluciones rápidas a los problemas de la sociedad».

Son palabras de Uta Frith, profesora emérita en el Instituto de Neurociencia Cognitiva del University College de Londres y una de las impulsoras del movimiento Slow Science. Cuenta en uno de sus artículos que, al igual que con la producción de alimentos, la lentitud puede ser una virtud.

Se trata de una forma de mejorar la calidad y una alternativa a la cultura predominante del “publica o muere”. Según Frith, “de momento no hay ningún plan a corto plazo, tan solo ir despertando conciencias. Cada vez somos más personas hablando sobre esta idea de manera individual en distintas partes del mundo”.

También en España algunos investigadores son conscientes de la necesidad de ralentizar el frenético ritmo de producción científica.

«Creo que la pertinencia de este movimiento se debe sobre todo a su apuesta por la convivialidad. Tenemos que enlentecer los procedimientos de la investigación para estar seguros de que nos estamos haciendo las mejores preguntas y eso equivale a escuchar a los concernidos e incorporarlos en la tarea del diseño de las preguntas y en la interpretación de las respuestas».

Así explica la importancia del Slow Science Antonio Lafuente, investigador científico del Centro de Ciencias Humanas y Sociales del CSIC y uno de los impulsores del movimiento en España.

En una de sus charlas, Lafuente recuerda la historia de Stefan Grimm, un profesor de toxicología en el Imperial College de Londres que se quitó la vida en 2014 tras recibir un correo electrónico de sus jefes quienes le exigían mejorar sus métricas académicas y obtener más dinero en proyectos de investigación.

Antes de suicidarse, Grimm envió un correo electrónico a sus compañeros universitarios relatando lo ocurrido.

«Mi jefe, el profesor Martin Wilikins, vino a mi oficina y me preguntó cuántas becas tenía. Después de enumerarlas, me dijeron que no era suficiente y que tendría que dejar la universidad dentro de un año como máximo. La realidad es que estos científicos en lo más alto de la jerarquía solo miran las cifras para juzgar a sus colegas, ya sean factores de impacto o ingresos en subvenciones. Después de todo, ¿cómo puedes convencer a tu jefe de que estás trabajando en algo emocionante si ni siquiera asiste a los seminarios regulares del departamento?».

Los científicos deben tomarse su tiempo

«En 1844, Charles Goodyear describió en una patente la preparación de caucho vulcanizado, uno de los materiales que más se producen actualmente en la industria química. Este gran descubrimiento no fue resultado de una inspiración repentina, sino que llegó después de más de 10 años de experimentos repetidos y resultados fallidos».

La historia la cuenta Jean-François Lutz, investigador del CNRS en el Instituto Charles Sadron de Estrasburgo, en la prestigiosa revista Nature Chemistry. En él critica la rapidez con la que se publican muchos artículos en el campo de la química antes de estar suficientemente maduros.

«Seguramente el Manifiesto de Slow Science no consiga un cambio de ritmo en la ciencia contemporánea. Sin embargo, alienta a los científicos a pensar en cómo trabajan y sobre su papel en la sociedad. Por tanto, cada investigador debería dedicar unos minutos a leerlo y luego sacar sus propias conclusiones. Después de todo, tomarse un tiempo para pensar es, en cierta manera, a lo que todos aspiramos».

Fuente: http://theconversation.com/la-ciencia-necesita-tiempo-para-pensar-el-movimiento-que-quiere-acabar-con-la-cultura-de-publicar-o-morir-116367?fbclid=IwAR2NJTYTwUQKMXCO2qym4srqS3hBKwMJn4tdj90nXaZj_rMIMNj6JXodu5M

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Editoriales y libros universitarios, la antorcha de la ciencia

Por: Ignacio Mantilla

La semana pasada se llevó a cabo un evento internacional de gran significado para el impulso de la ciencia en Iberoamérica: la primera Feria Internacional del Libro Universitario (Filuni), que tuvo lugar en el Centro de Exposiciones y Congresos de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y que contó con la Universidad de Salamanca como invitada de honor.

El evento le permitió a la Universidad Nacional de Colombia estrechar aún más los lazos académicos que la unen con la UNAM y evidenciar la solidez de nuestros sistemas editoriales. Con la universidad anfitriona se pactó la distribución mutua de títulos, es decir, en las siete librerías con que cuenta el campus de la UNAM se podrán adquirir algunos de nuestros libros, y en nuestras librerías estará disponible lo mejor de la producción de su editorial universitaria.

Este es un logro más que, justo en este Año Dual Colombia-México, consolida unas auténticas relaciones en todos los sectores, como lo destacó la embajadora de Colombia en México, Patricia Cárdenas, quien estuvo presente en la inauguración de la feria.

Hubo una buena participación de universidades colombianas y sobresalió la Universidad Nacional, que contó con un bello stand individual, en el que presentó cerca de 200 títulos, como parte de los más de 15.000 disponibles en el recinto, provenientes de 159 universidades.

La Filuni materializa el primer encuentro de gran magnitud en América Latina dedicado exclusivamente a reunir a las principales responsables de la difusión de la ciencia, ya que a las editoriales comerciales poco les atrae esta clase de libros, de esencia universitaria, salvo algunos trabajos de divulgadores consagrados. Sin las editoriales universitarias se perdería entonces esa importante conexión dinámica entre la comunidad científica y la sociedad en general.

De acuerdo con el más reciente informe del Centro Regional para el Fomento del Libro en América Latina y el Caribe (Cerlalc), conocido en agosto de este año y titulado “El espacio iberoamericano del libro 2016”, el año 2015 no fue un buen período para el comercio mundial de libros impresos y apenas alcanzó un monto de US$17.312 millones, suma que corresponde al 93 % de la que se había registrado en 2010. Pero, pese a este panorama, las editoriales universitarias en América Latina registraron 20.818 títulos, creciendo el 4,8 % con respecto al año 2014.

A manera de ejemplo, en la Universidad Nacional actualmente se publica un nuevo libro cada dos días. (En la UNAM se publican cuatro nuevos libros diariamente, en promedio). Si pasamos al plano de las publicaciones científicas en revistas indexadas, debo señalar que el lunes pasado el Ministerio de Educación Nacional publicó los resultados del Modelo de Indicadores de Desempeño de Educación (Mide), que nos ratifican como líderes en la producción científica del país, con 10.249 “artículos top”, seguidos por la Universidad de Antioquia, con 6.560, y la Universidad de los Andes, con 4.544 artículos.

Es claro que los cambios tecnológicos han venido impactando profundamente la manera como leemos e investigamos, y el ebook ya ganó un amplio terreno entre los lectores, especialmente los universitarios, no sólo por su facilidad de transporte, sino por su bajo costo. Iniciativas colombianas como la de Booklick, la aplicación que mediante el pago de una suma mensual permite acceder a 1.667 textos universitarios, son algo sumamente novedoso e ingenioso, impensable hace apenas unos cinco años. Por lo tanto, nuestra capacidad de sorprendernos en materia de libros aún no se ha agotado.

En el marco de la Filuni también hubo espacio para el Encuentro de Rectores: “Evaluación, indización y ranking de ediciones universitarias”, en el cual participamos 38 rectores y representantes de diversos países.

La reunión tuvo como propósito reflexionar sobre las condiciones en las que se han venido desarrollando los sistemas de clasificación y su impacto en la política educativa de los países iberoamericanos. Desde el evento se hizo un fuerte llamado a evitar el uso de los ránquines como único elemento para medir el desempeño de las instituciones y se lanzaron fuertes críticas al desconocimiento de la realidad propia del sistema editorial iberoamericano por parte de las bases de datos diseñadas desde el modelo anglosajón, como Journal Citation Reports, de la Web of Science, y el Scimago Journal Rank, del Grupo Scimago.

Entre las principales críticas se mencionó que “no permiten un reconocimiento de la diversidad de producción de conocimiento”, y se las acusa de valorar mucho más las publicaciones en inglés sobre otros idiomas, “dejando de lado la importancia de la multiculturalidad”. Asimismo, en el documento marco del encuentro se señala la desventaja en que están, para ser calificadas, las publicaciones en el área de las ciencias sociales y humanas, que en su mayoría dan a conocer sus productos en forma de capítulos de libros. Todo esto afecta fuertemente a países como España, que ocupa un lugar clave en la lista de productores de libros a nivel mundial.

Otro tema importante que surgió en el Encuentro de Rectores fue la preocupación generalizada por algunas consecuencias de los sistemas adoptados en los países iberoamericanos para estimular las publicaciones de los profesores universitarios, los cuales frecuentemente conducen solamente a un afán de lucro.

En efecto, hay quienes han dejado de escribir y publicar para fomentar el avance de la ciencia o divulgarla y hacerse legibles entre sus pares académicos y estudiantes, y por el contrario se han propuesto únicamente producir muchos artículos de poca utilidad o impacto real, para elevar su sueldo.

Resulta preocupante observar casos en los que satisfacer a los evaluadores es el objetivo primordial, como si la crítica fuese más importante que el texto y la acumulación de “puntos” reconocidos por la publicación fuese el único fin.

Estoy seguro de que, con esas reglas, hoy en día un físico con la hoja de vida de Albert Einstein sería rechazado en muchas instituciones por su baja producción de artículos científicos.

Fuente: http://www.elespectador.com/opinion/editoriales-y-libros-universitarios-la-antorcha-de-la-ciencia-columna-711154

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Producción académica en Irán: El secreto persa

Roberto Rodríguez

Las dos principales compañías productoras de bases de datos e indicadores sobre la producción académica indexada, es decir, Thomson Reuters (índice Journal Citation Reports JCR) y Elsevier (índice Scopus), coinciden en identificar a la República Islámica de Irán como el país con la mayor tasa de crecimiento en materia de publicación de artículos en las revistas reconocidas por dichos índices.

Según la base de datos Scopus, en el 2000 la producción académica indexada de Irán fue de 1,743 artículos, mientras que en 2014 alcanzó la cifra de 39,943, lo que representa un promedio de crecimiento de 25.5 por ciento anual en el periodo. Con ello, Irán transitó de la posición 48 a la décimo sexta a escala mundial, en apenas década y media.

Cabe agregar que la nación islámica pasó, en el mismo periodo, de siete revistas locales indexadas a 137. Con tales datos, Irán se perfila como una de las naciones más dinámicas en la generación de productos científicos de alcance internacional, condición que comparte con países como China, India, Corea del Sur y Brasil, a su vez potencias emergentes en el rubro.

Entre otros impactos de la reciente consolidación de capacidades científicas y tecnológicas en la antigua Persia, cabe referir al incremento paralelo del número de patentes de invención solicitadas por personas residentes en ese país. De acuerdo con la base de datos del Banco Mundial “Indicadores del Desarrollo Mundial”, en Irán se pasó de 410 solicitudes en 2000 a 13,683 en 2014. Esta última cifra está al nivel de las solicitudes de patentes de residentes de Francia e India, y supera notablemente a la de países como Italia, Brasil, Canadá, Australia y los países nórdicos. Para acabar pronto, el número de solicitudes de patentes por parte de residentes en Irán es mucho mayor al total de América Latina y el Caribe en el mismo renglón, que según la misma fuente de datos sumó apenas 7,372 solicitudes en 2014.

Comparemos los datos de Irán con los de México. En el 2000 los académicos de nuestro país publicaron, según la base SCOPUS, un total de 6,133 artículos en revistas indexadas, casi el cuádruple de la producción iraní. Pero en 2014 la producción mexicana fue de 18,705 artículos, menos de la mitad de los alcanzados por aquel país. La posición de México a nivel global pasó del lugar 28 al 29, o sea que no mejoró ni lo contrario.

¿Cómo se explica el desarrollo científico y tecnológico de un país que atravesó una década de guerra -el conflicto Irak Irán de los ochenta, que costó a ese país más de un millón de víctimas- y un largo periodo de sanciones de comercio e intercambio internacional a cargo de Estados Unidos y varios países de Europa Occidental? ¿Qué factores explican el despegue científico de una nación que abrazó la tradición islámica como fórmula de gobierno y ordenamiento cultural y social?

Hay varios elementos explicativos. Primero el notable desarrollo del sistema de educación superior de ese país en los últimos años. Irán pasó de una matrícula total de nivel terciario de menos de un millón de estudiantes en el 2000 a 4.7 millones en 2014, cifras que incluyen a los inscritos en las modalidades de profesional técnico, licenciatura y posgrado. En términos de cobertura los indicadores correspondientes son 19.3 por ciento en el 2000 y 65.9 por ciento en 2014. En comparación, México tenía en 2000 poco más de dos millones de estudiantes de nivel superior, y en 2014 aproximadamente 3.5 millones, casi cuatro si se cuentan los inscritos en educación superior a distancia. El cambio en la tasa de cobertura mexicana ha sido, en el periodo de referencia, de 21 a 35 por ciento, lo que quiere decir que en Irán se consiguió duplicar el desempeño de México en este aspecto.

Además, según datos de UNESCO, en Irán el número de estudiantes en programas de doctorado supera la cifra de 70 mil, lo que equivale a la matrícula del nivel en países como Francia, Japón, Corea o Brasil. En México la matrícula total de doctorado, contando en ella la de instituciones públicas y privadas, supera ligeramente la cota de treinta mil. Como es sabido, el volumen de estudiantes en programas doctorales tiene un efecto directo en la cantidad de publicaciones científicas, ya que ellos, los estudiantes de ese nivel, suelen participar en los colectivos de investigación de las instituciones que los ofrecen.

La producción científica y el desarrollo tecnológico de Irán se concentra en áreas de ingeniería y medicina clínica, aunque también ha cobrado presencia relevante en informática, biociencia, industria espacial y nanotecnología. Tal y como señala el Informe de la UNESCO sobre la ciencia hacia 2030, parte de la explicación se explica como reacción a un entorno económico adverso: “A medida que la presión de las sanciones económicas aumentaba, el gobierno ha tratado de estimular la innovación endógena.” El despliegue de esa política se basó, principalmente, en la fortaleza de la economía por los recursos energéticos disponibles. Con la disminución de los precios internacionales del petróleo y el gas, los recursos para investigación han comenzado a disminuir, lo que puede tener implicaciones severas a corto plazo. Igual que por estos rumbos.

También se identifica como problema la “sobre-educación” de la fuerza de trabajo. Según un estudio de Nader Habib (Iran’s Overeducation Crisis: Causes and Ramifications), hacia 2011 sólo el 46 por ciento de los graduados universitarios participaba directamente en el sector laboral formal. Y como las mujeres han superado notablemente la proporción masculina de la matrícula, el desempleo universitario las afecta con mayor incidencia.

Como sea, vale la pena seguir la pista del caso de Irán -80 millones de habitantes en 2016- para reflexionar sobre nuestras alternativas de desarrollo.

Fuente del articulo: http://www.educacionfutura.org/produccion-academica-en-iran-el-secreto-persa/

Fuente de la imagen: http://www.educacionfutura.org/wp-content/uploads/2014/04/CIENCIA-Y-TECNOLOGIA-EN-MEXICO-e1416613796376-300×184.png

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EE.UU: La “hacker” de los artículos académicos

EE.UU/02 de septiembre de 2016/mba.americaeconomia.com/Por: El Espectador

 

El nombre de Alexandra Elbakyan es cada vez más popular en el mundo académico. El nombre de Alexandra Elbakyan es cada vez más popular en el mundo académico. Para algunos es una especie de Robin Hood que ha permitido que miles de estudiantes e investigadores ingresen de manera gratuita a muchos artículos científicos. Para otros es una suerte de criminal que hackeó bases de datos por las que usualmente hay que pagar. Por eso ya tiene una demanda que reposa en una corte federal de Estados Unidos, por infracción de derechos de autor y fraude informático.

Elbakyan es de Kazajistán y tiene 28 años. Hace unos cinco, luego de estudiar en Alemania y hacer un curso en Estados Unidos, se percató de las barreras que había en su país para acceder a artículos académicos. El costo de muchos de ellos impedía que los estudiantes los consultaran. Por eso creó Sci-Hub, un portal que hoy cuenta con alrededor de 50 millones de publicaciones gratuitas.

Aunque en principio se creía que quienes más lo visitaban eran alumnos de países de bajos ingresos, hoy se sabe que académicos de todo el mundo prefieren entrar a él que pagar a una revista indexada. Como lo reveló la revista Science, muchas de las ciudades donde se registran más ingresos a este buscador son sedes de reconocidas universidades. Silicon Valley y San Francisco, en Estados Unidos, son algunas de ellas.

Pero la mayor parte de las visitas se registran en Europa y Asia. España, Alemania, Francia e Italia tienen algunos de los registros más altos del Viejo Continente. Por otro lado, Irán, China e India lideran el top global. El primero sobrepasa las 2.600.000 visitas por hora. El segundo se acerca a las 2.350.000 y el tercero se aproxima a los dos millones. En Latinoamérica, Brasil, Chile, Perú, México, Argentina y Colombia son los que más publicaciones académicas hackeadas consumen. África, con la excepción de Túnez, Egipto y Marruecos, no tiene registro de visitas constantes.

Pese a los llamados de atención y las críticas que generaron estos nuevos datos, Elbakyan parece no ceder. Quiere que el libre acceso a artículos académicos sea cada vez mayor.

Tomado de: http://mba.americaeconomia.com/articulos/reportajes/la-hacker-de-los-articulos-academicos

 

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