Bruselas invertir en la educación en zonas de conflicto significa «invertir en paz»

Europa/Bélgica/19 Marzo 2017/Fuente: teinteresa/Autor:Europa Press

El comisario europeo de Ayuda Humanitaria y Gestión de Crisis, Christos Stylianides, ha asegurado este viernes que invertir en la educación en zonas de conflicto significa «invertir en paz» y en el futuro.

«Cada niño debe tener la oportunidad de aprender», ha señalado Stylianides en un desayuno informativo del Fórum Europa. «Cuando invertimos en educación, invertimos en paz y estabilidad, en el progreso y, por su puesto, invertimos en el futuro», ha añadido.

El comisario europeo ha recalcado que la educación es «la base de todo lo demás» y que sirve de escudo protector para los niños que viven en zonas de conflicto.

«Con la educación podemos protegerles de muchos tipos de violencia. Podemos protegerles para que no sean reclutados por grupos terroristas o de la mano de obra infantil», ha asegurado Stylianides.

Según el comisario europeo, la educación también da a los niños «un sentido de dignidad y normalidad» y, además, sirve para prevenir a las generaciones perdidas.

«Todos reconocemos que la educación es un derecho humano. Al menos 40 millones de niños no están escolarizados en las zonas de conflicto», ha asegurado. «Debemos cerrar esta brecha», ha señalado.

Para resolver esta situación, Stylianides ha asegurado que un 60 por ciento de la financiación europea para la educación va destinada a zonas de conflicto.

COOPERACIÓN Y COORDINACIÓN

«Sólo obtendremos resultados sólidos si todos nos coordinamos y cooperamos mejor», ha señalado Stylianides. «Todos debemos prevenir antes que curar», ha añadido.

El comisario europeo ha advertido que para mejorar la situación también hay que involucrar al sector privado y «tener en cuenta la experiencia de sus expertos» y apoyar a la mejora de la capacidad de los profesores. «Sin maestros cualificados, no puede haber una educación», ha asegurado.

Fuente de la noticia: http://www.teinteresa.es/mundo/Bruselas-invertir-educacion-conflicto-significa_0_1760824149.html

Fuente de la imagen: http://www.euractiv.com/wp-content/uploads/sites/2/2015/01/christos_stylianides.jpeg

 

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Película. Rojo como el cielo

Rojo como el cielo: Como consecuencia de un fatídico accidente, Mirco, un niño italiano protagonista de esta historia, sufre una lesión cerebral que le supondrá una ceguera crónica. ¿Será capaz de superar las dificultades que ello supone?

La historia se remonta a la infancia de Mirco, época en la que era un alegre y brillante niño de Toscana que se enloquecía por las películas. Por ese entonces, nadie sospechaba que un juego le cambiaría el destino para siempre, pero así fue cuando el viejo rifle con el que se entretenía Mirco se disparó de forma accidental y lo hirió en la cabeza.

Basada en una historia real, sucedida en una villa de la Toscana a inicios de la década de los setenta, Rojo como el cielo cuenta parte de la vida de Mirco, un niño de 10 años, obsesionado con las películas. Un día, sufre un accidente con un rifle que lo deja permanentemente sin vista. Es enviado a un colegio especial para personas invidentes, pues en esta época los niños discapacitados son obligados a estudiar separadamente de los demás . Mirco se encierra en sí mismo y cree que volverá a ver. Un día conoce a Felice, un niño que nació ciego y quien le pregunta a Mirco cómo son los colores. Él le responde que los colores son como representaciones que uno puede sentir (ejemplo: el color café lo representa con la corteza de los árboles; el azul con ir en bicicleta mientras el viento te golpea en la cara, entre otros ejemplos). Pronto se vuelven amigos.

Un día, el profesor de Mirco le pide a la clase un ensayo sobre la naturaleza, pero el niño tiene pensado hacer otra cosa. Le pide ayuda a su amigo Felice, pero para ello necesitan una grabadora que está resguardada en la oficina del director. Un vez que la consiguen, junto con las cintas, Mirco graba los sonidos que pueden ayudarle con su trabajo; por ejemplo: el ruido de la regadera, el sonido del viento y el canto de los pájaros, entre otras cosas. Todo esto lo lleva a cabo con la ayuda de su amigo. Una vez editado, el niño se lo presenta a una niña, Francesca, quien es hija del conserje y todas las tardes escucha la radio en su estación favorita; ahí relatan historias de aventura y fantasía. Ambos se vuelven amigos; tiempo después, una tarde se escapan para irse al teatro a ver una película, porque Francesca nunca ha visto alguna. Su intención es entrar sin pagar la entrada; sin embargo, son descubiertos por el guardia, quien los echa del lugar.

Después de que el profesor escucha la cinta de Mirco sobre la naturaleza, llama al director para saber cómo calificar al niño. Tanto Mirco como el profesor esperan que el director se sorprendiera, pero sucede todo lo contrario: además de regañarlo por haber tomado la grabadora sin permiso, también se le reprende por no haber hecho el ensayo como se le había solicitado. Mirco entristece y evita ir a clases; incluso deja de hablar con los demás, sólo se queda en su cama sin hacer nada. Su profesor no se queda de brazos cruzados y le regala una grabadora, diciéndole que siga con sus cuentos, ya que sabe que tiene un gran talento oculto.

Pronto a Mirco le viene una gran idea: hacer un cuento y contarla como lo hacen en la radio. Junto con Francesca, Felice y el resto de sus compañeros de clase, quienes poco a poco se integran para ayudar a hacer el cuento, a partir de los dictados de su imaginación y el sonido de objetos a su alcance. Empiezan a hacer un cuento de aventuras y magia, pero pronto son descubiertos por una de las monjas y son llevados a la oficina del director, quien intuye que el responsable de todo aquello es Mirco. Lo castiga quitándole la grabadora y no dejándolo participar en el recital que se hace todos los años en el colegio para recaudar fondos.

Al saber tal castigo, el profesor de Mirco en seguida se dirige a la oficina del director, donde empieza una disputa. El director con su mente cerrada de que los niños no tendrán una vida «normal», ya que no son aceptados ante las demás personas. El profesor le dice que no se ha dado cuenta que los niños pueden hacer las mismas cosas que quienes cuentan con el sentido de la vista, sólo que no se les ha dado la oportunidad y le pide que Mirco se encargue de dirigir y participar en el recital. El director acepta, ya que están bajos de presupuesto y el recital es la única manera de evitar que el colegio cierre. Feliz, el profesor le comunica a Mirco la gran noticia, levantando los ánimos del entristecido muchacho.

El día del recital, cuando los adultos entran al pequeño teatro del colegio, les entregan una banda negra para que se tapen los ojos a la hora de empezar. El recital comienza y todos los asistentes quedan maravillados, al ser la primera que acuden a un recital donde sólo hay que escuchar e imaginarse cómo es cada ruido que se presenta; como si estuvieran tomando el lugar de una persona que no puede ver. Al final del recital, todos aplauden, inclusive los padres de los niños y, entre ellos, los padres de Mirco, quienes deciden llevárselo a casa en vacaciones de verano. Una vez ahí, Mirco se encontrará con su antiguos amigos de juegos quienes lo tratan como si nada hubiera sucedido y Mirco no hubiera perdido la vista. Aunque Mirco nunca vuelve a ver, se convierte en uno de los más famosos editores de sonido.

Descargar en: https://www.youtube.com/watch?v=0lgQc66P1PU

Imagen: http://www.agendamenuda.es/images/que-hacer/cine/cuartel/rojo-como-el-cielo.jpg

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