Page 2 of 3
1 2 3

Xavier Kirchner: “Las TIC permiten la heterogeneidad en clase”

08 de noviembre de 2017 / Fuente: http://blog.tiching.com/

Xavier Kirchner

Fue el precursor de la introducción de las TIC en el aula a través del programa EduCAT1x1. ¿Cómo nació la idea?
Durante la etapa en la que fui director de segundo nivel en el centro de I+D de Telefónica en Barcelona, muchas de las personas con las que trabajaba, en su mayoría jóvenes, eran precursores de lo que hoy llamamos nativos digitales: tenían la capacidad de hacer muchas cosas en paralelo. Fue cuando tomé conciencia de que se debía potenciar esa habilidad y de que la educación no podía seguir siendo lineal como hasta entonces.

Y, de la idea al hecho, ¿qué pasos siguió?
Me reuní con el Consejero de Educación en aquel momento, Ernest Maragall, y le propuse iniciar un proyecto para avanzar en la implementación de la educación digital. Además, la coyuntura era favorable: en primer lugar, la idea tuvo muy buena acogida entre la comunidad educativa; en segundo lugar, ya existía la posibilidad de acceder a netbooks económicos; en tercer lugar, habían nacido iniciativas para poner al alcance de los profesores libros de texto digitales; y, por último, el Ministerio de Educación había puesto en marcha el programa Escuela 2.0, que permitió invertir en infraestructura y llevar wifi a las escuelas. Todo ello facilitó el nacimiento de EduCAT1x1.

Debió de haber dificultades…
Podría nombrar muchas, pero la más grande vino de la mano de la conectividad de las escuelas, que fallaba mucho y que costaba arreglar porque había varias empresas responsables de garantizarla. No había un ente único que se encargara de extremo a extremo de la conectividad y esto dificultaba encontrar y solucionar los problemas.

¿Estamos preparados para asumir el reto de introducir la tecnología en el aula?
Sí, porque la tecnología digital está en la vida de todos. Todo el mundo está colgado de un smartphone, usa una tablet o un ordenador. No hay una brecha digital que deje a los ciudadanos fuera del sistema. En el caso de Cataluña, hay una oferta editorial importantísima y las escuelas tienen ya la infraestructura adecuada. El único problema que había antes es que no existían los recursos para introducir la tecnología digital de forma fácil para los docentes.

Desde su experiencia, ¿cómo deben convivir los recursos educativos analógicos y los digitales?
Quien mejor lo puede decir son los docentes. Son quienes pueden decidir cómo educar a los alumnos, porque los conocen y conocen la situación en la que viven. Y para ello deben tener la libertad para combinar los recursos analógicos y digitales.

¿Cree que la digitalización es la clave para personalizar el aprendizaje de los estudiantes?
La educación personalizada es un objetivo pedagógico presente desde siempre: no hay dos alumnos iguales. Pero, teniendo en cuenta el contexto en el que se encuentra la escuela occidental hoy, con alrededor de 20 o 30 alumnos por docente, con horarios… es imposible. Los medios digitales facilitan que el profesorado pueda elegir cuáles son los mejores recursos para combinar la estrategia docente con la estrategia de aprendizaje del alumno.

¿Cómo?
El mundo digital permite la heterogeneidad dentro de la clase, porque mientras yo estoy sentado en un pupitre viendo los números primos en un módulo educativo básicamente visual, a mi lado mi compañero los estudia mediante un módulo básicamente explicativo. Y nuestro profesor, en lugar de explicar a todos a la vez qué son los números primos, puede estar pendiente de qué problemas tenemos. Esto es un sueño que con métodos analógicos era sólo posible si tienes un profesor particular, pero no con un profesor por cada 30 alumnos.

Viendo que no hace tanto esta imagen era impensable, se hace difícil predecir el futuro.
Sí. Sin embargo, se intuye por dónde va a ir, porque hay una tendencia que está entrando con mucha fuerza: la educación basada en recomendaciones de filtrado colaborativo. Se trata de un sistema que tiene dos vías: una que viene determinada por la información sobre las necesidades del alumno, que el sistema recaba mediante sus ejercicios y evaluaciones; y otra viene determinada por la actividad y preferencias mostradas en redes sociales. Así, mediante los recursos educativos adaptados y la posibilidad de recomendaciones individualizadas, se puede llegar a fomentar muchísimo la educación personalizada.

Fuente entrevista: http://blog.tiching.com/xavier-kirchner-las-tic-permiten-la-heterogeneidad-en-clase/

Comparte este contenido:

Argentina: ETec, la escuela secundaria con vistas al futuro y la tecnología

29 octubre 2017/Fuente:losandes /Autor:GUÍA EDUCATIVA DE CUYO

Durante 2017 se dio inicio a las actividades de la denominada ETec, una innovadora escuela secundaria que propone dar un salto hacia la educación del futuro, con el sello de la excelencia educativa, calidad pedagógica y tecnología de punta.

En este exitoso primer año transcurrido, la ETec ha logrado consolidar un gran crecimiento personal y social entre sus estudiantes, caracterizado por el respeto a la diversidad y la participación activa de la familia en las actividades educativas.

Proyecto pedagógico

La institución plantea la formación integral de sus estudiantes, con un fuerte componente en el área de las Ciencias y la Tecnología, con dos títulos: Técnico en Electrónica o Técnico en Informática Profesional y Personal.

Bajo la premisa de una formación integral en valores como la responsabilidad, la conciencia ética y la solidaridad, la ETec estimula la promoción de conductas de sostenibilidad de los recursos naturales y el deporte, poniendo a disposición de sus jóvenes un polideportivo y un gimnasio. Además ofrece una formación especial para presentarse a rendir exámenes de inglés internacionales.

La educación y la tecnologíaa

En los últimos años hemos presenciado una revolución tecnológica que ha modificado nuestra vida cotidiana y por consiguiente, la forma en que enseñamos y aprendemos. A su vez, la necesidad de aptitudes tecnológicas, se extienden a todo tipo de profesiones. Según la revista Forbes “se estima que el 65% de los niños que entren a la primaria este año, terminarán trabajando en puestos que aún no existen”. Todo indica que educar mirando al futuro es -hoy como ayer- el gran desafío.

Por este motivo, la ETec impulsa un novedoso proceso de enseñanza-aprendizaje, a través de sistemas educativos adaptados a los nuevos desafíos laborales y sociales, en el que el aprendizaje se da a través de la tecnología. Esto se ve reflejado con la incorporación de aulas digitales, notebooks individuales, talleres de electrónica, ciencias básicas, ciencias naturales e informática.

Numerosos estudios han revelado que la estimulación y motivación aumenta al integrar tecnologías durante el aprendizaje.

La ETec está ubicada en calle Perito Moreno 2397, Benegas, Godoy Cruz. Y para más información pueden ingresar en http://etec.um.edu.ar

Fuente de la noticia: https://losandes.com.ar/article/view?slug=etec-la-escuela-secundaria-con-vistas-al-futuro-y-la-tecnologia

Fuente de la imagen: https://d1bi2srgse3uhl.cloudfront.net/uploads/2017/10/image59f22815022bd.jp

Comparte este contenido:

Programador de ordenadores cuánticos: el oficio futurista que nadie quiere aprender

07 de junio de 2017 / Fuente: http://www.eldiario.es

Por: Marta Sofía Ruíz

Aprender a programar ordenadores cuánticos podría ser una inversión de tiempo rentable de cara al futuro si esta tecnología acaba siendo la revolución que parece estar llamada a ser. Sin embargo, la disparidad de modelos, la incertidumbre sobre su futuro y la alta especialización por el momento necesaria para entender los ordenadores y procesadores existentes frenan la aparición de nuevos profesionales y podrían también ralentizar el avance en el campo. 

Rodeados de promesas, los ordenadores del futuro avanzan hacia la supremacía cuántica. Cuando lo consigan ( algo que Google tiene previsto para antes de que acabe el año), querrá decir que esta tecnología es capaz de realizar un cálculo fuera del alcance de cualquier ordenador actual. Sin embargo, programar los ordenadores que comercializa D-Wave o los chips cuánticos con los que trabaja la firma del todopoderoso buscador  es mucho más complicado que darle órdenes a un ordenador convencional.

A la hora de hablar sobre programación cuántica, es necesario distinguir entre los tres tipos de tecnologías que se han desarrollado hasta el momento. Por un lado están los ordenadores cuánticos analógicos sobre los que trabajan distintos grupos de investigación. Por otro, los llamados  «ordenadores universales», el tipo de modelos en los que trabajan empresas como Google o IBM gracias a procesadores cuánticos y simulaciones digitales, pero que aún no existen como tal en realidad. Finalmente, hay que distinguir  los modelos de ordenadores cuánticos que comercializa la empresa D-Wave, en ocasiones cuestionados: se trata de computadoras analógicas que emplean el templado cuántico sobre materiales superconductores y que tampoco han conseguido alcanzar la supremacía.

Esta disparidad de tecnologías hace que, por el momento, la palabra programar pueda tener distintos significados en este campo: “Programar en el caso de un ordenador universal puede querer decir encontrar un conjunto de puertas físicas que se puedan utilizar para realizar la operación deseada”, explica a HojaDeRouter.com Roger Melko, investigador de la Universidad de Waterloo y director de un grupo multidisciplinar sobre computación cuántica. “En el caso de un ordenador de templado cuántico, programar puede querer decir definir el problema de optimización que debe ser resuelto [el único tipo de problema con el que pueden trabajar estos ordenadores]”, añade.

A pesar de esto, y conscientes de la necesidad de que cada vez más investigadores y programadores se acerquen a esta tecnología, las empresas están comenzando a ofrecer herramientas para que las personas ajenas a sus proyectos comiencen a familiarizarse con sus lenguajes y sus posibilidades. D-Wave, por ejemplo, hacía pública su herramienta Qbsolv a principios de año con el objetivo de que los desarrolladores aprendieran a interactuar con sus ordenadores sin necesidad de provenir del campo de la física cuántica.

IBM también ha tratado de acercar la programación en este ámbito a otros desarrolladores con  IBM Quantum Experience, una plataforma de computación en la nube que, según la descripción de la compañía, permite a los usuarios ejecutar algoritmos y experimentos en el procesador, trabajar con los cúbits individuales ( que pueden tomar el valor cero, uno o la superposición de ambos ) y explorar tutoriales y simulaciones sobre lo que será posible realizar gracias a esta tecnología.

IBM tiene una plataforma de computación cuántica en la nube llamada IBM Quantum Experience
IBM tiene una plataforma de computación cuántica en la nube llamada IBM Quantum Experience

Sin embargo, programar un ordenador cuántico para que realice labores útiles no es una tarea sencilla. « E s complicado escribir programas que puedan aprovechar el poder de los ordenadores cuánticos de una forma en la que se obtengan resultados útiles y fiables”,  explica Frederic Chong, investigador de la Universidad de Chicago especializado en el campo de las tecnologías cuánticas“Es difícil porque un ordenador cuántico puede manejar simultáneamente varias soluciones para un mismo problema, a través de una propiedad denominada ‘superposición’, pero cuando tratas de medir el resultado solo obtienes una respuesta un tanto aleatoria”, concreta.

Aún así, hay quienes ven en este tipo de programación una clara oportunidad de negocio de la que podrían surgir nuevas compañías. De hecho, ya hay una incubadora de ‘startups’ canadiense ( Creative Destruction Lab) que está llevando a cabo una competición para encontrar empresas que construyan un proyecto en torno a la programación de ordenadores D-Wave.

UN LLAMAMIENTO A LOS PROGRAMADORES

Estos canadienses no son los únicos que ven en la programación cuántica una oportunidad. Recientemente, varios investigadores del Laboratorio Cuántico de Inteligencia Artificial de Google publicaron un artículo en la revista Nature en el que mencionaban la escasez de expertos con la habilidad de escribir algoritmos cuánticos. En el texto también afirmaban que aquella empresa que consiguiera ponerse, aunque fuera ligeramente, a la cabeza pondría a las demás en problemas para alcanzarla debido a esta falta de especialistas y al tiempo necesario para desarrollar los algoritmos.

En contraste, Chong no se muestra preocupado por una posible falta de talento: “Ahora mismo hay muchos estudiantes brillantes e investigadores interesados en hacer avanzar al campo”, explica. “También se está llevando a cabo mucho trabajo para desarrollar ‘software’ que haga más fácil a los programadores escribir programas para ordenadores cuánticos”, defiende este experto.

Roger Melko, sin embargo, cree que más allá de los expertos enormemente especializados que trabajan ahora mismo en las distintas tecnologías cuánticas, una generación de programadores más generalista está todavía lejos de existir. “Será en un futuro lejano”, puntualiza. Según el científico, aún no sabemos exactamente cómo será el ‘hardware’ de un ordenador cuántico, por lo que tampoco se puede saber cómo se traducirá el lenguaje humano a código máquina.

Algunos expertos defienden la necesidad de centrarse en el 'hardware'
Algunos expertos defienden la necesidad de centrarse en el ‘hardware’

“Ahora mismo los ordenadores cuánticos solo están comenzando la transición entre la academia y el dominio público, y el interés crece en consecuencia”, explica el investigador. “Pero pasarán muchos años antes de que sean útiles para el público general”, añade. Melko considera que muchos otros avances en computación convencional, ‘machine learning’ o inteligencia artificial «irán y vendrán» antes de que los ordenadores cuánticos comiencen a tener un impacto real en nuestras vidas, y defiende que la clave se encuentra todavía en el ‘hardware’.

Construir el ‘hardware’ es el mayor reto. La gente aún no está de acuerdo exactamente en cuál será el aspecto de un cúbit. ¿Será un anillo superconductor, un ion frío atrapado en un rayo láser, un espín nuclear o algo diferente? Los científicos todavía trabajan en esta cuestión básica todos los días”.

Esta incertidumbre, así como la disparidad entre las tecnologías cuánticas existentes, hace que solo aquellos científicos más especializados trabajen en el desarrollo de algoritmos. La de programador de ordenadores cuánticos es por el momento una profesión del futuro (no muy cercano) que expertos de fuera del sector  no parecen demasiado interesados en aprender, algo que algunas compañías temen que pueda frenar el avance de esta tecnología.

———————–

Las imágenes son propiedad de D-Wave e IBM Research ( 2 y 3)

Fuente artículo: http://www.eldiario.es/hojaderouter/tecnologia/programacion-ordenadores_cuanticos-algoritmos-empleo_0_647785349.html

Comparte este contenido:

Colombia: Estudiantes viajarán a China para formarse en TIC

América del Sur/Colombia/21 Mayo 2017/Fuente:enter /Autor:ANA MARÍA LUZARDO

Un total de 15 estudiantes colombianos fueron seleccionados por Huawei para participar del programa Semillas del Futuro. Esta iniciativa tiene como objetivo capacitar a jóvenes amantes de la tecnología en las TIC, a través de un entrenamiento de dos semanas en la casa matriz de la compañía en China. En su cuarta edición, la convocatoria se enfocó en la búsqueda de ideas innovadoras para contribuir a la construcción de ciudades más inteligentes, incluyentes y sostenibles.

La competencia fue a nivel nacional y es organizada por Huawei, en compañía del Ministerio de Tecnologías de la Información y las Comunicaciones (MinTIC). Esta vez se registró la participación de más de 150 estudiantes de toda Colombia, de los cuales 15 estudiantes de carreras TIC fueron los beneficiados. Los ganadores provienen de ciudades como Bucaramanga, Bogotá, Medellín, Cali, Barranquilla y Tunja.

Las opiniones de Huawei y el MinTIC

“El Ministerio TIC apoya la creatividad y la innovación. Por eso me siento orgulloso de los 15 jóvenes ganadores de la convocatoria de Semillas del Futuro. Sus proyectos lograrán que las ciudades se conviertan en espacios inteligentes”, expresó el Ministro de Tecnologías de la Información y las Comunicaciones, David Luna.

Por su parte, Xiong Yihui, presidente de Huawei en Colombia, manifestó que “estamos convencidos de que Semillas del Futuro, como programa insignia de responsabilidad social de Huawei, es una herramienta que apoya al país a impulsar el desarrollo del talento local en áreas relacionadas con la innovación y la tecnología, a la vez que contribuye a cerrar brechas en educación”.

El viaje a China será del 14 de junio al 2 de julio del presente año, y en este los estudiantes tendrán la oportunidad de participar en un intercambio cultural y académico, a través de la experiencia que se concentrará en las ciudades de Beijing y Shenzhen.

Semillas del Futuro ha beneficiado a más de 2.600 estudiantes en 96 países

Desde su creación a nivel mundial en 2008, en el programa Semillas del Futuro han participado más de 2.600 estudiantes de 96 países. A través de este se les ha ofrecido la oportunidad de entrenarse en los centros de investigación y desarrollo de la compañía en China. Con el grupo de estudiantes que viajará al país asiático este año, Colombia suma 60 estudiantes beneficiados por el programa.

La ciudad con más cupos en esta edición es Bucaramanga, con cinco estudiantes: Luis Felipe Barragán de 20 años y estudiante de séptimo semestre de ingeniería de sistemas en las Unidades Tecnológicas de Santander; Andrés Felipe Rodríguez, de 23 años, y Elkin Calderón, quienes cursas décimo semestre de ingeniería electrónica en la Universidad Industrial de Santander; Brian de Jesús Parra, estudiante de Ingeniería Informática y Laura Vargas, estudiante de Ingeniería Electrónica de la Universidad Pontificia Bolivariana.

La capital del país contará con cuatro talentos de diferentes universidades: Anderson Eduardo Arévalo, estudiante de Ingeniería Electrónica de la Universidad Central; Mateo Laguna Guantiva, quien cursa doble programa en las carreras de Física e Ingeniería de Sistemas y Computación en la Universidad de los Andes; Julián David Sierra, estudiante de Ingeniería de Telecomunicaciones de la Universidad Santo Tomás y Natalia Otero, estudiante de Ingeniería de Sistemas de la Universidad Javeriana.

Medellín, por su parte, también cuenta con participación en la versión de este año con dos jóvenes talentos: Andrés Felipe Hurtado Rojas y Brayan Antonio Matos Romero, quienes cursan Ingeniería de Telecomunicaciones en la Universidad de Antioquia.

Las ciudades intermedias también tendrán sus participantes

A su vez, en representación de la ciudad de Cali, participarán Andrés Hernando Muñoz Herrera de la Universidad Javeriana, y Santiago De Los Ríos de la Universidad ICESI. Barranquilla estará representada por Francisco Junior Hernández Vélez, de la Universidad del Norte de Barranquilla; Y Tunja, por Omar Alejandro Botía Navas, de la Universidad Pedagógica y Tecnológica de Colombia.

Fuente de la noticia: http://www.enter.co/especiales/colombia-conectada/estudiantes-colombianos-viajan-a-china-para-formarse-en-tic/

Fuente de la imagen: http://contenidos.enter.co/custom/uploads/2017/05/EstudiantesF.jpg

Comparte este contenido:

¿Es posible todavía educar para la utopía?

19 de abril de 2017 / Fuente: http://compartirpalabramaestra.org

Por: Jairo Hernando Gómez

El pensamiento utópico como método se realiza a partir de imágenes, ideas, sensibilidades o sentimientos que buscan la trasformación de la realidad.

Existen muchos argumentos para rechazar las utopías sociales, ya sea por considerarlas frustrantes por el hecho de fijarse objetivos muy altos e inalcanzables, e indefectiblemente llevarnos a regímenes totalitarios (Karl Popper, por ejemplo); por ser heréticas en tanto cuanto seculariza la idea del paraíso en la tierra; por ser irrealizables sino se apoyan en el conocimiento científico disponible (Marcuse y algunos neomarxistas); o, simplemente, porque, como Pangloss, el patético filósofo del Cándido de Voltaire, o lo que es lo mismo, del individualismo rampante, se cree que estamos en el mejor de los mundos posibles.

No obstante, las utopías sociales han constituido desde siempre uno de los grandes motores de cambio en la humanidad. En efecto, desde la República de Platón, pasando por los grandes utopistas (Tomás Moro -quien creó el término-, Bacon, Campanella, Fourier, Owen, etc.) y sus correlatos literarios (H. G. Wells, Aldous Huxley, George Orwell, Philip Dick, Asimov; etc.); el pensamiento utópico ha buscado siempre trascender no sólo la realidad inmediata sino el inevitable devenir histórico de la sociedad, romper los parámetros del orden existente, denunciar la deshumanización y alienación galopantes, criticar y satirizar el poder y la opresión; y, sobre todo, proponer sociedades alternativas más armónicas y perfectibles.

La historia de la humanidad nos ha demostrado – ¡y enseñado, así no lo hayamos querido aprender! – que el principal mecanismo de supervivencia ha sido la transformación de las ideas dominantes, la imaginación de mundos posibles y la realización de lo que se creía imposible. Las sociedades se juzgan no sólo por lo que han hecho sino por lo que han querido o han dejado de hacer. O por lo que deberían haber hecho en un momento estelar de su historia. Es por eso que la esperanza, que es el resultado del encuentro entre la imaginación y el sentido moral, no reconoce la realidad tal cual es, se constituye en la mayor fuente de creación de utopías, en aquello que sea diferente a lo que nos hemos acostumbrado.

La utopía debe, pues, asumirse no como la proyección de escenarios negativos futuros -que serían distopías-, sino como un proyecto que se autorrealiza, que se construye sobre la marcha, a salto de mata, en que lo imposible devenga posible y lo imaginado real. Es allí, cuando los factores subjetivos y objetivos de una determinada situación social se oponen a la transformación, cuando la resistencia y oposición a lo instituido se impone aviesa y tozudamente, cuando las contradicciones del sistema (social, educativo, económico) lo hacen inviable, la utopía, y con ella la esperanza, la imaginación y la fantasía, surgen como posibilidad de creación, de crítica, de denuncia, de ruptura y de proyección.

El desafío como educadores radica, entonces, en proporcionar las herramientas para formar ciudadanos planetarios de un futuro que garantice la vida de nuestros bisnietos, la sostenibilidad del planeta, la justicia social, el reconocimiento y la reciprocidad cultural e identitaria, la redistribución de la riqueza, y el derecho a la información y a la comunicación, entre otros.

Ahora bien, si la utopía se realiza en la misma acción, el pensamiento utópico debería entenderse como un método de mejoramiento social e individual que reconoce los condicionamientos sociohistóricos y científicos, pero que, al otorgarle una dignidad igual o mayor a la del mundo objetivo, no tiene inconveniente en partir de una imagen (una comunidad, una sociedad o un país), una idea (libertad, igualdad, solidaridad), una sensibilidad (indignación, compasión, conmiseración); o un sentimiento (amor, tristeza, miedo), para echar a andar un proyecto de transformación.

No obstante, en un mundo regido por la velocidad y la simultaneidad de la comunicación, la gratificación inmediata y el consumismo desechable, el uso instantáneo y puramente instrumental del conocimiento, y, en general, el imperio del tiempo presente, del aquí y el ahora, del pragmatismo narcisista y el individualismo exhibicionista, es muy difícil creer que todavía se pueda formar para el pensamiento utópico.

El desafío como educadores radica, entonces, en proporcionar las herramientas para formar ciudadanos planetarios de un futuro que garantice la vida de nuestros bisnietos, la sostenibilidad del planeta, la justicia social, el reconocimiento y la reciprocidad cultural e identitaria, la redistribución de la riqueza, y el derecho a la información y a la comunicación, entre otros.

Para alcanzar dichos propósitos podemos empezar por retomar e implementar los pactos sociales cooperativos, asociativos y morales, que posibiliten apuntalar y legitimar la democracia; promover la reciprocidad y la ayuda mutua en oposición al individualismo del sálvese quien pueda, en las que la solidaridad y el intercambio de recursos se constituyan en la principal estrategia de oposición y resistencia al consumo desaforado; destacar posibles formas de vida social que se pueden organizar a sí mismas sin autoridades coercitivas con participación directa mediante diversos procedimientos democráticos, la ayuda mutua, la asociación voluntaria y la autosuficiencia económica y ojalá alimentaria.

En síntesis, educar para el desarrollo del pensamiento utópico implicaría formar para la responsabilidad con el futuro de la Tierra, en proporcionar estrategias alternativas al consumo desechable, en proponer formas de organización social que se opongan a las demandadas por el capitalismo salvaje, en reajustar el significado del tiempo en términos de tiempos diversos y no únicamente como tiempo presente, en el uso de la tecnología como herramienta política y de aprendizaje ciudadano y no como un instrumento de expresión inocua de opiniones acerca de lo divino y lo humano. Y, sobre todo, para imaginarnos cómo sería un país en paz en el que los niños y los jóvenes, a partir de sus ideas, sus imágenes, sus sensibilidades y sus sentimientos, puedan proyectar su propio futuro.

Fuente artículo: http://compartirpalabramaestra.org/columnas/es-posible-todavia-educar-para-la-utopia

Comparte este contenido:

Entrevista a Humberto Maturana: “El futuro de la humanidad no son los niños, son los mayores»

Fuente: culto.latercera./Autor:Alejandra Jara

De visita en la Región del Biobío, el Premio Nacional de Ciencias conversó sobre la importancia de que los niños crezcan en un espacio que acoja, escuche, se diga la verdad y donde sus preguntas sean contestadas. “Sólo así se transformará en una persona reflexiva, seria y responsable”, aseguró.

“Cuando uno aplaude a alguien sin haber escuchado nada, entonces uno aplaude las expectativas”, dijo un sorprendido Maturana apenas subió al escenario de la escuela Hipólito Toro y Salas de Chiguayante, en la región del Biobío, donde fue invitado ayer miércoles a inaugurar el año académico.

La noticia de que visitaría la región se masificó rápido y decenas de personas, ajenas a la comunidad educativa del establecimiento, llegaron hasta el colegio para escuchar al Premio Nacional de Ciencias, arriesgándose incluso a que no las dejaran entrar.

Bastó que lo mencionaran como el invitado de honor de esta ceremonia, donde también se premió a los profesores destacados de Chiguayante, para que el público estallara en aplausos mientras las cámaras, que transmitieron en directo su presentación vía streaming, enfocaron a varios jóvenes y adultos que se acomodaron como podían al interior del auditorio donde reinó el silencio durante los poco más de 20 minutos que duró su presentación.

“Pero las expectativas nunca se cumplen, ni las propias, ni las ajenas. Lo cual es bueno. Uno puede escuchar sin prejuicios, sin supuestos, sin exigencias y uno puede hablar también desde la espontaneidad”, recordó el biólogo y autor de El árbol del conocimiento (1984), antes de comenzar a hablar de “Amar educa”, el tema central de su ponencia.

El futuro de la humanidad

“Los niños, niñas y jóvenes se van a transformar con nosotros, con los mayores, con los que conviven, según sea esa convivencia. El futuro de la humanidad no son los niños, somos los mayores con los que se transforman en la convivencia”, dijo Maturana en la mitad de su presentación.

El biólogo se dio cuenta de lo sorprendidos que quedaron los auditores con esta aseveración y continuó: “Nosotros hoy somos el futuro de la humanidad. Los niños se transforman con nosotros. Van a reflexionar, van a mentir, van a decir la verdad, van a estar atentos a lo que ocurre, van a ser tiernos, si nosotros los mayores, con los que conviven, decimos la verdad, no hacemos trampa, o somos tiernos”, explicó.

Por lo tanto, el enseñar, como parte de la convivencia, es indicar, apuntar la mirada, guiar la reflexión, pero “en cualquier caso los niños se van a transformar con los mayores con los cuales conviven”, agregó el biólogo.

“Cuando decimos que amar educa, lo que decimos es que el amar como espacio que acogemos al otro, que lo dejamos aparecer, en el que escuchamos lo que dice sin negarlo desde un prejuicio, supuesto, o teoría, se va a transformar en la educación que nosotros queremos. Como una persona que reflexiona, pregunta, que es autónoma, que decide por sí misma”, sostuvo.

Maturana explicó que una de las cosas que surge del lenguaje es la conciencia. Y que existen dos preguntas fundamentales que los niños viven. Una de ellas es “¿mamá cómo se hace?, lo que revela que el niño quiere hacerlo bien. “Todos queremos hacer bien las cosas que sabemos y por eso preguntamos”, aclaró el biólogo.

Y la otra pregunta es la que le hace la mamá o el papá al niño: “¿Te das cuenta de lo que estás haciendo?”. “Esa es una pregunta maravillosa, lleva la mirada sobre sí mismo. Abre el espacio de la reflexión”, dijo Maturana.

Y enfatizó: “Amar educa. Si creamos un espacio que acoge, que escucha, en el cual decimos la verdad y contestamos las preguntas, nos damos tiempo para estar allí con el niño o niña, ese niño se transformará en una persona reflexiva, seria, responsable que va a escoger desde sí”.

Porque el acto de escoger es fundamental y constituye un acto de conciencia, aseguró el Premio Nacional de Ciencias Exactas. “El poder escoger lo que se hace, el poder escoger si uno quiere lo que escogió o no, ¿quiero hacer lo que digo que quiero hacer?, ¿me gusta estar dónde estoy?”, son algunas de las preguntas que aparecen”, explicó Maturana.

El origen de los problemas

En su ponencia, Maturana también abordó que los problemas humanos nunca son de inteligencia, sino corresponden a conflictos de emociones. “Son todos conflictos de deseos y se resuelven con la reflexión”, dijo el experto.

También explicó que los humanos hacemos teorías, es decir, constructos lógicos que se fundan en premisas básicas aceptadas a priori desde la emoción. Y para resolver las discrepancias con los otros “hay que ver las coherencias del ámbito en el cual estamos hablando”, agregó el Premio Nacional de Ciencias.

Si no nos podemos poner de acuerdo, es porque estamos en ambos teóricos distintos. Estamos argumentando desde premisas básicas diferentes. “Y la única solución es mirar desde donde estamos diciendo lo que estamos diciendo”, sostuvo Maturana.

En este tema, el ex académico del MIT fue consultado por uno de los asistentes sobre cómo transformar la política pública en educación que está volcada a los indicadores.

“Conversando”, respondió el experto y agregó que “El colegio de profesores se transformó a lo largo de la historia en un sistema gremial, pero en su origen era un sistema de reflexión académica sobre la educación. Un modo de conversar sobre lo que hacemos. Porque si no conversamos ¿qué diremos ante las autoridades gubernamentales?”, se preguntó.

Por lo tanto, lo que hoy hay que responder es “¿qué queremos con la educación”, dijo el biólogo. Es decir, saber si queremos formar jóvenes que se preparen para la competencia del mercado laboral o para una convivencia democrática, honesta, de mutuo respeto, en la colaboración, en la reflexión.

“Ese es nuestro tema, tenemos que conversar. Pero no tenemos que tratar la conversación como algo banal (…) Tenemos que atrevernos no en una huelga, sino en la conversación y la reflexión”, aseguró el Premio Nacional de Ciencias.

Amar educa

“Para que el amar eduque hay que amar y tener ternura. El amar es dejar aparecer. Darle espacio al otro para que tengan presencia nuestros niños, amigos y nuestros mayores”, sostuvo Maturana.

Por eso, la educación es la tarea más importante de un país. “Define el ámbito de convivencia en el que ese país se va constituyendo, momento a momento, día a día”, agregó el biólogo.

Como yo lo había mencionado anteriormente, en este ámbito la reflexión juega un rol fundamental porque permite mirar dónde estamos. “Si no reflexionamos vamos a caer en un fanatismo, en un ámbito de autoridad absoluta para el que otro obedezca”, aseguró Maturana.

Pero a nadie le gusta obedecer, porque es una negación de sí mismo. Sin embargo, en el colaborar “tengo presencia, soy libre, escojo”, lo que recordó que es importante aplicar en la crianza de los niños.

“La educación es una transformación en la convivencia y seguirá un camino u otro según la teoría desde las cuales actuemos. Las teorías no son superfluas, definen el espacio en el que nos movemos y las aceptamos. Pero si aceptamos las teorías aceptamos las premisas básicas desde donde se constituyen, de modo que tenemos que ser siempre, o deberíamos ser capaces, de preguntarnos las premisas básicas desde donde se construyen las teorías, el sistema lógico con el cual fundamentamos lo que hacemos”, concluyó el Premio Nacional de Ciencias.

Fuente de la entrevista: http://culto.latercera.com/2017/03/23/maturana-la-humanidad-los-ninos-los-mayores/

Fuente de la imagen:http://culto.latercera.com/wp-content/uploads/2017/03/maturana.png

 

Comparte este contenido:

Nuestros Jóvenes, Nuestro Futuro

22 de marzo de 2017 / Fuente: http://pcnpost.com

Por: Samuel Azout

En Colombia viven aproximadamente 13 millones de jóvenes (14-28 años). Muchos de ellos viven en entornos difíciles y están expuestos a una gran cantidad de riesgos como prostitución, abuso de sustancias psicoactivas, alcoholismo, micro tráfico, deserción escolar, embarazo adolescente, violencia intrafamiliar, abusos, maltratos y violaciones, entre otros.

La primera causa de muerte en jóvenes entre 10 y 24 en Colombia es la violencia inter personal. Según un estudio el 5% de los hombres y el 14% de las mujeres entre los 14 y los 19 años ya han tenido su primer embarazo.

Colombia ocupa el primer lugar en América Latina en consumo temprano de alcohol y drogas. 87% de los menores de 17 años ha tomado alcohol alguna vez en su vida y 67% lo ha hecho en el último año.

Como sociedad tenemos la responsabilidad de ofrecerles posibilidades de vidas productivas y felices a nuestros jóvenes. Garantizar un buen futuro para ellas y ellos, especialmente los más vulnerables, no es solamente una obligación del Estado y un imperativo moral, es un cometido que nos corresponde a todos. Para logarlo, debemos antes entender: ¿qué problemas limitan el desarrollo de nuestros jóvenes? ¿cómo podemos prevenir estos problemas?

Un gran problema de los jóvenes es el desempleo. Cuando los jóvenes no encuentran trabajo se sienten rechazados por la sociedad. La depresión y el pesimismo puede llevarles hasta el suicidio. Otro grave problema es la pobreza que despoja la auto estima, y despierta sentimientos de humillación y vergüenza.

Muchos jóvenes recurren a pandillas, bandas criminales y otros comportamientos hipermasculinos para alcanzar estatus social. En grandes ciudades Latinoamericanas la delincuencia juvenil también está ligada a la obtención de alimentos y bienes materiales, es decir, es un medio de subsistencia.

La inseguridad, la violencia de género, el abandono afectivo de los padres, y el madresolterismo también afectan el adecuado desarrollo de jóvenes. Fenómenos como deserción escolar, y el abuso del alcohol y sustancias psicoactivas, limitan aún más las posibilidades de un futuro promisorio.

Hay veces vemos a nuestros jóvenes como víctimas, otras veces como victimarios. No conviene estereotiparlos, debemos conocer sus mundos, sus ilusiones, sus sentimientos y sus frustraciones. Queremos apoyarles para que superen sus obstáculos y empoderarlos para que desaten su infinito potencial.

Fuente artículo: http://pcnpost.com/samuel-azout-nuestros-jovenes-nuestro-futuro/

Comparte este contenido:
Page 2 of 3
1 2 3