El Estado evaluador: el vaso medio vacío

Por: Carlos Ornelas

Este jueves, el Instituto Nacional para la Evaluación de la Educación presentó Cambios y tendencias del aprendizaje en México: 2000-2015. Allí da cuenta del hacer de lo que Guy Neave bautizó como el Estado evaluador. En los años 80 del siglo pasado, este autor observó la tendencia de los estados nacionales a gobernar en la educación cada vez más con instrumentos de evaluación centralizados bajo el comando de agencias especializadas.

Parece que con el transcurso de las décadas, los dispositivos del Estado evaluador tomaron rumbo propio, con un agravante: Reducir a números el aprendizaje de los estudiantes y acortar su experiencia a pruebas estandarizadas. Es una noción de aprendizaje minimalista. Los resultados de esas evaluaciones estratifican —más aún— a la población y las regiones. Lo peor, fuera de recolectar cantidades, deja poco beneficio a la educación.

El informe que presentó Eduardo Backhoff, el presidente la Junta de Gobierno del INEE, ratifica esa tendencia. Reveló: México ha participado en estudios de logro desde hace dos décadas: TIMSS, en 1995; PERCE, en 1997 y Estándares Nacionales, en 1998. Pero los resultados no se publicaron. Fue con PISA, en 2000 y cinco años después con Excale y ENLACE, que el país empezó a publicar sus resultados de aprendizaje. México también participó los 2º y 3º Estudio Regional Comparativo y Explicativo (LLECE), así como en dos estudios de la IEA de Civics. Sin considerar a ENLACE (que fue censal), en el periodo 2000-2015, México ha participado en 22 estudios nacionales e internacionales, en los cuales evaluó a cerca de 730 mil alumnos de los estados.

El INEE dice que en este siglo hemos avanzado en transparencia, que los órganos del Estado hacen público lo que antes mantenían en secreto. Pero los dispositivos del Estado evaluador no han servido para modificar las tendencias profundas. El consejero presidente del INEE puso el acento en los pequeños avances en matemáticas y lenguaje (que no sé por qué las escriben con iniciales mayúsculas); nos presentó el vaso medio lleno. A pesar de ello, concluye que de las 256 posibilidades de observar variaciones en los estados, en 52 de ellos (20%) se presentaron cambios positivos, en nueve (4%) negativos y en 195 (76%) no se observaron giros significativos.

Además de reducir las nociones de aprendizaje y dejar fuera del panorama otras aristas (arte, tecnologías, historia, literatura) los informes del INEE y de la SEP señalan que la desigualdad no aminora, que los niños de zonas pobres, áreas indígenas, de cursos comunitarios y telesecundaria aprenden menos que los de las ciudades. Y eso lo sabíamos sin la necesidad de tanta parafernalia de números ni tantos exámenes estandarizados.

Algunos sugerirían que el énfasis en el aprendizaje no es accidente, sino una respuesta a las propuestas neoliberales que exigen “capital humano” más competente para que México se incruste en el mercado mundial, pero en un rol de subordinación. Aun así, desde otra perspectiva, poner el aprendizaje en el centro es una ventaja en la lucha contra la tradición autoritaria de la enseñanza y la pedagogía memorista. Pero esa no es la concepción minimalista que presenta el INEE.

La Reforma Educativa que emprendió este gobierno tiene activos (introducir el mérito para el desarrollo de los docentes en lugar de prácticas clientelares y corruptas) y planteamientos programáticos de avanzada en el Modelo para la educación obligatoria (aprendizajes situado y significativo). Sin embargo, carga con el fardo del Estado evaluador, que es muy costoso, además.

Quizá sería mejor tener una sola evaluación al año para estudiantes y que el INEE se aplique a diversificar la evaluación de los docentes con menos números y más conceptos.

Fuente: http://www.excelsior.com.mx/opinion/opinion-del-experto-nacional/2018/03/18/1226991

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México: INEE presenta el Panorama Educativo de México

México/11 de Diciembre de 2017/Televisa

De acuerdo con el Instituto Nacional para la Evaluación de la Educación (INEE), el mayor déficit del sistema educativo nacional, es el terreno de los aprendizajes.

“Una gran proporción de alumnos de la educación obligatoria registran niveles de aprovechamiento insatisfactoria, producto de que los niños y jóvenes no están adquiriendo las competencias necesarias para su adecuado desenvolvimiento en la sociedad”, señaló Carmen Reyes Vázquez, titular de la Unidad de Información del INEE.

El Panorama Educativo de México 2016 del INEE, destaca también que en los ciclos 2010-2011 al 2015-2016, el mayor crecimiento en la educación obligatoria fue del 19% a nivel preparatoria y la secundaria 11.4 %, pero en preescolar el crecimiento fue sólo del 3.7%.

Indica que al inicio del ciclo escolar, el sistema educativo nacional atendió poco más de 36 millones de alumnos. Sin embargo, el porcentaje de abandonos durante o al concluir el ciclo escolar, es del 0.6% en primaria y 4.4% en secundaria.

“A pesar del importante crecimiento de la matrícula en educación media superior, así como de una ligera disminución en la tasa de abandono, el número de abandonos incrementó del ciclo 2009- 2010 al 2014-2015 en poco más de 87 mil jóvenes”, destacó Carmen Reyes Vázquez, titular de la Unidad de Información del INEE.

El gasto federal ejercido en educación, desde educación preescolar hasta superior, representó el 3.8% del Producto Interno Bruto (PIB).

De acuerdo al informe del INEE, el crecimiento de la matrícula de educación obligatoria entre uno y otro quinquenio, no llevan una secuencia.

Preescolar creció el 30% el primer quinquenio de 2000 a 2005 y los dos siguientes períodos la tasa de crecimiento descendió a 4.2 y 3.7%. En primaria el primer quinquenio presenta números negativos: -1.7 % que se acentúa en el último quinquenio 2010-2015 con -4.3.

El Panorama Educativo de México señala también que la escolaridad se segmenta según el grado de marginación social y la condición étnica, ya más del 80% de los alumnos que asisten a las escuelas comunitarias y telebachilleratos, que no tienen maestros sino instructores, pertenecen a localidades de alta y muy alta marginación. Mientras que el 81% de los alumnos en escuelas de servicio general están en localidades urbanas.

Fuente: http://noticieros.televisa.com/ultimas-noticias/nacional/2017-12-07/inee-presenta-panorama-educativo-mexico/

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Crítica al INEE: Evaluar a los Evaluadores

México / 29 de octubre de 2017 / Autor: Juan Carlos Miranda Arroyo / Fuente: SDP Noticias

El Instituto Nacional para la Evaluación de la Educación (INEE), recientemente ha organizado un seminario sobre «La Reforma Educativa: Avances y Desafíos». En una de las sesiones de análisis y reflexión, celebrada el pasado 18 de octubre, se abordó el tema: «El INEE dentro de la Reforma Educativa»; sin duda un título interesante toda vez que se trata de la institución responsable, por ley, de la evaluación en el sector.

En esta ocasión describiré y comentaré, en términos generales, lo que sucedió en esa reunión de análisis y discusión en la cual participaron, por la parte oficial, Eduardo Backhoff, consejero presidente de la Junta de Gobierno del INEE; y como comentaristas invitados: Pedro Flores-Crespo, profesor de la Universidad Autónoma de Querétaro, y David Calderón, de la asociación civil «Mexicanos Primero». El moderador de esta mesa fue el periodista Javier Solórzano. (Ver enlace del video en la nota anexa)

En su oportunidad, el presidente del INEE, Eduardo Backhoff, se refirió a los avances que ha logrado el Instituto en los distintos ámbitos y responsabilidades de la evaluación educativa durante los últimos 4 años, desde que éste alcanzó legalmente su autonomía, en 2013, con respecto al Gobierno Federal. Cabe recordar que antes de 2013, el INEE era un organismo que dependía jurídica, estructural y presupuestalmente de la Secretaría de Educación Pública (SEP).

Backhoff también abordó algunos de los retos, desafíos y perspectivas del INEE en el marco de la fase actual de la Reforma Educativa en México.  Entre los retos del INEE habló de las nuevas atribuciones y grandes responsabilidades del Instituto no sólo dentro de las tareas de evaluación e información sobre la educación en México, sino también en el trazo de las políticas nacionales en materia de evaluación de la educación, es decir, en los diversos procesos de toma de decisiones y en el seguimiento de las intervenciones u operaciones que en materia educativa deben ponerse en marcha tanto en el conjunto del SEN como de los subsistemas educativos estatales o regionales.

También Backhoff mencionó algunos de los grandes problemas que enfrenta el Sistema Educativo Nacional (SEN), como son los temas de la falta de cobertura en educación preescolar y media superior; y la baja participación de adultos en la educación superior; y señaló otros asuntos importantes como los bajos niveles de logro en aprendizajes de los jóvenes, en Lenguaje y Matemáticas; y la inequidad educativa e intercultural que prevalece en el país, entre otros.

Pedro Flores-Crespo, quien también es miembro del Consejo Técnico del INEE, señalo que, en términos generales, coincide con lo expresado por Backhoff, en torno a los avances logrados por el Instituto a su corta edad, y que, en sí mismo, está de acuerdo en defender al INEE como organismo autónomo en su papel de actor del diseño y promotor del cambio de las políticas educativas nacionales; sin embargo, afirmó que hay que desentrañar la relación entre «evaluación» (como acción técnica) y la «calidad» (como acción y resultados de las políticas públicas educativas); y sugirió algunas rutas a desarrollar o sobre las que habría que reflexionar, como lo es el tema de la emisión de directrices educativas como nueva atribución del INEE y cómo traducirlas en términos de políticas educativas. El gran problema que existe, dijo Flores-Crespo, es la falta de reconocimiento del «poder compartido», expresado en la autonomía, por parte de las autoridades federales, que no admiten la injerencia del INEE en diversas decisiones de política educativa (puso como ejemplo el asunto de las recomendaciones sobre el cambio en el subsistema de educación inicial de docentes). Y propuso algunos mecanismos para elevar el costo (político y jurídico) a las autoridades educativas que no cumplan con las directrices marcadas por el Instituto, en el marco de las atribuciones y facultades legales que éste tiene (en efecto, no todo en el mundo del poder político se resuelve mediante colaboración y cordialidad, o a través de mecanismos o recomendaciones tecnocráticos).

Pero el mensaje más importante de Flores-Crespo, fue la crítica hacia el clima interno de trabajo en el INEE: Ir más allá de las coyunturas políticas y mirarse a sí mismo, como institución, para trabajar en congruencia con sus tareas sustantivas y sin perder de vista las perspectivas del cambio educativo ni las bases sociales que lo sustentan.

David Calderón se refirió de manera analógica a la situación que hoy atraviesa el INEE, en términos de su condición como entidad autónoma: «¿Qué pasa cuando a los ingenieros de la NASA los pones de astronautas?». Y se pronunció a favor de crear una serie de programas que, sin lesionar el marco jurídico y normativo, se requerirían para que los evaluadores cumplan cabalmente con sus funciones (por ejemplo, en materia de difusión, comunicación y de mayor conexión con los beneficiarios del trabajo realizado por el Instituto: los niños y los padres de familia. Crítica que aceptó Backhoff en su oportunidad).

«Hay que decir y hay que saber que la autonomía (del INEE) se ganó a alto precio… y se ganó o se arrancó porque el (Poder) Ejecutivo no es confiable hoy, antes y en el futuro…».  «Que el INEE explique y se arriesgue a exponer qué es lo que está entendiendo por «calidad» educativa»; y que «el INEE se comprometa aún más con un enfoque de derechos (a la educación) a favor de los niños, las niñas y los jóvenes», fueron las afirmaciones sobresalientes de las intervenciones hechas por Calderón.

 Las preguntas del moderador, Javier Solórzano, giraron en torno a las facultades y estrategias generales del organismo público encargado de la evaluación de la educación, así como sobre los mecanismos para lograr que la evaluación se convierta en una herramienta para la mejora educativa.

También se abordaron rápidamente algunas preguntas enviadas por el público asistente al evento sobre las limitaciones y posibilidades del INEE en torno a la transformación efectiva del sistema educativo.

A reserva de comentar en otro momento algunos detalles finos del encuentro, considero que este tipo de reuniones permiten, en efecto, abrir un espacio para «evaluar a los evaluadores»; es decir, para realizar un balance sereno, crítico y analítico sobre el estado que guarda el INEE y su vínculo orgánico con la actual etapa de la Reforma Educativa, así como con su tarea social principal, que es contribuir al «mejoramiento de la calidad educativa, con equidad», en México.

Tarea central que sin duda implica, de manera específica, entre otras finalidades y propósitos, establecer los criterios, indicadores, parámetros, instrumentos, técnicas y estrategias adecuados para realizar los programas y proyectos de evaluación de la educación en todos los niveles y modalidades; además de coordinar los trabajos del Sistema Nacional de Evaluación de la Educación (como «Ecosistema», según Backhoff), mediante el cual se generan las bases para reorientar los programas y acciones de gobierno en materia de políticas educativas.

Un papel importante del INEE es también generar las condiciones para el desarrollo de una cultura sobre la evaluación de la educación en la sociedad. Pero quizá el reto o desafío más importante para el INEE, en el futuro inmediato, será convertirse en un verdadero motor del cambio educativo. ¿Hasta dónde será eso factible? ¿Qué tan autocríticos en ese sentido ha sido el INEE, es decir, su junta de gobierno y funcionarios técnicos?

No hay que olvidar que el INEE, como organismo autónomo, no sólo evalúa al sistema educativo en su conjunto, a través de diversos indicadores e instrumentos, como lo es, por ejemplo, evaluar los aprendizajes de los estudiantes, sino también toma el pulso del país en términos de la evaluación de programas, métodos y materiales educativos, así como sobre las condiciones sociales, económicas y culturales que inciden en la educación de las personas y los grupos. Esto sin dejar de lado el tema más sensible y conflictivo de las funciones del INEE: la evaluación de docentes, directivos, supervisores y asesores técnicos que trabajan en la escuela pública obligatoria.

Mención especial merece la relación del poder político y las facultades atribuidas al INEE en materia de evaluación de la educación. Sobre este punto el consejero presidente del INEE, Eduardo Backhoff, señaló que es un gran reto para el Instituto lograr que las autoridades educativas de los distintos niveles de gobierno, apliquen correcta y oportunamente las recomendaciones y/o directrices que en materia de políticas educativas emite el Instituto; y que hasta la fecha no ha podido producir, en los hechos, los cambios que requiere la educación en México.

Estoy de acuerdo con algunas de las ideas expresadas por los participantes en esta mesa, en particular, al aseverar que aún falta emprender diversas acciones importantes en favor del desarrollo educativo y los aprendizajes escolares, en las instituciones a cargo del Estado mexicano; así como diseñar nuevos programas para evaluar sistemática, adecuada y oportunamente el trabajo de Directivos, Supervisores y Asesores Técnicos. A esto hay que agregar una idea que he sugerido en varias ocasiones en este mismo espacio: Ser congruentes con el espíritu de la cultura «meritocrática», y ello significa que los funcionarios de todos los niveles institucionales, responsables de la educación pública, tanto del gobierno federal como de los gobiernos estatales y organismos desconcentrados, sean sujetos activos de la evaluación con el mismo rigor y en las mismas condiciones con que se evalúa a las demás figuras educativas.

El día en que se logre cumplir con este precepto democrático, estaremos entonces en el terreno no sólo de la equidad y los equilibrios educativos, sino también en el campo de la congruencia y la confianza, que tanto les hacen falta a las autoridades, al sistema educativo y a la nación.

Fuente del Artículo:

https://www.sdpnoticias.com/nacional/2017/10/25/critica-al-inee-evaluar-a-los-evaluadores?utm_source=feedburner&utm_medium=feed&utm_campaign=Feed%3A+portal%2Fall+%28SDPNoticias.com%29

 

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INEE: Los 8 rezagos de la educación en México

El informe del INEE revela que la educación para personas con discapacidad es todo un desafío

America del Norte/Mexico/Union Cancun.mx

A pesar de los avances de la educación obligatoria en México, todavía se observan rezagos e inequidades que impactan en el contexto socioeconómico con mayor deterioro para la población del nivel básico.

De acuerdo con el “Informe 2017 La Educación Obligatoria en México” presentado por el Instituto Nacional para la Evaluación de la Educación (INEE) a la Comisión de Educación de la Cámara de Diputados se observan avances la expansión de la cobertura, en mayores niveles de asistencia a la escuela de niños de 3 a 17 años de edad, en tasas de deserción en declive y en mayores proporciones de egresados.

Sin embargo, aún se observan rezagos en la educación de nivel básico, entre los niñas y niñas con discapacidad y en las políticas y estrategias de mejora para los docentes.

Aquí presentamos los 8 rezagos que señala el INEE:

1. Alrededor de la mitad de los alumnos de sexto de primaria tuvo un nivel de logro insuficiente en Lenguaje y Comunicación y 60 % lo tuvo en Matemáticas.
2. Una de las poblaciones más vulnerables y en riesgo de exclusión es la de niñas, niños y adolescentes con discapacidad, reportan 23.8 % de analfabetismo, en comparación al 4.7 % nacional; y una escolaridad de 5.1 años, frente a 9.2 de la población total.
3. La práctica docente reporta un rezago en la formación continua y la mejora de las condiciones de las escuelas.
4. Las tutorías como política de inserción todavía advierte una distancia entre las normas y su implementación.
5. La política educativa dirigida a atender a niñas, niños y adolescentes indígenas en educación básica enfrenta obstáculos para acceder, permanecer y avanzar en el sistema educativo.
6. La tasa de deserción en educación media superior, que ha permanecido por encima de los 600,000 estudiantes en los últimos seis ciclos escolares, es la más alta en la educación obligatoria
7. Las Directrices para mejorar la formación inicial de los docentes de educación básica y la atención de las autoridades educativas locales no ha realizado acciones concretas.
8. El cumplimiento al derecho de una educación obligatoria de calidad para todos los niños y jóvenes del país sigue siendo una meta a cumplir cabalmente.

Para conocer el informe ver en: http://www.inee.edu.mx/

Fuente: http://www.unioncancun.mx/articulo/2017/04/20/educacion/inee-los-8-rezagos-de-la-educacion-en-mexico

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