.Proyecto Diversxs en América Latina y el Caribe

Combatir la discriminación y empoderar a la comunidad LGBTIQ+ para defender sus derechos en América Latina y el Caribe

El proyecto Diversxs, puesto en marcha en 2018, se basa en el trabajo de educación en derechos humanos realizado con defensores y defensoras de los derechos humanos, pero centrándose en la comunidad LGBTIQ+. El proyecto promueve el empoderamiento y la movilización de las personas jóvenes menores de 25 años para defender los derechos de las comunidades LGBTIQ+ en América Latina y el Caribe. El proyecto se ha implementado en Chile, Puerto Rico, Paraguay y Venezuela, y ha involucrado a más de 7.000 jóvenes. Está financiado por la Lotería de Códigos Postales sueca.

En América Latina y el Caribe, las personas y comunidades LGBTIQ+ sufren discriminación y violencia por su orientación sexual y su identidad o expresión de género. Las actitudes sociales en la región —alimentadas por el conservadurismo social (en algunos casos el fundamentalismo religioso) y la cultura machista— contribuyen significativamente a la discriminación. No obstante, varían considerablemente de un país a otro. En Puerto Rico y Chile las actitudes y las políticas son más liberales y hay más espacio para las actividades públicas de campaña. En Paraguay y Venezuela, las actitudes sociales son más conservadoras y es más difícil hacer valer los derechos.

El proyecto tiene como finalidad generar un cambio sostenible en materia de derechos humanos para las comunidades LGBTIQ+ de Chile, Paraguay, Puerto Rico y Venezuela y, en general, de la región. Tiene dos objetivos principales: el primero es reducir la discriminación de las comunidades LGBTIQ+ en los ámbitos nacional y regional; el segundo, empoderar a activistas y grupos LGBTIQ+ para defender sus derechos. El proyecto apoya y trabaja con líderes y activistas LGBTIQ+, jóvenes LGBTIQ+ y no LGBTIQ+, organizaciones LGBTIQ y agentes estatales y no estatales mediante la educación en derechos humanos, el fomento de la capacidad y el trabajo de investigación y campaña. Además, llega a las comunidades LGBTIQ+ regionales y nacionales a través de las redes sociales. El proyecto se ha contextualizado teniendo en cuenta las necesidades y los marcos jurídicos específicos de cada uno de los cuatro países.

Por otro lado, Diversxs trabaja con activistas nuevxs, brindándoles apoyo para que se reúnan y conecten con otrxs jóvenes LGBTIQ+, se empoderen y movilicen a otras personas. La base del proyecto es la formación en materia de derechos LGBTIQ+ mediante un enfoque de formación de formadores: se forma a jóvenes para que transmitan sus conocimientos y capacidades, formando a su vez a otras personas de la comunidad. De esta manera, lxs jóvenes activistas pueden reproducir esos conocimientos y capacidades en otras personas jóvenes. Este método está ennraizado en el liderazgo juvenil y la interseccionalidad (la idea de que las personas se enfrentan a discriminación múltiple como consecuencia de las intersecciones de diferentes identidades). También guarda relación con otro trabajo que Amnistía Internacional está realizando actualmente sobre los derechos de las personas LGBTIQ+ y los derechos sexuales y reproductivos, así como con campañas globales y regionales de Amnistía sobre los defensores y defensoras de los derechos humanos y la seguridad.

El proyecto se basa en la participación y la movilización de la juventud, aunque las tácticas empleadas en cada país varían considerablemente de uno a otro. Pese a que la metodología se ha contextualizado en cada país, el proyecto contempla tres tipos principales de actividades: en primer lugar, fomentar la capacidad de jóvenes activistas mediante la creación de un programa regional de formación para el liderazgo LGBTIQ+ (un modelo de formación de formadores) en el que la gente joven dirige las actividades. En segundo lugar, crear alianzas estratégicas y realizar trabajo de campaña sobre derechos LGBTIQ+ mediante la creación de redes y alianzas con organizaciones, el desarrollo y la implementación de campañas y reuniones nacionales. Y en tercer lugar, realizar una difusión activa mediante la creación de una comunidad educativa digital y el intercambio (utilizando las redes sociales) para apoyar las actividades de movilización.

Todas las acciones realizadas por Diversxs han sido desarrolladas y gestionadas por jóvenes LGBTIQ+ y sus aliadxs jóvenes. Lxs activistas han asumido un papel de liderazgo a la hora de diseñar el proyecto y planificar e implementar acciones y actividades para terminar con la discriminación basada en la orientación sexual o la identidad o expresión de género. Entre ellas hay talleres, foros, ferias y el proceso de encuesta y diseño de una campaña local que echará a andar en 2019.

Aunque el programa apenas está arrancando, ya ha generado comentarios y resultados positivos. En Puerto Rico, jóvenes activistas afirmaban que se sentían más empoderadxs para defender los derechos LGBTIQ+. En Chile, se observa que lxs activistas y las organizaciones asociadas están emprendiendo acciones para situar la educación como derecho humano transversal y garantizar la protección de los derechos humanos de la infancia y la juventud. “A través de Diversxs y de la información que compartimos entre nosotrxs, cada vez estamos más claros sobre nuestros derechos y nuestra postura y tenemos acceso a nuevos espacios de lucha.”

De la fuerza de Diversxs da testimonio la elevada motivación de lxs activistas involucradxs, aún cuando el clima social y político es adverso. Desde el inicio del proyecto, Venezuela ha estado sumida en una crisis política y económica que impone limitaciones de orden práctico a la movilización y la organización (p. ej. electricidad, sistemas de transporte, disponibilidad de alimentos). Es destacable que el proyecto haya progresado pese a ello, lo que subraya su importancia para las comunidades LGBTIQ+ incluso en un momento en que la gente tiene dificultades para satisfacer sus necesidades básicas.

En Paraguay, donde la legislación garantiza las libertades de reunión y expresión, en la práctica lxs activistas LGBTIQ+ sufren diversas formas de persecución. Como un participante explica: “Teniendo en cuenta el contexto de la ciudad y lo que conlleva trabajar un tema muy controversial, sí siento mucho miedo a veces. Pero si yo no hago lo que estoy haciendo o si decido quedarme callado, no se van a mejorar las cosas. Si quiero cambiar algo o ser parte del cambio tengo que darle el paso. No me siento seguro haciendo lo que hago, sé que puede traer consecuencias en el nivel laboral, académico y social, pero me tranquiliza el hecho de saber que vale la pena luchar”.

El proyecto está suscitando un importante compromiso de la gente joven con el activismo, lo que indica, en gran medida, la importancia que reviste para la comunidad LGBTIQ+. Un resultado clave, hasta la fecha, es el impacto que ha tenido en lxs activistas el hecho de participar en el proyecto y, en particular, de entrar en contacto con otrxs activistas. El proyecto está creando redes nacionales y regionales de activistas, y está claro que la vinculación online a través de las redes sociales sigue desempeñando un papel cuya importancia va a más. “Me sorprendió el saber que existía un espacio de apoyo para personas como yo. Contaba con el apoyo de mis amistades, pero nunca había accedido a ese tipo de espacio donde se habla de los derechos de la comunidad y de cómo defenderlos.”

El  proyecto está comenzando a movilizar a activistas y redes LGBTIQ+ que, con el respaldo de Amnistía, están emprendiendo acciones que de otro modo no habrían llevado a cabo. En Paraguay, lxs activistas superaron desafíos significativos a la libertad de asociación. Un grupo de activistas LGBTIQ+ del país solicitó permiso para celebrar un acto. El alcalde les envió una carta formal en la que decía que no está permitido celebrar reuniones de ese tipo puesto que la ciudad tenía una postura “provida, profamilia”. Con el apoyo de Amnistía, lxs activistas respondieron al alcalde haciendo valer sus derechos y argumentando que el alcalde carecía de facultades para impedirles que se reuniesen. Luego celebraron el acto si permiso, lo que suscitó el interés de numerosos periodistas.

La creación de redes de apoyo mutuo ha sido un beneficio importante, y quizá inesperado, para lxs participantes. El establecimiento de contactos nacionales y regionales les ha permitido crear redes de apoyo personal, un elemento clave de la resiliencia. Las redes regionales agregan una dimensión adicional de apoyo y una perspectiva que les permite ver qué acciones están emprendiendo otras personas. Para algunxs, la participación en el proyecto ha tenido repercusiones materiales en su vida personal, como por ejemplo salir del armario (como gays, lesbianas, transgénero, etc.).

Por otro lado, puede conllevar riesgos personales, en particular en el caso de la gente joven que no ha salido del armario ante sus familias, compañerxs de clase o colegas. Tras evaluar la situación, se hizo patente que la seguridad personal era una prioridad para lxs activistas. Ahora el proyecto incluye un capítulo en la carpeta de materiales sobre los derechos LGBTIQ + con consejos para activistas sobre cómo cuidarse y cuidar a otras personas.

Fuente de la Información: https://www.amnesty.org/es/latest/education/2019/07/diversxs-project-latin-america-the-carribean/

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Entrevista con Oscar Cioncio-Cooperativa Ático. Argentina. Cultura Liberadora. Implicarte, terapia por otros medios

Argentina. Cultura Liberadora. Implicarte, terapia por otros medios: Entrevista con Oscar Cioncio-Cooperativa Ático

Para crear necesitamos el caos no el orden. Picasso decía que cuando tenés la tela en blanco vos la vas a destruir con tus colores, con tus trazados, pasás por distintos momentos de caos hasta llegar a la producción final. El caos es creativo”. Así lo afirma del director de Ático Implicarte, psicólogo social y maestro en pintura, grabado, xilografía, aguafuertes e instalaciones con objetos, entre otras artes. Su infancia transcurrió en Colegiales y se formó en un colegio salesiano, con algunas singularidades: “Mi abuelo paterno era anarquista, con diagnóstico de delirio de persecución –paranoico- y vivía en casa. El abuelo materno era intendente de Escobar por el partido peronista. Uno anarco y otro cuello duro. Mi viejo era un gendarme socialista que renunció a esa fuerza luego de la “Fusiladora”, afirma Oscar. “Cuando fue el bombardeos del ’55 yo era muy pibe y veíamos pasar los aviones desde la terraza, acá, en la calle Amenábar”, recuerda. A la vez, el director de Ático Implicarte, narra que “para ir al colegio salesiano pasaba por el campito donde tenía relación directa con la villa, la murga y el barrio de los gitanos. La sede de Ático está en Colegiales y para mí fue volver a encontrar mi casa en el lugar de origen donde hago las actividades que tienen que ver con la calle, los manicomios, la cárcel y la murga. Yo sigo estando en la murga de Colegiales en la cual está toda la familia: mi hija, mi nieta, mi ex pareja, estamos todos. Respecto de su infancia, Oscar Ciancio evoca que: “Mi niñez fue feliz por lo activa y por las transgresiones. No era lo mismo estar en la villa que en mi casa o en el colegio de los curas donde era un total transgresor. Me echaron de ese colegio, a vieja no le gustó nada y mi abuelo me llenó de regalos”.

-¿Qué estoy nombrando cuando digo “Implicarte”?

-Estás nombrando a una forma de abordar lo artístico sea la pintura, la danza, la literatura, o cualquier expresión, combinada con militancia social. Me acuerdo de maestros como Antonio Berni o Juan Carlos Castagnino que utilizaban la pintura para mostrar el compromiso contra las injusticias. Ahora, respecto de la manera de trabajar con el arte implicado, refiere a hacer que los colectivos, barrios o instituciones sean parte de la producción artística, no se trata solo de tu producción sino de la inclusión de todos en lo elaborado. Así el artista se implica en cuanto a generar un espacio de creación tengan o no experiencia. Un mural puede ser pintado también por quienes nunca tomaron un pincel. Hay una estimulación permanente hacia una mirada activa y no pasiva. Por caso, nosotros acompañamos a los Familiares de Luciano Arruga, (joven torturado, desaparecido y asesinado por la Policía Bonaerense en 2009, por negarse robar para la “fuerza”, crimen que fue encubierto por diversas instancias estatales), desde la primera convocatoria e hicimos un mural bandera. En lugar de hacerse sobre una pared se hace sobre una tela. Ese mural luego se izó en el mástil la Plaza de Luciano y fue algo muy profundo para todos. Podemos hacer el mural en una pared, una gran tela o una placa, para poder trasladarlo. De ese modo, estamos rompiendo también con el usar solo el recurso de las técnicas tradicionales. No se trata de desecharlas. Las usamos con todo respeto para producir otro tipo de estética, con un compromiso ético en relación a lo social.

-¿De qué modo nace el concepto “arte implicado”?

-Si mi memoria no falla, Amnistía Internacional nace allá por los 60 y, luego, crea un programa por el cual las personas muestran su compromiso en la promoción y defensa de los derechos humanos vulnerados en el mundo a través del arte; y con el tiempo se fue enriqueciendo. También influenció para su surgimiento un gran movimientos de artistas, por ejemplo en nuestro país, como te dije: Berni, Castagnino o Benito Quinquela Martín, en La Boca. En la áreas donde se más se desarrolló es en pintura y en grabado.

-Siempre hablás de “educación por el arte” y de “arteterapia”…

-Sucede que duramente varios años fui docente en diversas escuelas y muchos de nosotros fuimos impactados por la corriente de “Educación por el arte”, creada por e Herbert Read, poeta y anarquista inglés. Se impulsaba que todo el sistema educativo esté relacionado al arte, trabajás Matemáticas, Historia o Geografía en forma sincronizada con el educador en arte. Esto de “Educación por el arte” tiene un hilo muy finito con el “Arteterapia”. Cuando yo empiezo a trabajar con el tema antimanicomial, obviamente, tomo ambos conceptos para mi labor de educador, porque el sistema educativo tiene que ver con lo organizativo: Se trata de una educación libertaria o popular frente a la tradicional.

Y en Arteterapia, a una persona que está internada en un manicomio, que no puede expresarse a través de la palabra, le brindás herramientas para hacerlo de otro modo, es una búsqueda de comunicación a través del hecho artístico. Se puede aplicar en las escuelas y en los tratamientos psicológicos, psicoanalíticos o psiquiátricos. Para dar un ejemplo: Hace unos días fuimos desde Ático a acompañar a Irma Caupán Perrioti y Jorgelina Araceli Méndez en el proyecto de Nodos de Promoción de Salud del Hospital Alvear y pusimos música desde un equipo. Inmediatamente se acercaron cuatro chicas que estaban internadas e hicimos un taller con ellas. Ahora vamos a reiterar la experiencia porque fue excepcional en estas Prácticas militantes en Salud. Y estamos seguros que vendrán muchas más, las chicas mismas nos pidieron seguir porque se quedaron con mucho entusiasmo a partir de la generación del vínculo. Y precisamente el vínculo es la necesidad esencial de la persona que te viene a ver.

-¿Cómo te incorporaste a Ático?

-Fue a partir de una invitación de Alfredo Grande. Cuando lo conozco el hablaba de psicoanálisis implicado y yo venía con esto del arte implicado. Y apenas lo escuché me identifiqué inmediatamente porque encontré una relación total con lo que él planteaba. Y luego, la amistad y el trabajo conjunto me confirmaron que no estaba equivocado. Ático es una cooperativa de trabajo en salud mental donde tenemos múltiples iniciativas y una matriz en la que coincidimos todos. Yo siento que allí puedo desarrollar la tarea para la que me formé durante gran parte de mi vida y lo sigo haciendo porque el aprendizaje no termina nunca.

-¿Qué fue la experiencia de “Voces de los muros?

– “Voces de los muros” nació en el Borda, donde trabajamos en el Frente de Artistas, con Alberto Sava, “La colifata” y otros espacios que funcionaban en el Hospital. Yo estaba coordinando el Taller de Plástica y cuando decidimos pintar el frente del galpón surgió la idea de hacer un taller de murales y luego, ese taller se transformó en Voces de los muros. Y después de la represión nos fuimos del Borda y se transformó en una organización social. Recordemos que en ese 2013 donde nos reprimieron estaban en la Ciudad, Mauricio Macri, Rodríguez Larreta y María Eugenia Vidal. Teníamos un compromiso muy grande, íbamos todos los domingos y realizábamos una tarea muy efectiva y a la vez gratificante, aunque como sucede con toda la militancia le quitás tiempo a la vida familiar.

-Tenés dos hijas que también están vinculadas a la salud mental. Bajaste línea, según parece…

-Sí, bajé línea, pero nunca lo hice desde la imposición. Vivimos en una especie de casa-taller por darte una idea aproximada, yo no concibo vivir escindido de lo que pienso, digo y milito. En mi casa se respiró ese clima, entonces ellas lo vivieron como algo cotidiano, no como una obligación y lo eligieron como su opción de vida: Una es psicóloga y la otra se está preparando para trabajar con niños autistas.

-Vos distinguís la lucha antimanicomial de la desmanicomialización…

-Sí, acá en la Argentina a la desmanicominalización se la relaciona con el proceso de Trieste, Italia, con Franco Basaglia como su impulsor, donde se cerraron los manicomios. Pero lo que sostengo es que no es suficiente con cerrar los manicomios, instituciones como el Borda, el Moyano o el Tobar García. Porque si vos vas a cualquier hospital público hay también un estado manicomial. La manera en que es atendida una persona te lo dice de modo contundente, recibe un maltrato cruel, porque están colapsados y otras razones. Si vos venís un día y no te atienden luego de horas de cola, si te dan fecha a la larga para algo urgente, si tenés que quedarte a dormir en el piso para conseguir que te atiendan al otro día, entre otras barbaridades, estás viviendo en un estado manicomial.

-Te escuché poner énfasis al diferenciar entre crueldad y violencia…

-Así es, prefiero usar el término “crueldad de género”, cuando un hombre golpeador y abusador de una mujer la somete. Puede que ella tenga una reacción violenta, pero esa es una violencia legítima, defensa propia y nada tiene que ver con la crueldad. Hoy tenemos casos en los que el sistema penal condena esa defensa legítima y lo que está sancionando es el ejercicio de un derecho.
La sociedad, el sistema, la cultura represora ejercen diversas crueldades y luego reprueba las respuestas violentas que promueven las mismas. Fijate los chicos que el sistema tira a la calle, a la selva, a veces responden con una violencia que suele ser su defensa. O, por caso, yo estoy vinculado con luchadorxs de diversidad de género. Las mujeres trans hace tiempo se organizaron y obtuvieron conquistas valiosísimas. Pero todas ellas fueron pibas sometidas a mucha represión, familiar, social, grupal, institucional, entre otras, por no acatar la lógica biológica. Y empezando por la familia hubo crueldad al no escucharlas, porque si hoy es una mujer, cuando ella decía que era una nena, era una nena.

-La forzaban a ser lo no que no era por todos los medios…

-Eso, exactamente, hizo la cultura represora, devastó a muchas y te podría hablar de cualquier otro área de discriminación, que fueron luchando y creando un espacio de resistencia. Allí, hubo quienes enfrentaron al “orden sagrado”, y se produjo ese caos creativo nada menos que para defender la vida, la integridad y el derecho a ser lo que deseo ser.

Fuente: http://kaosenlared.net/argentina-cultura-liberadora-implicarte-terapia-por-otros-medios-entrevista-con-oscar-cioncio-cooperativa-atico/

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Argentina: 2×1 a genocidas Yasky propuso marchar con organismos de DDHH

América del Sur/Argentina/Mayo del 2017/Noticias/http://www.infogremiales.com.ar

La CTA de los Trabajadores que conduce Hugo Yasky propuso este miércoles realizar una movilización junto a los organismos de Derechos Humanos en repudio al fallo de la Corte Suprema de Justicia que declaró aplicable el beneficio del 2×1 para los condenados por delitos de lesa humanidad.

La central obrera calificó el pronunciamiento del máximo tribunal como “un retroceso sin precedentes en las políticas de Estado en materia de Memoria, Verdad y Justicia”.

“La CTA se suma al clamor de los organismos de derechos humanos y manifiesta públicamente su decisión de marchar junto a ellos para condenar esta ofensiva contra los derechos ciudadanos de los argentinos”, planteó en un comunicado.

La central repudió el fallo y dijo que “tiene sus antecedentes inmediatos en la decisión judicial de otorgar la prisión domiciliaria al genocida Miguel Etchecolatz y, pocos días después, en el llamado de la Conferencia Episcopal Argentina a la reconciliación de la sociedad con los genocidas”.

Fuente:

2x1a genocidas: Yasky propuso marchar con organismos de DDHH

Fuente Imagen:

https://lh3.googleusercontent.com/0xjtj4UXyamfPRBjuEIqxoYGBJe0RAdkAWKL2wjmCcws-dKDoK6dySVTDVap37-M5beg4g=s85

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