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África: la pandemia del coronavirus en el continente olvidado

Por: Diego Sachi.

En uno de los continentes con mayor pobreza ¿qué está pasando con la pandemia por el coronavirus?

Cómo respondieron los gobiernos, la situación del sistema de salud y qué pasa en los países más importantes ante el avance de la pandemia. Sobre eso habló Diego Sacchi en su columna sobre noticias internacionales del programa de radio El Círculo Rojo, que se emite todos los domingos de 21 a 23 hs por Radio Con Vos.

El continente supera los 300 000 contagios y más de 8000 fallecidos. Las cifras vienen subiendo rápidamente, luego de que varios países relajaran las medidas de cuarentena.

Para darnos una idea del impacto, los más afectados son Sudáfrica, Egipto, Nigeria, Ghana y Argelia, algunas de las principales economías de la región.

La falta de testeos ayuda a que las cifras seguramente están subvaluadas. Por ejemplo en Nigeria, un país de 200 millones de personas se realizaron unas 40,000 pruebas, según datos de fines de mayo. Una cifra baja para medir hasta donde se expandió el virus.

¿Qué es lo que más preocupa? que aumenten los casos por la precaria situación del sistema de salud. Se calcula que el continente tiene en promedio menos de una cama de cuidados intensivos por cada 100,000 personas. Para darnos una idea Argentina tiene una 28 cada 100,000 personas, Perú 3,5 o Bolivia 4.

Para darnos una idea más precisa, Nigeria, Etiopía y Egipto, tienen 1.920 camas de cuidados intensivos para más de 400 millones de personas.

En la mayoría de los países denuncian que deben estar en la “primera línea” sin equipamiento. Ya hubo huelgas del personal sanitario en Sudáfrica, Túnez, Nigeria, Kenia o Zimbabue.

También algo básico como lavarse las manos se transforma en en un lujo. Aproximadamente 190 millones de personas de África subsahariana no disponen de acceso a agua potable.

Diferentes asociaciones de médicos en África también alertan que al utilizar el poco presupuesto que se destina a salud contra el coronavirus, hay otras enfermedades que van a avanzar, como el Ebola o la fiebre de Lassa, enfermedades para las que no se investigan curas.

Como dijo Mónica Müller, médica y autora de Pandemia: virus y miedo, en una entrevista que le hicimos «No se habla de algunas enfermedades porque atacan a personas pobres»

La otra cara de la pandemia es el impacto social y económico en países donde gran parte de la población sobrevive en base a trabajos informales.

En todo el continente la regla es despidos, suspensiones y en el mejor de los casos rebajas salariales.

Existe una gran presión de la empresas, la mayoría multinacionales, para reabrir la economía lo que se traduce en focos de contagio.

En Marruecos por ejemplo hubo casos de coronavirus en las empresas españolas Frigodar y Natberry Maroc que son empresa especializada en el envasado de frutos rojos.

Algo similar pasa en las minas del sur del continente, con casos extremos como el de la mina de la empresa Tenke Fungurume, en la República Democrática del Congo, que dejó en cuarentena a sus 6000 trabajadores en las instalaciones de la mina para que sigan trabajando.

Pero para entender la situación del continente hay algo clave: la injerencia de las grandes potencias, sea mediante presión económica, directamente militar o el control de los principales recursos.

Por ejemplo Francia mediante el «sistema de francos CFA» (Comunidad Financiera Africana) tiene un control directo sobre las monedas nacionales de sus antiguas colonias. Al mismo tiempo mantiene unos 9000 soldados en el continente.

Las consecuencias de la pandemia por el coronavirus solo muestra una situación que se mantiene hace años en un continente sometido por el saqueo imperial.

Fuente del artículo: http://www.laizquierdadiario.com.ve/Africa-la-pandemia-del-coronavirus-en-el-continente-olvidado

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La pandemia agrava desigualdades en la educación: Unesco

Por: Unesco.

 

La pandemia del nuevo coronavirus, que ya ha generado problemas sin precedentes en sistemas escolares, afecta aún más el acceso a la educación a estudiantes pobres, jóvenes y alumnos con discapacidades, afirma la Unesco en un informe divulgado el martes.

En un demoledor informe, la Unesco afirmó que unos 260 millones de niños no tuvieron acceso a la educación en el año 2018, aunque las disparidades aumentaron con la pandemia del nuevo coronavirus.

Los niños de las comunidades más pobres, así como las niñas, los discapacitados, los inmigrantes y las minorías étnicas se encontraban en una clara desventaja educativa en muchos países, señaló la entidad basada en París.

En 2018, «258 millones de niños y jóvenes fueron completamente excluidos de la educación, con la pobreza como el principal obstáculo para el acceso», apuntó el informe.

Esto representó el 17% de todos los niños en edad escolar, la mayoría de ellos en Asia meridional y central y África subsahariana.

Este cuadro se agravó con la pandemia del nuevo coronavirus, que afectó a más del 90% de la población estudiantil mundial por el cierre de escuelas, según el informe.

Mientras niños de familias con medios podían continuar estudiando desde su casa usando computadoras portátiles, teléfonos móviles e internet, millones de estudiantes quedaron desconectados por completo.

«Las lecciones del pasado -como con el ébola- han demostrado que las crisis de salud pueden dejar atrás a muchos, en particular a las niñas más pobres, muchas de las cuales nunca volverán a la escuela», escribió la directora general de la Unesco, Audrey Azoulay, en el prólogo.

Puestos al margen

El informe apuntó que en los países de bajos y medianos ingresos los adolescentes del 20% más rico de los hogares tenían tres veces más probabilidades de completar la primera parte de la escuela secundaria, hasta los 15 años, que los de hogares pobres.

Los niños con discapacidades tenían un 19% menos de probabilidades de lograr un dominio mínimo de lectura en 10 de estas naciones.

En 20 países pobres, principalmente en África subsahariana, casi ninguna niña rural completa la escuela secundaria, señaló la entidad.

En tanto, en las naciones más ricas, los niños de hasta 10 años que recibieron educación en un idioma diferente a su lengua materna obtuvieron un puntaje 34% menor que los hablantes nativos en las pruebas de lectura.

En Estados Unidos los estudiantes LGBTI tenían casi tres veces más probabilidades de haberse quedado en casa porque no se sentían seguros.

«Lamentablemente, los grupos desfavorecidos son puestos al margen de los sistemas educativos a través de decisiones más o menos sutiles que conducen a la exclusión de los planes de estudio, objetivos de aprendizaje irrelevantes, estereotipos en los libros de texto, discriminación en la asignación de recursos y evaluaciones, tolerancia a la violencia y negligencia de las necesidades», apunta el informe.

Segregación educativa

Dos países africanos aún prohíben a las niñas embarazadas de asistir a una escuela, 117 países permiten el matrimonio infantil y 20 aún no han ratificado una convención internacional que prohíbe el trabajo infantil.

Unos 335 millones de niñas asistieron a escuelas que no les proporcionaron los servicios de agua, saneamiento e higiene que necesitan para permanecer en clase mientras menstrúan.

En varios países de Europa central y oriental, los niños romaníes o gitanos están segregados en las escuelas convencionales. Y en Asia, a personas desplazadas como los rohinyás se les enseña en sistemas separados.

«Muchos países aún practican la segregación educativa, lo que refuerza los estereotipos, la discriminación y la alienación», señala el informe.

«Solamente 41 países en todo el mundo reconocieron oficialmente el lenguaje de señas y, en todo el mundo, las escuelas estaban más ansiosas por obtener acceso a internet que por atender a los estudiantes con discapacidades», apunta el documento.

La Unesco instó a los países a centrarse en los niños desfavorecidos cuando las escuelas vuelvan a abrir después de los cierres por la pandemia de coronavirus.

«Para enfrentar los desafíos de nuestro tiempo, es imperativo avanzar hacia una educación más inclusiva», dijo Azoulay. «No actuar obstaculizará el progreso de las sociedades», apuntó.

 

Fuente de la reseña: https://www.jornada.com.mx/ultimas/sociedad/2020/06/22/la-pandemia-agrava-desigualdades-en-la-educacion-unesco-1029.html

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La desigualdad de género favorece el cambio climático

Por: Rebelión.

Mujeres labrando el campo en Guatemala. El trabajo de la mujer es fundamental para asegurar la provisión de alimentos, agua y energía de cientos de millones de personas en el planeta, y resultan de las más afectadas al combinarse el cambio climático con la violencia de género y los conflictos que derrumban la paz. Foto: Caroline Trutmann/PNUD

NACIONES UNIDAS, 10 jun 2020 (IPS) – La violencia de género y la desigualdad estructural en ese campo limitan las capacidades de las comunidades para adaptarse a los efectos del cambio climático y para alcanzar la paz y la seguridad sostenibles, aseguró un nuevo estudio de agencias de la ONU divulgado este miércoles 10.

Existe “una conexión intrínseca entre género, clima y seguridad, en una dinámica con falta de legislación, y relativamente desconocida en el plano internacional”, afirmó Inger Andersen, directora del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente.

El cambio climático impacta cada rincón del planeta, y millones de personas están en grave riesgo, especialmente mujeres y niñas que son tradicionalmente proveedoras de comida, agua y energía, pero soportan distintos tipos de marginación y falta de recursos para adaptarse a las condiciones cambiantes, señaló el informe.

Un ejemplo es que, en algunas regiones, sequías severas y temperaturas en aumento causan hambre, pérdida del hogar y de medios de vida, y esas fallas pueden llevar a hombres y mujeres a recurrir a la violencia en un contexto de migración.

El informe utiliza casos de estudio para evidenciar la conexión entre clima, género y violencia, y los envía como señales a gobiernos y legisladores para que ayuden a las comunidades a ser resilientes, inclusivas y pacíficas.

En el norte de Nigeria, mientras el cambio climático destruye la naturaleza, que es la base de alimentación en la región, las normas de masculinidad, como el deseo de proteger la riqueza familiar, intensifican los conflictos intercomunales, lo que a su vez motiva a los hombres jóvenes a unirse a grupos armados extremistas como Boko Haram.

Acciones terroristas de ese grupo que se reivindica como islamista afectan a comunidades forzadas a desplazarse y pierden sus medios de vida en Camerún, Chad, Malí, Níger y Nigeria.

En Egipto la limitada disponibilidad de agua dulce incide en la seguridad alimentaria y energética, y con ella en el empleo, la sanidad y la educación, afectando sobre todo a las mujeres marginadas de las esferas económicas, políticas y sociales.

En la isla de Papúa, en Indonesia, las mujeres indígenas, ya afectadas por marginalización, desplazamientos, inseguridad y violencia sexual, son las más perjudicadas por la degradación de la tierra causada por las industrias extractivas, exacerbada por el cambio climático.

En regiones de Pakistán, la conexión entre la violencia de género y el cambio climático es aún más clara, ya que las mujeres sufren violencia doméstica cuando no pueden proveer agua a sus hogares, una carencia que además impulsa a los hombres a movilizarse con grupos criminales.

Mujeres en el Corredor Seco de América Central (en El Salvador, Guatemala, Honduras y Nicaragua) denuncian que viajan cada vez más lejos para conseguir agua, y pasan más tiempo cuidando de familiares enfermos de zika o dengue, epidemias exacerbadas por el cambio climático.

En las comunidades afectadas por los conflictos y el cambio climático, la pandemia covid-19 agrava aún más las carencias en alimentación, medios de vida, seguridad y cohesión social, socavando logros en procesos de paz y desarrollo.

El informe apunta que las intervenciones positivas en torno a los recursos naturales, el ambiente y el cambio climático brindan oportunidades para mitigar la violencia sexual y de género, impulsar el liderazgo político de las mujeres y contribuir a la paz.

Sierra Leona, por ejemplo, es un país donde la combinación de rápida urbanización, lluvias fuertes, aumento del nivel del mar y deslizamientos de tierra dejan sin hogar, y con merma en sus medios de vida, a los sectores más vulnerables.

Pero el informe registró que en ese país del occidente africano, a pesar de la brecha que existe en la cantidad de mujeres que participan en política, aquellas que están involucradas en los gobiernos locales obtienen logros en hacer que sus comunidades sean más resilientes.

También se destacan intervenciones puntuales como la práctica “discriminación cero” de la empresa Flor Agroindustria de Costa Rica, traducida en igual remuneración para los hombres y mujeres que emplea.

El informe trae un puñado de recomendaciones a gobiernos, legisladores e instituciones, y de inicio pide un análisis más profundo de las dimensiones de género de los riegos del cambio climático, así como de los desafíos de seguridad.

Propone integrar las agendas de paz, cambio climático, igualdad de género y seguridad, en países a un mismo tiempo asolados por conflictos, discriminación y el impacto de los cambios en el clima.

Luego, recomienda realizar intervenciones que empoderen a las mujeres y los grupos vulnerables para abordar los riesgos del cambio climático. Plantea que los programas con ese fin deben tener una financiación específica.

La directora de ONU Mujeres, Phumzile Mlambo-Ngcuka, sostuvo que tras la pandemia covid-19 “reconstruir mejor, con una perspectiva de género, significa garantizar que nuestras economías aborden las desigualdades fundamentales en la sociedad y pongan fin a la violencia contra las mujeres”.

Fuente del artículo: https://rebelion.org/la-desigualdad-de-genero-favorece-el-cambio-climatico/

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COVID-19 has exposed the education divide in Nigeria. This is how we can close it

Africa/ Nigeria/ 23.06.2020/ Source: www.weforum.org.

 

  • Children in rural and underserved communities in Nigeria are being left behind as they are not equipped to adapt or transition to new methods of learning.
  • Governmental reforms in the national curriculum would help bridge the gap in inequality, as would PPPs.

According to a 2019 Executive Summary on Poverty and Inequality by the National Bureau of Statistics, 40.1% of the population in Nigeria, Africa’s most populous country and the largest producer of oil in Africa, is classified as poor. That is, on average, four out of 10 Nigerians has per capita expenditure below $400.

UNICEF report states that 10.5 million of the country’s children aged 5-14 years are not in school. Only 61% of 6 to 11-year-olds regularly attend primary school. Some states in the north east and north west of the country have more than half of the girls not enrolled in schools as marginalisation ensures that girls are deprived of basic education.

A struggle was going on prior to COVID-19 to ensure young children stay in school and have access to proper education, as Nigeria contributes approximately 20% of the total global out-of-school population.

Image: Nelly Ating Photography for UNICEF Nigeria

The COVID-19 pandemic is revolutionizing digital and online education globally but kids in rural and underserved communities in Lagos State, Nigeria, are being left behind as they are not equipped to adapt or transition to the new methods of learning.

On 19 March 2020, the Federal Ministry of Education approved school closures as a response to the pandemic. States in the federation contextualized this, with the Lagos State Ministry of Education releasing a schedule of radio and TV lessons for students in public schools.

Priorities should include the introduction of courses such as coding and robotics.

—April Amorighoye

However, for families that earn below $1 per day and faced harsh economic realities due to the four-week lockdown in the state, the purchase of radios or TV might be a trade-off that they cannot afford. A suggestion to this problem was the provision of portable solar radios to help bridge the digital divide.

The pandemic has unmasked substantial inequities in the education sector. Private and non-governmental sectors are tirelessly working to salvage this situation. Projects such as Digiterate and Teach for Nigeria hope to ensure proper tools for education are available to all in Lagos.

However, one major issue that may stem from this inequality is that these kids who currently cannot keep up with their peers because of inaccessibility to digital tools may never catch up and will continue to feel the effect of this gap long after the pandemic is over.

This may result in a severely diminishing pool of young adults who have not garnered the necessary skills to stay ahead in the future. With Nigeria already behind in preparing its young people for the workplace of the future, the effects of the pandemic further exacerbate this issue.

There are measures that must be taken to help bridge the divide when the urgent needs of the pandemic subside. They centre largely around Public-Private Partnerships (PPPs) and government aid.

PPPs can do much to improve the quality of, and increase access to, education for poor children in underserved communities. More schools in such areas, especially Lagos, would go some way to start shifting the teacher/student ratio which has hit alarming lows of 1:83 at points during the past decade.

The result of new schools opening would be a reduced burden on teachers, currently ill-equipped to handle the ever-burgeoning class sizes.

Voucher schools may also aid in rapidly improving the education system in Lagos as suggested by a World Bank Report addressing the need for more information on the private education sector there, given that private schools are the lead education provider in the state. Voucher schools are schools chosen by students and to which the government provides funding; they may be government or non-government providers or both, depending on the system.

Government aid is needed in terms of investing in educational tools of the future alongside a total revamp of the educational sector. Reforms in the national curriculum post-pandemic would be an effective way to bridge the gap in inequality. Priorities should include the introduction of courses such as coding and robotics which can usher students into the era of the Fourth Industrial Revolution and prepare them for jobs of the future.

In countries such as Nigeria, education should be viewed as a high government priority. Help in increasing awareness of the pressing need for the country’s children to be educated, especially those from low-income families, will benefit the country’s economy in years to come.

Aid provided in this direction can be viewed as an investment in human capital; the more educated a country is, the more productive.

Of all sustainable missions surely the most pressing is to improve lives, and there’s no better way to do so than proper and sound education for all.

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El 57% de la opinión pública apunta a personas como principal obstáculo en superar la crisis sanitaria: ¿Por qué no se acatan las cuarentenas?

Por: Paulina Sepulveda. 

El escenario actual de pandemia para Chile es complejo. El país ya cuenta con más casos de contagios que Italia y se sitúa en el octavo lugar a nivel mundial en ese ítem. No es todo. También destaca al posicionarse en el puesto número 15 del total de fallecidos nivel mundial.

¿Cuáles son los principales obstáculos para contener la crisis de salud? El 57,3% de la opinión pública apunta a que las personas no siguen las indicaciones de las autoridades sanitarias, seguido por la lentitud del actuar del Gobierno (45,4%) y la imposibilidad de dejar de trabajar (43,9%). Así lo concluyó el estudio Termómetro Social en pandemia, del Núcleo Milenio en Desarrollo Social (Desoc) junto al el Centro de Microdatos y el Centro de Estudios de Conflicto y Cohesión Social (Coes).

A la hora de buscar causas sobre la situación actual que enfrenta en país, gran parte de los encuestados, dice el informe, coincidieron en señalar que los ciudadanos que no siguen las indicaciones.

Centro dela ciudad de Antofagasta. Foto: Agencia Uno

Fiestas clandestinas en comunas en cuarentena y en horario de toque de queda. Se han conocido no una, sino varias. Incluso algunas con cientos de personas como participantes, pese a los reiterados llamados a mantener el distanciamiento social para evitar que se expanda aún más la pandemia por coronavirus.

Ante eso, el presidente Sebastián Piñera anunció la promulgación de un proyecto que modificó el artículo 318 del Código Penal, para los que pongan en peligro la salud pública al no respetar la cuarentena, enfrenten penas que pueden llegar a los cinco años y multas de hasta $10 millones. También contempla agravantes, como convocar a “espectáculos o celebraciones” prohibidas.

Responsabilidad

Octavio Avendaño, sociólogo y académico de la Universidad de Chile, indica que, desde abril en comparación con otros países de Europa, gran parte de la población ha tenido un comportamiento responsable en el autocuidado frente al virus. “No es un fenómeno generalizado el no respetar la normal, sobre todo es la tercera edad es la que más ha asumido el autocuidado”.

La razón de que se nombre a la ciudadanía como principal responsable, dice el sociólogo, es porque “las autoridades les han traspasado esa responsabilidad a las personas, en vez de enrostrarle esa responsabilidad al gobierno, y da la impresión de que nadie estuviera respetando la cuarentena, cuando no es así”.

Entender el fenómeno no es tan simple como responsabilizar de solo un grupo, destaca María Luisa Méndez, directora e investigadora principal de COES y profesora asociada del Instituto de Estudios Urbanos y Territoriales de la Universidad Católica.

El informe también agrega que el 38,5% cree que entre las razones de la actual crisis sanitaria en el país está en que las personas no confían en las autoridades, 37,4% señala que la infraestructura pública de salud es insuficiente, el 30% considera que el Gobierno no ha escuchado a los expertos, el 18,7% que las personas están desinformadas y el 9,5% que es por el precio del examen de diagnóstico.

La explicación también se encuentra, agrega Avendaño, en un problema de confianza en la autoridad y contradicción de ésta en las normas. “El que se haya hablado de retornar las clases, de abrir los centros comerciales, de que se podía tomar café con amigos, contribuye en esa actitud. Si la autoridad no tiene claridad, difícilmente la tendrá el ciudadano común. Porque ya existía falta de confianza en la autoridad y las instituciones antes de la pandemia”, sostiene.

También es responsabilidad de las autoridades al no tener un lenguaje coherente, indica Méndez, eso generó visiones erróneas. “El lenguaje de guerra, de buenos y malos, también es complejo, porque hay gente que no tiene más alternativa que trabajar. En vez de eso hoy tenemos que ver y aceptar el país que somos y desde ahí intervenir”.

Algo que debería cambiar con la nueva autoridad de salud, que según Méndez, tiene una posición dialogante y acompañada de actores claves, lo que le da coherencia en el mensaje más colectivo. “Eso es fundamental para ser más convincente”, explica la investigadora.

La encuesta rescata que el Colegio Médico tiene alta valoración en la ciudadanía “y considera que sus intervenciones pueden tener mayor efecto y ser un referente valioso para que los mensajes lleguen”, añade Méndez.

A la hora de evaluar a distintos actores, el estudio arroja que la confianza en los trabajadores de la salud llega a 95,6%, seguidos por el Colegio Médico con un 72,5%. Las FFAA y Carabineros junto a los alcaldes bordean el 50%. En cambio, la confianza en el Presidente de la República y el exministro de Salud, Jaime Mañalich, se ubicaba alrededor del 15%, mientras el Congreso no llega al 5%.

Desigualdad

Simplificar el asunto a buenos, quienes cumplen cuarentena, y malos, quienes la desobedecen, es muy simple, critica Méndez. Porque el fenómeno es muy complejo, añade. Como sociedad enfrentamos una crisis en salud en momento en que hay varios problemas de fondo de cohesión, apunta. “La crisis demostró que Chile tiene una fractura en términos de desigualdad de oportunidades, somos una sociedad que ha cambiado muchísimo con procesos de estructuración, con más diversidad por la llegada de los migrantes y una gran transformación de los espacios urbanos”.

Existe la complejidad de quienes, pese a la cuarentena, tienen que seguir trabajando. Un fenómeno que no es solo falta de voluntad, sino parte de la desigualdad y segregación social. Algo que se aprecia, dice Méndez, en la segregación espacial de Santiago, “una ciudad en donde la residencia para los sectores populares se llevó a la periferia y lejos de los lugares de trabajo. Entonces, quienes están más lejos de sus trabajos, son personas con menos educación, con baja calificación y labores manuales, que hoy no pueden dejar de trabajar. Esa es una gran explicación estructural que nos hace pensar en el modelo que tenemos y que ha ido escalando durante décadas”.

El estudio muestra que ante la posibilidad de enfrentar cuarentena obligatoria casi la mitad de las personas (49,2%) teme enfrentar falta de ingresos, sobre todo en hogares con ingresos bajo $940.000. Mientras el 31,8% cree que afrontaría dificultades para comprar alimentos e insumos básicos; la falta de espacio preocupa al 12,5% y los conflictos en el hogar al 9,7%. Entre los ingresos más altos, el 42,5% señala que no tendría ninguna dificultad.

Existen además otras condiciones estructurales que generan aumento del contagio que tiene que ver con el modo de vida de algunos sectores de la población chilena. Como la población migrante, dice Avendaño, “pero eso no se menciona, solo se dice que las personas no usan mascarillas o no cumplen las reglas”

Vínculos precarios

Ya el año 2017 el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (Pnud), a través del informe Desiguales, orígenes, cambios y desafíos de la brecha social en Chile, advertía que los buenos indicadores socioeconómicos del país esconden una realidad menos auspiciosa: los frutos y las oportunidades del progreso no alcanzan a todos por igual en el país.

“Hemos ido construyendo una sociedad con vínculos precarios entre los individuos y la sociedad. Hay dificultad para pensar en términos de un vinculo con una unidad mayor que resulta abstracta con la que no se tiene una experiencia directa. Hemos construido una sociedad desigual que no provee experiencias de ciudadanía temprana. Y se da en todos los grupos sociales”, indica Méndez.

Esa empatía hay que pensarla más sociológica e históricamente. “Hoy corresponde mirar al futuro y cómo pensar esa experiencia más tempranamente de derechos y deberes, es decir, cómo nos responsabilizamos del vínculo social y cómo lo social se responsabiliza con nosotros. Porque esto es una falta de experiencia de una vida social, de una sociedad que no se preocupa por las personas, donde cada individuo se ocupa de sí mismo”.

Establecer los buenos y malos es una trampa, indica Méndez. Con eso no se reconstruye un vínculo social, “porque el modelo de sociedad de consumo era donde generamos el vínculo y eso hizo agua”.

 

Fuente del artículo: https://www.latercera.com/que-pasa/noticia/el-57-de-la-opinion-publica-apunta-a-personas-como-principal-obstaculo-en-superar-la-crisis-sanitaria-por-que-no-se-acatan-las-cuarentenas/ZANCKFOIIZF7ROXR74GIPEWRS4/

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Brasil: Renuncia ministro de educación de bolsonaro que pidió encarcelar a los jueces de la corte

América del Sur/ Brasil/ 22.06.2020/ Fuente: diarioelsol.com.ar.

Abraham Weintraub presentó su dimisión al ser investigado por la justicia, aunque Bolsonaro ya dijo que ocupará un puesto en el Banco Mundial, en representación de Brasil.

El ministro de Educación de Brasil, Abraham Weintraub, anunció este jueves su renuncia al cargo, en medio de una serie de investigaciones judiciales que lo involucran luego de haber dicho en una reunión de gabinete que los 11 miembros de la corte suprema debían ir presos.

Lo hizo a través de un vídeo en el cual aparece al lado del presidente Jair Bolsonaro y en el que anunció que trabajará en un cargo del gobierno brasileño en el Banco Mundial.

Weintraub, uno de los líderes de la extrema derecha brasileña que responde políticamente al gurú de este sector, el astrólogo Olavo de Carvalho, renunció tras 14 meses en el cargo en el que acumuló polémicas en el sector educativo, político, diplomático y judicial.

«Voy a seguir luchando por la libertad y por los valores del presidente Bolsonaro, el mejor presidente de Brasil», dijo Weintraub, un economista que había sido vicejefe de gabinete en los primeros tres meses.

El último acto de gobierno en Educación de Weintraub fue revocar una resolución del gobierno de Dilma Rousseff, del hoy opositor Partido de los Trabajadores (PT) que asegura cupos y acciones afirmativas (incentivos) en cursos de posgrado en las universidades federales brasileñas a negros, indígenas y discapacitados.

En un vídeo de la reunión de gabinete del 22 de abril que fue revelado por la justicia para investigar a Bolsonaro por obstrucción de investigaciones, Weintraubdice que los poderes de Brasilia «son el cáncer del país» y que si fuera por él «encarcelaría a los 11 jueces del Supremo Tribunal Federal».

Durante la pandemia, Bolsonaro perdió ya cuatro ministros, dos de Salud (Luiz Mandetta y Nelson Teich), uno de Justicia (Sérgio Moro) y Weintraub.

La renuncia del ministro ocurre luego de que el lunes el Supremo Tribunal Federal lo incluyera en una investigación sobre supuesta financiación ilegal y lavado de dinero para montar medios que arquitectan campañas de odio en las redes sociales.

El ministro perdió la mayor parte de las reformas que impulsó en el Congreso e intentó la semana pasada tener autoridad especial en la pandemia para nombrar nuevos rectores, contra los procedimientos de autonomía universitaria.

También Weintraub, un defensor del gobierno estadounidense, causó problemas diplomáticos con China, principal socio comercial de Brasil desde 2009.

Es por eso que responde a acusaciones de racismo, por comentarios que hizo precisamente en las redes sociales y en los que se burló de los chinos y sus dificultades para pronunciar la letra erre, usando la famosa historieta brasileña «A Turma da Mónica», conocida en la Argentina como «Mónica y sus Amigos».

Además, insinuó -al igual que el diputado Eduardo Bolsonaro, hijo del presidente- que la pandemia de Covid-19 sería parte de unos supuestos planes de China para «dominar el mundo».

Fuente de la noticia: https://diarioelsol.com.ar/2020/06/18/renuncia-ministro-de-educacion-de-bolsonaro-que-pidio-encarcelar-a-los-jueces-de-la-corte/

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Conferencia: Capitalismo y Resistencias en Tiempos de Pandemia – Noam Chomsky

Capitalismo y Resistencias en Tiempos de Pandemia

Noam Chomsky

CII – OVE, CEIP, CINPECER, Universidad de Panamá,

Te invitamos cordialmente a sumarte a esta Conferencia con Noam Chomsky en el marco de nuestro espacio formativo.

Fecha: 23 de Junio de 2020

Hora: 2 pm: Costa Rica

3 pm: Colombia / Panamá / México

4 pm: Venezuela / Puerto Rico / Chile

5 pm: Argentina / San Pablo

 

Regístrate ya, aquí: https://docs.google.com/forms/d/e/1FAIpQLSeT9ygSIvxqimZOOgw_np9f4m-ymFV0ccNKXSHfpcGzh4i24A/viewform?usp=sf_link

 

Fuente de la Información: CII – OVE

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