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Hablemos de los problemas de aprendizaje de los/as alumnos/as y la pedagogía cooperaria.

Por Ana María Ramírez Zarza. 

“Ayudar al que lo necesita no sólo es parte del deber, sino de la felicidad”. José Martí 

“La crisis de la escuela es la crisis de la democracia. Los gobiernos de derechas no quieren que la gente piense y la educación tiene un papel central en la lucha contra las narrativas tóxicas”. Henry Giroux 

 Luego de leer el artículo “Qué son las dificultades específicas de aprendizaje que están detrás de la mayor parte del fracaso escolar” en que habló la especialista de la Universidad Internacional de Valencia (VIU), Laura Sánchez, de mi parte, considero pertinente cotejar amigablemente desde mi especialización socioeducativa y pedagogía cooperaria en tan espinoso asunto.

 Afirma Sánchez que “las dificultades específicas del aprendizaje, recogidas en el ‘Manual Diagnóstico y Estadístico de Trastornos Mentales’, son trastornos del neurodesarrollo que afectan a entre un 5% y un 10% de la población”.

Sánchez defiende la coexistencia de los dos modelos de educación: “Confío en la convivencia entre Educación Ordinaria con apoyos y profesorado especializado y la Educación Especial, siempre y cuando se respete la situación personal y de discapacidad de cada estudiante y la voluntad de la familia a la hora de hacer el dictamen para la escolarización del alumno”.

Sin embargo, la especialista no aludió, no refirió, al contexto socioeconómico negativo de los educandos, como la pobreza, la marginación, que son condicionantes muy fuertes en los estudiantes y su desempeño escolar.

Otro enfoque pedagógico.

La educación, para ser verdaderamente humanista, tiene que ser cooperativa, no puede: por lo tanto-a nuestro juicio-estar impregnada en el proceso enseñanza-aprendizaje de individualismo, porque el individualismo aparta, separa, enajena, a los educandos entre sí, impidiendo una verdadera relación de compañerismo y afirmación de la personalidad.

Una de nuestras preocupaciones, como especialistas socioeducativos, con el Prof. José Yorg es la de esclarecer  el condicionante del contexto socio-económico, basado en la desigualdad social, en que,
en un juego perverso, los pobres siempre pierden y por tanto, las dificultades diversas que enfrentan los estudiantes por esa pobreza no es su culpa, aunque intentan cargas sobre sus hombros como culpas, son los condicionantes lo que provocan trabas a su desarrollo intelectual.

Las dificultades de aprendizaje sólo pueden ser resueltos con otro enfoque pedagógico que fomente el trabajo y el estudio de manera grupal, de tal manera se auto-responsabilizan de su proceso de aprendizaje y aportan. Cuando los alumnos trabajan cooperativamente aprenden a brindar y recibir ayuda, se escuchan, dialogan y comparten, aprenden a buscar y encontrar en la cooperación miles maneras de resolver problemas.

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Argentina. Mis recuerdos de lecturas de Paulo Freire y las experiencias escolares, camino al cooperativismo escolar

 

Valoro la influencia en mi formación pedagógica Latinoamericanista de Freire, pero resalto que la debilidad fundamental que posee esa pedagogía está en la ausencia de un recurso didáctico orgánico.

Ante el centenario conmemorativo de Paulo Freire.

 “Los seminarios realizados sobre su obra y los enfoques desarrollados sobre su pensamiento han sido puramente laudatorios, acercándose casi de una adoración mesiánica. No hay problematización analítica. Se ignoran las fuentes teóricas que él tuvo como referencia para construir su obra y no se analizan sus aportaciones frente a las nuevas coyunturas del siglo XXI. Lo que se hace es simplemente repetir los lugares comunes de su pensamiento, así como algunos enfoques de las décadas de 1960 y 1970”  Ivonaldo Leite.

Se ha desatado un verdadero torrente de acciones para conmemorar los 100 años de Paulo Freireconmemoración que nos sumamos con entusiasmo por el enorme y valioso legado pedagógico crítico que Freire ha aportado a la humanidad.

 

A modo de ejemplo del impacto pedagógico trascendente cito que la Universidad Nacional de Tucumán a través de la Facultad de Filosofía y Letras ha convocado al Congreso Latinoamericano a 100 años del nacimiento de Paulo Freire; “Transitar su legado: un acto de justicia” los días 16 y 17 de septiembre de 2021 que cuenta con destacadas figuras de la educación, como Adriana Puiggrós, entre tantos/as sobresalientes.

De tan importante evento y sus principales justificantes de la fundamentación extraemos dos:

“Desentrañar su legado con ojos y actitud crítica, parados en este presente tan complejo que nos interpela, se constituye en un compromiso ético y político del que tanto nos enseñó en la vastedad de su pensamiento”.

“Las aportaciones de Paulo Freire se abren y nos abren al mundo para la comprensión, el conocimiento de la realidad y la indefectible transformación de ésta, manteniendo la esperanza como la espera activa que nos lleva a trabajar comprometidos con el sujeto social, la praxis, la emancipación, el diálogo, la autonomía, las relaciones de poder y la democracia”.

Así, lo anterior constituye el marco de mis recuerdos de lecturas de Paulo Freire y las experiencias escolares, camino al cooperativismo escolar, camino pedagógico cooperario pretendiendo llenar de cooperación las aulas formoseñas.

Esas lineas anteriores y las reflexiones de los textos de Freire saturaron mi mente de ideas renovadoras y ansioso de llevarlas a la práctica,tal como me encontraba en aquel lejano día de un encuentro en el camino hacia la escuela,sería un cambiante hecho, pero,sin embargo, hoy, evocados se renuevan en vitalidad.

En modo de narrativa docente expongo: En un día caluroso del año de 1983 me dirigía a asumir por primera vez como maestro de grado en la Escuela N° 54 de la localidad Villa Escolar, Departamento de Misión Laishi, de la Provincia de Formosa-Argentina-, y tal como lo adelanté en el párrafo anterior en mi mente estaban las ideas del gran maestro Paulo Freire.

En efecto, en aquel trayecto a recorrer de seis kilómetros de ruta de tierra desde la localidad de Gral. Mancilla hasta la escuela se produjo un encuentro casual significativo y trascendental con la Supervisora Escolar Prof. Lidia Friederich de Acuña, ya que ambos teníamos como punto de llegada la escuela.

La Supervisora Escolar no tardó en hablarme de las bondades del cooperativismo escolar y exponer en contexto la desvinculación existente entre la escuela y las necesidades de los educandos, hijos de pequeños productores; la educación común no es la apropiada en relación a los intereses de las mayorías de los niños, toda vez que la perspectiva de un horizonte promisorio se presenta problemática, también por sus métodos, visibilizan una ruptura del medio social rural y la educación.

Esa práctica educativa necesaria surge de la necesidad de incorporar saberes del cooperativismo escolar dado que los educandos, hijos de labriegos, trabajan muy bien la tierra pero desconocen los aspectos organizativos gremial y empresarial que les permitan superar sus debilidades mercantiles ante el intermediario que menoscaba el precio de sus productos y los mantiene en perpetua debilidad, inermes individualmente.

No obstante aquel primer encuentro y diálogo con mi Supervisora Escolar, en principio me apoyé en las concepciones pedagógicas de Paulo Freire, pero pronto me enfrenté a las contradicciones que descubriría en dicha pedagogía a partir de aspectos maravillosos pero muy teóricos e insuficientes ante la realidad de niños labriegos que llegan tarde al inicio escolar en razón a trabajos en la cosecha de algodón.

Pienso que la propuesta pedagógica del educador brasileño continúa vigente en cuanto que su propuesta asume a la educación, a la alfabetización, al diálogo y a la reflexión, como valiosas herramientas de liberación del hombre. Por tanto, yo no hablaría de abandono de las ideas de Freire.

Sin embargo, no es menos cierto que la clave de la desigualdad social y económica reside en la organización capitalista que se expresa, entre otros, en sus  empresas, que constituyen terrenos de relación capital-trabajo, desventajosa para el sector del trabajo. La empresa cooperativa, por el contrario, fundada y organizada sobre otra concepción, altera esa relación injusta y establece una relación de cooperación, entre iguales y proporcionales, en sus beneficios. Mientras esto no se logre, habrá injusticia social.

La virtud de la pedagogía cooperativa reside-entre muchos-en su instrumento didáctico: La cooperativa escolar.

Ella es en pequeño el medio de transformación del educando y su perspectiva creativa de modificar, alterar, ulteriormente la organización de la economía mercantil en una economía de la cooperación. Este descubrimiento del carácter  pedagógico y didáctico del cooperativismo me llevó a asumir una decisión inapelable con respecto al estudio e investigación pedagógica que dio por resultado la pedagogía cooperaria.

Tal decisión conlleva evidenciar las virtudes pedagógicas y didácticas del cooperativismo escolar en cuanto su carácter transformador social y económico, puesto que se plantea nada más y nada menos que superar la forma organizativa capitalista de la sociedad, de la empresa y la formación del educando que lo moldea para esa forma de vida. En cambio, el cooperativismo transforma esa lógica, pues se sostiene en la propiedad y distribución equitativa cooperativa que aniquila la desproporción entre el trabajador y el capitalista.

He allí el meollo de la cuestión al hablar de pedagogía transformadora, ello conlleva modificar la organización social y económica capitalista por otra diferente ya que está bajo la concepción humana, reflejada por la empresa cooperativa y las relaciones socio-económicas que ella trastoca, propugna y esparce, insistir en este aspecto nunca será suficiente.

Lo que a su vez significa la superación sobre las metodologías planteadas por los diversos educadores cooperativistas porque éstos emplean la pedagogía liberal aprendidas en los Institutos de Formación docentes y Facultades a la enseñanza del cooperativismo en todos los niveles del sistema educativo oficial, lo que implica, cuanto menos, una contradicción.

Tal análisis y conclusión no es un asunto menor, son indagaciones que dicen mucho de cómo construí la pedagogía cooperaria, estableciendo en realidad una ruptura con la práctica de asimilación pedagógica liberal a la pedagogía cooperativa original, de su génesis.

Para concluir , y en base al hecho de que elegí una cita extraída de un párrafo del artículo “La Educación Popular, Paulo Freire y la “muerte de la dialéctica” del catedrático de Sociología de la Educación, Universidad Federal de Paraíba (UFPB)Brasil, Ivonaldo Leite, para presidir este artículo.

Pienso, precisamente, en otro párrafo de ese importante artículo de  Leite cuando afirma que:

“El método de Freire y su amplia obra configuraron un rico universo de reflexiones acerca de la educación, de la pedagogía y la ética liberadoras. Para Paulo Freire, educar significa, por ejemplo, conocer críticamente la realidad, comprometerse con la utopía de transformarla, formar sujetos de dicho cambio y desarrollar el diálogo. Pero, aunque su método constituía una profunda crítica a las prácticas educativas tradicionales, él también empezó a revelar limitaciones y ambigüedades políticas. Los problemas se referían principalmente al desconocimiento del condicionamiento de la educación por la estructura social y económica, así como a los conflictos de clase. Como consecuencia, la idea de transformar la realidad quedaba convertida en un acto abstracto”. https://rebelion.org/la-educacion-popular-paulo-freire-y-la-muerte-de-la-dialectica/

Un agregado compendiado:

Reconozco y valoro la influencia en mi formación pedagógica Latinoamericanista de Freire, pero resalto que la debilidad fundamental que posee esa pedagogía,como pedagogía contestata
ria a la injusticia social,está en la ausencia de un recurso didáctico orgánico que se desenvuelva en la escuela,se evidencie en la comunidad y genere conciencia subjetiva en cuanto a  posibilidad de modificar organizadamente el estado de necesidad de sectores menos favorecidos, e incidir en la transformación productiva de campesinos y sectores comunitarios, como sí la tiene la educación cooperativa por medio de la cooperativa escolar.

Sin embargo, en mi acción pedagógica e investigadora, me distancio de las prácticas educativas cooperativas tradicionales.Enfatizo la esencia transformadora de la cooperación en las aulas. Asumo abiertamente las dificultades burocráticas en las instituciones educativas e identifico a estas trabas como expresión material ideológica de la influencia liberal en ellas.

Rompí con las prácticas cooperativas bajo el influjo liberal devenido  desde la formación docente en las  instituciones educativas al comprender las distorsiones que infringen a la pedagogía cooperativa genuina por parte de los docentes cooperativos/as que reproducen esa desvirtuación pedagógica y que impiden su pleno desarrollo educativo.

¡Saludos cooperativos!

Fuente de la información e imagen:  https://kaosenlared.net

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Enfoques cooperativos; Hoy: Pedagogía Cooperativa Escolar y el Consejo Nacional de Calidad de la Educación.

Consideramos a la composición y funcionamiento del Consejo Nacional de Calidad de la Educación un hecho relevante, y a partir de ello, nos expresamos como referentes de la Pedagogía cooperativa escolar y universitaria por medio de este modesto artículo.

 

“Partiendo del concepto de calidad educativa es necesario generar también condiciones y recursos en las instituciones, tendientes a priorizar en la educación aspectos cognitivos, reflexivos y de valor, que promuevan el pleno desarrollo de nuestro niños, niñas, jóvenes y adultos. Para poder lograrlo, concebimos la educación como tarea compartida, que implica interacciones y diálogo continuo entre diferentes actores, contextos y organizaciones”. Ministerio de Educación-Provincia de Santa Fe.

La Ley educativa nacional argentina N° 26206/06 en su capitulo III-Información y Evaluación del Sistema Educativo y en su artículo N° 98 establece: “Créase el Consejo Nacional de Calidad de la Educación, en el ámbito del Ministerio de Educación, Ciencia y Tecnología, como órgano de asesoramiento especializado, que estará integrado por miembros de la comunidad académica y científica de reconocida trayectoria en la materia, representantes de dicho Ministerio, del Consejo Federal de Educación, del Congreso Nacional, de las organizaciones del trabajo y la producción, y de las organizaciones gremiales docentes con personería nacional”.

“Tendrá por funciones: a) Proponer criterios y modalidades en los procesos evaluativos del Sistema Educativo Nacional; b) Participar en el seguimiento de los procesos de evaluación del Sistema Educativo Nacional, y emitir opinión técnica al respecto; c) Elevar al Ministerio de Educación, Ciencia y Tecnología propuestas y estudios destinados a mejorar la calidad de la educación nacional y la equidad en la asignación de recursos; d) Participar en la difusión y utilización de la información generada por dichos procesos; e) Asesorar al Ministerio de Educación, Ciencia y Tecnología con respecto a la participación en operativos internacionales de evaluación”.

Recientemente el Ministerio de Educación de la Nación, a través de la resolución N° 549/20, reglamentó la composición y funcionamiento del Consejo Nacional de Calidad de la Educación, como órgano de asesoramiento especializado sobre la evaluación y mejora de la calidad de la educación y la equidad en la asignación de recursos, según nos enteramos por los medios periodísticos.

¿Qué entendemos por calidad educativa?

Existen tantas y variadas conceptualizaciones y definiciones que debimos optar por la declamada en el Portal de educación de la Provincia de Santa Fe (Argentina) (https://www.santafe.gov.ar/):

“Cuando hablamos de calidad educativa, la entendemos no como la apropiación individual de una colección de conocimientos enciclopédicos, sino como la construcción colectiva de saberes socialmente relevantes, como la forma específica en que las generaciones adultas nos hacemos cargo de la transmisión, en tanto acto de pasaje, a las nuevas generaciones para instituirlas como sujetos del conocer, no solo acercándolas a un conjunto de saberes, sino también a una forma respetuosa, participativa y democrática de habitar y construir el mundo. Asimismo, entendemos a la calidad educativa como un concepto que se hace cargo de democratizar la distribución de saberes y los procesos de formación para construir igualdad social. Por ello, en la medida en que hablamos de una educación de calidad vinculada a la construcción de calidad social -y por eso mismo para todos- hacemos referencia también a una calidad educativa indisolublemente ligada a la inclusión socioeducativa de todos…”
La educación cooperativa escolar está “indisolublemente ligada a la inclusión socioeducativa” de la educación formal argentina.

“Una educación de calidad está íntimamente ligada a la inclusión porque de lo que se trata es de ofrecer a los estudiantes posibilidades de aprender, de constituirse en sujetos de su educación y de emanciparse como resultado de su paso por la escuela”.

En verdad al leer estos significativos pasajes que nos emocionan tenemos la fuerte convicción de que se inspiraron para la redacción de esas conceptualizaciones, en los valores y principios cooperativos, en su noble Doctrina.

Lineamientos políticos educativos.

La Ley de Educación Nacional N° 26.206/06 de la Argentina, según se lee en su Portal oficial “fue aprobada por el Congreso de la Nación el 14 de diciembre de 2006, constituyendo un paso fundamental en el proceso de recuperación de la educación para la construcción de una sociedad más justa”.

“Sus contenidos están orientados a resolver los problemas de fragmentación y desigualdad que afectan al Sistema Educativo y a enfrentar los desafíos de una sociedad en la cual el acceso universal a una educación de buena calidad es requisito para la integración social plena”.

“La Ley N° 26.206 regula el ejercicio del derecho de enseñar y aprender consagrado por el artículo 14 de la Constitución Nacional y los Tratados Internacionales incorporados a ella, conforme con las atribuciones conferidas al Honorable Congreso de la Nación en el artículo 75, incisos 17, 18, y 19, y de acuerdo con los principios que allí se establecen y los que esta ley determina”.

“Asimismo la Ley de Educación Nacional establece en el artículo 3 que la educación es una prioridad nacional y se constituye en política de Estado para construir una sociedad justa, reafirmar la soberanía e identidad nacional, profundizar el ejercicio de la ciudadanía democrática, respetar los derechos humanos y libertades fundamentales y fortalecer el desarrollo económico – social de la Nación”

Constituyen, a nuestro modesto entender, los párrafos anteriores un marco teórico formidable y que dan sustancia y fortaleza a la pedagogía cooperativa a tenor de sus virtudes, métodos y doctrina como la pedagogía más contundente en la procura de las aspiraciones anotadas en dicha Ley. Y de hecho que está incorporada a la citada Ley nacional en su artículo N° 90.

Por su carácter transformador y contestatario, la pedagogía cooperativa, de naturaleza didáctica incluyente, integral e integradora, teórica y práctica en su desenvolvimiento, encara, precisamente, a partir de su Doctrina de armonía, de manera amigable a la extinción de esos males sociales a que refieren… “a resolver los problemas de fragmentación y desigualdad que afectan al Sistema Educativo” y al mismo tiempo apoyar…” el proceso de recuperación de la educación para la construcción de una sociedad más justa”.

Así, sucintamente hemos anotado y dimos cuenta de la expresión de las políticas públicas referidas a la educación oficial argentina que nos sirven de marco conceptual para expresar qué expectativa nos genera el hecho de que el Ministerio de Educación de la Nación reglamentó la creación del Consejo Nacional de Calidad de la Educación.

Ahora, el Dr. Mariano Narodowski es miembro académico del Consejo Nacional de la Calidad de la Educación… ¿Qué expectativa nos genera a los docentes cooperativos?

Narodowski es profesor full time de la Escuela de Gobierno de la Universidad Torcuato Di Tella. Ha publicado artículos de investigación en Journal of Education Policy, Compare, Comparative Education entre otros y es autor de 20 libros. Fue Ministro de Educación de la Ciudad de Buenos Aires. Además, Mariano ha sido Profesor Visitante de varias universidades del mundo y ha recibido premios y subsidios a la investigación como el John Simon Guggenheim Fellow o el Oustanding Scholar Award (LASIG-CIES). Además, es miembro fundador de Pansophia Project.

Antes que nada nos interesa subrayar nuestro beneplácito porque Mariano Narodowski asumió tan importante rol. Después sí, nos interesa expresar nuestra expectativa respecto a sus importantes funciones, centrada en especial en una: c) Elevar al Ministerio de Educación propuestas y estudios destinados a mejorar la calidad de la educación nacional…”

Lo dicho en segunda instancia del párrafo anterior nos lleva a señalar porqué entendemos que la Pedagogía Cooperativa Escolar y Universitaria califica suficientemente- a nuestro modesto juicio-para ser considerados como recursos educacionales de alta cualidad.

La expectativa se vuelve entonces un interrogante optimista: ¿Encontraremos un canal comunicativo que abra el diálogo con el flamante Consejero Académico, Dr. Mariano Narodowski?

Nosotros ubicamos en un sitial relevante y urgente recibir un gesto y actitud positiva de los gobiernos para con la Pedagogía cooperativa, en verdad, una suerte de “Reparación histórica”.

¡En la fraternidad, un abrazo cooperativo!

Fuente: Los autores escriben para el Portal «Otras Voces en Educación»

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Argentina. Enfoques cooperativos; Hoy: Reflexiones sobre el libro:”La gestión del nosotros con los otros”

Argentina. Enfoques cooperativos; Hoy: Reflexiones sobre el libro:”La gestión del nosotros con los otros”

Tensión entre educación y multipluralismo. Limites de una labor educativa.

Es un estudio meticuloso de una problemática que posee muchas aristas, que desbordan ampliamente lo educativo y expone claramente carencias, negligencias y puntos de vistas cerrados y burocráticos, junto a actitudes solidarias, heroicas y sublimes. ¿Cómo aprende el chico aborigen? Una de la cuestión abordada.

Por José Yorg, el cooperario.

… En el Círculo, todos somos iguales. / No hay nadie delante de tí y no hay nadie detrás de tí. / Nadie está por encima de tí. Nadie está por debajo de tí. / El Círculo es Sagrado porque está diseñado para crear Unidad…”. Sabiduria Lakota.

 

 

Al igual que el equipo de investigadores de la Facultad de Humanidades de la UNNE, que llevan adelante la experiencia que estudia los usos del guaraní y el castellano en contextos escolares y comunitarios de la Provincia de Corrientes, tropecé con discursos de resistencia y prohibición del guaraní por parte de directivos, pero con mucho tacto y respeto pude demostrar que el método ayuda a desinhibir y enriquece el horizonte multicultural del educando”. J. Yorg.

En Argentina hemos empezado una nueva etapa de convivencia a partir de la asunción al gobierno nacional el pasado diciembre del 2019 del Dr. Fernadez y como vice presidenta Cristina Fernandez en contexto dificil y complejo, y hoy, aún con incertidumbres.

La ciudadanía en general-se percibe-aspira a un cambio de rumbo con la urgencia que compatibiliza con el desastre económico y social dejado por el neoliberal anterior gobierno.

Por nuestra parte, desde nuestra mirada cooperativa y nuestra experiencias educativas, aspiramos que el gobierno nacional y provincial encare un eje de restauración educativa, incorporando definitivamente la pedagogía cooperativa a las aulas y también otras corrientes pedagógicas envestidas con una concepción emancipadora, libertaria,plural, que quiebre definitivamente el rol negativo de la utilización de la educación como arma de sometimiento y desigualdad peremne.

En esta línea de analisis- desde los valores y principios cooperativos-nos ubicamos para expresar sobre lo que consideramos un llamado a las conciencias, con sensibilidad social, para realizar esa epopeya de construir una buena educación nacional  que pareciera  aportar, a prima facie, la intención del libro del Prof. Dr. Mario Olmedo, sin embargo, va más allá, atravieza e interpela a la sociedad en su conjunto.

Por momentos, al leer el libro,que es atrapante, en verdad, su enorme contenido textual es contestatario a lo que encuentra injusto y de mala práxis política.

Es una tesis doctoral que “felizmente se convirtió en libro”nos dice la prologista Dra. Clide Gremiger, cuestión que compartimos ampliamente.

El libro “La Gestión del Nosotros con los Otros”. “Hacia la Educación Intercultural en la Escuela Pública”, es estudio de caso de la Escuela de El Quebracho ubicado en el departamento Ramón Lista de la Provincia de Formosa-Argentina-,con población aborigen de la etnia Wichí y criollos “blancos” que  plantea asuntos cruciales de la educación intercultural no resuelta favorablemete aún.Se trata de visibilizar la pregunta que guió a la investigación: ¿Cómo interviene la escuela pública en contextos críticos territoriales no hegemónicos , mediante una gestión pública e intercultural propia de la democracia participativa?

La escuela está ubicada en el oeste provincial, tiene cercana vecindad con la República del Paraguay  y de Bolivia, sí, allá lejos de la “civilización”.

Es un estudio meticuloso de una problemática que posee muchas aristas, que desbordan ampliamente lo educativo y expone claramente carencias, negligencias y puntos de vistas cerrados y burocraticos, junto a actitudes solidarias,heroicas y sublimes.¿Cómo aprende el chico aborigen? Una de la cuestión abordada.

“…aprenden viendo al padre o viendo a la madre . No es que la madre se sienta a darle clases de como hacer una yica; ella mira, observa y la madre sabe que le esta enseñanando, y ante una pregunta le responde, porque es una pedagogia de la mirada y de la pregunta: observa, ve, pregunta y responde”. (Testimonio Padre Francisco Nassar)

Olmedo, investiga, pregunta y se interroga, luego examina los testimonios sobre el caso y finalmente pone en valor la Escuela “El Quebracho” bajo la gestión del Director Prof. Juan Carlos Lavaque que ensaya (con éxito por cienrto), una gestión diferente exiguida por la realidad del éxodo permanente de los pobladores, buscar y encontrar bienestar y sustentabilidad de vida para todos, encara entonces la escuela con la responsabilidad social y se convierte para ello en una escuela productiva y el trabajo, no sin vicisitudes e incomprensiones, más adelante superadas.

En este punto-insistimos,desde la concepción pedagógica cooperativa en su expresión de “esfuerzo propio y ayuda mutua”-nos interrogamos sobre el rol del Estado en cuanto a facilitar el desarrollo estratégico socio-económico de las comunidades a partir de políticas públicas efectivas, en particular sobre el rol de la Escuela, la educación y los/as docentes en ese contexto.

Para educaciónrural.org (http://www.educacionrural.org/?page_id=386)   “La Escuela no será productiva si la producción se entiende como exclusiva creación de bienes económicos. Será productiva, en cambio, si la producción se entiende como trabajo educativo y socialmente útil que pueda crear beneficios materiales para los alumnos”.

“Este trabajo educativo tenderá a equilibrar la capacidad productiva del medio, con la comprensión inteligente de sus problemas y la iniciación  técnica necesaria  para su    aprovechamiento en   beneficio  del bienestar  campesino”.( y/o aborigen)

La tesis demuestran palmariamente los supuestos encarados por el Prof. Olmedo y de tal modo pone en manos de quienes quieran abrevar saberes muy valiosos para ampliar el horizonte multicultural: Docentes,investigadores, políticos,funcionarios y sobre todo, estudiantes que se dirigen a la meta de ser docentes. Un texto imprescindible.

¡En la fraternidad, un abrazo cooperativo!

Fuente de la Información: https://kaosenlared.net/argentina-enfoques-cooperativos-hoy-reflexiones-sobre-el-librola-gestion-del-nosotros-con-los-otros/

Autor: José Yorg

 

 

 

 

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Argentina. Enfoques cooperativos, Hoy: ¿Incluir es igual a emanciparse?

Tenemos sobre nuestros hombros la hermosa tarea que implicó haber enseñado en escuelas rurales y en barrios marginales y en esos ámbitos aprendimos a enseñar la noble pedagogía cooperaria.

Por José Yorg, el cooperario.

 “En tiempos de incertidumbre y desesperanza, es imprescindible gestar proyectos colectivos desde donde planificar la esperanza junto a otros”. Enrique Pichon Riviére

Desde el principio de los tiempos fundacionales de TECNICOOP una preocupación centró la constante atención y ocupación: Desarrollar la genuina Pedagogía y Didáctica cooperativa escolar y universitaria y desde ese lugar ofrecer calidad educativa al pueblo.

Tal tarea demandó un esfuerzo extraordinario, dado las dificultades y estrechez económica que suelen azotar a los educadores populares, sin embargo, la labor de indagación se realizó y aún se avanza con resultados-aunque modestos- a nosotros nos estimula.

Tenemos sobre nuestros hombros la hermosa tarea que implicó haber enseñado en escuelas rurales y en barrios marginales y en esos ámbitos aprendimos a enseñar la noble pedagogía cooperaria.

Se alude oficialmente la consiga de “inclusión” por medio de la educación de vastos sectores marginados, cabe en este punto formular la inquietante interrogación: ¿Incluir es igual a emanciparse?

Detengámonos un momento sobre esta cuestión, de que la educación incluye, que está, por cierto, en tela de juicio ante el contexto atropellador del neoliberal capitalista. Nos ilustra el periodista y escritor uruguayo Raúl Zibechi en su artículo reciente “Medio siglo de educación popular”,   que “Un excelente trabajo de la socióloga brasileña María da Gloria Gohn, destaca que se produjo un profundo viraje que llevó a la profesionalización de los educadores populares, se debilita la horizontalidad y se consolidan relaciones de poder entre los que enseñan y los que aprenden. Los educadores populares van dejando de lado la relación militante con sus alumnos para vincularse con la población como grupos de beneficiarios”.

Claro está que sería una postura, cuanto menos, necia negar el papel de la educación para la inclusión, pero. ¿Es suficiente, y sobre todo, qué tipo de educación requieren estos sectores marginados? Este es el meollo del asunto.

Otro gran educador, el economista argentino José Luis Coraggio nos desafía con el título de su artículo, recientemente publicado: “¿Qué hacer desde la economía popular ante la situación actual?”.

Nos plantea Coraggio: “El pensamiento neoliberal, hoy hegemónico –porque no se limita a los economistas o a otros intelectuales del establishment, sino que ha logrado penetrar en el sentido común de las mayorías–, nos propone que la buena economía es una economía de mercado, en la que cada uno busca sacar la máxima utilidad del intercambio, compitiendo antes que solidarizándose con los otros, haciéndose responsable de su propia situación y olvidando la existencia de un sistema económico y político opresor”.

En tales circunstancia… ¿Es posible desarrollar programas de educación emancipadoras?

No sólo es posible sino que sobre toda dudas es imperativo y oportuno. Allí están los educandos, sedientes de saberes útiles y nobles que la Pedagogía cooperaria implica.

¡En la fraternidad, un abrazo cooperativo!

Fuente: http://kaosenlared.net/argentina-enfoques-cooperativos-hoy-incluir-es-igual-a-emanciparse/

 

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Los límites de una educación en crisis

Por Jose Yorg

El sistema educativo argentino no está concebido ni estructurado para desarrollar procesos de enseñanza-aprendizaje para lograr mentalidad emprendedora
“La única persona que esta educada es la que ha aprendido cómo aprender y cambiar”
Carl Rogers

Sabemos y celebramos todos los intentos y diversas prácticas desenvueltas en el ámbito educativo argentino tendientes a propiciar educación emprendedora. Sin embargo, nosotros mantenemos una visión crítica y más amplia de la cuestión, más global, más sistémica.

Ponemos nuestra mirada en lo profundo de la crisis educativa y encontramos en nuestras indagaciones muchas causas que explican las razones de tal crisis, pero nos detenemos en una: en la esencia que nos evoca Adriana Puiggrós sobre la crítica que realizó Juan Bautista Alberdi a la concepción pedagógica rivadaviana como “enciclopedismo, abstracción estéril y la renuencia a vincular el trabajo con la educación”.

Han transcurrido más “de ciento cincuenta años de aquella crítica breve pero demoledora” en que el sistema educativo argentino no está aún concebido ni estructurado para desarrollar procesos de enseñanza-aprendizaje para lograr mentalidad emprendedora, son los límites de una educación en crisis y acotada.
La conclusión es que la actual educación no resuelve esta cuestión fundamental, referida a su orientación formativa, hablamos de que se forjan mentalidades, diríamos directamente, de “buscadores de empleos” y no de “generadores de empresas”.

La pedagogía y didáctica cooperativa posee los atributos que envuelven lo solidario, lo fraterno, lo social, la forja del trabajo en equipos, el desarrollo de habilidades, destrezas y capacidades de gestión y administración empresarial, va más allá de la vinculación educación-trabajo, va hacia la mentalidad empresarial.

La educación cooperativa se concreta de manera teórica y práctica.

Siguiendo a Adriana en su libro “Qué pasó en la educación: Breve historia desde la conquista hasta el presente”, además de deleitarnos, aprendemos que Alberdi reprochó no “haberse creado un «Colegio de Ciencias Exactas y Aplicadas a la Industria». Hay que formar al productor, meter la modernización en las costumbres de la gente, imbuirla de la fiebre de actividad y de empresa de los yanquis, hacer obligatorio el aprendizaje del inglés en lugar del latín, multiplicar las escuelas de industria y de comercio, desplazar al clero del lugar de los educadores”.

Compartimos con la apreciada y valorada autora de que “Alberdi ha sido criticado por el nacionalismo popular y por algunos sectores de izquierda por su desvalorización de las cualidades argentinas para producir el progreso. Hay, sin embargo, elementos de enorme lucidez y previsión prospectiva que hoy no podemos dejar de resaltar. Lo que reclamaba Alberdi era cierto sentido de realidad, cierta renuncia a la soberbia, cierta comprensión de que para levantar, unir y hacer prosperar a la sociedad que amparaba a todos los argentinos, era necesario invertir trabajo y esfuerzo”.

Pero la concepción de Alberdi tuvo un tope, un obstáculo lamentable: sólo concibió al sujeto pedagógico como una proyección de la cultura francesa, de la laboriosidad inglesa, de la eficiencia norteamericana. Igual que Sarmiento, borró al sujeto social real y volvió abstracta su propuesta educativa, que podría haber sido democrática y vinculada con la realidad nacional”.

Entonces, en pleno siglo XXI es, a nuestro modesto criterio, hora de pensar y plasmar una educación que resuelva amigablemente esta crisis sistémica, dañina socialmente.

¡En la fraternidad, un abrazo cooperativo!

Rebelión ha publicado este artículo con el permiso del autor mediante una licencia de Creative Commons, respetando su libertad para publicarlo en otras fuentes.

Fuente: http://rebelion.org/noticia.php?id=228118

Imagen de archivo OVE

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Enfoques cooperativos. Hoy: Diálogos Pedagógicos.

Ante el inicio de clases
 
Por José Yorg, el cooperario.
 
“Con mis maestros he aprendido mucho; con mis colegas, más; con mis alumnos todavía más”. Proverbio hindú
“Por la ignorancia se desciende a la servidumbre, por la educación se asciende a la libertad”. Diego Luís Córdoba
 

En efecto, los días previos al inicio de clase siempre invita a reflexionar sobre la práctica docente y la educación. La educación formal que ya pocos niegan y que persiste en una crisis aguda y crónica.

Muchos afirman que tal crisis es reflejo de la crisis civilizatoria global impactando en los procesos enseñanza –aprendizaje en todos los niveles y modalidades. Sin embargo, estamos obligados a buscar y encontrar algunas respuestas, no hablamos de soluciones porque éstas están en manos de los decisores políticos-institucionales.

Consideramos entonces, en esa línea, abrir diálogos pedagógicos, reflexiones, para la transformación social, porque entendemos y asumimos esa crisis civilizatoria, a la que se le debe aportar pensamientos y experiencias que inviten a innovar, a transformar.

La generosidad de los espacios virtuales y demás que permiten publicar nuestras ideas y opiniones  pretendemos que se constituyan de hecho en plataformas nacional e  internacional para el debate y la reflexión.

Reflexión que nos es dable  abrir y ampliar tanto como podamos desde nuestras prácticas y las peculiares realidades en nuestra condición de maestros/as, educadores social e intelectuales comprometidos.

Planteamos ante todo el diálogo como acción que desconozca preámbulos o mecanismos cerrados que entorpezcan la puesta en marcha al abordaje de diferentes miradas y prácticas y en tales momentos fluya ya la construcción  de una pedagogía  para la transformación social.

La centralidad es el aula. Es el ámbito del encuentro con realidades que socavan las rigideces de la agenda formal. Allí se abre el espacio donde debemos desafiarnos como educadores e intentar la puesta en escena la libertad de enseñar y la libertad de aprender.

La pedagogía cooperaria,  a la que hemos llegado después de recorrer muchos caminos consuetudinarios, se nos presentó con todo su esplendor al descubrir su esencia, la génesis  de la cooperación como fenómeno económico-social en su faz educativa. Desapartándonos de la pedagogía liberal aprendida en los Institutos de formación docente.

La teoría y la práctica son elementos inseparables en la pedagogía cooperaria, es que ellas se nutren mutua e incesantemente y en ese quehacer educativo ceden los estrechos muros de la escolaridad y van al encuentro de padres, vecinos, organizaciones, quienes se suman a los diversos proyectos productivos que se encaran.

Los ejes temáticos cooperarios, como  historia, doctrina, organizativo, legal y metodología se entrecruzan cómodamente con las diversas asignaturas y le otorgan a la construcción y emponderamiento de saberes una perspectiva integral e integradora para prácticas de una educación para el desarrollo de potencialidades personales y grupales y de comunidades.

Así, la pedagogía cooperaria abre horizontes tan amplios como pretendan sus practicantes en esa mirada, necesariamente, cuestionadora a la injusta sociedad actual para su mejoramiento.

¡En la fraternidad, un abrazo cooperativo!

Artículo enviado por su autor a la redacción de OVE 
Imagen tomada de: http://prensa.cba.gov.ar/wp-content/uploads/2014/06/cooperativas.jpg
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