Page 20 of 46
1 18 19 20 21 22 46

Perú: Proponen nuevas estrategias para mejorar la calidad educativa del país

América del Sur/Perú/02.10.2018/Fuente: www.expreso.com.pe.

El camino correcto que debe  emprender el Estado para avanzar progresiva y masivamente en todo el sistema educativo del país, es implementando y mejorando la calidad de la enseñanza de los maestros, mejorar las condiciones del material didáctico para la enseñanza del estudiante, así como tener una política educativa en base a un sistema estratégico a largo plazo, en los niveles básico, primaria, secundaria y superior – técnico y universitario – dio a conocer el experto en educación Carlos Oyola Martínez.

Remarco que para lograr este objetivo es necesario que el actual gobierno incremente el producto bruto interno PBI, destinado a la educación pública teniendo en cuenta que estos recursos presupuestales que suman cerca de 4 por ciento son insuficientes para lograr mejoras en el sistema educativo del país.

Derecho a mejor educación

El catedrático universitario fue reconocido por el Colegio de Profesores del Perú en el Congreso de la República, allí expresó que de aplicarse estas estrategias de manera equitativa y progresiva se incrementara la calidad educativa y habrá mayores oportunidades en este sector, teniendo en cuenta que poco a poco se desarrollara en todos los niveles y en todos sus aspectos, como profesores, alumnado, métodos de enseñanza, contenido, infraestructura, aprendizaje, ambiente educativo y gestión, “Porque todos tenemos derecho a una mejor educación”, enfatizó.

Fuente de la noticia: https://www.expreso.com.pe/actualidad/peru-proponen-nuevas-estrategias-para-mejorar-la-calidad-educativa-del-pais/

Comparte este contenido:

Libro: «Foucault y la educación» (PDF)

Francia – España / 30 de septiembre de 2018 / Autor: Stephen J. Ball (Compilador) / Fuente: Cultura y Libros en pdf

El pensamiento de Michel FOUCAULT, tan influyente en todas las ciencias sociales, es obvio que debía resultar de interés en el ámbito de la educación. Este libro es el primero en explorar en profundidad las principales ideas y conceptos de FOUCAULT sobre las cuestiones y contextos educativos. Se argumenta en él que las instituciones escolares, al igual que las prisiones y manicomios, están preocupadas fundamentalmente por la regulación moral y social; utilizan para ello complejas tecnologías de poder y control disciplinario y se apoyan también en la arbitrariedad típica de las modernas instituciones. Las cuestiones de «poder» y «saber» se nos muestran como algo fundamental en el seno de toda institución. Los ensayos originales y desafiantes que integran este libro valoran la relevancia de la obra de FOUCAULT para la práctica educativa, y ponen de manifiesto cómo la aplicación de los análisis foucaultianos a la educación nos ayuda a comprender las peculiaridades del funcionamiento de los centros de enseñanza, al tiempo que nos permite analizar las políticas de las reformas educativas desde nuevas ópticas. En esta obra se estudian tres puntos principales: – La constitución de los modernos sistemas educativos, – El rol del discurso sobre educación en la política educativa contemporánea (especialmente el discurso de la Nueva Derecha), y – La relevancia del pensamiento de FOUCAULT en la evaluación e investigación educativa, por lo que resulta de lectura obligada para estudiantes, profesionales e investigadores de la pedagogía.

Link para la descarga:

https://noehernandezcortez.files.wordpress.com/2014/06/foucault-y-la-educacic3b3n.pdf

Fuente de la Reseña:

https://culturaylibrosenpdf.blogspot.com/2018/02/foucault-y-la-educacion-pdf.html?

ove/mahv

Comparte este contenido:

Finlandia – cómo la igualdad de oportunidades ayudó a que se convirtiera en referencia mundial en educación

Finlandia / 30 de septiembre de 2018 / Autor: BBC / Fuente: Intermedia

Los finlandeses conocieron el asfalto en la década de 1920. Hasta principios del siglo XX, lo que conocían era básicamente la pobreza.

Como contraste, cuando en 1909 la avenida Paulista se convirtió en la primera vía asfaltada en la ciudad brasileña de Sao Paulo, en Finlandia predominaba una economía agraria y sus primeros 14 km de autopista no se inaugurarían hasta 1963.

¿Cómo cambiaron estos países en los siguientes años?

Por un lado, Finlandia se transformó con un conjunto de políticas educativas y sociales que crearon uno de lo modelos más celebrados de excelencia en educación pública en el mundo.

Mientras que en Brasil, como en la mayoría de América Latina, reducir la inmensa desigualdad de oportunidades educativas entre niños que nacen en familias pobres y los de familias ricas, sigue siendo uno de los principales desafíos.

El “milagro” finlandés

El conocido milagro finlandés inició en la década de los 70 y cobró fuerza en los años 90 con una serie de reformas innovadoras.

En un lapso de 30 años, Finlandia transformó un sistema educativo mediocre e ineficaz en una incubadora de talentos que encabezó rankings mundiales de desempeño estudiantil y apalancó el nacimiento de una economía sofisticada y altamente industrializada.

Se trata, a primera vista, de un enigma: los finlandeses están haciendo exactamente lo contrario de lo que el resto del mundo hace en la eterna búsqueda de mejores resultados escolares, y está bien.

El recetario finlandés incluye reducir el número de horas de clase y limitar al mínimo los deberes de casa y las pruebas escolares.

Educadores internacionales estudian el paradójico modelo finlandés en busca de la fórmula milagrosa. Y la respuesta de los finlandeses es esta: la educación pública de alta calidad no es el resultado de políticas educativas por sí solas, sino también de políticas sociales.

“El estado de bienestar social finlandés desempeña un papel crucial para el éxito del modelo al garantizar a todos los niños oportunidades y condiciones iguales para un aprendizaje gratuito y de calidad”, dice el educador Pasi Sahlberg, uno de los creadores de las reformas políticas educativas de Finlandia en los años 90, en el libro Finish Lessons (“Lecciones Finlandesas”).

Iguales oportunidades

La preocupación por garantizar que todos los finlandeses tengan oportunidades de desarrollo iguales es visible en las instalaciones de la escuela Viikki, uno de los centros educativos de enseñanza media más importantes en la capital finlandesa, Helsinki.

Como en todas las escuelas de Finlandia, ahí se puede ver al hijo de un empresario estudiando junto al hijo de un obrero.

En el amplio comedor, se sirven a diario comidas saludables de manera abundante a los estudiantes, mientras que los servicios de atención médica y odontológica cuidan de manera gratuita la salud de los 940 alumnos.

Todo el material escolar también es gratuito. Los equipos de pedagogos y psicólogos acompañan cuidadosamente el desarrollo de cada niño para identificar problemas como dislexia y proporcionar apoyo inmediato. Y las matrículas escolares no existen.

Sahlberg destaca además el impacto del ejercicio en la enseñanza en el modelo de igualdad y justicia social creado gradualmente por los finlandeses a partir de la posguerra: salud, educación y vivienda para todos, generosos permisos de paternidad para cuidar a los niños y guarderías ampliamente subsidiadas o hasta gratuitas.

También hay una amplia y solidaria red de protección a los ciudadanos.

“La desigualdad social, la pobreza infantil y la ausencia de servicios básicos tienen un fuerte impacto negativo en el desempeño del sistema educativo de un país”, puntualiza Sahlberg.

La transformación

Hasta finales de los años 60, solo el 10% de los finlandeses había terminado la enseñanza secundaria. Las oportunidades eran limitadas y el acceso, desigual. Muchas familias no podían pagar las instituciones privadas de enseñanza y las escuelas públicas eran insuficientes.

Un diploma universitario era considerado, en ese entonces, un trofeo excepcional: solo el 7% de la población contaba con educación superior. Y en todas las áreas de aprendizaje, Finlandia era símbolo de retraso.

La historia del país, sin embargo, siempre se caracterizó por la resiliencia de su pueblo, que logró su independencia hasta 1917, después de seis siglos bajo el dominio del reino de Suecia y más de cien años como gran ducado del Imperio ruso y sus cinco zares.

En la década de los 70, la nación fue convocada a cambiar. Una educación pública estelar pasó a ser percibida como la base fundamental para la creación de un futuro menos mediocre y desarrollar el capital humano del país se convirtió en la misión primordial del Estado finlandés.

El principio de igualdad e inclusión social marcó el desarrollo de los años 70 de la nueva peruskoulu (educación obligatoria finlandesa), que abarca la enseñanza primaria y la media.

En una decisión histórica del Parlamento finlandés, todos los niños, independientemente de contexto socioeconómico o domicilio, pasaron a tener acceso igualitario y gratuito a escuelas de calidad para cumplir los nueve años de educación básica.

El siguiente paso fundamental fue una valoración sin precedentes del profesor.

Finlandia lanzó programas de formación de excelencia para el magisterio en las universidades del país. Creó condiciones notables de trabajo y amplia autonomía para tomar decisiones en las escuelas, pagando razonablemente bien a sus profesores.

La profesión de maestro se convirtió en una de las favoritas entre los jóvenes finlandeses, por encima de las profesiones en medicina, derecho y arquitectura.

Participación de la sociedad

En los años 90, el país anunció una nueva revolución de la enseñanza.

Las asociaciones de profesores, políticos, padres, miembros de la academia y diferentes sectores de la sociedad fueron llamados a participar en la creación de dos nuevos y revolucionarios paradigmas de la educación en el país.

rechazaron la fórmula convencional aplicada en la mayor parte del mundo como receta para mejorar el desempeño escolar.

“Fue particularmente significativo el papel que desempeñaron varias organizaciones de la sociedad civil”, destaca Sahlberg, quien también fue uno de los consejeros del Ministerio de Educación finlandés en los años 90.

La transformación del sistema fue profunda. Y rápida. Como resultado, a finales de la década de los 90 la peruskoulu finlandesa se convirtió en líder mundial en matemáticas, ciencia e interpretación.

Los primeros resultados del Programa Internacional de Evaluación a Alumnos (PISA por sus siglas en inglés), publicados en 2001, sorprendieron a los propios finlandeses: en todos los ámbitos académicos, Finlandia empezó en la cima del ranking mundial.

Y permanece hasta hoy entre los más destacados miembros del club.

 

Finlandia dice haber aprendido una lección: las políticas de educación efectivas deben ir de la mano con políticas sociales.

“Las personas en Finlandia tienen un profundo sentido de responsabilidad compartida sobre la importancia no solo de la vida propia, sino del bienestar de los demás”, observa Sahlberg en su libro Finish lessons.

“Los cuidados al bienestar del niño comienzan antes del nacimiento y se extienden hasta la edad adulta. Las guarderías públicas son un derecho garantizado para todos los niños, quienes también tienen acceso igualitario a todo tipo de servicio básico. La educación se considera en nuestro país se considera un bien público. Y es, por lo tanto, protegida en la constitución del país como un derecho humano básico”, añade.

La inversión finlandesa en la educación también se considera uno de los motores centrales del desarrollo económico y para poner fin a la pobreza en el país.

Ciudadanos altamente capacitados han aprovechado el crecimiento de la producción y la transformación de Finlandia en uno de los principales polos de innovación y tecnología en el mundo con el nacimiento de empresas como el gigante de las telecomunicaciones Nokia.

Y las políticas educativas crecieron al lado de las políticas sociales.

Igualdad desde la cuna

La vasta red de beneficios sociales en Finlandia es el resultado de la construcción, a partir de los años 70, de un generoso Estado de Bienestar social, financiado por una de las más altas cargas tributarias en el mundo.

La tasa de impuestos sobre la renta individual en el país es hoy del 51.6%, lo que no impidió a Finlandia aparecer este año en la cima del ranking de los países más felices del mundo elaborado por la ONU (World Happiness Report).

Pero ya desde finales de los años 30, Finlandia ofrece a todas las mujeres embarazadas un kit de maternidad con unas 50 cosas básicas para el bebé. El objetivo del regalo es proporcionar a todos un comienzo de vida igual, independientemente de clase social.

Además, cuando un niño nace en Finlandia, la madre tiene derecho a 105 días hábiles de permiso de maternidad. El padre recibe otros 54 días de licencia. Y las parejas pueden dividir entre sí un periodo adicional de más de cinco meses de permiso parental.

Esto significa que la mayoría de los niños finlandeses pueden tener la atención de sus padres en casa durante el primer año de vida.

Después del periodo de permiso de paternidad, uno de los padres tiene derecho a permanecer en casa con el niño, si así lo prefiere, y recibir un apoyo de cerca de 450 euros al mes (US$525). En estos casos, el padre o la madre podrán volver al mismo empleo que tenían antes hasta que el niño cumpla 3 años de edad.

Los padres tienen todavía la opción de regresar al trabajo, pero con carga horaria reducida, y obtener un apoyo parcial del Estado.

La mayoría de los padres y madres regresan eventualmente al trabajo, y cuando deciden hacerlo, el Estado ofrece una red de guarderías especializadas y altamente subsidiadas para cuidar de los niños.

Por ley, todos los niños de 0 a 6 años tienen derecho a un lugar en la guardería, ya sea tiempo parcial o completo. Las tasas varían de acuerdo con la renta de los padres y la zona en la que reside la familia. El valor máximo de la mensualidad es actualmente de 290 euros (cerca de US$338).

Para familias de menores ingresos, las guarderías son gratuitas.

Gratis hasta el final

Al cumplir los 6 años, todos los niños finlandeses tienen derecho a la educación preescolar, que es completamente gratuita. El objetivo de los centros preescolares es proporcionar a cada niño el aprendizaje de habilidades y conocimientos básicos, con el fin de prepararlos para la vida escolar.

Con el acceso gratuito a universidades e instituciones de enseñanza técnica y profesional, la educación de nivel superior también ha sido una oportunidad de igual acceso para todos. La educación en Finlandia es gratuita para todos, desde el preescolar hasta el doctorado.

Las estadísticas apuntan al éxito de la fórmula de aliar políticas educativas con políticas sociales, dice Sahberg.

“Las sociedades igualitarias tienen ciudadanos con el grado de educación más elevado, raros casos de evasión escolar, menores tasas de obesidad, mejores indicadores de salud mental e índices más reducidos de embarazos adolescentes, en relación con los países en los que la brecha entre ricos y pobres es mayor”, enfatiza el educador finlandés.

Innovar, siempre, es importante, enseñan los finlandeses. Ya en los años 90, la reforma educativa conducida por Finlandia sorprendió al mundo académico con una teoría paradójica, que probaría ser visionaria.

Paradoja 1: Los alumnos aprenden más cuando los profesores enseñan menos

La experiencia finlandesa desafía la lógica convencional, que prescribe más horas de clase y mayor cantidad de lecciones en casa como fórmula para impulsar el desempeño estudiantil.

Los días son más cortos en las escuelas de Finlandia, con menos horas de claseque en todas las demás naciones industrializadas, según estadísticas de la OCDE, organización que reúne a los países más ricos del mundo.

“Es importante que los niños tengan tiempo para ser niños“, dijo la profesora Erja Schunk, de la escuela Viikki, situada en un campus de la Universidad de Helsinki. “Lo más importante es la calidad del tiempo en el aula, y no la cantidad”.

En los Estados Unidos, un profesor pasa aproximadamente el doble del tiempo enseñando en el aula por semana, en comparación con un profesor finlandés.

“Dar seis horas de clase al día es una tarea ardua, que deja a los profesores demasiado cansados para dedicarse a otras tareas importantes para el trabajo de un educador, cómo planificar, renovarse y dar atención cuidadosa al alumno”, dice Sahlberg.

En una típica escuela finlandesa, los profesores dan unas cuatro clases al día.

“La preocupación central de la escuela finlandesa no es alcanzar récords de desempeño escolar, sino ayudar a desarrollar las aptitudes de un niño para formar individuos capaces de vivir vidas felices, dentro y fuera del trabajo”, añade Sahlberg.

Los profesores finlandeses tampoco creen que aumentar la carga de tareas a los estudiantes lleve necesariamente a un mejor aprendizaje, especialmente si las lecciones son tediosos ejercicios que no desafían la capacidad creativa del alumno.

Según estadísticas de la OCDE, los estudiantes finlandeses pasan menos tiempo haciendo tareas que los estudiantes de todos los demás países: cerca de media hora al día.

“Los alumnos aprenden lo que necesitan saber en el aula, y muchos hacen el deber de casa aquí mismo, en la propia escuela, así que tienen tiempo para convivir con sus amigos y dedicarse a las cosas que les gusta hacer fuera de la escuela, lo que también es importante “, dijo el profesor Martti Mery en la escuela Viikki.

En la fase preescolar, la prioridad es desarrollar la autoconfianza de los niños. Los días en la escuela se cumplen con tareas como aprender a orientarse sin compañía en un bosque, o atar solos sus patines de hielo.

Paradoja 2: Los alumnos aprenden más cuando tienen menos exámenes y evaluaciones

Los estudiantes finlandeses no necesitan preocuparse por evaluaciones: su sistema educativo no cree en la eficacia de una alta frecuencia de exámenes, por lo que se aplican con poca regularidad.

A pesar de eso, Finlandia brilla en los rankings globales de educación, al lado de los países con mejor desempeño escolar del mundo.

¿Milagro? La filosofía finlandesa es que el objetivo principal de los profesores debe ser ayudar a los alumnos a aprender sin ansiedad, a crear y desarrollar la curiosidad natural, y no simplemente a pasar evaluaciones.

“La presión del modelo tradicional de enseñanza trae consecuencias dramáticas para los alumnos, como el miedo, el aburrimiento y el temor a correr riesgos”, afirma el educador Sahlberg.

Los informes del PISA indican que sólo el 7% de los alumnos finlandeses se siente ansioso al estudiar matemáticas. Mientras tanto, en el rígido sistema de enseñanza de Japón, que ostenta altos niveles de desempeño escolar, se registran récords de suicidio entre estudiantes, con un índice que llega al 52%.

Y en las aulas de la escuela Viikki, el ambiente es tranquilo y relajado. No hay uniformes escolares, y los alumnos estudian descalzos – reflejando el clima de las casas escandinavas, donde nadie usa zapatos.

La escuela primaria es prácticamente un periodo libre de evaluaciones. Con el fin de evitar que los niños se clasifiquen de acuerdo con su rendimiento, el sistema finlandés virtualmente abolió la evaluación por notas escolares en los cinco primeros años de la peruskoulu.

En los años siguientes, la evaluación se realiza con base en pruebas elaboradas por el profesor y en el desempeño del alumno en el aula, además de una amplia evaluación de cada estudiante realizada colectivamente por los profesores al final de cada semestre.

Los que necesitan mayor asistencia en la enseñanza reciben atención particular: la filosofía finlandesa aprecia la creencia de que todos los niños tienen el potencial de aprender, si tienen apoyo y oportunidades adecuadas.

El magisterio en Finlandia se convirtió además en una carrera de prestigio.

Cada primavera, miles de jóvenes solicitan un espacio para estudiar en los departamentos de formación de profesores de las universidades de Finlandia.

Pero sólo los mejores y más preparados estudiantes pueden convertirse en profesores: en el exigente sistema finlandés, sólo cerca del 10% de los candidatos suelen ser aprobados para cursar la maestría obligatoria en la universidad.

El grado de maestría se ha convertido en el requisito básico y obligatorio de un profesor para poder enseñar en las escuelas finlandesas, incluso para la educación preescolar.

Y las innovaciones continúan: el currículo escolar adoptado en 2016 creó, por ejemplo, la enseñanza basada en fenómenos o proyectos, que actualiza la tradicional división por materias y da más espacio para que determinados temas (como la Segunda Guerra Mundial) sean trabajados conjuntamente por profesores de diferentes disciplinas.

Todos los aspectos detrás del éxito finlandés parecen ser, por lo tanto, lo opuesto de lo que se hace en la mayor parte del mundo, donde la competencia, la alta carga de pruebas y clases, la uniformidad de la enseñanza y la privatización son por regla general los principios dominantes.

“Ejercer controles rígidos sobre las escuelas y los alumnos, pagar a los profesores en base al desempeño de los estudiantes, entregar el liderazgo de las escuelas a especialistas en gestión o convertir escuelas públicas en privadas son ideas que no tienen lugar en el repertorio finlandés de desarrollo de la educación” , dice el educador Sahlberg.

Sahlberg resume así el pensamiento finlandés sobre la educación pública de calidad:

“Es una obligación moral, pues el bienestar y en última instancia la felicidad de un individuo depende del conocimiento, de las aptitudes y de las visiones del mundo que son proporcionadas por una educación de calidad. Es también un imperativo económico, ya que la riqueza de las naciones depende cada vez más de las habilidades y el conocimiento”.

Fuente de la Noticia:

FINLANDIA – CÓMO LA IGUALDAD DE OPORTUNIDADES AYUDÓ A QUE SE CONVIRTIERA EN REFERENCIA MUNDIAL EN EDUCACIÓN

ove/mahv

Comparte este contenido:

Perú creció en pruebas educativas PISA por apoyo a escuela rural y lectura

Perú / 23 de septiembre de 2018 / Autor: Redacción / Fuente: ANDINA

Nuevo secretario general de la OEI destacó labor educativa peruana

El país que más ha crecido en el mundo en las pruebas PISA es el Perú porque desarrolla de manera sostenida una política de apoyo a la escuela rural y a la lectura, manifestó el nuevo secretario general de la Organización de Estados Iberoamericanos (OEI), Mariano Jabonero.

El funcionario de la OEI manifestó que la institución tiene como tarea poner en valor los trabajos que realizan los países en la región a favor de la educación.
Jabonero mencionó la experiencia del Perú al referirse a la colaboración que hace la OEI a los estados de habla española, incluida la propia España, durante la entrevista que concedió al diario ABC de España.
OEI
El Perú es el país del mundo que más ha crecido en PISA gracias a una política buena y sostenida de apoyo a la escuela rural y programas de lectura, y no se sabe», comentó.
Mencionó que la OEI no solo colabora con ministerios sino también con comunidades como Madrid, Castilla y León (…) y Asturias en España. Los importante es que la OEI ponga en valor el trabajo de toda la región iberoamericana», comentó.
También destacó la experiencia de Portugal, país más avanzado en calidad educativa en toda Europa a pesar de atravesar por una situación económica crítica. Indicó que gracias al impulso que le ha dado al portugués, matemáticas y profesorado, la escuela pública está valorada.
Jabonero reconoció que la región iberoamericana ha avanzado mucho en materia educativa, pero pese a ello sufre cierta “pseudocolonización pedagógica” pues Finlandia, Corea y Singapur siguen siendo sus principales referentes en esa materia.
Señaló que durante su gestión le dará prioridad a la educación infantil (de cero y seis años) y a las competencias científico-tecnológicas, comunicativas, buen manejo de la lengua propia y una extranjera, digitales y no cognitivas como ciudadanía, valores, tolerancia, solidaridad para que accedan a los trabajos del futuro.
Jabonero es licenciado en Filosofía y en Ciencias de la Educación por la Universidad Complutense de Madrid. Trabajó en el Ministerio de Educación de España, asesoró a la Unesco y trabajó con Unicef.
Fuente de la Noticia:
https://andina.pe/agencia/noticia-peru-crecio-pruebas-educativas-pisa-apoyo-a-escuela-rural-y-lectura-715972.aspx
ove/mahv
Comparte este contenido:

Cuarteto EUNOIA: “Se debe cambiar la política de educación musical en el país”

Perú / 9 de septiembre de 2018 / Autor: Rumi Ceballos / Fuente: La República

Todos empezaron a tocar un instrumento desde muy corta edad. Tienen mucha ilusión en llevar su música dentro del país y al extranjero. Son cuatro jóvenes valores de la guitarra clásica, que representarán al país en un concurso internacional en México.

¿Por qué el nombre Eunoia?

El nombre de nuestro cuarteto de cuerdas “Eunoia” viene del griego “ey” (bien) y “nous” (mente), lo que significa “pensamiento bello”. Eso es lo que queremos transmitir en nuestra música, con energía positiva.

Cuéntennos del cuarteto.

Ante todo, somos muy buenos amigos. Estudiamos en la Universidad Nacional de Música del Perú, en el séptimo ciclo, y hemos clasificado para un concurso de guitarra en México.

¿Y a qué concurso viajan?

Es el Concurso Internacional de Guitarra de Taxco, en México, al que hemos audicionado este año. Hemos pasado a la fase final de esta prestigiosa edición, que es la número 21. Taxco está a tres horas de la ciudad de México D.F.

¿Cuánto tiempo tendrán en su participación en Taxco?

Tendremos solo 15 minutos, porque hay otros participantes de diversos países. El concurso estará muy reñido.

¿Cuál es el tema musical con el que nos representarán?

Se trata de una composición de Aurelio Tello, y la obra musical se llama “Ichuk Parwanta número 4”. También interpretaremos “ Suite Carmen, de George Bizet (Entreacto y los Toreadores).

¿Cuándo viajan y cuándo es el concurso en México?

Viajaremos mañana jueves (hoy) y el festival se realizará del 15 al 20 de julio, la final es el 20 de este mes, y esperamos obtener el triunfo para el país.

Estoy seguro de que tendrán gran participación y traerán el premio.

Muchas gracias, así lo deseamos. Nos hemos preparado mucho, con ensayos todos los días, sacándoles tiempo a los estudios y al trabajo.

¿Qué significa la música para ustedes?

Es nuestra vida. Queremos profesionalizarnos, hacer muy bien las cosas y exponer nuestra música dentro del país y fuera también.

Hay el apoyo en el país para los jóvenes que hacen música?

Es muy limitado.

¿Qué faltaría?

De arranque, se debe cambiar la política de educación musical en el país. Empezar a sensibilizar a los niños con la educación musical en todo tipo de escuelas. Con eso se empezaría a incentivar y a sembrar. Lo segundo, que haya mucho más apoyo a la difusión cultural y a los jóvenes valores.

 

 

Fuente de la Entrevista:

https://larepublica.pe/la-contra/1276827-debe-cambiar-politica-educacion-musical-pais

ove/mahv

Comparte este contenido:

Pablo Caggiani: “Contar con los recursos es poder seguir con esta línea de política educativa”

Uruguay / 9 de septiembre de 2018 / Autor: Redacción / Fuente: República

MIENTRAS LA REGIÓN CONTINÚA CON POLÍTICAS RECESIVAS EN EL SISTEMA EDUCATIVO, URUGUAY SIGUE AVANZANDO EN TÉRMINOS PRESUPUESTALES

Los recursos económicos destinados a la educación pública en la Rendición de Cuentas alcanzan el 5,2% del PBI, un porcentaje que mereció la evaluación de Pablo Caggiani, Consejero de Primaria.

¿En qué contexto llega Uruguay a una cifra que ha ido en aumento desde hace 13 años?

Lo primero es recordar que la inversión en Uruguay durante muchísimos años fue extremadamente baja, el porcentaje del producto no tenía nada que ver con lo que era la inversión de los países de la región. Recordemos que en 2002 y 2003, nuestro país tenía una relación de inversión- educación- PBI, que estaba al mismo nivel que tiene Haití.

En Haití de cada 10 niños, 6 no asisten a la escuela. Nuestro sistema educativo se sostenía sobre la base de muy bajos salarios docentes y poca inversión en infraestructura. En el ámbito de debate parlamentario, veíamos la preocupación por los centros de educación media en Casavalle. Hasta 2008 no habían liceos en la zona y en estos momentos hay dos, uno de ellos con bachillerato.

Hay otro aspecto relevante del contexto y es que este es un presupuesto que aumenta la inversión que hace la sociedad en la educación. Pero lo hace en medio de un panorama regional bastante particular. Brasil congeló el gasto público a partir del gobierno de Temer por 20 años, es decir que por ese tiempo no va a haber más inversión en ninguna política social.

En el caso de Argentina los docentes llevan perdido en un año el 30 por ciento del salario. Con ausencia de negociación colectiva y además de la clausura de varios programas. Mientras los países de la región tienen políticas recesivas en el sistema educativo y particularmente con la educación pública, Uruguay sigue avanzando en términos presupuestales.

¿Considera meritorio este aumento aunque no se haya alcanzado el 6% previsto?

Reconocer y ponderar los avances en términos presupuestales, no implica dejar de señalar que no vamos a alcanzar el 6 por ciento del producto. Entendemos que continuar aumentando la inversión tiene que ver con la importancia que la da la población en Uruguay por ejemplo a que los niños de 3 años accedan al sistema educativo. Hay que continuar las políticas de extensión del tiempo pedagógico, ya sea tiempo completo o tiempo extendido.

En la escuela pública los estudiantes tienen que aprender un segundo idioma. Se precisa continuar con la línea de que todas las escuelas tienen que tener un profesor de educación física, profesores que nos faltan sobre todo en el medio rural porque en las escuelas urbanas se ha ido consolidando. Sin lugar a dudas contar con los recursos necesarios, es parte de poder seguir con esta línea de política educativa.

¿Los $282 millones que fueron reasignados se usarán sólo para financiar aumentos de sueldos y contratar más personal?

Así es, entre lo que se está aprobando en Cámara de Diputados hay cosas muy interesantes para destacar. La primera es que se terminan de regularizar las auxiliares que estaban contratadas por Comisión Fomento y 350 funcionarias pasan a formar parte de la plantilla del CEIP con mejoras en términos de la relación laboral.

Cuando se contrataba por Comisión Fomento era de año a año y ahora ya está claro que ese recurso humano que es vital para generar condiciones para los aprendizajes, va a estar permanente en la institución educativa.

Hay un segundo capítulo que tiene que ver con garantizar el 3,53% de aumento salarial por encima de la inflación para docentes y no docentes. Se corrige una inequidad que se había construido en el presente quinquenio a partir del primer convenio y los aumentos sucesivos.

Los maestros de tiempo completo cobraban un aumento menor porque las primeras 20 horas se pagan como cargo, pero las segundas 20 se pagan como una función en Primaria, lo que no aumentaba su salario y por lo tanto se iba generando esta inequidad en las remuneraciones de los docentes. Por último señalar que hay otro aspecto relevante en la Rendición de Cuenta y tiene que ver con el funcionamiento de todos los centros que se están construyendo y que van a requerir recursos adicionales.

Fuente de la Entrevista:

“Contar con los recursos es poder seguir con esta línea de política educativa”

ove/mahv

Comparte este contenido:

Ignacio Ramírez y la educación, de Liliana Weinberg

México / 9 de septiembre de 2018 / Autor: Roberto Ponce / Fuente: Proceso

Con motivo de los 200 años del natalicio Ignacio Ramírez “El Nigromante”, la catedrática universitaria e historiadora Liliana Weinberg ofreció en el Centro Cultural de San Miguel Allende, Guanajuato, que lleva el nombre del insigne liberal mexicano de la Reforma, una charla en torno a tan insigne personaje.

Juan Ignacio Paulino Ramírez Calzada​, conocido como Ignacio Ramírez “El Nigromante”, nació 22 de junio de 1818, en San Miguel de Allende, y falleció el 15 de junio de 1879 en la Ciudad de México.

La profesora Liliana Weinberg es académica del Centro de Investigaciones sobre América Latina y el Caribe de la Universidad Nacional Autónoma de México y profesora de la Facultad de Filosofía y Letras y de los programas de posgrado en Letras y Estudios Latinoamericanos de la misma cada de estudios.

Asimismo, es autora de obras como “Situación del ensayo” (2006), “Pensar el ensayo” (2007), “El ensayo en busca del sentido” (2014), y ha sido coordinadora del libro “Ignacio Ramírez: la palabra de la Reforma en la República de las letras” (2009).

Ensayo de Weinberg

Para muchos de sus contemporáneos, fue Ramírez un genio volteriano, fáustico, satírico, de talante corrosivo y decidido a echar abajo el viejo edificio del orden colonial. Lo vieron también como autor de una prosa arrebatada y urgente, de discursos polémicos e impetuosos, como luchador empecinado en el combate de los prejuicios, en el ejercicio de la crítica y en la defensa a ultranza de la razón, la ciencia y la educación.

Esto último nos conduce a proponer enfáticamente que no fue menor su afán constructivo, en cuanto sembrador de leyes e instituciones capaces de garantizar la educación y el ejercicio de la ciudadanía. Cuando me refiero al carácter instituyente y fundacional de la acción política y los discursos de Ramírez, pienso particularmente en su descubrimiento de la educación como gran motor de cambio.

Ignacio Manuel Altamirano lo consideró un “apóstol de la libertad de pensamiento”, en una expresión que es indicativa de que con él se estaba abriendo paso una nueva visión, una nueva mirada ciudadana sobre la  sociedad, y que se apelaba a una amplia serie de propuestas de transformación de un viejo orden en otro nuevo, con la ayuda de operaciones tanto discursivas como políticas.

En la primorosa biografía que le dedica Altamirano, se muestra a Ramírez no sólo como político y pensador, ejemplo de virtudes públicas y privadas, ejemplo de civismo, sino también como maestro.

Ignacio Ramírez dio al país algunos de sus primeros libros de texto; dotó a la nación mexicana de algunas de sus primeras páginas de historia, geografía, arqueología y lingüística. Contribuyó a la fundación de bibliotecas, pinacotecas, observatorios, laboratorios y asociaciones científicas ―los nuevos “templos” de una sociedad laica y civilizada― para que México contara con una base sólida a partir de la cual edificar una nueva forma de memoria y una nueva imagen de sí mismo. Pensó en todas estas instituciones, y desde luego en las escuelas y espacios para la enseñanza formal, como centros de formación intelectual y centros irradiadores de conocimiento.

A través de la oratoria y el periodismo, a través de las investigaciones sobre las lenguas indígenas y la propia lengua española en México, quiso también contribuir a la fundación de un nuevo lenguaje ciudadano destinado a los miembros de una sociedad en construcción: habló para los lectores y leyó para una nueva escucha social.

Vivió de acuerdo a un modelo ciudadano y republicano que defendió de manera vehemente: la austeridad y el compromiso con la cosa pública; la fundación de una familia que fuera escuela de civismo; la consolidación de nuevos espacios laicos de sociabilidad y redes de compromiso intelectual y político que pusieran en práctica sus propios principios sobre la importancia de la asociación como base de la vida social; trabajó mucho y con poca renta; en sus últimos años siguió sumergido en plena actividad y murió como vivió: honradamente pobre, sin haber comprometido nunca su buen nombre con el mal uso de los recursos públicos. Murió pobre, aunque rico en ideas, generoso en prácticas, derrochador en energías, excesivo en la entrega a los compromisos, superlativo en sus tomas de posición, intemperado en proyectos, descomunal en sueños: este hombre de genio lo dio todo a la construcción de un México de libertad, igualdad y fraternidad. El Nigromante fue así un luchador invencible en favor de nuestro derecho a la educación, a la lectura, al conocimiento, a la ciudadanía.

Considero que la dimensión educativa de la obra de Ramírez constituye una parte medular de su pensamiento y su proyecto social y político. Su vida y su obra pueden ser releídas en esta clave. Nos admira comprobar que “militó” en favor de la educación prácticamente en todos los frentes, ámbitos y niveles: desde su propio desempeño como maestro, en el ejercicio concreto y cotidiano de la impartición de clases, hasta su participación en los debates legislativos en torno a la educación; desde la redacción de  libros de texto hasta la reflexión en torno a las ideas pedagógicas y la planeación de una política educativa.

En efecto, se preocupó por el tema educativo como uno de los pensadores políticos más radicales del liberalismo puro, que tuvo un papel fundamental en los debates que llevaron a las reformas constitucionales en favor de la libertad de enseñanza y al dictado de leyes en esa materia. Se interesó también por la lectura y la reflexión sobre temas educativos y pensó el papel de la educación en la sociedad, tal como lo tradujo en sus propios artículos periodísticos y en el diseño de planes de estudio.

Extraordinario escritor, orador, periodista, dedicó muchos textos a divulgar y discutir los grandes temas de la agenda educativa de su momento. Y también se ocupó de los mismos cuando, en distintos momentos de su vida, se desempeñó como secretario de Estado en el ramo de la Instrucción Pública, como legislador y como representante ante el congreso. Su impulso a la educación y al conocimiento se dio tanto en lo que  respecta a las instituciones educativas formales como a las distintas esferas de la educación informal. Y lo hizo además como hombre de ideas y como pensador político,  siempre preocupado por los conceptos filosóficos y científicos que animaban su proyecto educativo. Fue desde esta perspectiva objetiva que comprendió la importancia de que dos amplios sectores de la población por mucho tiempo postergados, los indígenas y las mujeres, accedieran a la educación y a la ciudadanía.

Incluso su propia biografía confirma que, paralelamente a sus estudios en el Colegio de San Gregorio y su titulación con honores en la carrera de jurisprudencia, se dedicó de manera afiebrada a formarse como autodidacta en todas las materias en las bibliotecas a que tuvo acceso, y a las que, como recuerda Altamirano, entró joven y esbelto aunque salió “ligeramente encorvado y enfermo, pero erudito y sabio”. Formó parte de distintas academias, liceos, sociedades literarias y científicas, y a los veinte años se lo admitió en la Academia de San Juan de Letrán con una disertación abiertamente materialista: “No hay Dios, los seres de la naturaleza se sostienen por sí mismos”. Cuando, décadas después, se convierta en Secretario del ramo, pondrá en práctica el primer programa educativo de avanzada liberal. Nos ha dejado cartas y notas que traducen su interés como observador de la naturaleza y como descubridor de los recursos naturales en distintas regiones de México.

Contribuyó a la fundación y dotación de bibliotecas, colecciones, pinacotecas, observatorios, gabinetes y laboratorios científicos, y formó parte de distintas academias, liceos y sociedades científicas.  En los comienzos de su carrera participó en el Instituto Científico y Literario de Toluca, donde impartió clases memorables y logró crear el primer sistema de becas para alumnos indígenas: el propio Altamirano fue uno de los primeros beneficiarios de dicho programa. Hizo observaciones astronómicas, consignó datos sobre flora, fauna y mineralogía, y atendió también a la historia, a las antigüedades mexicanas  y a la lingüística. Dotó de gabinetes a la Escuela de Minería a la vez que no dejó de preocuparse por la historia, las antigüedades mexicanas, la lengua, la literatura y las bellas artes, y hacia mediados de siglo lo encontramos dictando clases y escribiendo lecciones sobre distintas materias. Autor de un “Ensayo sobre las sensaciones”, fue también él mismo autor de “lecciones” en distintas materias y libros de texto para la enseñanza primaria que pensó y organizó de acuerdo a una muy meditada concepción sobre los contenidos y métodos que demandaba la educación.

Y será sobre todo a partir de los debates que llevaron a la Constitución de 1857 cuando de manera perentoria y febril, a la vez que con una perspectiva amplia y meditada, comience a pensar en todas las medidas de política educativa que requiere la restauración del orden republicano y la formación de la ciudadanía. En efecto, si se atiende a su notable participación en los debates del Congreso Constituyente se evidencia cómo se hizo cada vez más franco su interés por pensar la educación desde la perspectiva de un estadista. Participará entonces en distintas propuestas de reformas constitucionales y legales que instituirán el derecho a la educación y la libertad de enseñanza, y que se convertirán en uno de los derechos fundamentales reconocidos por la Constitución de 1857. Ramírez se manifestó enfáticamente en defensa de la educación y afirmó que, en la medida en que estaba ya reconocida de manera general  la libertad de pensamiento y expresión, el derecho a la enseñanza resultaba una consecuencia necesaria de la misma.

En 1861 Ramírez es designado ministro de Justicia e Instrucción Pública y contribuye a la expedición de leyes y decretos sobre instrucción primaria y secundaria, formación de escuelas especiales, enseñanza de las niñas y dotación de fondos destinados a la instrucción pública. Siempre desde un enfoque liberal y racionalista insistirá en uniformar la enseñanza de las primeras letras, para contribuir a la consolidación de una serie de instituciones que permitieran apoyar la formación de la ciudadanía, y paralelamente, como pensador y publicista, propondrá y defenderá muchas de estas medidas en favor de la educación.

Fuente de la Reseña:

Ignacio Ramírez y la educación, de Liliana Weinberg

ove/mahv

Comparte este contenido:
Page 20 of 46
1 18 19 20 21 22 46