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Sex Education’ se reafirma como una de las mejores series de Netflix en su estupenda temporada 2

Por: Mikel Zorrilla.

La primera temporada de ‘Sex Education’ fue toda una revelación. En ella podíamos disfrutar de una serie fresca sin miedo a tratar temas que en otras series ni siquiera se mencionarían y ademas con buenos personajes de los que realmente querías conocer su historia. La duda estaba en si sus responsables serían capaces de confirmar que no fue una casualidad, ya que no son pocas las series que bajan considerablemente de nivel en sus segundas temporadas.

Hoy salimos de dudas con la llegada a Netflix de la temporada 2 de ‘Sex Education’, la cual ya ha he tenido la oportunidad de ver completa. La conclusión general a la que he llegado es que se ha confirmado como una de las mejores series de la plataforma, potenciando sus puntos fuertes y permitiendo una evolución lógica en las tramas en lugar de limitarse a dar vueltas sobre las mismas ideas.

Fiel a sí misma

Ola Otis

La primera temporada concluía con Otis siendo capaz de superar el trauma que le había impedido disfrutar de su sexualidad durante muchos años, pero eso no quiere decir que ahora todo vaya a ser un camino de rosas. Sigue siendo virgen y con un personalidad un tanto peculiar, ya que es capaz de dar buenos consejos a otras personas pero al mismo tiempo no termina de saber cómo actuar él mismo.

Esta segunda temporada está orientada a descubrir quién es realmente él en lugar de quién aparenta ser por creer que es lo más adecuado. Todo el arco de su personaje va en esa dirección y Freddie Highmore  Asa Butterfield vuelve a bordarlo, tanto cuando le toca ser un nerd entrañable como cuando era el tiro y actúa como un gilipollas integral. A fin de cuentas no deja de ser un adolescente y durante esa etapa todos fuimos un poco idiotas en algún momento.

Escena Sex Education

Curiosamente es el propio Otis el que menos se ve afectado por la llegada de nuevos personajes con cierto peso en la historia, ya que Rahim (Sami Outalbali) se convierte en el nuevo interés romántico de Eric, Viv (Chinenye Ezeuduson) es la nueva tutora de Jackson, mientras que Isaac (George Robinson) es un joven en silla de ruedas vecino de Maeve.

No dejan de ser adiciones para ampliar el universo de la serie en lugar de supeditarlo todo a la historia de Otis. Y es que es verdad que la serie no arriesga demasiado en esta segunda temporada, pero sí es consciente de que ofrecer una visión más coral de la historia ayuda a que la sensación de desgaste nunca haga acto de presencia. De hecho, no se tarda en alterar ciertas dinámicas que seguro que todos contábamos con que diesen más de sí, consiguiendo de esta forma que la frescura de sus inicios no se desvanezca.

Más variada

Imagen Sex Education

Eso no quita que el papel de Otis como consejero siga teniendo un peso notable, tardando bien poco en aparecer una amenaza que podría poner su existencia patas arriba una vez mas. Además, en su propia casa tampoco lo va a tener nada fácil por el hecho de iniciar una relación con Ola cuando su madre inicia al mismo tiempo otra con Jakob. Que puede que Otis haya dejado atrás su trauma sexual, pero su madre va a seguir provocándole múltiples incomodidades.

Más allá de eso, se sigue prefiriendo dotar a la  de un componente cómico, pero la serie sabe cuándo es necesario ponerse algo más seria, en especial con la subtrama que afecta a Aimee. El personaje interpretado por Aimee Lou Wood ya evolucionaba de forma clara en la primera temporada, pero en la segunda es quien camina por una línea más fina que podría haber desequilibrado la serie pero sale airosa del reto.

Sex Education Imagen

Otro gran acierto de la segunda temporada es ofrecer una visión mas variada de la sexualidad. Siguen faltando temas a tratar -tampoco era plan de forzar para meterlo todo en apenas ocho episodios-, pero sí que se ofrece un dibujo mucho más amplio que potencia la faceta mas divulgativa de la serie. Y es que en ‘Sex Education’ se dan consejos a otros personajes, pero al mismo tiempo se abordan temas que muchos espectadores seguramente no conozcan.

Por último me gustaría destacar que también se añaden ciertos elementos en algunos tramas para darle una pizca de culebrón a algunas relaciones. No es algo exagerado en ningún caso y se siente como una prolongación convincente de lo que hemos visto, pero espero que sea algo que se sepa medir igual de bien en caso de que haya una tercera temporada, porque el final de la segunda exige una continuación.

En resumidas cuentas

Ha sido un place reencontrarme con ‘Sex Education’, pues la pérdida del factor sorpresa no ha provocado que pierda esa frescura con la que nos conquistó en la primera temporada. Además, ha diversificado aún más su propuesta, sus personajes siguen siendo bien identificables y las tramas siguen enganchando sin la necesidad de hacer nada raro con ellas.

Fuente de la reseña: https://www.espinof.com/criticas/sex-education-se-reafirma-como-mejores-series-netflix-su-estupenda-temporada-2

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Libro(PDF): «La formación de docentes en América Latina. Perspectivas, enfoques y concepciones críticas»

Reseña: CLACSO

El libro centra su atención en los análisis de la formación desde la investigación. En este sentido, es necesario destacar la relación que el grupo establece entre formación docente y pensamiento crítico, ya que existe una tendencia a considerar este tipo de formación desde la perspectiva del deber ser; se ve a la formación de los profesores a partir de modelos normativos o prescriptivos, lo que provoca un vaciamiento de su complejidad y obtura la posibilidad de reconocer la formación en sus diversas aristas (pedagógica, didáctica, ontológica, ética, etc.) y a los docentes en sus múltiples espacios de construcción de significaciones: la región, la localidad o el barrio, como escenarios donde se despliega su experiencia, su práctica y sus saberes.

Interesa reconocer las perspectivas y enfoques de la formación docente en la región Latinoamericana. En este sentido, son parte de este libro textos que aportan elementos para nuevas lecturas desde la pedagogía de la memoria, la mirada decolonial, la educación para la paz, entre otras. Asimismo, se recuperan las tradiciones del pensamiento de América Latina que, como en el caso de Paulo Freire, contribuyen al desarrollo del pensamiento crítico en el ámbito educativo. Así, se ratifica que la formación implica un saber hacer, pero también requiere adquirir marcos de pensamiento y juicio.

Autores (as):
Rosa María Torres Hernández; Daniel Lozano Flórez. (Editores académicos),

Luis Bonilla-Molina; Jorge Hernán Marín Maya; Orlando Pulido Chaves; Rodrigo Castillo Aguilar; Laura Arese; Johana Méndez Sarmiento; Catalina Rodríguez-Amaya; María Dolores Covacevich; Catalina Rodríguez-Amaya; Mario Ramírez-Orozco; Mariana Frechtel; Rafael Lucio Gil; Marco Fidel Vargas Hernández; Daniel Lozano Flórez; María Eugenia Parodi Bartora; Elizabeth Castillo Guzmán; Paulo Emilio Oviedo: Rosa María Torres Hernández; Marcela Contreras Avellaneda; Lorena Chacón Ortiz; Mauricio Páez Ochoa; Esperanza Hernández Delgado. (Autores y Autoras de capítulos).

Editorial/Editor: CLACSO, CRESUR

Año de publicación: 2019

País (es): Argentina

Idioma: Español.

ISBN: 978-607-8671-15-1

Descarga: Libro Fomacioěn Docente. CLACSO. CRESUR

Fuente e Imagen: CLACSO

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Estereotipos de género: cuando los niños no pueden ser princesas

Por: Diana Oliver

A los tres años es cuando los menores comienzan a tener conciencia del género y dejan de hacer cosas que habían hecho hasta el momento

Durante una entrevista, le preguntaba a Elena Crespi, psicóloga y autora de Habla con ellos de sexualidad (Lunwerg Editores), hasta qué punto influye una educación sexista en la sexualidad. Su respuesta fue clara: “Influye muchísimo”. Según Crespi, cuando nos relacionamos sexualmente con alguien tenemos muy integrado cómo debemos comportarnos desde nuestra posición femenina o masculina en función de un estereotipo de género. Un estereotipo que comienza a construirse desde el mismo nacimiento y que influye de manera irremediable en el resto de ámbitos de nuestras vidas. “Ya a los bebés les tratamos de diferente manera en función de si son niños o niñas: de una manera más dulce a las niñas, con una actitud más fuerte a los niños. Y esto, que puede pasar desapercibido, termina marcando en el futuro que nos comportemos como se supone que debemos comportarnos; en función del rol que se nos ha impuesto”, señalaba.

Un estudio publicado en la revista Science en 2017 concluía que las niñas se sienten menos inteligentes que los niños a partir de los seis años como consecuencia de la integración de un estereotipo que otorga una mayor inteligencia al género masculino. Y esto, según los autores de la investigación, tiene un impacto sobre las aspiraciones profesionales de las mujeres en el futuro. Pero no es solo cómo tratamos a niños y niñas sino también qué censuramos según el género. En el caso de los niños ocurre con los juguetes, con la ropa, con la temática de los disfraces e, incluso, con los colores. Rosa y azul siguen siendo elegantes sexadores. “No es que yo tenga nada en contra del rosa o el azul, el problema está en el hecho de que solo puedas vestir de rosa si eres una niña, y que esto sea exclusivo de las niñas. Una niña puede vestirse de rojo, de rosa, de naranja, de azul, de negro. Del color que quiera. En cambio, los niños no, y aquí es donde está el desequilibrio”, cuenta Elena Crespi. ¿Qué sucede con todo aquello relacionado con lo “femenino”? ¿Por qué se excluye a los niños? ¿Qué se les transmite cuando a ellos no se les permite “hacer” según qué cosas por su género?

Lo masculino en positivo

Este verano, mi hijo de poco más de dos años entonces, observaba con atención a una madre y a su hija. Ambas jugaban a pintarse las uñas sentadas en el espacio de césped que queda en los márgenes de la piscina. Tenían un estuche transparente, de esos con cierre de cremallera, que dejaba ver un variado catálogo de esmaltes. Rosa, verde, morado, azul eléctrico… Al momento se unió otro niño un poco más mayor a la contemplación y entonces ambos mostraron interés por participar. Si para ellos se trataba de un juego, no lo fue para la familia del niño: le prohibieron que se pintara las uñas. “Eso solo lo hacen las niñas. Los niños no se pintan las uñas”. Más allá de lo anecdótico –y aparentemente insignificante– de la situación, la cuestión es cuántas veces aplicamos supuestos similares en la vida de los niños y niñas. Cuántas cosas no pueden hacer los unos o las otras. Recuerdo entonces una entrevista a Iria Marañón, autora de Educar en el feminismo. Decía que es fundamental educar en igualdad para que nuestras niñas y niños sientan que pueden ser capaces de las mismas cosas. “Coeducar no significa educar niñas y niños, sino educar en igualdad. Con los mismos referentes, rompiendo los estereotipos, forzando un cambio”.

Explica Elena Crespi que es a partir de los tres años cuando los niños y las niñas comienzan a tener conciencia del género y dejan de hacer cosas que habían hecho hasta el momento porque sienten un condicionante de género. “Los niños dejan de pintarse las uñas, dejan de querer llevar faldas si en algún momento les han llamado la atención, ya no quieren cualquier color porque el rosa es de “niñas”. Hemos puesto en una balanza que lo de los niños es mejor que lo de las niñas”, señala. Lo vemos en cómo las niñas van ganando, en cierta medida, terreno: ellas pueden jugar al fútbol, llevar pantalones y disfrazarse de superhéroes masculinos porque lo que entendemos propio del universo masculino es siempre más positivo que lo femenino. “Nosotras podemos hacer cosas que estén “etiquetadas” como masculinas, pero que un hombre haga algo que se contempla como “femenino” es mucho más difícil. De lo masculino no nos reímos, pero de lo femenino sí”, lamenta la psicóloga.

Esta misma idea me transmite Violeta Buckley, sexóloga y formadora en Pandora Mirabilia. “Encontramos muchas más dificultades para que los niños jueguen a cosas que “tradicionalmente” se consideran “de niñas”. Por ejemplo, los niños a los que les gusta disfrazarse de princesas y hadas a partir de cierta edad lo hacen en la intimidad, si es que en su casa se lo permiten, porque fuera está censurado socialmente. Aprenden muy pronto que no pueden salir a la calle disfrazados de princesas aunque eso sea algo que les gustaría hacer”, explica. Para Buckley ocurre que, si bien a las mujeres nos ha costado mucho incorporarnos a mundos masculinizados, a lo masculino, es cierto que ahora lo complicado está siendo que los hombres se incorporen a ámbitos como los cuidados o el trabajo doméstico. “Esto ocurre porque en nuestra cultura lo femenino está menos valorado, se impulsa mucho menos que los hombres se incorporen a cosas “femeninas”, algo que no sucede al revés. Pasa también que cuando un hombre hace este tipo de cosas, la percepción es que está cuestionando su masculinidad. La masculinidad se construye, aunque no solo, como oposición a lo que socialmente se identifica con ser mujer”, apunta.

¿Cómo lograr que ese avance sea real, o positivo? ¿Qué se puede hacer desde nuestro lugar en la sociedad como familia para cambiar los estereotipos de género? Responde Violeta Buckley que para avanzar en la igualdad debe hacerse de una manera integral. “Es muy importante lo que ya se está intentando hacer: favorecer que niños y niñas jueguen a todo tipo de juegos, que tengan también lecturas y juegos que rompan con roles tradicionales de género… Pero también es importante el modelo que construimos como familia”. Insiste la formadora de Pandora Mirabilia que, a menudo, en las charlas que imparten en AMPAS sobre cuestiones de igualdad y género observan una gran preocupación en general con cuestiones como que haya niñas de cuatro o cinco años a las que les guste jugar a princesas. “Hay un gran sufrimiento por eso”, dice. Para la experta si bien está claro que el juego es importante en la construcción de la identidad, también es importante saber que esa identidad se construye de otras muchas maneras. “Tenemos que dejar de preocuparnos por el tipo de juego que les gusta y ocuparnos más de que tengan modelos de relaciones igualitarias y buen trato. Que tengan figuras que rompan con los roles de género”, concluye.

Fuente e imagen tomadas de: https://elpais.com/elpais/2020/02/03/mamas_papas/1580724775_704766.html

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Reaccionarismo mágico

Por: Elvira Lindo

Es inaudito que preocupe más una charla sobre sexualidad impartida en el colegio que lo que un niño recibe por un dispositivo electrónico

Hay padres, hay madres, que experimentan de manera tan violenta el amor hacia sus hijos que lo gritan a los cuatro vientos como una amenaza, como si desearan partirse la cara con alguien para demostrarlo. Hay padres, hay madres, que construyen su relación con los hijos sobre una absoluta desconfianza hacia el mundo. No pueden evitar inmiscuirse de mala manera en la vida escolar, les inquieta no controlar ese camino a la independencia que el niño emprende en la escuela. Hay padres y madres que creen reunir condiciones para ser pedagogos, entrenadores, consejeros espirituales, coleguitas de sus hijos. Hay padres y madres asfixiantes, que vigilan los juegos de los niños, que quisieran colocar cámaras en las aulas y corregir al docente. Hay padres y madres que viven solo para eso, para ser padres y madres, y se olvidan de sus aspiraciones, si alguna vez las tuvieron, renuncian a los placeres adultos, se olvidan del sexo y de su propia cara ante el espejo. Por fortuna, viví mi maternidad cuando aún no existía el WhatsApp y no tuve que pasar por el trance de abandonar el grupo. Abandonaba o más bien esquivaba a esos corrillos de madres y padres irreductibles que me hacían sentir en falta, porque yo, aparte de ser madre, deseaba ser muchas cosas más y no lo ocultaba. No necesitaba que mi vanidad se inflara leyendo un boletín de notas. Me enorgullecía en cambio de que me dijeran que estaba criando un niño digno de ser querido. Tal vez fui poco exigente, confié en los maestros y en la escuela. Era un descanso compartir la educación de un niño con terceros: ser yo el único ejemplo a seguir me atormentaba.

Esa ultraderecha, que arrastra a la derecha a precipitarse por el abismo, ha enseñado los colmillos al entender que parte del contenido escolar se escapa de su control. Esos contenidos que les enfurecen son tan inocentes que solo una mente sucia puede malinterpretarlos. Se imparten para que las criaturas atesoren algunas nociones sobre su naturaleza y respeto al diferente. Nosotros, en el patio del colegio, nos íbamos enterando de cómo se hacían los niños de manera absurda y a trompicones, así que durante un tiempo cuando volvíamos a casa observábamos a nuestros padres sintiendo vergüenza ajena.

Hay varias cosas que me sorprenden en este culebrón del pin parental. Por un lado, las declaraciones melodramáticas sobre la protección a nuestros niños. Ese nacionalismo familiar me hace sospechar que hay otra infancia que les importa un rábano. Por otro, la ilusa idea de que la enseñanza moral que reciben los hijos es patrimonio exclusivo de los padres se contradice con la deseable autonomía de los niños, que comienza en el momento en que no son los progenitores los únicos que les narran el mundo. Es inaudito que preocupe más una charla sobre sexualidad impartida en el colegio que lo que un niño recibe por un dispositivo electrónico. Se trata de un desconocimiento flagrante de cuáles son hoy los canales de información de la infancia.

Resulta irritante, por encima de todo, esa voluntad de generar desconfianza hacia una escuela pública que solo preocupa para manosearla como argumento de confrontación. No hay que olvidar que los españoles subvencionamos la enseñanza católica estemos o no de acuerdo. Y todo este circo para prohibir charlas sobre sexo, respeto al diferente, vacunas y medio ambiente. Lo cual resulta un buen resumen del nuevo reaccionarismo mágico.

Fuente: https://elpais.com/elpais/2020/01/25/opinion/1579973639_079512.html

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Reino Unido: El Gobierno de Gales suprime el veto parental a las clases de relaciones sexuales y valores éticos y religiosos

Europa/Reino Unido/30 Enero 2020/elpais.com

La medida se comenzará a ensayar en 2021 y ha sido objeto de amplias consultas

El Gobierno de Gales ha decidido que es esencial que “los menores puedan aprender, a través de la educación pública, todo aquello que les ayude a discutir y entender sus derechos y los derechos de los demás”. A partir de 2021, se eliminará el veto parental por el que los progenitores tenían el derecho a retirar a los menores de las clases de educación sexual, establecido en la guía aprobada por el Ejecutivo galés en 2010 y refrendada en febrero de 2019.

Las autoridades galesas han procurado alejar del debate político un asunto que levantaba enormes susceptibilidades y que contiene numerosos matices. Se abrió un periodo de consultas de ocho semanas para escuchar las opiniones de todo tipo de organizaciones y grupos, hasta alcanzar la decisión definitiva. “Es fundamental que sigamos trabajando con todas las comunidades de Gales para asegurar que los padres tengan el derecho a procurar a sus hijos el desarrollo, el cuidado y la guía necesaria en su camino hacia la madurez, a la vez que permitamos a nuestras escuelas la capacidad de procurar una educación amplia y equilibrada”, ha dicho la ministra galesa de Educación, Kirsty Willams.

Gales tiene cerca de 200 colegios religiosos que forman parte de la red de educación pública, y paradójicamente ha sido la religión, más que las enseñanzas sobre relaciones sexuales o igualdad de género, el punto más delicado a tratar. En ambos sentidos. Por parte de aquellas familias religiosas a la que desagrada la visión secular que se impondrá a una asignatura que pasará a llamarse Religiones, Valores y Ética. Y por parte, de aquellas otras que sospechan del sesgo que las instituciones educativas religiosas puedan tener al impartir esa materia. “Nos alarma que se pretenda eliminar el derecho de los padres a retirar a sus hijos de esas clases en los colegios religiosos, y creemos que es algo potencialmente ilegal. Hay precedentes en la Justicia internacional que señalan que una decisión así vulnera el derecho a la libertad de religión o de creencias, porque permite que los menores sean adoctrinados en contra de los deseos de sus progenitores”, ha declarado Katy Riddick, coordinadora de l Wales Humanists (Humanistas de Gales). Defensores de la supresión de cualquier influencia religiosa en las instituciones galesas, el grupo ha dado la bienvenida, sin embargo, a la obligatoriedad de las clases de educación y relaciones sexuales para todos los alumnos.

“En secundaria, las lecciones incluirán sexualidad, consentimiento expreso en las relaciones, derechos individuales, igualdad y reproducción. Cada una de las materias se dará en la ‘fase apropiada’ de edad de los alumnos”, ha indicado el Gobierno galés. En Inglaterra a partir de septiembre la educación afectiva en primaria y la educación sexual en secundaria entrarán a ser parte del currículum, pero los padres pondrán prohibir la asistencia de sus hijos hasta sus 15 años.

La fundación Terrence Higgins Trust, que promueve una mayor información sobre virus VIH y sobre la salud sexual, ha sido una de las principales impulsoras de esta campaña, y ha celebrado la decisión del Gobierno galés.“Todavía queda mucho trabajo para asegurarnos de que las escuelas proporcionan lecciones adecuadas, de calidad e incluyentes con la comunidad LGTB, impartidas además por profesores que inspiren confianza. Es fundamental que la gente joven aprenda la realidad del VIH en la vida moderna», ha expresado la organización

La Conferencia Episcopal de Inglaterra y Gales ha mostrado su oposición a la retirada del veto parental, pero se ha mostrado a la vez más preocupada por la enseñanza de la religión (“reducirla a una parte de las ‘creencias del mundo’ diluye su importancia”). “Unas relaciones y una educación sexual bien enseñadas suponen un aspecto fundamental para preparar a los menores de Gales”, ha manifestado en un comunicado.

Fuente: https://elpais.com/sociedad/2020/01/22/actualidad/1579701854_386498.html

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España: Matronas crean un manual de educación sexual para desterrar la mutilación genital femenina

Europa/España/05 Enero 2020/Diario enfermero

Se estima que más de 140 millones de mujeres y niñas en el mundo han sufrido mutilación genital femenina. Una práctica que constituye una forma clara de discriminación contra las mujeres. Aunque es propia de países en África y Oriente Medio, persiste en las poblaciones emigrantes de Europa occidental, Norteamérica, Australia y Nueva Zelanda. España es uno de los países que se ha convertido en destino de personas procedentes de países donde se practica, por esta razón, un equipo de matronas de distintos hospitales de Madrid y Asturias han elaborado un programa de educación interdisciplinar para que los profesionales sepan cómo prevenir y enfrentarse ante casos de mutilación genital femenina (MGF). Las profesionales sanitarias han centrado este programa en la educación sexual de mujeres que pueden ser víctima de esta práctica .

«Los profesionales sanitarios dedicados a la salud Materno-infantil son quienes están más en contacto con estas mujeres, tanto en Atención Primaria como en Atención Especializada. El profesional de  enfermería es el personal  sanitario  por excelencia destinado a la  Educación para la Salud (EPS)  y más concretamente, la matrona, quien acompaña a la mujer en todas las fases de su ciclo vital, pudiendo detectar casos de MGF durante el seguimiento del embarazo, en el momento del parto o incluso durante la realización de una citología para la detección precoz de cáncer de cérvix. Por eso creemos necesario contar con instrumentos que nos ayuden a mejorar nuestros conocimientos, actitudes y aptitudes para prevenir, detectar precozmente y tratar las complicaciones derivadas de la MGF en mujeres y niñas, así como intentar que esta práctica sea abandonada a nivel mundial», introduce Cristina González, matrona del Hospital Universitario La Paz de Madrid y una de las responsables del programa de Educación para la Salud que ha sido publicado en la Revista Metas de Enfermería.  

Situación en España

De acuerdo a los datos publicados en el estudio, en España se estima que unas 17.000 niñas podrían estar en riesgo de ser mutiladas. Además especifica que Cataluña y la Comunidad de Madrid son las regiones que cuentan con mayor número de mujeres procedentes de países en los que existe esta práctica. Ante esta situación, las matronas responsables de este programa de educación para la salud se centraron en la educación sexual, considerándola esencial para erradicar esta práctica. En primer lugar, el programa, especifica las consecuencias que tiene la MGF para las mujeres -con el objetivo de que quien lo imparta tenga las claves para identificar a las víctimas- y después se centra en dotar a las mujeres de los conocimientos, actitudes y habilidades para tener una vivencia positiva de su sexualidad.

Además, consideran esencial impartir este programa en un contexto adecuado «en las poblaciones en las que se realiza la MGF es frecuente que la sexualidad esté ligada a la vergüenza y la culpa. Por este motivo, la aproximación a la sexualidad no se podrá realizar en estos grupos directamente, sin un trabajo previo en otros campos que propicien un acercamiento continuo a la cultura, y posteriormente a la sexualidad y a la MGF. Para favorecer su abordaje, este tipo de programa ha de incluirse en grupos ya establecidos con otros objetivos como complemento a su formación. Debido a que la captación de mujeres víctimas de MGF es muy compleja, y más aún, tratar de forma directa el problema, es clave que realizarlo en un entorno donde ya exista cierta predisposición social, donde se aborden otras problemáticas de estas mujeres. Creemos que es importante llevarlo a cabo en grupos de encuentro de mujeres, en las que ya existe una sensibilización previa sobre discriminaciones sociales y roles de género», concreta la matrona e investigadora Cristina González.

Un programa de un año

El programa, que consta de seis sesiones, está proyectado para que se realice por tanto en un espacio cedido por una ONG colaboradora donde ya habrá un trabajo previo de acercamiento a estas mujeres. Cuenta con una periodicidad semanal y se ha previsto para que tenga una duración anual, donde en los 120 minutos de duración se hará un acercamiento a las mujeres que participen en él. Los temas que prevé son diversos, desde una introducción a la sexualidad en términos generales o talleres prácticos para que las mujeres conozcan su cuerpo.  Al terminar el taller las participantes deberán contestar un cuestionario de evaluación para que las responsables del programa evalúen con los indicadores del programa si ha resultado efectivo, si no fuese así, las responsables del programa de educación para la salud indican que se propondrán perspectivas de mejora. 

Una iniciativa esencial para erradicar una práctica que parece muy lejana pero cada vez está cobrando más presencia en nuestro país. A través de una herramienta muy útil y efectiva como es la educación sexual.»La educación sexual constituye una herramienta necesaria, privilegiada y útil para el abordaje de la prevención de las mutilaciones genitales femeninas y, por ende, la salud sexual. Hay que tener en cuenta claves interculturales sobre sus vivencias, sus circunstancias, sus necesidades, sus demandas y, por supuesto, sus formas de relacionarse y su sexualidad», concluye Cristina González.

Fuente: https://diarioenfermero.es/matronas-crean-un-manual-de-educacion-sexual-para-desterrar-la-mutilacion-genital-femenina/

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Un asesinato y una portada de revista provocaron el nacimiento del primer podcast queer de África

Reseñas/12 Diciembre 2019/El país

Selly Thiam dejó un trabajo de profesora e inició la tarea de recolectar historias de la LGTBIQ en el continente y en la diáspora que no se ciñesen a la perspectiva victimista

El 29 de septiembre de 2004, la fundadora de la Asociación de Lesbianas y Gays de Sierra Leona, FannyAnn Eddy, fue encontrada muerta. La revista LGTBQ de Chicago Windy City Times  llevó una fotografía suya en portada. La profesora de instituto Selly Thiam encontró ese ejemplar en la estantería en un restaurante. La imagen de la sierraleonesa le cambió la vida.

Como senegalesa en la diáspora, la noticia fue el primer contacto de Thiam con una África Occidental lesbiana. “Cuando era una joven queer y africana, no había ninguna imagen de nosotros que pudiera encontrar en la cultura popular. Cuando supe de ello fue en el contexto de la violencia”, explica.

Thiam dejó entonces las aulas e inició la tarea de recolectar historias de la comunidad en el continente y en la diáspora que no se ciñesen únicamente a la perspectiva victimista y criminalizada. “Quería honrar el trabajo que hacía (Eddy) y por eso era tan importante ayudar a crear la memoria colectiva de nuestras experiencias, no sólo desde la tragedia”, indica. Desde 2006 esta antigua docente lleva acumulando relatos y el boca a oreja ha sido primordial. En el verano de 2018 lanzó un podcast único y pionero: AfroQueer.

Hecho en Nairobi, esta emisión busca desencorsetar los cánones de género y sexualidad. Tras una primera temporada en la que se dedicaron episodios al galimatías racial y clasista de la fiesta del Orgullo de Johannesburgoal chantaje recibido por hombres homosexuales al usar Grindr en Kenia o a cómo una boda gay se hizo viral en Nigeria, Thiam y su equipo acaban de iniciar la segunda temporada.

“Hicimos algo que queríamos escuchar”, cuenta. Pero el podcast se ha convertido en una ventana a lo LGTBIQ y refuerza unas identidades y derechos que en muchos países se sigue negando. En más de 30 estados africanos tener una relación homosexual es ilegal. En tres, sin incluir zonas del norte de Nigeria, significa la pena de muerte. Uganda tomó medidas legislativas contra este colectivo en 2013 y Nigeria endureció las penas en 2014 bajo el mandato del presidente Jonathan Goodluck.

Ante la criminalización de la homosexualidad, proyectos como AfroQueer impulsan el debate, dan cobijo y acompañamiento, generan júbilo y crean un espacio íntimo para establecer un vínculo en el que “la audiencia, sea queer o no, pueda verse reflejada y aprenda”.

“[Ser gay] Es una identidad. Es quien soy”, afirmaba el periodista y escritor nigeriano Chiké Frankie Edozien durante la presentación de su memoria gay, Lives of Great Men, en la edición de 2018 del festival literario Africa Writes de Londres.

Edozien resaltaba que la lucha del colectivo en el continente no puede negarse por mucho que se aprueben leyes que los vulneren. Y para ello, cuanto más se cree, se escriba, se documente, mejor. “La representación destroza el aislamiento de las personas. Cuando la gente te ve empoderada, en ciertos espacios, sana… la representación es importante. La gente está más visible, hay activistas que luchan, se criminalizan las turbas, hay más acceso a Internet, a las redes sociales, a información y a distintos lugares”, explica Thiam.

El equipo de None of Record, productora bajo la que se realiza AfroQueer, apuesta por la normalización y se opone a la cobertura mediática que en ocasiones se realiza desde fuera del continente “Seguimos con nuestra vida, entablamos amistades, formamos parte de nuestra sociedad, al igual que otras personas”, puntualiza Thiam. El problema, reconoce la presentadora, viene cuando se desnudan las historias, se presentan dos visiones maniqueas y se olvida la complejidad. “Y no es sólo una cuestión que concierne a lo LGTBIQ sino en general cuando se reportea sobre África en los medios occidentales”.

El archivo sonoro de Thiam crece tras años de activismo y entre todas esas historias resaltan las de aquellas personas que se han enfrentado a enormes adversidades y continúan siendo faro para otras. “He aprendido cómo se puede ser uno mismo en situaciones en las que a menudo quieren dejarte fuera”.

Ella también ha madurado: “Cuando comencé este trabajo tenía una fuerte visión contra el sistema y era completamente injusta en aquel momento. Y ahora me doy cuenta que al final todo tiene que ver con la libertad de elegir cómo se quiere vivir la vida. Y eso es algo que no es sólo sobre sexualidad, particularmente en el continente”.

Hacer digital la tradición oral africana

De Kenia a Brasil. De Nigeria a India. El podcast viaja mundialmente y el equipo de AfroQueer se congratula de la acogida que tuvo en ciertos países de Oriente Medio. La sorpresa vino ante el número de oyentes en Indonesia: “Estaba en shock».

La presentadora confía en la expansión del podcast en el continente: “Sobre todo en países como Kenia donde hay precios asequibles para datos móviles, una penetración rápida del teléfono móvil y una fuerte tradición radiofónica. Es el nuevo gran medio al que la gente va a acudir”.

Coincide Tafadzwa Majayapara, fundadora de AfricanPodcasts.com, quien ve en este medio “la clave para que los africanos avancen y desarrollen la tradición de transmitir la historia oral a través de la narración”. Sin embargo, reconoce que este crecimiento solo se produce en un ramillete de países como Nigeria, Sudáfrica, Kenia, Ghana y Uganda. “En el resto del continente el podcasting no es relevante. Todavía”.

Selly Thiam ha puesto su esfuerzo en allanar el acceso a generaciones futuras a la representación de la diversidad sexual. Para ello utiliza píldoras sonoras que acercan y comparten realidades. “El podcasting abre la percepción de lo que es ser africano. Es una de las formas en que estamos construyendo nuestra propia narrativa”, señala Majayapara,

AfroQueer cimenta la representación LGTBIQ en la escena podcastera en África, se afana en cambiar el prisma de cómo se cuentan estas historias y combate la retórica y cultura del miedo.

Fuente e imagen: https://elpais.com/elpais/2019/12/04/planeta_futuro/1575458002_602065.html

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