República del Congo: Google, Apple, Tesla ¿tecnología de punta o la punta de un iceberg de explotación infantil?

Redacción: Sputniknew

El derrumbe de una mina de cobalto que causó la muerte a varios niños en la República Democrática del Congo (RDC) llegó a los estrados judiciales de Estados Unidos. Una demanda iniciada por 14 familias de las víctimas, que también incluye heridos y mutilados, denuncia Google, Apple, Tesla, Dell y Microsoft.

El cobalto potencia las cualidades del litio y así cada una de estas compañías consigue que las baterías que llevan sus autos, celulares o computadoras duren mucho más tiempo. Según el texto, estas firmas se abastecen mediante la compra del mineral a empresas locales de características artesanales.

La demanda, que no tiene precedentes, reclama una compensación para las familias de los fallecidos y heridos, y una indemnización por enriquecimiento ilícito, supervisión negligente y daños emocionales intencionales.

Se alega en este sentido que las cinco gigantes tecnológicas tenían «conocimiento secreto» de que el cobalto utilizado era producto del trabajo infantil forzado en condiciones de peligro extremo.

Victoria Braquehais es una misionera española perteneciente a la organización católica Manos Unidas. Hasta finales de 2019 su destino fue la RDC. Desde entonces se encuentra en el cercano Camerún, desarrollando el mismo tipo de proyectos.

«Nos dedicamos al desarrollo de los niños y de los jóvenes en todos los países. En estas zonas del Congo y Camerún tenemos una misión muy bonita, porque como decía Mandela ‘la educación es la mejor arma para combatir la pobreza'», explicó.

El impacto de la noticia

«El cobalto es uno de los focos más grandes en la provincia de Congo en la que he estado 10 años. Me impresionó la noticia porque por un lado me alegré. Y pensé ‘bueno, va habiendo una movilización de cara a la denuncia’. Y por otro lado es impactante porque los mismos padres que denuncian han enviado o dejado a sus hijos ir a trabajar», indicó.

Braquehais advierte y reconoce que «esto leído desde el exterior puede sonar muy extraño incluso como un aprovechamiento. Pero claro, están empujados a ello». Y cuenta que donde ella estaba afincada la gente vive «con un dólar al día para una familia entera, entonces no les queda otra».

Obligados por esta realidad «muchos niños, jóvenes y adultos mueren porque las minas artesanales no tiene protección y se producen desprendimientos de tierra. Tampoco se pueden defender porque son trabajadores que están sin asegurar», agregó.

La representante de Manos Unidas relató que participó de un proyecto de investigación sobre el sector extractivo. En este sentido concluyó que «la minería es el problema más grande que tiene el país porque es la fuente de riqueza principal. El proyecto se basaba en el espacio que hay entre la minería artesanal y la minería industrial, no existe un sector intermedio».

Un minero de cobalto en la República Democrática del Congo

Y describió la situación: «Las grandes empresas» se abastecen de la materia prima comprando «a la minería artesanal, cuyos mineros ni tienen aparatos de medición para saber la cantidad que hay en los sacos. Entonces trabajan muchísimo en condiciones muy peligrosas y lo venden a muy poco valor».Además resaltó que por las características de las minas y los túneles que se van haciendo los cuerpos de los niños se ajustan mejor que los de los adultos. «Descienden desnudos, drogados a 70, 80 metros bajo tierra pero luego no pueden defender sus derechos», lamentó la entrevistada.

«Hay extracciones que tienen el certificado color verde, que dice que en teoría no hay niños trabajando. Pero en realidad si lo hacen porque no hay mecanismos de control de la certificación de mineras que luego se venden para la telefonía, para las joyas, para lo que sea. La cadena de certificación se rompe y se rompe en el principio», afirmó.

Historias cruzadas

«Nosotros hemos perdido alumnos que se han ido a trabajar» a las minas, dice Braquehais, mientras otros nunca estudiaron. «En nuestra subdivisión de muchachas, nueve de cada 10 niñas no han pisado nunca la escuela», añadió, para luego resaltar que «es una realidad que está cambiando mucho».

Sin embargo sigue siendo una verdad que duele y golpea a diario porque además del trabajo infantil hay otras situaciones asociadas: «Es una realidad tremenda y luego todo lo que no se ve, porque en la búsqueda de trabajo fácil y rápido que en nuestra zona sobre todo es la minería, conlleva unos índices de prostitución infantil impresionantes«, afirmó.

Braquehais aportó datos concretos sobre el trabajo de Manos Unidas en Congo y compartió algunos de sus resultados. «Donde yo he estado los últimos 10 años hemos impulsado la construcción de una escuela primaria y una secundaria lo que hace que ahora se eduquen en el poblado más de mil niños por año», contó.

Además de las razones obvias que para cualquier niño y niña implica ir a la escuela, la misionera en África destacó que «la escuela permite sensibilizar a los alumnos en el reconocimiento de sus propios derechos para que cuando sean adultos puedan tener una participación democrática mayor e incidir en la defensa de lo que es suyo y les pertenece».

En este sentido reflexionó acerca del rol que cada uno puede hacer para combatir esta realidad como usuarios habituales de todas estas tecnologías. «A mí también me impresiona que cuando hablamos de la telefonía móvil las mismas personas la estamos usando», señaló.

«No se puede parar toda la producción pero lo que sí podemos hacer es que en vez de cambiar de móvil a cada momento, hacerlo cuando realmente lo necesito o estar dispuesto a pagar un precio mayor», finalizó.

Fuente: https://mundo.sputniknews.com/radio_telescopio/202001151090145438-google-apple-tesla-tecnologia-de-punta-o-la-punta-de-un-iceberg-de-explotacion-infantil/

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PNUD llama a trabajar en nuevas brechas de desigualdad social

PNUD llama a trabajar en nuevas brechas de desigualdad social

La agencia de Naciones Unidas indicó que las desigualdades corresponden al acceso a salud, educación universitaria y a las tecnologías de punta.

El Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) pidió ayer que se trabaje en reducir las nuevas brechas de desigualdad para el desarrollo humano, como el acceso a las capacidades de salud, educación universitaria y tecnologías de punta.

La institución presentó este lunes su informe sobre el Desarrollo Humano (IDH), metodología que utiliza para medir los avances de la población en cuanto al acceso a educación y nivel de vida digna.

Este año, el PNUD se centró en una edición enfocada en “Más allá del ingreso, más allá de los promedios, más allá del presente: desigualdades del desarrollo humano en el siglo XXI”.

El informe plantea que el mundo entra en una nueva generación de desigualdades sobre educación, transformación tecnológica y cambio climático. De no considerar estos cambios  se “podrían dejar atrás a grupos completos de personas”, indicó Georgiana Braga-Orillard, representante del PNUD en El Salvador.

Rafael Pleitez, representante residente auxiliar y economista jefe del PNUD, indicó que dentro de las capacidades a potenciar están las habilidades que tienen las personas en la infancia y las capacidades aumentadas. Además de trabajar en el acceso a salud, a la educación universitaria y a las tecnologías de punta.

El ejecutivo del PNUD indicó que el informe propone dos objetivos: por una parte, acelerar el cierre de las brechas en cuestiones básicas, como las privaciones que tienen que ver con pobreza extrema. “Es el punto principal que hay que reducir”, indicó.

De igual forma hay que combatir las nuevas desigualdades que están generando inequidades, como las brechas tecnológicas. En este aspecto, explicó, es esencial aumentar la productividad en los mercados para generar eficiencias y obtener así los recursos para cerrar esas deficiencias.

“En una economía, como la salvadoreña, donde tenemos dos de cada tres personas trabajando en micro y pequeñas empresas (mype), es importante apostarle a la productividad de este sector”, indicó.

El funcionario consideró que si las mpyes “mejoran su nivel de competitividad, la calidad de vida de todas las personas que trabajan ahí va a cambiar. Además, de favorecer la economía y así tener mejores mecanismos para trabajar en las brechas de desigualdad”, explicó.

Braga-Orillard enfatizó que es importante tomar en cuenta el  ir más allá del ingreso económico sin perder de vista la desigualdad económica. Consideró que el principal enfoque debe centrarse en las áreas de desarrollo sostenible en salud, educación y el respeto a los derechos humanos.

Los gobiernos deben de seguir trabajando para superar las brechas, pero es prioritario hacer una detención de las desigualdades que están cubriendo cada vez más fuerzas, indicó.

Fuente de la Información: https://elmundo.sv/pnud-llama-a-trabajar-en-nuevas-brechas-de-desigualdad-social/

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