Estados Unidos: 6 Ways to Avoid Isolation Fatigue While Balancing the Demands of Remote Work

6 Ways to Avoid Isolation Fatigue While Balancing the Demands of Remote Work

 

Covid-19 has confronted businesses and employees with the acute challenges of remote work, underscoring the need to provide the right tools, planning, and support to ensure people stay healthy, connected, and productive. Managers are focused on working with employees to ensure the right infrastructure is in place, not just in technology but also in the way they set up expectations, processes, and priorities.

Of course, if remote workers lack the right tools or access to information, they’ll feel disconnected, disorganized, and disengaged. So it’s been vital to put in place the right tools, from computers, microphones, and cameras to the right software and apps. To create a productive ecosystem, employees also need easy access to group and shared drives and a plan for setting up team goals, deliverables, and timelines. Sharing schedules and documenting team members’ preferred working hours are also important.

But working from home is the new reality for many people. It’s not just equipment and process that are needed; employees are confronting new issues around feeling disconnected from the office while facing new pressures at home. So leaders need to think about new ways of helping workers manage expectations around both office and family.

This means managers must be realistic about the challenges. Working at home may mean more multitasking. Some employees may be less productive, so encourage employees to set achievable daily tasks and goals. If those go well, gradually make the goals more ambitious. Get employees to agree on workloads, projects, and priorities with their manager and communicate them to the team.

Keeping the whole team connected is crucial. Get the communication wrong and team collaboration grinds to a halt, customer focus could fail, and innovation could be stifled. So it’s important for each team member to be aware of others’ projects, timelines, and goals. Syncing responsibilities and deadlines with teammates helps manage projects, maximizes efficiency, and ensures that everyone’s work gets done. Online meetings should have clear goals, agendas, and outcomes, so send pre-reads sufficiently in advance.

Connectivity is only one solution for enabling remote working. Failure to provide remote workers with the right support can affect their motivation, productivity, and work-life balance. Isolation fatigue could easily set in, so encourage employees to think about these steps:

Set Expectations With the Family

Set Boundaries With a Workspace

Urge employees to carve out a space, zone, or approach to work that’s separate from family members when they need privacy or are on a call. Wearing headphones or placing a sign on the back of their chair or monitor works as a clear signal to others.

Build a Routine, And Practice Good Self-Care

Encourage a routine that helps get work done efficiently and effectively. For some people, this means rebuilding their home office environment. For others, it’s about establishing a new routine. It’s important to set reasonable boundaries so workers don’t feel that they’re “always on” when working remotely. Breaks need to be prioritized to avoid burnout. And routines need to include staying connected with social communities, including business resource groups and work support groups on platforms like Workplace, Facebook, and Instagram.

Stick to Meeting Schedules

Working remotely doesn’t mean working reactively. Give employees the freedom to push back on last-minute conversations and spontaneous meetings—particularly those unrelated to their priorities.

Socialize With Colleagues

Isolation is a common problem for remote workers, so it’s more important than ever to come together. Try creating and participating in chat threads where team members can talk about common interests. Video calls are better to connect with colleagues, even just for an end-of-day watercooler chat. They also help introverts—who’d rather not socialize—periodically connect with team members.

Communicate with Clarity and Positivity

Working remotely makes it vital for communications, especially by email or chat, to be clear and positive, or they may be viewed as cold or indifferent. Happy emojis, fun photos, and generous compliments all are tools to maintain morale and build rapport.
Fuente de la Información: https://hbr.org/sponsored/2020/07/6-ways-to-avoid-isolation-fatigue-while-balancing–the-demands-of-remote-work
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La pandemia como catalizador de una nueva cultura laboral

Por: Paola Estrada Villafuerte

El trabajo remoto está forzando un cambio en la rutina laboral y muchas personas se están planteando si desean regresar a la oficina cuando el confinamiento termine.

Millones de trabajadores y trabajadoras están participando en un experimento sin precedentes que ha transformado la manera en vemos la oficina. Según una encuesta realizada por Gallup, el 62 % de los americanos empleados dicen que han trabajado desde casa durante la crisis sanitaria, un número que se ha duplicado desde mediados de marzo. Incluso, empresas como Nationwide Insurance ya adoptaron estas medidas y han decidido hacer de los turnos de trabajo remoto una modalidad permanente.

Muchas personas se preguntan si estos cambios establecerán un precedente para el nuevo futuro del trabajo de oficina tal y como lo conocemos. Business Insider prevé que el concepto mismo se transformará de un lugar al que vas todos los días a un centro más bien pensado para reuniones y trabajo colaborativo. Bajo este nuevo concepto, el resto de tu semana laboral probablemente será llevada a cabo en tu propio hogar, siendo que diversas firmas de arquitectos ya se encuentran diseñando los planos de oficina del futuro cercano y las compañías están discutiendo cuánto espacio de oficina realmente necesitan. “El regreso a la oficina probablemente estará marcado por dos olas: antes de una vacuna y después de una vacuna. A corto plazo, las oficinas se sentirán más vacías que antes a medida que las personas regresen por turnos a lugares de trabajo con más espacios privados, cubículos separados por pantallas de plástico y pasillos señalizados para el tráfico de una sola dirección. A largo plazo, la oficina podría convertirse en la columna vertebral social de una empresa, mientras que el trabajo individual centrado se llevará a cabo de forma remota», plantea Alex Nicoll.

“A medida que se intensifica el impulso para reabrir la economía del país, también lo hacen los sentimientos de temor ante la idea de regresar a la oficina”.

Desde que las personas se están adaptando a sus rutinas dentro del hogar, las playlists de lo-fi hiphop en Spotify para acompañar el home office se vuelven cada vez más populares y muchas personas desean que este cambio sea un estilo de trabajo que se mantenga después de la cuarentena. Encuestas revelan que tres de cada cinco trabajadores estadounidenses que han realizado su trabajo desde casa durante la pandemia preferirían continuar trabajando de forma remota tanto como sea posible.

¿Cuáles son los beneficios del home office?

Varias personas han encontrado que sus niveles de productividad y eficiencia han mejorado durante su acercamiento al teletrabajo. “A medida que se intensifica el impulso para reabrir la economía del país, también lo hacen los sentimientos de temor ante la idea de regresar a la oficina”, dijo el profesor y antropólogo, Jeff Anderson para The New York Times. Los que mejor se han desarrollado trabajando vía online, temen que los beneficios encontrados desaparezcan una vez termine el confinamiento.

Un estudio realizado por IBM el pasado mes de abril, donde se encuestó a más de 25,000 estadounidenses, explica los cambios en el comportamiento personal resultantes de la crisis. Se demostró que tres de cada cuatro trabajadores indican que les gustaría continuar trabajando remotamente al menos ocasionalmente, mientras que más de la mitad, el 54 por ciento, quisiera que esta sea su forma principal de trabajo.

Esta modalidad online, además de ser preferida por muchos, también ha sido señalada por varios expertos como una vía alternativa más saludable a la oficina habitual. Estudios revelan que los trabajadores remotos a tiempo completo son un 22 % más felices que aquellos en oficinas presenciales. También reportan una mejor concentración, menos estrés y un 43 % de mayor productividad. Además, el trabajo desde casa no sólo ofrece aspectos positivos a los trabajadores, siendo que las empresas pueden ahorrar en la renta de menores espacios para las oficinas de reuniones ocasionales.

Algunos de los beneficios que The New York Times atribuye al home office son:

  • Ahorro en vivienda y transporte, dado que al laborar en línea se les permite vivir fuera de la ciudad.

  • Menos tiempo en el tráfico, constantemente relacionado a mayores índices de estrés y contaminación.

  • Mayor productividad.

  • Por supuesto, menor riesgo de contagio.

El teletrabajo y la interacción social

Por otro lado, mientras que el trabajo remoto representa una gran opción para familias primerizas, personas con discapacidades y para quienes viven en zonas retiradas, algunos no están totalmente convencidos con este nuevo sistema. A pesar de las ventajas que ofrece, también hay estudios que demuestran que la productividad extra que provee el teletrabajo, también trae consigo bajas en la creatividad y el pensamiento innovador, ya que trabajar aisladamente puede llegar a ser solitario. Muchas de las personas que no se encuentran maravilladas con el home office, reportan una mayor dificultad a la hora de separar el hogar del trabajo. “Falta un elemento de interacción social que es realmente importante”, dijo Laszlo Bock, director ejecutivo de Humu, una nueva empresa de recursos humanos de Silicon Valley.

Desafortunadamente, la normativa sexista dentro de la oficina también se hace presente en el trabajo remoto. En reuniones por videollamada, muchas mujeres se ven constantemente interrumpidas e ignoradas. «Me interrumpen como tres veces y luego trato de hablar de nuevo y otras dos personas están hablando al mismo tiempo interrumpiéndose mutuamente», dijo Mallick, jefa de diversidad e inclusión de la empresa de bienes de consumo, Unilever.

Trabajo remoto y homeschooling

A esto podemos agregar la muy distinta experiencia que están teniendo las familias con hijos con el trabajo remoto, quienes están haciendo frente al reto de la educación desde casa mientras que al mismo tiempo deben cumplir con las obligaciones de la oficina y del trabajo doméstico. En un panorama donde las mujeres son quienes llevan a cabo la mayoría de las labores domésticas, las madres del hogar están experimentando estas dificultades de manera más aguda. Ann Vegdahl, quien trabaja en la academia en la ciudad de Nueva York, y su esposo, ingeniero de software, tienen un hijo de dos años y ella está embarazada de siete meses. Antes de la pandemia, su hijo generalmente estaba en la guardería durante las ocho horas laborales, pero ahora los tres están en casa juntos. Ahora, Vegdahl estima que solo está logrando entre el 40 y el 50 por ciento de su carga de trabajo habitual, así lo plantea para Vox.

Algunas madres trabajadoras se ven envueltas en la forzosa priorización de empleos. «¿Qué reunión es más importante a las 10 a.m.? Es como pelear sobre qué película vas a ver, pero con tu trabajo y tu ego y tu bienestar mental en juego», mencionó Nan Krafft. Según la doctora Alina Salganicoff, directora de política de salud de la mujer en Kaiser, las mujeres algunas veces suelen ganar menos dinero debido a las responsabilidades laborales domésticas, lo que significa que cuando las parejas deben decidir qué trabajo será afectado, es más probable que sea el de ella.

“Para que el trabajo remoto sea exitoso, los empleadores deben proporcionar el equipo adecuado y soporte extra”.

Los retos para las familias que cuentan con el privilegio de trabajar desde casa se han vuelto una nueva realidad y estos se disparan aún más en familias monoparentales, niños con necesidades especiales, aquellas que no tienen hogar y personas  para quienes el teletrabajo no es una opción. Si agregamos factores como la crisis financiera actual y la falta de equipo necesario para trabajar online, la brecha equitativa se abre aún más.

Se debe señalar que el home office ha sido un escenario inalcanzable para todos los trabajadores de salud, personal de emergencias y supermercados, considerados personal esencial. También, para los más de 30 millones de americanos que han perdido su trabajo y los 346 mil empleos reportados por la STPS en México que se han visto recortados y desafiliados del ISSSTE (Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado).

El trabajo remoto requiere equipo y soporte adecuados

Definitivamente, la empleabilidad remota es un modelo que no muchos pueden darse el lujo de experimentar. Y para algunas empresas que se han visto presionadas en la transición online, esta se presenta como un reto que no están seguros de poder cumplir. En una encuesta realizada por IBM, se observa que más de la mitad de los CEOs en Estados Unidos no se sienten capacitados en materia de habilidades y recursos humanos necesarios para ejecutar sus estrategias comerciales a través del home office. Igualmente, un estudio demuestra que 6 de cada 10 trabajadores mexicanos creen que las compañías no están preparadas para adaptarse a esta modalidad de trabajo. Su preocupación es válida, puesto que, como Forbes plantea, el trabajo remoto, como cualquier tipo de trabajo, requiere de unas condiciones especiales para hacerlo funcionar. “Para que este sea exitoso, los empleadores deben proporcionar el equipo adecuado y soporte extra”, dijo Laurel Farrer, directora ejecutiva de Distribute Consulting, una firma de consultoría de negocios. “Y los empleados deben poder realizar el trabajo sin supervisión”.

Algunos expertos plantean que mientras la transición completa al trabajo desde casa no es el objetivo, establecer ciertos turnos ocasionales de trabajo remoto, idealmente de uno a dos días, podría traer muchos beneficios a la cultura laboral. Los empleados mencionan también que esta experiencia ha invitado a los directivos a un panorama más comprensivo y flexible. A muchas personas les gustaría que este ambiente se mantenga post-pandemia. «Hay una versión más suave, sin filtro y más honesta de nosotros mismos que estoy disfrutando de conocer», dijo Benetua-Rolens. “Hay espacio para ser indulgentes y comprensivos entre nosotros y con nosotros mismos. Y es porque todos hemos tenido que ajustarnos”. Rico Sisney, quien trabaja para Greenpeace USA, dice que le gustaría seguir viendo los tipos de correos electrónicos que su organización ha estado enviando últimamente para alentar a los empleados a tomar caminatas y pequeños descansos.

Fuente e Imagen: https://observatorio.tec.mx/edu-news/trabajo-remoto-postcovid19

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