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“Las mujeres siguen siendo violadas en Congo sin que nadie se mueva”

Por: Lucía Muñoz/Rebelión

La congoleña Caddy Adzuba, periodista y activista, denuncia la situación que ha vivido y vive su país, donde 48 mujeres son violadas cada hora, es decir, 400.000 al año.

 De repente, estalla una guerra en tu país. Anteriormente, los derechos de la ciudadanía estaban ya maltratados, tanto por el propio Estado como por factores externos de otros, ya fuesen políticos o económicos. Imaginen que la vida de las personas no vale nada y que en cualquier momento pueden pedirle que violen a su madre, asesinen a toda su familia delante de usted, que se tenga que comer las orejas de su pareja o los cerebros de su hijo; que su cuerpo, el de las mujeres, se convierte en un arma de guerra y que los soldados le introducen por la vagina sus armas y objetos afilados. Harán todo lo posible para que desee la muerte. Y si no le matan, al final acabará agonizando en un limbo del que seguramente, en la mayoría de los casos, no se puede salir.

Esto que parece tan alejado de nuestras vidas, tan surrealista, resulta que son casos reales y no de hace cuatro o cinco siglos. Ocurrió hace tan solo dos décadas. Así lo relata la superviviente congoleña Caddy Adzuba, periodista y activista, que denuncia allá por donde va la situación que ha vivido y vive su país y reivindica los derechos de las mujeres en la República Democrática del Congo, donde 48 mujeres son violadas cada hora, es decir, 400.000 al año. Su apoyo incondicional y lucha constante ha sido reconocida por el Sindicato de Periodistas de Andalucía con el premio Julio Anguita en 2009 y, posteriormente, con el premio Príncipe de Asturias de la Concordia en 2014. Recientemente ha estado en Málaga para conmemorar el 25 aniversario de la Facultad de Ciencias de la Comunicación.

A pesar de que la guerra acabó en 2003, la violencia no se ha erradicado. Las zonas del este siguen en un continuo estallido, donde los hombres son secuestrados, matan a niñas y niños, y cómo no, la violación a las mujeres forma parte de la rutina. “Los conflictos generados por estos movimientos rebeldes dejan el país más vulnerable que nada. Las primeras víctimas de estos conflictos son en general las mujeres y los niños. Esos grupos tienen intereses económicos, por eso atacan principalmente las zonas con más recursos como la del este. Aunque la guerra civil se haya acabado oficialmente, las mujeres siguen sufriendo violencias por parte de estos grupos rebeldes sin que nadie se mueva. Cogen a los niños para combatir como soldados y allí los matan”, aclara.

Ella misma ha sido perseguida y amenazada. Le cuesta hablar de ello, pero con humildad y con mucho valor reconoce haber vivido situaciones en las que ha temido por su integridad física, incluso le han disparado. “Hay periodistas que han perdido la vida. Me convenzo a mí misma para poder seguir. Mi vida en mi país corre un peligro constante pero sigo viva. Pero, ¿cómo me voy a ir de mi país? Tengo el sentimiento de tener un deber que cumplir, una misión. Todo el mundo no se puede ir, porque entones, ¿quién quedará aquí para apoyar a las demás? Es lo que me da fuerzas para seguir”.

En el país no se celebran unas elecciones desde 2006, con el triunfo del Partido del Pueblo por la Reconstrucción y la Democracia, con Joseph Kabila a la cabeza. Por eso, para la población congoleña es tan importante que se renueven los puestos del poder el próximo 23 de diciembre en las urnas. Esto también ha provocado que la situación esté “bastante tensa y compleja”, según la periodista. “La población quiere elecciones –añade–, quiere ver un cambio y espera que los políticos pongan de su parte para que todo salga bien. En muchos países africanos las elecciones terminan mal porque el presidente nunca quiere dejar el poder, algo que puede ocurrir en el Congo porque no hay intención, y hay guerras en la que la gente muere. Queremos unas elecciones sin violencia, con políticos responsables y respetando los derechos de la humanidad”.

El intento de sobrevivir con sueldos precarios, sin planes sociales y con escasas oportunidades para la juventud está teniendo como consecuencia la salida de la gente a las calles. Reclaman su derecho al voto, mientras mantienen la esperanza. “El Gobierno no hace caso al sufrimiento del pueblo. Solo mira por sus intereses, ya sean oposición o poder. Lo que quiere el pueblo no le importa a nadie”, analiza.

El poder institucional del Congo no representa a las mujeres que han nacido y viven allí. Ni social ni políticamente. Son empobrecidas por el sistema heteropatriarcal, que las despoja de sus pocos recursos económicos para que los gestione un hombre, por lo que avanzar resulta complicado y se convierte en un problema de autonomía. No obstante, Adzuba afirma: “A nosotras, que hemos decido luchar, nada nos puede parar ni desanimar”. Y es que a pesar de las dificultades y del machismo son muchas las mujeres, como esta activista, que han decidido dar un paso al frente a reconquistar su espacio en “un mundo de hombres” y “hablar por las que hoy no pueden, para luchar por las causas de las mujeres en el Congo”.

Las ondas feministas de las congoleñas

Las mujeres y su sororidad comienzan a organizarse en pequeñas asociaciones y colectivos. Adzuba, para quien lo más importante es que se visibilice a las mujeres, eligió un instrumento esencial para la educación: “el periodismo por la paz”. Esta es una de sus tareas en Radio Okapi, creada en 2002 cuando llegó la misión de la ONU en el Congo, MONUSCO, para acompañar en la acción de la búsqueda de la paz y la misión de las Naciones Unidas en la estabilización del país. “Llevamos a cabo un periodismo de paz, que es todo lo contrario que se ejerce en el periodismo clásico. Hacemos periodismo con rigor, pero fomentando la paz a través del periodismo”, explica la congoleña. Entiende que “el mayor problema es el acceso de las mujeres a los medios de comunicación para poder expresarse y dar su opinión, participar en debates y hablar de sus problemas”. Por ello, en 2003 tomaron las riendas y crearon la Asociación de Mujeres Trabajadoras en los Medios de Comunicación, de la que Adzuba es presidenta.

Empezar no fue fácil. Primero tuvieron que romper con “el peso cultural machista en el que las mujeres no pueden hablar”. Luego conseguir que las mujeres tomaran sus propias decisiones y que esto también pudiera accionar en su desarrollo a nivel personal. Así, en 2016, nace la primera radio de mujeres para mujeres en el Congo y alrededores. “El objetivo es dar a las mujeres el lugar que se merecen. Creamos grupos de mujeres que se reúnen una vez a la semana en las zonas rurales. Ellas eligen un tema en relación con la vida de su pueblo y nosotras hacemos de estos debates unas emisiones públicas que se transmiten en Mama Radio”, cuenta.

Para Adzuba no es solo un medio de comunicación o de empoderamiento. Mama Radio no solo acompañará a las mujeres como electoras, sino también como candidatas. “Queremos que la mujer tenga un papel importante, no solo en la participación, sino también que salgan victoriosas en este proceso. Por eso nuestra estrategia a través de la asociación es luchar por que haya una representación de la mujer en la política y que haya una candidata a las elecciones. Llevamos 15 años luchando por esto desde la asociación de mujeres periodistas pero no sé a donde nos va a llevar y vamos a seguir”, afirma convencida.

El tono de tu llamada es el grito de una mujer violada

No hay oprimida sin opresor. Y eso es lo que ocurre en el Congo. “La colonización física ha acabado, pero la colonización económica sigue existiendo”, señala Adzuba, que pone el foco en las multinacionales y en el teléfono donde se está grabando su entrevista. “Este teléfono inteligente está hecho con la sangre de mi pueblo y con el sufrimiento de las violaciones a las mujeres congoleñas”, apunta. Recursos como el coltán, oro, cobre, estaño, casiterita y otros minerales imprescindibles para las industrias occidentales son los que han provocado que multinacionales europeas y americanas financien armas y guerras “a cambio de vivir en el lujo y despojar a África. Europa es lo que es gracias a todo lo que sigue expoliando en África”.

Y si la solución dependiera de ella, sabría lo que hay que hacer: “África tiene que cerrar sus puertas e intentar desarrollarse sola, porque si Europa hoy día sigue robando, la culpa la tiene África. Tenemos que ser más fuertes y cambiar también los políticos y gobiernos corruptos que solo cumplen las órdenes de Europa en lugar de mirar por su pueblo”.

Fuente: https://www.rebelion.org/noticia.php?id=242030

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República Dominicana: Documental “Invisibles of The World”

República Dominicana/26 de Mayo de 2018/cocalecas

“Invisibles of the World”, abarca la problemática de los abusos y violaciones sexuales que azota a nuestro país y el mundo, y se basa en las estadísticas de cada región.

Fernández muestra las consecuencias negativas, lo aberrante y desgarrante de esta situación que se sale de las manos, sin querer o queriendo, de las autoridades y la sociedad, que se muestran indiferentes ante el estado de emergencia.

La mayoría de violaciones sexuales ocurren según las estadísticas, a hembras  entre los 4 y 14 años, siendo 6 de cada 10 niñas violadas a diario en República Dominicana, y 2 de cada 10 varones.

En este documental podrán escucharse los testimonios de  víctimas reales de violaciones  a temprana edad, que hoy son hombres y mujeres que ya no quieren ser más invisibles, y que con la exposición de su caso en este documental,  pretenden alertar  y descubrir ante una sociedad que se cubre los ojos, el cómo sucede, para que puedan otras personas prevenir o ayudar a otras víctimas a superar sus traumas.

Un NO a la vergüenza, según las mismas palabras de Fernández,  “Las víctimas no deben sentir vergüenza, ni culpa porque la hayan violado, son los violadores quienes deben sentirse así”.

El documental deja abierta la esperanza, ya que además muestra a las personas y organizaciones que ayudan a estas víctimas,  fomentando la reintegración de las mismas a la sociedad, además del rostro inocente y feliz de aquellos que aunque en riesgo, no han sido abusados y representan lo más puro y alegre de nuestra niñez y juventud.

Yubo Fernández asistió este año junto a la Comisión de la DGCINE representando al país en el 71 Festival de Cannes, llevando este proyecto en pre-Producción al Marché Du Film, donde logró aliarse a varios países que desean ser parte de este documental, que tendrá varios capítulos tipo serie documental.

Lall Enterteinment, una de las más grandes compañías productoras de La India, invitó a Yubo para Noviembre de este 2018 a asistir al país donde Fernández podrá filmar a los “invisibles de La India”.

Su director Bhuvan Llal, junto al productor general de “Invisibles of the World” en La India, Sandip Patihar, serán parte del equipo, también la famosa activista Hindú Yogita Bhayana, recordando que hace poco en este país se aprobó la pena de muerte para los violadores.

Mientras que en Cannes también Paulo Boccato productor y presidente de Boccato Productions, dijo “Brasil no puede quedar fuera de Invisibles Of The World, la situación allá es terrible”, refiriéndose al gran problema de violencia sexual que existe en algunas regiones de Brasil. Fernández y Boccato están planeando fechas para rodar en este país.

También la productora y escritora Italiana radicada en Londres Natalie Massone, durante su reunión en Cannes con Yubo, recalcó que no quiere quedarse fuera del documental, y junto a un grupo de cineastas del Raindance London piensan rodar Invisibles en lugares de este país donde nadie se imagina que ocurren estas barbaries.

Por último la Fundación venezolana “Ángeles del Camino” presidida por Beatriz Bustamante, espera por Fernández para colaborar con el rodaje y producción de “Invisibles Of The World” en Venezuela.

Yubo Fernández pretende mostrar al mundo ese mundo de Invisibles de todo el planeta, aquellos que nadie ve porque se esconden o porque la humanidad decidió darles la espalda, en tiempos donde esté grave problema no es prioridad para algunos gobiernos, donde en muchos países es un tema tabú, pero sobre todo, donde las leyes no son severas y la educación sexual no existe. Enviar un mensaje a las víctimas de que la vida no termina, y callar o encerrarse en sus traumas y la vergüenza, no es la salida, hablar, gritarlo al mundo sí lo es.

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Bochorno de ser hombre

Por: Juan Carlos Monedero

El autor hace un símil entre la violencia fascista y la violencia machista e interpela a los hombres sobre la vergüenza de serlo ante iguales como los cinco violadores de San Fermín.
Imagina que eres de la Resistencia en un país invadido por los nazis. Te los cruzas por la calle, camino del trabajo o cuando regresas cansado y la noche ha caído, y también los fines de semana, o cuando vas a estudiar y cuando sales a ver a amigos. Siempre están ahí y te asustas aunque no te miren. Siempre te sientes observado y te dices para tus adentros: que no me vean, que no me vean… Aunque piensas que si te tocara, habrá otro compañero que esa noche se librará porque los monstruos están ensañandose hoy contigo. Alguna vez hacen redadas aleatorias y te entra el pánico.

Piensas que por qué a ti, que qué mala suerte, Cuando te toca el turno, tiemblas, pero haces todo lo posible para que no se te note, porque si te huelen el miedo es peor. A veces amenazan gratuitamente a cualquiera, porque así siembran el pánico y se sienten más viriles y ejecutan más fácilmente su ritual de poder. Cuando eres el elegido crees que todo está perdido y obedeces y te humillas y haces cosas que luego te avergüenzan y te crees morir cuando piensas que la gente que quieres podrían estar viéndote obedecer como si fueras un cobarde. Cuando esa gente te elige, no tienes derechos y tu cuerpo y tu mente está al servicio de lo que quieran hacer contigo. Salen siempre buscando víctimas y han depurado sus técnicas. Y lo peor, hay gente que les apoya, la propaganda del régimen les defiende y sus superiores les dejan comportarse así.

Quitad la Resistencia y poned que son mujeres. Quitad que son nazis y poned que son la manada. Quitad que sus superiores y poned hombres con poder, viejos y conservadores (a veces hay alguna mujer que hace como si no lo fuera) o cargos políticos insensibles o directores de periódicos que tienen anuncios de prostitución justo detrás de las páginas dedicadas a la iglesia católica. Dice el magistrado Ricardo González, el que quería absolver a la manada y el que ha inclinado el fallo, arrastrando a los otros magistrados, para que no se sancione la agresión sexual, que las expresiones de la víctima, los sonidos y sus actitudes no dejan claro que no estuviera consintiendo. De noche, cinco tipos enormes y agresivos, en un portal del cual no podía escapar, y la víctima bajo los efectos del alcohol, es decir, en una situación como si fuera una menor. Dice el juez que no demostraba una absoluta pasividad.

El juez interpreta los gestos de la víctima vistos en un vídeo y yo me pregunto: ¿de dónde saca su experiencia?¿Cuáles son sus gustos sexuales para llegar a esas conclusiones?¿A qué fuentes audiovisuales recurre? ¿Qué experiencia debe tener un juez para entrar en estas consideraciones? ¿No hay obligatoriamente que pedir informes clínicos? ¿Qué considera este juez excitación sexual? ¿De qué literatura saca lo de los ojos entrecerrados? ¿Qué concepto del sexo tiene este juez para llegar a estas conclusiones?.

Y entonces creo que se vuelve a hacer cierto que aquí, en España, mientras no demuestran lo contrario, las mujeres son todas, de entrada, un poco putas y que las explicaciones, incluso cuando las violan, las tienen que dar ellas. Que si te violan borracha no es un agravante para los violadores, sino un reconocimiento de tu culpa.

Y que si te violan, algo habrás hecho, mientras que los violadores son buenos hijos y excelentes vecinos. Esta sentencia invita a las mujeres violadas a morirse, a romperse un brazo, a golpear su cabeza contra una pared, porque de lo contrario, la violación no va a ser creíble. Deberéis gritar un poco, algo, aunque os den un bofetón, os retuerzan un brazo o salgan las navajas a relucir.

Mientras, los violadores podrán dejar a sus víctimas desnudas en un portal, robarles el móvil para que no pidan ayuda y ellos seguir la fiesta. Y repetirlo cuantas veces quieran, porque en la sociedad patriarcal todo está dispuesto para que las mujeres estén ahí para satisfacer los deseos de los hombres. El derecho, el mundo laboral, los anuncios, el arte, la patria, la religión, el dinero y la legión.

No vamos a tolerar que esa imagen de la víctima de la manada sentada en un banco llorando y sin entender nada sea un pasaporte de impunidad a los monstruos. Porque a vosotras, mujeres, os va la vida en ello. No es no y una violación es una violación. No se trata de hacer populismo punitivo ni de caer en un debate a ver quién pide más años.

Se trata de que la justicia reconozca que ha habido una violación. Para que a ninguna mujer la humillen de nuevo en una sentencia después de humillarla en un portal. Algunos de nosotros, hoy, nos abochornamos de ser hombres.

Fuente: http://www.rebelion.org/noticia.php?id=240989&titular=bochorno-de-ser-hombre-
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¿Cómo educar chicos con conciencia de género?

Por: La Nación

Diálogo para poner fin a los estereotipos y acciones que funcionen como ejemplo son los caminos que eligen padres y docentes.

«Vos partí de la base de que todo es un no». Así de rotunda fue la frase que Alejandra, mamá de Ramiro, de 16 años, le dijo en medio de una charla surgida a raíz del caso de la alumna del Nacional de Buenos Aires que denunció haber sufrido un abuso por parte de un chico de 5° año durante una de las últimas tomas del colegio. «No es no, así de simple. No quiere decir ni sí, ni tal vez, ni quizás. Un no de una chica es siempre no. Y si vos no parás, entonces podés tener un problema serio», le dijo, sin dejar lugar para las dudas.

Desde pequeñas, a las chicas les abrimos los ojos acerca de los cuidados que tienen que tener porque lamentablemente se sabe que pueden sufrir este tipo de situaciones. «No hagas nada que no quieras hacer»; «no te dejes presionar por tu novio o tus amigas». Hasta les pedimos que sean ellas las que sean responsables y se cuiden de embarazos no deseados y enfermedades de transmisión sexual. Pero no suele pasar lo mismo con los varones. «Como padres les enseñamos a las niñas a prevenir el abuso, pero no les enseñamos a los varones a no cometerlo. Si yo tuviera un hijo varón, sin duda haría que se cuestionara ciertas actitudes -sostiene la autora de Diván King Size para padres-. Por ejemplo, si una chica que está alcoholizada te dice que sí, ¿vale? Si una chica te dice primero que sí, pero después te dice que no, entonces ese primer sí ¿cuenta? Por supuesto que no, hay que parar. Me parece importante invitar a los chicos a ponerse del otro lado, a ser empáticos con el otro. Algo que sirve mucho es plantearle la situación con la hermana como posible víctima: «¿Te gustaría que eso se lo hicieran a ella?»», propone Russomando.

Para Russomando, es ideal que estas charlas en las familias empiecen a darse de forma más temprana, ni bien los chicos entran en la pubertad, cuando empiezan a despertar el interés sexual. «Sirve tomarnos de cosas que pasan en la realidad, como lo del Buenos Aires, o las series que ven los adolescentes -dice la especialista-. En 13 Reasons Why, por ejemplo, a la chica la violan en una fiesta después de que arranca una situación íntima y ella no quiere seguir. Pero el chico sigue. Es un buen ejemplo para señalar que una puede decir que sí y después que no cuando se le antoja y que el otro debe respetarlo. Hace poco, en la novela Las estrellas, volví a escuchar esa frase tan remanida «cuando una minita dice que no, está diciendo que sí». Es preocupante, porque estamos habilitando a todos los hombres a dar el paso pese a un no dicho. Por eso como padres, si estamos viendo eso con nuestros hijos, tenemos que reaccionar y decir que lo que están diciendo está mal».

El fútbol, deporte que apasiona a Theo, le sirve a Valeria como disparador para tratar temas de violencia de género
El fútbol, deporte que apasiona a Theo, le sirve a Valeria como disparador para tratar temas de violencia de género. Foto: Victoria Gesualdi / AFV

Marcela Bordenave, mamá de Augusto y Oriana, sostiene que la línea de respeto que bajan en la casa no es con las chicas en particular, sino a nivel general. «La que más habla es Oriana, ella está todo el tiempo señalando cosas que están mal. Pero que a raíz de todo lo que está pasando con temas de violencia de género lo estamos abordando bastante más. Una de las charlas que tuvimos fue a raíz de lo del Buenos Aires. Discutimos si era o no era abuso y llegamos a la conclusión de que mientras uno no quiera, lo es. El abuso en sí no tiene que ser algo violento, para mí es no tener registro de lo que quiere el otro, aprovecharse de tu lugar de poder para jorobar a los demás».

Marcela reconoce que habla de temas de género más con Oriana que con Augusto. «Charlamos mucho de todas las cosas que te pasan por ser mujer. La mujer no está en un lugar de poder, por eso suceden este tipo de cosas -plantea-. Augusto sin duda tiene mayor empatía con lo que puede sentir una chica por tener una hermana, que además es mayor. Pero ni siquiera es necesario tener una hermana, si vas a un colegio mixto una compañera tuya puede ocupar ese lugar. Los que fueron a colegios de varones o mujeres no saben cómo tratar o relacionarse con los del otro sexo», reflexiona.

Machismo y más

Según los especialistas, no sólo el machismo que pervive en varios sectores e instituciones de la sociedad explica que las mujeres sigan sufriendo abusos de todo tipo. También habría que sumar a las causas padres ausentes o con poca autoridad y el acceso de los adolescentes a situaciones que antes eran propias del mundo adulto y que aceleran los tiempos de maduración. «Hay chicos que se sienten muy solos y buscan el cariño fuera de casa y acceden a contactos que los exceden en su edad biológica y psíquica. Hablar sólo no alcanza, hay que acompañarlos, estar pendientes de lo que los chicos miran. Hoy ven pornografía a muy temprana edad, son películas con escenas muchas de ellas violentas donde el hombre es el que avanza y la mujer la que está siempre dispuesta. Los chicos están sobreexcitados. Hay una erotización que los padres no registran y los hijos viven situaciones que no corresponden a la edad», plantea Eva Rotenberg, miembro didacta de la Asociación Psicoanalítica Argentina (APA) y directora de Escuela para padres.

Russomando coincide y agrega que muchas veces los adolescentes se encuentran en situaciones en las que después no saben bien qué hacer. «No tienen las herramientas para manejarse en algunos escenarios. Lo ideal sería que ningún chico se encuentre en una situación que no pueda discernir si está bien o mal. Aveces, en su afán por parecer más grandes, las chicas de 12, 13 años se lookeany parecen más grandes de lo que en realidad son, entonces viven situaciones que no corresponden con su edad y no saben cómo manejarlas», resume la especialista en crianza y familia.

«Cuando avanzan en situaciones que no son para su edad se están exponiendo mucho y después lo sienten, tanto chicos como chicas. Para el varón es un riesgo muy grande el que corre si no puede detenerse. Hay algunos que no creen cuando la chica dice basta y puede quedar marcado en su círculo cercano como el que abusó -advierte Rotenberg-. Es importante que los hijos sepan los riesgos, enseñarles a que desarrollen recursos internos para decir que no. Como padre uno puede ver si ante determinados «no» que le ponemos a nuestro hijo actúa de forma reflexiva o impulsiva. Si ellos se sienten respetados, si comprenden los límites en casa, es más probable que sepan respetar al otro». En este sentido también es fundamental no forzar el contacto físico: si el chico no quiere ser besado o abrazado, no hay que insistir. Nadie debería recibir un beso que no desea, por más que sea el padre el que lo dé.

Alumnos de 4to grado del Beth School trabajan en clase para romper con estereotipos de feminidad y masculinidad
Alumnos de 4to grado del Beth School trabajan en clase para romper con estereotipos de feminidad y masculinidad. Foto: Patricio Pidal / AFV

Desde chiquitos

Criar hijos con conciencia de género es uno de los desafíos que se plantean los padres que buscan desterrar mitos arraigados en la sociedad. Se calcula que hacia los 3 años los niños ya son conscientes del propio género y hacia los 5 o 6 ya empiezan a separarse según él. Por eso es importante en esta etapa no reforzar estereotipos. Si bien es cierto que todavía siguen mandando el rosa para las nenas y el celeste para los varones o las cocinitas para ellas y los autitos de carrera para ellos o las princesas y los superhéroes, algo está cambiando. Cada vez hay más padres que buscan una crianza lejos de lo que la cultura le atribuye a lo femenino y lo masculino. Hay padres que piden, incluso, que los regalos a sus hijos sean juguetes «neutros», que no puedan asociarse con uno u otro género.

Sin embargo todavía falta mucho, y varios expertos señalan que se ha evolucionado bastante más en términos de educación hacia las mujeres pero no tanto en lo que se refiere a los varones. «Hoy es más probable que le digamos a nuestras hijas que pueden ser lo que quieran pero no hacemos lo mismo con nuestros hijos. Ellas tiene más opciones para elegir, pero el mundo de los varones sigue siendo muy limitado. Se los desalienta cuando tienen intereses considerados femeninos. Se les dice que tienen que ser rudos a toda costa. Si queremos una sociedad equitativa, también debemos darles más opciones a los nenes», dijo Tony Porter, un activista norteamericano que combate las ideas arraigadas en el imaginario popular de lo que es «ser hombre» en un artículo reciente publicado por The New York Times.

Entre otras cosas, Porter, que creció en Nueva York entre Harlem y el Bronx, creó la fundación A call to men a través de la que intenta combatir lo que él llama «el kit de la masculinidad». «A los chicos se les permite el enojo o la ira cuando son pequeños, pero no tienen permitido llorar. No se espera de ellos que muestren otros sentimientos como la vulnerabilidad -dice-. Sin duda, hay que redefinir y reconstruir nuestra masculinidad», clama cada vez que toma la palabra, ya sea en las charlas TED o las que organiza a través de su fundación.

En la Argentina, el debate está más abierto que nunca, sobre todo a partir de las leyes de género y el colectivo Ni una menos. «Una de las peores consecuencias de criar a un niño o niña bajo estereotipos socialmente adjudicados a varones o mujeres es la reducción de las posibilidades de desarrollo y libertad -dice Paula Chinelato, docente universitaria y directora de comunicación de Latinlab, plataforma desde donde se abordan este tipo de temas-. No es el sexo de los chicos y chicas el que determina sus gustos, actividades o preferencias, sino los caminos que van trazando, influidos por aquello que los adultos habilitan o censuran desde pequeños. Esta mirada, aunque pueda parecer inofensiva, genera fuertes desigualdades.»

Conscientes de la importancia de empezar a trabajar estos temas desde chicos, varios padres están atentos a no caer en los típicos estereotipos de género. Valeria Feder, mamá de Theo, de casi 12 años, intenta generar en él conciencia no tanto desde las charlas -aunque las tienen cada vez que la realidad impacta en la casa como el caso de Micaela García-, sino desde los hechos. «En casa confiamos más en las acciones que en las conversaciones. Theo es el más chico de tres hermanos, un varón y una mujer. Acá no hay roles o funciones enquistadas, todos hacemos todo. El padre y yo trabajamos y asistimos siempre a las marchas de Ni una menos y él está atento, pregunta, sabe de qué se trata. En el colegio tiene dos o tres compañeritas que juegan al fútbol y las incluyen en los partidos y los festejos de cumpleaños donde el fútbol es protagonista con total naturalidad. Jamás escuché de él o de los amigos un comentario machista o discriminador, al contrario.»

Como Theo es fanático del fútbol, Valeria aprovechó el caso de Alexis Zárate, jugador de Temperley, que fue separado del plantel luego de que la Justicia lo hallara culpable del delito de violación para abordar el tema de la violencia de género. «Estuvo bueno conversarlo con él, que es tan futbolero, en el momento en que surgió el tema. Theo puede separar su admiración por el futbolista de lo que hizo. El decía que era uno de los mejores, pero estaba de acuerdo en que se lo separe del plantel».

En los colegios, el tema del respeto hacia el otro género también está en el centro del debate entre padres, alumnos y docentes. En el Lenguas Vivas los alumnos formaron una comisión de género donde se debaten todas cuestiones relacionadas con el respeto a la diversidad y los derechos en relación con la sexualidad. Con bastante actividad en las redes sociales, en el Facebook de la comisión se difunden actividades, charlas y hasta se juntan firmas para terminar con el acoso verbal que sufren las alumnas para que haya «un colegio libre de violencia de género».

En el nivel primario, varias escuelas también están abordando la temática. Una de ellas es el Beth School. La idea es romper con los estereotipos de feminidad y masculinidad tradicionales. «Le damos mucha importancia al cuidado de uno mismo y del otro, a la valoración y aceptación de lo diferente. Y ponemos en cuestión estereotipos de género -describe Alejandra Mizrahi, directora del colegio-. También trabajamos sobre las maneras que tenemos de manifestar el afecto haciendo especial hincapié en que esas formas no vulneren los derechos de nadie».

Aunque el trabajo con los chicos se da en el marco de la Ley de Educación Sexual Integral, el colegio venía planteando el tema desde antes de la ley. «No es una actividad o charla aislada, sino un eje que atraviesa todas nuestras propuestas. Desde el nivel inicial hasta séptimo grado se proponen proyectos, modos de nombrar, intervenciones en lo cotidiano, que apelan a complejizar lo socialmente dado», enfatiza Mizrahi.

Por supuesto, el cambio no es automático ni inmediato. Pero tal vez algo de él empieza a divisarse en acciones mínimas aunque determinantes. «Hace poco a mi hija le levantaron la pollera en la escuela y un compañerito salió a defenderla. Cuando fui a agradecerle, me quedé duro con la contestación -relata un padre de un colegio de Belgrano-. Me dijo que además de que estaba mal, él tenía una hermanita y que no le gustaría que le hicieran lo mismo. Me quede helado. A mí jamás se me hubiera ocurrido decir algo así.»

Consejos para aplicar en casa

Conversar

Se puede tomar un hecho de la realidad o una serie de las que miran para tratar de tocar el tema del abuso o del respeto de género. Lo ideal es empezar desde chicos.

Acompañarlos

Las charlas no sirven si no van acompañadas de acciones concretas. Evitar que en casa los roles estén fijos y no refuercen estereotipos de género.

Contacto respetuoso

El contacto entre padres e hijos es esencial y marcará, en muchos casos, cómo serán esos contactos futuros. No forzar a que el hijo dé un beso, no robarle uno o respetar cuando dice que no quiere ser besado o abrazado porque probablemente él reproduzca esa actitud en un futuro.

Fuente: http://www.lanacion.com.ar/2081227-como-educar-chicos-con-conciencia-de-genero

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República del Congo: Unicef denuncia sufrimiento de los niños en Kasai

Fuente: http://www.telesurtv.net

Unos 400.000 niños están en riesgo de padecer desnutrición aguda y muchos de ellos están reclutados por fuerzas armadas en la República Democrática del Congo.
La directora regional del Fondo de la ONU para la Infancia (Unicef, por su sigla en inglés) en la República Democrática del Congo, expresó este lunes que “El mundo no puede obviar la urgente situación a la que se enfrentan los niños y sus familias en la región de Kasai”.

En un comunicado, Marie-Pierre Poirier recordó que en lo que va de 2017, al menos un millón y medio de personas, entre ellas 850.000 niños, se vieron obligados a huir de sus hogares por la violencia que genera el conflicto que vive ese país.

La representante del organismo internacional señaló que unos 400.000 niños están en riesgo de padecer desnutrición aguda y muchos de ellos están reclutados por fuerzas armadas.

Más de 200 hospitales han sido destruidos y uno de cada cuatro no funciona completamente. Además, centenares de escuelas han sido atacadas o saqueadas, mientras que muchos maestros huyeron del lugar o fueron asesinados, precisó Poirer.

«Los niños y las mujeres nos hablan de terribles abusos. Muchos niños han sido reclutados por las Fuerzas Armadas, drogados y atrapados en la violencia. Nada puede justificar estas acciones», informó el director ejecutivo adjunto de Unicef, Justin Forsyth.

En julio pasado Zeid Ra’ad Al Hussein, el Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, nombró a tres expertos encargados de investigar las violaciones y abusos cometidos en la región de Kasai, en la República Democrática del Congo (RDC).

El conflicto en la provincia de Kasai, al noreste de RDC, inició en 2016. La milicia local Kamuina Nsapu se enfrenta con tropas gubernamentales y más de un millón de personas han sido desplazadas desde entonces.

¿Quién es Kamuina Nsapu?

Se le conoce como un grupo tribal y su nombre derivó del jefe tradicional, Kamuina Nsapu, quien fue asesinado por la Policía en agosto de 2016.

El grupo se rebeló luego de que el gobierno de Kinshasa, la mayor ciudad de RDC, no reconoció a Jean-Pierre Mpandi como nuevo Kamuina Nsapu, nombre que se le da a la jefatura tradicional del clan de los Bajila Kasanja.

El gobierno de Kinshasa acusó al aspirante a la jefatura tribal de mantener afinidad con la oposición. La respuesta de la Policía fue organizar una redada en la casa de Mpandi y como este no se hallaba en ella, los agentes reprimieron a sus familiares.

Kamuina Nsapu en respuesta al ataque se movilizó y el gobierno desplegó más fuerzas de seguridad. Desde entonces se mantiene el conflicto

Fuente de las Noticia:

http://www.telesurtv.net/news/Unicef-denuncia-sufrimiento-de-los-ninos-en-Kasai-20170807-0064.html

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Los refugiados de Sudán del Sur superan 1,5 millones sin solución a la vista

África/Sudán del Sur/14 de febrero de 2017/Fuente: ACNUR

ACNUR hace un llamamiento a todas las partes implicadas en el conflicto para que adopten una solución pacífica a la crisis que, desde hace ya cuatro años, empuja diariamente a miles de personas a huir del país.

ACNUR está muy preocupado por el ritmo actual de desplazamiento en Sudán del Sur donde, desde que estalló el conflicto en diciembre de 2013, más de 1,5 millones de personas se han visto obligadas a abandonar el país en busca de seguridad. Además, hay 2,1 millones de desplazados internos en el país.

ACNUR hace un llamamiento a todas las partes implicadas en el conflicto para que adopten una solución pacífica a la crisis que, desde hace ya cuatro años, empuja diariamente a miles de personas a huir a Uganda, Etiopía, Sudán, Kenia, República Democrática del Congo y la República Centroafricana.

Este desplazamiento a gran escala convierte hoy a Sudán del Sur en la mayor crisis de refugiados de África y la tercera  a nivel mundia, después de Siria y Afganistán, a pesar de que recibe poca atención y sus niveles de financiación son crónicamente bajos.

Tras fallar el acuerdo de paz entre el gobierno y las fuerzas de la oposición, estallaron unos intensos combates en Sudán del Sur en julio del año pasado. Más de 760.000 refugiados huyeron del país en 2016 mientras se intensificaba el conflicto en la segunda mitad del año, con un promedio de 63.000 personas al mes obligadas a abandonar el país. Cerca de medio millón tuvieron que huir entre septiembre y diciembre de 2016. Más del 60% de los refugiados son niños, muchos de los cuales llegan con niveles alarmantes de desnutrición, marcados por el impacto devastador y duradero de las brutalidades del conflicto en curso.

Los recién llegados informan del drama que se vive en Sudán del Sur, de los intensos combates, los secuestros, las violaciones, el temor a los grupos armados, las amenazas de muerte y la extrema escasez de alimentos.

Como reflejan las tendencias mundiales de desplazamiento, las personas que huyen de Sudán del Sur son acogidas por las comunidades más pobres de los países vecinos, bajo una inmensa presión debido a la falta de recursos.

La mayoría de los refugiados son acogidos por Uganda, donde han llegado unos 698.000. Etiopía alberga a unos 342.000, mientras que más de 305.000 se encuentran en Sudán, unos 89.000 en Kenia, 68.000 en la República Democrática del Congo y 4.900 en la República Centroafricana.

A pesar de la acogida de refugiados sursudaneses por parte de los países vecinos, ACNUR sigue sumamente preocupado por la falta de recursos para hacer frente a una de las mayores crisis de refugiados del mundo.

Estamos trabajando con las autoridades de los países vecinos de Sudán del Sur para ayudar a salvar vidas y a hacer frente a las necesidades básicas de aquellos que llegan en condiciones desesperadas, pero nuestros esfuerzos se ven obstaculizados por la grave falta de financiación.

Estamos reactivando nuestro llamamiento a los países donantes para que intensifiquen su apoyo a los esfuerzos humanitarios dirigidos a la crisis en Sudán del Sur. La capacidad de respuesta de los países de acogida está al límite. Además, la constante falta de fondos está afectando el suministro de agua potable, de alimentos, los servicios de salud y de saneamiento. En 2016 solo se financió un 33% de los 649 millones de dólares que pedía ACNUR.

En 2017 hace un llamamiento para alcanzar 782 millones de dólares dirigidos a operaciones regionales dentro de Sudán del Sur y los países vecinos de acogida.

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La peor cifra de Liberia: 75% de sus mujeres fueron violadas

África/Liberia/18 de octubre de 2016/Fuente: telesur
Entre las víctimas hay niñas menores de 18 años, algunas de ellas con menos de 5 años de edad.

La ONU llamó este domingo a poner fin a la impunidad de los delitos sexuales en Liberia, donde han sido violadas el 75 por ciento de las mujeres.

Un informe de la Misión de las Naciones Unidas en Liberia y el Alto Comisionado para los Derechos Humanos informó de que la violación se ha convertido en el segundo delito más extendido del país.

A pesar de que más de 800 violaciones fueron reportadas en 2015, solo 34 delincuentes sexuales fueron finalmente castigados.  FOTO: EFE

Los altos índices de violencia sexual en Liberia son parte del legado de dos guerras civiles que tuvieron lugar en esta región de África occidental entre 1989 y 2003.  

Durante el conflicto, entre el 61 y el 77 por ciento de todas las mujeres del país fueron violadas, según investigaciones anteriores de la Organización Mundial de la Salud.

Fuente: http://www.telesurtv.net/news/La-peor-cifra-de-Liberia-75-de-sus-mujeres-fueron-violadas-20161016-0023.html

Imagen: www.telesurtv.net/__export/1476661257322/sites/telesur/img/multimedia/2016/10/16/mujeresliberia.jpg_1718483347.jpg

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