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Argentina: Caminos de Tiza

América del Sur/Argentina/05-02-2021/Autor@s y Fuente: Julio Pereyra y Yanina Ross – Escuelita Ambulantes «Caminos de Tiza»

Escuelita Ambulante “Caminos de Tiza” (Argentina), que lleva adelante los Profesores Julio Pereyra y Yanina Rossi, se trata una propuesta Educativo Comunitaria que conjuga, abordajes Terapéutico- Pedagógicos con Pedagogía de la Emergencia en zonas de vulnerabilidad social como basurales, colonias rurales, barrios marginales y/o comunidades indígenas (contextos interculturales bilingües).

Se basa en intervenciones educativas que se centren en las necesidades propias de la Comunidad como potabilización del agua, prevención de accidentes con animales ponzoñosos, de incendios y de enfermedades (como Leishmaniosis, Dengue, Coronavirus o Sarna) así como de Trata de Blancas, sumado a Educación Sexual Integral (ESI), Alfabetización Inicial y Apoyo Escolar (en los casos de niños escolarizados).

Se alterna y complementa con abordajes símiles a la Educación Especial como Lengua de Señas, Braille, Comunicación Alternativa Aumentativa y el manejo de Lenguas Originarias/Indígenas como el Guaraní, así como el diseño e implementación de materiales y estrategias didáctica en base a principios del Diseño Universal de Aprendizaje (DUA), material artesanal con elementos reciclados (para bajo o nulo costo).

El objetivo (especialmente en estas zonas) es dejar Capacidad Instalada, capacitando a Auxiliares Docentes Indígenas y Educadores Comunitarios en atención terapéutico- pedagógica y/u ortopédica de niños con Discapacidad (estrategias, recursos, metodologías), e impactar desde los espacios de intervención educativa desarrollados, en las problemáticas de cada comunidad.

Destaca que este tipo de propuesta (que realiza una simbiosis entre Educación Popular y Comunitaria) ha logrado reducir significativamente los índices de abandono, de repetición escolar y de analfabetismo.

Los abordajes desde la Pedagogía de la Emergencia, han llevado a cero el embrazo infato-juvenil/adolescente (desde la ESI), el trabajo, la malnutrición/desnutrición y la mortalidad infantil, a cero registro de incidentes con ofidios y arácnidos (pese a ser zonas rurales y selváticas) y a no registrar incendios (pese a la temporada de incendios que afectó la provincia). A cero (todo registrado y documentado) también se logró llevar los casos de Dengue (pese a la alerta sanitaria por la epidemia de esta enfermedad en la provincia), y bajo Protocolos de Seguridad e Higiene, sostener la presencialidad en plena Pandemia de Coronavirus (COVID-19), sin que se registraran casos de la enfermedad en las 14 comunidades (colonias, parajes, barrios, aldeas) donde se interviene.

Conjugando estilos de abordaje y prácticas de las Modalidades Domiciliaria -Hospitalaria, Especial y Rural, Caminos de Tiza -que adapta y traduce material educativo-, y la Biblioteca Tekom´boe -que parte de Escuelita Ambulante posee un matiz más lúdico- recreativo-, introducen en/ desde Educación Intercultural- Bilingüe cuestiones como Tecnología Educativa, y nociones de Educación inclusiva.

Tomando como referencia a Paulo Freire (Pedagogía), e introduciendo prácticas fundamentadas en las Neurociencias (Didácticas), el qué y el cómo enseñar se aleja de los corsés del Sistema que impone la Educación Formal, los invitamos a conocer la propuesta, ideas didácticas,  en:

 

 

Fuente: L@s Autor@s escriben para OVE

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Subdesarrollo docente en educación básica

Alberto Sebastián Barragán*

La formación y actualización de profesores es muy relevante en todos los niveles educativos. En su preparación recae una gran responsabilidad para la calidad de las estrategias y actividades que se desarrollan como procesos de enseñanza, lo cual repercute directamente en la construcción de los aprendizajes de los estudiantes.

En nuestro país hay políticas educativas que han trascendido los sexenios. Por ejemplo, para educación superior, desde 1972 se impulsó el Programa Nacional de Formación de Profesores y en 1994 se creó el Programa Nacional de Superación Académica, con el objetivo de fortalecer la preparación de los académicos en ese nivel educativo, pero en 1996 fue absorbido por el Programa para el Mejoramiento del Profesorado (Promep).

Por más de 10 años, éste se aplicó con resultados positivos, por ello se retomaba cada sexenio y se amplió su cobertura a todas las instituciones de educación superior, hasta convertirse en el Programa para el Desarrollo Profesional Docente (Prodep), en diciembre de 2013, pero como se ofrecían buenos resultados, se decidió ampliar la población objetivo y agregar al programa a los docentes de prescolar, primaria, secundaria y bachillerato. Hoy el programa mantiene una tendencia favorable para educación superior, pero para el nivel básico y medio superior no se puede decir lo mismo.

El Prodep tiene una extraña configuración, porque los objetivos para cada subtipo de población son muy distintos. Por ejemplo, para educación básica, prescribe: garantizar una oferta suficiente y diversificada de programas formativos pertinentes y con calidad que atienda las necesidades que derivan de la evaluación interna de las escuelas públicas de educación básica; para educación media superior: capacitar al personal docente, y para educación superior: “contribuir al desarrollo profesional de los docentes y cuerpos académicos (…) mediante la habilitación académica y la investigación”. Los recursos y los procedimientos también son distintos para cada rango.

Sí, el Prodep tiene un buen desarrollo en educación superior, pero ¿cómo saber si cumple los objetivos para educación básica? Esta respuesta la obtendremos de la Auditoría Superior de la Federación (ASF). El 17 de enero de 2018 se emitió el dictamen de la Auditoría de Desempeño 153-DS, sobre el Programa para el Desarrollo Profesional Docente en Educación Básica, para fiscalizar el Prodep, tipo básico, y verificar la ejecución de objetivos y metas.

En los resultados y recomendaciones de 13 puntos descritos, aparecen valoraciones como: deficiencias en el diseño; subsidios no entregados; falta de diagnóstico nacional o local; no se garantizaron mecanismos de oferta pertinente; no se acreditaron cartas de participación; la dependencia no dispuso de información sobre el cumplimiento; no se acreditó haber desarrollado estrategias de distribución de materiales de estudio para personal sin acceso a computadoras o Internet; la SEP sólo contó con información de cursos y diplomados impartidos de dos de las 32 entidades; no se contó con información o indicadores para evaluar el programa; hubo una reducción de 95.5 por ciento en el presupuesto asignado al Prodep para educación básica; se capacitó sólo a 5 por ciento de la meta de más de un millón… Con todo esto, podríamos concluir que por tratarse de una vertiente del Prodep en el ejercicio 2016, a tres años de su implementación, se perciben graves deficiencias.

Pero mejor leamos aquí una cita exacta del dictamen de la ASF: “En cuanto al cumplimiento del objetivo del programa, la dependencia no acreditó contar con información, indicadores ni metas para evaluar el grado en que el programa contribuyó en el fortalecimiento de los conocimientos, capacidades, competencias y habilidades del personal educativo del nivel básico, con el fin de que este personal desarrollara el perfil idóneo.

Respecto de los recursos financieros del Prodep, en 2016, la SEP y la CNSPD realizaron 24 adecuaciones presupuestarias, que representaron una reducción de un millón 727 mil 992.5 miles de pesos, 95.5 por ciento del presupuesto originalmente asignado al programa en el nivel básico, lo cual implicó que no se alcanzaran las metas de cobertura, por lo que dichas adecuaciones no se realizaron para permitir un mejor cumplimiento de objetivos.

Más adelante, la ASF reconoce que estas deficiencias provocaron que no se lograra avanzar en la conformación del Sistema de Profesionalización Docente y afectaron el cumplimiento de uno de los propósitos de la reforma educativa de 2013, y por ello recomienda corregir, modificar o reorientar el Prodep en el nivel básico.

Por otra parte, la realidad educativa sigue en picada. A pesar de implementar los cursos Aprendizajes clave en línea, donde se justifican altas cantidades de gasto nacional para la formación continua, la plataforma se satura constantemente o no funciona y no hay asistencia para la capacitación de los docentes de la categoría básica. En general, la política de formación continua para docentes de educación básica brilla por sus deficiencias. En estas condiciones, el desarrollo profesional en este nivel educativo no se logrará en los pocos meses que le quedan a la administración de Peña Nieto.

Así arranca el modelo educativo. Hagamos bien las cuentas, porque con la información emitida en el dictamen de la ASF, todo indica que la SEP nos quedará a deber más de lo que imaginábamos.

*Jefe de redacción de Voces Normalistas

Fuente del Artículo:

http://www.jornada.com.mx/2018/04/14/opinion/017a2pol

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Los videojuegos pueden enseñarnos a ser mejores personas, según la UNESCO: hablamos con el autor del informe

UNESCO/16 de mayo 2017/Autora:Marina Such  /Fuente: https://www.xataka.com

¿Puede un videojuego ayudarnos a ser más empáticos con las personas que nos rodean? ¿A darnos herramientas para solucionar conflictos? ¿A convertirnos, en definitiva, en mejores personas? Ésa es la tesis detrás de ‘Empathy, perspective and complicity: How Digital Games can support peace education and conflict resolution‘, un trabajo para la UNESCO que analiza cómo pueden usarse los videojuegos para fomentar las mejores cualidades de los gamers.

Y, de paso, rompe uno de los prejuicios más persistentes asociados a ellos, como es que los videojuegos son perjudiciales para los jóvenes y que no son más que una pérdida de tiempo. Son una herramienta que puede utilizarse para bastante más que para cumplir la misión de turno o pasar el rato matando monstruos.

La reivindicación de los juegos

El autor del trabajo es Paul Darvasi, profesor de instituto en Toronto (Canadá) que está realizando un doctorado en el Programa de Lenguaje, Cultura y Enseñanza en la Universidad de York. Analizó varios juegos calificados como «serios», juegos desarrollados por estudios independientes que buscan despertar ciertos debates en sus jugadores, como ‘Papers Please’, y expuso su potencial para ser utilizados en la educación para la paz y la resolución de conflictos.

Paul Darvasi, autor del paper para la UNESCO sobre el uso de videojuegos para la educación en la paz.

Darvasi explica a Xataka que «empecé a estudiar la intersección de los vieeojuegos y la enseñanza hace unos diez años. Creo que hay un gran potencial para mejorar la educación a través de juegos (…). Los juegos se han jugado, a lo largo de la historia, en diferentes situaciones sociales, con funciones que van desde la diversión menor a rituales religiosos. Casi en todos los casos, algo se ha aprendido o practicado, ya sea estrategia, análisis, conocimiento procedimental, reconocimiento de patrones, protocolos de comunicación, función ejecutiva, etc. Sólo estamos comenzando a entender cómo ocurre el aprendizaje en los juegos digitales, y cómo puede medirse».

El interés por estudiar de una manera más concienzuda la importancia educacional de los juegos viene por la gran popularidad que están alcanzando los juegos para móviles y la importancia económica de la industria de los videojuegos, que en 2016 generó 91.000 millones de dólares en beneficios. Algunos estudiosos, como Mary Flanagan y Helen Nissenbaum, llegan a señalar que los videojuegos son el nuevo paradigma mediático del siglo XXI.

«El mercado de los videojuegos es increíblemente diverso, y se están desarrollando muchos juegos que tienen mensajes positivos y no violentos», apunta Darvasi. ¿Cómo pueden usarse, entonces, para enseñarnos a ser, básicamente, mejores personas?

La importancia de la empatía

El investigador señala una cualidad importante de muchos de estos juegos, y es que el jugador se pone, literalmente, en el lugar de otra persona:

«En primer lugar, y lo más importante, los juegos te dejan tener la perspectiva de otra persona y ‘caminar en sus zapatos’. Esto nos permimte entender la vida y las motivaciones de otros, incluidos aquellos con los que estamos peleados. Las tensiones pueden ser reducidas al animar a grupos hostiles a comprender mejor las vidas de sus enemigos u oponentes. Esto ayuda a humanizar al otro y recordar a todas las partes las cosas que pueden tener en común».

En 1971, el juego ‘The Oregon Trail’ enseñaba a los alumnos cómo era la vida de los colonos que se iban al Oeste en el siglo XIX, y lo hacía poniéndolos en el papel de un guía de una caravana. El ya mencionado ‘Papers Please’ nos sitúa en la piel de un funcionario fronterizo de un país comunista en 1982. En todos esos casos, el jugador está solo, pero hay juegos en los que debe formar parte de un equipo, e interactuar con otros jugadores, para conseguir superarlo.

Darvasi profundiza en su respuesta anterior explicando que «algunos estudios han mostrado que la gente tiende a ver a los demás de forma más positiva cuando cooperan y juegan en el mismo equipo. Por desgracia, cuando hay grupos en conflicto, a menudo no quieren trabajar juntos o incluso verse cara a cara. Los juegos ofrecen espacios virtuales sonde la gente puede cooperar y llevar a cabo actividades significativas sin compartir, necesariamente, los mismo espacios físicos/geográficos. Pueden neutralizar las apariencias físicas o cualquier otro marcador que enfatice la diferencia. Puede ser un primer paso positivo hacia unir a la gente».

Y no hay que olvidar que la interactividad es un apartado muy importante en los videojuegos. No sólo asumimos el rol de otra persona, sino que tenemos que tomar decisiones que afectan el desarrollo del juego. Darvasi explica que:

«Los videojuegos dejan que los jugadores experimenten con múltiples soluciones y elecciones. Un juego puede enseñar a un jugador la diferencia entre elegir un camino violento y uno pacífico. Una simulación puede llevar a un jugador a darse cuenta de que la no violencia, la diplomacia y el compromiso pueden ser más fructíferos que la violencia y el antagonismo. Al contrario que los libros y el cine, el mundo cambia de acuerdo a sus decisiones, lo que puede tener un efecto cognitivo más profundo, y psicológico, que los medios tradicionales».

Da también algunos ejemplos de juegos concretos que pueden utilizarse para trabajar la empatía de los estudiantes en determinados temas, aunque reconoce que no está claro si la capacidad para la empatía puede profundizarse en etapas más avanzadas de la vida «Lo que los juegos pueden hacer es animar a los jugadores a sentir empatía por otros en una variedad de circunstancias, ya sean víctimas de guerra (‘This war of mine’), dificultades en la comunidad LGBTQ (‘Gone home’) y cómo una familia afronta la pérdida de un niño (‘That dragon, cancer’). Esto puede abrirnos los ojos a la realidad de otra persona y, quizás, incluso actuar o cambiar actitudes para mejorar el mundo de algún modo».

¿Y los videjuegos comerciales?

Donde la industria del videojuego recibe más críticas no es tanto en esos juegos serios estudiados en el paper para la UNESCO, sino en los comerciales, en los grandes lanzamientos, que son los que llegan a un público mucho más amplio. En ellos pueden ya estar desarrollándose, sin que el jugador se dé cuenta, habilidades psicomotrices, de relación con el espacio y formas creativas para resolver conflictos, y Darvasi cree que algunos pueden utilizarse con el mismo objetivo de educación para la paz:

«Soy un gran fan del uso de juegos comerciales, y hay muchos que son tanto serios en su temática como exitosos comercialmente, como ‘1979 Revolution: Black Friday’ y ‘This war of mine’. Incluso juegos AAA increíblemente populares como ‘World of Warcraft’ o ‘Skyrim’ tratan asuntos como los refugiados y el racismo. Sé de un profesor en Noruega que utiliza ‘The Walking Dead’ para enseñar filosofía moral, y otro que enseña historia con ‘Civilization’. Conforme la industria madure, veremos más y más juegos exitosos comercialmente que son también serios en su temática».

No todos los títulos son igual de adecuados para su uso educativo, sino que tienen que tener ciertas características que faciliten que los jugadores puedan trabajar en su capacidad empática y de resolución de conflictos. «Para producir empatía, es crucial ofrecer una perspectiva convincente», explica Darvasi: «Algunos estudios sugieren que los jugadores sienten más empatía por personajes presentados en tercera persona o como los otros».

Pero lo más importante es el contexto, es decir, no utilizar el juego como algo separado de otras facetas del asunto que se quiere enseñar, o en el que se quiere trabajar. El investigador explica aquí que «el éxito en el uso del juego para un resultado productivo depende, principalmente, del contexto. Si hay objetivos de aprendizaje específicos, es importante contextualizar el juego con lecturas, vídeos, preguntas, debates, etc».

Aula

En los últimos años, se ha hablado mucho sobre la gamificación de la enseñanza, cómo se pueden utilizar juegos para mejorar la capacidad de concentración de los estudiantes o para facilitar la comprensión de conceptos un poco más complicados. «Los videojuegos tienen mucho que enseñarnos sobre cómo mejorar la educación», señala Darvasi, que afirma que también hay que entender cómo enseñan los juegos y cómo los gamers pueden aplicar esos principios al mundo real: «los videojuegos son increíbles herramientas de aprendizaje; un jugador, a menudo, empieza un juego realizando acciones simples y, según el juego avanza, tiende a volverse más y más difícil. Al final, el jugador está realizando acciones complejas y procesando con rapidez una gran cantidad de información, todo gracias al juego».

Si los videojuegos se aplican en las aulas, y si pueden ser importantes en la educación para la paz, es en su capacidad para mantener el interés de los estudiantes. En palabras de Darvasi, «(los jugadores) quieren persistir y continuar, pese a los desafíos y las decepciones. ¿Cómo podemos motivar a los estudiantes del mismo modo en aulas y escuelas? ¿Cómo podemos usar los sistemas empleados en un videojuego para mejorar el sistema educativo? Esto incluye dar a los estudiantes capacidad de elección, progreso en los niveles de habilidad individual, maestría de habilidades y conceptos y reconocimiento de que el éxito se alcanza, a menudo, en un camino pavimentado por el fracaso».

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Perú: La tecnología y su impacto en la educación superior

Perú/25 de abril de 2017/Fuente: http://rpp.pe

El desarrollo cada vez más rápido de las tecnologías de la información está cambiando todos los aspectos de nuestras vidas, y la educación no es la excepción.

El desarrollo cada vez más rápido de las tecnologías de la información y comunicación (TICs) está cambiando todos los aspectos de nuestras vidas, y la educación no es la excepción. Los dispositivos electrónicos y las aplicaciones de software tienen numerosos usos en el aula que –para empezar–, no tiene por qué ser un espacio físico. Ahora, también puede ser virtual.

Quizás el primer cambio importante relacionado con el uso de tecnología en la educación se dio cuando las aulas empezaron a dotarse de computadoras y proyectores. Así, paulatinamente, el clásico pizarrón ha ido dando paso al ecran, donde es posible presentar a los alumnos presentaciones, gráficos, animaciones y videos para hacer más entretenida la clase. Con el tiempo, la clásica clase magistral ha ido quedando obsoleta.

La irrupción de la tecnología en las aulas de educación superior tendrá diferentes impactos a lo largo del tiempo, precisa en un artículo Daniel Serra, decano del Barcelona School of Management. A corto plazo, es importante señalar la importancia de la masificación de la tecnología, que ha llevado a que los estudiantes tengan sus propios dispositivos (laptops, celulares, tablets) y los lleven al entorno de aprendizaje. Lejos de prohibir o limitar su uso (algo que resulta contraproducente), los profesores deben hacer todo lo posible por sacarles provecho a estos aparatos, buscando maneras de integrarlos al proceso de aprendizaje.

La proliferación de aparatos más avanzados, como impresoras 3D y robots, revolucionarán la educación al permitir nuevas maneras de aprendizaje.
La proliferación de aparatos más avanzados, como impresoras 3D y robots, revolucionarán la educación al permitir nuevas maneras de aprendizaje. | Fuente: Shutterstock

A mediano plazo –prosigue el documento–, la proliferación de aparatos más avanzados, como impresoras 3D y robots, revolucionarán la educación al permitir nuevas maneras de aprendizaje. Lo mismo se podrá decir de gadgets como los visores de realidad virtual y otros wearables (gadgets que se pueden llevar puestos como una prenda de vestir o un accesorio). La posibilidad que ofrecen estos dispositivos de simular la realidad abre todo un abanico de grandes posibilidades. Por ejemplo, con realidad virtual se puede simular un intervención quirúrgica, o las condiciones de vida en distintos lugares del planeta.

Finalmente, a largo plazo, se espera que el desarrollo de nuevas tecnologías acabe con el modelo de educación en masa (“una talla para todos”) y lo reemplace por un modelo personalizado, a medida de cada estudiante. El modelo semipresencial, que combina clases presenciales y virtuales, será la norma, y los estudiantes podrán avanzar a su propio ritmo, con un constante seguimiento y evaluación.

No debe considerarse de ciencia ficción que dentro de unos años los robots y el software reemplacen a los profesores de carne y hueso. Hacia eso apuntan los actuales desarrollos de inteligencia artificial (IA). De hecho, según un estudio realizado por la organización New Media Centers en 2017, la educación será uno de los sectores que será más impactado por la inteligencia artificial en los próximos 5 años. Los cambios serán más rápidos que los que uno se imagina.

Fuente:

http://rpp.pe/campanas/branded-content/la-tecnologia-y-su-impacto-en-la-educacion-superior-noticia-1044795

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Comunicación Visual: Reflexión y práctica de la enseñanza

Argentina /13 abril 2017/Autoras: María Jorgelina Branda y Ana Cuenya/Fuente:openlibra

La convocatoria realizada en el marco de la UNLP como “Libro de cátedra” ha dado la posibilidad de contar con materiales específicos, ligados a la dinámica educativa y a las necesidades de de las distintas áreas académicas. Coordinado por la Titular de DCV “B” Profesora María Branda y la Adjunta, Profesora Ana Cuenya, en este trabajo, proponen una mirada sobre cuestiones didácticas, aspectos de los contenidos como la imagen y el estilo, la identidad y las intervenciones urbanas, desde la comunicación visual. Este enfoque, concibe y formula al proceso de enseñanza como un ámbito de reflexión que produce saberes cotejados con la experiencia, siempre renovadora, del acontecer educativo.

(…)

En estas páginas confluye la preocupación por la tarea de formar profesionales capaces de resolver propuestas integrales de comunicación, redimensionando los alcances de su trabajo y la vitalidad de la participación social, en la cual se involucra la Cátedra “B”.

Para leer, descargue aqui: https://openlibra.com/es/book/download/comunicacion-visual-reflexion-y-practica-de-la-ensenanza

Fuente: https://openlibra.com/es/book/comunicacion-visual-reflexion-y-practica-de-la-ensenanza

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Chile: JUNJI valora implementación de prácticas didácticas de aprendizaje

América del Sur/Chile/10 Diciembre 2016/Autor: Lucia Diaz/Fuente: Diario del Día

Actualmente, a nivel regional, 10 mil niños se encuentran inscritos en jardines infantiles de la entidad, cifra que esperan proyectar a 2.500 menores más durante el próximo año.

En el marco de la Feria de Educación Parvularia “Juego, luego aprendo”, realizada en la plaza Gabriel González Videla, la Junta Nacional de Jardines Infantiles, JUNJI, propició un espacio de reflexión entre los apoderados y educadores, oportunidad en la que se destacó el juego como motor de aprendizaje significativo.

Sobre la actividad, María Angélica Romero, directora regional de la JUNJI, señaló que “celebramos el día del educador de párvulo con una exposición de las experiencias pedagógicas de toda la región de Coquimbo, y contamos con la participación de entidades formadoras como el instituto IP Chile y el Centro de Formación Técnica Juan Bohon”.

En relación a la reforma de educación, Romero valoró las políticas públicas que ha implementado el Gobierno porque “por primera vez en la historia, la educación inicial es parte del cambio”, destacando que se ha avanzado en “una nueva institucionalidad, creando la Intendencia y la Subsecretaria de Educación Parvularia, así como también en una tremenda ampliación de la cobertura, con una gran inversión”.

¿Existe un nuevo paradigma de educación? “Aquí se ha hecho un gran esfuerzo por mejorar la calidad de los procesos pedagógicos a través de actividades didácticas, que es la mejor forma para que los niños aprendan. Es por medio de los juegos donde ellos se expresan, maravillan y auto regulan, de tal forma que se genera un aprendizaje ligado a la diversión y no a la escolarización”.

En este sentido, confesó que la apuesta está focalizada en “formar ciudadanos autónomos, librepensadores y respetuosos con sus pares”, asegurando que “la calidad de la educación en el nivel inicial está en la educación pública. Nosotros tenemos calidad, gran infraestructura, coeficiente de personal y una cantidad de material didáctico muy superior a los jardines particulares”. 6002i

Desafíos JUNJI 2017

“Tenemos que fortalecer el trabajo intersectorial y el desafío más grande es seguir ampliando la cobertura que a nivel regional ya cuenta con 10 mil niños inscritos, pero esperamos aumentar a 2.500 el próximo año. Por otra parte, hay que considerar que la educación es el reflejo de la sociedad y ésta ha cambiado, en ese sentido, estamos inmersos en un proceso de reflexión permanente de la práctica, creando estrategias novedosas”, sostuvo la directora de la entidad.

Falta de compromiso

“El problema de la educación chilena es la falta de alma, espíritu y compromiso, les falta creer que es posible construir un mundo mejor donde la educación aparece como la principal herramienta. Sin embargo, creo que en el caso de las educadoras de párvulo, la sensibilización y capacitación es parte de un proceso maravilloso”, comentó María Angélica Romero, directora regional de JUNJI.

Disponible en la URL: http://www.diarioeldia.cl/region/junji-valora-implementacion-practicas-didacticas-aprendizaje

 

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La educación: con o sin pactos

Por: Mariano Jabonero Blanco

Hay que invertir más y mejor en aquellos aspectos que hacen que los centros educativos sean más eficaces y eficientes. La autonomía de gestión, la evaluación externa y la innovación pedagógica son elementos esenciales de mejora.

Cuando se produce una inundación, lo primero que falta es agua potable. Esta paradoja ilustra la situación vivida durante años por la educación española. Mientras se producía una inundación de declaraciones de principios, casi siempre excluyentes, y disquisiciones de similar calibre, la escuela y sus grandes protagonistas, profesores y alumnos, han sobrellevado su actividad cotidiana sin recibir la atención que se merecen.

 

Pasó el tiempo y se han perpetuado graves situaciones, tan conocidas como nunca resueltas: nuestra inversión en educación, el 4,3% del PIB, sigue estando lejos de la media de los países de la OCDE, que es de un 5,2%. Junto a ello, la distribución de la inversión nos enfrenta a una inercia reacia al cambio, que despierta otra preocupación cualitativa: tan importante es invertir más, como hacerlo mejor.

 

 Hoy sabemos que hay que invertir más en aquellos aspectos que hacen que los centros educativos sean más eficaces y eficientes, y sabemos, aunque no lo parezca, que eso solo se consigue si se trabaja a favor de la equidad, el desarrollo intelectual temprano, con la mejora de la formación, selección y evaluación del profesorado, fortaleciendo el liderazgo y la mejora de la dirección y gestión escolar, promocionando la enseñanza del inglés, mediante el desarrollo de nuevas competencias o apoyando la inversión en nuevas metodologías didácticas y en sistemas educativos digitales.

Hablando de inversión, es obligado referirnos a un factor de inequidad que, quizás por crear incomodidad política, suele soslayarse por parte de algunos autoproclamados expertos. Al nacer un niño o niña en algunas de nuestras comunidades autónomas puede sentir helado su corazón, y no en el sentido machadiano sino en el educativo, si lo hace en aquellas que invierten por alumno casi la mitad de lo que hacen otras, en ocasiones vecinas. Pocas lideran ese esfuerzo inversor y son, en consecuencia, las que obtienen mejores resultados y menores tasas de desempleo juvenil, por hacerlo en lo que realmente importa y en la formación profesional.

La lotería que siempre ha supuesto nacer en uno u otro lugar de España, hoy tiene importantes efectos educativos y de bienestar futuro para las personas: en algunas comunidades es una ventaja, en otras es un hándicap, agravio que no solo tiene una dimensión presupuestaria, sino que representa un importante desafío político que apela por igual a la justicia, la igualdad y la cohesión interna.

El problema fundamental sigue siendo lo que saben nuestros alumnos y lo que saben hacer con lo que saben. De nuevo la realidad es terca: no obstante algunos avances, somos un país líder en Europa en abandono escolar temprano y en el maldito fenómeno de los “ninis”: jóvenes con edades entre 15 y 29 años que ni estudian ni trabajan, categoría en la que destacamos con un 22,8% sobre el total de ese tramo de edad, lo que equivale a 1,6 millones de jóvenes en esa situación. Y según nos dice la OCDE, la insuficiencia u obsolescencia de las competencias de nuestros conciudadanos mayores de 16 años en relación con las necesidades del sistema productivo se encuentra entre los peores niveles de occidente.

España dedica a educación el 4,3% del PIB, cuando la media de la OCDE es del 5,2%

Un análisis con perspectiva nos lleva a conclusiones aún más preocupantes: nuestro alto nivel de desempleo, junto con la elevada tasa de abandono escolar temprano, han sido factores decisivos para que la brecha de la desigualdad existente en España entre ricos y pobres no haya dejado de crecer desde 2008. De acuerdo con un reciente informe del BBVA, tenemos un país con dos grandes grupos poblacionales: los insiders, es decir, los que tienen trabajos o pensiones indefinidas, y los outsiders, un numeroso y creciente colectivo de desempleados, con empleos precarios o temporales, que han pasado a ser parte de ese traumático colectivo, o pueden dejar de ser parte de él a través de la educación.

El próximo día 6 de diciembre se hará público el nuevo informe PISA que actualizará la ingente información que aporta esa evaluación externa. Seguro que de nuevo se despertarán fantasmas: por un lado, quienes sobrevaloran PISA con interpretaciones interesadas, sin olvidar que solo es, y no es poco, una evaluación de tres competencias básicas; y, por otro, los que, con gesto atávico, querrán romper un espejo que les devuelve una imagen negativa que les interpela y cuestiona. Se intentará matar al mensajero o utilizarlo en provecho propio, lo que no deja de ser lo mismo, aunque supongo que PISA nos dirá lo que ya sabemos: que hemos hecho avances, como venimos haciendo desde comienzos de la Transición, que tenemos un sistema inclusivo con graves desequilibrios internos, y que nos cuesta alcanzar el nivel educativo que este país necesita y merece.

Finalmente quiero referirme a dos cuestiones importantes para la mejora de nuestra educación. En primer lugar, la autonomía de los centros educativos, requisito que, junto con la evaluación externa, como demuestran Hannusek y Woskmann de la Universidad de Harvard, son decisivos para el éxito de una escuela, como la española, a veces reacia a la evaluación y con un frecuente intervencionismo por parte de sus titulares, públicos o privados.

El alto desempleo y la elevada tasa de abandono escolar temprano han aumentado la desigualdad

En segundo lugar, la importancia de la innovación educativa, especialmente la didáctica y metodológica: un factor cualitativo y diferenciador de mejora que hoy caracteriza a las escuelas de manera distinta a la tradicional clasificación en públicas o privadas: las que son inclusivas e innovadoras cuentan cada vez con mayor reputación y las que no innovan pierden reconocimiento y relevancia.

Una estrategia de mejora de la educación necesita un impulso político amplio que ayude a movilizar un sistema que durante un tiempo sufrió una cierta parálisis como consecuencia de los efectos de la crisis, la injustificada confianza en opciones tan excluyentes como supuestamente providenciales y, en ocasiones, distraído en cuestiones coyunturales o particulares que solo interesan a quienes las defienden.

Stiglitz dice que el aprendizaje nunca ha sido tan importante como ahora. Exigencia propia del momento que vivimos, que llega cuando la escuela está perdiendo su función histórica de ser transmisora de información y conocimientos, para tener que asumir el reto de dotar a sus alumnos de nuevas competencias necesarias para un futuro caracterizado por la incertidumbre.

En estos momentos un primer paso, como el dado en estos días, es muy importante: sirve por igual a objetivos a corto y largo plazo y ayuda a superar inundaciones y disponer del agua potable que realmente importa: más y mejor educación para todos, sin demoras.

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