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4 maneras de fomentar la lectura en los más pequeños de la casa

En verano tenemos (normalmente) más tiempo para dedicarle a nuestros hijos y es el momento ideal para comenzar con sus hábitos de lectura desde las edades más tempranas

Seguro que entre tus propósitos para el verano se encontraba leer más. ¿A que sí? Pero lo que quizás no te habías planteado es la manera de hacer que tus hijos también descubran la paz de ponerse tras unas páginas.

De la mano de Clara C. Scribá, filóloga hispánica y fundadora de Letropía, repasamos las 4 claves para comenzar a inculcar el hábito de la lectura a los pequeños de entre 1 y 6 años. Desde el claro dar ejemplo al paso por libros juguetes, descubrimos también una serie de títulos para comenzar el camino hacia la imaginación en buena compañía.

En muchas ocasiones, podemos escuchar críticas sobre lo poco que leen los jóvenes de hoy en día. Por suerte, los planes de estudios se están adaptando a los gustos más propios de esas edades y lejos quedan los tiempos donde la lectura del trimestre se hacía cuesta arriba desde las primeras páginas.

El verano es la época ideal para sacar ese rato que dedicarle a tus retoños para ir creándoles un hábito sano de ocio lejos de las pantallas. Convertirlo ahora en una rutina hará que sea más fácil mantenerlo cuando llegue de nuevo el horario apretado en septiembre.

Antes de llegar a la queja sobre los adolescentes y a un punto de no retorno, tenemos tiempo para inculcar el amor por la lectura a los más pequeños de la casa. Hoy, de la mano de Clara C. Scribá, directora de Letropía, repasamos cómo hacer que los niños de 1 a 6 años aprendan a amar los libros, puesto que es, en estas edades tempranas, cuando hay que empezar a inculcar el hábito de la lectura.

En un momento en el que las pantallas copan el día a día y es difícil escapar de ellas, debemos fomentar el desarrollo de la imaginación de nuestros hijos a través de la lectura.

1. Libros juguetes. Adaptar el tipo de lectura a cada franja de edad es de vital importancia. Los ejemplares que incluyen texturas, muchos colores e incluso sonidos empezarán a despertar la curiosidad de los niños. Cuando vaya pasando el tiempo, introduciremos un poco de hábito de lectura como tal. «Lo importante en este punto es que empiecen a asociar la forma del libro, el hecho de agarrar uno físicamente, con ocio y diversión», comenta Clara.

2. Cuento nocturno. Sabemos que es difícil sacar energía a última hora del día para ponerse a leer un cuento con ellos. Pero establecer esa rutina de lectura pasiva por su parte es también fundamental. Además de crear un momento especial entre vosotros, estás apostando por un rato sin pantallas donde puedan desarrollar su imaginación, acompañados de libros ilustrados.

3. Si tú lees, ellos leen. Está comprobado: los niños copian aquello que ven. No hay nada como dar ejemplo para que a tus niños les pique el gusanillo de la lectura. «No tienes que ponerte a leer grandes clásicos o nada grandilocuente . El simple hecho de coger una revista, una novela corta, un libro de relatos… Lo que ellos necesitan ver es que disfrutas con la lectura que hayas elegido», puntualiza Scribá.

4. Visitad librerías infantiles y que elija su próxima lectura. Haz de la visita a las librerías especializadas en literatura infantil una actividad recurrente y divertida. «Que esperen con ganas el momento de ir a adquirir nuevos libros. La biblioteca es igualmente válida», recuerda Clara.

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Entrevista a Beatriz Millán: “Las pantallas son totalmente prescindibles hasta por lo menos los siete años”

Entrevista/05 Diciembre 2019/Autor: Nacho Meneses/El país

La bloguera y crítica literaria explica los beneficios que la lectura tiene en los niños, y de cómo conseguir que esos recuerdos compartidos influyan positivamente en su futuro desarrollo

Apasionada de la radio y la comunicación empresarial, Beatriz Millán (mamá de Martina y Julieta) quiso ser periodista, pero se lo impidió la nota de Selectividad y se embarcó en una montaña rusa que la llevó a licenciarse en Filología Hispánica, primero, y en Publicidad y Relaciones Públicas después, mientras trabajaba en turismo de Madrid, se casaba y tenía una hija. “Nada que no haga cualquier otra madre”, aunque sea inevitable pensar que quizá no siempre en tanto grado. Autora de Una madre en la ciudad (ed. Lunwerg), su propia visión de una maternidad sin complejos, esta bloguera y crítica literaria infantil recibió la semana pasada en la embajada de Italia el reconocimiento en forma de premio especial del Festival Internacional de Comunicación Infantil El Chupete. Otros premiados fueron Save the Children, Caixa Forum y la pasarela de moda infantil Petit Fashion Week.

Con más de 43.500 seguidores en Instagram, Beatriz Millán comenzó su propio blog a principios de 2012 con la simple intención de recomendar los libros que leía con Martina, su hija mayor, y muy rápidamente empezó a recomendar sitios family friendly en Madrid, ciudad por la que le encanta perderse con sus hijas: “Rutas, cafeterías con tronas o cambiadores, tartas caseras, jugueterías, librerías especiales, etcétera. Y se me empezó a juntar todo con reflexiones sobre la llegada de mi segunda hija, la lactancia materna…” Poco después llegó la cuenta de Instagram, un método que ella considera más rápido, ágil y fácil para compartir sus recomendaciones literarias (agrupadas bajo el hashtag #365bm).

“En 2015, me propuse recomendar (y reseñar) un libro diferente cada día; y lo conseguí. Algunas editoriales contactaron conmigo para que recomendara sus novedades editoriales, y yo les dije que de acuerdo, pero con la condición de recomendar solo lo que me gustara”, puntualiza.

PREGUNTA: ¿Por qué es tan importante leer en familia?

RESPUESTA: Para crear recuerdos. Uno de los que yo tengo desde pequeña es que mi madre siempre me leía por la noche. Yo quería crear esos recuerdos en la mente de mis hijas, y no solo de leer a la hora de dormir, sino a cualquier hora. Ser un adulto y tener esos recuerdos está genial. Así que cuando empecé con las recomendaciones, lo hice con el hashtag #hoyleemos. Es un plural que involucra a un adulto acompañando a un niño en la lectura. Y empecé con libros ilustrados de 0 a 7 años, los que se les leen cuando los pequeños no pueden leer por sí mismos.

Si desde entonces te inculcan ese amor por la lectura, te genera unas inquietudes y tienes acceso a una cultura básica. Mucho se tiene que torcer el tema para que un niño que se ha criado entre libros, con ese amor, no lo lleve a la edad adulta y siga teniendo ese interés por descubrir nuevos títulos. Para mí, ser una persona leída es mucho mejor que ser una persona estudiada.

P: ¿Cuándo es un buen momento para leer?

R: Siempre… ¿Cuándo no lo es? Es verdad que, con los niños, la lectura está muchas veces asociada con el momento de ir a dormir, pero yo tengo muchas amigas que no pueden estar con sus hijos en esos momentos, porque viajan o tienen guardias, así que siempre es un buen momento para leer. Si les hemos criado entre libros, es raro que en algún momento ellos no cojan un libro y te digan: “Mamá (o papá), ¿me lo lees?”

P: ¿Cómo se puede fomentar más la lectura entre los más pequeños?

R: Para mí, se pueden hacer muchas cosas desde que son bebés. Así lo hice yo con Martina: tuvo su primer libro con uno o dos meses… Era un libro de tela con poco texto, pero que sí tenía texturas. Todas estas cosas, aparentemente, no tienen mucha importancia, pero a nivel cerebral, el simple hecho de que el niño esté haciendo la pinza para pasar una hoja le está dando a su cerebro mucha información sobre el espacio, los objetos en tres dimensiones… Cuando pueden interactuar con el libro, pueden pasar la página y ver lo que hay al otro lado; son los protagonistas de esos descubrimientos.

Cuando empiezan a tener más inquietudes, una forma muy asequible [de fomentar el interés por los libros] es sacarles el carné de la biblioteca y dejar que elijan por sí mismos, e incluso dejar que se equivoquen y que aprendan lo que les gusta y lo que no. Llevarlos a una librería y que participen de todas las actividades que se desarrollan en ese entorno, como el caso de los cuentacuentos; que los libros formen parte de los momentos especiales del niño (cumpleaños, navidades…) Y, por supuesto, que te vean con un libro en las manos, porque los niños aprenden con el ejemplo. No solo se trata de lo que estemos leyendo, sino de lo que compartimos juntos, sin distracción, sin el móvil…

P: ¿Libros o pantallas?

R: Los libros. Las pantallas son totalmente prescindibles hasta por lo menos los siete años. Evidentemente, los niños son nativos digitales, pero la lectura de un libro físico nunca se va a poder comparar, en grandeza, a una pantalla. Cuando son pequeños, necesitan leer, ver los desplegables, los colores de las ilustraciones… No es que esté en contra de las pantallas, pero se pierde mucho encanto.

Cuando mis hijas empezaron a gatear, les dejaba cestos por el suelo, en los que a lo mejor tenía libros, pinzas de la ropa, cosas que hacían ruido. Que los libros estén a su alcance durante todas las etapas del crecimiento es muy importante, porque les da una libertad y un acceso directo que tiene un gran efecto sobre ellos.

P: ¿Qué te hace recomendar una historia?

R: El que sean cuentos supersencillos, que a lo mejor tengan una historia desternillante, o donde las ilustraciones a lo mejor acompañen muy bien al conjunto… Son un conjunto de factores. Hay un montón de libros divulgativos, como el Atlas del Mundo (ed. Maeva), que hace dos o tres años fue un éxito y que a los niños de seis o siete años les encanta porque les permite observar. La mayoría de los niños quieren aprender a leer por sí mismos, para saber lo que pasa por el mundo y no tener que preguntárselo siempre a mamá o a papá.

En el caso de los álbumes ilustrados, los recomiendo cuando el texto está bien definido, con una historia que tiene sentido. Se llevan, además, puntos extra si el texto es inclusivo, si las ilustraciones son diversas (desde una perspectiva racial, de género… Como en el mundo actual). En los libros infantiles todavía hay una carencia de diversidad, como de personajes femeninos a los que les pasen cosas y resuelvan problemas; historias con niñas protagonistas… Se está avanzando mucho pero aún quedan muchas cosas por hacer: no solo hay niños blancos, sino de todas las maneras: lo que no se nombra no existe, y lo que les muestras en esa primera infancia va a definir la idea que ellos se crean del mundo en el que viven, y de lo que es “normal”, así, entre comillas. En caso contrario, pueden convertirse en mayores sin una mente tolerante y abierta.

P: Licenciada en Filología y en Relaciones Públicas, crítica literaria, exploradora, organizadora de eventos relacionados con la literatura infantil… Pero ¿quién es en verdad Beatriz Millán?

R: No lo he descubierto aún, sobre todo en esta época en que mis hijas ya tienen seis y nueve años. Cada día puedo ser alguien diferente, y eso está tan bien. Me viene bien descubrirlo sobre la marcha… Y por cierto: tampoco sé lo que quiero ser de mayor. Desde que dejé de trabajar en Turismo de Madrid, supe que quería seguir hablando de mi ciudad. Me gusta perderme por ella, descubrir sitios y ver cómo la ciudad evoluciona, fluye y vibra. Y me gusta comunicarlo.

Una comunicación cercana que Beatriz sigue tomándose muy en serio, como si su audiencia estuviera compuesta de 2.000 y no 43.000 personas, aunque al reflexionar confiesa que no se ve viviendo de Instagram toda la vida. Esas marcas que le piden crear contenido patrocinado, afirma, son las que de verdad le permiten crear un contenido gratuito de manera habitual. “Quizá termine abriendo una cafetería librería donde las familias vengan con sus hijos a leer, y si les gusta que se lo compren”. O, por qué no, quizá monte un pequeño hotelito rural. Para lo de ser azafata de vuelo, igual ya es tarde. O no. Con Beatriz, nunca se sabe.

Fuente: https://elpais.com/elpais/2019/12/02/mamas_papas/1575251875_471641.html

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Entrevista a James Patterson: “Es importante que los niños lean porque la lectura salva vidas”

Entrevista/20 Marzo 2019/Autor: Adrián Cordellat/Fuente: El país

El escritor presenta el primer libro de la que apunta a ser su nueva saga, ‘Max Einstein’, protagonizada por una niña prodigio, una heroína científica de solo 12 años

James Patterson es el escritor con más números 1 en la lista de los libros más vendidos de The New York Times. Se estima que en los Estados Unidos, de cada 15 libros que se venden, uno lleva su firma. Con esa carta de presentación no es de extrañar que las obras de este prolífico autor hayan vendido más de 400 millones de ejemplares en todo el mundo. Sin embargo, y pese a este gran éxito comercial, Patterson no ha tenido reparo en dar el salto de forma habitual a la literatura infantil y juvenil, un género que no siempre cuenta con el reconocimiento debido del mundo literario. Ahí están como ejemplo sus sagas Los peores años de mi vidaMe partoCazatesoros o Jacky Ha-Ha. Ahora presenta el primer libro de la que apunta a ser su nueva saga, Max Einstein(Duomo Ediciones), protagonizada por una niña prodigio, una heroína científica de solo 12 años que utiliza la ciencia para hacer del mundo un lugar mejor.

PREGUNTA. Supongo que no debe ser fácil el cambio. Pasar de escribir para el público adulto a hacerlo para el infantil. Pasar de ser Alex Cross a ser Max Einstein o Jacky. ¿Son los códigos literarios muy diferentes?

RESPUESTA. No hay tantas diferencias. Al final con todos mis libros mi objetivo es enganchar a los lectores y hacer que sigan pasando de página. Y con los lectores más jóvenes creo que es aún más importante mantener esa atención para que no renuncien por completo a los libros. Hoy en día existen muchas distracciones tanto para los niños como para los adultos, ¡así que quiero darles personajes en los que centrarse y libros que no puedan dejar de leer!

P. No se puede negar que tiene un gran amor por la literatura infantil y juvenil. Lo demuestran sus series. Y también el hecho de que creara su propia editorial para niños. ¿Qué tiene la literatura infantil y juvenil para atraerle tanto?

R. Siempre que hablo sobre la importancia de que los niños lean subrayo esta importancia diciendo que la lectura salva vidas. Realmente creo que es así. Por eso comencé mi andadura editorial con JIMMY. Nuestra misión, que creo que es simple pero inteligente, es que cuando un niño termine un libro de JIMMY pida que le demos otro libro en vez de decir que odia los libros o que no le gusta leer. Hay millones de niños en este momento corriendo por las calles de EE UU a los que no les gusta leer y mi sensación es que esto se debe a que no se les ha presentado la lectura correctamente.

P. En ese sentido, supongo que debe ser un reto para usted, que ha encandilado a tantos lectores adultos, el buscar el modo de presentar esa lectura de forma atractiva y el fomentar la lectura entre quienes serán los lectores del futuro.

R. Es que estoy muy preocupado por el porcentaje de niños en los EE UU (y en el mundo en general) que no están leyendo al nivel que correspondería a su curso académico. Creo firmemente que debemos hacer todo lo posible para cambiar esos porcentajes. Las estadísticas son desalentadoras. En Florida, mi estado natal, por ejemplo, solo el 43% de los estudiantes de cuarto grado están leyendo al nivel que les corresponde.

P. Tengo entendido que invierte los ingresos de las ventas de los libros de JIMMY Patterson Books en iniciativas de promoción de la lectura para dar la vuelta a esas cifras que comenta.

R. Yo personalmente he estado trabajando con la Facultad de Educación de la Universidad de Florida para abordar el problema. Creo firmemente que los mejores lectores son mejores pensadores y, en última instancia, mejores ciudadanos.

P. Con su último personaje, Max Einstein, vuelve a dar el protagonismo a una niña, como ya hiciese con Jacky Ha Ha o Margaret Clarke. Y no solo eso, sino que Max Einstein es además una superheroina que tiene como poder la ciencia. En España se dice muchas veces que a las niñas les faltan referentes femeninos en la ciencia para despertar la vocación científica en ellas. ¿Puede ser Max ese referente?

R. Insistí mucho en que Max fuese una niña. Obviamente las chicas de hoy en día son alentadas a ser científicas y matemáticas, y las mujeres en estos campos empiezan a estar en el centro de atención, incluidas dos que acaban de ganar el Premio Nobel, Donna Strickland de Física y Frances H. Arnold de Química. Pero desafortunadamente en algunos lugares del mundo el potencial de las niñas y las mujeres en estos campos todavía está subestimado. Por eso quería que la serie fuese protagonizada por una niña, que incluyera mucha ciencia, y que Max fuese un personaje con el que los lectores y las lectoras pudieran identificarse para hacer del mundo un lugar diferente.

P. Hablando de ciencia. Max Einstein es la primera serie infantil que cuenta con la aprobación de los Albert Einstein Archives.

R. Fueron los gerentes de los Archivos de Albert Einstein, ubicados en la Universidad Hebrea de Jerusalén, los que se me acercaron hace unos años y me dijeron que les gustaría crear libros para el público infantil y juvenil que presentaran a los niños la ciencia de Einstein. Eran muy inteligentes y tenían visión comercial, por eso me dijeron que los libros debían ser entretenidos, porque de lo contrario los lectores jóvenes no les prestarían la atención necesaria. Siguiendo esos principios Max Einstein se ha convertido en la única serie de grado medio que cuenta con su aprobación y acreditación.

P. Hay quien dice ya que lo que Harry Potter hizo por la magia, Max Einstein lo va a hacer por la imaginación infantil. ¿La literatura infantil debe ser una herramienta para despertar esa imaginación?

R. Ciertamente debe serlo. Los libros despiertan a menudo la imaginación, especialmente entre los lectores jóvenes. Y, como decía antes, creo que por eso los mejores lectores son también mejores pensadores.

Imagen: https://ep01.epimg.net/elpais/imagenes/2019/02/28/mamas_papas/1551365284_800140_1551365433_noticia_normal.jpg

Fuente: https://elpais.com/elpais/2019/02/28/mamas_papas/1551365284_800140.html

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12 ideas para fomentar la lectura de los niños en casa

21 Febrero 2019/Fuente: Aleteia

¿Te gusta que tus hijos se aficionen a la lectura? Aquí tienes propuestas para que los libros formen parte de su vida de una forma natural.

El éxito apabullante de Harry Potter y sus 7 entregas hizo que muchos niños en todo el mundo se volvieran fans de la lectura: en casa, en el autocar yendo al colegio, en las horas de recreo, los fines de semana… Miles de ellos se disfrazaron de Harry o de alguno de sus personajes.

Si quieres que tus hijos se vuelquen en los libros y quieres dinamizar la lectura en casa, dispones de muchos recursos para lograrlo.

Beneficios de la lectura

Introducir la lectura adecuada a cada edad en la educación de un niño es facilitarle el enriquecimiento de su inteligencia. La lectura activa la imaginación y la fantasía, favorece el desarrollo neuronal y su plasticidad, hace que aumente la capacidad de abstracción y verbal del niño, le ayuda en sus habilidades relacionales

Educativamente, la lectura es un instrumento de primer orden, así que los padres interesados en la buena formación de sus hijos se interesan por que los libros formen parte de la vida del menor.

Es muy positivo que los niños integren cuentos en su línea de conocimientos, tanto escolares como extraescolares. ¿Cómo pueden fomentar este punto los padres y familiares? Aquí te proponemos 12 ideas:

Libros entre los juegos

Los libros son juegos educativos. El pequeño aprende a leer mientras se divierte y este punto es importante porque asociará la idea de lectura a la satisfacción.

Tú puedes inventar un cuento a partir de otro cuento

“No eran 7 enanitos sino 8. ¿Cómo vas a llamar al octavo?” Y así puede desarrollarse una nueva acción de Blancanieves.

Da voces a la Naturaleza

Seguro que conoces el cuento de la cigarra y la hormiga, o el de la liebre y la tortuga… Haz que vuestra mascota hable y verás que no hay parque o jardín (o comedor) que no esté lleno de criaturas.

Los cuentos de siempre

Los cuentos tradicionales son una fuente extraordinaria de riqueza cultural. Si eres mamá o papá, bastará con que te sepas unos 12 cuentos tradicionales. La mayor parte de ellos tratan aspectos relacionados con valores perennes: la lealtad, la amistad, la valentía, el espíritu de servicio…

¿Dónde nos ponemos?

Haz que se familiarice con la lectura como una de las actividades que se hacen por toda la casa: en el comedor, las escaleras ¡o el baño!

Crea su pequeña biblioteca

En su habitación, lo lógico es que los niños vayan creando su propia biblioteca. Verás qué pronto necesitáis una Billy de Ikea. Son libros que les van a acompañar toda la vida o que pasarán a otras manos.

Jugad a ser bibliotecarios

Carniceros, médicos, mecánicos, maestros… entonces, ¿por qué no bibliotecarios? Puedes hacer préstamo de libros, ordenar los que ya tienes en casa, leerlos a otros niños…

En el cumpleaños

Un libro es un regalo espléndido. Que no falte nunca en el cumpleaños de los niños, para que lo valoren tanto como el material deportivo, los muñecos o cualquier otro objeto.

Personaliza un cuento

Por internet puedes encontrar cuentos que permiten la “customización”: añades el nombre de tu hijo, el país donde vivía, alguno de sus gustos, un punto en el que crees que debe mejorar…

Antes de dormir

Este hábito es maravilloso. Antes de que cierre los ojos, permaneced juntos y le cuentas o lees un cuento. A los niños les ayuda a conciliar el sueño y suele ser un gancho formidable para que se aficione a la lectura de forma continuada.

Lleva un diario de lecturas

Anota la edad del niño y el libro que le has leído. Va bien si tienes varios hijos, para saber qué funciona con cada uno y a qué edad. Puedes anotar qué valores aporta cada título y qué es lo que más les gustó a tus hijos.

Los audiolibros, una gran idea

El audiolibro es un formato que te ayuda si no se te da bien el teatro o la lectura en voz alta. Suele haber audiolibros leídos por actores de doblaje o con un gran poder para recitar. Este tipo de lectura también enriquece la educación musical de los pequeños.

Los audiolibros pueden servirte para muchos casos: una excursión en el coche, un viaje familiar, el trayecto al colegio o de vuelta a casa…

Y siempre es de gran ayuda si tú no tienes mucha imaginación: antes de llegar a casa, ponte el audiolibro y así recuerdas qué puedes contar a los pequeños.

Fuente: https://es.aleteia.org/2019/02/21/12-ideas-para-fomentar-la-lectura-de-los-ninos-en-casa/

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Libros gratis y librerías accesibles, el plan de AMLO para fomentar la lectura

Por: adnpolitico.com.

Desde Mocorito, Sinaloa, el gobierno de México inició la Estrategia Nacional de Lectura, un proyecto que busca fomentar el hábito y el gusto por esta actividad, y que contempla regalar libros, que estos bajen de precio y que sean accesibles.

En la presentación estuvo la esposa del presidente Andrés Manuel López Obrador, Beatriz Gutiérrez Muller, quien recordó que desde Mocorito el doctor Enrique González Martínez comenzó a distribuir un folleto de 16 páginas que llevaba por nombre Arte, que después se convirtió en revista cultural.

«Es así como este lugar fue conocido como la Atenas de Sinaloa, como en su tiempo León, Nicaragua, la Atenas de Centroamérica», afirmó la titular del consejo asesor de la Coordinación Nacional de Memoria Histórica.

¿Qué es la Estrategia Nacional de Lectura?

Es un proyecto de diversas instancias para fomentar la lectura. Están involucrados el Fondo de Cultura Económica, la Secretaría de Cultura, la Secretaría de Educación Pública y la Dirección Nacional de Bibliotecas.

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¿Cuáles son sus ejes?

Formativo. Se enfoca en generar en la infancia y adolescencia el hábito de la lectura como una práctica placentera y que abre posibilidades de conocimiento.

El eje pretende reforzar y mejorar la comprensión de los textos educativos, desde la interpretación de las ideas simples hasta la discusión y crítica de ideas complejas. Para este proceso se requerirá la participación de la Dirección Nacional de Bibliotecas, cuyo titular es Max Arriaga.

Sociocultural. Significa que la lectura trasciende los muros y la edad infantil, esto es que los libros se encuentren a la mano y a costos asequibles y que las bibliotecas no sean asociadas con el aburrimiento.

Este eje contará con la participación de programas como Misiones Culturales y el Programa Alas y Raíces, de la Secretaría de Cultura.

Comunicativo. Se lanzará una campaña para mostrar que la lectura es una actividad extraordinaria porque permite pensar y sentir más allá de lo inmediato. Este eje estará encabezado por la Coordinación de Comunicación del gobierno de México, que dirige Jesús Ramírez Cuevas.

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¿Cuáles serán las acciones?

El titular del FCE, Paco Ignacio Taibo II, explicó algunos puntos con los que se buscará fomentar la lectura para los que son lectores y para los que todavía no lo son.

«Vamos a hacer libros baratísimos, vamos a regalar libros, y no solo eso, vamos a forzar a que el conjunto de la industria editorial baje sus precios, coeditando con ellos, sustituyendo importaciones», dijo.

Conoce más: Taibo II llega al FCE y anuncia fusiones, proyectos y reducción salarial

Anunció la creación de 130 librerías en el país; que se sacará una colección llamada «Viento del pueblo», con libros de 10 a 15 pesos; que se pactarán con correos para bajar el costo de transporte del libro; que hablarán con el INVI (el Instituto de Vivienda de la CDMX) para que cada casa tenga una biblioteca de cinco libros dentro; que se desarrollará tecnología, habrá transmisiones culturales y se establecerá una red de bibliotecas.

«Tenemos que lograr que los que leen salgan a la calle para decirles a los que no leen: ‘Se lo están perdiendo’, para construir una gran República de lectores», afirmó.

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Más temprano, en Twitter, publicó una fotografía con el aviso de que estaban en Sinaloa con un autobús con libros económicos. Además, con la imagen del ejemplar Rafael Buelna. Las caballerías de la revolución, de José C. Valadés, el primer libro que se está regalando.

¿Cómo estamos en lectura?

De acuerdo con las autoridades, México está en el lugar 107 de 108 en el Índice de lectura de la Unesco.

El INEGI señaló el año pasado que la población de 18 y más años de edad que lee algún material considerado por él decreció de 84.2% en febrero de 2015 a 76.4% en febrero de 2018, y que, de cada 100 personas de 18 y más, 45 declararon haber leído al menos un libro, mientras que en 2015 lo hicieron 50.

Fuente de la reseña: https://adnpolitico.com/presidencia/2019/01/27/libros-gratis-y-librerias-accesibles-el-plan-de-amlo-para-fomentar-la-lectura

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Venezuela: ME inició transformación del proceso de lectura y escritura en las escuelas

América del Sur/Venezuela/Prensa ME

Concretar las políticas educativas impulsadas por el Gobierno Nacional, es la vía para generar procesos de cambios y transformación en el sector, y la lectura y la escritura es un aspecto central para lograr materializar las metas planificadas por el Ministerio del Poder Popular para la Educación.

El planteamiento lo hizo ayer la directora de Proyectos del nivel de Educación Primaria del Ministerio para la Educación, Carmen Mendoza, en el auditorio Gastón Parra Luzardo en la sede del Banco Central de Venezuela, donde se realizó el conversatorio Encuentro de Educación Primaria: El pueblo leyendo y escribiendo.

En la actividad, que contó con la asistencia de 350 docentes investigadores del proceso lectura y escritura y la participación de cuatro expertos en las citadas dinámicas, se analizaron conceptos y propuestas pedagógicas vinculadas con la creación en la escuela de una microsociedad de lectores.

Mendoza destacó que la jornada responde al llamado que les hizo el ministro del Ministerio del Poder Popular para la Educación, Elías Jaua, quien ha planteado que “es tiempo de concreciones, no de utopías o discursos teóricos”.

Con esta actividad, aseguró, “se está iniciando el proceso de transformación personal y profesional en lo que ellos creen es leer. Tenemos que descubrir desde el maestro cuáles son las concepciones que se tienen de lo que es leer y escribir para poder nosotros darle ese poder al pueblo”.

EL PODER DEL DISCURSO

El poder popular, agregó, debe enmarcar desde su identidad socio-cultural por dónde debe guiarse el proceso de lectura y escritura, “con todas las investigaciones que están haciendo los docentes venezolanos a través de una de las políticas fundamentales creada por el Ministerio, que es el Programa Nacional de Formación de Avanzada para los educadores”.

En este programa, explicó, hay unidades curriculares que implican saber desde lo ideológico-político, el poder del discurso y de la palabra, así como unidades relacionadas con “la integración del saber y de un pueblo leyendo y escribiendo”.

SOLVENTAR DIFICULTADES

La especialista en lectura, docente Magaly Muñoz señaló que con la actividad se da continuidad al trabajo de investigación realizado por el Ministerio de Educación, para responder a la problemática que se presentaba en las escuelas donde se detectaron a muchas niñas y niños con dificultad de aprendizajes para leer y escribir.

Esta situación, indicó, se ubica tanto a nivel social como en la escuela, producto de utilizar un solo libro en primer grado, que “realmente no respondía a la naturaleza del acto de lectura y escritura ni al proceso que siguen los niños para leer y escribir, tampoco la función de las prácticas de lectura y escritura en la sociedad”.

La escuela, aseveró, es la responsable de crear las condiciones adecuadas y ofrecer a los estudiantes toda la gama de materiales como la práctica de lectura y escritura que se desarrollan en la sociedad.

“Para esto las escuelas deben estar llenas de libros, y las maestras y los maestros se tienen que formar, entender cómo aprenden los niños, cómo es el proceso de desarrollo de la lectura y la escritura y las funciones sociales”, acotó.

Fuente: http://www.correodelorinoco.gob.ve/me-inicio-transformacion-del-proceso-de-lectura-y-escritura-en-las-escuelas/

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Leer en voz alta, herramienta para el fomento de la lectura

Por: http://eldiariodelaeducacion.com/ 09-05-2018

Mejora el desarrollo del lenguaje, la formación de imágenes mentales, la capacidad expresiva, la comprensión de las palabras. Pero también, y fundamentalmente, actúa en aspectos emocionales relacionados con los libros.

Daniel Pennac ya lo decía en su libro Como una novela. Describía muchos momentos en los que la lectura en voz alta, sobre todo con adolescentes, se convertía en un ritual que podían desarrollar las familias, para aumentar su interés por la lectura, por los libros.

Desde el sistema educativo, también desde las familias, se enseña a las criaturas a leer, y cuando han adquirido los rudimentos más básicos de esta difícil tarea, se les deja a su suerte. Ya no se les lee en voz alta porque ya saben leer. La lectura pasa de ser algo que se comparte en grupo, en familia, en un entorno cálido, a convertirse, en exclusiva, en algo privado.

Pero siempre hay excepciones. Son muchas las asociaciones y grupos de personas las que dedican esfuerzos a la lectura en voz alta.

Una de estas entidades está en Granada y se llama Entrelibros. Es una asociación presidida por Juan Mata, en colaboración con Andrea Villarrubia, la vicepresidenta. Contactamos con los dos vía correo para hablar de la importancia de la lectura en voz alta.

“La lectura en voz alta en los primeros años de vida tiene consecuencias emocionales y cognitivas de extraordinaria importancia”, aseguran. En primer lugar, es el primer acercamiento que tienen niñas y niños a los libros, a través de sus familias, cuando les leen cuentos. También en las escuelas infantiles. Esto hace que las criaturas entiendan “ la lectura como una demostración de cariño y protección”.

“Pero, continúan, además de los aspectos emocionales, de los momentos de intimidad y afecto que se crean entre quienes leen y escuchan, la lectura en voz alta también tiene que ver con aspectos cognitivos, como el desarrollo del lenguaje, la formación de imágenes mentales, la capacidad expresiva, la comprensión de las palabras…”.

La lectura en voz alta, en cualquier caso, no solo tiene importantes consecuencias en los primeros años de vida; también más adelante. Aunque diferentes, claro.

No es cosa de niños

¿La lectura en voz alta es cosa de niños, de niñas? “En absoluto”. Aunque es clave en la primera infancia. “ Los beneficios son extensibles a otras edades. ¿Por qué privar a adolescentes, jóvenes o mayores del placer de escuchar un poema o un relato leído por un amigo, una madre, un profesor, una escritora? Todos hemos conocido ese placer y deseamos repetirlo”.

Desde su punto de vista, con toda la carga de la experiencia, aseguran que, además de poder facilitar el acercamiento a la lectura con una perpectiva más “cariñosa”, más amable, esta lectura en voz alta puede significar la diferencia entre entender un texto o no hacerlo. “Cuántas veces hemos visto que un poema, por ejemplo, adquiría de pronto sentido al escucharlo en boca de alguien, mientras que al leerlo en silencio apenas había sido comprendido”. “Y eso sin olvidar los rasgos emocionales que conlleva esa actividad”, insisten.

Con estos mimbres, claro, consideran que la lectura en voz alta es una herramienta importantísima en el fomento de la lectura en general. “A nuestro juicio es uno de los medios más eficaces, si no el que más, para estimular el deseo de leer. La voz de una lectora o un lector expertos presentando un libro, bien sea en las aulas, en los hogares o en las bibliotecas, despierta el deseo de leerlo. Los libros se hacen así atractivos y comprensibles. Es un modo además de darles un significado emocional”.

Además, sirve no solo para aquellas personas a las que les gusta leer, como forma de engancharse a algún libro en concreto. “La lectura en voz alta es inclusiva y puede contribuir a que quienes rechazan rotundamente la lectura participen en una experiencia lectora. No hay por qué excluir a los no lectores de los valores de la literatura, de modo que la lectura en voz alta de un texto puede ayudarles a sentirse implicados”.

Según las estadísticas a partir de los 15 años es cuando se vive la mayor deserción de lectoras y lectores. Hasta el punto que en la edad adulta la mitad de la población no abre un libro nunca. Una buena estrategia, precisamente, para reducir este desenganche bien podría pasar por la lectura en voz alta con chicas y chicas en estas edades.

“Contrariamente a lo que se suele pensar, también los adolescentes se sienten interesados por esa forma de relacionarse con los libros. La voz de un adulto puede ser la mejor manera de introducirlos en el mundo de la escritura literaria o filosófica”, aseguran estos dos expertos en el fomento de la lectura.

¿Y cómo elige uno los títulos? “Lo hacemos en función del grupo con el que vayamos a leer. Cada edad requiere un tipo diferente de libros. Por fortuna, hay libros o textos que pueden ser leídos a cualquier edad. Por ejemplo, los cuentos populares, los mitos clásicos o muchos álbumes ilustrados. Pero, en general, los libros que escogemos tienen en cuenta las características del grupo: edad, circunstancias, entorno, objetivo…”.

Además de la propia lectura, desde Entrelibros se fomenta la charla posterior, sobre lo leído.

¿Y después?

Y esta lectura en alto no debe quedarse en eso solo. Tanto para Juan como para Andrea, los momentos posteriores son muy relevantes.

“Para nosotros son tan valiosos como la lectura en sí misma. Nos parece que la potencial conversación que los textos pueden generar tiene una gran significación”. Más si se piensa que realizan su labor en centros educativos, pero también en bibliotecas o en centros penitenciarios u hospitales.

“Los libros hacen hablar y nosotros procuramos que las emociones, los pensamientos, los recuerdos o los deseos fluyan con naturalidad. Por eso la cuidamos tanto. Nos parece fundamental prestar atención a las respuestas que los oyentes puedan dar al texto escuchado”.

Algo similar a lo que se hace, por ejemplo, desde el proyecto de comunidades de aprendizaje y sus tertulias literarias dialógicas. Cada persona lee en su casa un fragmento de una obra clave de la literatura y, después, en la tertulia, cada una pon en común qué ha sentido, qué le ha parecido o recordado el texto en cuestión. En una conversación en la que nadie ha de llevar la razón, simplemente se habla de las realidades personales de cada cual.

“Nos parece más relevante hablar a partir del libro que hablar del libro mismo”, aseguran Juan y Andrea sobre las conversaciones que se desarrollan tras la lectura.

Y en este sentido, es importante la figura de la persona que lee en alto. ¿Alguna característica concreta? “Una lectora o un lector con sensibilidad sabe que la lectura en voz alta es un modo de relacionarse afectivamente con otras personas, sean niños, adolescentes o ancianos, y que por lo tanto tienen que mostrarse atentos, afables, cuidadosos, receptivos, comprometidos… A partir de un libro pueden aflorar mundos íntimos por lo que se requiere una gran delicadeza para que todos se sientan confiados y comprendidos”.

Así que ya saben, no dejen de leer a otras personas en voz alta, sea cual sea la edad que tenga. Y, por supuesto, busquen a alguien que les lea en alto a ustedes también.

Fotografía: Alejandra García / Entrelibros.

*Fuente: http://eldiariodelaeducacion.com/blog/2018/04/24/leer-en-voz-alta-herramienta-para-el-fomento-de-la-lectura/

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