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España: Uriarte, contra las actitudes “anti-evaluación Lomce”

España/23 de Octubre de 2017/Noticias de Álava

La consejera de Educación cree que la Lomce ha menoscabado el prestigio de las evaluaciones y confía en que el fin de las reválidas planteadas por Wert acabe con esta corriente de opinión.

 La consejera de Educación, Cristina Uriarte, está preocupada por algunas “actitudes anti-evaluación” que han surgido en parte de la escuela vasca tras la entrada en vigor de la Ley para la Mejora de la Calidad Educativa (Lomce). “Tengo que reconocer que me sorprende y me preocupa la evolución que está experimentando la percepción que en algunos sectores se está extendiendo en relación a las evaluaciones”, señaló Uriarte en la apertura en Donostia de las jornadas Evaluaciones a Gran Escala: el caso de PISA y otras evaluaciones de diagnóstico, organizadas por el Departamento de Educación y la Facultad de Educación, Filosofía y Antropología de la UPV/EHU.

 En este sentido, la titular vasca de Educación señaló que de un tiempo a esta parte “una corriente anti-evaluación o al menos tremendamente crítica con ellas, ha ganado un cierto protagonismo entre nosotros”. Prueba de la oposición a las evaluaciones que la Lomce y el proyecto Heziberri incluyen a mitad y final de Primaria y ESO es el boicot a estos exámenes que ha habido a lo largo de los tres últimos años, fundamentalmente en Primaria.

El Departamento de Educación intentó dilatar en el tiempo la aplicación de las evaluaciones que introduce la ley Wert al margen de los exámenes ordinarios y dio libertad a las direcciones de los centros para su realización o no puesto que estas pruebas no tienen efecto alguno en el expediente académico del alumnado. Prácticamente el 100% de las ikastolas no se ha sometido a estas pruebas los últimos años en respuesta a las directrices de Ikastolen Elkartea. En 2015 el plante a las evaluaciones de 3º y 6º de Primaria fue masivo, únicamente las realizaron 13 centros de Kristau Eskola y uno de la red pública, según Hezkuntza Plataformen Topagunea.

En paralelo, el Gabinete Uriarte encargó al Instituto Vasco de Evaluación e Investigación Educativa (ISEI-IVEI) el diseño de las pruebas exigidas desde Madrid bajo criterios vascos, tal y como establece el Currículum Vasco. Pero ni aún así, la medida logró calar en la comunidad educativa. El año pasado fue la prueba de fuego de las evaluaciones piloto diseñadas por el ISEI-IVEI para 4º de ESO y 6º de Primaria. Y un 30% de los 90 centros convocados boicoteó su realización.

Entonces Uriarte denunció “múltiples presiones” y “acoso” en ciertos centros y ayer se mostró segura de que la intención de quienes han tomado esa postura pública “no es la de perjudicar a la escuela vasca, pero lo cierto es que esa postura tiene sus consecuencias negativas”.

EVALUACIÓN VS REVÁLIDAS Además de por otros muchos factores, “la nueva ley ha sido muy perjudicial también para la visión que se tenía de las evaluaciones de diagnóstico, y en general para el conjunto de las evaluaciones” advirtió Uriarte, en referencia a la confusión que se ha creado entre el concepto de la evaluación y las reválidas que planteaba inicialmente la Lomce.

“Ha habido ocasiones en las que se han venido mezclando conceptos similares pero a la vez tan alejados entre sí como son una evaluación diagnóstica y una reválida”, señaló la consejera quien criticó que durante meses se ha reflejado el término “evaluación diagnóstica” como sinónimo de “reválida”, o viceversa. “Ahora, por suerte, y espero que de manera definitiva, las reválidas que inicialmente recogía la Lomce, están metidas en el cajón” dijo. Y así mostró su confianza en que “seamos capaces de recuperar el camino”.

No en vano, para Uriarte las evaluaciones juegan “ un papel primordial” para el sistema educativo, en especial para la implantación de los planes de mejora o para adoptar las medidas que redunden en la mejora de resultados y la innovación. “Evaluar y ser evaluados es uno de los elementos fundamentales ante cualquier deseo de mejora”, sostuvo. Uriarte incidió en que los diferentes tipos de evaluaciones, “sean externas o internas, definidas en Euskadi en base a nuestra realidad o confeccionada y dirigida por organismos internacionales, todas ellas tienen un valor” y son “complementarias” y transmiten datos valiosos para la mejora.

Fuente: http://www.noticiasdealava.com/2017/10/20/sociedad/uriarte-contra-las-actitudes-anti-evaluacion-lomce

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El responsable educativo de la OCDE: «España ha hecho muy poco para que la enseñanza sea atractiva»

Europa/España/16 Septiembre 2017/Fuente: El mundo 

Andreas Schleicher atribuye el bajo nivel de un tercio de los jóvenes españoles a «la falta de relevancia que ven los alumnos en la enseñanza»

«Los países más avanzados no han politizado la educación, han llegado a un consenso»

Andreas Schleicher, responsable educativo de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), ha insistido este miércoles en Madrid en la importancia de que las nuevas generaciones adquieran el mayor nivel de competencias educativas posible. «Quien no tiene una buena base educativa se queda en los márgenes de la sociedad«, ha advertido. Y ha atribuido a «la falta de relevancia que ven los alumnos en la enseñanza» el motivo por el que más de un tercio de los jóvenes españoles no haya logrado sacarse el título de Bachillerato.

El padre del famoso informe PISA ha desgranado, durante un desayuno informativo de Nueva Economía Fórum, los problemas que provocan que buena parte de los jóvenes españoles se queden estancados en niveles muy bajos de cualificación. En su opinión, «España ha hecho muy poco para que la enseñanza sea atractiva» y no ofrece a los alumnos «más opciones para aprender de forma distinta». Los críos se aburren en clase, en definitiva.

Lo que ocurre en las aulas españolas es que «las clases son todas iguales, con el mismo número de alumnos» y un sistema en el que todos aprenden al mismo ritmo centrado en la lección magistral y en repetir conceptos de memoria. «Los alumnos españoles son buenos memorizando, pero les cuesta resolver problemas complejos que requieren conectar conocimientos de distintas disciplinas. Ahora lo importante no es memorizar fórmulas ni ecuaciones, sino pensar como un matemático, entender las bases conceptuales de la materia. Hay que enseñar menos cosas pero con más profundidad«.

«¿Por qué España sale tan mal parada en PISA?», se ha preguntado. «Porque gran parte de lo que aprenden los alumnos es repetición del contenido de las asignaturas. No se trata de saber mucho de Biología o de Física, sino de saber pensar con la mente de un científico. PISA demuestra cuan difícil es para muchos jóvenes españoles ir más allá de fronteras de un solo campo de conocimiento, porque se les enseña a los alumnos asignaturas aisladas. En Japón, el profesor de Lengua trabaja con el de Matemáticas. Finlandia también ha empezado a impartir estos cursos multidisciplinares, esperando que los alumnos actúen como historiadores, filósofos o científicos», ha relatado.

Schleicher ha dado a entender que nuestro sistema educativo ha permanecido inamovible durante los últimos años: «Si en un supermercado entran 500 personas y se van 31 sin comprar nada, el supermercado cambia su estrategia, pero en las escuelas no cambia nada», ha manifestado, en alusión a España.

«Diversidad de itinerarios»

Y ha recomendado a la escuela española que «no divida tanto los contenidos por asignaturas y apueste por la «integración» de las materias y por la «diversidad de itinerarios, que es muy importante«, en alusión a las vías para facilitar el camino hacia la Formación Profesional. También ha planteado que «hay que cambiar los paradigmas pedagógicos, el método de instrucción, y empoderar a los docentes» con el fin de que estén «más conectados con el resto del mundo», como ocurre en otros países.

«Los profesores tienen que salir del aula y fijarse en lo que hacen otros profesores», ha recalcado. Y ha recordado, volviendo a hacer alusión a Japón, que en este país asiático los profesores tienen unas plataformas donde comparten sus experiencias y conocimientos y los directores les evalúan también por su capacidad de poner en común y ayudar a otros con sus destrezas.

«En Japón los profesores enseñan la mitad de horas que en España, pero trabajan más: 50 horas a la semana. ¿Y qué hacen? Visitan la clase de otro profesor, participan en concursos…», ha señalado.

Respecto al pacto de Estado por la Educación en el que trabajan los distintos grupos políticos, ha considerado que «es difícil» que se alcance, pero lo ha definido como «esencial». «Los países más avanzados no han politizado la educación, han llegado a un consenso», ha avisado.

¿Qué le parece que el Gobierno del PP haya suprimido las reválidas que él mismo creó? «Yo, personalmente, pienso que las reválidas son una parte muy importante de la educación. Es muy difícil mejorar algo que no puedes medir y estas pruebas envían un mensaje muy bueno a los chicos sobre lo que tienen que aprender y a los profesores sobre lo que tienen que enseñar. Pero no se pueden hacer las cosas improvisando de la noche a la mañana».

Fuente: http://www.elmundo.es/sociedad/2017/09/13/59b8f0a7e2704eca3f8b45a9.html

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Malgastar 645.955 euros en unas reválidas que deben ser boicoteadas

Agustín Moreno

El gobierno de la Comunidad de Madrid presidido por Cristina Cifuentes aprobó el 21 de marzo la contratación de un servicio de apoyo didáctico y técnico para la realización de las pruebas externas de 3º y 6º de primaria y de 4º de ESO. Las pruebas afectarán en Madrid a 180.000 alumnos y a 2.400 centros. Se trata de la externalización de la realización, tabulación, documentación y análisis de las evaluaciones finales que se empeñan en mantener. El coste de 645.955,20 euros supone más del doble de lo destinado a estas pruebas el curso pasado y permitiría, por ejemplo, la contratación de más de 30 profesores para mejorar la calidad educativa.

Hay que recordar que la comunidad educativa viene movilizándose desde hace tiempo contra estas pruebas que consagra la LOMCE. En concreto, el 26 de octubre de 2016 hubo una huelga general en la educación con un amplio seguimiento, y en noviembre se realizó otra huelga de estudiantes. Como resultado de ellas, y por su debilidad política, el gobierno dio marcha atrás a las reválidas. No fue una retirada completa, solo de sus efectos académicos, dónde se jugaban la titulación el alumnado de 4º de ESO y de 2º de Bachillerato. Pero se dejó en manos de las comunidades autónomas el desarrollo de pruebas en esos niveles.

La comunidad de Madrid ha ido siempre de kamikaze en los ataques a la escuela pública, a su privatización y a la realización de rankings de centros. En esta línea ha aprobado que la reválida de 4º de ESO se hará el 19 de mayo con carácter censal en todos los centros de Madrid capital, y de forma muestral en las otras cuatro áreas territoriales. Es la forma que tiene el PP de sostenella y no enmendalla. Mantienen una secuela de reválidas para volver a la idea original si retornan a la mayoría absoluta. Asusta pensar en el elevadísimo coste que tendría su generalización y los negocios-chollos derivados.

Los efectos negativos de estas reválidas son evidentes aunque no afecten a la titulación.

• Distorsionan el proceso de enseñanza-aprendizaje en los centros al ponerlos a competir. Desde marzo se han empezado a producir en algunos centros presiones de los equipos directivos sobre el profesorado. Quieren que se centren en la preparación de la reválida de 4º de ESO, obviando el programa que están obligados a dar en el tercer trimestre. Tratando de salvar el prurito del centro, corren el riesgo de convertirlos en academias preparadoras de las pruebas, algo sencillamente contrario a la calidad educativa.

• Sirven para elaborar rankings de centros que se utilizan en la lucha por el mercado del alumnado entre la doble red de centros (públicos y privados-concertados). En este sentido, no hay plenas garantías de que una empresa privada no acabe filtrando de manera selectiva las pruebas a centros amigos, a pesar de las cláusulas de confidencialidad que se puedan establecer. En ese supuesto, los resultados estarían contaminados.

• Estresan al profesorado, al alumnado y a sus familias, y una prueba hecha así no mide nada. Si acaso, las diferencias realmente existentes entre los centros. Éstas se deben más a un proceso de escolarización desequilibrado que potencia la administración educativa (zona única, concentración del alumnado con dificultades en los centros públicos), y al nivel de recursos invertidos. Por ejemplo, los centros del sur de Madrid no tendrán los mismos resultados que los de la zona norte; o los centros de “excelencia” y las secciones de los “bilingües que aquellos que el PP se empeña en convertir en guetos. Para este viaje no hacen falta alforjas.

La evaluación puede ser útil si tiene carácter formativo y no selectivo; si se evalúa todo el proceso de enseñanza-aprendizaje y se valoran los avances conseguidos y no solo el resultado final; si se analiza todo el sistema y no solo una parte y se tienen en cuenta las características socioeconómicas de cada centro; si sirve para aumenta la equidad y dar más recursos a los centros que más lo necesitan. Evidentemente, no es el caso ni en los fines ni en el procedimiento.

Así las cosas, no sería coherente que el alumnado que secundó masivamente las huelgas vaya a realizar las reválidas, ni que las familias que apoyaron esta iniciativa envíen ahora a sus hijos como corderos, ni que el profesorado que tantas veces salió a la calle contra la LOMCE participe en su aplicación. No olvidemos que seguimos dando la titulación de ESO en los centros. En Vallecas hemos empezado a debatirlo y lo tenemos bastante claro, lo hemos llevado a la Marea Verde y nos gustaría que el debate se generalice. Yo estoy esperando que los sindicatos me convoquen a participar en un boicot que debería ser generalizado contra unas pruebas que son una farsa y un despilfarro del dinero público.

Fuente del articulo: https://www.cuartopoder.es/ideas/2017/04/03/malgastar-645-955-euros-unas-revalidas-deben-boicoteadas/

Fuente de la imagen: https://www.cuartopoder.es/wp-content/uploads/2016/11/sindicato-estudiantes-LOMCE-26O.jpg

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España: Otra renuncia del Gobierno en contra de la Educación

España/20 abril 2017/Fuente: El Mundo

EL MINISTRO de Educación, Íñigo Méndez de Vigo, parece dispuesto a renunciar a las mínimas exigencias de calidad que contenía la Lomce, la ley de educación aprobada cuando el Gobierno del PP tenía mayoría absoluta, en aras de un mal entendido consenso que posibilite un pacto de Estado por la Educación.

La cadena de cesiones comenzó en noviembre pasado, cuando Méndez de Vigo aseguró que este año los alumnos de ESO y Bachillerato no tendrían que superar las reválidas y paralizó estas pruebas diseñadas para elevar el nivel de exigencia en las aulas hasta que se alcance el ansiado acuerdo nacional. Siguió hace apenas tres semanas, en el último monográfico educativo de la Comisión General de las Comunidades Autónomas celebrado en el Senado, cuando el ministro y portavoz del Gobierno ofreció a los líderes autonómicos un sistema educativo «flexible» que atienda a las diferencias territoriales, lo que se entendió como una voluntad de ceder más competencias educativas a las comunidades que se consideran perjudicadas por el Gobierno. Finalmente, según ha podido saber este periódico, en el borrador de Real Decreto que prepara el Ejecutivo se vuelve a atacar la línea de flotación de un proyecto educativo que quiso asentarse en el esfuerzo y la exigencia académica. Se trata de una nueva modificación de la Lomce que está siendo desmantelada por el Gobierno que la promulgó.

De manera insospechada, ya que en anteriores borradores no estaba contemplado, el Ejecutivo de Mariano Rajoy se muestra dispuesto a volver a lo que fijara la LOE, la ley aprobada en 2006 por el Gobierno de Rodríguez Zapatero, y que tantas veces fue criticado con razón por el Partido Popular. Es decir, que un alumno pueda conseguir el título de la ESO (que certifica la educación mínima y obligatoria) con dos asignaturas suspensas y una nota media inferior a un cinco sobre diez. De esta forma, podrán acceder al Bachillerato los estudiantes que no hayan logrado un nivel mínimo, lo que irá en detrimento no sólo de ellos mismos sino de todo el grupo. Sería inadmisible que el Gobierno terminara por acceder a esta petición, puesto que un pacto por la Educación no tiene valor por sí mismo si no están garantizados los dos pilares indispensables sobre los que debe asentarse un sistema educativo moderno: la calidad formativa de los alumnos, que serán los ciudadanos del futuro, y una cualificación adecuada para unos trabajadores que tendrán que enfrentarse a los exigentes retos de un mundo globalizado.

Por desgracia, la Educación en España no recibe la consideración de cuestión de Estado ni por parte del Gobierno central ni de los gobiernos autonómicos. Todos, en un acto de irresponsabilidad política de graves consecuencias, prefieren defender sus intereses electorales a los de todo el país, que reclama que se apruebe por fin una ley que garantice su continuidad durante varias generaciones y nos saque de una situación de atraso con respecto a los países de nuestro entorno. En este caso, parece que al Gobierno más que la calidad educativa lo que le preocupa es que no siga aumentando la tasa de abandono escolar, razón por la cual prefiere bajar el nivel. Pero para maquillar esas vergonzosas cifras no es necesario hipotecar el futuro de los jóvenes sino abordar de frente una cuestión en la que todos nos jugamos mucho.

Fuente: http://www.elmundo.es/opinion/2017/04/18/58f50315468aeb02188b45b0.html

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España: PP, PSOE, C’s y Podemos revelan las claves del futuro pacto de Estado por la Educación

España/19 de Diciembre de 2016/Madridiario

El pasado 1 de diciembre, el Congreso de los Diputados aprobó la creación de la Subcomisión para el pacto de Estado social y político por la Educación, con el objetivo de elaborar una nueva ley educativa que sustituya a la polémica LOMCE. La Subsomisión tiene una tarea se antoja casi una hazaña: elaborar un pacto educativo que sirva de base para una nueva ley orgánica. ¿Cuáles deben ser las claves del pacto educativo?, ¿será posible conseguir un texto de consenso teniendo en cuenta los vetos y líneas rojas de los partidos?, ¿se redactará una ley que dure más que el Gobierno que la ha impulsado?, ¿se tendrá en cuenta a la comunidad educativa? Diariocrítico ha buscado respuesta a estas preguntas entre los portavoces de los grandes partidos que forman parte de la Subcomisión.

Sandra Moneo (PP), Marta Martín (Ciudadanos), Joan Mena (Unidos Podemos-En Comú Podem-En Marea) y Manuel Cruz (PSOE), han explicado a este digital las posturas de las que parten y cómo esperan que se articule el acuerdo. ¿Cuáles serán las claves del pacto educativo?

«Para nosotros el elemento fundamental es la financiación. Acabamos de presentar una proposición no de ley, con el voto favorable del PSOE, para fijar un horizonte de inversión que alcance el 7% del PIB, ya que una ley sin recursos económicos, será papel mojado. También hay que corregir los privilegios de las escuelas privadas y concertadas, porque nuestro ordenamiento jurídico dice que el concierto es un elemento subsidiario, pero en realidad, nuestro concierto es de los más altos de la Unión Europea; y nosotros queremos que el dinero público se destine a la escuela pública. El tercer elemento es la recuperación de la democracia y participación para no convertir a la escuela en un instrumento jerárquico, que es lo que hace la LOMCE y lo que quiere el PP», ha explicado el diputado de En Comú Podem, Joan Mena.

Para el socialista Manuel Cruz, el pacto educativo debe “ordenar la educación, que sido desordenada por la LOMCE. Debe recuperar los mejores elementos de las leyes anteriores, es decir, una ley de bases que funda las anteriores”.

La diputada de Ciudadanos, Marta Martín, ha expresado que “lo primero y lo esencial es que queremos que, por primera vez en 40 años, en un contexto constructivo y riguroso, se hable de educación y no se utilice este tema de manera frentista. Que con las aportaciones de la comunidad educativa (padres, profesores, alumnos) y expertos, y con la mejor disposición de todas las fuerzas políticas abordemos de una vez por todas problemas importantes: el alto abandono escolar temprano que tenemos, las diferencias e inequidades educativas (por motivos de ubicación territorial, contexto sociocultural o características individuales de los alumnos), el grave problema de la profesión docente (en el acceso, la estabilidad y la carrera laboral), la mejora de la convivencia y el problema del acoso, la necesidad de formar mejor a nuestros jóvenes en competencias necesarias para la sociedad de la información; la cuestión de los tiempos, calendarios y cargas lectivas y su relación no sólo con la formación de nuestros niños, sino también de su bienestar personal. En cualquier caso, tendremos que consensuar los temas a tratar”.

“Nosotros vamos a trabajar intensamente con el compromiso de llegar a un gran acuerdo que permita seguir avanzado en mejora sistema educativo y atajar sus deficiencias; una de estas deficiencias es la diferencia entre Comunidades Autónomas. Para nosotros también es fundamental que cualquier mejora del sistema pase por la mejora de la situación de los profesores”, ha indicado la diputada ‘popular’, Sandra Moneo.

Pese a que todos comparten la premisa de que será difícil llegar a un consenso, teniendo en cuenta la fragmentación del Parlamento, se han mostrado optimistas al respecto, con excepción del portavoz de Unidos Podemos-En Comú Podem- En Marea, que ha expresado el “miedo a que el pacto se convierta en mero maquillaje de las políticas educativas del PP, y termine siendo una triple alianza institucional entre PP-PSOE-C´s”.

– Diferencias y semejanzas con la LOMCE

En cuanto a los aspectos diferentes y similares con la LOMCE, cada partido tiene una posición. Así, para Unidos Podemos la LOMCE “es una carrera de obstáculos que va expulsando estudiantes”, y considera que si el PP realmente tiene pensado aprobar una nueva ley, “debe derogar inmediatamente la LOMCE”. El PSOE considera que hay “aspectos conflictivos como el modo de organizar y gestionar los centros, la relación entre la escuela pública y concertada, el tema de la laicidad, o la reversión de los recortes y la inversión en Educación, que deben ser corregidos”. No obstante, Cruz ha manifestado que “cualquier ley recoge siempre elementos de las anteriores”.

“Creo que si empezamos la Subcomisión jugando a las diferencias y similitudes poco avanzaremos. Tenemos que conseguir que la ley que salga adelante, derivada del informe que realice la subcomisión, sea una ley de todos. Habrá cosas que se pueden rescatar de las siete leyes anteriores (si han funcionado), y tendrá que haber también aportaciones genuinas y pertinentes nuevas”, según Marta Martín.

Para el PP, “el marco de la LOMCE se debe debatir en la subcomisión”, y ha resaltado que “hay que buscar el pacto mediante un debate serio, riguroso y con altura de miras. Hay aspectos que han funcionado con las diferentes leyes, por lo que debemos analizar esos aspectos y escuchar a la comunidad educativa”.

– Reivindicaciones de la comunidad educativa

Días después de que se aprobara la formación de esta Subcomisión, la Plataforma Estatal por la Escuela Pública (que aglutina voces de estudiantes, padres, profesores y sindicatos), remitió un comunicado a este digital en el que manifestaba su preocupación por el desarrollo de este pacto, y advertía a los partidos de que si su voz no es escuchada, volverán a las huelgas y movilizaciones a partir de 2017.

Para esta plataforma, hay una serie de reclamaciones que deberían quedar recogidas en el nuevo texto educativo como: la retirada definitiva de la LOMCE, la reversión de los recortes, la recuperación de un sistema de becas que garantice la igualdad de oportunidades y el freno a la privatización del sistema educativo. Ante estas reivindicaciones, los partidos mantienen posturas distintas, aunque comparten, según han asegurado, la voluntad de escuchar a la comunidad educativa y expertos.

“Somos conscientes del rechazo a la LOMCE, pero recuerdo que algunas medidas que recoge, ya las contemplaba la LOE del PSOE. Yo no puedo estar de acuerdo con algunas de las ideas que plantea la plataforma, por ejemplo, no se puede hablar de privatización de la Educación cuando la escuela pública representa el 80%. Hay que aparcar los planteamientos personalistas y ser sensatos a la hora de ver qué ofrecemos al sistema y qué medidas tomamos. El PP ha demostrado que el Gobierno es el primero en mover ficha, y se demostró con la retirada de las evaluaciones”, (más conocidas como reválidas), ha manifestado Sandra Moneo.

El diputado socialista Manuel Cruz ha indicado que espera que se contemplen estas reclamaciones, aunque ha insistido en que si lo que se quiere conseguir es un pacto de Estado, “ninguno de los actores podrá conseguir su programa de máximos, por lo que habrá que buscar los puntos de consenso”.

“Creo que la comunidad educativa es muy amplia y, por nuestra parte, se analizarán y contemplarán las propuestas constructivas que aporte, no sólo esta plataforma, sino todas aquellas que puedan contribuir a mejorar la educación de este país”, ha señalado Marta Martín.

PP, PSOE y Ciudadanos han resaltado que no se ha invitado a la comunidad educativa a la Subcomisión porque su creación responde a una iniciativa parlamentaria, y por tanto, es labor de los diputados, aunque han aseverado que serán escuchadas las diferentes propuestas e iniciativas. Por el contrario, Unidos Podemos ha dicho tener la “sensación de que se hará una operación de maquillaje para que parezca que se tiene en cuenta a la comunidad educativa cuando no es así. Nosotros queremos que sean un agente más en la negociación y hablar de tú a tú con ellos, pero el PP y Ciudadanos defienden intereses elitistas, desprecian lo público, y ven en la Educación una vía de negocio vía privatización. Además, es posible que las reclamaciones de la comunidad educativa no aparezcan en el texto, por lo que tendremos una LOMCE 2 que será rechazada por la sociedad».

Ante la ‘amenaza’ de nuevas huelgas y movilizaciones, las posiciones varían según cada partido. Mientras la confluencia de Unidos Podemos ha mostrado su respaldo a estas convocatorias, si se producen, el PSOE ha indicado que “si el motivo de la huelga es que no se escucha a la comunidad educativa, no habrá huelga”.

“Nosotros respetamos el derecho a la huelga, aunque la verdad es que las imposiciones y apriorismos no nos parecen la mejor manera de construir cosas. Ciudadanos es más de trabajo y de ideas que de huelgas: qué le vamos a hacer, creemos que se consigue más con un espíritu constructivo que de queja, pero cada uno es libre de apuntarse a la opción que quiera”.

En la misma línea, Sandra Moneo, que no ha querido entrar a valorar la posible huelga, ha reiterado que “la comunidad educativa tendrá la oportunidad de ser escuchada en la Subcomisión”. “Creo que, cada uno, a la hora de lograr mejorar el sistema educativo tiene sus propias responsabilidades. Cada cual sabrá lo que hace, pero nosotros preferimos buscar acuerdos y acercar posturas”.

La Educación se ha convertido en una de las prioridades de esta legislatura que acaba de arrancar, y todo apunta a que el camino hacia una nueva ley será largo y no exento de polémicas. Tras contactar con los portavoces de los cuatro grandes partidos, las conclusiones principales quizás sean, por un lado, la voluntad (aparente) de elaborar un texto de consenso que cuente con la participación de la comunidad educativa, y, por otro, que sea una ley que ‘sobreviva’ a los cambios de Gobierno.

Fuente: http://www.madridiario.es/439791/claves-del-futuro-pacto-de-estado-por-la-educacion

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España: El Congreso crea la subcomisión del pacto educativo para “restaurar las grietas del sistema”

España/05 de Diciembre de 2016/El Español

Los grupos políticos tienen seis meses para elaborar un texto que sirva de base para crear una nueva ley educativa.

Pistoletazo de salida de la carrera de fondo para lograr el pacto nacional por la Educación. El Congreso de los Diputados ha aprobado, gracias a los votos a favor de PP, PSOE y Ciudadanos, la creación de una subcomisión para abordar la situación educativa en España y elaborar -en seis meses- un informe que sirva como base para una nueva ley que “sustituya” a la LOMCE y sirva para “restaurar las grietas del sistema”.

“Es un día muy importante para la Educación en este país, ya que la creación de esta subcomisión es algo único que no se ha conseguido nunca en 40 años y que puede abrir una nueva etapa política y social”, ha explicado la portavoz de Ciudadanos en materia educativa, Marta Martín. Además, la diputada ha augurado que en esta mesa de trabajo se “verá el éxito o el fracaso de una nueva era política”.

En la misma línea, la popular Sandra Moneo ha afirmado que esta luz verdea la subcomisión supone “un punto de partida tremendamente importante” al estar cargada de una “gran responsabilidad”: “Fuera del Congreso hay una sociedad que espera de nosotros un gran pacto”.

Más crítico ha sido el socialista Manuel Cruz, quien -pese a felicitarse de haber logrado echar a rodar esta órgano parlamentario- ha explicado “la necesidad” de “restaurar las grietas del sistema educativo”. Unas fisuras agravadas “durante los últimos años” de mayoría absoluta del Partido Popular en el Gobierno, donde los recortes en materia educativa “han incidido en la igualdad de oportunidades”. “Es necesario restaurar en el mínimo tiempo posible todo el daño hecho”, ha pedido.

Esta buena sintonía ha sido interrumpida por Podemos, desde donde pretendían incorporar una enmienda al documento de creación de la subcomisión para impedir que en este se detallase que es necesario cumplir los objetivos europeos 2020 por consideralos que “mercantilizan” la Educación. Ante ello, PP, PSOE y Ciudadanos le han echado en cara al partido de Iglesias de no participar en la negociación y de querer incluir reclamaciones de «última hora».

PODEMOS, LA NOTA DISCORDANTE

Pese a esta oposición de última hora, Javier Sánchez si confirmó a EL ESPAÑOL el pasado viernes que sí se unirían desde Unidos Podemos a la petición conjunta. Finalmente, se han abstenido en la votación junto a nacionalistas y grupo mixto.

Durante el debate de este jueves en el Cámara Baja ha tomado la palabra como portavoz de Unidos Podemos, Joan Mena quien ha anunciado que no participarán en un lifting de la LOMCE. Además, ha pedido que participe toda la comunidad educativa en el proceso para que no suceda como con la norma educativa vigente, “que ya nació muerta”: “Hay que sacar el pacto del Congreso para no hacer una LOMCE II”.

Por su parte, los partidos nacionalistas han demandado que “se respeten” las competencias de las comunidades autónomas en materia educativa. “La nueva norma debe proporcionar un alto grado de autonomía para que cada región desarrolle su currículo”, han exigido desde el PNV.

SEIS MESES: TIC…TAC

Según el texto aprobado, esta subcomisión elaborará en el plazo de seis meses un informe sobre el estado y situación del sistema educativo español que contenga un diagnóstico con unas propuestas y unas conclusiones que serán recogidas para la elaboración de un gran pacto de Estado “para alcanzar los objetivos educativos europeos recogidos en la Estrategia Educación y Formación 2020 de la Unión Europea”.

Dicho pacto, prosigue el documento, servirá de base para que el Gobierno elabore un proyecto de Ley Básica de Educación, que “sustituya la legislación vigente y que nazca con vocación de estabilidad a partir de un amplio acuerdo parlamentario y social”. Así, como recoge el decreto que llevará Méndez de Vigo próximamente al Consejo de Ministros, se suspenderá el calendario de implantación de la LOMCE en todos aquellos aspectos que no han entrado en vigor. Es decir, las ya enterradas reválidas.

Para la elaboración del informe se llevarán a cabo “cuantas comparecencias sean necesarias” para el adecuado desarrollo de sus trabajos: “Incluidas las de los representantes de las administraciones educativas”. Asimismo, podrán comparecer representantes de la comunidad educativa, expertos nacionales e internacionales, organizaciones sociales, asociaciones educativas, sindicatos, colectivos o plataformas educativas y representantes de las sociedades científicas y culturales del país.

Fuente: http://www.elespanol.com/espana/sociedad/20161201/174982762_0.html

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¿Cómo será al final el examen que sustituye la Selectividad?

01 de diciembre de 2016/Fuente: el mundo

Las reválidas ya no son reválidas, pero, aún así, los 700.000 alumnos que este curso están en 4º de la ESO (15 y 16 años) y 2º de Bachillerato (17 y 18 años) tendrán que hacer un examen bastante largo el próximo mes de junio. ¿Qué entra? ¿Para qué sirve? ¿Cómo se va a corregir? Éstos son los últimos cambios que han sufrido estas evaluaciones:

¿Habrá reválidas este curso?

Los alumnos de 4º de la ESO y 2º de Bachillerato sí tendrán exámenes a final de este curso, pero, en puridad, no pueden considerarse reválidas porque por el camino han ido perdiendo esta condición. No hay que aprobar ninguna de las dos pruebas para conseguir el título ni para seguir estudiando, como se había previsto en un principio. La de la ESO ni siquiera va a ser realizada por todos los alumnos, porque es muestral. Y la de Bachillerato, en realidad, es prácticamente igual a la antigua Prueba de Acceso a la Universidad (PAU). Sólo se diferencia en que hay que examinarse obligatoriamente de dos asignaturas más (aunque sólo cuenta la nota de cuatro de ellas) y en que hay menos posibilidad que antes a la hora de escoger las materias.

¿Han desaparecido para siempre las reválidas?

No y sí. El Gobierno, en su real decreto ley, ha fijado una moratoria para las reválidas, que el PP ha aceptado en el Congreso de los Diputados que dure todo el tiempo que se tarde en alcanzar el Pacto de Estado de Educación y entrar en vigor una nueva ley educativa. En teoría, el Pacto debe estar listo en un plazo de seis meses, pero aprobar una nueva ley orgánica se prolongará, por lo menos, durante un año. Así que, según lo acordado hasta ahora, todo apunta a que tampoco habrá reválidas el curso que viene. Esto podría cambiar si se convocan elecciones anticipadas y el PP gana con una mayoría más holgada. Entonces tendría la fuerza suficiente para echar por tierra todo lo negociado. No obstante, parece poco probable que lo haga, después del revuelo que se ha armado y los errores que ha cometido con estas pruebas. Lo más sensato es que las reválidas se queden guardadas en el fondo más remoto del cajón del PP durante una buena temporada.

¿Qué entra en la prueba que sustituye a la Selectividad?

Inicialmente iban a ser ocho exámenes de ocho asignaturas pero ahora sólo habrá que hacer seis exámenes. De esos seis exámenes, contarán sólo cuatro materias para entrar en la universidad: Historia de España, Lengua Castellana y Literatura II, Primera Lengua Extranjera II y, según la modalidad, Matemáticas II o Latín II o Matemáticas Aplicadas a las Ciencias Sociales II o Fundamentos del Arte II. Las otras dos asignaturas, a escoger entre las troncales de la opción, servirán para subir nota (de 10 a 14 puntos), como ocurría con la PAU. Al final, entrarán sólo materias de 2º de Bachillerato, no de 1º y 2º, como se había contemplado antes.

¿Qué entra en la prueba de la ESO?

Son seis exámenes, en vez de los siete inicialmente planteados: las cuatro troncales Geografía e Historia, Lengua y Literatura, Matemáticas y Lengua Extranjera, así como dos troncales de opción a elección del alumno.

¿Habrá una prueba oral?

El examen de Lengua Extranjera contemplaba una prueba oral (de la que iba a depender el 40% de la nota), pero fuentes educativas la descartan por las dificultades de hacerla en la práctica. Tampoco es probable que vaya a haber preguntas tipo test. Los rectores explican que finalmente el Gobierno ha dejado esta decisión en manos de las comunidades autónomas, que son muy reacias a plantear este tipo de preguntas.¿Cuándo serán estas evaluaciones?En junio y, en convocatoria extraordinaria, en septiembre.

¿Cuánto durará cada examen?

Según la orden ministerial que se analizará mañana en el Consejo Escolar del Estado, y que puede sufrir más cambios de última hora, cada una de las pruebas de la ESO durará 60 minutos con un descanso entre cada prueba de, como mínimo, 15 minutos. Cada una de las pruebas de Bachillerato tendrá una duración de 90 minutos con un descanso de al menos 20 minutos. Las evaluaciones se podrán hacer a lo largo de un máximo de cuatro días; cinco, en las comunidades autónomas con lengua cooficial

.¿Con qué nota se aprueba?

En la práctica, sacando un 4 en la evaluación de Bachillerato el alumno podrá entrar en la universidad. Esto ocurría así ahora, pero en los borradores iniciales el Ministerio de Educación exigía un 5. En la nota final para el acceso a los estudios universitarios pesará un 60% la calificación de Bachillerato y otro 40% el examen. En la ESO, el examen no tiene efectos académicos, pero habrá nota para hacer diagnóstico y será la media de todas las materias expresadas en una escala de 1 a 10. No hay cero. Aunque el alumno deje el examen en blanco, sacará un 1.¿Habrá ránkings?El Ministerio se ha comprometido a «no publicar ránkings» en ninguna de las dos pruebas, pero no concreta cómo va a evitar que las comunidades autónomas, que tendrán todos los datos, los hagan públicos.

Fuente: http://www.elmundo.es/sociedad/2016/11/28/583c3112e5fdeaf4648b45f1.html

Imagen: e01-elmundo.uecdn.es/assets/multimedia/imagenes/2016/11/28/14803397127458.jpg

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