Macri, Vidal, Cornejo, mienten para atacar la educación pública gratuita, laica y científica, para responsabilizar a los docentes y atacar los derechos de los trabajadores de la educación.
Por Virginia Pescarmona @virpes – maestra de Maipú
Con la cuarta semana en curso de paros y movilizaciones masivas de los docentes de la provincia de Buenos Aires, la gobernadora Vidal redobla las provocaciones. Propuso, otra vez, el 19 % en 3 cuotas y un ítem de presentismo.
Ya en el marco del Consejo Federal de Educación, todos los gobernadores, sean del PRO, Cambiemos, UCR o el PFV vienen firmando las intenciones de incorporar al salario docente ítems de productividad y presentismo. Quieren nacionalizar el modelo mendocino de atacar a los docentes.
Pero en Mendoza seguimos diciendo No al Ítem Aula porque ataca los derechos de los trabajadores y trabajadoras de la educación. Porque es un ataque, en particular, a las mujeres trabajadoras de la educación. Es un Ítem extorsivo y profundamente antihuelga. El Ítem “jaula” pone en riesgo la salud de las trabajadoras de la educación y sus familias.
Mientras nuestros sueldos no cubren ni el 40% de la canasta básica, pretenden que vayamos a trabajar enfermas. Como no alcanza, han impuesto la necesidad de trabajar doble turno y no faltar un solo día en el mes, para, incluso muchas veces, no poder llegar a fin de mes. El “ítem aula” en Mendoza viola los derechos laborales conquistados en la Ley Provincial 5811 que establece el régimen de licencias de los trabajadores de la educación.
El discurso y la realidad
Un dato curioso: en los primeros meses de aplicación del ítem Aula (julio y septiembre de 2016) en toda la provincia no hubo licencias por fallecimientos de familiares, por matrimonio, accidente de trabajo y cambio de funciones. ¿Es que a los docentes les dejó de pasar estos hechos de la vida? No.
El miedo a los descuentos compulsivos y abultados es una presión enorme sobre la cotidianeidad de los trabajadores y las trabajadoras de la educación, pero, y en última instancia, un docente que necesita el día porque tiene un hijo enfermo, porque está enfermo, porque ha sufrido alguna situación que lo amerita, termina faltando igual, como cualquier otro trabajador. Es así que en el transcurso del 2016, terminó habiendo más licencias en el tercer trimestre, que en el segundo y el primero. Por lo tanto, la DGE y Correas/Cornejo: mienten. “Durante el tercer trimestre de 2016 hubo 515.632 días de licencia, contra 442.226 del segundo trimestre y 439.239 del primero” . ¿Qué cambió?…las razones que se denuncian, escondiendo las verdaderas dolencias que sufrimos día a día, especialmente las trabajadoras de la educación.
El presentismo es un ataque, en particular a las mujeres
La larga cadena de maltratos hacia un sector, donde la mayoría son mujeres, la pretenden esconder con estos ítems. Mujeres trabajadoras que tienen que esconder dolencias propias, o de sus hijos para no perder un «incentivo» que representa un 10 % de su sueldo. Es discriminatorio hacia las mujeres, que en su mayoría estamos a cargo del cuidado de niños e incluso mayores. Festejan que bajaron el nivel de ausentismo: pero lo que ha bajado son las denuncias por violencia de género.
De conjunto es un claro ataque a las mujeres, trabajadoras la mayoría en la educación.
¿La culpa de la crisis educativa la tiene la docencia?
Con los resultados del cuestionado “Operativo Aprender” en la mano, el gobierno nacional, los gobiernos provinciales, y todos sus funcionarios y asesores pretenden profundizar el discurso que responsabiliza de la llamada calidad educativa a los docentes, poniendo todo el énfasis en la asistencia. No es un discurso nuevo, y ya el mote de “vagos” se impuso con el gobierno anterior.
Pero van por más…y la política es atacar a los trabajadores. En un país con una estructura laboral de altísimo porcentaje de precarización, tercerización e inestabilidad no pueden permitir que uno de los sectores con más consenso social y extensión nacional pueda darse el lujo de conservar esos derechos. Por eso nos atacan. Si nos derrotan a nosotras, las trabajadoras de la educación, los ataques sobre el resto de los trabajadores: con despidos, recortes salariales y pérdidas de derechos serán aún más duros.
Los maestros que luchan por la educación pública todos los días, que la sostienen con su esfuerzo, dentro y fuera de la escuela, que ponen todo de sí, el cuerpo, plata de su bolsillos, horas y horas extras, son el blanco principal de sus ataques. Para poder seguir atacando la educación pública nos quieren disciplinar económicamente y dicen que el modelo mendocino, para eso, es exitoso.
El argumento central del gobierno de Cornejo es que su plan ha tenido éxito porque bajó el ausentismo. Sin datos científicos, ni cuantitativos ni cualitativos, más bien todo lo contrario, quieren esconder una realidad: la extorsión funcionó a medias y los docentes tienen que ir a trabajar enfermos. La clave del discurso de Cambiemos es imponer una idea: «pobres niños sin maestros».
Pero lo que hay no son pobres niños sin maestros…si no niños y maestros pobres y maltratados.
En Mendoza, nada cambió con Cambiemos. Los pobres en Mendoza alcanzan el 33,5% de la población. Pero estos datos son una triste realidad concreta en cada escuela, ya que indican que 1 cada 3 niños son pobres. No hace falta mucha lucidez académica para darse cuenta que con hambre, falta de todo, que hay situaciones conflictivas en los hogares que se reproducen en la escuela, que hay niños que trabajan….y que con esta realidad…no es fácil aprender. La degradación persistente de las condiciones materiales de la educación y las condiciones de las familias son escondidas y el gobierno pretende responsabilizar a maestros y profesores. Nada nuevo.
No al ítem Aula en Mendoza y el país
Ahora quieren exportar el modelo de ataque a los trabajadores a todo el país. Esta modalidad de presentismo y productividad, que el gobernador Cornejo impuso en Mendoza, ya demostró su mecanismo extorsivo, atacando los derechos laborales y la educación pública.
Si quieren transformar a Mendoza en un gran laboratorio antiobrero, con Ítem Aula o el despido persecutorio por razones políticas y gremiales, de Paola Vignoni, nosotros tenemos que responder contundentemente. Hay que enfrentar la idea de «productividad» en la educación, la imposición del pensamiento único y la naturalización de la precariedad y el ajuste. Ante este avance de los gobiernos ajustadores, cada día es más urgente que la CTERA convoque a un paro activo nacional, para enfrentar este ataque que quieren imponer al conjunto de los trabajadores de la educación.
Hay que seguir enfrentando estos ataques en las escuelas y calles. En Mendoza seguimos levantando nuestra voz y el reclamo de No al Ítem Aula.
Fuente: http://www.laizquierdadiario.com/Atacar-a-los-docentes-es-atacar-la-educacion-publica