La incomunicación en los medios hegemónicos de comunicación

Por Adolfo Pérez Esquivel

Frente a la concentración del poder informativo nacieron las redes comunitarias en la resistencia y rebeldía que hacen “caminar la palabra” expresan su voz que recrea la vida, son valiosas en su dinámica y capacidad cultural y resistencia a la imposición del “pensamiento único”.

Por suerte la opinión pública todavía
no se ha dado cuenta de que opina
lo que quiere la opinión privada
-(Quino)

Tratar sobre los medios hegemónicos de comunicación es un tema complicado y conflictivo, quien lo intenta se mete en un laberinto habitado por la serpiente de dos cabezas, mito o realidad que aparece en los tiempos pasados y presentes desde los antiguos arios de la India, en las culturas precolombinas y en la civilización Chaco-Santiagueña, como en otras civilizaciones que se interrelacionaron a través de migraciones, historias y mitos.

La humanidad camina entre luchas y esperanzas, buscando construir sociedades más justas y fraternas, los desafíos para alcanzarlo exigen compromiso, unidad en la diversidad y resistencia a la opresión, la creatividad de generar nuevos paradigmas de vida; Leopoldo Marechal decía: “·estamos sumergidos en un laberinto y hay que luchar y saber que del laberinto se sale por arriba”, es el desafío de los pueblos.

Los avances tecnológicos y científicos aportan a la vida y desarrollo la capacidad de dar lo mejor y lo peor. Las tecnologías provocaron la aceleración del tiempo y fagocitaron a las generaciones sometidas a su dominación y dependencia, la máquina es como el cáncer de la vida moderna. Albert Einstein quien preveía lo que se avecinaba y el impacto de la aceleración del tiempo y avances tecnológicos sobre la población, se preguntaba si ese día que tanto temía finalmente llegaría y dijo: “Tengo miedo del día que la tecnología vaya a sobrepasar a la interacción humana. El mundo será una generación de idiotas”. La pregunta es, ¿si ese día llegó?

R. Panikkar en “Técnica y Tiempo” señala que: “La técnica hace posible pensar a una velocidad que ningún ser humano es hoy capaz de lograr. Pero, cuando se pasa de una determinada velocidad límite, cuando se franquea la “barrera humana”, ¿no podría producirse una cierta mutación, una cierta ruptura que nos hiciera cambiar de plan? La aceleración del tiempo lleva a profundizar las culturas del descarte, donde una noticia actual a los tres minutos es vieja y la próxima noticia envejece con la misma rapidez; vivimos en el torbellino del presente sometidos en gran parte por los medios hegemónicos que en lugar de comunicar, controlan la información incomunicando y manipulando a la población para imponer el “pensamiento único” que nos repiten constantemente, son los poderes de quienes controlan la comunicación y el mercado, dónde nada hay fuera de esos límites, sólo el abismo. “Con machaconería ideológica llegaron a construir lo que los teóricos hoy llaman “el círculo de la razón”, porque abarca el pensamiento único, el único que se puede pensar, (I. Ramonet), estamos viviendo una etapa totalitaria y aparece de muchas formas en el tiempo como la serpiente de dos cabezas.

En varias culturas milenarias la serpiente bicéfala es un signo cósmico, le rendían culto en el antiguo Egipto. En arqueología comparada existe una interrelación entre los diversos continentes y culturas; podemos verlo en Tiahuanaco en la Puerta del Sol, -INTI- representado sosteniendo en sus manos las serpientes bicéfalas. En la pirámide de Teotihuacán, los Mayas rendían culto al Dios Quetzalcoalt, la serpiente emplumada que representa la vida, el cosmos y la fecundidad, en la cultura incaica que llega hasta el norte argentino en la civilización Chaco-Santiagueña, la serpiente bicéfala es representada en las urnas funerarias y cerámicas.

El libro sagrado del Génesis, nos señala cómo la serpiente incita y convence con la palabra a Eva y Adán, a comer el fruto del árbol prohibido del conocimiento del bien y del mal.

La serpiente en algunas culturas es un signo maléfico, según su giro y dirección, como la cruz gamada o svástica que se apropia y utiliza el nazismo, son dos serpientes bicéfalas que se entrecruzan y marcan los caminos del poder totalitario y las terribles consecuencias de guerras, holocaustos, terror y muerte que sufrió la humanidad…y la serpiente utilizó la “palabra” para lograr su objetivo.

Estoy volviendo a leer “Cánticos Cósmico” de Ernesto Cardenal un hermano de caminada por América Latina -Abya Yala- quien en su Cantiga 2 dice: “En el principio/-antes del espacio-tiempo-/Era la palabra / Todo lo que es pues es verdad / Poema. /Las cosas existen en forma de palabra…/Era la palabra (Palabra amorosa.)/Misterio y a la vez expresión de ese misterio./El que es y a la vez expresa lo que es./“Cuando en el principio no había todavía nadie/Él creó las palabras (naikito)/Y nos la dio, así como la yuca…” Primero fue el Verbo…”-

El ser humano dispone de su libre albedrio, Sartre dice que: “uno está condenado a su libertad”, vive la angustia existencial y la soberbia que todo depende de sí mismo, olvidándose de nosotros y nosotras y saber que la libertad comienza por el respeto ajeno.

Esta pequeña introducción sobre la palabra, nos lleva a profundizar, ver y recorrer los laberintos de los medios de comunicación, los valores y la ética, la energía de la palabra y no olvidar que con una palabra podemos amar y con una palabra podemos destruir y provocar tanto daño como un arma. Como dice Cardenal- “las cosas existen en forma de palabra…”

Sabemos que ningún medio de comunicación es aséptico, tienen sus intereses, ideologías de diversos signos; su misión es informar en la diversidad y riqueza cultural, estar al servicio de la Verdad, de valores y pertenencia de sus pueblos.

Gandhi decía que: La Verdad es el encuentro con Dios. En muchos medios hegemónicos están muy lejos de Dios y muy cerca de la serpiente y su veneno.

Frente a la concentración del poder informativo nacieron las redes comunitarias en la resistencia y rebeldía que hacen “caminar la palabra” expresan su voz que recrea la vida, son valiosas en su dinámica y capacidad cultural y resistencia a la imposición del “pensamiento único”. Es una lucha permanente y desigual al accionar de la serpiente con su carga de veneno y odio, tergiversando y manipulando la palabra, anteponiendo sus intereses políticos y económicos, por sobre los derechos de los pueblos, que luchan por alcanzar su liberación y sacudirse de la esclavitud del sistema de dominación, de la pobreza y la explotación.

La suspensión de conciencia

El tema que voy a tratar no se agota en esta nota, simplemente es un pequeño esbozo necesario para conocer y profundizar los mecanismos de acción sicosocial utilizados en tiempos de guerra y en tiempos de paz por los ejércitos, como en los medios de comunicación utilizados por dirigentes políticos para imponer la acción sicológica en personas y sociedades a fin de lograr “la suspensión de conciencia”, a lo que llamo el “monocultivo de las mentes”, con los tóxicos de la propaganda y la palabra devaluada, semejante a la lengua bífida de la serpiente.

Hay mecanismos y formas de inducir y someter a los pueblos, tenemos demasiados ejemplos utilizados en la formación de las fuerzas armadas y de seguridad, sus estructuras son piramidales y hay veces que son sometidos a regímenes totalitarios, a la alteración de valores y ética, siendo suplantados por otros “valores”, supuestamente superiores a los anteriores, ya sean religiosos, políticos y sociales, como mecanismos de acción sicosocial impuestos por dictaduras y gobiernos autoritarios. La concentración y monopolio de los medios de comunicación imponen el totalitarismo informativo, violando los DDHH y la libertad de prensa.

La manipulación de conciencia por medio de la propaganda es lograr que todos y todas actúen de la misma manera y asuman las mismas responsabilidades, logrando que la culpabilidad se diluya en lo colectivo para no quedar excluidos.

El jerarca nazi Adolf Eichman cuando lo juzgan por sus crímenes en Israel dice en su defensa: “La misión de un soldado es obedecer las órdenes de sus superiores y no discutir si son buenas o no, su misión es obedecer…” la misma acción sicológica utilizó la dictadura militar argentina y otros ejércitos en el mundo que necesitan aliados y la complicidad de los medios de comunicación, sometiendo al pueblo por medio de la propaganda a la “obediencia ciega”.

En el Serpaj tuve un encuentro pedido por sus abogados con el entonces capitán de la Armada, Adolfo Scilingo, actualmente preso en España condenado por crímenes de lesa humanidad, quien declara que: “actuaron por orden de sus superiores en dos vuelos de la muerte con prisioneros, que eran inyectados para evitar su resistencia y arrojados al mar o al Río de la Plata, atados de pies y manos con alambres y pesos para que los cuerpos no suban a la superficie”.

Scilingo me expresa que estaba convencido que libraban una guerra para defender al país del comunismo internacional, los prisioneros eran considerados enemigos de la patria, cuando el avión regresaba a la base los esperaba el capellán militar y les daba misa, diciéndoles que lo hecho era para salvar a la patria. La ley y el poder judicial no existían, los dictadores eran señores de la vida y muerte del pueblo.

La “suspensión de conciencia” es un mecanismo de dominación para manipular a personas y pueblos, vaciarlos de conciencia crítica a fin de convertirlos “en una masa manejable”.

Vance Packard, en sus obras “Las formas ocultas de la propaganda” y “Los trepadores de la pirámide”, analiza los mecanismos de la acción sicológica de la propaganda dirigida a lograr que la mercancía alcance mejor venta; utilizando el convencimiento por medios visuales, informativos, colores y gráficos y la palabra que taladra conciencias, la televisión y medios electrónicos que llevan a comportamientos colectivos.

La serpiente está presente, oculta en su sombra desde los albores de la humanidad y en el tiempo se manifiesta en distintas metamorfosis.

Periodistas testigos de la Verdad

Del laberinto se sale por arriba, siempre existe la fuerza de la esperanza, tenemos que recuperar y valorar los testimonios de vida de muchos hombres y mujeres que ejercieron y ejercen el periodismo que lo asumen con coraje, muchos dieron sus vidas cumpliendo con su misión periodística. Son testigos/as en defensa de la dignidad y la verdad utilizando “la palabra”.

Quiero recordar algunos/as: A Vladimir Herzog asesinado bajo tortura por la dictadura militar de Brasil, el 25 de octubre de 1975 por informar al pueblo sobre las atrocidades de la dictadura y defender los DDHH.

Mario Podestá, corresponsal de guerra y compatriota, con quien me encontré antes de su viaje para cubrir la guerra en Irak, me pidió información y contactos en Bagdad de personas amigas y del hospital pediátrico, bombardeado por la OTAN y EEUU. Su intención era visitar el hospital y reunirse con los médicos/as.

Mónica Cabrera periodista argentina que acompañaba a Mario, los dos murieron en la ruta en el desierto desde Amman a Bagdad, el 14-4-2003.

El camarógrafo español José Couso, muerto por tropas de los EEUU en el Hotel Palestina, en Bagdad el 8-4-2003. Son cientos, miles de periodistas en el mundo víctimas de la violencia.

Rodolfo Walsh, desaparecido el 25-3-77, quien tuvo el coraje de la palabra para denunciar las atrocidades de la dictadura militar argentina y enviarle una carta a la junta de comandantes, siendo secuestrado y desaparecido hasta el presente. Rodolfo asumió la responsabilidad como periodista de luchar por la verdad, fue coherente entre el decir y el hacer y su testimonio perdura en la vida y conciencia del pueblo, es un ejemplo de ética profesional.

No puedo dejar de señalar la cárcel injusta que sufre Julián Assange, preso en una prisión de máxima seguridad en Gran Bretaña, por publicar informes sobre los horrores cometidos por los EEUU en Irak y otros países del mundo. EEUU y sus aliados quieren silenciar con el miedo y la persecución a quienes se atrevan a desafiar el sistema de impunidad de la gran potencia y sus cómplices. Es de destacar la complicidad de los grandes medios de comunicación sobre la guerra en Irak y las mentiras de las armas de destrucción masivas para justificar la invasión a Irak y los bombardeos sobre la ciudad de Bagdad, contra la población civil. Los grupos hegemónicos de información cómplices de los EEUU utilizaron miles de palabras y mentiras para hacer creer al mundo que Irak tenía armas de destrucción masiva para justificar la guerra.

Oscar Wilde decía que: “hipócrita es aquel que sabe el precio de todas las cosas y el valor de ninguna”. Precio y valor no son lo mismo.

A Luther King no le dolía tanto el accionar de los malos, como el silencio de los “buenos”. He ahí el silencio cómplice de los medios de comunicación con la prisión de Julián Assange; a quien visité en Londres cuando se encontraba como refugiado político en la embajada del Ecuador.

Tenemos que recordar el coraje de Alicia Castro en ese entonces embajadora argentina en Gran Bretaña que denunció la injusticia contra Julián, y se logró impedir su extradición a los EEUU gracias a la campaña internacional, pero aún continúa preso en Gran Bretaña. Alicia trabaja en el presente por su liberación.

Una incansable luchadora argentina, Stella Calloni, periodista y corresponsal de la Jornada de México, investigadora del Plan Cóndor en Paraguay en los Archivos del Terror, entre otros trabajos de investigación, aporta su experiencia y lucha social en el periodismo de la resistencia al servicio de los pueblos, lleva su vida reflexionando y trabajando sobre el caminar de América Latina y denunciando las violaciones de los DDHH y de los pueblos.

La FELAP durante años denuncia la persecución a los/as periodistas, víctimas de la violencia política en los países latinoamericanos, reclamando la libertad de prensa, la solidaridad y el fortalecimiento de la democracia y los DDHH , contemplados en las leyes nacionales, como en los pactos y protocolos internacionales.

En este caminar entre luchas y resistencia de los pueblos nos preguntamos: ¿Si a alguien le importan las lágrimas de los oprimidos?

Antonio Porchia decía que: “No ves el río de llanto, porque le falta una lágrima tuya”.

Abya Yala continúa con las venas abiertas

A cincuenta años de las Venas Abiertas de América Latina, de Eduardo Galeano, duele la realidad que nos toca vivir, -el filósofo español, Julián Marías decía: “Que vivimos en el mejor de los mundos posibles”,- “es el único mundo que tenemos, nuestra Casa Común”, que debemos defender para todos y todas y para lograrlo tenemos que remar contra corriente del sistema de opresión.

Cuando joven viajaba a Corrientes y Cataratas del Iguazú a visitar a mi familia, tengo presente la aventura y el desafío de remar en el río Paraná desde la ciudad de Corrientes a la Isla Antequera en el Chaco, a las plantaciones del tío Juan, había que remar contra corriente para cruzar el río y llegar a destino, exigía un gran esfuerzo físico y resistir en la canoa para que no nos arrastre la correntada y nos derive río abajo y perder el destino.

El desafío es remar contra la corriente del “pensamiento único” y resistir para que no nos impongan el “monocultivo de las mentes”, necesitamos de la resistencia cultural y generar nuevos paradigmas de vida, de construcción social, cultural, política, económica y espiritual, y enfrentar las desigualdades sociales, el hambre, la pobreza, la discriminación, revindicar el derecho de la mujer, los pueblos originarios y el medio ambiente.

Nos impusieron la economía devastadora de la deuda externa y la inflación galopante por aquellos que privilegian el capital financiero sobre la vida de los pueblos. “No llamemos política económica a aquello que no es sino un tratado de guerra escrito con la sangre de los oprimidos” (L.P.Aguirre).

En el ejercicio de toda democracia se necesita de la oposición, de la libertad de prensa y la palabra creadora y ser cómo el tábano socrático para despertar y corregir a quienes gobiernan y aportar a la vida, no hay democracia sin participación del pueblo.

Otra cosa es la oposición cargada de veneno, es la degradación del odio y su capacidad destructiva, la palabra emponzoñada de la serpiente que busca masificar conciencias y voluntades a través de las mentiras, utilizando los medios hegemónicos de comunicación que generan incertidumbre y distorsionan la realidad, saturan a los pueblos sobre ejes que martillan permanentemente tratando de imponer el reduccionismo y el absolutismo. Lo ocurrido el día 27 de febrero de este año en la concentración de la oposición de derecha en Plaza de Mayo, pone de relieve que actuaron de manera denigrante y muestran el rostro del odio y la mentira para atacar al gobierno, utilizaron lo peor, se montaron sobre irregularidades de las “vacunas Vip”, sin ningún análisis crítico de la política de Estado, de las urgencias y necesidades para la salud de la población. Recurrieron a los medios para acusar al gobierno de envenenar al pueblo con las vacunas”. Ignorando la decisión presidencial, reafirmando el derecho e igualdad para todos /as y su actuar al desplazar a los funcionarios en faltas.

La falta de ética y la ceguera del odio, los llevó a colgar bolsas mortuorias con supuestos cadáveres de dirigentes del gobierno en las rejas de la Casa de Gobierno, lo que pone en evidencia la degradación de la oposición, su mediocridad y falta de aportes y soluciones en bien del pueblo.

Debemos hacer memoria, durante el gobierno de Macri se privilegió a los ricos y se marginó a las dos terceras partes de la población. Sumergió al país en la deuda externa con el FMI, impagable e inmoral que debe ser investigada y saber adónde fueron a parar los millones de dólares del préstamo del FMI. Los medios de comunicación avalaron y defendieron al gobierno de Macri y sus negociados con el FMI sin importarles las consecuencias que cargan sobre el pueblo por generaciones, provocando más pobreza, hambre y falta de recursos para la educación y la salud.

A esa oposición destructiva y degradante dije que hay que darles la “Vacuna contra el odio”, tal vez aprendan, una vez vacunados que con el odio nada se construye.

Los golpes de Estado en el continente no terminaron con las dictaduras y la DSN (Doctrina de Seguridad Nacional), surgen nuevas formas de dominación como la “lawfare” -la guerra judicial- que amenaza las democracias: los golpes de Estado en Honduras, Paraguay, Brasil, Bolivia, la complicidad del Director General de la OEA Luis Almagro, dirigido por los EEUU apoyando el golpe de Estado contra Evo Morales, el golpe de Estado y la destitución en Brasil de Dilma Rousseff, y el accionar del juez Sergio Moro, contra Lula da Silva, condenado a prisión sin prueba alguna, el juez cómplice de la política de los EEUU para Latinoamérica, les sirvió para impedir que Lula se presente como candidato presidencial en las elecciones. El imperio siempre está presente para asegurar sus intereses regionales y mundiales.

Recientemente la justicia de Brasil sobreseyó a Lula de las acusaciones de corrupción que fuera objeto por la lawfare.

Nada de lo que señalo podría ser sin la complicidad de los grandes medios de información de la prensa canalla, escrita y televisiva como O GLOBO y otros medios levantando calumnias, ataques, denuncias y abriendo causas judiciales contra Lula.

En Argentina el gobierno de Macri buscó por todos los medios atacar a Cristina Fernández de Kirchner, utilizando la complicidad del Juez Bonadío, (fallecido) y el fiscal Stornelli, quien continúa en funciones a pesar de las causas judiciales y los “cuadernos fantasmas”, esgrimidos para un ataque contra Cristina y su gobierno, con la complicidad de jueces y funcionarios judiciales que son parte del poder político, apoyados por los medios de comunicación como Clarín y la Nación entre otros, para acusar a Cristina utilizando la “Lawfare” y buscando dañar a su familia, provocando todo el daño posible como los allanamientos a sus propiedades, perseguir y poner presos a varios ex funcionarios del gobierno peronista.

La corporación judicial actúa de forma nefasta sobre la independencia de los poderes del Estado y la vida democrática del país. Es urgente la reforma del poder judicial y de la Corte Suprema de Justicia y recuperar la salud de la República.

Tenemos que tener claro que si alguien cometió algún ilícito en funciones del Estado es la justicia quien determinará el grado de responsabilidad.

Los medios hegemónicos de información juzgan y condenan antes que la justicia, iniciando campañas extra judiciales.

Buscaron atacar y denigrar a jueces que tienen el coraje de asumir su responsabilidad, de hacer justicia. Macri quiso impedir el avance de la causa y pidió la destitución del Juez de Dolores, Alejo Ramos Padilla, quien estaba a cargo de investigar los actos y delitos de Marcelo D’Alessio, la complicidad de periodistas, fiscales y la extorsión de funcionarios cercanos al macrismo.

La hipocresía e impunidad del poder político y judicial, avanzaron en imponer sus intereses sobre la vida del pueblo.

No podemos quedarnos en la angustia existencial, los pueblos tienen la capacidad de indignarse frente a las injusticias y de rebelarse para lograr construir un nuevo paradigma que implica un profundo cambio de la mentalidad epocal. De los conceptos y los valores que forman una visión particular de la realidad de una época determinada. La velocidad de cambio de nuestra época es mucho más rápida que las anteriores, en virtud de los “soportes” que la generan. El drama se está dando, a nivel social, entre el mundo rápido que está naciendo, y el mundo lento, generalmente abarcante de las regiones más pobres del planeta- (L.P.Aguirre)

El nuevo paradigma desafía a los humanos a buscar nuevas razones para probar que poseemos algún tipo de capacidad (razón) para fundar nuevos comportamientos éticos y praxis con pretensiones de distinguir la libertad de la tiranía. La falsedad de la verdad, lo justo de lo injusto o si estamos condenados a la lógica posmoderna del pensamiento débil y de la fragmentación relativista. (L.P.A). J.L. Borges dice: “no hay una sola página, una sola palabra, que sea sencilla, ya que todas postulan el universo, cuyo más notorio atributo es la complejidad”.

Si queremos alcanzar los objetivos de construir una sociedad de iguales, más justa y fraterna, tenemos que aprender a remar contra la corriente para llegar a destino sin perder el rumbo.

No podemos dejar de señalar a la serpiente que hace de la palabra el veneno para contaminar a los pueblos y que utiliza su lengua para mentir, dañar y hacer creer a la población que lo que dice es verdad, impone, la hipocresía del “pensamiento único”, o como lo señalo, buscan dominar a los pueblos con el “monocultivo de las mentes” con los tóxicos de la propaganda, y no la búsqueda de la Verdad, la información que ayude a la conciencia crítica y los valores culturales, sociales y espirituales de los pueblos.

Las tecnologías han cambiado las relaciones del tiempo y el ser humano. Marx decía que; “hasta ahora los filósofos no han hecho más que interpretar de diversos modos el mundo, pero de lo que se trata es de transformarlo.”

Los tiempos agitados que corren nos obligan a navegar abrazados al mástil de la nave. Y ese mástil se me ocurre que bien lo puede representar quien un día dijo que “lo contrario del amor no es, como muchas veces o casi siempre se piensa, el odio, sino el miedo de amar, y el miedo de amar; es el miedo de ser libre” -Pablo Freire-.

Adolfo Pérez Esquivel, Premio Nobel de la Paz.

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