Entrevista: “Los jóvenes aprenden más si ven que pueden cambiar su entorno”

La argentina Nieves Tapia es una de las mayores embajadoras del aprendizaje y servicio (ApS) en el mundo, una propuesta pedagógica que combina el currículo académico con el servicio comunitario. Invitada por el grupo editorial Edebé, vino a España hace unos meses para encontrarse con escuelas y explicar que cuando los niños y adolescentes se ponen a pensar cómo pueden contribuir a mejorar algún asunto de su comunidad desencadenan un efecto dominó de beneficios: aumentan la motivación escolar, mejoran el rendimiento académico, su autoestima, la responsabilidad para con los vecinos y su ciudad. Y la comunidad los ve con otros ojos. Tapia coordinó los programas nacionales de aprendizaje y servicio en Argentina desde finales de los años noventa, fundó el Centro Latinoamericano de Aprendizaje y Servicio Solidario y ocupa un puesto en la comisión directiva de la Ianys (International Association for National Youth Service).

Contenidos del currículo

“No hay que poner énfasis en los valores, hay que perseguir objetivos curriculares”

¿El ApS es como un voluntariado?

Más, porque tiene objetivos de aprendizaje concretos sobre materias curriculares como lengua, matemáticas, ciencias, historia… Se desarrollan competencias, se investiga, se reflexiona sobre la práctica… Es más que un acto solidario.

Parece un aprendizaje por proyectos.

Es un aprendizaje por proyectos, pero también consiste en una pedagogía que obliga a hacer que la solidaridad no sea sólo un contenido, sino una forma participativa de estar en la sociedad. Obliga a mirar alrededor y actuar. Diseñar un plan y ejecutarlo. Y esto puede hacerse desde párvulos.

¿Puede poner algún ejemplo?

Hubo un gran incendio en el sur de la Patagonia y los alumnos de Villa Futalaufquen decidieron repoblar el parque nacional. Eso requirió una investigación sobre el tipo de plantas adecuadas y cómo plantarlas, cómo contactar con la administración… O le podría hablar de la investigación científica que realizaron los alumnos del pueblo Ramona, también en Argentina, que descubrieron la alta contaminación del agua de los pozos y presentaron su estudio al Gobierno que instaló una potabilizadora. Ahora, los vecinos pagan una tasa por el agua que consumen que va directamente a los proyectos de esa escuela. O le hablaría de otro colegio en el que los chicos decidieron diseñar una silla de ruedas para personas que conocían en su comunidad. El profesor decía que “con trabajos tradicionales, los estudiantes trabajan para aprobar, con la silla de ruedas trabajan, aprenden, y se motivan para aprender”.

¿Aprendieron contenidos del currículo?

Desde luego, si no la silla de ruedas no funciona. La evaluación rigurosa es fundamental. Debe evaluarse el impacto en la comunidad y los objetivos curriculares definidos previamente en el centro. El riesgo es poner énfasis en los valores y perder de vista la importancia del contenido.

¿Impacta en los chavales?

Mucho, porque les conecta con una realidad, muchas veces ignorada, que evidencia unas necesidades del barrio, pueblo, ciudad. En capas menos favorecidas convierte a chavales que antes se sentían sólo víctimas en ciudadanos activos. Ven su capacidad de cambiar e influir en su entorno y descubren que son capaces de hacer grandes cosas. Ese fortalecimiento de la autoestima revierte en el rendimiento escolar y en sus expectativas vitales.

¿Eso está medido?

Según estudios, el rendimiento escolar aumenta un 10%. Pero eso no es lo más importante. En Chile, por ejemplo, escuelas con deserciones del 70% están ahora en el 2%. Aprender así, engancha.

Les obliga a agudizar la mirada sobre la ciudad.

Eso es un problema para la administración. Le contaré que en el año 2000 ganó un premio una escuela infantil que decidió criar truchas en su jardín para repoblar el río cercano y contribuir a la calidad del agua. Con ello mejoró el turismo y el empleo. Recogió el premio una niña de 5 años que tomó el micro y le dijo espontáneamente al presidente: “Señor, ahora usted cuide el agua del río o se nos morirán los pececitos”.

Esta forma de aprender parece exigente con los profesores no acostumbrados a trabajar por proyectos.

Les obliga a confiar en sus alumnos, a salir de la seguridad del aula y a prepararse a no tener respuestas. Tienen que ponerse a estudiar con ellos. Hablar con las administraciones y con entidades sociales. Es un cambio de rol. Trabajar en la incertidumbre y dedicar mucho tiempo. Hay que acompañarlos. Muchos empiezan con entusiasmo, pero la buena voluntad tiene un límite.

Dice que el ApS puede impulsarse desde párvulos, pero ¿cuándo se acaba?

En España no hay políticas universitarias que impulsen el ApS, pero sí hay experiencias. En Barcelona, la carrera de Educación, por ejemplo. Pero es cierto que aquí está más extendido en secundaria. En otros países como Chile, México, Colombia, Costa Rica, Sudáfrica, y muchos países asiáticos, se está incorporando. Harvard tiene ApS obligatoria. Con el huracán Katrina los seguros no querían pagar los desastres porque decían que no estaba en las pólizas. Y los alumnos cambiaron eso. Puede que Harvard no sea solidaria como entidad, pero sí han comprobado que esta metodología funciona.

¿Y no tranquiliza la conciencia de las clases más favorecidas sin que en el fondo se combata con la desigualdad?

Existe ese riesgo. Por eso el concepto de reflexión sobre la práctica es crítico. Por ejemplo, si hay un proyecto sobre el desplazamiento por inundaciones, podría debatirse, ¿por qué siempre les toca a los mismos?

Hay gente que de natural es más solidaria que otra. Quizás esta materia no les motiva.

No he encontrado ninguna escuela que dijera que un alumno se negó a participar. En cambio muchos descubren una realidad que les sorprende. Por otro lado, rescata la voz del adolescente en la comunidad. En algunas urbes,ser joven y, sobre todo varón, es sinónimo de ser peligroso. En una escuela marginal, los adolescentes organizaron teatro leído para ancianos y niños. Los adolescentes, antes vistos mal, acabaron siendo “los de la escuela de los libros”.

Fuente de la Información: https://www.lavanguardia.com/vida/20190819/464143661488/los-jovenes-aprenden-mas-si-ven-que-pueden-cambiar-su-entorno.html?facet=amp

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Autoconciencia y motivación

Por: Rosalía Nalleli Pérez Estrada

La pasión por el trabajo puede mover a la gente más allá del dinero o del estatus, y le ayuda a perseguir sus objetivos con energía y persistencia, dice Daniel Goldman en su definición de motivación, al establecerla como uno de los cinco componentes esenciales para identificar la inteligencia emocional en el trabajo, en su escrito titulado what Makes a leader?.

Este elemento esencial puede ayudar  al que ansía cambios en su vida, mediante el análisis de sus motivos y su persistencia. Además, su inclusión y comprensión en la educación superior se vuelve necesaria para ayudar al estudiante en la toma de decisiones y lograr mejores resultados en el perfil de egreso de cada institución.

Con lo anterior, podemos inferir que las mejores escuelas, con los mejores maestros, con el mejor modelo educativo o con los mejores programas contextualizados no suelen ser muy eficaces, cuando no se tiene al mejor alumno consciente, meta-cognitiva y emocionalmente hablando.

En este punto, vale la pena mencionar  un viejo dicho que establece que, cuando el alumno está preparado, busca al maestro. Sin embargo, si el alumno llega a la universidad sin saber lo que desea lograr y sin conocerse así mismo, les costará el doble mejorar sus resultados. Además, la necesidad de desarrollar la autoconciencia, autorregulación, motivación, empatía y habilidad social puede ser un punto clave para ejercer un liderazgo  personal o para culminar la carrera y ejercerla.

Por otro lado, cuando se desconocen estos elementos, puede haber situaciones como las que se presentaron en un estudio de caso reciente, llevado a cabo con 91 estudiantes de educación superior y a punto de finalizar su carrera. En un primer momento y de manera exploratoria, se les solicitó que anotaran como mínimo 5 de sus fortalezas.

La tarea les tomó alrededor de 15 minutos para poder dar una respuesta efectiva. La mayoría externó su angustia porque decía que no era fácil decir, de repente,  en qué eran buenos o qué sabían hacer bien. Cuando se revisaron las respuestas, varios de ellos repetían lo que sus compañeros habían dicho pero sin estar convencidos. Posteriormente, al solicitarles que expusieran sus motivos para terminar una licenciatura, 87 de ellos expusieron como motores de persistencia: las calificaciones, el dinero, el reconocimiento, la pertenencia a un grupo de élite, el orgullo de sus padres al terminar la carrera,  la obtención de un empleo, el respeto que esperan de los demás y finalmente,  el titulo de licenciados.

De todos ellos, únicamente 4 fueron los que dijeron que estaban estudiando una carrera para poder aprender a ser mejores seres humanos, para desarrollarse más a sí mismos y para contribuir con la sociedad, sabiendo que mediante ese conocimiento y formación, los beneficios vendrían a la par. La diferencia entre su motivación externa y su motivación interna es muy grande, y la mayoría espera la recompensa externa, como motor de cambio.

Quizás esta situación, aparentemente sin importancia, puede ser generada en los diversos entornos de aprendizaje, ya que quien estudia, difícilmente logra identificar la conveniencia de estudiar para sí mismo y su dirección regularmente se dirige hacia lo externo lo cual, a largo plazo, puede generar frustración, pues nunca lo externo es suficiente para ser feliz  o competente. Por otro lado, como dicen Ryan y Deci (2000),  los individuos no solamente deben experimentar autoconfianza o competencia percibida, sino que deben sentir que son ellos quienes deciden su comportamiento para que la motivación intrínseca se mantenga o, incluso, mejore.

También, este tipo de  motivación  interna les ayuda a eliminar lo que Martin et al, (2009) refieren como “síndrome del enemigo externo”, de manera que los individuos se sientan seguros en sus tareas y puedan analizar las causas de sus posibles problemas, conjuntar su conocimiento y hacer propuestas que conduzcan a la mejora. Por lo anterior,  pareciera  que se requiere re direccionar la formación  que reciben a lo largo de su vida escolar a partir de la autoconciencia y de su motivación o regulación, para que sepan qué hacer en momentos de crisis y seguirse moviendo.

Otro ejemplo claro de esa falta de autoconciencia o de motivación interna son los temas virales recientes: el nuevo modelo educativo y  la reforma educativa, en los que muchos críticos se han involucrado, aprovechando la oportunidad, para lanzarse a la yugular de estas propuestas buscando sus carencias o para reprobar  su posible eficacia, así como a los propositores. Pocos, pero muy pocos, se han pronunciado por sugerir estrategias de aplicación, metodologías y casi en nada se han expuesto sus posibles fortalezas, si es que existen.

Quizás el primer paso,  sería reconocer qué es lo que esas propuestas les generan así mismos: ¿Ansiedad? ¿Miedo? ¿Coraje? ¿Desesperanza? ¿Curiosidad? ¿Desencanto?¿rechazo? Para posteriormente identificar qué es lo que sí se les puede explotar y, mediante una aplicación y posterior evaluación, poder modificar aquello que no funciona. Dentro de esto, buscar proponer algo que ayude a formar al individuo más dispuesto a colaborar para su propio crecimiento y asumirse en su rol principal de aprendiz para detonar verdaderamente el aprender a aprender del que tanto se habla. Por el contrario, si se continúa en la crítica desmedida sin hacer una propuesta, y sin identificar los sentimientos que la reforma genera, o de qué manera amenaza lo que se percibe a diario, podemos predecir que podrían pasar miles de propuestas y seguiríamos sumergidos en la crítica desmedida, catapultando oportunidades de aplicación y quizás de una remota transformación.

Esto no quiere decir que esas propuestas sean las más eficaces o supremas, sino que se intenta invitar más a la auto reflexión de lo que ellas provocan en nosotros, para que sigamos trabajando con lo que sí disfrutamos, con lo que nos apasiona, reconociendo nuestras fortalezas y lo que nos motiva a seguir adelante, para no caer en el desasosiego o en la continua incertidumbre o en inmenso miedo que daña y que con el tiempo lastima nuestra convivencia y tolerancia hacia nosotros mismos y con los demás, dañándonos también el corazón.

Fuente: http://www.educacionfutura.org/autoconciencia-y-motivacion/

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Argentina: Más de 2.500 chicos tendrá en 2017 un codocente

Argentina/Diciembre de 2016/Autora: Natalia Meja/Fuente: El Tribuno

Samuel Villena es abogado y a partir del 6 de marzo de 2017 pondrá su granito de arena para mejorar la educación desde el aula, de la mano de la organización Enseñá por Argentina. «Hay que trabajar en la motivación para que los chicos y adolescentes de hoy empiecen a ver un futuro distinto para su vida. Creo que esa es la clave y en lo que me voy a esforzar para que pueda salir algo bueno. Motivarlos, despertarles el interés, buscar alguna vocación en ellos, intentar en los que no ven un futuro que empiecen a construirlo desde ahora», señaló el profesional de 29 años.
Para Shajira Cortez Chaín, licenciada en Relaciones Internacionales y Ciencias Políticas, el reto será cerrar la brecha tecnológica que existe entre los chicos y los docentes. «Yo hace 10 años dejé el colegio, de manera que la realidad de hoy en día no solo es un desafío para los chicos sino también para mí misma porque hay muchas cuestiones que están interactuando en el aula y que a mi no me pasaron: las redes sociales, en fin todo lo que tiene que ver con la tecnología», dijo la líder de 26 años.
Samuel y Shajira son dos de los 30 nuevos jóvenes profesionales universitarios seleccionados por Enseñá por Argentina para trabajar durante dos años con alumnos secundarios de escuelas públicas ubicadas en zonas vulnerables, en un programa de co-docencia. Uno de los objetivos que persigue la ONG, que forma parte de la red internacional Teach for All, es que un día todos los niños y jóvenes reciban una educación de calidad.
Abogados, ingenieros, politólogos, biólogos y arquitectos, entre otras profesiones, colaborarán con el profesor responsable de la clase que se les asigne en 18 escuelas salteñas, de las cuales 11 se incorporan a la experiencia con la meta de mejorar los aprendizajes de más de 2.500 estudiantes.
En Salta, Enseñá por Argentina comenzó a trabajar en 2015 en siete establecimientos educativos. «Trabajar dentro del aula transforma la sociedad, independiente de la gestión; la gestión directiva en la institución es más administrativa y muchas veces nos hace perder esa visión del aula», señaló la ministra de Educación Analía Berruezo, quien felicitó a los «valientes» profesionales.
Samuel admitió que la posibilidad de aportar a la educación «es una puerta que se abrió y que no tenía planificado desde un principio». Por su parte, Cortez Chaín destacó: «Creo que los que trabajan en la educación son profesionales de la esperanza; ellos creen en los chicos, los adolescentes y en los jóvenes. Por eso me pareció oportuno comprometerme con la realidad de mi provincia».
A modo de balance, Oscar Ghillione, titular de Enseñá por Argentina, le dijo a El Tribuno: «Vemos mucha ganancia en el trabajo colaborativo entre el joven profesional y el docente en el desarrollo de habilidades socioemocionales que tienen que ver cómo los chicos trabajan en equipo, qué autoconcepto tienen, cómo pueden construir proyectos, proyectarse hacia el futuro. También estamos estudiando si vemos mejoras y ganancias en términos de bajar la repitencia y la deserción. Hasta ahora venimos viendo que mejoran las tasas de permanencia y de aprobación de un año al siguiente, pero pronto ya tendremos datos precisos».
Fuente:  http://www.eltribuno.info/mas-2500-chicos-tendra-2017-un-codocente-n802387
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Guatemala: Filgua premiará por “leer”

Guatemala/ 02 de Mayo de 2016/La Hora

En el marco de la Feria Internacional del Libro en Guatemala (Filgua) 2016, se realizará el 6º Gran Concurso Interescolar de Lectura, en el que se premiará hasta con Q2 mil a escuelas y colegios del país.

Filgua 2016 organiza este concurso para impulsar el hábito de la lectura entre estudiantes, tanto de la ciudad capital como de los departamentos. La comprensión de lectura es relevante como una de las herramientas necesarias para el desarrollo académico y social, desde temprana edad.

De acuerdo con las bases del concurso, las inscripciones están abiertas del 15 de abril al 20 de mayo del presente año. Se contará con un premio Institucional (por categoría a la entidad educativa) y un premio individual (por categoría a los tres estudiantes del equipo ganador).

El Concurso Interescolar de Lectura tiene 4 categorías divididas por edades: desde 7 hasta 18 años.

“Estamos muy entusiasmados por la motivación que este tipo de proyectos genera en la población estudiantil, sobre los hábitos de lectura y porque creemos firmemente que la lectura puede cambiarles la vida a las personas desde temprana edad”, indicó Luis Fernando Alejos, coordinador de la agenda de Cultura de Filgua 2016.

Tomando en cuenta que el último día de recepción de trabajos será el 13 de junio, los reconocimientos serán otorgados durante Filgua, entre el 14 y el 24 de julio en el Parque de la Industria.

FILGUA – FILCEN se realizará del 14 al 24 de julio del 2016, en el Parque de la Industria. Este evento desea contribuir a la lectura, el desarrollo y la cultura en la región porque leer nos cambia la vida.

Fuente: http://lahora.gt/filgua-premiara-leer/

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