Usac: Matricula estudiantil aumenta en 2021, pero comienza a descender un año después
Ana Lucía Ola
Virtualidad habría contribuido a que más estudiantes se matricularan en la universidad estatal
En Guatemala la educación superior no es para todos. Solo el cinco por ciento de la población llega a la universidad para cursar una licenciatura y menos del uno por ciento un postgrado, según datos del Instituto Nacional de Estadística.
En 2019 se inscribieron 110 mil cinco personas en las distintas facultades y escuelas, del grupo nueve mil fueron de primer ingreso. Al año siguiente se notó un descenso por la suspensión de clases por el covid-19. Sin embargo, en 2021 la matrícula aumentó a 119 mil 552, y se triplicó la cantidad de estudiantes que por primera vez se inscribieron.
A criterio de Carlos Aldana, docente de la Usac especializado en Educación, la modalidad virtual o a distancia que se adoptó durante la pandemia abrió la posibilidad de que más personas se registraran para iniciar o continuar una carrera universitaria.
El médico Carlos Chúa, catedrático de la facultad de Ciencias Médicas, ve este aumento como una tendencia natural que obedece a que en el país hay más población en edad universitaria. La oportunidad de estudiar en línea podría haber impactado a ciertas carreras, pero no a Medicina y aquellas que son más prácticas.
“Es positivo para la matrícula, para personas que tienen la posibilidad de continuar con sus estudios —a distancia—, pero hay que revisar si esto asegura alta calidad en el aprendizaje, conocimientos profundos y eficaces, lo que la sociedad necesita de los egresados de la universidad”, señala Aldana.
Ante ese aumento de estudiantes el catedrático menciona que lo importante ahora es retener a esa población cuando se acerca el regreso a la presencialidad, pues muchos se inscribieron en 2021 por las facilidades que permite la virtualidad, como estudiar desde casa, ahorro en transporte y de tiempo en el traslado al campus, entre otros beneficios. Al volver a los salones de clases, puede que haya deserción.
De esa cuenta se plantea la necesidad de estrategias híbridas que permitan una continuidad sólida para quienes quieran seguir con su formación académica, abrir la posibilidad de recibir algunas clases a distancia sin dejar de lado la experiencia de la vida universitaria que ofrece la presencialidad, pues una buena cantidad de estudiantes no han tenido la oportunidad de estar en un salón de la Usac, ya que se matricularon por primera vez en estos años de pandemia.
Aldana indica que antes de la pandemia en la Usac ya se trabajaba la implementación de plataformas virtuales, y ahora esa modalidad debe ser aprovechada por estudiantes regulares y de nuevo ingreso.
“El primer reto es aprender a regresar a la presencialidad”, refiere el catedrático, pues, al estar tres años a distancia los estudiantes se perdieron del intercambio con los profesores, a tener hábitos y capacidades como el diálogo, no hubo interacción, lo que es un desafío para los catedráticos, que deberán asumir una docencia distinta sin olvidar que los jóvenes se incorpora con hábitos y costumbre de aprendizajes distintos.
Más estudiantes
Datos proporcionados por el Departamento de Registro y Estadística de la Usac, muestran, que en el período de 2019 al 2021, las facultades que tuvieron un mayor incremento en la matrícula son Ciencias Jurídicas con dos mil 157 estudiantes más, seguido de Ciencias Económicas con dos mil 76.
Aldana indica que este comportamiento podría deberse a que en dichas carreras los primeros años son teóricos y puede estudiarse a distancia, lo que habría motivado a que más personas se inscribieran.
Cuando en el 2019 en Ciencias Económicas los estudiantes de primer ingreso eran mil 741 para el 2021 aumentó un 315%. En Ciencias Jurídicas eran mil 725 y creció un 239%.
La unidad académica que mostró un descenso en la matrícula total fue Odontología, con 74 personas menos. En tanto que Historia y Arquitectura hubo un cambio mínimo, con 18 y 5 inscripciones de más, respectivamente.
Efecto contrario
Contrario a lo que se vivió en el 2021 con el aumento en la matrícula estudiantil, durante el 2022 se observó un retroceso en la cantidad de estudiantes inscritos. Hubo una caída de mil 245 universitarios. La tendencia podría continuar este año y verse una disminución de estudiantes en la Usac.
Las facultades más afectadas fueron Ingeniería y Humanidades, aunque no sucedió lo mismo en la facultad de Ciencias Médicas, con 600 estudiantes más.
Según Aldana, la menor cantidad de matriculaciones del año pasado es un “aviso de que el estudiante comenzó a ver que la presencialidad viene y comienza a desestimularse en ser parte de la universidad”, tanto por la dificultad de trasladarse al campus, como el factor económico que representa el retorno. También puede afectar los conflictos que rodean a la Usac en estos momentos y que mantienen la toma de los edificios.
Rezago académico
Un informe del Banco Mundial señala que la educación superior también sufrió a raíz de la interrupción de la presencialidad por el covid-19. Previo a la pandemia solo 19 por ciento de los programas de educación superior de Latinoamérica no implementaba los medios virtuales para dar clases, mientras que el 16 por ciento usaba la modalidad híbrida.
El rezago en el aprendizaje que hay en la educación primaria y secundaria también se observa a nivel universitario, no solo por la escasa conectividad sino también porque no hubo un aprendizaje pleno.
La Coordinadora General de Estudiantes (CGE) de la Usac señaló en un comunicado que la manera en que se ha desarrollado la virtualidad “no aporta a la formación integral, lúdica y holística para el dominio teórico y las capacidades técnicas requeridas para un profesional”. En este proceso se ha dejado fuera a quienes no pudieron adaptarse a las condiciones mínimas requeridas para estudiar a distancia, por falta de acceso a internet y a las herramientas tecnológicas, dice.
Aldana indica que hay rezagos académicos, pero también en materia de interacciones didácticas, psicosociales entre estudiantes y docentes, como de carácter técnico y práctico, principalmente para carreras como Medicina, y que deben cubrirse cuando se dé el regreso a la presencialidad.
“La educación virtual ofrece ventajas, pero también ofrece grandes desventajas para la calidad de la educación. En el caso de las ciencias médicas no se puede enseñar signos clínicos o examinar a un paciente virtualmente. La presencialidad es fundamental en la enseñanza de la Medicina”, dice Chúa.
Fuente de la Información: https://www.prensalibre.com/guatemala/comunitario/usac-matricula-estudiantil-aumenta-en-2021-pero-comienza-a-descender-un-ano-despues/