Es difícil encontrar literatura hecha por mujeres, o publicaciones de teóricas feministas… de teóricas, no importa si son feministas o no. En general de escritoras, no importa el género literario. Yo tengo años visitando la Feria del Libro de Caracas y librerías preguntando por libros como los diarios de Anais Nim o el Segundo Sexo de Simone de Beauvoir (este ya lo encontré, nuevo, como quería). Fíjense que son obras reconocidas, no son libros raros precisamente, ni malditos como pueden ser los de Emma Goldman, y nada, no hay, no los traen, no los re editan. A raíz de esto cultive el extraño hábito de contar las autoras en las estanterías de librerías y aunque los datos no tienen ningún valor estadístico los voy a compartir con uds.
Mi experiencia de contadora de autoras en estantes de librerías caraqueñas me dice que por cada 10 títulos solo uno es escrito por una mujer, si acaso. Inclusive mi obsesión me llevó a buscar un catálogo de la Editorial El Perro y la Rana en internet y seguir contando las autoras. Y encontré que de los 703 títulos publicados en ese catálogo, solo 105 eran de autoras, es decir el 15 %, redondeando para arriba. La buena noticia es que Laura Antillano, que me encanta, es de las autoras más publicadas junto con Francesca Gargallo una feminista mexicana.
Pero, por qué las mujeres son menos publicadas… una vieja discusión, cuyas disertaciones van desde la maliciosa idea de que los varones prefieren publicar a varones y que las institucionalidad cultural está en manos suyas. Pasando por el hecho de que la desigual distribución de las responsabilidades de crianza y cuido de la especie sustrae a miles de mujeres la fuerza y el tiempo para la creación y el trabajo que significa su difusión y distribución, como pasa en otras áreas profesionales, donde se invierten los indices de población femenina que egresa de las universidades y población femenina que se emplea. Hasta llegar a reflexiones profundas sobre lo que la sociedad patriarcal y capitalista considera de valor como para ser difundido, conservado para la posteridad… Quizá no sea una sino, todas las anteriores y algunas razones más.
El conquistar el derecho de las mujeres a escribir y ser leídas no es una batalla sin importancia. El uso de la escritura es uno de los rasgos más distintivos de eso que llaman lhumanidad. A través del uso de la palabra escrita se ha definido la humanidad, en los términos que los varones patriarcales han querido. Es así, que lo humano, según la ideología patriarcal y capitalista es lo masculino.
Las mujeres hace muchos años que irrumpieron en el panorama literario y académico, apropiándose de las palabras. Pero, aún falta que la producción salga de los espacios académicos super especializados y se haga común. Que las encontremos en cualquier estante sin tener que hacer un esfuerzo.
En este desenmascarar la exclusión de la interpretación de las mujeres del “logos”, de la palabra en cuanto razonamiento y argumento, se encuentra uno de los frentes de batallas más duros de la revolución. Porque es un frente que se desarrolla en lo más profundo del entendimiento, en eso que es irracional y nadie lo quiere ver como tal. Pero se hacen avances y hay que hablar de estos.
En la reciente filven tuvimos el placer de recibir a dos libros feministas, Waika la respondona de María Centeno y La Unión Obrera de Flora Tristan con traducción de la peruana Patricia de Sousa.
El primero tuvo el honor de ser el el libro más buscado en la feria del libro, por suerte lo encontraron. Un libro que tiene el mérito de hacer dos cosas extremadamente difíciles. Una hacer humor y dos hacer humor de una cosa tan seria y académica como solemos ver al pensamiento feminista. María Centeno ha demostrado que si se puede hablar de cosas serias en la calle, en la casa y quizá hasta en la cama es decir, se puede sacar al feminismo de los pasillos de las universidades, de los círculos ultra especializados… no tiene porque ser un material proscrito.
No hay cosa más difícil que conseguir un libro de Flora Tristán, sus obras son casi exquisiteces. Condenada a pequeños tirajes, fruto de esfuerzos casi titánicos y heroicos, los libro de Tristán siempre son un regalo. La franco peruana precursora no sólo del feminismo sino también, de la organización obrera y el socialismo es siempre reservada a círculos muy cerrados que estudian la obra de Marx. Poco traducida, poco promocionada en el continente es realmente un honor poder contar con su libro más emblemático en las librerías del Sur, editado por la Fundación Editorial El Perro y la Rana.
Ya fuera de la Filven también hay noticias editoriales como es la reciente presentación de La Araña feminista Opina. Una selección de mas de dos cientos artículos publicados en los diarios Correo del Orinoco y Ciudad CCS entre el 2010 y el 2013 por los colectivos de la red La Araña feminista. Este libro que nace, según el prólogo de Genny Lara, de la manía de aquellas y aquellos que piensan sobre el feminismo está dedicado al Arañero de Sabaneta, un homenaje al primer presidente feminista del continente
La Araña Feminista Opina recogen pensamientos y propuestas elaboradas desde el trabajo de los más de 30 colectivos que se articulan en la red La Araña feminista. En su primer capítulo se expone una genealogía del feminismo venezolano hasta la irrupción de La Araña, seguida de una cronología de las actividades más importantes de la red, incluyendo el nacimiento de La Araña impresa y su equipo editorial.
Luego se reúnen en los 10 capítulos restantes lo que se ha escrito y pensado en la red sobre el feminismo popular, la crianza, la economía, el trabajo, los derechos sexuales y reproductivos, la violencia de género, el papel de las mujeres en la historia, el socialismo, la revolución y los procesos de lucha nuestroamericanos.
En La Araña Feminista Opina está presente la fuerza de las mujeres asumiendo la producción de ideas y reflexiones no como una forma de auto estimulación intelectual sino como una responsabilidad en la apropiación del logos, en crear herramientas para el cuestionamiento a todo nivel de la sociedad capitalista y patriarcal, y de las estructuras culturales que la sustentan.
Por último tenemos que, se publicó el Nº 41 de la Revista Venezolana de estudios de la mujer, titulado Mujeres, Literatura, Artes y otros lenguajes, una revista donde podrán ampliar más sobre el tema que animó estas pequeñas líneas.