Por: Heraclio Terán
AMLO continúa sin cumplir promesas de reapertura de la normal rural de El Mexe, en el Estado de Hidalgo.
En diciembre de 2018, Andrés Manuel López Obrador anunciaba la supuesta reapertura de la Normal Rural Luis Villareal, también conocida como El Mexe, en el Estado de Hidalgo. Dicha institución educativa fue cerrada el 6 de julio del año 2008, durante la administración del gobierno que encabezó el priista Miguel Ángel Ozorio Chong, quien algunos años después pasaría a ser Secretario de Gobierno a nivel federal, con Enrique Peña Nieto.
Desde las elecciones 2012 AMLO prometía la reapertura de esta Normal Rural. Posteriormente, en 2016, el candidato a la gubernatura de Hidalgo por parte del Morena, Salvador Torre Cisneros, decía también que apoyaría esta causa. Al calor de la campaña electoral de 2018, AMLO nuevamente establecía el compromiso para que El Mexe volviera a formar profesores rurales.
Se podría pensar que después de tanta expresión de compromiso con la reapertura de El Mexe, esta institución formadora de maestros abriría nuevamente sus puertas como la Normal Rural que una vez fue.
Por ello tras el anuncio que realizó AMLO recién asumida la presidencia, jovenes de entre 19 y 22 años pertenecientes a la Sierra y la Huasteca, así como al Valle del Mezquital en Hidalgo, pero también originarios de estados como Oaxaca, Tlaxcala, Estado de México, Veracruz y Chiapas, iniciaron el proceso para ingresar al Mexe.
Meses más tarde les fue notificado que en mayo de 2019 iniciaría el ciclo escolar. No obstante se percataron que finalmente no estaban inscritos en una Normal Rural como tal. Lo que en realidad abrió fue una escuela bajo el sistema de Universidades del Bienestar Benito Juárez García, proyecto insignia de la 4T.
Las malas sorpresas continuaron. Luego la Secretaría de Educación Pública les notificó que no volvería a haber internado, en lugar de ello les sería asignada una beca de 2,400 pesos mensuales, propia de las UBBJ. Aun así muchos estudiantes decidieron continuar con los estudios, pero sostenerse les fue imposible. El internado y la alimentación proporcionados bajo el esquema de normales rurales son elementos imprescindibles para que jóvenes de escasos recursos puedan llevar a cabo sus estudios.
Una institución formadora de maestros solo puede ser considerada verdaderamente una Normal Rural si cumple con un esquema educativo integral compuesto por cinco ejes formativos: político, académico, cultural, de módulos de producción y deportivo. La formación bajo estos criterios solo puede lograrse en la modalidad de internado.
Los estudiantes se sienten engañados. Con justa razón. Han mostrado su inconformidad, sin embargo directivos de la unidad UBBJ que ha sustituido al Mexe les han dicho que dejen de estar pidiendo algo que no se les va a dar, que se conformen con lo que hay. De manera déspota y soberbia les han llegado a decir que deberían estar agradecidos. Los funcionarios se olvidan de casi una década de promesas que López Obrador hizo sobre la reapertura de la escuela.
La actitud adversa de los directivos ha llegado incluso a las agresiones. Estudiantes denuncian que tras diversas manifestaciones que han llevado a cabo en las afueras de la universidad, han sido agredidos por gente afín a la administración de la unidad académica de la UBBJ. Las y los estudiantes han recibido golpes y se les ha dicho que no son nadie y que si no están de acuerdo con la situación, que mejor se larguen, que sólo son unos pobres indios.
El caso de El Mexe es otro más en el cual se evidencia la simulación de la 4T: discurso progresista, pero continuidad neoliberal en los hechos. A esto se le suma la represión que los gobiernos estatales del Morena en Puebla y Chiapas han llevado a cabo en contra de normalistas rurales.
El desprecio de la 4T por las normales rurales es tal que ha continuado con la reducción de su presupuesto. En septiembre se planteó que para el ejercicio 2021 sólo sería asignado un presupuesto de 20 millones 597 mil pesos para estas escuelas. Después de algunos meses de negociaciones el presupuesto terminó quedando en 170 millones, según menciona el periodista Luis Hernández Navarro.
No obstante, dicha cantidad es insuficiente y representa un 85% de reducción presupuestal para estas instituciones educativas, tomando en cuenta que en 2015 la cantidad que se destinó para ellas fue de mil 195 millones de pesos. Como puede apreciarse, el neoliberalismo continúa intacto, a pesar de que cada mañana la 4T pretenda hacernos creer que por decreto ha acabado.
Va otro dato relevante al respecto de la continuidad neoliberal en materia de políticas de educación pública del actual gobierno. En la SEP, la Dirección General de Educación Superior para Profesionales de la Educación, es decir, la que se encarga de la atención de normales rurales sigue estando a cargo del mismo funcionario heredado de la administración de Peña Nieto: Mario Alfonso Chávez Campos.
Las ofensivas y agresiones contra el normalismo rural son ataques al conjunto de la educación pública en México. Por eso, la respuesta frente a esto no puede quedar en unas regiones o limitada a algunos sectores. Tenemos el importante desafío de construir la unidad entre estudiantes, docentes y trabajadores educativos de todos los sectores y todos los niveles, para enfrentar como uno solo, en las calles, las ofensivas que este gobierno está llevando a cabo contra la educación.
Fuente de la información e imagen: https://www.laizquierdadiario.mx/