América Latina/ 23.04.2018/ Fuente: CLADE
La Semana de Acción Mundial por la Educación (SAME), iniciativa de movilización internacional coordinada por la Campaña Mundial por la Educación (CME), este año se celebra del 22 al 28 de abril con la consigna «¡Mantengan sus promesas por la educación!«. Su objetivo principal es exigir a los gobiernos que rindan cuentas sobre la implementación de la Agenda de Educación 2030 en sus países, teniendo como premisa la participación activa de la ciudadanía en el seguimiento e implementación de estos compromisos. En la Semana, se realizarán actividades de incidencia política y movilización social en más de 100 países de todo el mundo, las cuales seguirán durante todo el año.
Con un énfasis particular en recordar a los Estados y a la ciudadanía de todo el mundo que la gestión democrática es la piedra angular de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), y dando seguimiento a las movilizaciones del año pasado, la SAME 2018 se propone señalar la necesidad de que los gobiernos establezcan planes y hojas de ruta realistas, creíbles y transparentes para garantizar una educación pública, gratuita, de calidad e inclusiva para todas las personas, hasta el 2030. Queremos que los gobiernos y la comunidad internacional reafirmen y asuman su responsabilidad con la realización de la Agenda de Educación 2030, garantizando mecanismos claros, inclusivos y transparentes de rendición de cuentas y tomando en consideración la participación activa de la sociedad civil, especialmente de los sujetos de las comunidades educativas.
Además del Objetivo de Desarrollo Sostenible 4 (ODS 4), referido a la educación, y el Marco de Acción para la Educación 2030, que fueron adoptados en el 2015 y conforman la Agenda de Educación 2030, se realizó los días 1° y 2 de febrero de este año la Conferencia sobre el Financiamiento Educativo de la Alianza Mundial por la Educación (AME) en Dakar, Senegal. En esta ocasión, varios gobiernos y la comunidad internacional realizaron promesas respecto al financiamiento del derecho humano a la educación. Estos compromisos representarán un aumento de US$30.000 millones en inversiones en educación por los países en desarrollo, así como US$2.300 millones adicionales de países donantes. Ahora es papel fundamental de la sociedad civil darle seguimiento a estos compromisos y presionar para que se cumplan. Vale recordar, asimismo, que en la Agenda de Educación 2030 y en la Carta de Lima, adoptada por los Ministerios de Educación de América Latina y el Caribe en el 2014, se prevé el compromiso de los Estados de la región en invertir como mínimo el 6% de su PIB y el 20% de su presupuesto público total en educación.
En este contexto, la CLADE apoya y le da seguimiento a la participación de los foros nacionales que son sus miembros, en los espacios de acompañamiento a la implementación de los ODS que se hayan creado en cada país. Anima también su participación en el proceso de elaboración de los informes voluntarios nacionales que algunos Estados de la región presentarán, en julio de 2018, al Foro Político de Alto Nivel de la ONU (High Level Political Forum), principal arquitectura de seguimiento a la Agenda de Desarrollo 2030 a nivel internacional. Este año presentarán sus revisiones nacionales voluntarias los siguientes países de la región: Bahamas, Colombia, República Dominicana, Ecuador, Jamaica, México, Paraguay y Uruguay.
Un avance promisor para el seguimiento y la realización de la Agenda 2030 en la región ha sido la constitución de estructuras y espacios institucionalizados de monitoreo e implementación de los ODS en 19 países de la región, según se puede observar en esta sistematización realizada por la Oficina Regional de UNESCO para América Latina y el Caribe (UNESCO OREALC). A nivel regional, la CLADE integra, desde enero de 2017, el Comité Directivo de la Educación 2030 para América Latina y el Caribe, y acompaña los trabajos del Foro de la Sociedad Civil en la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), siendo estas instancias las responsables por darle seguimiento a la realización de la Agenda 2030 en la región. Sin embargo, datos del informe Global Education Monitoring Report (GEM) 2017/18 revelan que un tercio de los Estados de América Latina y el Caribe no rinde cuentas a sus respectivas ciudadanías de manera permanente.
Ante este escenario, demandamos que los gobiernos:
– garanticen y fortalezcan espacios estructurados, seguros e institucionalizados para una participación activa y efectiva de la sociedad civil en el seguimiento e implementación de la Agenda de Educación 2030, en referencia a la legislación, planificación, presupuesto y monitoreo;
– prioricen y aseguren en dichos espacios la participación de sindicatos de trabajadoras/es de la educación y organizaciones estudiantiles, así como de mujeres, personas con discapacidad, indígenas y afro descendientes, entre otras poblaciones históricamente marginadas;
– eliminen y rechacen las políticas y legislaciones que tengan como objeto reprimir y criminalizar la protesta social y la labor de defensoras/es de los derechos humanos e integrantes de la comunidad educativa;
– garanticen los presupuestos y medios de implementación necesarios para el cumplimiento de la Agenda de Educación 2030 en los países, en base al compromiso con el fortalecimiento de los sistemas educativos públicos, como una responsabilidad de los Estados;
– desarrollen planes creíbles y transparentes para la implementación de la Agenda de Educación 2030 y establezcan mecanismos claros, accesibles e inclusivos de rendición de cuentas e información a la sociedad civil sobre el estado de cumplimiento de estos planes, de manera transparente y responsable, posibilitando así la participación amplia de la sociedad civil en su seguimiento y realización.
Con miras a lograr respuestas de las autoridades para estas exigencias, sugerimos e impulsamos una serie de actividades. ¡Conózcalas aquí!
Seguiremos compartiendo más informaciones sobre los mensajes clave, los objetivos y la agenda de la SAME 2018, destacando especialmente las actividades que se desarrollen por iniciativa de la comunidad educativa y la sociedad civil organizada en distintos países de América Latina y el Caribe, a través de esta página web: www.same2018.org
Acceda también a la página de la SAME 2018 a nivel internacional: http://actionweek.campaignforeducation.org/es/
La Semana de Acción Mundial por la Educación y la Agenda de Educación 2030
Desde el 2000, la CME coordina la realización de la Semana de Acción Mundial por la Educación, una gran movilización internacional que se impulsa en la última semana de abril de cada año, con la finalidad de impulsar actividades y debates relacionados al cumplimiento de las metas internacionales para la educación en más de un centenar de países. La Semana se refiere a abril del 2000, cuando 164 gobiernos reunidos en el Foro Mundial sobre la Educación en Dakar firmaron compromisos con la garantía del derecho humano a la educación de todas las personas, que deberían cumplirse hasta el 2015 y que se conocieron como Educación para Todos (EPT).
Ante la proximidad del fin del plazo para el cumplimiento de la EPT y de los Objetivos de Desarrollo del Milenio (ODM), en septiembre de 2015, los Estados miembros reunidos en la Asamblea General de la ONU adoptaron los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) hasta el 2030, cuyo Objetivo número 4 prevé la obligación de los Estados de «garantizar una educación inclusiva, equitativa y de calidad y promover oportunidades de aprendizaje a lo largo de la vida para todos y todas». Poco tiempo después, el 4 de noviembre de 2015, se adoptó en la 38ª Conferencia General de la UNESCO, el Marco de Acción para la Educación 2030, documento que desarrolla los principios y establece estrategias para la implementación del objetivo de educación de la nueva Agenda de Desarrollo Sostenible. Así, al lado de la Declaración de Incheon, el Marco de Acción hace parte de la Agenda de Educación 2030 y se constituye en el documento estratégico que orientaría la acción de los Estados en los próximos años