América del sur/Bolivia/27 Enero 2018/Fuente: Prensa Latina
Para ello, fue necesario llevar a cabo tres importantes acápites durante los 12 años de Proceso de Cambio en el país, dígase la erradicación de la pobreza, la inversión en educación y la nacionalización de la economía.
Acerca del primer punto, García Linera precisó que no puede haber sociedad del conocimiento, ni desarrollo científico verdadero si la mitad de la población se acuesta con hambre cada noche, como sucedía hace 12 o 15 años atrás.
Asimismo, explicó que se multiplicó la inversión en educación en tiempos porcentuales, del seis al 16 por ciento, respecto al presupuesto del Estado, lo cual se traduce en tres mil 200 millones de bolivianos (463 millones 096 mil 960.93 dólares) a 21 mil millones de bolivianos (tres mil 039 millones 073 mil 806.08 dólares).
Refirió, además, que las universidades triplicaron el presupuesto, se derrotó el analfabetismo, se erigieron mil nuevos colegios y se logró que el 99 por ciento de los profesores alcanzaran la licenciatura, en pos de una mejor educación para los jóvenes.
Por su parte, con la nacionalización de la economía se consiguió un incremento 12 veces mayor de la inversión pública.
Comentó, que los nuevos tiempos demandan novedosas obras constructivas con uso intensivo de tecnología, iniciadas ya en el país, como los sistemas de energía renovable, dígase solar, eólica, geotérmica, así como también la industrialización del gas, urea, amoniaco, litio y sus derivados, entre otros.
Precisamente, indicó que se debe priorizar entre otros el desarrollo de la industria a base de litio, en pos de convertirse en el país que defina el mercado mundial de ese mineral.
Resaltó que Bolivia se encuentra en estos momentos en pleno proceso de industrialización, fase posterior a la nacionalización de los recursos naturales y de la recuperación de las empresas estratégicas. ‘La industrialización es el ancho horizonte que los bolivianos hemos comenzado a caminar en el siglo XXI, con optimismo y con entusiasmo. Pero, esta nueva época del proceso histórico requiere hoy (…) de abundante conocimiento científico y tecnológico’, profundizó.
De tal manera, será fundamental para la planificación, el diseño, la construcción y la administración de estas nuevas obras de un mayor número de obreros especializados, técnicos, ingenieros, agrónomos y científicos, precisó.
Igualmente, señaló que para cumplir con este reto histórico es preciso contar también con la creación de nuevos y propios paquetes tecnológicos, de sistemas informáticos, de herramientas, de conocimientos adecuados a la realidad, a las características, a la geografía y al mercado del país.