La humildad intelectual favorece el aprendizaje y la creatividad

Por: Tendencias 21

La arrogancia del sabelotodo induce al error y dificulta la innovación

 

La humildad intelectual ayuda a valorar realmente lo que sabemos, así como nos deja abiertos al pensamiento reflexivo, al compromiso intelectual, a la curiosidad y a la apertura mental. La arrogancia intelectual induce al error y dificulta el aprendizaje.

Las personas que presumen de su inteligencia tienen mayores dificultades para adquirir nuevos conocimientos y para admitir posibles errores en su manera de pensar, según ha determinado una investigación.

La humildad intelectual (HI) se considera en psicología como una virtud equivalente a la de tener la mente abierta, audacia e integridad intelectual. Se opone al orgullo y a la arrogancia intelectual.

Podría interpretarse que la HI es un indicio de sabiduría, ya que se asocia también con la comprensión de los límites del conocimiento propio, que propicia la apertura a nuevas ideas y refuerza el deseo de aprender.

La investigación, publicada en la revista Journal of Positive Psychology y dirigida por Elizabeth Krumrei-Mancuso, profesora de la Universidad Pepperdine de California, se desarrolló con 1.200 voluntarios, la mayoría estudiantes universitarios.

El objetivo era determinar el vínculo entre la humildad intelectual de una persona y su capacidad de adquirir nuevos conocimientos.

A los voluntarios se les hicieron una serie de preguntas que luego se calificaron según una escala creada por los propios investigadores para evaluar, por un lado, su actitud de superioridad intelectual, y por otro lado, su predisposición para el aprendizaje.

Los resultados de este experimento demostraron, en primer lugar, que los voluntarios con humildad intelectual por lo general no presumen de su nivel de conocimientos.

También que tienen una valoración objetiva de los conocimientos que realmente poseen y, por último, que están abiertos al pensamiento reflexivo, al compromiso intelectual, a la curiosidad y a la apertura mental. Poseen una motivación intrínseca para aprender.

Habilidades cognitivas

Según los investigadores, estos resultados explican la relación constatada en psicología entre la humildad intelectual y el conocimiento general, si bien no hay constancia de que la HI signifique que las personas con esta virtud tengan, necesariamente,  mayor capacidad cognitiva.

Añaden que el hecho de que la HI esté asociada a personas con amplios niveles de conocimientos, pero no con las habilidades cognitivas (que no guardan relación alguna con la humildad intelectual), parece indicar que la HI tiene más que ver con los conocimientos adquiridos (inteligencia cristalizada) que con la capacidad de solucionar problemas (inteligencia fluida).

La inteligencia fluida representa la capacidad de adaptarse y enfrentar situaciones nuevas de forma espontánea, sin necesidad de recurrir a los conocimientos y la experiencia adquiridos. La inteligencia cristalizada, por el contrario, representa el conjunto de conocimientos y habilidades adquiridos mediante el aprendizaje.

Exceso de confianza 

La investigación arrojó otro resultado sorprendente: las personas intelectualmente humildes a menudo subestiman sus habilidades cognitivas. Sin embargo, manifiestan una ventaja adicional, respecto a las personas que presumen de saber mucho.

Estas personas, explican los investigadores, al considerar que su nivel de conocimientos es superior al real, corren el peligro de evaluar erróneamente  la realidad y de extraer conclusiones definitivas basadas en evidencias no contrastadas.

Este riesgo es impropio de las personas con HI, ya que tienden a subestimar sus habilidades cognitivas. La investigación constata al respecto que comprender el estado real del conocimiento de cada uno y admitirlo, puede ser el primer paso para la búsqueda de nuevos conocimientos.

Efecto inesperado

La investigación arrojó, por último, un efecto inesperado: la humildad intelectual está asociada con notas más bajas en los estudios. Los investigadores no encuentran una explicación a esta constatación, que podría estar relacionada con una consideración diferente de los estudios universitarios por parte de las personas con HI.

Es decir, puede que las personas con humildad intelectual no sientan la pasión por el éxito académico, medido en buenas notas, que muestran las personas que presumen de todo lo que saben.

No obstante, los investigadores reconocen que se necesitan más estudios para para comprender cómo la humildad intelectual afecta al conocimiento, la cognición y la capacidad para aprender, si bien ya asumen que la HI tiene implicaciones para nuestras actitudes sociales y comportamientos sociales.


Referencia

Links between intellectual humility and acquiring knowledge. Elizabeth J. Krumrei-Mancuso et al. The Journal of Positive Psychology. DOI: https://doi.org/10.1080/17439760.2019.1579359

Fuente: https://www.tendencias21.net/La-humildad-intelectual-favorece-el-aprendizaje-y-la-creatividad_a45180.html
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La escolaridad, si no es crítica y liberadora, es domesticación. ¿Para qué sirven los profesionistas?

Autor: Pedro Echeverría V.

1, No confundo educación con escolaridad, aunque en la sociedad capitalista muy poco se valora la educación -que es espontánea- para otorgarle un papel preponderante a la escolaridad que se justifica con papeles, certificados, calificaciones, títulos, todo para demostrar hasta qué grado hemos sido domesticados para tener derecho a formar parte del sistema. Hoy en México hay profesionistas en todos los campos, obedientes de las órdenes de quien manda en el sistema de explotación y opresión. Se propaga que a mayores estudios mayor capacidad de liberación; pero no, al contrario, a mayores títulos más grandes privilegios y mayor subordinación.

2. En México el sistema escolarizado en los años setenta era de un año de preescolar, seis años de primaria, tres de secundaria, tres de preparatoria, cinco de licenciatura, luego vendrían los postgrados. A partir de los años ochenta el proceso de privatización se aceleró. Si en los años sesenta el Estado controlaba casi todo el sistema, 50 años después la escolaridad ha pasado en 35 por ciento bajo el control privado y la orientación tecnológica avanza con enorme rapidez. Con el pesado argumento de que la educación debe estar al servicio de la producción, no sólo se han abierto cientos de escuelas técnicas, sino en las mismas universidades se han eliminado materias sociales para ser sustituidas por las técnicas.

3. Lo visto en más en 50 años es el crecimiento de la escolaridad con millones de estudiantes, decenas de miles de escuelas y maestros, la multiplicación de las clases medias en medio de su pobreza económica; pero también el agigantado crecimiento de una economía que sólo ha beneficiado a un millar de familias propietarias de todo. La sociedad mexicana, en vez de caminar hacia el igualitarismo, producto del enorme crecimiento de la educación escolarizada, ha seguido sufriendo la extrema e injusta desigualdad. La escolaridad para la domesticación, en vez de indignarse y protestar ante esa realidad, ha preferido adaptarse a la clase dominante.

4. Sí, es indudable, para que un pueblo sea libre necesita educación. Espero que López Obrador, su secretario de Educación: Moctezuma, los maestros de la CNTE, el SNTE y seguidores de la Gordillo, entiendan que el “Plan Educativo” no puede consistir en enterrar la vieja reforma peñanietistas o hacerle algunos cambios para que todo siga igual. Se necesita una reforma liberadora, libertaria, que enseñe a los alumnos a investigar y criticar todo, en primer lugar –“con todo respeto”-, todo autoritarismo del maestro, de los padres, del cura, gobierno, patrones, de los textos. Que maestros y estudiantes investiguen antes de adoptar un juicio o una posición.

5. Los estudiantes y sus maestros, aparte de aprender a pensar y planear, tienen que salir de su salón de clases, de sus escuelas, de su comunidad, para estar en contacto con otras personas, otras cosas, con la vida. ¿Para qué carajos sirven a la sociedad estudiantes, profesionistas, que no difunden sus pensamientos, sus experiencias, sus necesidades, sus demandas, creciendo con temores y miedos a la autoridad y el poder? Conozco más de 100 títulos sobre educación y libertad, pero por su sencillez y claridad he recomendado mucho leer a Ivan Illich sobre la escolaridad, a S. Neill sobre la libertad y a Paulo Freire sobre educación y poder.

6. ¿Para qué se requieren más días y más horas de clase a la semana o al mes si se busca solamente adaptar a los estudiantes al sistema autoritario de explotación capitalista? Necesitamos otra educación; no más conocimientos inútiles que no ayuden a pensar, a investigar, analizar. ¿Para qué carajos nos sirve la historia, biología o matemáticas como enseñanzas memorísticas o repetitivas sino es para transformar el mundo? Pienso que de por sí hay personajes pusilánimes, pero hasta estos entran en movimiento y acción cuando se apropian del pensamiento crítico y libertario. ¿Para qué más profesionistas con pensamientos y acciones acomodaticias?

7. Pienso que el gobierno lópezobradorista debe ser vigilado para que no sea más de lo mismo. La CNTE ha demostrado durante casi 40 años que está muy lejos de cualquier oportunismo, que lo ha combatido de manera radical y consecuente; pero puede caer en el sectarismo al tomar de antemano el rechazo a otras posiciones que podrían romper con el estancamiento tan dañino a casi 4 décadas de lucha permanente. Por allí tiene que trabajar para discutir y analizar propuestas que podrían ayudar a fortalecer las batallas magisteriales. Para alcanzar la libertad, también los maestros sindicalistas debemos batallar contra el autoritarismo externo e interno.

Fuente: http://www.rebelion.org/noticia.php?id=245230

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