Según los reportes, la policía estimó que alrededor de 20.000 personas asistieron a la manifestación del sábado.
Los legisladores surcoreanos están debatiendo actualmente proyectos de ley que cumplirían con algunas de las demandas de inmunidad de parte de los profesores ante las acusaciones de abuso infantil. Pero algunos expertos han expresado su preocupación por los posibles cambios, señalando que las propuestas podrían debilitar aún más la protección de los niños, que trabajan duro durante años en entornos hipercompetitivos.
En Corea del Sur, egresar de universidades de élite se considera crucial para las perspectivas profesionales y matrimoniales.
Según datos del Ministerio de Educación y del Servicio Nacional de Seguro Médico proporcionados al legislador liberal de oposición Kim Woni la semana pasada, más de 820 estudiantes de primaria, secundaria y preparatoria murieron por suicidio entre 2018 y 2022.
Vestidos de negro, miles de maestros y personal escolar ocuparon una calle cerca de la Asamblea Nacional, coreando consignas y sosteniendo carteles que decían: “Otorgar inmunidad a los maestros frente a denuncias de abuso emocional infantil”. Los manifestantes dijeron que más de 9.000 profesores han sido denunciados por padres por abuso infantil en los últimos ocho años.