Matemáticas y sexismo en la educación

Por: María Isabel Cortez

La tan arraigada idea de que ser bueno o buena en matemáticas es una especie de don y no producto del estudio y del trabajo, pareciera afectar a las niñas. Por otro lado, la asociación que se hace entre matemáticas y competitividad tampoco las favorece, pues según estudios en el ámbito de la antropología, en las sociedades patriarcales como la nuestra, las mujeres tenemos tendencia a presentar aversión al riesgo y a evitar situaciones en las que tengamos que competir.

Junto al grupo de colegas del Colectivo de Mujeres Matemáticas en Chile, llevamos un par de años ofreciendo charlas a escolares, y cada vez que pedimos a la audiencia el nombre de alguna científica, usualmente el único que se escucha es el de Marie Curie. Por supuesto que esta no es una queja hacia el estudiantado, pues incluso nosotras que tenemos una formación científica, no conocimos sino que hasta bien avanzados nuestros estudios la figura de Emmy Noether, considerada la madre del Álgebra Abstracta y catalogada por Albert Einstein como una de las matemáticas más importantes. El de Emmy Noether es un clásico ejemplo de invisibilización de los aportes que las mujeres han hecho a las ciencias, lo que a su vez es un síntoma de algo más complejo y que está directamente relacionado con las demandas de una educación no sexista por parte de las estudiantes en Chile.

El sexismo en la educación involucra tanto las prácticas como el contenido que se transmite, entendiendo por prácticas cosas como a quienes se les otorga más la palabra y/o la mirada en la sala de clases, el tipo de tareas que se les asigna a hombres y a mujeres, o de quienes se espera un mejor desempeño en determinadas asignaturas. La literatura sugiere que la educación en Chile es sexista en varios aspectos. Por ejemplo, conocido es el estudio realizado en Chile por Mizala, Martínez y Martínez que sostiene que profesoras y profesores tienen menores expectativas respecto al  rendimiento de las niñas en matemáticas en comparación al de los niños, diagnóstico que coincide con otro realizado por la OCDE y que extrapola este comportamiento a las expectativas de carrera que madres y padres tienen para sus hijas e hijos. En cuanto a contenidos, además de la invisibilización de las mujeres en las ciencias, está el caso de Lenguaje, donde el número de autoras a leer es bajo en comparación al de escritores, o el de Historia, donde las menciones a mujeres no dejan de ser anecdóticas y asociadas generalmente a un varón. ¿Quién habrá escuchado en el colegio que, durante la revolución francesa, Olympe de Gouges redactó la Declaración de los Derechos de la Mujer y la Ciudadanía  para  protestar contra el hecho de que la Declaración de los Derechos del Hombre no incluía a las mujeres? (que por cierto, no se trataba sólo de un problema de androcentrismo en el lenguaje).

Volviendo a Emmy Noether, a pesar de que fue una matemática extraordinaria, debió enfrentar muchas de las dificultades de su tiempo asociadas al ser mujer. Un hecho que a primera vista parece una simple curiosidad, pero que al analizarlo se descubre que posee gran carga simbólica, es el trato que recibía de parte de sus contemporáneos. Algunos se referían a ella como Der Noether (artículo masculino en alemán) en señal de “respeto”,  evidenciando con esto  la contradicción que percibían en que Noether fuera a la vez mujer y una matemática reconocida. Durante los más de 80 años que han transcurrido desde que Noether nos dejó, muchas cosas han cambiado para mejor. Por ejemplo, las mujeres ya no estamos sujetas, como sí lo estuvo Noether, a la prohibición de enseñar en universidades. Sin embargo, aún es difícil que se nos reconozca como seres a quienes se les puede atribuir las virtudes esperadas de un buen matemático.  Probablemente debido a que la objetividad, la racionalidad y la genialidad son cualidades que en nuestra cultura se alinean fuertemente con la masculinidad y no con la feminidad. De hecho, un estudio reciente de Leslie, Cimpian, Meyer y Freeland parece reforzar este punto al arrojar que existe una correlación inversa entre las expectativas de “genialidad” en una disciplina y la proporción de mujeres que obtienen un doctorado en el área. Es decir, mientras más “brillantes” se crea que son quienes se dedican a una determinada especialidad, el porcentaje de mujeres ahí será menor. Y esto no sólo incumbe a disciplinas del área de las ciencias como Física o Matemáticas, pues en las artes y humanidades respectivamente, Composición Musical y Filosofía son otro ejemplo de especialidades con aura de genialidad y pocas mujeres.  En este punto, alguien podría argumentar que las mujeres no eligen esas disciplinas simplemente por una cuestión de habilidades.  Sin embargo, hay una serie de trabajos que sugieren que los estereotipos y las prácticas juegan un papel importante en alejar a las mujeres y a las niñas de esas áreas del conocimiento. A partir de observaciones y entrevistas en la sala de clases, se ha comprobado que las niñas, incluso si tienen buen rendimiento, experimentan dificultad para autodenominarse buenas en matemáticas si su buen desempeño fue producto del esfuerzo. Por el contrario, no tienen inconveniente en tachar de buenos o  buenas en matemáticas a quienes  obtienen notas similares pero sin necesidad aparente de mucho estudio  (ver trabajos de Radovic en Chile). La tan arraigada idea de que ser bueno o buena en matemáticas es una especie de don y no producto del estudio y del trabajo, pareciera afectar a las niñas. Por otro lado, la  asociación que se hace entre matemáticas y competitividad tampoco las favorece, pues según estudios en el ámbito de la antropología, en las sociedades patriarcales como la nuestra, las mujeres tenemos tendencia a presentar aversión al riesgo y a evitar situaciones en las que tengamos que competir.

Erradicar estereotipos de género no parece ser una tarea fácil ni mucho menos de corto plazo, pero tal vez sí ayude el dirigir esfuerzos en desmitificar ciertas disciplinas, como las matemáticas en nuestro caso. Un primer paso podría consistir en diversificar el tipo de actividades a desarrollar en la sala de clases, ofreciendo por ejemplo tareas que privilegien la reflexión pausada y la colaboración, estilo de trabajo que por cierto es mucho más cercano al quehacer real de quienes investigamos en matemáticas.  Y por supuesto, recordando al mismo tiempo de que las mujeres no hemos sido y no somos ajenas al desarrollo de la disciplina. Así como Emmy Noether hay más ejemplos. En esa dirección, la exposición Retratos de Matemáticas[1] intenta ser un aporte, exhibiendo la diversidad de trayectorias de carrera y de vida de mujeres matemáticas contemporáneas de Chile y de América Latina. Pues aunque en nuestro país no superemos el 20% entre quienes forman el cuerpo académico del área, es importante que las nuevas generaciones tengan modelos de rol en los que apoyarse.

No es justo que terminemos la enseñanza media e incluso la educación superior, convencidas de que nuestro aporte al desarrollo de la humanidad ha sido prácticamente nulo, ni tampoco que experimentemos inseguridad respecto a nuestra capacidad para  desenvolvernos en ámbitos que son distintos a los que se nos suele relegar.

[1] Entre el 9 y el 30 de Junio en la Biblioteca VIVA de

Fuente: http://www.eldesconcierto.cl/2018/06/12/matematicas-y-sexismo-en-la-educacion/

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Israel: Académicos se oponen a la segregación de la educación por sexos

Asia/Israel/19 Agosto 2017/Fuente: Sputniknews

Destacados académicos israelíes se oponen a que el Consejo para la Educación Superior se pronuncie a favor de una segregación de los estudiantes según el sexo, así como a la segregación de los profesores según el sexo de sus alumnos.

La denuncia se produce después de que el pasado mes de mayo el Consejo para la Educación Superior aprobara la ampliación de la segregación de estudiantes y de profesores según su sexo hasta el año 2022, informa el diario Haaretz.

Esta decisión permite que en algunos centros universitarios los estudiantes acudan a clase en función de su sexo, e incluso se regula el sexo de los profesores para que no se dé el caso de que una profesora enseñe a estudiantes judíos ultraortodoxos varones, en contra de las leyes religiosas de la modestia.

Según el abogado Hagai Kalai, uno de los firmantes que presentado la petición, en la actualidad hay en Israel una veintena de centros de enseñanza superior que segregan a los estudiantes según el género y todo indica que esta tendencia se ha incrementado paulatinamente en los últimos años.

La mayoría de los profesores afectados por la tendencia son mujeres académicas a las que no se les permite estudiar o enseñar a estudiantes ultraortodoxos varones.

Una mujer en niqab
© AP PHOTO/ CLAUDE PARIS

Según Kalai, cientos de alumnas mujeres son «sacrificadas» cada año debido a esta práctica en los institutos de educación superior de Israel.

La petición señala que mientras se dice que se quiere proceder a la integración de los estudiantes ultraortodoxos varones, «para quienes no es correcto escuchar la voz de una mujer», se está sacrificando a las alumnas y a las profesoras mujeres, y esto se ha convertido en una «posición aceptable» dentro del mundo académico.

La doctora Yofi Tirosh, profesora en la facultad de Derecho de la Universidad de Tel Aviv, advierte que «si esta tendencia no se detiene, en el plazo de diez años veremos que un gran porcentaje de estudiantes en Israel estudian en función de la segregación sexual».

La Universidad de Bersheba, en el sur de Israel, uno de los centros más progresistas del país, se opuso a crear cursos en los que los estudiantes estén separados según su sexo, aunque otros muchos centros se disponen a segregar a los alumnos.

Imagen: http://www.cciu.org.uy/uploads/20141024094057.jpg

Fuente: https://mundo.sputniknews.com/cultura/201708171071644283-israel-sexismo-universidad/

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Chile: Estudiantes se manifestaron por “Una Educación No Sexista” en Baquedano

América del Sur/Chile/17 Junio 2017/Fuente: Publimetro

La manifestación se desarrolló en el marco de los casos de acoso y abuso sexual que ha afectado a alumnas de diferentes casas de estudio en el último tiempo.

En busca de la erradicación de este tipo de conductas, la noche del jueves se desarrolló la marcha convocada por estudiantes secundarios y universitarios para protestar por lo que denominaron la “educación sexista” que habría en el país, luego de conocerse casos de acoso sexual que ha afectado a alumnas de diferentes casas de estudio en el último tiempo.

Un centenar de manifestantes se agruparon en Plaza Italia alrededor de las 20:00 para manifestarse en contra de lo que denominaron el “sexismo” en las universidades, tras conocerse el caso en la escuela de periodismo de la Universidad de Concepción que involucran a 3 profesores de la mencionada casa de estudio y por la que existe una denuncia en Fiscalía.

La marcha comenzó de manera pacífica en Baquedano, sin embargo, tras la interrupción del tránsito, Carabineros procedió actuar con el carro Lanzaguas para dispersar la protesta. Hasta el momento, Carabineros no ha dado un parte oficial sobre el número de detenidos por los incidentes.

Fuente: https://www.publimetro.cl/cl/noticias/2017/06/16/incidentes-finaliza-marcha-una-educacion-no-sexista.html

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