Sangriento atentado frente a una escuela primaria en Kabul

Sangriento atentado frente a una escuela primaria en Kabul

Una explosión ante una escuela de niñas en la capital afgana, Kabul, causó al menos 33 muertos y decenas de heridos, incluidos estudiantes, informó el ministerio de Interior afgano este sábado (08.05.2021).

La Unión Europea (UE) condenó enérgicamente el «horrendo» atentado con bomba que constituye una violación «despreciable» del derecho internacional.

La explosión que según la agencia dpa dejó un saldo provisional de 33 muertos y unos 80 heridos, ocurrió en el distrito de Dasht-e-Barchi, en el oeste de Kabul, cuando los residentes estaban en la calle haciendo compras antes de la fiesta del Aíd al Fitr, la próxima semana, que marca el final del mes sagrado del Ramadán.

El barrio está poblado principalmente por chiitas hazaras y en el pasado ha sido atacado por militantes islámicos sunitas.

El portavoz del ministerio de Salud, Dastagir Nazari, dijo que varias ambulancias fueron despachadas al lugar para evacuar a los heridos. «La gente en la zona está molesta y ha golpeado a varios trabajadores de ambulancias», indicó.

Sayed M. Modarresi
@SayedModarresi
[Thread] The school’s name: Sayyed-ul-Shohada. It means ‘Prince of Martyrs’, a title given to Imam Hussein. Who knew the 40 innocent souls that perished today, would follow in his footsteps?

Image

Escenas desgarradoras

«Vi cuerpos ensangrentados entre una nube de humo y polvo, cuando heridos gritaban y sufrían», declaró a la AFP Reza, quien escapó a la explosión.

«Vi a una mujer buscar entre los cuerpos mientras llamaba a su hija», agregó. «En ese momento, encontró una bolsa de su hija ensangrentada y se desmayó».

Reza agregó que la mayoría de las víctimas eran adolescentes que acababan de salir de la escuela.

Afghanistan Bombenanschläge auf Schule in Kabul

La gente busca a sus familiares después de que al menos 30 personas, en su mayoría alumnas, hayan muerto en tres explosiones consecutivas dirigidas a una escuela en Kabul, la capital de Afganistán.

UE: «despreciable acto de terrorismo»

La misión europea en Afganistán condenó el atentado.  «El horrendo ataque… es un despreciable acto de terrorismo», señaló la misión por Twitter.

The horrendous attack in Dasht-i Barchi area in Kabul, is an despicable act of terrorism. Targeting primarily students in a girls’ school, makes this an attack on the future of Afghanistan. On young people determined to improve their country. Our thoughts go to all affected.

«Tener como objetivo estudiantes de primaria en una escuela de mujeres, hace de este ataque una agresión contra el futuro de Afganistán. Contra gente joven determinada a mejorar el país».

La misión de asistencia de Naciones Unidas en Afganistán (Unama) expresó su «profundo rechazo» a la explosión.

«EE.UU. condena este bárbaro ataque cerca de una escuela femenina en Kabul, Afganistán. Ofrecemos nuestras condolencias a las víctimas, muchas de ellas menores, y sus familias. Exigimos el fin inmediato de la violencia y de los ataques sin sentido contra civiles inocentes», dijo en un comunicado el portavoz del Departamento de Estado, Ned Price.

«Unicef condena con fuerza el horrible ataque ocurrido hoy cerca de la escuela secundaria Sayed Ul-Shuhada», dijo en un comunicado su directora ejecutiva, Henrietta Fore. «El ataque se ha cobrado las vidas de docenas de escolares, la mayoría niñas, y ha herido de gravedad a muchos más», agregó por parte el organismo de Naciones Unidas.

Dasht-e-Barchi ha sido frecuente objetivo de ataques de militantes islamistas suníes.

Aunque el ataque no fue reivindicado, el presidente afgano Ashraf Ghani acusó a los talibanes y al Estado islámico.

Fuente de la Información: https://www.dw.com/es/sangriento-atentado-frente-a-una-escuela-primaria-en-kabul/a-57473451

Comparte este contenido:

Coronavirus, catástrofe para migrantes

Por: La Jornada

Está demostrado que los desastres naturales, inevitables en sí mismos, se convierten en catástrofes sociales debido a las grandes desigualdades sociales y al desmantelamiento de la capacidad de respuesta del Estado, ambos fenómenos resultado directo de la lógica con que opera el sistema económico vigente. Así, fenómenos como sismos, huracanes, inundaciones o sequías, tienen efectos particularmente devastadores sobre los sectores de la población que ya se encontraban en una situación de vulnerabilidad, y no es distinto lo que ocurre durante la crisis sanitaria causada por la enfermedad Covid-19.

En este sentido, la pandemia en curso se ha vuelto catastrófica para uno de los grupos de mayor vulnerabilidad: el de los migrantes indocumentados que se encuentran en Estados Unidos. Como es sabido, los entre 10 y 12 millones de personas que viven en territorio estadunidense –sin los papeles necesarios para acreditar su residencia legal– han experimentado unas condiciones tan difíciles como paradójicas, pues, al mismo tiempo que pagan impuestos y contribuyen al desarrollo de sus comunidades, sufren abusos laborales sistemáticos, se ven impedidas de usar servicios de salud, obligadas a llevar existencias semiclandestinas por temor a la deportación, y se encuentran expuestas a padecer todo tipo de arbitrariedades por parte de agencias gubernamentales. Todos estos males que se han exacerbado de manera tan deliberada como inhumana desde que Donald Trump llegó a la Casa Blanca hace poco más de tres años.

En este contexto tan adverso, los migrantes sufren los estragos de la pandemia en, al menos, cuatro maneras específicas. En primer lugar, como ya se dijo, porque su estatus les impide acceder a los servicios médicos por la doble vía de la falta de cobertura y del miedo a ser detectados y arrestados al solicitar asistencia. Segundo, porque los alrededor de 40 mil migrantes que se encuentran en los centros de detención del Servicio de Inmigración (ICE, por sus siglas en inglés) están expuestos al contagio debido a las condiciones de hacinamiento imperantes en dichas instalaciones, muchas de las cuales carecen de la infraestructura mínima para detectar de manera oportuna los casos probables y para tratar a los pacientes. A mediados de la semana pasada ya había 32 casos confirmados entre los internos, y 11 entre el personal que labora en las prisiones.

Además, la administración de Trump ha usado la emergencia como pretexto para acelerar su política de deportaciones masivas, las cuales ya se realizaban en flagrante violación al derecho internacional, y que hoy tienen lugar ignorando también cualquier protocolo sanitario para la contención de la pandemia. Sólo entre el 21 de marzo y el 9 de abril, la oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP) estadunidense deportó de manera sumaria a más de 10 mil personas que ingresaron a su territorio, sin tomar medida alguna de prevención epidemiológica. Para colmo, los trabajadores indocumentados enfrentan una aguda precariedad laboral que los convierte en las primeras víctimas de la ola de despidos causada por la parálisis económica que es efecto indeseable, pero ineludible, de las medidas de aislamiento para frenar la propagación del coronavirus SARS-Cov-2.

En tanto, resulta casi impensable un gesto de empatía por parte del gobierno de Trump para aliviar la situación de los migrantes en esta coyuntura, entonces cabe llamar a que las autoridades mexicanas se movilicen para defender los derechos de los paisanos que, debe recordarse, conforman casi la mitad de la población estadunidense indocumentada, así como para recibir en las mejores condiciones posibles a quienes son retornados de manera forzosa a este lado de la frontera.

Fuente: https://www.jornada.com.mx/2020/04/11/opinion/002a1edi

Imagen: https://www.shutterstock.com/image-photo/silhouette-refugees-people-luggage-walking-row-734188318?irgwc=1&utm_medium=Affiliate&utm_campaign=Pixabay+GmbH&utm_source=44814&utm_term=https%3A%2F%2Fpixabay.com%2Fimages%2Fsearch%2Fmigraci%25C3%25B3n%2520de%2520personas%2F

Comparte este contenido: