Saltar al contenido principal
Page 128 of 6178
1 126 127 128 129 130 6.178

España: Los sindicatos realizan la primera huelga en la banca en 40 años para pedir subidas salariales

Los representantes de los trabajadores cifran en un 75% el seguimiento y la AEB lo rebaja al 25%. Reclaman para Santander, BBVA, Sabadell y Bankinter una subida como la que aplicarán CaixaBank y las antiguas cajas.

permitan alcanzar un acuerdo en las próximas reuniones», indica.

Las principales concentraciones se han realizado hoy en Boadilla del Monte, en Madrid, donde se celebra la junta de accionistas del Santander, así como en Barcelona y Sabadell, según aseguran los propis sindicatos.

Los sindicatos llevan su malestar a la junta del Santander

En la junta del Santander, los sindicatos han intervenido para reclamar subidas salariales. Noemi Trabado, de CCOO, ha reclamado «subidas acordes al beneficio histórico del sector». Julia Ochoa Alba, de UGT, ha lamentado la «dramática dualidad» entre los «beneficios extraordinarios» y una plantilla que «no puede celebrar nada porque el clima laboral es durísimo». Silvia Armendariz, de la CGT, ha pedido que «los beneficios se repartan entre quienes los generan» y ha calificado de «extremament urgente que el banco muestre un gesto positivo.

Fuente: https://www.lavanguardia.com/economia/20240322/9580219/sindicatos-cifran-75-participacion-primera-huelga-banca-40-anos.html

Comparte este contenido:

La ONU alerta al mundo de que la basura electrónica crece cinco veces más rápido que su reciclaje

El último informe mundial de residuos electrónicos indica que el ritmo al que desechamos aparatos sobrepasa nuestra capacidad de reciclaje; en España cada ciudadano genera 19,6 kilos de esta basura, dos por encima de la media europea

 

En 2022 la humanidad generó 62 millones de toneladas de desechos electrónicos, el equivalente a un millón y medio de camiones cargados de basura hasta los topes que, puestos en fila, darían la vuelta al mundo por el Ecuador, según datos del cuarto Informe Mundial de Residuos Electrónicos de las Naciones Unidas, que se publica este miércoles. El documento conocido como GEM (por la siglas en inglés de Global E-waste Monitor) muestra que los europeos fuimos los más sucios en términos per capita, con más de 17 kilos de chatarra digital por persona, y pone encima de la mesa un ritmo de producción insostenible, puesto que la generación de este tipo de residuos está aumentando cinco veces más rápido que el reciclaje documentado.

 

Según el informe, elaborado por el Instituto de las Naciones Unidas para la Formación Profesional y la Investigación (UNITAR) y la Unión Internacional de Telecomunicaciones (UIT), la generación anual de desechos electrónicos aumenta 2,6 millones de toneladas al año en todo el mundo y va camino de alcanzar los 82 millones de toneladas anuales en 2030. Este crecimiento nos conducirá a un potencial colapso, advierten sus autores, debido a la diferencia cada vez mayor en los esfuerzos de reciclaje en relación con el crecimiento de la generación de desechos electrónicos en todo el mundo. En 2020 solo éramos capaces de gestionar el 22% de esta cantidad de basura y el porcentaje se reducirá hasta el 20% en 2030, según sus previsiones.

 

 

Para hacerse una idea de la cantidad de basura que generamos, los autores del informe recalcan que esos 62 millones de toneladas equivalen al peso de 107.000 de los aviones de pasajeros más grandes del mundo o a 800 de los mayores portaaviones al máximo de carga. Por materiales, la mitad de los residuos corresponde a metales (31 millones de toneladas) y el 27% (17 millones de toneladas) son plásticos. Un tercio de esta basura corresponde a dispositivos pequeños como hornos microondas, tostadoras o aspiradoras; una cuarta parte son grandes aparatos como lavadoras, lavavajillas y neveras; y alrededor de un 7% corresponde a equipos como ordenadores portátiles, teléfonos móviles y dispositivos GPS.

 

“Bajo la alfombra” de otros países

 

El informe hace hincapié en la necesidad de aumentar la capacidad de reciclaje y en los beneficios económicos que la recuperación de estos materiales produciría, aunque en el plano real todo este supuesto sistema de “economía circular” hace aguas por todas partes. La realidad es que en 2023 solo 81 países del mundo tenían una legislación sobre residuos electrónicos (tres más que en 2019) y 67 tienen un instrumento legal para regular su gestión con disposiciones que promueven la responsabilidad ampliada del productor. Y lo que es más grave: hasta un 8,2% del total mundial de este tipo de basura (5,1 millones de toneladas) fueron enviados a terceros países en 2022, de los cuales el 65% se enviaron desde países de ingresos altos a países de ingresos medios y bajos a través de movimientos fuera del radar de las autoridades.

 

 

“La fuerza impulsora detrás de estos movimientos transfronterizos suele ser comercial, ya que la demanda de equipos electrónicos usados de segunda mano y más baratos es alta en los países receptores”, asegura el informe. “Por ejemplo, se están importando grandes cantidades de equipos y accesorios de comunicación digital a países de ingresos bajos y medio-bajos como dispositivos falsificados y de mala calidad”. En este sentido, los autores llaman a las autoridades responsables a regular las telecomunicaciones y certificar que los equipos importados cumplan con los estándares funcionales y de calidad.

 

Por continentes, el informe indica que los europeos generamos 17,6 kg de residuos electrónicos por cabeza y año, seguidos de Oceanía (16,1 kg) y América (14,1 kg), mientras que las tasas de recolección y reciclaje fueron de 7,5 kg en Europa, 6,7 kg en Oceanía y 4,2 kg en América. En España, cada ciudadano generó 19,6 kg de estos residuos en un año, dos kilos por encima de la media europea. “La situación no está mejorando”, reconoce Pascal Leroy, director General de WEEE Forum, una entidad sin ánimo de lucro que reúne a organizaciones que promueven la gestión responsable de estos residuos en todo el mundo. “Incluso en Europa, donde la legislación ha estado en vigor durante más de 20 años, solo el 43% de estos residuos está documentado como recolectado formalmente”. Esto significa que el 57% del flujo de desechos electrónicos europeos no se contabiliza, una cifra que a escala global se eleva hasta el 77,7%.

 

 

Esta situación evidencia —en opinión de Leroy— todo lo que queda por hacer, incluyendo el llamamiento a los consumidores para que compren mejor y se deshagan de los residuos a través de canales oficiales. Esta acumulación de desechos electrónicos “requiere una atención urgente”, según Nikhil Seth, director ejecutivo de UNITAR, mientras que Cosmas Zavazava, desde la UIT, apunta que este informe debe “hace sonar la alarma para la necesidad de regulaciones sólidas para aumentar la recolección y el reciclaje”.

 

El reciclaje como excusa para no frenar

 

Ethel Eljarrat, directora del Instituto de Diagnóstico Ambiental y Estudios del Agua del CSIC (IDAEA-CSIC), cree que estos resultados tendrían que hacer pensar a la gente que el reciclaje no es la solución milagrosa a los problemas de los residuos. “En general, parece que si hacemos una economía circular en la que reciclamos tenemos el problema resuelto, y eso no es cierto”, explica a elDiario.es. “Si, por poder reciclar, vamos aumentando exponencialmente los residuos que generamos nunca saldremos de este bucle”, avisa. “La gestión debería centrarse en intentar frenar el consumo que hacemos de todo tipo de materiales”.

 

Si, por poder reciclar, vamos aumentando exponencialmente los residuos que generamos nunca saldremos de este bucle. La gestión debería centrarse en intentar frenar el consumo. Ethel Eljarrat — Directora del IDAEA-CSIC

 

Félix Antonio López Gómez, investigador del CENIM-CSIC especializado en la gestión de este tipo de residuos, considera que el informe nos da una idea de la magnitud del problema. “También nos muestra que la chatarra electrónica va cambiando, ahora aparecen muchos paneles fotovoltaicos o las lámparas LED, que antes no estaban”, destaca. En su opinión, detrás de este gran incremento parece deducirse que la transición energética y digital está disparando la demanda de determinados metales. “Y que la economía circular como concepto está muy bien, pero la realidad dice que esa circularidad no se alcanza y va a ser muy difícil alcanzarla en todos los sectores”.

 

 

Uno de los problemas, apunta López Gómez, es que aunque se ha avanzado mucho a la hora de recuperar los metales más abundantes, sigue habiendo una gran dificultad tecnológica para aprovechar el resto. En este aspecto, él y su equipo del CSIC trabajan en el proyecto ‘Recuperación de materias primas críticas’ (RC-METALS) y la empresa Atlantic Copper tiene un proyecto para el tratamiento de 60.000 toneladas anuales de material electrónico en Huelva a partir de 2026. “Aún hay algunas esperanzas, pero estamos produciendo tanto a tanta velocidad que no somos capaces de tratar los residuos que estamos generando”, señala. “Un aspecto muy importante es que en España sabemos los aparatos eléctricos y electrónicos que importamos, pero sobre dónde van y dónde se aprovechan los residuos que generamos no tenemos ni idea: falta trazabilidad”.

 

En España sabemos los aparatos que importamos, pero no dónde van y dónde se aprovechan: falta trazabilidad. Félix Antonio López Gómez — Investigador del CENIM-CSIC

 

Eljarrat también subraya la necesidad de dejar de usar a los países en vías de desarrollo como vertederos y hacerlo de manera correcta dentro de nuestras propias fronteras. Y recuerda que los compuestos químicos presentes en los diferentes residuos pueden ser liberados durante los diversos procesos de reciclaje y recuperación, y pueden también estar presentes en los productos producidos a partir de materiales reciclados. “Cuando reciclas un televisor de hace 20 años, vuelves a introducir en el ambiente un compuesto tóxico que hoy está prohibido”, apunta. Esto conlleva un riesgo para la salud de quienes trabajan en estas plantas, opero también para los consumidores y el medio ambiente en general.

 

 

Recientemente, Eljarrat y su equipo demostraron que esto era lo que sucedía en una planta de reciclaje de Cataluña, donde detectaron la presencia de retardantes de llama que están prohibidos por su toxicidad desde hace años, pero que vuelven a la cadena de producción sin que nadie los controle. “Si tú fabricas un producto nuevo con este material reciclado estás introduciendo un compuesto que, a día de hoy, está prohibido fabricar”, explica. “Si tienes que fabricar un móvil, por ejemplo, está prohibido poner este retardante y en una fábrica nadie lo va a poner. Pero si utilizas un circuito reciclado, ese circuito ya lo lleva y nadie te va a controlar si está o no está”. Un ejemplo de que en todo este conglomerado de intereses no solo está en juego la sostenibilidad del sistema industrial, sino la salud de las personas.

 

Fuente: https://www.eldiario.es/sociedad/onu-alerta-mundo-basura-electronica-crece-cinco-veces-rapido-reciclaje_1_11221422.html

Comparte este contenido:

[Reseña] Un cerebro lleno de palabras

Sinopsis

Tener un cerebro lleno de palabras nos da seguridad para relacionarnos, para expresar sentimientos, para defendernos ante las adversidades… Mientras más palabras acumulemos en nuestro cerebro más garantía tenemos de envejecer más tarde y de defendernos contra esas enfermedades que a ciertas edades te roban las palabras. Este libro es un instrumento social con el que podemos convencer a las personas para que se sigan cultivando a lo largo de la vida y así formar parte de la cultura de nuestro entorno. Desde que nos despertamos hasta que nos acostamos vivimos, convivimos y nos comunicamos a través de las palabras. Mamen Horno, psicolingüista, experta en la materia y dueña de una prosa sencilla y clara no exenta de ironía, nos invita, en este ensayo ameno, interesante (y, sí, también emotivo), a reflexionar sobre su poder con el convencimiento de que hacerlo es un modo extraordinario de reflexionar sobre nuestra propia naturaleza.

Mamen Horno Chéliz es profesora de Lingüística General en la Universidad de Zaragoza desde 1998, titular desde 2003. Licenciada en Filología Hispánica por la Universidad de Zaragoza en 1996, Doctora por la misma universidad en 2001 y Licenciada en Psicología (itinerario de clínica) por la UNED en 2014. Acumula la friolera de ocho trienios (tempus fugit), cuatro quinquenios y le han concedido de momento 3 sexenios de investigación. Pertenece al Grupo de Referencia del Gobierno de Aragón Psylex y al Instituto de Patrimonio y Humanidades de la Universidad de Zaragoza. Vicedecana de Profesorado e Innovación Docente de la Facultad de Filosofía de la U. de Zaragoza.

Reseña

El libro está dividido en cinco capítulos que nos van llevando por el difícil mundo del cerebro y las palabras:

  • ¿Cómo y dónde se almacenan las palabras en el cerebro?
  • ¿Cómo han llegado hasta aquí? La adquisición del léxico nos ocupa toda la vida.
  • La pérdida de las palabras
  • Palabras que dañan, palabras que sanan
  • Un cerebro sin palabras

Ha querido la casualidad que la lectura anterior a este libro haya sido Las gratitudes de Delphine de Vigan y que aún con el sentimiento de esta gran novela en la que la protagonista va perdiendo las palabras, me vuelva a topar con las palabras y con el cerebro, Con Un cerebro lleno de palabras se vuelven a avivar sentimientos y recuerdos, Mamen Horno sabe tocar la fibra sensible de las personas y nos lleva a la curiosidad a través de sus investigaciones como psicolingüista.

Creo que es muy interesante la dimensión social y transformadora que podemos percibir en este libro, en el que las palabras van a formar parte de la vida misma de las personas, nos va a ayudar a sentirnos bien, nos va a ayudar a desahogarnos, nos va a ayudar a entender a los niños y las niñas, nos va a ayudar a comprender muchas situaciones de la vida con las que nos enfrentamos cada día tanto en nuestra familia como en la sociedad en la que vivimos.

La primera cita con la que Mamen Horno comienza el libro está sacada de Inmaculada de la Fuente de su obra El exilio interior. La vida de María Moliner, otra gran mujer que te hace emocionar con el estudio de las palabras y con lo que pasó haciendo el DUE. Cuando lo leí escribí esto: Emociona conocer la infancia, la juventud y la vida adulta que pasó María Moliner, narrada con todo lujo de detalles por la autora de esta biografía: su nacimiento, su infancia, la marcha de su padre a Argentina, su educación en la ILE, su vida de muy buena estudiante, su independencia materna, sus diferentes trabajos, su visión de madre de 4 hijos, sus nietos, su amor a las plantas y a la naturaleza, su defensa ante el Movimiento de que «no era roja», la enfermedad de su marido… y en todo momento marcada por la visión política de la que ella, aunque no lo confesaba abiertamente, se sentía crítica y marchaba con ideas progresistas, liberadoras y no afines al régimen. En todo momento su gran pasión fue revisar el DRAE (1914) y escribir el DUE.

Resulta muy interesante los cuadros que nos va poniendo sobre Las reflexiones de la vida cotidiana o Desmontando mitos con información, en los que podemos ver de forma práctica lo que anteriormente nos ha estado explicando. Algo tan sencillo como bajarse al nivel del lector y darle pautas para que entienda mejor cada uno de los apartados teóricos en los que nos va introduciendo.

A modo de conclusión de cómo y dónde se almacenan las palabras, Mamen Horno nos dice:“ Recuerda que las palabras se vinculan unas a otras con múltiples relaciones. Tu pensamiento divaga de un concepto a otro también gracias a los puentes construidos por las rimas, a los pasadizos secretos creados por las palabras polisémicas, a las puertas abiertas por las relaciones léxicas. Las palabras que pueblan tu cerebro te permiten pensar, te permiten sentir y te permiten crear. Y cuantas más palabras tengas, sean de la variedad lingüística que sean, más lejos podrás llegar”.

Cómo funciona el cerebro para que los bebés empiecen a hablar, cómo ampliar nuestro vocabulario, cómo ir componiendo nuestro lexicón mental, cómo perdemos las palabras, cómo protegernos de estas enfermedades que nos roban las palabras… de estas y otras muchas cosas nos va documentando Mamen Sordo para llegar a conformar la mejor versión de nosotros mismos.

En definitiva, un libro muy recomendable para seguir ampliando nuestro conocimientos de las palabras, de nuestras relaciones, de nuestros comportamientos con respecto a la cultura y a la diversidad que funciona en nuestra sociedad plural y vertiginosa en la que estamos viviendo, porque las palabras dañan pero también sanan, son liberadoras de sentimientos y nos ayudarán a controlar nuestras emociones para llegar a convivir en entornos más armónicos.


Para saber más

La visibilización en el lenguaje es un acto de salud pública”. Entrevista de Mariángeles García (Yorokobu) a Mamen Horno.

Palabras en el cerebro. Mamen Horno. UCC Unizar.

Aragón Radio. La Cadiera. “En la puntica de la lengua”. Mamen Horno. ¿Cómo nos hablamos a nosotros mismos?

M.ª Carmen Horno Chéliz participó en el programa de Radio Nacional “No es un día cualquiera”, en la sección “Todo es Lenguaje” de Estrella Montolío, y mantuvo una conversación con ella y Carles Mesa sobre la etiqueta de

#TwitterparaLingüistas.

#TwitterparaLingüistas – Mamen Horno con Estrella Montolío y Carles Mesa

The post [Reseña] Un cerebro lleno de palabras appeared first on El Diario de la Educación.

Comparte este contenido:

México: El Sindicato de Trabajadores de la Universidad amenaza con huelga por tope salarial

La líder sindical hizo un llamado al Gobernador del Estado, Alfonso Durazo Montaño, para contar con su apoyo en la negociación de un 100% de aumento salarial

 El Sindicato de Trabajadores y Empleados de la Universidad anunció el emplazamiento a huelga para el 15 de abril, también a las 17:00 horasde no eliminarse el tope salarial que tanto ha afectado a los trabajadores.

“Demandamos urgentemente autorizar recursos extraordinarios y suficientes para nivelar el salario mínimo a todos los trabajadores administrativos y de servicio, con percepciones por debajo del mismo”, exclamó Lourdes Rojas Armenta, secretaría general del sindicato.

“Implementar un programa de retabulación en ese sector de trabajadores, ya que nivelar el salario mínimo de ley a las categorías más bajas trae como consecuencia tabulares horizontales que no distinguen niveles de responsabilidad ni competencias”, dijo.

La líder sindical hizo un llamado al Gobernador del Estado, Alfonso Durazo Montañopara contar con su apoyo en la negociación de un 100% de aumento salarial, con base al aumento que se ha dado de en los últimos 3 años al salario mínimo, y que los incrementos salariales de los trabajadores administrativos y de servicio nunca estén por debajo de la inflación.

Fuente: https://www.elimparcial.com/son/sonora/2024/03/19/el-sindicato-de-trabajadores-de-la-universidad-amenaza-con-huelga-por-tope-salarial/

Comparte este contenido:

La generación Z y el cambio climático

Por: José María Manzano Callejo 

Existe un amplio consenso científico en que el cambio climático plantea un riesgo tremendo para la civilización humana. Según el Panel Intergubernamental sobre Cambio Climático (PICC) de las Naciones Unidas, es inequívoco que las actividades humanas han impulsado y continúan intensificando el calentamiento global del planeta debido a la quema de combustibles fósiles y la liberación de emisiones de gases de efecto invernadero (GEI). Como resultado, cada una de las últimas cuatro décadas ha sido sucesivamente más cálida que cualquier década anterior desde 1850. Esto está dando lugar a fenómenos climáticos más severos caracterizados por frecuentes incendios forestales, olas de calor extremas, tormentas devastadoras, inundaciones y sequías. En consecuencia, los científicos advierten a los gobiernos de todo el mundo que se debe realizar un esfuerzo concertado para limitar el calentamiento a 1,5 °C por encima de los niveles preindustriales para evitar que estos eventos se vuelvan más peligrosos y catastróficos. Todas las publicaciones sucesivas del PICC están enviando el mismo mensaje de urgencia y advirtiendo sobre puntos de inflexión irreversibles: el cambio climático ahora se describe como una “ebullición global” y la humanidad ha “abierto las puertas al infierno”.

El PICC enfatiza la necesidad urgente de tomar medidas climáticas y resalta la amenaza para la existencia que representa alcanzar puntos de inflexión para el bienestar humano, la salud planetaria y las economías globales. El Informe de Riesgos Globales del Foro Económico Mundial 2023 identifica el “fracaso en la mitigación del cambio climático” y el “fracaso en la adaptación al cambio climático” como las dos principales amenazas globales, destacando el riesgo de la dependencia de sectores intensivos en carbono.

Dada esta incómoda realidad, se espera que los gobiernos, las industrias, la sociedad civil y los individuos tomen medidas inmediatas para responder a la crisis climática. A pesar de algunos avances logrados en la 28ª reunión de la Conferencia de las Partes (COP28) de la Convención de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (CMNUCC) sobre la transición para abandonar los combustibles fósiles y avanzar hacia la agricultura sostenible, las políticas climáticas actuales en todo el mundo no alcanzan la fuerza necesaria para abordar eficazmente la escalada de la crisis climática. La interconexión entre el cambio climático, la biodiversidad, la salud de los ecosistemas y la sociedad humana también es ampliamente reconocida y los impactos adversos del cambio climático inducido por el hombre continúan intensificándose y causando daños y pérdidas generalizados.

A pesar del consenso en la comunidad científica sobre la realidad y la importancia del cambio climático causado antropogénicamente y la abrumadora cantidad de evidencia de que el planeta se está calentando, muchas personas y organizaciones en todo el mundo todavía no apoyan los esfuerzos para mitigar las emisiones globales de GEI. En algunos casos, muchos todavía ignoran por completo la ciencia climática y sus advertencias. Esto está sucediendo en diferentes países y en diversos niveles de la sociedad, incluidos los líderes mundiales y los representantes gubernamentales. Por ejemplo, los problemas medioambientales globales son cada vez más cuestionados por conocidos líderes mundiales escépticos de la ciencia climática como el ex presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, que ha afirmado que el cambio climático es un engaño, y otro fuerte negacionista del cambio climático, el australiano ex primer ministro Scott Morrison. Esto tiene un impacto en la búsqueda de soluciones climáticas globales, genera controversia en torno a la ciencia climática y retrasa la acción para abordar urgentemente el cambio climático.

En la COP28 se logró un acuerdo global para acelerar la acción climática, pero su futuro depende de su implementación y compromiso efectivo en todo el mundo

Aunque en 2015, 196 países de todo el mundo se comprometieron a limitar el calentamiento global a muy por debajo de 2 °C, preferiblemente 1,5 °C, para mitigar los efectos devastadores del cambio climático en virtud del Acuerdo de París, el IPCC informó que, a pesar de progresos, el aumento de las temperaturas persiste debido a la falta de determinación política. En consecuencia, el IPCC declaró inequívocamente que el mundo tiene una ventana limitada hasta 2025 para alcanzar el pico de emisiones globales y debe reducirlas a la mitad para 2030 para tener alguna esperanza de limitar el calentamiento global a 1,5 °C. En la COP28 se logró un acuerdo global para acelerar la acción climática, pero su futuro depende de su implementación y compromiso efectivo en todo el mundo.

ANSIEDAD CLIMÁTICA

Los más jóvenes se ven especialmente afectados por las perspectivas del cambio climático a pesar de haber contribuido muy poco a la situación actual

La gente es cada vez más consciente de los peligros que plantea el cambio climático para la salud y el bienestar humanos. Este reconocimiento vital destaca las diversas formas en que el cambio climático afecta a la humanidad más allá de la salud física. Cuando las personas experimentan directamente eventos extremos, como grandes tormentas, sequías o incendios forestales, pueden afectar gravemente su estado mental y provocar trastornos de estrés postraumático. Esta comprensión subraya la urgencia de abordar el cambio climático no sólo como una cuestión ambiental, sino también como un problema complejo que afecta todos los aspectos de la vida humana. La ansiedad climática surge de una profunda preocupación por el cambio climático y sus consecuencias de gran alcance tanto para el medio ambiente natural como para la vida humana. Tal angustia puede manifestarse como pensamientos inquietantes o sentimientos abrumadores de preocupación respecto de futuros desastres climáticos y el destino continuo de la humanidad y el mundo. También puede traducirse en miedo, inseguridad, parálisis e inacción, así como sentimientos de ira, agotamiento, impotencia y tristeza. Abordar los desafíos del cambio climático y sus impactos en las generaciones futuras requiere un enfoque holístico que enfatice la necesidad de estrategias integrales para mitigar cualquier efecto adverso. Evitar la ansiedad climática pone de relieve la necesidad apremiante de actuar y buscar colectivamente soluciones de sostenibilidad para aliviar estas preocupaciones y asegurar un futuro estable para las generaciones venideras. Los más jóvenes se ven especialmente afectados por las perspectivas del cambio climático a pesar de haber contribuido muy poco a la situación actual.

INVESTIGACIÓN

Una nueva investigación de la Universidad Curtin de la Dra. Diana Marinova, ha demostrado que los jóvenes australianos tienen grandes preocupaciones sobre el cambio climático, que está teniendo un impacto significativo en sus vidas y podría tener consecuencias más amplias en las próximas décadas.

Publicado en Sustainable Earth Reviews, el estudio encuestó a estudiantes universitarios australianos pertenecientes a la Generación Z (personas nacidas entre 1995 y 2010) y encontró que el cambio climático era su principal preocupación ambiental.

La ansiedad climática ve la preocupación por el cambio climático manifestada en pensamientos inquietantes, angustia abrumadora por futuros desastres climáticos y el destino continuo de la humanidad y el mundo. También puede traducirse en sentimientos de miedo, inseguridad, ira, agotamiento, impotencia y tristeza.

Dora Marinova, profesora de Sostenibilidad de Curtin, refiere que la ansiedad climática era un factor que contribuye a la sensación general de inquietud de la Generación Z hacia el futuro, que podría tener importantes ramificaciones en el futuro. «Estos jóvenes están muy preocupados y, en cierto modo, intimidados por la falta de medidas concretas para luchar contra el cambio climático», afirmó la profesora.

La Generación Z tiene serias preocupaciones que no solo afectarán su salud mental (que será algo con lo que la sociedad y el sistema de salud pública tendrán que lidiar) sino también las decisiones que toman los jóvenes: cómo gastan su dinero, si tienen familia, su elección de carrera y más.

El estudio también reveló que, a pesar de sus preocupaciones, sólo el 35 por ciento de la Generación Z participaba regularmente en el activismo climático tradicional, como la recaudación de fondos, la donación de dinero a causas nobles, el apoyo a campañas políticas o la participación en eventos como marchas o protestas.

La Dra. Diana Bogueva, describe que los encuestados utilizan regularmente las redes sociales para expresar sus inquietudes y obtener información. Por otro lado, afirma que, si bien sus actividades on line (en línea) eran importantes, es posible que la Generación Z necesite participar de otras maneras para aliviar la ansiedad climática e impulsar el cambio. La Generación Z debería considerar participar en áreas de activismo más tradicionales o convencionales, como campañas políticas, para interactuar con los responsables políticos y conectarse mejor con otras generaciones para influir en los tomadores de decisiones, acelerar la acción climática y ayudar a salvaguardar un planeta habitable para todos”, según la autora del trabajo.

La Dra. Bogueva enfatizó que no era responsabilidad exclusiva de la Generación Z resolver el cambio climático (un problema que ellos no crearon), pero tomar medidas significativas puede ayudar a aliviar los sentimientos de ansiedad e impotencia de un individuo: «esto puede incluir descubrir cómo pueden ser parte de la solución en sus vidas personales, ya sea eligiendo una carrera que tenga un impacto o ajustando los productos o alimentos que consumen, entre otras acciones».

Datos clave del estudio

1. Ansiedad climática generalizada: más del 80 % de la generación Z australiana encuestada expresa preocupación y ansiedad significativas por el cambio climático, lo que afecta su salud mental y sus perspectivas futuras.

2. Participación limitada en el activismo tradicional: a pesar de los altos niveles de preocupación, solo el 35% de la Generación Z participa en el activismo climático tradicional, y muchos prefieren las redes sociales como plataforma de promoción.

3. Llamado a un activismo diverso y acción personal: Los investigadores abogan por la participación de la Generación Z en una gama más amplia de activismo y cambios en el estilo de vida personal para combatir la ansiedad climática y contribuir a la acción climática.

Por último, compartir esta reflexión irónica de Mark Twain: «El paraíso lo prefiero por el clima, el infierno por la compañía”.

@JoseMariaManz18

Fuente: https://www.nuevatribuna.es/articulo/sostenibilidad/generacion-z-cambio-climatico/20240309172431224576.html

Comparte este contenido:

Grecia: Movilización estudiantil contra la privatización de la enseñanza superior

Vangelis Kalinterakis | Orestis Triantafyllou
Desde hace casi diez semanas, una oleada de asambleas, ocupaciones y manifestaciones recorre los campus universitarios griegos y las calles de las ciudades. Su objetivo es el proyecto de ley del gobierno de derechas (Nueva Democracia) para permitir la creación de universidades privadas.

La Constitución griega de 1975, que recoge algunos de los logros sociales y democráticos del periodo posterior a la caída de la dictadura colonial (1967-1974), prohíbe la creación de centros privados de enseñanza superior y establece explícitamente que la enseñanza superior sólo puede ser impartida por instituciones públicas. El proyecto de ley del gobierno es, por tanto, una violación directa de la Constitución, un golpe de fuerza legislativo.

Las protestas estudiantiles que estallaron al inicio del nuevo curso académico en enero son las mayores de los últimos 18 años. Siguen los pasos de la oleada de ocupaciones de 2006-2007, que duró casi 6 meses y logró desbaratar los planes del gobierno derechista de entonces, que quería revisar la Constitución para permitir (ya…) la creación de universidades privadas.

Hoy, decenas de facultades siguen ocupadas en más de 50 pueblos y ciudades, con la reivindicación central «No a las universidades privadas». Las manifestaciones han reunido a decenas de miles de estudiantes, y capas sociales más amplias apoyan la movilización.

Un gobierno en guerra con las y los jóvenes
Los rectores de todas las universidades del país, así como los sindicatos que representan al profesorado, investigadores y personal administrativo de la enseñanza superior, se opusieron al proyecto de ley, a quienes se unieron todas las organizaciones sindicales, así como muchas otras asociaciones y organizaciones profesionales. Los partidos de la oposición han declarado que votarán en contra del proyecto de ley en el parlamento y que tienen la intención de emprender acciones legales para demostrar su inconstitucionalidad y bloquear su aplicación. A pesar de la imagen que el gobierno intenta transmitir a través de los medios de comunicación, controlados en su totalidad por los oligarcas que apoyan al partido en el poder, los sondeos de opinión muestran que la sociedad está dividida sobre la cuestión, si bien entre los más jóvenes (de 17 a 44 años), el rechazo a las universidades privadas es abrumador (entre el 75% y el 80%).

Sin embargo, apoyándose en su mayoría parlamentaria y en su posición dominante en la arena política, el gobierno parece decidido a sacar adelante su plan, aunque ello le lleve a entrar en conflicto con toda una generación. Esta determinación se explica por la prolongada ofensiva que está llevando a cabo contra la juventud, en particular la estudiantil. Como parte de un ataque implacable contra las clases trabajadoras y populares durante los últimos cinco años, la derecha gobernante ha impuesto una reestructuración radical del sistema educativo, desde el nivel primario hasta el universitario, a través de seis proyectos de ley que contienen no menos de 1 090 artículos en 855 páginas de legislación.

El énfasis en la reestructuración de la educación -y de la enseñanza superior en particular- no es casual. Subraya su importancia para la estrategia de la clase dominante griega, que ha encontrado una gran resistencia en este ámbito durante las últimas décadas. De hecho, como volveremos a ver más adelante, el movimiento estudiantil ha logrado bloquear aspectos importantes de esta estrategia neoliberal y de las directivas europeas sobre educación. Al aplicar una política de choque, el gobierno intenta vengarse política e ideológicamente del movimiento estudiantil. El conflicto actual tiene, por tanto, un carácter estratégico: concierne al equilibrio de poder político e ideológico en el seno de la universidad para el periodo venidero.

La situación política en Grecia
Para comprender mejor el significado de las manifestaciones actuales, debemos echar un breve vistazo al contexto político más amplio en el que se están produciendo.

Éste se caracteriza ante todo por el dominio político de Nueva Democracia. La derecha, en el poder desde 2919, salió reforzada de las dos elecciones legislativas de mayo y junio de 2023, tanto porque no sufrió ningún desgaste electoral, a pesar de su política muy dura hacia las clases trabajadoras y de sus numerosos fracasos en una serie de cuestiones, como porque la oposición –en particular el centro-izquierda y la izquierda– se ha hundido. En concreto, Syrizasufrió una auténtica derrota, perdiendo casi la mitad de su electorado y pagando el precio de las políticas neoliberales que aplico durante su etapa en el gobierno (2015-2019) bajo el control quisquilloso de la Unión Europea.

En los meses posteriores a las elecciones legislativas, la crisis de la oposición parlamentaria continuó. Tras la elección como presidente del partido, el pasado mes de septiembre, de Stefanos Kasselakis, un armador afincado en Estados Unidos y antiguo operador de Goldman Sachs, la desintegración ideológica, política y organizativa de Syriza y su transformación en un partido liberal-centrista se aceleró. A pesar de una relativa recuperación electoral, el Pasok [el partido socialista en el poder durante la mayor parte del periodo 1981-2012] no muestra ningún impulso. También es un partido profundamente integrado en la gestión del sistema, estrechamente vinculado a los intereses del capital y fuertemente convergente con Nueva Democracia en casi todas las cuestiones estratégicas.

El resultado es un panorama político sin precedentes desde la caída de la dictadura, marcado por el dominio abrumador de la derecha, la marginación y fragmentación de la izquierda y la ausencia de cualquier oposición que pudiera representar una forma de alternancia, incluso dentro del marco neoliberal.

En el frente social, la política agresiva del gobierno hacia las y los trabajadores y trabajadoras y la juventud está alimentando incremento aterrador de las desigualdades, que está exacerbando el descontento social. En un momento en el que el capital griego se recupera de la larga crisis y los beneficios de las grandes empresas se disparan, los salarios reales siguen cayendo, mientras que partes esenciales del Estado social, como el sistema sanitario público y la educación pública, se privatizan o recortan. Sin embargo, el aumento del descontento popular no logró encontrar una expresión política y desafiar al gobierno.

Durante el periodo anterior, paralelamente al movimiento estudiantil, estallaron luchas sociales en varios sectores (agricultores, sector sanitario). Estas movilizaciones convergieron en la gran jornada de huelga del 28 de febrero, un año después del mayor accidente ferroviario de la historia del país, que se cobró la vida de 57 personas, la mayoría jóvenes. La jornada fue una oportunidad para denunciar la clara responsabilidad de Nueva Democracia y su prolongada política de devaluación y privatización de todo el sistema de transporte público. Las movilizaciones tenían las características de una acción de masas, pero carecían de la duración y la coordinación necesarias para ejercer una presión eficaz sobre el gobierno. Sólo el movimiento estudiantil, por su duración y su capacidad de organización y liderazgo, es capaz de librar una lucha prolongada, cualitativamente distinta de las movilizaciones a corto plazo y/o de las explosiones breves.

2019-2024: un lustro turbulento en las universidades griegas
Incluso antes de llegar al poder, la derecha neoliberal situó la reestructuración del sistema educativo en el centro de su agenda política. Las primeras iniciativas del gobierno surgido de las elecciones de 2019 fueron el intento de abolir el asilo universitario (es decir, la prohibición legal de que las fuerzas policiales entren e intervengan en las instalaciones universitarias) y de introducir una organización de los cursos destinada a disciplinar al alumnado. Al mismo tiempo, el gobierno se ha esforzado en restringir el campo de acción de los sindicatos estudiantiles y en desmantelar los órganos de representación estudiantil en las facultades. El punto culminante de las medidas represivas fue la ley por la que se instituyó una policía universitaria, un cuerpo especial instalado permanentemente en los recintos universitarios -sin equivalente en ningún lugar del mundo- que restringe el acceso del público a los establecimientos, incluso a través de entradas equipadas con verjas y cámaras de seguridad.

Este planteamiento formaba parte de una reestructuración global de la policía, con la creación, o reconstitución, de cuerpos militarizados en los barrios. Sin embargo, la introducción de un cuerpo de policía universitaria tenía como objetivo específico reprimir las acciones de la población estudiantil contra la aplicación de las políticas neoliberales en las universidades.

En 2022, la reacción masiva de los estudiantes para impedir que la fuerza policial especial entrara en los campus se saldó con detenciones, procesamientos y heridas graves a decenas de estudiantes. Impidió de factola creación de la policía universitaria y marcó así una importante victoria del movimiento estudiantil contra el gobierno de derechas, que se vio obligado a admitir que su creación no tenía posibilidades inmediatas de éxito. Estas movilizaciones fueron victoriosas en la medida en que las fuerzas de la izquierda radical consiguieron, mediante una forma de frente unido, movilizar a sectores más amplios de estudiantes en favor de una ruptura con el pasado. La unidad de acción de las fuerzas de la izquierda radical ha sido un punto de apoyo decisivo para las masivas movilizaciones estudiantiles que tienen lugar hoy en toda Grecia.

Grece5 1

Manifestación estudiantil en la plaza Syntagma, frente al Parlamento – Atenas, 1 de febrero de 2024 – foto Christos Avramidis – Jacobin Grecia

El proyecto de ley sobre universidades privada
El proyecto de ley sobre las universidades privadas, principal objetivo del actual movimiento estudiantil, es un intento de desmantelar el sistema de educación pública y gratuita que existe en Grecia desde hace 40 años.

Según la Constitución (artículo 16), las universidades están gestionadas por el Estado y deben ofrecer educación gratuita al estudiantado. A nivel universitario, está prohibida la introducción de tasas académicas. Se trata de una victoria del movimiento estudiantil y de las clases trabajadoras, conseguida gracias a las grandes luchas estudiantiles y populares desde la década de 1960. El gobierno intenta privatizar la enseñanza superior permitiendo que particulares abran universidades en asociación con universidades extranjeras. Lo hace en términos especialmente provocadores, ya que, en esencia, el proyecto de ley pretende permitir que las estructuras de enseñanza postsecundaria ya presentes en Grecia, mediante acuerdos de franquicia con instituciones privadas y públicas extranjeras, otorguen diplomas reconocidos como equivalentes a los de las universidades públicas, lo que hasta ahora ha sido imposible debido a la prohibición constitucional.

El plan del gobierno llama la atención tanto por su total falta de garantías en cuanto a la calidad de la enseñanza impartida en estos futuros establecimientos como por la ausencia de toda previsión de inversión en infraestructuras, equipamiento científico y personal. Concede el acceso a estos establecimientos privados a personas cuyos resultados académicos están muy por debajo de los exigidos por las universidades públicas. Es revelador que, en las futuras facultades privadas de medicina, las y los estudiantes puedan ser admitidos con notas inferiores a la mitad de las exigidas para la admisión en una facultad pública. Así, quienes puedan pagar las matrículas podrán estudiar en centros de dudosa calidad y, de hecho, comprar diplomas equivalentes a los de las universidades públicas. Este proceso conduce tanto a una explosión de las desigualdades como a la formación de titulados y tituladas con competencias cuestionables, que sin embargo serán llamados a cumplir misiones sociales esenciales.

El objetivo es introducir la agenda neoliberal en todas las universidades. La esencia del proyecto es abolir la educación gratuita, como ya ocurre en varios países europeos, y transformar la educación en un producto financiero como cualquier otro, que funcione sobre la base del ánimo de lucro. Sin embargo, la privatización de la enseñanza superior es un modelo fracasado. Según los hechos, la tendencia mundial no es favorable a las universidades privadas, sino a las públicas. En la Unión Europea en particular, la mayoría de las y los estudiantes optan por la enseñanza pública, mientras que las universidades privadas se ven amenazadas de cierre, incluso en países donde tienen un peso particular en el modelo educativo (Estados Unidos, Reino Unido). Además, no es infrecuente que la supresión de la regulación estatal de la educación favorezca la impunidad de los poderosos intereses económicos.

Aunque las protestas estudiantiles son masivas y legítimas a los ojos de amplios sectores de la población, el gobierno se ha embarcado en una escalada represiva para disolver el movimiento. En un primer momento, gracias a su control de casi todos los grandes medios de comunicación, intentó denigrar el movimiento presentando a los estudiantes como «minorías autoritarias» implicadas en «ocupaciones ilegales». Fracasado este intento, movilizó a un estrato de mandarines que ocupaban puestos directivos en las universidades y que se esforzaron por desacreditar el movimiento. Ante un nuevo revés, las autoridades recurrieron a la represión. La policía intervino al menos en cinco ocasiones en los campus, maltratando a los estudiantes y deteniendo a muchos de ellos. Se incoaron numerosos procedimientos judiciales, principalmente contra estudiantes, pero también, por cierto, contra profesores que se negaron a castigar a los alumnos que participaban en el movimiento y a denunciar ante las autoridades a los autores de las ocupaciones, es decir, principalmente activistas políticos y sindicales. Sin embargo, ninguna de estas acciones consiguió quebrar la lucha.

grece6

La manifestación se acerca a la plaza Omonoia, con el servicio de seguridad a la cabeza – Atenas 8 de febrero de 2024 – foto: página web de Unidad Popular

La estructuración del movimiento estudiantil, factor clave de la movilización
Por su estructuración y su grado de politización, producto de una larga historia de lucha, el movimiento estudiantil griego es un fenómeno sin igual en Europa. En cuanto se matriculan en la universidad, las y los estudiantes se afilian automáticamente a las asociaciones de cada facultad o departamento. Las asociaciones de estudiantes (φοιτητικοί σύλλογοι) son los organismos que proporcionan una estructura unificada e independiente y una representación de la población estudiantil lo más cercana posible a su lugar de estudio. Los estatutos que rigen su funcionamiento llevan la impronta de las luchas populares y estudiantiles contra la dictadura de los coroneles (1967-1974), así como de la politización y radicalización hacia la izquierda en los años posteriores a la caída del régimen militar.

Su acción goza de una amplia legitimidad en el seno del estudiantado, como forma de organización y reivindicación de mejores condiciones de estudio, pero también de discusión y deliberación sobre cuestiones políticas que superan el marco universitario. Las elecciones a las juntas de gobierno se celebran simultáneamente en todo el país, para reflejar la unidad del movimiento estudiantil. La participación sigue siendo significativa y los resultados sirven de indicador de las tendencias políticas dentro del mundo estudiantil.

El sindicalismo estudiantil griego se deriva, por tanto, de las actividades de estas asociaciones, que se organizan sobre la base de frecuentes asambleas generales (AG) (aunque con una asistencia muy desigual, según los periodos), en las que las y los estudiantes debaten todos los asuntos y deciden la línea de acción a seguir. Este proceso democrático, a la vez descentralizado y homogéneo a escala nacional, es uno de los principales factores que han contribuido a la aparición recurrente de movimientos estudiantiles estructurados y duraderos, capaces de ejercer una verdadera presión política. Estos movimientos se convierten en momentos de intensa politización para quienes acceden a la universidad.

Es sobre todo por estas razones que el gobierno actual y muchos gobiernos anteriores han intentado imponer reformas que llevarían al desmantelamiento de las asociaciones de estudiantes, consideradas con razón como focos permanentes de protesta y desestabilización de la estrategia burguesa en la enseñanza superior. Hoy, como siempre que el movimiento estudiantil cobra impulso, las asambleas generales desempeñan un papel decisivo en la organización de la lucha. Se reúnen semanalmente y deciden la organización de la lucha y sus objetivos: ocupación de locales, acciones diversas y manifestaciones en Atenas y en todas las grandes ciudades de Grecia. Casi la mitad de las facultades y departamentos universitarios llevan diez semanas ocupados, mientras que más del 60% de las AG han decidido al menos una vez ocupar sus locales.

Según nuestras estimaciones, entre 30 000 y 40 000 estudiantes han participado en estas asambleas generales y la gran mayoría ha votado a favor de las ocupaciones. El nivel de participación en las asambleas generales supera el 70% del de las elecciones estudiantiles (36 000 en 2023 sobre una población estudiantil real de unos 320 000). Al mismo tiempo, se produjeron importantes manifestaciones cada semana en muchas ciudades griegas. El 8 de febrero, estudiantes de todas las ciudades de Grecia se reunieron en Atenas en una manifestación nacional que fue la mayor de toda la comunidad educativa desde 2007. Los estudiantes coordinan la lucha entre asociaciones mediante procesos de coordinación no democráticos, en los que todos y todas tienen derecho a participar, que planifican el movimiento semana a semana en cada ciudad.

La segunda particularidad del movimiento estudiantil griego es la fuerte presencia de la izquierda radical en las universidades. Los componentes de la izquierda radical, que hasta hace poco actuaban en la mayoría de los casos dentro de frentes comunes, obtuvieron un total del 18 % en las elecciones estudiantiles de 2023, un rendimiento muy superior al de las elecciones nacionales, donde, acumulativamente, no superan el 3 %. A esto hay que añadir las fuerzas del Partido Comunista de Grecia (KKE), que han visto crecer su influencia en los últimos años, y ahora ocupan el primer lugar con cerca del 35 % de los votos. Además de su rendimiento electoral, la izquierda radical cuenta con una fuerte dinámica militante y organizativa en las universidades. El radicalismo de la juventud, las características del sistema educativo y, sobre todo, la dinámica de las asociaciones estudiantiles son los factores que conducen a la sobrerrepresentación histórica de la izquierda radical en los campus.

Una larga historia de lucha
La especial importancia del movimiento estudiantil en la vida social y política de Grecia es inseparable de su trayectoria histórica. Su papel decisivo se afirmó durante la lucha contra la dictadura de los coroneles, en particular durante el levantamiento de la Escuela Politécnica en noviembre de 1973, que fue el catalizador de la caída del régimen nueve meses después. La capacidad del movimiento estudiantil para actuar como detonante y catalizador de aspiraciones populares más amplias se remonta a este periodo. La memoria histórica de esta secuencia se refleja en la manifestación anual del 17 de noviembre, que conmemora el levantamiento de 1973. Probablemente única en Europa para este tipo de acontecimientos, esta manifestación ha conservado su carácter masivo y su función de hito para el movimiento social en Grecia.

grece7

Atenas, 17 de noviembre de 1973, frente a la entrada de la École Polytechnique ocupada – los tanques de la dictadura aplastan el levantamiento estudiantil y obrero – captura de pantalla

Pero no se trata simplemente de una cuestión de memoria. A lo largo de las décadas que siguieron a la caída de la dictadura, el movimiento estudiantil experimentó secuencias de intensa movilización que derrotaron una serie de proyectos gubernamentales, bien consiguiendo la retirada pura y simple de proyectos de ley (como en 1979 y 2006-2007), bien bloqueando su aplicación (como en 2010-2011, 2019 y 2021). A través de estas batallas, a menudo exitosas, el movimiento estudiantil ha logrado mantener la universidad como espacio de politización y protesta social. La mejor prueba de ello es el reconocimiento por parte del campo contrario, que se refleja en el viejo deseo de los gobiernos de desmantelar el movimiento estudiantil, sus formas de organización y sus órganos representativos.

Pero no son sólo los gobiernos los que están preocupados por el ambiente político en los campus griegos. La revelación por Wikileaks de decenas de documentos de la Embajada estadounidense en Atenas muestra, entre otras cosas, que los servicios estadounidenses están muy preocupados por la movilización y la influencia de la izquierda radical en el seno de la universidad. Este fue particularmente el caso a finales de la década de 2000, marcado por el levantamiento juvenil tras el asesinato del joven Alexis Grigoropoulos a manos de un agente de policía (diciembre de 2008), y después por las grandes movilizaciones del periodo 2010-2015 contra los planes impuestos por la Troika de la UE y el FMI. En un documento fechado el 13 de febrero de 2009, redactado por Daniel Speckard, embajador estadounidense destinado entonces en Atenas (tras haber ocupado importantes cargos en Irak en el seno de las autoridades estadounidenses de ocupación), y titulado significativamente «La triste situación del sistema educativo en Grecia, un desafío para la diplomacia estadounidense», leemos lo siguiente:

La naturaleza altamente politizada y a menudo izquierdista de muchas universidades en Grecia hace que sea peligroso para el personal de la Embajada visitar los campus e impide que participe en proyectos de asociación (…)
Estamos a favor del reconocimiento de los títulos universitarios privados en Grecia y llevamos mucho tiempo presionando para que se lleven a cabo reformas en este ámbito. Dada la sensibilidad de esta cuestión y el antiamericanismo rampante en la prensa griega, somos prudentes en nuestras declaraciones públicas sobre la cuestión de la reforma educativa en Grecia.
Reiteramos nuestro apoyo a la reforma, subrayamos la contribución de las instituciones de calidad afiliadas a EE.UU. en Grecia y destacamos la experiencia positiva de EE.UU. a la hora de elegir entre universidades públicas y privadas.

grece8 1

«No a la Universidad del Mercado» – «Universidades libres de beneficios y corporaciones» – Atenas, 11 de enero de 2024 – foto de la página web de la Nueva Corriente de Izquierda (NAR)

Conclusión
El movimiento estudiantil en Grecia ha demostrado en los últimos meses que, incluso en condiciones políticas desfavorables, es posible combinar la resistencia con una perspectiva ofensiva. La especificidad histórica de este movimiento en el contexto griego, que combina un modo de organización bien estructurado con una fuerte presencia de la izquierda radical, lo hace capaz de proporcionar una orientación y una dirección colectivas a la lucha, una fuente de inspiración para movilizaciones sociales más amplias. Porque detrás de la lucha actual no sólo está la oposición a las universidades privadas, sino también la cólera de la juventud ante el violento deterioro de sus perspectivas de vida, la frustración de sus expectativas y la espectacular ampliación de las desigualdades sociales, que la reforma de la enseñanza superior no hará sino reforzar.

Aunque el gobierno parece decidido a hacer aprobar el proyecto de ley en el parlamento y aplicarlo, la lucha estudiantil ya ha logrado una importante victoria. La deslegitimación generalizada de las universidades privadas provocará grandes dificultades en la aplicación de la ley. La movilización también ha reabierto el debate, a escala masiva, sobre la necesidad de reforzar la educación pública y, más ampliamente, la oposición a la destrucción y privatización de los servicios públicos.

Las fuerzas de la izquierda radical deben demostrar una vez más que son capaces de aprender las lecciones del movimiento estudiantil. Deben intensificar su acción de base entre las amplias capas sociales golpeadas por las políticas neoliberales. Pero también deben reforzar los procesos de unión, en la perspectiva de una izquierda que rompa con el pasado, para poder desafiar la actual relación de fuerzas.

Vangelis Kalinterakis es licenciado en matemáticas aplicadas y ciencias naturales por la Universidad Politécnica Nacional de Atenas.

Orestis Triantafyllou es estudiante de ciencias físicas y matemáticas en la Universidad Politécnica Nacional de Atenas. Ambos son activistas de Unidad Popular – Izquierda Unitaria.

8/03/24

ContreTemps

Traducción: viento sur

Comparte este contenido:

CII-OVE: Por qué son necesarias las pedagogías feministas?

Luz Palomino/CII-OVE 

Las pedagogías feministas están en permanente construcción, huyendo de la rigidez de recetas cerradas y de la pretensión de neutralidad del discurso educativo oficial. Se trata de tomar conciencia de qué contexto habitamos y cómo lo vivimos, sentimos, reproducimos y transformamos.

Según Simone de Beauvoir, en El Segundo Sexo (1948), una mujer no nace sino se convierte en tal, por una serie de prácticas educativas que abarcan desde la familia hasta el estado, pasando por la religión, la cultura popular y las normas sociales y de etiqueta. Gabriela Mistral fue una maestra que abogó por la educación femenina, tanto en su Chile natal como en la Secretaría de Educación Pública fundada por Vasconcelos en el México pos-revolucionario.

De tal manera, creo que para abordar la relación entre la educación y los feminismos podemos plantearnos dos temas sobre los que dialogar. El primero es el nexo entre la educación formal e informal y diversas prácticas de inclusión o exclusión social. El segundo es el papel de la educación para la asimilación y repetición, o para la transformación de los roles sociales genéricamente asignados a las mujeres y los hombres.

Personalmente, considero que el nexo entre las prácticas sociales de inclusión y exclusión de grupos humanos específicos, mayoritarios o no, y las formas y contenidos de la educación, salta a la vista desde diferentes ángulos, siendo el primero, la elección y construcción de la validez de los conocimientos para sostener, posibilitar y reforzar los proyectos de los grupos que detentan el poder de gobierno, así como de los medios para transmitirlos, hasta imponerlos como los únicos subsistentes. Esto genera que siempre exista una tensión entre la educación formal y las corrientes políticas, sociales o culturales que disienten de las posturas hegemónicas en una determinada sociedad.

En este caminar, las pedagogías feministas proponen «entre – tejer» diversas experiencias desde lo educativo, entendido como un espacio de subversión de un sistema de poderes y privilegios sustentado en las desigualdades de género, clase, sexualidad, etnia, edad, etc. bell hooks (1994) nos recuerda:

 «The academy is not paradise. But learning is a place where paradise can be created. The classroom, with all it´s limitations, remains a location of possibility. In that field of possibility we have the opportunity to labor for freedom, to demand of ourselves and our comrades, an openness of mind and heart that allows us to face reality even as we collectively imagine ways to move beyond boundaries, to transgress. This is education as a practice of freedom».

 

Pueden visualizar compartir este material y otros a través de nuestras redes sociales.

Comparte este contenido:
Page 128 of 6178
1 126 127 128 129 130 6.178
OtrasVocesenEducacion.org