Saltar al contenido principal
Page 1229 of 3041
1 1.227 1.228 1.229 1.230 1.231 3.041

Según Investigación de UNESCO en Argentina: La brecha de género también se puede medir en la ciencia

América del Sur/Argentina/ellitoral.com

¿Equidad de género en ciencia y tecnología en Argentina? Desde una pantalla, el interrogante desafiaba a arriesgar una respuesta, y no hubo que esperar demasiado para conocer el resultado:

– Las mujeres dirigen en menor medida proyectos de investigación y desarrollo, con una diferencia porcentual de 26,7 puntos en el total del registro nacional de proyectos para el período 2009-2015.
– Solicitan y reciben en promedio la mitad del financiamiento para proyectos de investigación y desarrollo que los varones.
– Publican en menor medida en las revistas de mayor impacto y visibilidad internacional, con una diferencia porcentual de 7 puntos.
– Acceden en menor medida a los cargos más altos de la carrera de investigación (11,5 % contra 17,2 %).
– En todo el país, sólo el 11 % de los rectores son mujeres; éstas ocupan el 27 % de las secretarías de ciencia y representan solo el 10.5% de las autoridades de organismos de ciencia y técnica.

Los datos surgen del Proyecto SAGA (STEM and Gender Advancement) de la Unesco, en el que la Argentina participó como país piloto, y se obtuvieron a través de una encuesta sobre políticas e instrumentos de ciencia, tecnología e innovación enviada a 320 organismos del sistema científico nacional, el análisis de 34.000 curriculum vitae cargados en la base CVAR y de 18.000 proyectos de la Agencia Nacional de Promoción Científica y Tecnológica, el Conicet y el Inta. Y fueron presentados este miércoles en la Facultad de Ingeniería Química de la UNL donde se realizó, además, un taller para analizar estos resultados.

La presentación estuvo a cargo de la ministra de Ciencia, Tecnología e Innovación Productiva de la provincia Erica Hynes, quien llevó adelante la coordinación científica de la investigación; la directora Nacional de Programas y Proyectos del Ministerio de Ciencia y Tecnología María Guillermina D’Onofrio, y Rocío Lafuente Duarte y María Victoria Tignino. Las palabras de bienvenida fueron de la vicedecana de esa casa de estudios, María Élida Pirovani.

El diagnóstico y las razones

“Este estudio pretende ofrecer a los países una caja de herramientas para diagnosticar si hay equidad de género, en cuánto se avanzó y cuánto falta para lograr la igualdad, y eso le sirve a los países como insumo para diseñar sus propias políticas públicas”, explicó la ministra, quien destacó el trabajo de un equipo interdisciplinario que, como tal, trabajó desde distintas miradas. “El trabajo estuvo centrado en este diagnóstico del que surgieron los indicadores y los resultados de la encuesta de organismos de ciencia y tecnología. Resta por hacer una encuesta de uso del tiempo que se va a llevar a cabo este año”, anticipó.

El Proyecto SAGA tiene como objetivo principal reducir la brecha de género en los campos de la ciencia, la tecnología, la ingeniería y las matemáticas en todos los niveles de educación e investigación mediante la determinación, medición y evaluación de datos desagregados por género, así como el apoyo al diseño e implementación de instrumentos de política que tengan una influencia sobre la equidad de género.

Argentina y Uruguay son los únicos países de América Latina que participaron de este proyecto al que se va a sumar Chile, anticipó D’Onofrio quien explicó a este diario la metodología que se siguió para alcanzar este resultado, a partir de una muestra prácticamente censal por el volumen de las fuentes consultadas.

La actividad desarrollada en la FIQ se completó con un taller para analizar los resultados de este estudio y encontrar “los por qué, las razones por las que se producen estas desigualdades”, apuntó la experta. En esa misma línea, se trabaja en una agenda de políticas puertas adentro de las instituciones donde la temática de equidad de género en sus políticas o planes está ausente en casi la mitad de fuentes consultadas, según se desprende de la investigación.

“Hay que trabajar muchísimo; hay poco conocimiento sobre de qué estamos hablando”, reconoció D’Onofrio y recordó una respuesta que se repetía a la hora de hacer las respuestas: “Yo tengo muchas mujeres trabajando acá”, le decían. “Pero no estamos hablando de eso; la intención es no quedarnos solo con un diagnóstico con toda su crudeza, sino tratar de avanzar en un trabajo coordinado y articulado del sistema”.

Fuente: http://www.ellitoral.com/index.php/id_um/169060-la-brecha-de-genero-tambien-se-puede-medir-en-la-ciencia-resultados-de-una-investigacion-de-unesco-en-el-pais-politica.html

Comparte este contenido:

La infancia, pisoteada por las empresas: datos del atlas de Derechos de la Infancia y Empresas 2018

El trabajo infantil solo es la cara más visible del impacto del sector privado sobre la niñez. ‘El atlas de Derechos de la Infancia y Empresas 2018’ es una herramienta digital que explora la complicada relación entre ambos

Europa/España/Madrid
Son los futuros dirigentes, clientes, inversores y empleados, pero sus derechos son hoy mismo y a menudo pisoteados por las empresas. Conviene recordarlo cuando se celebra el Día Mundial contra la Esclavitud Infantil. Las prácticas y políticas del sector privado tienen un impacto en niños y niñas que va más allá de su cara más visible, el trabajo infantil.

«Es bastante reduccionista limitarse al trabajo infantil, que solo es uno de los impactos para la infancia, aunque la mayoría de los consumidores solo se fijan en ello», explica Andrés Franco, Andrés Franco, director adjunto de incidencia con el sector privado de Unicef. «Los mayores obstáculos suelen estar relacionados con la larga duración de los turnos de los padres o el tiempo que tardan en desplazarse hacia el lugar de trabajo, la posibilidad de amamantar a los bebés o las consecuencias medioambientales. El mayor riesgo, probablemente, es el cuidado de los menores de cinco años».

La cifra total de niños y niñas trabajadores ha caído en un tercio desde el año 2000, según el informe Infancias robadas 2017 de Save the Children. No obstante, el trabajo infantil aún afecta a al menos 152 millones de menores de entre 5 y 17 años alrededor del mundo, estima la Organización Internacional del Trabajo. La mitad de ellos desempeña su empleo en condiciones peligrosas.África subsahariana concentra las tasas nacionales más altas de trabajo infantil, en países como Camerún (47%), Somalia (49%), en Guinea-Bissau (51%), Benín (53%) o Mali (56%).

No es de extrañar que República Centroafricana obtenga la peor puntuaciónentre los 50 casos objeto de estudio del atlas, mientras España se coloca en cuarta posición al otro extremo de la clasificación, detrás de Francia, Croacia y Chile. La República Centroafricana, el país menos desarrollado del mundo según las Naciones Unidas, se coloca casi al cierre también en el índice Infancias Robadas de Save the Children. Solo Malí, Angola y Níger obtienen peores notas en el ranquin de 172 países. Pese a que el trabajo infantil afecta a más del 28% de los niños de entre 5 y 14 años, el estudio pone de manifiesto que en la infancia de República Centroafricana tiene desafíos con prevalencia aún más pronunciada. La mitad (55%) de las niñas de entre 15 y 19 años están casadas, así como el 28% de los chicos con edad inferior a los 18 años. A pesar de los recientes avances en mortalidad infantil, más del 10% de los niños y niñas del país no llega a su quinto cumpleaños, una tasa que multiplica por 40 la de Finlandia (menos del 0,3%).

Aunque el nivel de riesgo para la infancia está estrechamente vinculado con la pobreza, el penúltimo peldaño de la lista está ocupado por Angola, un país cuya economía el año pasado entró en recesión por primera vez desde 2002 tras el desplome del precio del crudo. “Es sorprendente”, sostiene David del Campo, director de cooperación internacional y ayuda humanitaria de Save the Children, “pero en este caso se debe al ambiente de negocio y a un gobierno poco transparente”.

Para Del Campo es importante contar con una herramienta como el Atlas, pero el problema es otro. “La cuestión es si este trabajo y los muchos otros informes que existen en este ámbito se toman realmente en cuenta en los despachos de toma de decisiones, tanto de la política como de las grandes compañías”, argumenta.

El experto de Save the Children insiste en la importancia de que las empresas entiendan que rentabilidad no está reñida con el respeto de los derechos humanos y del medioambiente. Pero la responsabilidad recae también en los consumidores, que están llamados a conocer la actitud de las compañías y a premiar las buenas prácticas, en lugar de señalar con dedo las malas.

Franco, de Unicef, coincide con él y admite que el Atlas por sí solo no necesariamente producirá un cambio en el sector privado si no se acompaña de acciones concretas. «Ya no es aceptable que una empresa se defienda con la excusa de haber comprado el producto en el mercado internacional y no saber qué prácticas esconde. Hay cada vez más gobiernos que se interesan por estos temas y el atlas brinda una base para empezar a trabajar juntos. Hacer otro tipo de negocio es posible y la infancia tiene que estar integrada en las estrategias de las empresas, así como el cambio climático».

Los sectores más peligrosos para los menores

El Atlas se centra en cuatro sectores de actividad que potencialmente presentan más amenazas para los menores. Uno de ellos es la industria de producción de ropa y calzado, que, según Unicef, puede afectar hasta 250 millones de niños, ya sea como fuerza de trabajo (un 12% de los trabajadores menores de edad está empleado en la industria en general) o como consumidores (las sustancias químicas contenidas en algunos productos pueden representar una amenaza para su salud).

La infancia, pisoteada por las empresas
ATLAS DE DERECHOS DE LA INFANCIA Y EMPRESAS 2018
Las tecnologías de la información y de la comunicación (TIC) han entrañado nuevos retos para la infancia, con el empleo de aproximadamente un millón de niños y niñas en la extracción de minerales y metales usados para producirteléfonos, televisores y ordenadores. Una cifra en aumento año tras año. Los autores de esta herramiente digital denuncian también violaciones relacionadas con la duración de los turnos de trabajo en países productores de tecnología como China.

La industria extractiva también esconde enormes peligros para los más pequeños. Uno de ellos es un mayor riesgo de violencia sexual en las cercanías de proyectos a gran escala, vinculado con la pobreza y la elevada densidad de población por la afluencia de trabajadores de otras localidades. Muchos de los empleados de las minas o los transportistas de materiales suelen ser hombres alejados de su familia, lo que favorece la proliferación de prostitución de menores.

EL ATLAS

Entre otros factores, el Atlas de Derechos de la Infancia y Empresas 2018 toma en cuenta la edad mínima para trabajar, el riesgo de explotación sexual, tráfico de menores, trabajo forzoso o peligroso, salarios, duración de los turnos, baja maternales.

La herramienta se basa en indicadores como el marco legal y el compromiso del Estado con la defensa de los derechos de los niños, analizando el impacto para la infancia en el lugar de trabajo, en el mercado y en el entorno. Es en este último apartado que República Centroafricana suma las peores notas (7,7 en una escala de 0 a 10, en la que a número mayor corresponde la necesidad de un mayor esfuerzo de empresas e inversores para proteger a la infancia de ese país. Este resultado casi dobla la media de 4 de los otros países analizados).

Por último, se analiza el impacto del sector alimentario, una industria que brinda trabajo a unos 22 millones de personas en el mundo solo en la fabricación, en particular en países en desarrollo. Estas cifras excluyen a los que trabajan en agricultura, cría de ganado, pesca y silvicultura, incluidos 98 millones de menores (el 60% del trabajo infantil). Muchos de ellos son empleados por su familia y no reciben salario. Los menores, en cuanto consumidores, están expuestos a campañas de marketing y publicitarias que promueven el consumo de productos ricos en azúcar y calorías y que inciden en las crecientes tasas de obesidad en esta franja de población. La Organización Mundial de la Salud estima que, de mantenerse el actual ritmo de crecimiento de la población, 70 millones de niños y adolescentes tendrán sobrepeso en 2025.

Fuente: https://elpais.com/elpais/2018/04/11/planeta_futuro/1523460370_213858.html

Comparte este contenido:

UNICEF y Global Child Forum presentan herramienta digital que permite a las empresas analizar su impacto sobre la infancia

UNICEF y Global Child Forum presentan herramienta digital que permite a las empresas analizar su impacto sobre la infancia

Prensa UNICEF

UNICEF y Global Child Forum han presentado el Atlas de Derechos de la Infancia y Empresas 2018, una herramienta digital que permite a las empresas identificar los posibles impactos y oportunidades que sus prácticas y políticas tienen en las vidas de los niños y niñas en todo el mundo.

“Los niños son fundamentales para el futuro de las empresas, ya que son los futuros dirigentes, clientes, inversores y empleados”, explica la directora ejecutiva adjunta de UNICEF, Fatoumata Ndiaye. “Con el Global Child Forum instamos a las empresas a respetar los derechos de los niños y a encontrar soluciones valientes para cualquier potencial efecto negativo. Esto es beneficioso tanto para las empresas como para los niños”.

El Atlas es una plataforma interactiva que ofrece índices, mapas globales interactivos, datos y análisis de países, y enfoques de industria para permitir a las empresas comprender mejor su impacto en el lugar de trabajo, el mercado, la comunidad y el medio ambiente.

Su metodología se alinea con los procesos de debida diligencia en materia de derechos humanos identificados en la Principios Rectores de Naciones Unidas sobre las empresas y los derechos humanos (UNGPs, por sus siglas en inglés) y los Derechos del Niño y Principios Empresariales(CRBPs).

Fuente: http://plataformadeinfancia.org/unicef-global-child-forum-presentan-herramienta-digital-permite-las-empresas-analizar-impacto-la-infancia/

Comparte este contenido:

Sentidos de la educación en una cárcel de mujeres: entre el tratamiento penitenciario, los modelos punitivos y de garantización de derechos

Por María Eugenia Bové Gimenez

RESUMEN

El texto que sigue reflexiona en torno a las condiciones en que se desarrolla la educación dentro de las cárceles, a partir del trabajo empírico realizado en una cárcel de mujeres de Uruguay en el año 2014. La reflexión se centra en la tensión ya discutida en la bibliografía entre la educación como un derecho y la educación como una herramienta para el tratamiento penitenciario, discutiendo elementos obtenidos del trabajo empírico realizado. Reflexiono sobre esta tensión en el contexto específico de endurecimiento punitivo en curso en Uruguay, dando cuenta de las consecuencias que esta tensión conlleva para el desarrollo de actividades educativas y atendiendo a las formas en que estas se incluyen en sistemas de premio-castigo propios del sistema carcelario, así como a las formas en que se circunscriben los sentidos de la educación.

Palabras clave: derechos humanos – educación en cárceles – tratamiento penitenciario.

Abstract:

This paper reflect on the conditions in which prision education happens, from the results of a study developed in a women prison in Uruguay in 2014. The argumentation starts with the theoretical discussion about the tensions between two forms of the prision education: as a right or as a part of the prison treatment. I put this discussion in the specific context of punitive reinforcement in Uruguay, attending to how these tensions impact in the educational activities, how the activities are involved in reward-punishment systems, and how they conditioned the posible senses of education.

Key words: human rights – prison education – prison treatment.

Texto completo: ARTÍCULO COMPLETO (PDF)

Fuente: http://www.fermentario.fhuce.edu.uy/index.php/fermentario/article/view/226
Comparte este contenido:

Venezuela: Universidades politécnicas fortalecen la educación municipalizada

Promover una sola malla curricular por programa para la unificación académica de ambas instituciones

América del Sur/Venezuela/Prensa Mppeuct

“Las universidades politécnicas asumimos la tarea de promover la educación municipalizada y garantizar la prosecución académica de los triunfadores de la Misión Sucre, y lo estamos cumpliendo”, así lo enfatizó Rafael Pineda, rector de la Universidad Politécnica Territorial de Falcón ‘Alonso Gamero’ (UPTFAG), quien visitó ayer el estado para sostener un encuentro con las autoridades regionales de la Misión Sucre.

El rector de la UPTFAG comentó que la Universidad Politécnica Territorial del Yaracuy «Arístides Bastidas» (UPTYAB) ha sido sede de los encuentros con los coordinadores de las aldeas universitarias de la Misión Sucre, así como con sus estudiantes, para establecer acuerdos que faciliten las gestiones de acreditación de los Programas Nacionales de Formación (PNF) en Química, Construcción Civil y Mecánica.

“El pasado diciembre graduamos siete triunfadores en el municipio Peña, quienes cumplieron con los requisitos para egresar en el área de Construcción Civil; de hecho hicimos el acto allí porque queremos acercándonos cada vez más a las comunidades. Ahora nos preparamos para entregar título a un grupo de más de 20 triunfadores en Bruzual”, indicó Pineda.

Por otra parte, el rector de la UPTFAG aprovechó la ocasión para manifestar su apoyo a la iniciativa del rector de la UPTYAB, Víctor Gamarra, de promover una sola malla curricular por programa para la unificación académica de ambas instituciones, en aras de facilitar la prosecución de estudio del alumno.

“En la Misión Sucre están ejecutando la misma malla curricular con la que iniciaron, la cual no es compatible con la de los PNF que impartimos las UPT, por lo que les pedimos que los nuevos ingresos inicien con la malla curricular de la universidad, pues al ser la misma malla solo tenemos que darle continuidad automática, sin reevaluar contenidos de nivelación o transición para igualarlos con los alumnos regulares”, explicó Pineda.

Fuente: https://www.mppeuct.gob.ve/actualidad/noticias/universidades-politecnicas-fortalecen-la-educacion-municipalizada

Comparte este contenido:

Chile: El movimiento estudiantil resucita en las calles una vieja amenaza para Piñera

América del sur/Chile/19 Abril 2018/Fuente: La Nación

Los estudiantes volvieron a las calles para reclamar el fin del lucro en la educación

El sonido de los tambores, las coreografías sobre el pavimento, los cuerpos pintados, las pancartas multicolores alusivas al fin del lucro en la educación y la violencia volvieron a asomarse por las calles de Chile, en la primera marcha estudiantil que enfrentó el gobierno del presidente, Sebastián Piñera, a treinta y nueve días de haber asumido su segundo mandato.

La manifestación -convocada por el Colegio de Profesores, la Confederación de Estudiantes Universitarios (Confech) y otras organizaciones sociales- comenzó con cierto retraso y se concentró en diversas ciudades del país como Valparaíso y Concepción, aunque la protesta más numerosa fue en Santiago, donde miles de jóvenes marcharon desde la Plaza Italia, el sitio emblemático de reuniones populares, hasta la calle Echaurren. En ese lugar se montó un escenario y se realizó el acto de cierre de la actividad, autorizada por la Intendencia Metropolitana, y que según los organizadores reunió a 120.000 personas, mientras que desde el gobierno estimaron que participaron 30.000.

«Hay un espaldarazo de la ciudadanía. El ministro debe retractarse de sus palabras cuando dijo que no era tiempo de marchar», aseguró Alfredo Mohor, presidente de la Federación de Estudiantes de la Universidad de Chile y vocero de la Confech, tras la manifestación.

Los estudiantes centraron sus principales cánticos y consignas hacia el fin del lucro efectivo, el término del endeudamiento (reflejado en la condonación de las deudas del Crédito con Aval del Estado, CAE) y la exigencia de una educación «no sexista». En ese contexto, hubo mensajes alusivos al ministro de Educación, Gerardo Varela, quien en una entrevista reciente dijo que sus hijos «son unos campeones» por usar varios preservativos en una noche. Su frase generó solicitudes de rectificación por parte de voceras estudiantiles y críticas de parlamentarios del mismísimo bloque oficialista.

Los estudiantes volvieron a enfrentarse contra las fuerzas seguridad, que utilizaron gas y agua para dispersarlos
Los estudiantes volvieron a enfrentarse contra las fuerzas seguridad, que utilizaron gas y agua para dispersarlos Fuente: AFP

Los primeros incidentes se produjeron cuando la caravana multicolor se aproximó al casco histórico de la ciudad, y hubo enfrentamientos entre grupos de descolgados de los propios manifestantes y la policía chilena. Las fuerzas especiales utilizaron carros hidrantes y lanzagases para dispersar a la multitud y obligarla a circular por la calzada sur de la Alameda, la principal arteria de Santiago, y que era la zona que estaba autorizada.

En ese momento, los focos de desmanes fueron controlados y la columna de estudiantes avanzó de forma pacífica frente al Palacio de La Moneda con sus organizadores a la cabeza y sosteniendo el principal lienzo de la marcha que rezaba «Chile ya decidió: No + Lucro, No + Deuda, No + Educación Sexista».

Sin embargo, las escaramuzas alcanzaron una mayor temperatura en el epílogo de la marcha, cuando encapuchados lanzaron bloques de cemento a la policía y montaron barricadas, que los propios estudiantes intentaron desarmar y apagar. La atmósfera se contaminó con los gases lacrimógenos que las fuerzas de orden utilizaron y los locales comerciales se vieron obligados a bajar sus cortinas de forma momentánea. El tren subterráneo santiaguino cerró las estaciones próximas a la manifestación y algunos equipos de prensa de televisión fueron atacados en medio de sus despachos en vivo. Los desmanes continuaron hasta pasadas las 14 horas.

Los organizadores celebraron la convocatoria y catalogaron como «hechos aislados» los incidentes. «La marcha de hoy ha sido completamente exitosa. Solo en Santiago somos 120 mil personas y en todo Chile más de 200 mil», expuso Rodrigo Rivera, otro de los voceros de la Confech. Karla Rubilar, intendenta de la Región Metropolitana, en tanto, declaró que la movilización había sido «muy disgregada, con grandes espacios entre los que se manifiestan. En general, (fue) una marcha bastante pacífica, con incidentes aislados».

Comparte este contenido:

¿Por qué los jóvenes están de acuerdo con los dictadores y la corrupción?

Por: Julián de Zubiría

Julián De Zubiria analiza los preocupantes resultados de los estudiantes colombianos alcanzados en la Encuesta Internacional de Cívica de 2016. Allí los jóvenes se muestran partidarios de las dictaduras y benévolos con los actos de corrupción.

Se han divulgado los resultados del Estudio internacional de Cívica en el que participaron 24 países, entre ellos Colombia. Es un estudio realizado con jóvenes de 14 años que cursan el grado octavo. Algo tenemos que estar haciendo muy mal en el continente porque nuevamente los últimos cinco lugares son ocupados por los países latinoamericanos.

Los resultados han generado gran discusión en el país, ya que el 73% de los jóvenes colombianos estuvo de acuerdo con los gobiernos autoritarios, pues suponen que generan un impacto positivo en el orden y la seguridad. La mitad de ellos también se declararon partidarios de “cerrar los medios de comunicación que critiquen al presidente”. Así mismo, un porcentaje similar está de acuerdo con pagar un soborno para agilizar un trámite y vieron como conveniente que “un funcionario público apoye a sus amigos consiguiéndoles empleos en su oficina” (53 %).

Estas respuestas hablan muy mal del proceso educativo que como sociedad hemos llevado a cabo para formar a los futuros ciudadanos tanto en términos de la defensa de la libertad de pensamiento, prensa y opinión, como de la independencia de poderes y del sagrado cuidado que deberíamos tener sobre los bienes públicos.

Lo que ven los jóvenes en Colombia es que existe una total impunidad en torno a los líderes políticos que delinquen y roban el erario público. Los jóvenes ven que los líderes políticos actúan como si estuvieran por encima de la ley. Por esta razón, pueden estar acusados de asesinatos, violaciones o calumnias. En general los procesos no avanzan y finalmente, no les pasa nada a los inculpados. Incluso, es algo trágico y frecuente que los testigos sean asesinados, como acaba de suceder esta misma semana con uno de los testigos estrella en el proceso que le lleva la Corte Suprema de Justicia al expresidente Álvaro Uribe. En este contexto, los jóvenes no se forman en valores democráticos de respeto a la ley, a la diferencia de criterios, la libertad de opinión y la independencia de poderes.

Cuando les permiten alcanzar mayor número de votos, los partidos políticos han avalado a mafiosos, ladrones, parapolíticos y narcotraficantes. Por ello, es comprensible que los jóvenes consideren a los partidos políticos como la institución en la que menos confían (28%). Tenía toda la razón el ex magistrado de la Corte Constitucional Carlos Gaviria cuando decía que “El que paga para llegar, llega para robar”. En Colombia, los partidos pagan para llegar y eso lo saben los jóvenes.

Fueron los partidos políticos los que llevaron a Carlos Leder, Kiko Gómez y Pablo Escobar al Congreso. Hace muy pocos años, el 35% del Congreso fue investigado por nexos con la parapolítica y en el mismo periodo 5.300 militares han sido investigados por asesinatos conocidos por la prensa como “falsos positivos”. Es triste que los medios de comunicación denominen a las ejecuciones extrajudiciales con este eufemismo. En realidad, son asesinatos realizados con el único fin de que algunos militares asciendan en el escalafón. Los jóvenes también saben que la mayoría de magnicidios en Colombia han quedado en la impunidad. Así ha pasado desde Gaitán, pasando por Galán y Garzón, para mencionar tan solo unos pocos.

Hemos constituido una sociedad que aprendió a resolver los problemas a machete y a bala. De allí que no es de extrañar que la mitad de los jóvenes afirmen que “El que me la haga, la paga”. Cuando se les pregunta ¿por qué dicen eso? La respuesta es la misma: Eso es lo que hemos visto hacer a los mayores en Colombia. Estamos formando a las nuevas generaciones en valores antidemocráticos.

También en América Latina el apoyo de los adultos al autoritarismo es alto y creciente, lo cual refuerza la tesis de que estamos ante un proceso de aprendizaje de los jóvenes de los valores antidemocráticos. El propio informe de cívica que estamos analizando, informa que en 2014 el 56% de los adultos de América Latina consideraban la democracia como la mejor forma de gobierno; para el 2016, este porcentaje había bajado al 49%.

Los hijos ven a sus padres comprando productos robados, de contrabando, sobornando a la policía y evadiendo impuestos. Es el mundo de los “vivos” y la “cultura del atajo” que se expresa en el mensaje que se les da a las niñas en los barrios populares de que “Sin tetas no hay paraíso”. Por ello, la prioridad son las cirugías estéticas de levantamiento de cola y de engrandecimiento de los senos.  Tenemos muy seguramente uno de los mejores ciclistas del mundo y los periodistas deportivos se refieren a él como al “capo del equipo”. Es una cultura heredada de las mafias y cuya estructura valorativa también proviene de allí. Por eso “todo vale” y “hay que ponerle zancadilla a quien se atraviese”.

Al mismo tiempo, lo que se enseña en la escuela por lo general no sirve en la vida y lo que necesitan los jóvenes no se enseña en la escuela. Se siguen abordando contenidos totalmente impertinentes. A nivel universitario el problema es todavía más grave ya que hay un profundo descuido de la formación ética, la educación ciudadana y el conocimiento de sí mismo.  No se tienen en cuenta criterios éticos en las evaluaciones ni en la promoción de un estudiante. El proyecto de vida queda a merced del joven, sin que prácticamente intervenga ningún mediador cultural: la escuela, la familia o la universidad.

Para complejizar, se expulsa a niñas embarazadas de los colegios porque supuestamente dan “mal ejemplo” y no se autorizan las formas personales para vestir, violando en ambos casos la Constitución de 1991. Las instituciones educativas no son ejemplo de participación. Debido a ello, en general, los profesores y los jóvenes no participan en el diseño y ajustes del Proyecto Educativo Institucional, ni en el currículo, ni en el diseño y enfoque de las actividades extracurriculares.

Este es el contexto en el que los jóvenes colombianos concluyen que un mesías les va a resolver los problemas. No saben que estos remedios siempre resultan peores que la enfermedad. Las dictaduras necesariamente se convierten en los gobiernos más corruptos posibles, porque desaparece el control que ejerce la oposición, la ciudadanía y la prensa. En la historia lo hemos visto una y otra vez. Todos los dictadores, sin excepción, terminan restringiendo las libertades y prohibiendo el pensamiento crítico. Para poder hacerlo tienen que espiar y asesinar la oposición, disolver las cortes judiciales y el Congreso, para concentrar el poder. Eso mismo lo han hecho una y otra vez los dictadores de izquierda y de derecha. En corrupción y en violación de derechos humanos, son mayores sus semejanzas que sus diferencias.

Para resolver un problema, la primera condición es reconocerlo. La extensa convivencia que hemos tenido como sociedad con la guerra y las mafias, han afectado de manera significativa nuestra estructura ética y valorativa y han generado buena parte de los problemas de los que estamos hablando y que se pueden englobar en el término de la “cultura del atajo”, para la cual, “todo vale”. En Colombia la guerra destruyó el tejido social. Es por ello que casi no confiamos en nadie, tal como sucede en los países que continúan en guerra. Mientras que en Suecia y en China confían en más del 70% de las personas que conocen, en Colombia, tan solo confiamos en el 4% de las personas que están a nuestro alrededor. De esta manera es inviable el trabajo en equipo y mucho menos un proyecto nacional. Los jóvenes tampoco confían en el congreso (46%), y casi nada en los partidos políticos (28%). Por eso, no votan: El 81% de los jóvenes no salió a votar en el plebiscito del 2 de octubre del 2016. Un plebiscito decisivo para la historia del país, el cual, tristemente, casi no contó con el voto juvenil.

La mejor noticia de la encuesta es cuando nos informa que los estudiantes que alcanzan mayores conocimientos cívicos, presentan actitudes más democráticas y están más propensos a obedecer la ley y a no caer en actos de corrupción. También la Encuesta de Cívica nos indica que, si los padres cuentan con títulos universitarios, sus hijos presentan actitudes más democráticas. Ambos resultados, ratifican una derivada esencial: la única posibilidad que tenemos para fortalecer las actitudes favorables ante la democracia y la convivencia proviene de que fortalezcamos los procesos de formación a cargo de las familias, las instituciones educativas, los medios masivos de comunicación y la sociedad en su conjunto. La educación está llamada a ser el proyecto nacional que hoy debe convocar al país. En el largo plazo, no hay ninguna otra opción para garantizar el desarrollo integral y sostenido de los individuos y de la sociedad.

Estamos a puertas de una nueva elección presidencial, ojalá sea una oportunidad para promover un voto más libre, más reflexivo y más independiente. Al fin y al cabo, sin ello no es posible hablar de democracia. Es un buen momento para recordar a Ortega y Gasset cuando decía: “Jóvenes, haced política. Porque si no la hacéis, alguien la hará por vosotros. Y probablemente, contra vosotros”.

Fuente: http://www.semana.com/educacion/articulo/segun-la-encuesta-internacional-de-civica-los-jovenes-estan-de-acuerdo-con-los-dictadores/564020

Comparte este contenido:
Page 1229 of 3041
1 1.227 1.228 1.229 1.230 1.231 3.041
OtrasVocesenEducacion.org