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#IamMySong: Las mujeres afganas se niegan a dejar de cantar

Mujeres afganas asisten a un acto para celebrar el Día de los Derechos de la Mujer en Kabul, el domingo 7 de marzo de 2021.

En Afganistán, una nota del Ministerio de Educación del 10 de marzo ha levantado una ola de ira en las redes sociales, ya que prohíbe a las niñas de 12 años o más cantar en la escuela. El movimiento «#IamMySong» se lanzó en Twitter con una petición en línea que reunió más de 100.000 firmas. Desde entonces, el ministerio ha retirado su nota, modificándola, torpemente. Pero el daño está hecho y la movilización continúa.

Ahmad Sarmast fue quien empezó el movimiento. Es el fundador del Instituto Nacional Afgano de Música (ANIM), el único centro de aprendizaje musical del país, amenazado por los talibanes, entre otros, desde su creación en 2010.

El 10 de marzo, Ahmad Sarmast tuiteó, con el hashtag #IamMySong: «El acceso a la música y al canto es uno de los derechos humanos y ciudadanos más básicos, ni la discriminación ni el sectarismo deben impedir que las mujeres accedan o enseñen este sublime arte». El tuit terminaba con esta invitación: «Únase a la campaña cantando una canción en apoyo del derecho a la música y a la libertad de las mujeres afganas».

 

 

Hace unos días, el hashtag tenía más de 600.000 publicaciones en su haber, y vídeos de mujeres públicas en Afganistán comenzaron a proliferar en la red, como la de Shaharzad Akbar, directora de la comisión independiente de derechos humanos, mirando a la cámara con un velo carmesí en la cabeza.

 

 

Numerosos activistas de derechos humanos se manifestaron para exigir la retirada de estas notas enviadas a las escuelas. Y funcionó. El ministerio habló de un error en la redacción, de un malentendido explicando que la nota se refería a niñas y niños, y que se trataba más bien de evitar cualquier reunión por la pandemia de Covid-19. Pero nadie cree estas explicaciones, y la campaña sigue su curso.

Para muchos, la nota del ministerio es una prueba de que dentro del propio gobierno afgano, el conservadurismo religioso es la norma. Es una reminiscencia de los oscuros días del régimen talibán entre 1992 y 1996, que prohibía a las mujeres salir de casa sin burka y sin estar acompañadas por un hombre, un régimen que prohibía la educación de las niñas.

Este paso en falso se produce en un momento en que el gobierno está negociando con los talibanes un acuerdo de paz en Doha. Y según una parte de la población, Kabul debería defender los derechos de las mujeres en estas negociaciones, y ¿cómo podría hacerlo si no lo hace dentro de su gobierno y en los territorios que controla? Los defensores de los derechos humanos y de la educación en Afganistán exigen una investigación sobre lo ocurrido.

Fuente: https://www.rfi.fr/es/oriente-medio/20210315-iammysong-las-mujeres-afganas-se-niegan-a-dejar-de-cantar

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China prohíbe castigo corporal y abuso verbal en escuelas

Los estudiantes que cometan faltas leves solo deben recibir castigos menores, como tener que pedir disculpas orales o escritas o realizar tareas escolares, según las regulaciones.

China puso en vigor hoy lunes nuevas reglas que rigen los métodos disciplinarios escolares prohibiendo los castigos físicos y el abuso verbal en los centros educativos de primaria y secundaria.

Los educadores tienen prohibido llevar a cabo procedimientos disciplinarios que supongan dolor físico directo a los estudiantes, según las regulaciones divulgadas por el Ministerio de Educación en diciembre del año pasado para su período de pruebas.

Otros métodos disciplinarios prohibidos incluyen el abuso verbal, que podría dañar la salud mental de los alumnos, obligar a los estudiantes a quedarse quietos o asumir posiciones físicamente incómodas durante una cantidad excesiva de tiempo, al igual que formas encubiertas de castigo como el aislamiento intencional.

Además de demarcar las áreas prohibidas para los maestros, las nuevas regulaciones aclaran las condiciones bajo las cuales los educadores deben intervenir, al tiempo que se introduce un régimen disciplinario de tres niveles.

Los estudiantes que cometan faltas leves solo deben recibir castigos menores, como tener que pedir disculpas orales o escritas o realizar tareas escolares, de acuerdo con las regulaciones.

Entretanto, medidas más severas pueden ser aplicadas en caso de infracciones graves de niños que llegan a sus últimos años en las escuelas primarias y a los estudiantes de las escuelas secundarias y preparatorias.

Las opciones disciplinarias incluyen suspensión del centro educativo, consejería escolar y sesiones de corrección profesionales.

En este proceso se enfatiza la necesidad de objetividad, justicia y conmensurabilidad en la aplicación de la disciplina, al igual que el cultivo de individuos integrales.

El reclamo de definiciones más precisas y aclaraciones sobre las medidas disciplinarias escolares se han fortalecido en China debido al aumento de incidentes controvertidos relacionados con esta materia.

Fuente: http://www.elsoldemargarita.com.ve/posts/post/id:236954/China-proh%C3%ADbe-castigo-corporal-y-abuso-verbal-en-escuelas

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China asigna 931.600 millones de yuanes para desarrollar educación equilibrada durante período 2016-2020

Asia/China/19-03-2021/Autor(a) y Fuente: Spanish. xinhuanet. com

China asignó 931.600 millones de yuanes (143.700 millones de dólares) para impulsar el desarrollo equilibrado de la educación obligatoria durante el período del XIII Plan Quinquenal (2016-2020), informó el Ministerio de Hacienda.

El país distribuyó un total de 587.700 millones de yuanes bajo el mecanismo de garantía del gasto educativo obligatorio urbano y rural durante los últimos cinco años.

En 2020, unos 154 millones de estudiantes que recibían educación obligatoria estaban exentos de las tasas de matrícula y otros cargos en la escuela, mientras que a 25 millones de estudiantes de familias pobres se les ofrecieron subsidios de vida.

De 2016 a 2020, se asignó un total de 163.900 millones de yuanes para mejorar las condiciones de las escuelas en áreas pobres, incluida la informatización de la educación.

Durante el período, otros 103.000 millones de yuanes se distribuyeron a distritos piloto como incentivos en medio de los esfuerzos del país para mejorar el estado nutricional de los niños de las zonas pobres. Fin

Fuente e Imagen: http://spanish.xinhuanet.com/2021-03/14/c_139809319.htm

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12 muertos en una nueva jornada de represión en Myanmar

Por: Tercera Información

Las fuerzas de seguridad dispararon contra los manifestantes de la movilizaciones de Mandalay con fuego real, causando varias muertes.

La represión llevada a cabo por las fuerzas de seguridad de la junta militar de Myanmar este fin de semana contra las protestas de civiles dejó un saldo de al menos 12 personas muertas y unos 19 heridos, mientras se reportan detenidos en varias ciudades.

Las fuerzas de seguridad disolvieron la protesta de Mandalay con la utilización de fuego real y, además de causar algunas muertes, hirieron a al menos 15 personas, incluidos monjes budistas que participaron en la manifestación, de acuerdo a fuentes del Movimiento de Desobediencia Civil, citados por la agencia española EFE.

Cuatro personas murieron en Mandalay, la segunda ciudad del país, después de que las fuerzas de seguridad disolvieran una manifestación utilizando munición real, mientras que testigos confirmaron la muerte de un manifestante en un hospital de la ciudad de Pyay.

La Red para la Documentación de los Derechos Humanos en Myanmar tras la violencia de este sábado expresó a través de una publicación en Twitter:

«Estamos perdiendo más vidas hoy. Ataques sin sentido y desalmados de los militares que tratan de disminuir el poder del pueblo. El mundo está asistiendo al ataque ilegítimo del Gobierno de la Junta contra sus propios ciudadanos. Debe haber una acción internacional».

Las muertes se producen en una nueva jornada de protestas masivas por todo el país contra el control del Gobierno asumido por los militares el pasado 1 de febrero y tras una noche trágica en Rangún, la ciudad más poblada, con al menos tres fallecidos en dos manifestaciones.

En otra manifestación en el distrito Hlaing de Rangún un estudiante de 18 años falleció de un disparo en la cabeza en una confrontación con la Policía. Luego de los altercados nocturnos, el movimiento de desobediencia civil contra la junta militar había hecho este sábado un llamamiento en las redes sociales para replicar las protestas multitudinarias en las principales ciudades del país.

Hasta el momento, la junta militar liderada por Min Aung Hlaing ha hecho oídos sordos a las condenas de la violencia de la comunidad internacional, incluido el Consejo de Seguridad de la ONU, y las sanciones que han aprobado algunos países como Estados Unidos, Canadá, Reino Unido o Corea del Sur, que esta semana anunció que suspenderá sus exportaciones de armas a Myanmar.

Los uniformados justifican el golpe por un supuesto fraude electoral en los comicios del pasado noviembre, en los que arrasó el partido de la depuesta líder Aung San Suu Kyi y que fueron calificados de legítimos por los observadores internacionales.

Fuente e Imagen: https://www.tercerainformacion.es/articulo/internacional/14/03/2021/12-muertos-en-una-nueva-jornada-de-represion-en-myanmar/

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Gongbang: la tendencia surcoreana de ver a otras personas estudiar durante horas

Por: Paulette Delgado

 

Con videos de gongbang o «transmisión de estudios», estudiantes surcoreanos ofrecen sesiones virtuales en YouTube para motivar a otros a aprender y que se sientan acompañados.

Una nueva tendencia ha ido a la alza en internet: gongbang (공방) o “estudia conmigo” que trata de ver a otras personas estudiar y es originaria de Corea del Sur. La palabra es una combinación de gongbu (공부) que significa “estudio” y bangsong (방송) que se refiere a la “transmisión en vivo”. Al juntarlas se obtiene gongbang, es decir, “transmisión de estudio».

El concepto es simple, un alumno transmite videos de sí mismo repasando en casi completo silencio durante horas a cientos de espectadores. Algunos graban desde un café, otros, desde la biblioteca, algunos incluyen sonidos relajantes y aptos para el estudio como los de la lluvia o música clásica. Los estudiantes suelen mostrar su rostro en la transmisión, pero otros prefieren mantener el anonimato y muestran en pantalla solo sus escritos y material de clase. Esta tendencia no es tan innovadora como se podría pensar ya que pertenece al mismo nicho que los “mukbang”, o transmisiones de gente comiendo, tendencia que según reporta The Guardian, existe desde el 2018. Sin embargo, para miles de estudiantes encerrados por la pandemia, la sensación de compañerismo y acompañamiento que brindan ha hecho que la popularidad del gongbang se haya incrementado recientemente.

Entre quienes transmiten estas sesiones, también conocidos como vloggers, destaca Kim Dong-min, cuyo video más popular tiene más de 400,000 mil vistas y una hora de duración. Su canal cuenta con videos con duración de más de tres horas, grabados en distintos lugares aprovechando los sonidos ambientales de cada espacio al que va.

Técnicas para administrar el tiempo de estudio y acompañamiento

Muchos de estos estudiantes se especializan en la técnica “Pomodoro” que es un método de gestión del tiempo dedicado a una actividad. Se basa en usar un temporizador que divide las sesiones de trabajo o estudio en intervalos fijos de 25 minutos llamados pomodoros. Por ejemplo, una alumna se concentra 25 minutos sin parar, descansa 5 minutos, lo repite tres veces y, por último, descansa 15 minutos antes de volver a empezar, en caso de ser necesario. Cada uno de estos videos utilizan diferentes tiempos dentro de la técnica Pomodoro. Entre los más populares está el 25/5, pero también puede encontrarse el 50/10 que divide una hora en cincuenta minutos de estudio con un descanso de diez minutos. Otro elemento característico de estos videos es la duración de las sesiones, que pueden llegar a superar las ocho horas usando esta técnica, mientras que otros no sobrepasan una hora.

La comunidad que rodea a estas cuentas de YouTube es muy solidaria y motivadora. A diferencia de muchos otros vlogs, los gongbang se caracterizan por la poca edición, que no pasa de agregar un cronómetro a la imagen. Esta naturalidad da un sentimiento de acompañamiento a las sesiones de estudio o repaso a los espectadores de los videos. Gran parte de su popularidad se debe a que recrea el sentimiento de estar acompañado a la hora de repasar, algo que muchas personas buscan después de meses de estar atrapadas en casa. Además, debido a que muchos videos siguen la técnica Pomodoro y muestran un cronómetro, los alumnos fácilmente pueden estudiar a la par del video. Esto ayuda a mantenerlos motivados y prestar más atención a lo que hacen. También hay casos donde los observadores sienten rivalidad con el que se graba y se esfuerza por concentrarse y leer más que él o ella, o contestar las preguntas o pruebas más rápido.

Aunque estas sesiones suenen aburridas, de fondo sirven como un estímulo constante para seguir trabajando y evitar distracciones. Incluso pueden compartir consejos e información de las pruebas a través de los comentarios. En este sentido, otros videos populares con temas similares incluyen consejos para aprender mejor y tomar notas, técnicas de enfoque, consejos de memorización, así como consejos para organizarse y de productividad.

Dentro del mundo del gongbang, una de las áreas más populares es la de la medicina, por la dedicación que conlleva la carrera. De hecho, uno de los videos con más vistas de esta tendencia es de una estudiante de medicina. El video tiene más de 7.2 millones de vistas y fue publicado en el 2017 por “The Strive Studies”.

La alumna es vista usando la técnica Pomodoro y muestra el cronómetro, lo que facilita que otros le sigan el ritmo y realmente estudien con ella. Entre los comentarios del video predominan usuarios hablando de lo bien que les fue en sus clases y exámenes después de ver el video y agradeciendo porque realmente les ayudó a concentrarse.

Aunque en gran parte esta tendencia es surcoreana, los videos “study with me” o “estudia conmigo” se han extendido alrededor del mundo. Muchos de los vloggeros confiesan que comenzaron a grabarse ya que buscaban la presión de sentirse observados para concentrarse o porque era una manera de demostrarle a sus padres que realmente estaban dedicando su tiempo a sus estudios. Es importante mencionar que, en la cultura de Corea del Sur, los alumnos llegan a pasar más de 12 horas pegados a sus libros en preparación a sus exámenes de admisión a la universidad.

Aunque esta tendencia inició mucho antes de la llegada de la pandemia, ha ganado más popularidad en el último año conforme los estudiantes en todo el mundo buscan distintas maneras de sentirse acompañados y motivados durante la pandemia. Una pandemia que no es solo de COVID-19 sino también de soledad, agobio y procrastinación.

Fuente e imágenes: https://observatorio.tec.mx/edu-news/gongbang-videos-estudia-conmigo

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Estudiar bajo apartheid: El día a día de los estudiantes palestinos

Por: Judit Rodríguez

“El apartheid israelí no necesita ninguna excusa para detener a ningún palestino. Cualquier persona en Burin o en otras ciudades de Cisjordania es amenazada con ser arrestada por los colonos y soldados israelíes. Cientos de veces son niños de 10 y 9 años… ¿Qué pueden hacer estos niños contra estas fuerzas armadas? ¿Qué hará una piedra contra un Jeep militar? Nada, no hay excusa. Siempre tienen el mismo pretexto: “es por motivos de seguridad”. Dicen que tienen que matar a nuestros niños antes porque si no ellos los matarán cuando crezcan.”

En el año 2020 fueron arrestados por las fuerzas de ocupación israelíes aproximadamente unos 543 menores palestinos. Se calcula que entre 140 y 180 niños siguen secuestrados en las cárceles de la potencia ocupante.

En 2016, el ente sionista de Israel aprobó la llamada “Ley de la Juventud” por la cual se legitimaba jurídicamente el encarcelamiento de niños palestinos menores de 14 años. Unos meses después de su aprobación, se aceptaba una pena de cárcel mínima de 3 años para jóvenes que tirasen piedras, dando lo mismo que tuvieran una edad de 10 o 20 años. Ese mismo año, fueron 450 los adolescentes encarcelados. Sólo un año después, en 2017, fueron 350, aunque los detenidos aumentaron a 1.467. Desde el año 2.000 hasta día de hoy, se calcula que más de 20.000 menores de edad han sido arrestados por las fuerzas de la ocupación. A ello se unen más de 2.500 niños palestinos asesinados en el período que corre desde 2.000 al 2020.

El Ministerio de Información palestino declaró en 2019 que el 95% de los menores arrestados sufren torturas y degradaciones durante la detención (golpes, patadas, vendaje de ojos, interrogatorios en hebreo -idioma que no conocen-, ausencia de abogado y/o algún familiar durante el interrogatorio, coacciones durante el mismo…). Es usual que estas detenciones se den en las inmediaciones de los puestos militares de control israelíes, conocidos como “check-points” y, principalmente, contra niños que se encuentran en edad escolar.

El Ministerio de Información palestino declaró en 2019 que el 95% de los menores arrestados sufren torturas y degradaciones durante la detención

Es el caso de Mahmoud Drar Qadus, estudiante palestino de 14 años en la escuela mixta “Burin High School” ubicada en un pequeño pueblo de 3.000 habitantes a 7 km al Sur de Nablus (Cisjordania) a quien tuvimos la oportunidad de entrevistar en Julio de 2019 sobre las condiciones que sufren los estudiantes palestinos bajo el asedio israelí.

Niños y niñas escuela colegio Palestina
Niñas y niños palestinos apoyando la campaña de boicot a los productos israelíes

La primera palabra que enunció Mahmoud fue “miedo”. La lejanía de la escuela con respecto a su hogar, pero a la vez la extrema cercanía de la misma a los check-points acrecienta los sucesivos ataques al personal docente y los alumnos de la escuela. La misma ha sido incendiada tres veces por los colonos israelíes. Esto no nos ha de extrañar si tenemos en cuenta que una de las principales estrategias de guerra sionistas contra los palestinos es el debilitamiento moral incesante a través de la amenaza y el miedo. El proyecto expansionista que moviliza la maquinaria de guerra israelí para la apropiación de la totalidad de la tierra histórica palestina trata de hacer sus vidas tan insoportables que tengan que huir y, así, argüir que “se fueron por su propio pie”, argumento propio de la narrativa sionista que justificó el genocidio en 1948 (La Nakba).

La escuela de Mahmoud ha sido incendiada tres veces por los colonos israelíes

“El principal problema al que nos enfrentamos es que la escuela está muy lejos de casa, pero al lado de un control militar israelí, y eso les da la oportunidad de atacarnos en la ida y la vuelta.”

“Todas las mañanas me aseo y bajo a la escuela para aprender, pero los soldados israelíes siempre interrumpen mi clase con bombas de humo, gas, insultos y golpes. Entonces nunca podemos seguir las clases y tenemos que volver a casa”, nos cuenta algo nervioso y, en un esfuerzo por continuar, nos relata la ocasión en la que un grupo de soldados irrumpió en tres aulas diferentes, entre ellas la de suya, impidiendo el desarrollo de la clase durante dos horas y media. Desafortunadamente, no sólo tratan de imposibilitar que los palestinos encuentren en sus aulas un lugar tranquilo y seguro donde sucede algo positivo para ellos mismos, el aprendizaje, sino que, además, numerosas mañanas bloquean las entradas a la escuela de Burin con los Jeeps blindados del ejército. Asímismo, durante el período de recreo lanzan explosivos entre los barrotes que rodean perimetralmente el patio provocando el pánico e incrementando la sensación de inseguridad entre alumnos y profesores.

 “A veces estamos jugando al fútbol en el patio de la escuela y de repente escuchamos gritos y comienzan a lanzar gases lacrimógenos. Cuando vienen a la escuela mientras estamos jugando al fútbol suele haber muchos problemas porque nos pilla desprotegidos. Pero los profesores siempre salen para protegernos de ellos.”

Armamento utilizados contra los colegios palestinos

A pesar de todo ello, Mahmoud reconoce que, si bien los momentos más tristes durante el curso son cuando los agreden o cuando hay algún compañero de clase que no asiste porque ha sido herido, también recalca que el cuidado y la protección de sus profesores es uno de los elementos que más feliz le hacen. Y es que la perseverancia y el compromiso del personal docente hacia su pueblo, su trabajo y sus alumnos es ejemplar.

“A veces estamos jugando al fútbol en el patio de la escuela y de repente escuchamos gritos y comienzan a lanzar gases lacrimógenos”

A este respecto, tuvo mucho que contarnos Ghassan Najjar, activista palestino impulsor de un proyecto de cooperativas agrícolas cuyo fin es impulsar una producción palestina que a día de hoy se mantiene asediada por la abusiva hegemonía económica israelí. Él fue nuestro traductor, guía y apoyo fundamental durante nuestra estancia en el territorio. Desafortunadamente, la madrugada del 25 al 26 de junio de 2020 fue secuestrado en su hogar y encarcelado posteriormente en las prisiones israelíes. A día de hoy sigue encerrado y sin que se conocieran los cargos.

“Hay una gran diferencia entre los profesores españoles y los profesores palestinos. En primer lugar, porque los profesores en España trabajan sin la presión y el miedo a la muerte, ello les permite ser capaces de focalizar su trabajo en la clase. Sin embargo, los profesores en Palestina vienen a la escuela, pero no saben si volverán con vida. En eso consiste la presión, en la inseguridad y el terror de ver peligrar sus vidas y la de 300 alumnos a su cargo”, declara. Como si no fuese suficiente con los impedimentos derivados de vivir y trabajar bajo un régimen de apartheid, los profesores han de enfrentarse también a las debilitadas e ineficaces autoridades educativas de Cisjordania que, según nos relataba Ghassan, también son responsables de la precariedad de este sector suyo sueldo, que ronda los 200 shekel mensuales (50 euros) en la escuela mixta de Burin, los condena al pluriempleo. Esto se comprende mejor cuando vemos que el coste de la vida en Palestina aumenta anualmente dada la condición de dependencia económica al coste de la vida israelí. El alquiler de la vivienda lo encontramos en unos 400 euros en una zona normal de la ciudad. Todo ello les hace imposible asegurarse las condiciones materiales para la conservación de sus vidas y un ejercicio profesional digno.

Ghassan Najjar es un activista palestino impulsor de un proyecto de cooperativas agrícolas cuyo fin es impulsar una producción palestina que a día de hoy se mantiene asediada por la abusiva hegemonía económica israelí

“No hay un verdadero apoyo hacia los profesores. Si ellos quieren hacer una huelga para mejorar la situación, el ministro de educación los expulsará de la escuela. Yo recuerdo una huelga del personal docente en la que pedían una subida de los salarios en Cisjordania y, desafortunadamente, cuando la huelga terminó fueron expulsados alrededor de 200 profesores.”

Sin embargo, la actitud del Ministerio de Educación de Cisjordania cambia respecto de otra de las escuelas de Burin. Se trata de la escuela de primaria y secundaria situada en el centro del pueblo y cuya construcción fue financiada por el gobierno alemán con un millón de dólares. Esta es la única escuela en Burin que recibe material y atención institucional. Irónico, por otra parte, que Alemania sea uno de los países europeos más preocupados por estrechar relaciones con el régimen criminal de Israel.

Diferente es el caso de la tercera escuela de Burin, la de preescolar, que acoge a niños/as de 5 a 8 años y que, en palabras de Ghassan “es como una cárcel”. Su infraestructura lleva desde su construcción sin ser revisada ni reformada.

Colegio Escuela Burin, Palestina
Escuela en Burin

La situación de los jóvenes estudiantes empeora debido al acorralamiento al que están expuestas las tres escuelas de Burin, especialmente la escuela de Mahmoud, donde los 300 estudiantes están cercados por dos de las colonias israelís más violentas de toda la Ribera Occidental de Palestina (Har Brakha; Yitzhar). Junto a ellas hay un campo militar flanqueado por torres de control que monitoriza los movimientos de la población palestina permanentemente durante las 24 horas del día.

La tercera escuela de Burin, la de preescolar, que acoge a niños/as de 5 a 8 años en palabras de Ghassan “es como una cárcel”

“Muchas veces los colonos israelíes han quemado la escuela y, lo peor, es que han quemado la librería. A ello se suma que las instituciones sólo se preocupan por las grandes ciudades y se olvidan de satisfacer nuestras necesidades y la de los campos de refugiados. No tenemos material suficiente para darle a los chavales una educación adecuada.”

Los perjuicios y pérdidas del material escolar debido al hostigamiento y acometidas diarias de los colonos y soldados no sólo pasan por la degradación de las mesas y sillas a causa de los impactos de los explosivos y misiles, sino también por la carbonización de los libros y el calcinamiento de las paredes a consecuencia del hollín que ocasionan las bombas de gas. De tal forma que estudiantes como Mahmoud, nos explica Ghassan, no poseen más libros que los específicos de cada asignatura, más color en sus aulas que el de las bombas de gas adherido a las paredes, ni más paisaje en su patio de recreo que las alambradas metálicas de seguridad. La extrema securitización que se ven obligados a desarrollar para obstaculizar las irrupciones del ejército hace difícil convertir la zona de recreo en una zona jovial y agradable en la que estar.

“Las escuelas necesitan jardines porque los niños sin ellos son mucho más violentos, juegan atacándose. La presión a la que están sometidos todos los días los convierte en monstruos para ellos mismos.”

La privación de espacios que fomenten el desarrollo y potenciación de sus habilidades; la intimidación: la violencia explícita e implícita diaria y el especial ensañamiento contra los menores no son, sin embargo, los únicos factores que inducen en los alumnos problemas psicológicos, identitarios y de expectativas de futuro. No hemos de omitir que el contenido de sus libros de texto depende de la aprobación del gobierno israelí. Mahmoud nos expresó, al preguntarle sobre su asignatura favorita y su opinión sobre el temario lo siguiente:

“Sobre la historia de Palestina nos dan muy poca información, es cuando hay que estudiar sobre la historia de otro país árabe cuando se menciona en los libros algo de Palestina. Pero no hay apartados que hablen sobre nuestro país en particular”.

El contenido de los libros de texto depende de la aprobación del gobierno israelí. “Sobre la historia de Palestina nos dan muy poca información”

Es la clásica maniobra colonial del expansionismo sionista, que busca la construcción del “Gran Israel” en Oriente Medio y, para ello, trata de hacer desaparecer cualquier categoría que haga alusión a Palestina para así despatriar a su población autóctona, los palestinos, diluyéndolos en la categoría general de “árabes”. De esta forma los extirpa de su tierra y los condena a vagar por el resto de los países a la espera de asilo.

“Estamos asediados y la ocupación no nos deja tener tecnologías, no quiere que nos eduquemos, no quieren que tengamos educación porque eso significa que nuestros niños sabrán quiénes son, sabrán su historia y su lucha, y eso los llevaría a luchar por sus derechos. Por este motivo ellos tratan de controlar nuestra educación. Lo que tenemos es una educación y una cultura de guerra con la ocupación, puramente defensiva. Y sin educación y cultura nunca seremos libres.”

El complejo de inferioridad, la confusión identitaria, la frustración, la permanente necesidad de una actitud defensiva, el miedo y la violencia cotidiana a la que están expuestos los alumnos/as de Burin ha llevado a que tengan ciertas necesidades especiales que deben ser comprendidas y tratadas en su especificidadr. La cantidad de problemas psicológicos que presentan estos estudiantes no son, sin embargo, tratados por psicólogos especializados en menores con estrés postraumático derivado de una situación de guerra. “Estamos perdiendo a nuestros niños día a día”, nos confesaba Ghassan preocupado e indignado, “cuando entro a clase a dar el taller de agricultura, los niños no son capaces de concentrarse en lo que digo. Un día fui a dar un entrenamiento, pero no respondían a mis estímulos. Me acerqué a uno de ellos y tenía piedras escondidas debajo de la mochila porque el día antes habían sido atacados en el recreo por un grupo de colonos israelís respaldado por el ejército.” Y añade, “¿Y son capaces de hablar de paz?, ¿qué significa paz?”

“Estamos asediados y la ocupación no quiere que nos eduquemos, no quieren que tengamos educación porque eso significa que nuestros niños sabrán quiénes son, sabrán su historia y su lucha, y eso los llevaría a luchar por sus derechos”

Ghassan Najjar
El profesor Ghassan Najjar

Esta tendencia automática a la defensa por parte de los jóvenes no está, en ocasiones, impulsada por un verdadero conocimiento político de la situación de su país, muchos de ellos no saben por qué ocupan su tierra. Esto es para Ghassan lo verdaderamente preocupante, pues no conocen sus raíces históricas, no entienden por qué lanzan esas piedras más allá del deber de resguardarse de quiénes los intentan matar. Se trata, en muchas ocasiones, de una respuesta defensiva por la supervivencia. “Ellos deberían aprender que Palestina debe ser libre desde el río hasta el mar.”

Ahora bien, durante el curso escolar 2018/19 se incorporó una asignatura-taller sobre agricultura impartida por Ghassan, hecho del que él mismo se alegra debido no sólo al rol fundamental que cumple la tierra en la construcción histórica de la identidad palestina, sino porque fomentar la producción agrícola palestina es vital para crear un mercado económico independiente al impuesto por el asedio israelí. Con todo, Ghassan se muestra firme en ratificar que lo más urgente para los estudiantes es el establecimiento de un plan que calme y aminore el miedo, la ansiedad y el estrés que les provoca vivir y estudiar bajo ocupación. Ver a sus propios compañeros y amigos de clase ser arrancados de sus pupitres y arrestados por los soldados los destruye psicológicamente. Asimismo, la cantidad de alumnos heridos cada semana hace imposible la convivencia en Burin.

“Necesitamos activistas de todas las profesiones y especialidades que vengan a ayudar a nuestros niños, que trabajen con ellos después de la escuela y que se centren en sus problemas psicológicos para mejorar su salud mental destrozada.”

Además, Ghassan reclamaba con urgencia la necesidad de un gobierno para el que la primera preocupación fuese la ocupación ilegal israelí, pero también la creación de un tejido social fuerte que trabajara en grupo para proteger la escuela de los ataques de soldados y colonos. En definitiva, grupos de personas que transmitiesen a los habitantes de Burin que están luchando para mejorar sus vidas. “Tenemos que hacer los estudiantes sientan que nos preocupamos por ellos.” Y, para ello, Ghassan concluyó invitando a todos aquellos activistas internacionales, profesores con formación psicológica, trabajadores y educadores sociales que supieran tratar con niños en contextos de extrema violencia a viajar a Palestina para colaborar solidariamente con los menores en edad escolar no sólo de su pueblo, Burin, sino de otros tantos pueblos y campos de refugiados palestinos que se encuentran en la misma o peor situación. Igualmente, difundir desde nuestros respectivos países el estado de apartheid bajo el ente israelí tiene sometidos a los jóvenes estudiantes en Palestina. Todos podemos poner nuestro grano de arena hablando de ello a nuestros familiares en casa, a nuestros amigos en el parque y a nuestros compañeros de clase y profesores en los colegios e institutos.

“Necesitamos activistas de todas las profesiones y especialidades que vengan a ayudar a nuestros niños, que trabajen con ellos después de la escuela y que se centren en sus problemas psicológicos para mejorar su salud mental destrozada”

A modo de reflexión final, conviene resaltar las palabras con las que Mahmoud quiso dirigirse a todos los estudiantes del estado español,  instándoles a la sensibilización con lo que sus homólogos palestinos han de sufrir en su día a día:

 “Los derechos de los niños palestinos no son los mismos que los de los niños de España. Nuestras familias siempre tienen miedo de que los soldados maten a sus hijos y por eso no nos dejan salir lejos de casa. Yo les digo a los niños españoles que ellos están bien sin ocupación y que por eso espero que nos puedan apoyar y saber de nosotros.

Festival cometa cometas Burin, Palestina
Festival de las cometas de Burin

Fuente e imagenes:  El Salto

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¿Gobernar de forma diferente? Los tres países bombardeados por Biden en su primer mes de mandato

Por: Alberto Rodríguez García

 

Y entonces llegó Biden. El justiciero, el bonachón, ese señor de la guerra que apoyó destruir a Yugoslavia, invadir Irak y bombardear Libia, ahora reconvertido en una especie de ser de luz venido al mundo para repartir paz, sonrisas y cosas bonitas. O al menos eso nos quiere hacer creer la propaganda demócrata; una propaganda destinada a un público con una mentalidad tan infantil, un nivel intelectual tan paupérrimo, que Barrio Sésamo les parecería una reunión de ingenieros planificando viajar a Marte.

La propaganda es tan patética que, aun tras bombardear en Siria a las fuerzas que combaten al Estado Islámico (en pleno auge del Estado Islámico en la zona, por cierto), presenta al presidente más senil del momento como una especie de héroe que retrasó el bombardeo porque en el primer intento le dijeron que había una mujer y dos niños, obviando, eso sí, que si un día normal hay una mujer y dos niños (asumiendo que este guión digno de un film bélico de Clint Eastwood es cierto, lo cual dudo), es que no es una posición militar ajena a los civiles. Un bombardeo justificado en base a pruebas menos sólidas que las de las armas de destrucción masiva en Irak. Pero es que claro, los de Biden son bombardeos con perspectiva de género; y es que debe de sonar muy progresista eso de que hay carta blanca para matar indiscriminadamente a los hombres. Aunque esos hombres también sean hermanos, maridos e hijos. Aunque la muerte de esos hombres también destruya familias. Tal vez, si Rahi Salam Zayed se hubiese identificado como mujer, fluidgender o cualquiera de las tonterías que promueven los lobbistas belicosos que se esconden tras Biden, este no habría muerto, no habría sido asesinado en un atentado más que se suma a la lista.

El hombre que supuestamente iba a acabar con las políticas agresivas de Donald Trump, ha bombardeado un país soberano ignorando lo que tuviese que decir el Consejo de Seguridad de la ONU e incluso el Congreso de su propio país.

Y aunque no haya pasado ni un mes, en el caso de Biden hay que hablar de bombardeos en plural; porque aunque el de Siria haya sido el más sonoro, Biden se ha estrenado en su primer mes con bombardeos en tres países: Irak, Somalia y Siria. Es curioso que en Irak y Somalia sí han atacado a terroristas de al-Qaeda y el Estado Islámico para proteger sus intereses, mientras que en Siria, debilitan las posiciones defensivas del gobierno sirio y aliados contra los yihadistas. Porque esos son los intereses del gobierno más progresista del mundo. Y sí, es cierto que la política de Biden –aunque cada día cuesta más saber si es de Joe o Kamala– no es nada fuera de lo normal entre los inquilinos de la Casa Blanca, pero el hombre que supuestamente iba a acabar con las políticas agresivas de Donald Trump, ha bombardeado un país soberano ignorando lo que tuviese que decir el Consejo de Seguridad de la ONU e incluso el Congreso de su propio país. Ha bombardeado Siria incluso en menos tiempo que Donald Trump. ‘America is back’ dijo Biden, y vaya que si ha vuelto el sheriff del mundo, tanto que vuelve a destruir naciones y asesinar personas, pero con tantos complejos que no lo hacen en nombre de los intereses propios –siendo justos a la verdad y los hechos–, sino en nombre de una insoportable superioridad moral.

Ah, pero no olvidemos lo hipócrita que es la superioridad moral de la Casa Blanca. Porque mientras rompen la camisa al grito de ¡derechos humanos! al hablar de Siria o Irán, Bahrein parece no existir. A pesar de la agresividad contra Rusia por el caso Navalny, evitan tomar medidas fuertes para sancionar al príncipe heredero de Arabia Saudí, Mohamed bin Salman, aun cuando informes de la CIA aseguran que es el responsable intelectual del asesinato y descuartizamiento del periodista opositor Jamal Khashoggi. Claro, introducen a Hezbollah –el partido más votado del Líbano– en la lista de grupos terroristas, mientras compadrean constantemente con la secta de culto religioso MEK; terroristas que han atentado contra Irán e incluso conspiraron con Saddam Hussein para facilitar la invasión de la República Islámica. Y esto es algo que muy seguramente, no va a cambiar tampoco con Biden.

Tanto Biden como todos los últimos presidentes de EE.UU., sus gabinetes y su élite, han demostrado que prefieren invertir el dinero en matar a miles de kilómetros de casa antes que en mejorar la calidad de vida de sus propios ciudadanos.

Pero es que la agresión de Biden contra Siria, que es el precedente de más agresiones contra Oriente Próximo, más allá de ser una política lógica de acuerdo al proceder histórico de los EE.UU. y del reconocido sionismo del bonachón de Joe, ni siquiera es una política justa para con los ciudadanos estadounidenses, que pagan con su dinero y sus vidas el aventurismo de unos halcones a los que les apasiona la guerra, pero a distancia. En un único bombardeo en Siria, en una posición remota del país, EE.UU. invirtió más de 150.000 dólares. Esto, mientras Joe Biden rechazaba el sueldo mínimo de 15 dólares para los obreros estadounidenses, poco después de una catástrofe climática en Texas en las que muchos ciudadanos no han podido siquiera pagar la calefacción. Porque a razón de los hechos, tanto Joe Biden como todos los últimos presidentes de EE.UU., sus gabinetes y su élite, han demostrado que prefieren invertir el dinero en matar a miles de kilómetros de casa antes que en mejorar la calidad de vida de sus propios ciudadanos.

Porque el capital es limitado, así que hay que decidir entre cuidar a Lockheed Martin o al trabajador del cinturón de óxido. Así es como funciona la maquinaria imperialista de un país que a pesar de arrasar Oriente Próximo, desde su llegada en 2003 no ha logrado establecerse en ningún país conquistado, invadido o atacado, porque en ninguno los quieren, y a pocos los invitan. Tal vez, conociendo las políticas para con sus propios ciudadanos, la paranoia tan extrema de tener que militarizar la capital para una ceremonia de toma de posesión del presidente, ni los discursos, ni los corazones ni toda la propaganda demócrata pueden hacer amigable al país más agresivo del momento.

Fuente e imagen: https://actualidad.rt.com/opinion/alberto-rodriguez-garcia/385475-tres-paises-bombardeados-biden-mes-gobierno

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