Reseña: Consejo Latinoamericano de Ciencias Sociales (CLACSO).
Este libro es producto de la tarea colectiva que, durante el año 2016 y 2017 desarrolló el Grupo de Trabajo de CLACSO “Educación Popular y Pedagogías Críticas”. El GT tiene ya cinco años y está conformado por investigadoras/es, docentes y educadoras/es de ocho países de América Latina y el Caribe: Chile, Colombia, Argentina, Brasil, México, Bolivia, El Salvador y Costa Rica.
Durante el proceso que fuimos haciendo como GT, detectamos que el significado de la “Pedagogías Críticas” y la “Educación popular” no era el mismo para todos y todas nosotros/as. Nos propusimos entonces darnos un debate al respecto, sin ánimo de unificar concepciones sino más bien con la intencionalidad de propiciar reflexiones epistemológicas, teóricas, históricas y metodológicas, y de profundizar en la densidad de prácticas, memorias, experiencias y conceptualizaciones que se caracterizan por una perspectiva crítica y/o popular. El problema no era sólo semántico sino también teórico, histórico y político. Saber de qué hablábamos los diferentes países, centros miembros e investigadoras/es era imprescindible, pero también lo era discutir qué hacíamos, con quién y para qué trabajamos, qué disputamos, como concebimos lo popular, lo público, lo crítico, lo emancipador.
Autores (as): Anahí Guelman, Fabián Cabaluz, Mónica Salazar (Coordinadores); Estela Quintar; Inés Cappellacci; Anahí Guelman; Claudia Loyola; María Mercedes Palumbo; Shirly Said; Laura Tarrio; Silvya De Alarcón; Beatríz Areyuna; Fabián Cabaluz; Felipe Zurita; Jonathan Piedrahita; Yicel Giraldo; Cindy Guzmán; Yolanda Pino; Andrés Castaño; Mónica Salazar; Héctor Fabio Ospina; Piedad Ortega Valencia; María Teresa Cruz Bustamante; Juan Carlos Hernández; Cándida Chévez; Ariana Celeste Aquino; Suyapa Pérez; Danilo R. Streck; Alfonso Torres Carrillo; Alfredo Manuel Ghiso; Oscar Jara Holliday
El desarrollo del campo de investigación referido a la práctica profesional docente sigue siendo un motivo de discusión en la formación del profesorado. Sus problemas son abordados desde distintas dimensiones: la relación teoría-práctica, el papel de la investigación en la práctica, las tensiones entre la formación disciplinar y didáctica, la complejidad de la práctica pedagógica y el papel ético del docente en ella (Diker y Terigi, 2008). Así, la formación de los docentes requiere de una permanente comprensión y discusión sobre la didáctica y las didácticas de las disciplinas, enfocadas hacia sus prácticas, pues su ejercicio, siempre cambiante, enfrenta diversos retos. En este contexto de discusión sobre las prácticas y las experiencias de los docentes, la investigación narrativa se ha convertido en una forma de comprender la realidad. A diferencia del método científico propio de las ciencias naturales, la investigación en las ciencias humanas —y dentro de ellas, la investigación narrativa— no busca confirmar una ley, sino comprender los fenómenos educativos, especialmente, cómo es un docente, cuáles son sus experiencias, qué dificultades afronta, qué piensa sobre su profesión, de qué manera planea y ejecuta sus acciones, entre otras. Al llevar a cabo las investigaciones sobre la problemática de la práctica profesional docente, se propició la confrontación y cualificación de las prácticas pedagógicas particulares de los estudiantes de la Maestría en Docencia en sus espacios laborales. El propósito: la ampliación de su horizonte cognitivo para comprender la enseñanza en todas sus dimensiones. En todo caso, se trata de posicionarse como un maestro que se piensa desde su profesión, a la vez que propone y se hace visible en el mundo académico como un profesional investigador e innovador.
Autores (as): Moreno Fernández, Patricia Judith – Compilador/a o Editor/a; Herrera Beltrán, Claudia Ximena – Compilador/a o Editor/a;
Es una práctica tradicional apenas investigada que se realiza a adolescentes de África occidental para evitar la atención masculina. ¿Soluciones? Camerún ha logrado un modo de reducir su incidencia
«Yo iba al colegio en aquel entonces. Una mañana mi madre me despertó y me pidió que fuera a su dormitorio. Me dijo que ahora que me habían empezado a crecer a los pechos había una práctica para evitar que fueran enormes. No sabía lo que me esperaba». Este es el testimonio de Bettina Codjie, de 25 años y nacida en Lomé, capital de Togo. Ella es estudiante por las mañanas y trabaja como encargada de redes sociales en una empresa de comunicación digital por las tardes. También fue una de las niñas que sufrió el planchado de pechos al inicio de su pubertad.
Múltiples son las violencias que sufren las mujeres a lo largo de su vida: violaciones, mutilación genital, matrimonios precoces, explotación sexual y asesinatos quizá sean las más mediáticas, las más denunciadas. Pero no las únicas. Uno de los maltratos invisibles es el planchado de senos. Según la definición de las Naciones Unidas, es «la práctica dolorosa de masajear o golpear los pechos de las niñas con objetos calientes para suprimir o revertir el crecimiento de estos». En algunos lugares se opta por los vendajes compresivos.
Se practica fundamentalmente en Camerún, pero también en otros países africanos… y hasta a Europa ha llegado. A principios de 2019, el diario británico The Guardian descubrió varios casos en el Reino Unido y que unas mil niñas migrantes y de la diáspora se encontraban en riesgo, lo que obligó al Gobierno a emitir un comunicado recordando que se considera una violencia contra los menores ilegal y perseguida por la ley.
Naciones Unidas ha calificado el planchado de senos como una de las cinco violencias contra la mujer menos documentadas del mundo. Diversos informes mencionan que unos 3,8 millones de adolescentes africanas la han podido padecer y citan a la ONU como fuente de esta estimación, pero no existen datos contrastados. «Es probable que más de cuatro millones de niñas hayan sido sometidas a esta práctica. Actualmente resido en Togo, donde recopilamos datos con 3.045 madres en la región de Kara y al 12% de ellas se les había realizado. Sé que también se hace en Nigeria, Costa de Marfil, Burkina, Guinea Conakry o en Sudáfrica, pero [la incidencia] no se ha documentado con estudios», advierte el antropólogo Flavien Ndonko.
Ndonko fue uno de los autores del único recuento de casos realizado hasta la fecha. Tuvo lugar en Camerún en 2005 a iniciativa de la agencia de cooperación alemana (GIZ) y la Asociación Renata, una de las pocas en el mundo que ha investigado y ha trabajado en campañas de sensibilización. Ellas bautizaron esta práctica con el nombre por el que se conoce y aportaron unos resultados que revelaron que el 24% de las casi 6.000 niñas y mujeres encuestadas habían sido sometidas a ella y que otros 2,3 millones se encontraban en riesgo en este país. En algunas provincias la prevalencia ascendía al 53%.
Es un asunto tabú que se realiza en secreto en el hogar, relegado a la intimidad de la relación madre-hija. «La gente tiene dificultades para hablar de ello porque es como una cosa oculta que no deberíamos divulgar. Las personas que lo practican están en las aldeas. En mi caso, sé que no fue iniciativa de mi madre, sino de sus tías que están en el pueblo», indica la estudiante Codjie.
La razón de esta tortura es lograr que los pechos de las niñas no llamen la atención para evitar que los hombres se sientan atraídos por ellas, retrasar al máximo el inicio de la vida sexual de las chicas, prevenir el acoso, los embarazos no deseados… Aunque no se sostiene esta teoría: en Camerún, los últimos datos disponibles del Fondo de la Población de la ONU (UNFPA) revelan que el 30% de las mujeres se quedan embarazadas antes de los 18 años.
Betty Codjie no cree que haya relación entre el planchado de senos y la prevención de embarazos no deseados, tal y como sostiene la creencia popular. «Estos tienen que ver más con la falta de acceso a métodos anticonceptivos», afirma la chica. Las jóvenes como ella saben que deben conseguirlos si van a mantener relaciones sexuales, pero les echa para atrás porque el sexo está mal visto si se trata de una mujer soltera. De hecho, solo el 13% de las mujeres entre 15 y 49 años utiliza métodos anticonceptivos modernos, según la UNFPA. «Te preguntan si es que te vas a acostar con un tío… Todavía hay una cierta moral de que no debes tener relaciones sexuales. Para pedir las píldoras anticonceptivas aún necesitas mucho coraje, y las chicas al final se quedan embarazadas».
En la mayor parte de casos, el planchado lo realizan las madres y los objetos más utilizados son piedras lisas, espátulas, palos de escobas o similares, e incluso cinturones para atar alrededor del pecho. «Mi madre fue a buscar un bastón y me explicó que tenía que golpearme todas las mañanas, al amanecer. Me pareció un poco raro, no lo entendía. Cuando los pechos empiezan a crecer, duele. Así que cuando te golpean, es peor…», afirma la joven. Codjie fue advertida de niña de que cuando le empezaran a crecer los senos, los hombres la mirarían. Que su desarrollo era una manera de provocarlos.
El martirio le duró a Codjie casi un mes con sesiones de 10 minutos cada mañana, pero acabó por rebelarse y dejó de acudir a su sesión matutina de golpes. No tuvo más problemas con su madre. «Ella se dio cuenta de que no me gustaba», reflexiona. Codjie piensa que en su caso no ha tenido consecuencias para su físico, pero en otros casos sí que se presentan problemas físicos y psicológicos a posteriori. Los primeros incluyen dolor, quistes, abscesos, cicatrices, daño permanente en los conductos de la leche, infecciones, fiebre severa, dolor intenso, quemaduras, deformación, reducción o agrandamiento del tamaño de los senos, caída prematura, e incluso la desaparición completa de uno o ambos.
Desde el punto de vista psicológico, se producen sentimientos de baja autoestima y la creencia entre las menores de que no deberían tener senos. «Todas las víctimas que hemos registrado padecían al menos un daño físico y/o psicológico», asevera Catherine Aba Fouda, portavoz de Renata. «Algunas han reportado tener dolores de cabeza, no pueden soportar que su pareja toque sus senos durante su intimidad y otras se han negado categóricamente a amamantar a sus bebés porque el simple contacto con el pecho les produce dolor». Coincide Codjie con esas sensaciones negativas: «No me gusta tocar mis senos o verlos. Simplemente no los encuentro bonitos».
Desde la ley hasta la educación sexual
En el año 2015, el Gobierno de Camerún desalentó la práctica al incluir una disposición en el nuevo Código Penal; en concreto el Artículo 277 establece que quien, de cualquier manera, interfiera con un órgano para inhibir su crecimiento normal, será castigado con prisión de seis meses a cinco años, multas de 100,000 a un millón de francos CFA (entre 170 y 1.700 dólares). «Pero aún no se ha aplicado, varias personas continúan ejerciendo libremente esta barbaridad sin ninguna preocupación», denuncia Aba Fouda.
«La solución es muy simple: abrir un diálogo sobre sexualidad y romper los tabúes al informar a los adolescentes sobre las manifestaciones y los cambios en la pubertad», propone Aba Fouda. Esto es, de hecho, la razón de ser de Renata. «Hicimos sensibilizaciones a través de charlas educativas en escuelas, iglesias, medios de comunicación, comunidad y asociaciones tradicionales interesadas; las estrategias de intervención varían según el entorno y el objetivo. Llevamos a cabo acciones de promoción ante los responsables de la toma de decisiones y esto produjo un resultado alentador».
Tras el escandaloso resultado de 2005, Renata y sus socios técnicos y financieros lanzaron una campaña de sensibilización internacional. Para ella se valieron de quienes llaman cariñosamente aunties, tías en inglés. Son en su mayoría las madres adolescentes que han sido víctimas del planchado a las que formaron para expandir su mensaje en contra de esta forma de violencia en los hogares, las iglesias y los medios de comunicación. Después de muchas intervenciones, realizaron otro estudio en 2012 y vieron que las cifras se habían reducido a un 12%.
Las noticias son bastante satisfactorias en los últimos tiempos porque las familias están comprendiendo la gravedad del fenómeno, y gradualmente abren el diálogo y la comunicación en torno a la sexualidad. «Esperamos continuar con nuestras acciones y deseamos realizar una nueva evaluación, pero carecemos de apoyo financiero», dice Aba Fouda. «Aproximadamente, 1,2 millones de niñas estaban en riesgo en 2013. Pero desde entonces, esta cifra probablemente habrá disminuido dada la excelente campaña de sensibilización liderada por Renata», abunda el antropólogo Ndonko.
Codjie es también bloguera de moda y cosméticos, y se ha dado a conocer en la comunidad de Instagram de su país. Pero su labor de influencer no se queda solo en las compras. Ya más mayor, decidió compartir su experiencia después de leer en Facebook a una chica contando su caso y recuerda que hasta sus amigas se sorprendieron. «Es muy importante hablar abiertamente porque la mayoría de la gente no sabe de esto», indica. Su objetivo es evitar que otras jóvenes se dejen hacer lo mismo.
Y condena la práctica, desde luego. «No está bien. Como mujer, te van a empezar a crecer los senos y no veo la razón de detener ese proceso o de impedir que el desarrollo prosiga de forma natural; no podemos ir en contra de nuestra naturaleza y el hecho de que sea más por el placer de los hombres me molesta. Es machista, es una forma de opresión para la mujer. Es nuestro cuerpo».
Fuente e imagen: https://elpais.com/elpais/2019/07/09/planeta_futuro/1562676612_984314.html
Reseña: Estudio del Fondo de Población y la ONG Plan internacional hecho en Bolivia, Brasil, El Salvador, Honduras, Nicaragua, Perú, República Dominicana y Guatemala que analiza cualitativamente algunas de las causas que impulsan a las niñas y jóvenes a las uniones y matrimonios tempranos, y asegura que las normativas y la desigualdad de género están al centro de la problemática.
Tabla de Contenido:
Prefacio 5
Resumen Ejecutivo
1. Introducción: matrimonios y uniones infantiles, tempranas y forzadas en América Latina y el Caribe
2. Matrimonios y uniones infantiles, tempranas y forzadas en América Latina. Estudio y metodología
3. Marcos legales relacionados con matrimonios y uniones infantiles, tempranas y forzadas en América Latina y el Caribe
4. Análisis de los hallazgos cualitativos en los ocho estudios de país
5. Conclusión
6. Recomendaciones
Referencias
Voluntarios del programa Enseña por México apuestan por innovadores métodos de educación para hacer frente a la gran deserción escolar y los malos resultados de México en educación.
México invierte al año más del 5% de su PIB en educación. Eso supera la media de los países miembros de la OCDE, la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico. No obstante, es la nación peor evaluada de ese organismo. La organización ‘Enseña por Mèxico’ apoya al Estado con innovadores programas educativos, allí donde éste no llega.
Puede que tenga buenas intenciones, pero Bill Gates es malo para la educación.
Por John Warner
Como parte de sus esfuerzos exitosos para transformar la educación K-12 a través de una combinación de inversión y apoyo de iniciativas políticas como los Estándares Estatales Básicos Comunes, Bill Gates ha puesto su atención en la educación superior.
Su movimiento es el establecimiento de la Comisión de valor postsecundaria , que se compromete a desarrollar métodos para medir el «valor» de un título o certificado de educación superior, esencialmente respondiendo a la pregunta «¿Cuánto vale la universidad?»
Quieren saber definitivamente sobre el «retorno de la inversión» [1] de la universidad.
Me gustaría tomarme un momento para hablar directamente con Bill y Melinda Gates.
Por favor, por favor por favor, por favor, no hagas esto. Estoy seguro de que tienes buenas intenciones, pero honestamente, mantente alejado de la educación. Ya has hecho suficiente.
Volví.
Ese párrafo inicial, varias pulgadas arriba, es lo que en el negocio de la escritura llamamos ironía, también conocido como una broma. Bill Gates no ha tenido éxito en transformar la educación K-12. Sus ideas respaldadas por su riqueza han tenido un efecto tremendo y en gran parte perjudicial en nuestros sistemas y escuelas.
No olvidemos las noticias más recientes sobre el » quiebre » de los esfuerzos de Gates por mejorar la enseñanza, en la que su fundación invirtió $ 215 millones, pero puso al público en peligro por más de $ 300 millones adicionales. Enredarse en un proyecto de Bill Gates puede ser una empresa costosa.
En cuanto a su cambio a la educación superior, recomiendo un artículo reciente de Nicholas Tampio, de la Universidad de Fordham, en el que discute el trabajo de Gates en educación y presenta su análisis de lo que puede estar ocurriendo . Tampio es el autor de Common Core: Estándares nacionales de educación y la amenaza a la democracia, en el que describe las formas en que estos estándares entran en conflicto con los objetivos que los creadores de los estándares afirman apoyar y están en conflicto fundamental con nuestros ideales democráticos. Tampio está bien informado acerca de los detalles específicos de lo que sucede cuando el apoyo de Gates Foundation toma el camino del uso real de la escuela y el aula.
Hay muchas razones para objetar a Bill Gates que se está preparando para su educación, y ni siquiera comienzan con los detalles específicos de sus enfoques de la educación.
En general, creo en la posición articulada por Anand Giridharadas en su libro Winners Take All: The Elite Charade of Changing the World , en el que estos grandes esfuerzos, aparentemente filantrópicos, realizados por multimillonarios como Gates tienen el deseo de preservar el status quo donde se sientan encima del orden social. En lugar de poner su dinero en manos de expertos en educación o financiar directamente escuelas o estudiantes, diseña programas que replican sus valores.
Por ejemplo, observe que la cita directa sobre el propósito de la Iniciativa de políticas de Gates, «los esfuerzos para mover a las personas de la pobreza al empleo». Esto sugiere un vínculo claro entre el empleo y el fin de la pobreza y, sin embargo, sabemos que el empleo por sí solo no es una garantía contra la pobreza. El empleo es algo bueno, pero ¿qué pasa con empleos mejor pagados? ¿Qué pasa con otros enfoques para reducir la pobreza? ¿Qué sucede cuando una persona adinerada y poderosa puede poner tanto peso detrás de un enfoque único enraizado en un conjunto de valores no examinados, por ejemplo, diseñar un sistema que se supone que ayude a los maestros a mejorar, que muchos expertos podrían haberle dicho que estaba condenado antes de que lo hiciera? ¿empezado?
Es esta falta de comprensión o atención que diferentes personas pueden tener diferentes valores lo que más preocupa cuando se trata de Gates y su trabajo en la educación.
En K-12, estos programas están en gran medida divorciados de las experiencias vividas por estudiantes y maestros. Gates aparece impulsado por valores de eficiencia y estandarización.
Hablando en mi área personal de interés y experiencia, enseñando a escribir, la imposición de los Estándares Estatales Básicos Comunes como un objetivo para luchar por exacerbar todos los problemas asociados con la mayor eficiencia y estandarización. Por sí solos, las normas parecen tener sentido común e inocuas, pero ignoran la parte más importante de aprender a escribir: el proceso por el cual se produce la escritura. Enfocarse en los estándares que describen el resultado del proceso de escritura es un retroceso a lo que deberíamos estar haciendo. [2]
La eficiencia también está preparada para ser un tema para el trabajo de educación superior de Gates. Anthony P. Carnevale, del Centro Universitario de Educación y Fuerza Laboral de Georgetown, uno de los principales miembros de la comisión Gates, ha presentado explícitamente una visión de la universidad contemporánea como un ejemplo de eficiencia. Al escribir en Inside Higher Ed , respalda la promesa de los datos de resultados a nivel del programa (los resultados se definen esencialmente por los ingresos) al decir :
«El efecto más significativo probablemente sería la racionalización de los sistemas universitarios públicos. Un sistema público podría decidir ofrecer un título específico (digamos inglés) en un solo campus en lugar de en cada campus, como lo hace la mayoría ahora. Ese sistema podría reunir a todos de sus recursos y el mejor talento en inglés en un solo campus y ofrece un grado sobresaliente en lugar de ofrecer programas mediocres en sus campus de sucursales insuficientes «.
Para algunos, como Bill Gates, esto suena como un sueño. Para otros, como yo, una pesadilla. Para mí, es una pesadilla porque no ubico mis valores en el mismo lugar que estos caballeros. La idea de que nuestras instituciones deberían ser segregadas de esta manera para hacer un uso eficiente de los recursos suena terrible. ¿Qué pasa con la especialización en ingeniería que quiere tomar una clase de escritura creativa como optativa? ¿Qué pasa si hay estudiantes que quieren especializarse en comunicación, pero la escuela de comunicación está en el otro lado del estado y, por alguna razón, tienen que vivir en casa?
Debemos ser conscientes de un truco retórico que a menudo está en juego en estas situaciones. La pieza de Carnevale enmarca estos cambios como una consecuencia inevitable de las tendencias existentes en la educación. Si las escuelas no cambian para adaptarse a lo que viene, están fallando a sus estudiantes. En un mundo sin recursos suficientes, debemos adaptarnos, ¿verdad?
Si esta es la dirección que deben tomar las instituciones de educación superior porque carecemos de recursos, tengo una idea, vamos a conseguir más dinero de personas como Bill Gates, que no parecen carecer de recursos. ¿Cuántas becas podría pagar Bill Gates con el dinero que invertirá en la Comisión de valor postsecundaria [3] y la Iniciativa de políticas de Gates?
Pero como Giridharadas deja claro en su libro, hay una alternativa, podemos elegir interrumpir el status quo y restablecer las reglas bajo las cuales se nos ha pedido que trabajemos. Bill Gates no habla por millones de nosotros preocupados por la educación, y no se le puede permitir que sea la única persona con un megáfono.
Este es el poder de la democracia, y mi esperanza es que rechacemos las incursiones inherentemente antidemocráticas de Bill Gates en la educación, no importa cuán bien intencionados o buenos sean.
[2] Tengo un par de libros sobre esto que explican cómo funciona esto con gran detalle. Envié copias a la Fundación Gates. No he escuchado de nuevo.
[3] Hay muchas personas inteligentes y sensatas en la comisión de Gates, pero esto no significa que debamos aceptar a un solo multimillonario como Gates que ejerce este grado de influencia. Ha sido malo en la educación K-12. No hay razón para creer que lo hará mejor en educación superior
Reseña: El informe, «Nacido para ganar, educado para perder: por qué los estudiantes con el mismo talento no tienen la misma posibilidad de ser todo lo que pueden ser» realizado por El Centro de Educación y la Fuerza Laboral de la Universidad de Georgetown , reseña que la raza y la clase son importantes cuando se trata de quién se lleva adelante educativamente en la sociedad estadounidense. En el mismo se analiza varias bases de datos federales de educación para demostrar que los niños que son negros o latinex o son de bajo nivel socioeconómicoLas familias de estado se desempeñan peor en el tiempo académico que aquellas que son blancas, asiático-americanas o de niveles socioeconómicos más altos.La parte del informe que puede ser particularmente alarmante es que estas tendencias son ciertas incluso para los estudiantes desfavorecidos que tienen talento académico y para aquellos que tienen privilegios pero menos talento académico.
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