La representante permanente de Cuba ante la ONU, Anayansi Rodríguez, expuso hoy aquí los resultados de su país en materia de atención a la niñez, alcanzados pese a la aplicación por Estados Unidos del bloqueo económico, comercial y financiero.
Las políticas, acciones y programas en favor de la infancia y la adolescencia comenzaron a aplicarse desde el triunfo de la Revolución Cubana, en 1959, adelantándose 30 años a la Convención de los Derechos del Niño, por eso en la isla actual el hambre, el analfabetismo, la insalubridad y la discriminación son solo un mal recuerdo, afirmó.
En un debate de la Tercera Comisión de la Asamblea General, la diplomática destacó que esos resultados son fruto de la existencia de sistemas gratuitos y universales de salud y educación a todos los niveles, los cuales constituyen pilares esenciales en la materialización de esta prioridad.
Rodríguez subrayó que Cuba cerró 2016 con una tasa de mortalidad infantil de 4,3 por cada mil nacidos vivos, entre las más bajas del planeta, los niños al nacer son vacunados contra 13 enfermedades transmisibles y fue validado como el primer país en eliminar la transmisión de madre a hijo del VIH/SIDA y la sífilis.
Todo esto alcanzado a pesar de las graves consecuencias del genocida bloqueo impuesto por Estados Unidos durante más de medio siglo, dijo en el foro de la Tercera Comisión, que se encarga de los asuntos sociales, humanitarios y culturales.
De acuerdo con la embajadora cubana, la peor forma de violencia contra los menores de edad es negarles el derecho a la vida, un mundo seguro, la salud, los alimentos, la educación, la cultura y la recreación sana.
Es crucial la cooperación y la solidaridad internacionales para acabar con todas las manifestaciones de violencia y alcanzar la plena realización de los derechos de los niños, insistió.