Por: Karina Batthyány
NI UNA MENOS
Empecemos primero por la edición de Ni Una Menos, un movimiento que tiene su origen en Argentina en 2015 y que nos recuerda una vez más el tema de la violencia hacia las mujeres, que lo hemos abordado en múltiples ocasiones y que sigue siendo uno de los problemas más graves, más dramáticos en términos de desigualdades de género en la región latinoamericana y caribeña.
Entonces, este miércoles es una nueva celebración, una nueva protesta del Ni Una Menos que adquirirá seguramente formas distintas por la pandemia en cada uno de los países, pero una vez más desde CLACSO nos sumamos con contundencia a esa consigna: Ni Una Menos, basta ya de violencia contra las mujeres, basta ya de cualquier tipo de violencia física, simbólica y sexual contra nosotras, las mujeres. Recordemos, solo como dato, que en nuestra región una de cada tres mujeres es víctima de esta forma de violencia.
-Quería marcar si se puede hacer un pequeño balance de Ni Una Menos teniendo en cuenta la Ley de Interrupción Voluntaria del Embarazo en la República Argentina, las luchas en República Dominicana, un continente muy movilizado y con algunas luchas triunfantes en este último año.
-Totalmente. Un continente en el que observamos las dos tendencias: por un lado, un avance en términos de lo que es la agenda feminista, la agenda del Movimiento de Mujeres, claramente los hechos en Argentina, la situación ahora en República Dominicana, pero también no nos olvidemos un continente donde hay una reacción muy fuerte de los sectores conservadores justamente en contra de esta agenda. Es decir, en contra de la agenda de reconocer los derechos para las mujeres. Reacción que por momentos sorprende por su violencia, por su virulencia y que por eso tenemos que tomar cada una de estas fechas, en este caso Ni Una Menos, que refiere efectivamente a la violencia contra las mujeres, para recordar los avances pero también las deudas o las materias pendientes en términos de la igualdad entre varones y mujeres. Y si hay una materia pendiente sin dudas esa es la de la violencia de género. Por supuesto hay otras también como todo lo vinculado a los derechos sexuales y reproductivos, la temática de los cuidados y otros temas que hemos ido abordando en distintas columnas.
30 AÑOS DEL MERCOSUR
Dado que estamos también en los 30 años del MERCOSUR, te propongo abordar el tema de la integración regional a partir de un evento en el que CLACSO participó el viernes pasado organizado por FOMERCO (Fórum Universitário do Mercosul) sobre los desafíos de la integración regional en América Latina.
El primer punto que quiero plantear allí es este tema de la integración sobre una clave que ya hemos conversado. En estos momentos, en la pandemia quedó más que claro pero antes también, la búsqueda de soluciones, la búsqueda de alternativas a los distintos problemas que enfrentamos jamás va a ser de manera aislada: nadie sale por sí solo ni a nivel individual ni a nivel colectivo como Estado, como países. Entonces, necesariamente el tema de la integración regional vuelve a colocarse con urgencia en la agenda de América Latina. Además porque creemos que América Latina tiene riqueza en términos de sus capacidades humanas, culturales, sociales, científicas, para poder colocar este tema y buscar alternativas en colectivo como región, como continente.
Por supuesto que cuando decimos América Latina también sabemos que estamos hablando de América Latina que es una y que son muchas a la vez. Es una porque tenemos comunidad de intereses, de cultura, de proyectos, de aspiraciones, pero también tenemos que plantear la diversidad que hay en América Latina de idiomas, de culturas, y que justamente creemos que la mejor versión de América Latina es la mezcla en la diversidad. Es decir, el reconocimiento de esa diversidad y a partir de allí plantearse los desafíos de la integración regional. Desafíos de la integración regional que por supuesto tienen que estar analizados o en clave de lo que es la geopolítica y no olvidarnos del componente histórico en esa evolución de lo que ha sido la inserción geopolítica de América Latina. Recuerden: tuvimos periodos de gran dependencia de Europa, luego del Imperio Británico antes, luego de Estados Unidos. Y hoy apareció un nuevo actor en escena que tiene una gran relevancia económica y geopolítica justamente que es China (el primero o segundo socio comercial de la mayoría de nuestros países).
Entonces tenemos que pensar en esa integración regional, en esa clave geopolítica. Porque hablar de integración regional no es escapar a la globalización, sino plantearnos en los desafíos que impone la globalización pero desde una perspectiva o una lógica de la región latinoamericana. También allí tenemos que plantearnos cómo podemos entender estos asuntos que desafían a cada uno de nuestros países si no fueran una proyección regional. Yo creo que realmente esto es difícil por no decir imposible, porque las lógicas muchas veces estrechas de nuestros estados nacionales son insuficientes en un contexto que está muy marcado por la globalización.
Y si no pensemos en otro tema que hemos abordado aquí en InfoCLACSO, lo que ocurrió con las vacunas y más en general con la industria o las multinacionales de los medicamentos. Tenemos ejemplos todos los días de lo que significa esta dificultad en el acceso a las vacunas para el continente latinoamericano.
Ahora bien, desde nuestro lugar que son las Ciencias Sociales y las Ciencias Humanas, cuáles son los temas de las ciencias sociales latinoamericanas justamente en esta clave regional. El primero, somos el continente más desigual del mundo, por lo tanto la desigualdad es sin duda uno de esos temas. Desigualdad que está atravesada por múltiples dimensiones: género, étnicas, urbanas, rurales, educación, edad, etc., que van marcando esos clivajes de la desigualdad. Tenemos que trabajar este tema de la desigualdad en clave regional. Porque si nos quedamos solo en los registros nacionales seguramente se nos van a escapar algunas dimensiones y sobre todo algunas alternativas que son bien importante para poder avanzar en torno a este tema.
Dentro de la desigualdad –pero lo destaco como un tema especial– las desigualdades de género en el caso de la violencia. Allí hay algunos temas absolutamente claves para la región: la violencia de género, la temática de los cuidados, la agenda en materia de derechos sexuales y reproductivos, la participación a nivel social y política, y un largo etcétera.
En tercer lugar, el tema de la democracia y los procesos de inestabilidad política. Hablamos de este tema donde nos preocupa mucho estos procesos de inestabilidad política y cómo se pone en cuestión la democracia e incluso algunos indicadores que nos muestran ciertos niveles que por lo menos ponen en cuestión el arraigo de la población latinoamericana a los sistemas democráticos, y algunos temas que creíamos ya superados en la región que vuelven a aparecer en escena. Y esto además es particularmente importante para las ciencias sociales, porque sabemos muy bien que estos procesos de inestabilidad política amenazan el desarrollo del conocimiento particularmente en las universidades y en las instituciones de investigación y son especialmente amenazantes hacia las ciencias sociales y las ciencias humanas.
Luego también está el tema del ambiente y el cambio climático: cómo proteger la cuestión ambiental en nuestro continente que tiene la mayor biodiversidad, pero también es un continente que sufre de manera directa las consecuencias ambientales y sociales del cambio climático global. Necesitamos profundizar el conocimiento y la discusión en clave regional sobre este tema.
Y luego también los temas vinculados a la migración y la movilidad humana. Lo hemos dicho en otras columnas: la movilidad humana y la migración entendida como un derecho humano. Esta movilidad humana que por supuesto se da a través de los procesos migratorios y que son un fenómeno social de enorme impacto en la realidad actual contemporánea de América Latina, donde además convergen dimensiones de las desigualdades, de la violencia.
Y por último plantear también la necesidad de discutir los procesos de generación de conocimiento, de desarrollo científico y tecnológico que quedaron además tan en evidencia en esta pandemia: cómo asociar y potenciar los sistemas científicos en América Latina para no tener estos niveles de dependencia, por ejemplo, de la vacuna.
En definitiva, se trata de volver a discutir este proyecto de América Latina como región, como continente, con construcción de intereses comunes, con aprendizajes que a su vez nos permitan solucionar los conflictos que surgen en todas las regiones con una mirada estratégica hacia el futuro. Que nos permitan entender qué ha sucedido en América Latina, hacia dónde vamos y qué podemos hacer para fortalecer la construcción de alternativas democráticas que superen los modelos de exclusión que determinan estas brechas de desigualdad.
-Karina pensaba mientras te escuchaba en lo interesante de cómo es el movimiento geopolítico, porque en estos procesos de interacción regional que se vienen dando y que son muy importantes, vimos sectores de la derecha o de los sectores más conservadores que van con un proceso contrario de la integración regional, específicamente en el MERCOSUR, declaraciones de Brasil, Uruguay, contrarios en la integración regional con la intención de correrse de los bloques en el mismo momento en el que la individualidad en la negociación mundial y el mapa geopolítico complica más que nunca, v os lo decías recién con el tema de las vacunas. Entonces el tema de la integración regional se ha vuelto mucho más importante y mucho más dentro de la agenda de los sectores progresistas de la región. ¿Esto es así?
-Exactamente. Cuando uno mira justamente esas visiones nacionalistas te plantean la posibilidad de encontrar las soluciones en el nivel nacional, no en los procesos de integración, generalmente están asociados a discursos más conservadores, más de derecha. Por eso digo hay que revitalizar estos procesos de integración regional, el MERCOSUR es un ejemplo pero no solamente, y plantear estos desafíos como los desafíos de una agenda que nos permita entender lo que ha pasado en América Latina, pero sobre todo búsqueda de alternativas hacia adelante para superar este flagelo que tiene América Latina que es la desigualdad. Y t enemos la convicción de que eso no se hace de manera aislada, es decir, los países por sí solos no lo van a lograr si no es potenciándose, integrándose, reconociendo la diversidad pero desde allí construyendo alternativas colectivas. Creo que eso es un poco el centro de la discusión o la agenda de discusión en materia de integración regional. En tal caso eso fue lo que estuvimos debatiendo y discutiendo en esa mesa de FOMERCO (Fórum Universitário do Mercosul), donde estaban participando varios de los colegas de las distintas FLACSO de América Latina, buscando también mecanismos de complementariedad entre CLACSO (somos una red de investigación, de trabajo en ciencias sociales) y FLACSO (Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales) que es otra red que también forma parte de CLACSO, en cómo nos potenciamos, cómo nos articulamos entre nosotros para impulsar estas y otras discusiones en la región.
https://www.clacso.org/se-trata-de-volver-a-discutir-este-proyecto-de-america-latina-como-region-como-continente/