Camboa/03 agosto 2017/Fuente: Guía ONGs
El director general de Entreculturas, Daniel Villanueva SJ, ha emprendido un viaje muy especial este verano. Concretamente ha sido este mes de julio cuando se ha desplazado hasta Camboya para conocer más de cerca los colegios que hay operativos en el país, centros escolares donde se apuesta por la formación como medio para darles mayores oportunidades de vida a los más pequeños.
Villanueva ha conocido la labor que realizan en la Prefectura Apostólica de Battambang, también conocido como ‘Obrum’ –‘educación’ en camboyano–, que está coordinado por Msgr. Kiko Figaredo. Este cuenta con 17 colegios repartidos por la parte noroeste del país, por las zonas más remotas del lugar. Cuentan con 60 docentes y acuden a sus clases para aprender alrededor de 1.600 estudiantes de primaria y secundaria.
‘Obrum’ nació de otro proyecto de la Prefectura Apostólica de Battamdang, con Entreculturas como principal promotor. Este se llama ‘Outreach’ y se ocupaba de ayudar a personas con diversidad funcional en la provincia de Battambang. El problema es que muchos de los afectados vivían en zonas pobres y desfavorecidas de Camboya, por lo que los más pequeños no solían acudir a la escuela y no se podían conseguir las metas establecidas.
Daniel Villanueva se ha mostrado muy satisfecho por los trabajos realizados hasta el momento. “Es un privilegio poder acercarse a ver los frutos de 17 años de trabajo y ser testigo de la diversidad y amplitud de las obras sociales de la Prefectura”, explica en una entrevista recogida en la página web de Entreculturas, www.entreculturas.org.
El director general de la ONG destaca que los conflictos ocurridos en Camboya han dejado numerosas secuelas en la población. En su opinión, es vital la integración y capacitación de la ciudadanía. “Con un 65% de la sociedad camboyana con menos de 30 años, la educación se vislumbra como la estrategia fundamental para el desarrollo y cohesión del país”, comenta Villanueva.
Tanto esta organización como otras entidades están trabajando para conseguir que la educación pública llegue a las zonas rurales, donde vive el 80% de las personas. El reto es fortalecer las instituciones que proveen los servicios educativo y poner en marcha un modelo formativo acorde con las necesidades reales de los camboyanos.