Page 6 of 7
1 4 5 6 7

Bachelet defiende Reforma Educacional: «Queremos que la educación en Chile sea un derecho social»

Chile/11 agosto 2016/Fuente: 24 Horas

La Mandataria aseguró que en Chile el tema de cobertura y acceso a la educación ya está cubierto, pero que se necesita avanzar hacia la calidad, por lo que hacia ese tema apunta su administración.

La Presidenta Michelle Bachelet aclaró este martes que el propósito de la Reforma Educacional es reconocer la enseñanza como parte de los derechos de la sociedad, más allá de un bien de consumo.

«El meollo de la Reforma es decir que no queríamos seguir con una educación que fuera vista como un bien de consumo, que el que podía pagar tenía una educación de calidad y el que no recibía lo que le tocaba, sino decir que queremos que la educación en Chile sea un derecho social para todas y todos«. manifestó.

Asimismo, aseguró que en Chile el tema de cobertura y acceso ya está cubierto, pero que se necesita avanzar hacia una educación de calidad, por lo que hacia ese tema apunta su administración.

«Cobertura y acceso, si bien siempre podemos mejorar, no ha sido el tema fundamental de la educación en Chile. El problema central, entre otras cosas, es la gratuidad y ese es el foco que también hemos colocado en esta reforma«, dijo.

Los dichos de la Mandataria se produjeron durante el seminario de la Comisión Económica Para América Latina (Cepal) «Aprendizaje y Docencia en la Agenda de Educación 2030», donde la jefa de Estado habló sobre los propósitos de las reformas educacionales que impulsa el Gobierno.

Fuente: http://www.24horas.cl/politica/bachelet-defiende-reforma-educacional-queremos-que-la-educacion-en-chile-sea-un-derecho-social-2099217

Comparte este contenido:

Centro América: El 60 % de los jóvenes no llega a las aulas

Centro América/07 Agosto 2016/Fuente: El tiempo /Autor:EFE

Cerca de 60 por ciento de los jóvenes de 15 a 24 años que viven en Centroamérica, unos 5,4 millones, está fuera del sistema educativo y buena parte de ellos, el 36 %, trabaja en puestos de baja calidad y remuneración, por lo que es de urgencia mejorar el sistema educativo de la región.

Esta es una de las principales conclusiones del Quinto Informe Estado de la Región, presentado esta semana en Guatemala y en el que se analizan los desafíos del desarrollo humano sostenible y la evolución en la integración regional.

El escrito hace un análisis en profundidad de la educación, pues es una condición necesaria para que los países eleven la productividad de sus economías, mejoren la equidad social e impulsen la habilitación ciudadana que, a su vez, lleva al fortalecimiento de la democracia.

En el sector educativo existen «notables brechas» en la inversión y la inclusión que realizan los países del norte y del sur de Centroamérica. Mientras en Costa Rica y Panamá la mitad de los jóvenes de entre 15 a 24 años se dedican «exclusivamente a estudiar», en Guatemala y Honduras apenas lo hace una cuarta parte, y en El Salvador y Nicaragua solo 44 % estudia, reveló el informe.

Las diferencias en cobertura, aprobación y abandono escolar también son notables, sobre todo entre las zonas rurales y urbanas de los países. Las calificaciones obtenidas por los estudiantes centroamericanos en las pruebas internacionales Terce, un estudio realizado por la Unesco, alertan sobre la «baja calidad de la educación primaria» en comprensión de lectura, matemáticas y ciencias.

Pese a los avances logrados de los últimos años, advierte el escrito, la inversión pública en educación sigue siendo baja en relación al promedio regional de América Latina y el Caribe: Centroamérica invierte 1.200 dólares anuales por persona, la mitad del promedio mundial y de Latinoamérica. Concretamente, en Costa Rica y Panamá la inversión es de 1.053 y 926 dólares anuales por persona, respectivamente, mientras que en Guatemala y Nicaragua no alcanza los 200.

Ante esta situación, los sistemas educativos de la región requieren «cambios estructurales de diversa magnitud», sobre todo en los países más rezagados, El Salvador, Panamá y Belice, que están con una inversión, cobertura y calidad baja. En cambio, los sistemas educativos de Guatemala, Nicaragua y Honduras, aún en una situación «incipiente», deben aumentar la financiación para lograr «niveles básicos» de calidad, apuntó el Quinto Informe Estado de la Región.

Fuente de la noticia: http://www.eltiempo.com/estilo-de-vida/educacion/el-60-de-los-jovenes-centroamericanos-no-llega-a-las-aulas/16665825

Fuente de la imagen: http://www.eltiempo.com/contenido/estilo-de-vida/educacion/IMAGEN/IMAGEN-16665865-2.jpg

Comparte este contenido:

Déficit de inversión en educación inicial de Latinoamérica afecta etapa laboral

Latinoamérica/4 de agosto de 2016/Fuente: wradio

La inversión que hacen algunos Gobiernos de Latinoamérica en educación preescolar no es suficiente, lo que luego se manifiesta en la falta de habilidades de los jóvenes que entran al mercado laboral, dijo hoy a Efe el experto del Banco de Desarrollo de América Latina (CAF) Eduardo Vélez Bustillo.

Panamá, 3 ago (EFE).- La inversión que hacen algunos Gobiernos de Latinoamérica en educación preescolar no es suficiente, lo que luego se manifiesta en la falta de habilidades de los jóvenes que entran al mercado laboral, dijo hoy a Efe el experto del Banco de Desarrollo de América Latina (CAF) Eduardo Vélez Bustillo.

«En el contexto latinoamericano hay deficiencias en invertir en educación en edades tempranas», sostuvo después de su ponencia sobre «Educación Técnica y Formación Profesional: Retos de América Latina» del II Foro empresarial «Empleos sostenibles, empresas competitivas», realizado en Panamá.

«Se ha ejecutado un buen trabajo en cobertura en los niveles de preescolar en adelante en países como Chile y México, sin embargo en otros se ha bajado el desarrollo integral del niño en la educación inicial, que involucra la parte cognitiva, emotiva, nutricional, entre otras», expresó el colombiano Vélez Bustillo, asesor social de vicepresidencia de la CAF.

El experto indicó que existe una problemática con el aprendizaje de lectura de los niños de 7 y 8 años que comienzan la primaria en las escuelas públicas de los países de la región, lo que más adelante les impide desempeñarse en otras áreas.

«Cuando llegan a secundaria a formarse en habilidades relacionadas al trabajo se quiebra esa secuencia lógica», afirmó Vélez Bustillo.

Durante su explicación en el foro, el especialista dijo que se debe empezar desde la etapa inicial de la educación un nuevo esquema conceptual de habilidades de empleo y de productividad.

«No hay ningún país que tenga un sistema perfecto en educación, capacitación y técnica (…), por eso aprender y reformar es clave», resaltó el experto en economía y sociología, investigador de universidades de China y Estados Unidos.

Aseguró que existe una problemática global relacionada con una carencia de destrezas laborales, y que los cambios tecnológicos influyen en la transformación constante de los perfiles requeridos.

Mientras que los desafíos que enfrentan los países están en lograr un acceso equitativo a habilidades para todos, el desarrollo de un marco de políticas integrado y reformas en las escuelas.

«Los países deben acercar la oferta del servicio educativo a las demandas del mercado», agregó.

«No se puede tener un desarrollo económico sin un conocimiento de cómo mejorar la capacidad del recurso humano» enfatizó el experto.

El II Foro empresarial «Empleos sostenibles, empresas competitivas», que se celebró hoy en Panamá, reunió a autoridades del Gobierno, de la empresa privada y de organismos internacionales, para analizar el futuro de la educación y su relación con las exigencias del mercado laboral. EFE

 Fuente: http://www.wradio.com.co/noticias/economia/deficit-de-inversion-en-educacion-inicial-de-alatina-afecta-etapa-laboral/20160803/nota/3206885.aspx
Imagen: http://reduca-al.net/images/noticias/nota_primera_infancia_240215.jpg
Comparte este contenido:

Más allá del Canal: ¿Afrontará Panamá el reto de la educación?

Panamá/14 julio 2016/Autora: Emiliana Vegas Fuente: El País

Panamá tiene razones para celebrar. Desde la construcción del canal en 1914, el país no había visto una obra de infraestructura como la que se inauguró el pasado 26 de junio. Las expectativas generadas por este hito han sido muchas, y se espera que el renovado canal se convierta en el motor de un acelerado crecimiento económico en los próximos años. Sin embargo, este éxito es también una oportunidad para pensar en Panamá más allá del canal y hacer de la educación la base de un desarrollo sostenible y equitativo, apoyado por un capital humano de calidad.

Entre 2001 y 2013, Panamá creció a una tasa promedio de 7,2%, más del doble que el conjunto de la región, acercándose en términos de PIB per cápita a países de alto ingreso del entorno como Chile o Uruguay. Sin embargo, la expansión de actividades en áreas clave para el país ha generado, en líneas generales, una demanda de mano de obra con un bajo nivel educativo.

El salario de la población laboral con secundaria incompleta ha crecido alrededor de un 70% en los últimos años, mientras que el sueldo de trabajadores que han superado ese nivel de estudios ha aumentado sólo un 45%. Con la apertura del canal, es de esperarse que crezca la demanda por capital humano calificado. Hoy día, muchos de los profesionales que gozan de buenos empleos con altas remuneraciones son ciudadanos de otros países, no panameños. El sistema educativo del país requiere de una mayor cantidad de profesionales capaces de responder a las necesidades de una economía que aspira a ser un referente de competitividad e innovación.

De acuerdo a un estudio de la firma Manpower en 2015, cerca de la mitad de las compañías panameñas reportan dificultades para llenar sus vacantes con personal calificado. Esta brecha de habilidades es reflejo de un sistema educativo que debe seguir trabajando para alcanzar aprendizajes más altos y más equitativos. En las pruebas internacionales PISA del año 2009, los estudiantes panameños de 15 años con mejor desempeño obtuvieron puntuaciones similares a aquellos de más bajo desempeño en Chile. Esta situación es aún más preocupante cuando se considera que Chile —el país con mejor nivel educativo de América Latina — todavía se encuentra entre los países de más bajo nivel a nivel mundial. Asimismo, los resultados de estas pruebas ponen en evidencia las grandes inequidades existentes entre las zonas urbanas y rurales en el país: los estudiantes de áreas rurales, entre los que se cuentan las comarcas indígenas, reportaron calificaciones que los ponen un año completo de escolaridad por detrás de sus compañeros de zonas urbanas.

Entonces, es tiempo de preguntarse: ¿Está Panamá dispuesto a transformar su educación para responder al reto del desarrollo sostenible?

Un buen primer paso sería aumentar el gasto público en educación para asegurar que todos los estudiantes tengan acceso a una educación de calidad. Aunque en los últimos 15 años Panamá cuadriplicó su gasto en educación, la inversión pública en este sector se mantiene entre las más bajas de la región. Además, es importante que la inversión en educación sea más eficiente y equitativa, asignando más recursos donde más se necesitan.

Por supuesto, una mejora sustancial en la educación sólo será posible si se desarrollan políticas que atraigan, desarrollen y motiven a docentes de calidad. En varios países de la región, como es el caso de Chile, Colombia y Perú, se han implementado becas para que estudiantes de alto rendimiento se conviertan en docentes, así como programas de acompañamiento y apoyo a maestros que ya están en las aulas. Panamá merece esfuerzos similares.

Panamá le ha demostrado al mundo que es capaz de asumir y resolver grandes desafíos: lo logró cuando se hizo cargo de la administración del canal hace casi 40 años y lo ha vuelto a hacer con la ampliación. Ahora debe plantearse un nuevo reto: una educación para la competitividad.

Fuente: http://elpais.com/elpais/2016/07/12/planeta_futuro/1468315476_153544.html

Comparte este contenido:

Panamá: Pese a diálogo, educadores mantienen llamado a paro

Panamá/14 julio 2016/ Fuente: TVN Noticias

A pesar de mantenerse en conversaciones con la Comisión de Alto Nivel que conforman autoridades del Ministerio de Educación (Meduca), y otras entidades, la dirigencia de educadores mantiene vigente el llamado a paro el próximo lunes 18 de julio.

El dirigente magisterial, Edy Pinto, afirmó que el paro de labores se iniciaría el próximo lunes, ya que aún no se les ha dado respuesta concreta a la solicitud del incremento al presupuesto destinado a educación.

Los educadores solicitan que se destine el 6% del Producto Interno Bruto (PIB), a educación, pero según el dirigente, el mandatario les ha dicho que en la actualidad se repara un gran número de escuelas y el aumento que los educadores solicitan, conllevaría la aplicación de nuevos impuestos.

En la reunión, que se realizó con los integrantes de la comisión de alto nivel, se planteó el punto anterior y la aplicación de un ajuste salarial que se les debe aplicar para el año 2017, además de la cancelación de los salarios y sobresueldos que se le adeuda a un numeroso grupo de educadores.

Admitió que la ministra Paredes ha logrado cambios importantes en la entidad, pero se necesita dar solución a los procesos burocráticos que atrasan los pagos.

La mesa de diálogo se activa nuevamente a las 3:00 p.m. de este miércoles 13 de julio y de este encuentro depende si se levanta la medida de paro o no.

Destacó que países más “pobres” que Panamá invierten mayor presupuesto en educación, y citó el ejemplo de Cuba que invierte el 12% de su presupuesto en educación y Costa Rica invierte el 7%, mientras que Panamá destina el 4.5%.

Jornada extendida

El dirigente también se refirió al programa de Jornada Extendida y dijo que es positivo, pero se debe hacer de manera integral, con lo que se tiene que hacer un plan Nacional de Educación que contemple todos los niveles.

Sobre el llamado a paro, en redes sociales se han dado distintas opiniones.

Comparte este contenido:

Reino Unido: The Brexit Challenge to Universities

Reino Unido: The Brexit Challenge to Universities

Articulo/Junio de 2016/autor: Christopher R. Marsicano

Resumen: referéndum en el Reino Unido, al salir de la UE tiene el potencial de disminuir significativamente el crecimiento de la educación superior en el país y en el extranjero, argumenta Christopher R. Marsicano.

The U.K.’s referendum on exiting the E.U. has the potential to significantly slow the growth of higher education at home and abroad, argues Christopher R. Marsicano.
June 21, 2016
By
Christopher R. Marsicano
Behind the steel spire atop St. Anne’s Cathedral in Belfast rises a modern structure of gleaming glass and steel. Ulster University is building a new campus right in the heart of Northern Ireland’s capital city. The university, once known only as an access-focused regional institution with a predominant emphasis on preprofessional degree programs, now boasts an excellent business school, a top-tier school of pharmacy and an eye-catching urban campus devoted to the arts.
Ulster University is emblematic of a resurgence of Northern Ireland: once mired in sectarian conflict, Belfast and its environs are now destinations for both tourists and foreign investors. Much of the rise of this country of 1.8 million is due to extraordinary investment from the European Union — investment that could soon end. Northern Ireland, like England, Scotland and Wales, is a constituent country of the United Kingdom and will take part in a referendum on continued membership in the E.U. this Thursday, June 23.
Polls on the potential British exit, or Brexit, have shown both sides running neck and neck, and the stakes could not be higher for Ulster and other universities in the United Kingdom. In fact, the results could also have a significant impact on American colleges and universities, as well.
British membership in the European Union has been exceptionally lucrative for Ulster University. The university received around 9.4 million pounds ($13.4 million) last year in E.U. funding. More than 1,700 students and around 400 scholars from other E.U. member states attend, teach and research at the university in some capacity. Its location around 45 minutes from the Irish border and only two hours from Dublin makes it a common collaborator with major universities to the south. The university’s Nanotechnology and Integrated Bioengineering Center, which was funded by a £1.6 million grant from the E.U., has generated 25 patents and three spin-off companies that are now valued at over $100 million.
Ulster, however, isn’t the only university in the United Kingdom receiving benefits from Britain’s E.U. membership.Higher education institutions received 16 percent of total E.U. research funding totaling £687 million ($1 billion) in 2013-14. People from other E.U. nations make up 15 percent of the academic workforce and 5 percent of the student bodies at British universities. Given the sheer impact of European support for universities in the U.K., it should come as no surprise that Ulster Vice Chancellor Paddy Nixon joined 102 university leaders, including vice chancellors from Oxford and Cambridge and the president of the London School of Economics, in an open letter in the Sunday Times expressing support for the European Union.
This expression of political support is emblematic of a change in university behavior. While university leaders chose to stay relatively silent on the two other recent major electoral events — the 2014 Scottish independence referendum and the 2015 general election — they emphatically support the campaign to remain in the E.U.
Yet despite university support for the European Union, a large minority of government officials and policy leaders want to leave. The leave campaign is led by Nigel Farage, the charismatic leader of the United Kingdom Independence Party whom many in the United Kingdom have compared to presumptive Republican presidential nominee Donald Trumpfor his bombastic style and anti-immigration stance.
Other major players include former London Mayor Boris Johnson, former Secretary of State for Education Michael Gove and other right-wing members of the Conservative party. The majority of Parliament, including Prime Minister David Cameron, Chancellor of the Exchequer George Osborne, Labour Party Leader Jeremy Corbyn and leaders of most of the minor parties, all support continued membership in the European Union. Cameron and Osborne represent the moderate wing of the Conservative party — constantly at odds with Gove, Johnson and the party’s right wing.
Brexit was a major political issue in the last general election, and leave campaigners argue that far-right Conservative gains in Parliament were a popular mandate for Brexit. Moderate Conservatives worked hard to renegotiate Britain’s responsibilities within the E.U. and believe that remaining in the European Union will be good for the United Kingdom. It should come as no surprise that both sides disagree on the impact Brexit would have on British universities.
The leave campaign argues that the European Union funds only 3 percent of all U.K. R&D spending and that money saved from not having to pay fees associated with E.U. membership could allow the U.K. government to expand domestic financial support for research. Furthermore, universities in nations outside of the E.U. are still able to apply for research funding; leave campaigners suggest that wouldn’t change.
Leave supporters also believe that, when it comes to U.K. universities’ ability to attract talented European faculty, a U.K. immigration policy absent of E.U. agreements on free movement of people could be devised in such a way that it would privilege scholars from other European countries traveling to Britain. Outside of the E.U., universities could raise fees on E.U. students, an action currently prohibited by E.U. laws that state universities in a given country must treat students from that country and other students from E.U. member states equally. There are also not enough spaces at universities to meet current demand. Leave campaigners argue that filling admissions spaces with domestic students could offset any drop in the E.U. student population.
University leaders and the remain campaign don’t agree. They note that a rise in E.U. student fees coupled with presumably more stringent immigration controls would result in an extremely decreased E.U. student population, as polls of E.U. students show that 80 percent would be less likely to pursue education in the U.K. E.U. students are some of the highest achieving in the U.K. system and are more likely than their British counterparts to pursue graduate degrees in the U.K.Brexit would raise fees on these students, limiting access to U.K. universities and potentially reducing overall institutional quality. It would also limit domestic student interaction with students from other countries. U.K. universities would become increasingly insular and homogenous in their student bodies as American competitors seek greater and greater diversity in their student populations.
Leaving the E.U., remain supporters argue, would also mean closing access to the Erasmus exchange program that allows students from E.U. member states to study in another member country as part of their academic program, further closing U.K. student engagement with their European counterparts. Students may also face adverse outcomes upon graduation should Brexit hurt Britain’s economy and job market. Leaders also fear that highly talented European academics seeking faculty or postdoc positions in the U.K.may seek positions elsewhere as uncertainty regarding their immigration and employment status over the next few years would grow exponentially in the days after a vote to leave. While long-term immigration reform might have some benefits, Brexit would decimate universities’ ability to recruit new faculty in the short term. Lastly, the remain campaign is quick to point out that, while U.K. contributions make up 11 percent of the total E.U. research budget, U.K. institutions receive more than 16 percent of total research grant funding.
What’s often overlooked in the debate between the leave and remain campaigns, however, is that if Britons vote to leave, there will be implications for American universities and students, as well. American universities might be the beneficiaries of Brexit when it comes to faculty recruitment. While emigrating to the United States might be difficult for European scholars when compared to an E.U.-member United Kingdom, stricter immigration controls in the U.K. may make the United States a more desirable location.
Furthermore, around 50,000 Americans study in the United Kingdom each year. A common language and history make the U.K. a top destination for American students, and neither will change with Brexit. The same could be said, however, for Ireland, an E.U. member with no plans on leaving any time soon. Google and other major American tech companies have built their European headquarters in Dublin, and if Brexit happens, many believe American companies with a major presence in London could move their operations across the Irish Sea to Dublin and into other major continental financial centers like Frankfurt and Luxembourg. Students who would have gone to the U.K. to study and intern in finance for a semester or two might soon find themselves more attracted to Ireland.
While American universities may be able to get their pick of scholars in the exodus of European faculty from British institutions that would follow Brexit, and American students may not recognize a tremendous difference between studying abroad in Dublin as compared to Edinburgh or London, the greatest influence Brexit could have on American universities is indirect, but hugely impactful. Most economist agree that a vote to leave would cause a British recession, at least in the short term, with some even saying the vote could trigger aglobal recession. David Cameron even warned that voting for Brexit would be like putting a bomb under the U.K. economy. For those American universities that are not in a position to compete for top European faculty or send students abroad, global volatility in the markets could cause significant damage to meager endowments and hurt fund-raising.
The cost of Brexit, therefore, is too high. Elite American universities would receive meager benefits, but the rest of the American higher education landscape could feel the effects of a recession too soon after emerging from the financial crisis of 2008. British universities will lose a major source of research funding, faculty and high-quality students. British students will feel the pinch of higher tuition and fees during a period of economic downturn. Brexit has the potential to significantly slow the growth of higher education at home and abroad and offers few benefits to postsecondary institutions on both sides of the Atlantic.
Along the banks of the River Foyle at the border between Northern Ireland and the Republic lies Derry. The walled city is home to a branch campus of Ulster University, and on June 9, the campus hosted two former prime ministers to talk about the potential ramifications of Brexit. Tony Blair and John Major both warned against leaving the European Union, saying it would effectively close off access to the border with the Republic. What neither gentleman noted, however, is that voting to leave the European Union would also effectively cut off access to research funding, high-quality international students and stellar faculty. University students, faculty and staff overwhelmingly support the remain campaign. One can only hope that they turn out to vote in two days’ time. Their universities are counting on them.

Fuente: https://www.insidehighered.com/views/2016/06/21/universities-face-major-challenges-brexit-essay

Comparte este contenido:

La elevada desigualdad y pobreza amenazan a Estados Unidos

Estados Unidos/23 junio 2016/Fuente: Alto Nivel

La directora gerente del FMI, Christine Lagarde, dijo que la desigualdad está creciendo “más y más” en Estados Unidos, provocando una polarización en la distribución de los ingresos entre los habitantes norteamericanos.

Pese a que la situación económica de Estados Unidos presenta “una buena condición”, el país enfrenta cuatro retos que ponen en riesgo su crecimiento en el futuro, entre los que están los elevados niveles de desigualdad y pobreza en la economía más grande del mundo, alertó el Fondo Monetario Internacional.

En su discurso con motivo de la revisión de las perspectivas económicas de Estados Unidos, la directora gerente del organismo, Christine Lagarde, dijo que la desigualdad está creciendo “más y más”, provocando una polarización en la distribución de los ingresos entre los habitantes norteamericanos.

Desde el año 2000, el poder adquisitivo del 3 por ciento de la población de Estados Unidos ha caído por debajo del ingreso medio, degradando sus estándares de vida, dijo el FMI.

Por otro lado, 46.7 millones de estadounidenses viven en situación de pobreza, equivalente al 15 por ciento de la población en total. La pobreza se recrudece sobre todo en grupos minoritarios, madres solteras y personas con discapacidades.

“No sólo la pobreza crea tensiones sociales significativas, sino que ‘devora’ la participación de la fuerza laboral y socava la capacidad de invertir en educación y mejorar los resultados en la salud”, dijo Lagarde en su mensaje en Washington DC.

La directora gerente también dijo que las otras amenazas son el declive de la participación de la fuerza laboral en Estados Unidos, debido a que la población envejece, y que la productividad ha bajado 1.7 por ciento desde 2007 y a una tasa de -0.4 por ciento en los últimos cinco años.

El organismo también llamó a las autoridades a adoptar medidas para elevar la participación en la fuerza laboral, incluyendo la mejora en los servicios de cuidado de niños y otros beneficios que permitan que más mujeres puedan trabajar, a buscar reformas a la inmigración y revisar el programa de seguro por discapacidad para posibilitar empleos a tiempo parcial.

También llamó a Estados Unidos a elevar el salario mínimo mientras ofrece al mismo tiempo un crédito por ingresos más generoso y mejora la educación preescolar.

En su revisión anual a las políticas económicas de Estados Unidos, el FMI dijo que espera que la expansión en ese país alcance un 2.2 por ciento en 2016 y un 2.5 por ciento en 2017, en medio de un lento avance en la inflación hacia el objetivo de la Reserva Federal de un 2 por ciento.

Fuente: http://www.altonivel.com.mx/la-elevada-desigualdad-y-pobreza-amenazan-a-estados-unidos-56993.html

Comparte este contenido:
Page 6 of 7
1 4 5 6 7