Hambre, desocupación… y elecciones con los mismos de siempre

Si votar sirviera para cambiar algo, ya estaría prohibido”. -Eduardo Galeano

En una fecha decisiva del calendario electoral en Argentina se confirmaron las alianzas vigentes. El panperonismo cambió de nombre -quizás una forma de disimular un fracaso-, mientras se cruzan durísimas acusaciones internas, al igual que en la coalición neoliberal Juntos por el Cambio.

Subsiste en el país una superestructura política que no termina de morir, alejada de la evolución del proceso político, mientras se calcula que la inflación anual rondará el 100 por ciento, y crecen la desocupación y la inseguridad alimentaria.

Si se anualiza la inflación de un 8,1% promedio de los dos últimos meses, la suba de precios en el año alcanzaría 155%. La tasa de interés de Banco Central, referencia para los plazos fijos, está en 155% anual.Quizás el factor que defina el escenario de los próximos meses es lo que se acuerde o no con el FMI, con la esperanza de recibir dólares frescos y poder usarlos para intervenir en el mercado cambiario.

En la provincia de Jujuy, el gobierno a cargo del dirigente radical (opositor) Gerardo Morales desató una represión salvaje sobre los trabajadores y las comunidades que protestan contra una Reforma Constitucional a todas luces reaccionaria, que pretende legalizar la persecución a movimientos sociales en nombre una paz de cementerios y mantiene desde hace casi ocho años presos políticos, como es el caso de Milagro Sala.

En la Ciudad de Buenos Aires, el poder ejecutivo que comanda el candidato a presidente de Juntos por el Cambio, Horacio Rodríguez Larreta, desalojó violentamente a las mujeres de Casa Pringles, una experiencia feminista muy interesante. ¿Estos hechos anticipan los tiempos que vendrán en la Argentina?

 Las elecciones Primarias Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO) se realizarán el 13 de agosto. Todos los partidos que se presenten a ellas deberán obtener el 1,5 por ciento de los votos “válidamente emitidos” para poder acceder a las elecciones nacionales del 22 de octubre, en las que se definirá quién será el nuevo presidente y se renovarán la mitad de la Cámara de Diputados y un tercio del Senado.

Desde los medios se insiste en una derechización del escenario electoral, alentada y sobreanalizada desde los medios, que no logra que la población pierda de vista  un trasfondo de crisis que no terminará con las elecciones ni el 10 de diciembre, cuando un nuevo gobierno, de cualquier signo, intente aplicar nuevos planes de ajuste.

Acorralados en sus propios mundos, el neoliberal Juntos por el Cambio y el oficialista Frente de Todos sobreviven la incertidumbre, fracturas, rompimientos y cambios de nombre de cara a los comicios generales de agosto. En pleno cierre de alianzas entre los partidos que competirán en las elecciones nacionales, el oficialismo panperonista -quizá para disimular su fracaso- dejará la denominación de Frente de Todos para llamarse Unión por la Patria.

Elegir el término “Patria” para la nueva denominación y centrar la prioridad en una nueva relación con el FMI que elimine los condicionamientos a la política económica  empezaron a definir el eje programático que planteó la vicepresidenta Cristina Kirchner. Las escaramuzas para ordenar la interna panperonista eran previsibles y peligrosas para la nueva alianza que se mueve en un camino finito de crítica al gobierno (¿propio?) y de tratar al mismo tiempo de no expulsarlo y contenerlo.

Por su parte, la principal coalición opositora confirmó que sostendrá la neoliberal Juntos por el Cambio como expresión de alianza, en medio de ríspidas negociaciones y definiciones respecto a su conformación final, demostración de un cuadro perfecto de crisis del regimen político del país.

Las primeras definiciones de la flamante coalición panperonista, que en rigor tiene en su interior a las mismas fuerzas que formaron el Frente de Todos en 2019, da cuenta de uno de los objetivos del nuevo nombre: polarizar con la derecha como defensora de la dolarización, del acuerdo con el Fondo Monetario Internacional, y la extranjerización de los recursos estratégicos, entre otras cosas.

Los medios hegemónicos vienen repitiendo la película de una derrota peronista  lineal y previsible, pero Juntos por el Cambio, que aparecía hasta hace poco como ganador casi inevitable de la elección, también atraviesa una profunda crisis.

Sus partidos están partidos: por un lado Patricia Bullrich apoyada por el expresidente Mauricio Macri y el “Grupo Malbec” del radicalismo se enfreta a Horacio Rodríguez Larreta, jefe de gobierno de la capital, que junto con el radical Gerardo Morales y la Coalición Cívica, emiten comunicados seriales llamando a una mayor amplitud de alianzas.

El cambio de nombre de la alianza oficialista,  no es para nada inocente: trata de desligarse de la apática figura presidencial de Alberto Fernández, que ante la realidad debió abandonar el sueño de ir por su reelección. El peronismo no quiere cargar con el peso del fracaso.El primer comunicado de la nueva Unión por la Patria repitió fórmulas rituales como aquello del «crecimiento con inclusión social» pero, sobre todo el piso de participación de cada sector en las listas para las elecciones.

Mientras el kirchnerismo y el Frente Renovador del actual ministro de Economía Sergio Massa proponían que fuera del 40 por ciento, desde el sector del exvicepresidente Daniel Sioli y  Alberto Fernández impusieron que fuera el 25, apelando a recurrir al “partido judicial”, el mismo que proscribió a la actual vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner,  para dirimir el tema.

En medio del cierre de las candidaturas, la vicepresidenta  habló desde la sureña provincia de Santa Cruz para dejar en claro que quiere gobernantes “con experiencia en la gestión pública». El más elogiado fue Axel Kicillof, a quien le reconoció que había advertido sobre el Fondo Monetario Internacional: “Kicillof lo advirtió y hoy estamos ahí, en el FMI, con una terrible deuda. Además, hay sobretasa de interés por la magnitud del préstamo acordado”.

“Cuando el FMI irrumpe en un país después de un préstamo de la magnitud que le dieron a Argentina, hay que decirle a la sociedad la verdad. Si tenés que firmar porque tenes la 45 en la cabeza, tenes que decirles que te hacen firmar. Porque, después de todo, ese préstamo no es responsabilidad de este gobierno. La sufre este gobierno y la sociedad argentina, pero creo que es hora de comenzar a hablarle con la verdad a la sociedad”, dijo.

Resta ver antes del 24 de junio qué candidatos se confirman y si esa unidad tendrá el formato de lista única, o si habrá un capítulo de disputa en las PASO antes de llegar todos con la misma boleta a octubre, como parece lo más probable.  La opción de un salto nacional (a la presidencia) del exministro de Economía y hoy gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof ,volvió a cobrar fuerza.

A horas del cierre de alianzas en Juntos por el Cambio, Patricia Bullrich y Horacio Rodríguez Larreta nuevamente subieron el tono de la disputa.»Sumamos en esta nueva etapa a José Luis Espert y el GEN de Margarita Stolbizer y vamos a seguir sumando», lanzó Rodríguez Larreta y reiteró que su intención es que el gobernador cordobés Juan Schiaretti participe del armado electoral. Bullrich ratificó su plan de ajuste y salió a proteger a su potencial aliado el “libertariano” Javier Milei.

Los medios de comunicación hegemónicos son parte del desfasaje: sus coberturas políticas, dedicadas en un 99 % a reflejar y analizar las internas del peronismo, de Juntos por el Cambio y la evolución del ultraderechista Javier Milei, están a trasmano de la vida real, de los procesos políticos y de los paros, piquetes y movilizaciones de un abajo que se mueve, contra los bajos salarios, la desocupación y el hambre.

Pero la realidad que más allá del impacto mediático, a Milei no le va bien. En los procesos electorales en varias provincias hizo apuestas fuertes y le fue entre mal y peor. En el mundo politizado del periodismo e incluso de la academia se sacaron conclusiones de mínima apresuradas, en base a un solo elemento: las encuestas.

 Y, se comenzó a afirmar que la sociedad giró unilateralmente a la derecha, especialmente los jóvenes, que Milei expresaba la rabia. Pero  varios estudios de opinión cualitativos muestran cierta inconsistencia incluso entre los que dicen que votarían por Milei, pero defienden las empresas públicas, la salud y la educación pública, todos derechos que el programa libertariano quiere liquidar lisa y llanamente.

Como suele ocurrir ante las coyunturas electorales, y más en el escenario de insatisfacción y frustración frente a unas democracias que durante varias décadas solo han garantizado algunas libertades formales sin avanzar resueltamente hacia la justicia social, el tira y afloje entre las coaliciones en competencia han convertido a la Argentina mediática en un pandemonio. Terminado el Mundial de Fútbol hay que hablar de las elecciones.

Un régimen político que aparenta continuidad, aparece desfasado ya del proceso político real, desgarradas las coaliciones internamente y en crisis con sus propias bases electorales, continúan adelante a pesar de todo. Son la expresión de lo viejo que no termina de morir. Decía Antonio Gramsci: «El viejo mundo se muere. El nuevo tarda en aparecer. Y en ese claroscuro surgen los monstruos».

El economista Horacio Rovelli señala que el salario mínimo en EEUU es de 2.000 dólares por mes y en la Argentina de 310 dólares al tipo de cambio oficial y de 160 dólares al cambio paralelo, mientras la inflación quizá supere el 100% este año.

Algo ya parece seguro: el próximo gobierno nacerá débil y condicionado por la inmensa deuda externa, lo que adelanta nuevas crisis y convulsiones de una futura gestión que intentará continuar planes de ajuste y sumisión al FMI en la Argentina de la crisis permanente.

O del estallido que algunos agoreros vaticinan, como hace 22 años, con el entonces presidente Fernando de la Rúa huyendo en helicóptero desde la Casa Rosada. Mientras, en las plataformas se difunde el filme “Diciembre 2001”, basado en el libro «El palacio y la calle» del periodista Miguel Bonasso. Cualquier similitud no es mera coincidencia.

*Periodista y comunicólogo uruguayo. Magíster en Integración. Creador y fundador de Telesur. Preside la Fundación para la Integración Latinoamericana (FILA) y dirige el Centro Latinoamericano de Análisis Estratégico (CLAE).

Fuente: https://estrategia.la/2023/06/19/argentina-hambre-desocupacion-y-elecciones-con-los-mismos-de-siempre/

Comparte este contenido:

México: Mujeres, más afectadas por la ansiedad que los hombres: ENCOVID-19

Por: Alaska Juárez

De acuerdo con la más reciente Encuesta de Seguimiento de los Efectos del COVID-19 en el Bienestar de los Hogares Mexicanos (ENCOVID-19), correspondiente a marzo de este año, las mujeres y las personas de bajo nivel socioeconómico fueron las que presentaron síntomas severos de ansiedad.

La Dra. Graciela Teruel, directora del Instituto de Investigaciones para el Desarrollo con Equidad (EQUIDE) de la IBERO, dijo respecto a este tema que, de abril de 2020 a marzo de 2021, el 31% de la población, es decir, 1 de cada 3 mexicanos, presentó este tipo de afectación.

“Cuando vemos la distribución de los padecimientos en niveles socioeconómicos bajo, medio y alto, vemos que para los niveles socioeconómicos bajos esta prevalencia es casi el doble” agregó.

Respecto a los resultados entre hombres y mujeres, los primeros presentaron síntomas severos de ansiedad más bajos que las mujeres. En el caso de ellas, la prevalencia se mantuvo alta, siendo las más afectadas con un 36% sin ningún cambio de diciembre del año pasado a marzo de 2021.

En cuanto a los resultados de acuerdo a la evolución del porcentaje de la población de 18 años o más con síntomas de depresión, el 28% de los encuestados sufre de este tipo de afectaciones.

Sin embargo, “son los de menor nivel socioeconómico los que presentan índices mucho más altos, lo cual se puede deber a que tienen mayores niveles de estrés y mayores dificultades en general para hacerle frente a todas las presiones y necesidades económicas que conlleva esta crisis”, concluyó la Dra. Graciela Teruel.

La ENCOVID-19 parte de una encuesta telefónica que recaba información desde que azotó la pandemia y se relaciona con cuatro indicadores principales: desocupación, ingresos, acceso a la alimentación y salud mental.

En la presentación participaron la Dra. Graciela Márquez, vicepresidenta del INEGI; Dr. Gonzalo Hernández Licona, director de la Red de Pobreza Multidimensional, perteneciente a la Universidad de Oxford; Dr. Roberto Vélez, director del Centro de Estudios Espinosa Yglesias; y Rogelio Gómez Hermosillo, de Acción Ciudadana Frente a la Pobreza.

Fuente de la información e imagen: IBERO

Comparte este contenido:

Los movimientos sociales y un mismo reclamo

América/Argentina/06/05/2020/Autor y fuente: www.anred.org

La situación de los barrios populares frente a la pandemia en las villas de Capital Federal y el Conurbano están en estado de emergencia. No existen protocolos claros para actuar, no hay responsabilidad del Estado para enfrentar el virus donde los más necesitados no sólo sufren el impacto de la crisis económica, sino que sufren la discriminación de no recibir la ayuda estatal que debieran tener contra el Covid-19. Los comedores de las barriadas subieron, en algunos casos, hasta en un 100% en sus demandas. ¿Qué medidas se deben tomar? ¿Cuál es el principal problema que hoy viven las organizaciones populares? Para poder entender esto, ANCAP habló con integrantes del Frente de Organizaciones en Lucha (FOL), Frente Popular Darío Santillán y el Movimiento de Trabajadores Desocupados Aníbal Verón (MTD). Muchos de los medios de comunicación eligen hoy sólo mostrar placas rojas con muertos e infectados, y se olvidan de las historias de quienes más precisan la asistencia del estado y políticas sanitarias urgentes. Por Federico Paterno (ANCAP).


Mónica, es integrante del Frente Popular Darío Santillán Corriente Nacional, y nos contó cómo ve hoy la situación en los barrios dónde vienen trabajando: “El principal problema de los movimientos sociales hoy es que el gobierno no está a la altura de las circunstancias que hoy padece el sector más vulnerable, porque tenemos desocupación, pobreza y ahora aislamiento y hambre. Los comedores, a partir de la pandemia, crecieron un 60% más y en algunos barrios 100%”. El FPDS realiza ollas populares en La Plata, Ezeiza, Cañuelas, Ituzaingó, entre otras localidades dónde vienen trabajando, bajo “lemas” como: Por una cuarentena sin hambre y sin alimentos no hay cuarentena. Juan Pablo integra el MTD Aníbal Verón y en vistas de la emergencia alimentaria aseguró: “El principal problema con los movimientos populares hoy es la comida para los comedores y los merenderos, es lo que venimos reclamando. Desde que comenzó, todo esto se multiplicó. La cantidad de gente que ha empezado a venir a los comedores y merenderos. En algunos casos hasta se triplicó en algunos barrios”.

El costo de la canasta básica que mide el índice de pobreza según el INDEC, marca que el ingreso para una familia de cuatro personas debiera ser de $41.994; las políticas del Gobierno Nacional desde el comienzo de la cuarentena, según explican les integrantes de las organizaciones sociales, no son suficientes. “Está a la vista que los más vulnerados están en las villas y el conurbano. Zonas como La Matanza, por ejemplo, dónde sabemos que por más que digan que hay que lavarse las manos, no hay siquiera jabón, o no hay agua potable. Una medida urgente que también se debe tomar, es en los casos de violencia de género, para frenar los femicidios”, indicó Mónica.

Marianela es una de las referentes del FOL, organización social que trabaja en 14 provincias del país, aclaró que la situación de les militantes padecen una condición de informalidad de empleo, al formar parte del sector más castigado en términos económicos y sociales. “Hay un aumento exponencial de la pobreza, de pérdida de trabajo, y además también por supuesto una caída de los pocos ingresos que tenemos. Esta pandemia ha puesto de relieve las desigualdades existentes que tienen ya mucho tiempo. Tiene que ver con un sistema desigual que privilegia la ganancia empresarial por sobre la vida humana”. En cuanto a lo que se vive en los comedores advirtió: “El problema del aumento del hambre es la cantidad de gente que se ha acercado a los comedores comunitarios, que en el inicio de la pandemia se ha duplicado, y el Estado no está garantizando todos los recursos que necesitan para brindar este servicio a la comunidad”.

Sobre los contagios de Covid-19 en los barrios tanto Mónica como Marianela, coinciden que no alcanza lo que está haciendo el Gobierno Nacional ni el Provincial. Desde el FOL Marianela explicó que “Por supuesto ya tenemos los primeros casos de COVID-19 positivo en varias zonas, y el tratamiento que se tiene que tener sobre estos casos en los barrios populares debe exigir un protocolo distinto, porque la mayoría de la gente nuestra, tiene agravantes previos como la tuberculosis, como la baja defensa por la mala alimentación,  muchísimos focos de bronquiolitis en los niños nuestros, un montón de problemas que en estas condiciones sociales agravan más el cuadro”. Mónica desde el FPDS Corriente Nacional subrayó “El sistema de salud pública nunca fue prioridad para los gobiernos. El aislamiento está bien, pero es fundamental que la gente tenga para comer lo indispensable, y así poder hacer la cuarentena”.

En la Villa 31 ubicada en Retiro, los infectados por Coronavirus pasaron de dos casos a trece en 24 hs. La 1-11-14 también se encuentra con casos positivos del virus. Desde la organización villera La Poderosa, ya vienen advirtiendo y denunciando la falta de políticas y protocolos para el aislamiento de los casos que aparezcan de infectados. El hacinamiento en las barriadas es algo que está vigente, a esto se suma la pandemia, y la indefinición para resolver la urgencia.

Esteban es militante del Frente Popular Darío Santillán y en diálogo con ANCAP explicó “La situación de la cuarentena ya no está siendo tan relevante en relación a que ya se presentaron los primeros casos en los barrios, por ejemplo, en zona Norte, en Vicente López, pero también en el Sur, en Lanús y Almirante Brown. Es vital para no multiplicar el contagio, pero ya el trabajo viene siendo a partir de detectar el virus adentro de los barrios. Venimos haciendo un trabajo, en algunos casos coordinados con los Municipios, que es la identificación de casos”.

Ser la primera línea contra el hambre es la tarea en la que abordó Juan Pablo desde el MTD, considerándola una forma de estar en la batalla diaria contra el hambre. Hace 20 años esta organización trabaja en Florencio Varela, Quilmes, Berazategui, la zona de Almirante Brown y José C Paz. La cuestión de cómo abordar los casos de contagiados en los barrios, asegura que no es tarea simple. “No hay un protocolo, no existe eso, cada cual toma el protocolo del Ministerio de Salud de la Nación como quiere, es muy desastroso y si esto llega a explotar se va todo a la mierda, así de simple. Por todo lo que fue la experiencia, tuvimos que sacar a compañeros y compañeras infectados y llevarlos a los centros de aislamiento, y trasladarlos en sus propios coches y en camiones. Los han tenido que sacar ellos porque el Gobierno quería mandar la ambulancia con los médicos, esos todos equipados tipo astronautas, y una de las cuestiones que hay y que no queremos que se genere, es la estigmatización de los infectados en los barrios, porque ya ha habido casos que les quisieron prender fuego las casas”. Sobre la situación preventiva que debería accionarse en los barrios aseguró la militante del FOL “Acá también la discusión más profunda son los fondos, porque si uno fuera hijo de Paolo Rocca seguramente te hacen el test de inmediato, pero como nosotros somos hijo de Pérez y Gómez, queda claro que lo pobres también tienen que pelear por ese derecho”.

Las reuniones entre intendentes provinciales y las organizaciones quedan vacías de respuestas. El MTD Aníbal Verón se reunió con  Andrés Watson (Frente de Todos) intendente de Florencio Varela y sobre éste encuentro el integrante del MTD relató “Lo único que querían eran los datos de los comedores nuestros, saber a cuanta gente les dábamos de comer, a cuantos les dábamos bolsones de mercadería, para ellos después ir a buscar los que no estaban recibiendo nada; sin siquiera contarnos a nosotros como parte del territorio, tenemos trabajo social histórico, tenemos un conocimiento del barrio tremendo y nada, sólo quieren información y les dijimos, ‘¿bueno querés información?, pero nosotros nos estamos quedando sin comida’, para poner lo fresco en la olla le tenemos que pedir a los propios compañeros y la guita se acaba”.

La situación que viven los vecinos y vecinas de los barrios populares precisa una respuesta urgente del Estado para que puedan enfrentar ésta pandemia con los recursos sanitarios básicos y, por sobre todas las cosas, sin hambre.

Fuente e imagen: https://www.anred.org/2020/04/30/los-movimientos-sociales-y-un-mismo-reclamo/

Comparte este contenido: