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República Dominicana: Profesores sugieren fin de las clases el 30 de junio

América Central/República Dominicana/11-06-2021/Autor(a) y Fuente: acento.com.do

Continuar con la docencia sería «imprudente e inhumano», según el Comité Ejecutivo Nacional de la Asociación Dominicana de Profesores (ADP) .

SANTO DOMINGO, República Dominicana.- El Comité Ejecutivo Nacional de la Asociación Dominicana de Profesores (ADP) planteó este lunes al Gobierno la suspensión de la docencia en todo el sistema educativo nacional a causa de los altos índices de la covid-19 que se registran desde hace semanas en el país.

«Proponemos al ministro de Educación (Roberto Fulcar) finalizar el año escolar el día 30 de junio y dedicarse de inmediato a garantizar las condiciones indispensables para el próximo curso», dijo en rueda de prensa el expresidente del colectivo Eduardo Hidalgo, acompañado por varios miembros de las seccionales del Gran Santo Domingo.

Según denunció, «se obliga a los maestros a asistir a los centros educativos aún con la grave situación sanitaria que atraviesa el país» donde ya se detectaron «cuatro nuevas cepas del covid-19».

A su entender, el gremio ha sido coherente al hacer un llamado al Consejo Nacional de Educación y al ministro de Educación, Roberto Fulcar, para pedir el cese de las clases, ya que continuar con la docencia sería «imprudente e inhumano».

Actualmente, la ocupación de camas para pacientes covid-19 es del 51 %, las unidades de cuidados intensivos (UCI) están al 77 % de su capacidad, con 462 camas ocupadas, mientras que los ventiladores en uso ascienden a 321, para un 66 % de la disponibilidad.

El Ministerio de Salud Pública notificó este lunes 906 nuevos contagios de covid-19 y un deceso a causa de la enfermedad, elevando a 301,984 el total de casos de coronavirus en el país y a 3,655 los fallecimientos.

Ante el aumento de casos, el Gobierno dispuso una jornada especial de inmunización contra la covid entre el jueves y el domingo, la cual permitió vacunar a 571,877 personas, de acuerdo con datos proporcionados por el presidente Luis Abinader en Twitter.EFE

Fuente e Imagen: https://acento.com.do/actualidad/profesores-sugieren-fin-de-las-clases-el-30-de-junio-8952250.html

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Desneoliberalizar la educación: hacia un modelo estatal-comunitario, democrático e integral

Por: Leonora Reyes y Miguel Caro

Un modelo estatal-comunitario es el marco que proporcionará las condiciones institucionales básicas para el sostenimiento de procesos que promuevan una educación no sexista, que replanteen la relación con la naturaleza desde una perspectiva de sustentabilidad, que amplíen la noción de conocimiento desde la experiencia social, considerando los saberes ancestrales, así como el uso crítico y contextual del conocimiento académico.

La inminencia de la puesta en marcha de la Convención Constitucional como un momento estratégico para la redefinición del derecho a la educación para varias décadas más, nos plantea el desafío de establecer la centralidad que debe ocupar la educación pública en la desneoliberalización de la sociedad chilena. Pero no será posible llegar a establecer un marco normativo para cumplir esta expectativa sino aseguramos un proceso deliberativo de discusión desde los actores de la educación, sobre la educación que queremos. Más concreto aún, no lograremos establecer las bases jurídicas del derecho a la educación sin un proceso que tenga por objetivo la redefinición y actualización del proyecto de educación pública que necesitamos para el siglo XXI.

De hecho, un proceso de debate y de desarrollo de experiencias colaborativas se vienen dando desde hace décadas. En la post dictadura, por ejemplo, desde fines de la década de 1990, lo hicieron colectivos de reflexión crítica de estudiantes y docentes, el Colegio de Profesores y también diversas organizaciones de trabajadores de la educación y de apoderadas/os. Por otro lado, se generaron experiencias educativas desde establecimientos cuyos equipos directivos, junto con sus docentes, impulsaron transformaciones desde las comunidades educativas, orientadas a la democratización de la gestión administrativa, curricular y pedagógica. Por último, se impulsaron iniciativas de grupos de académicos y espacios de articulación entre diversos actores sociales y colectivos docentes.

En estas décadas se ha ido acumulando un aprendizaje y una perspectiva de reconstrucción global del sistema educativo. Se ha transitado paulatinamente desde la demanda exclusivamente gremial hacia una crítica estructural y hacia una reelaboración del proyecto educativo que requiere un nuevo modelo. Allí subyace “lo público” asociado a las reglas de un nuevo sistema y la discusión sobre “la educación que queremos” a partir de “lo común”, como el lugar “donde nos encontramos en tanto que ciudadanos/as iguales” en derechos; resignificando y reemplazando, por tanto el concepto de “calidad educativa”.

De esas elaboraciones se puede inferir que, si lo que se requiere es llegar a cambiar los principios constitucionales en orden a garantizar el derecho a la educación, es preciso hacerlo desde un lugar: la definición conjunta de un concepto de educación que desmonte el esquema de mercado y que sostenga las bases para el desarrollo de un nuevo sistema público, articulado, mayoritario y preferente. Entendemos esto no sólo como un reordenamiento del régimen de propiedad en favor de la recuperación del rol garante del Estado, sino además como la necesidad de conectar estratégicamente la función educativa con los desafíos de un proyecto país, que ponga al centro la dignidad de la vida y la plena participación de sus comunidades.

Desmontar la concepción de mercado implica, por tanto, el doble ejercicio de subordinar la libertad de enseñanza al derecho a la educación y, a la vez, dotar al sistema educativo de un conjunto de principios que promuevan un proyecto que recoja las actuales necesidades de desarrollo del país. Por otro lado, obliga a sacar la educación de su pretensión de neutralidad, de la mera transmisión de una cultura académica y la instrucción funcional, para alinearla con los requerimientos de la vida en sociedad desde una perspectiva compleja en clave post neoliberal. El requisito indispensable de este cambio es la superación de la perspectiva estandarizadora, individualista y competitiva que hoy caracteriza al sistema educativo, en cuanto dichos rasgos operan como negación de la constitución de sujetos historizadas/os, lo que requiere una necesaria deliberación comunitaria sobre el contenido educativo.

Para todo esto, hay condiciones esenciales que también debieran quedar plasmadas a nivel de principios constitucionales, partiendo por el tránsito hacia una educación como derecho social universal efectivo y la definición de la educación como bien público; esto es, como una actividad que produce bienes culturales esenciales para el interés general y el desarrollo de la sociedad, más allá de sus eventuales beneficios individuales. Sobre dicha base, resulta completamente indispensable el rol garante del Estado, así como la provisión estatal mayoritaria y preferente del derecho a la educación. Tal garantía implica, por cierto, superar el financiamiento focalizado y competitivo del sistema, por uno de tipo basal y orientado a sustentar a plenitud las necesidades de los proyectos educativos.

No obstante, nada de esto resolverá adecuadamente los problemas estructurales de una educación de mercado si no se garantiza la participación deliberativa y vinculante de las comunidades, tanto en la gestación como en la implementación y desarrollo del proyecto educativo, el currículum, los procesos de enseñanza-aprendizaje y evaluación.

En síntesis, el nuevo modelo, junto con sacar al mercado de la educación, debe producir una relación articuladora entre Estado y comunidad, para otorgar la garantía del derecho a la educación, la conexión con el interés general del país y la deliberación desde la base social articulada, respecto de la gobernanza de las instituciones escolares y del sentido del proceso educativo (en todos sus ámbitos). De este modo, el urgente reemplazo de la preeminencia que tiene la libertad de enseñanza y el mercado por sobre el derecho a la educación, no puede ser entendida sólo como la garantía universal de acceso. Debe entenderse también como el aseguramiento de un tipo de educación que habilite a las personas para vivir en la sociedad de manera plena y digna, lo cual supone que dicho acceso, además de darse en condiciones de igualdad, tienen que ser capaz de proveer de un proyecto educativo democrático-participativo, integral e inclusivo.

Un modelo estatal-comunitario es el marco que proporcionará las condiciones institucionales básicas para el sostenimiento de procesos que promuevan una educación no sexista, que replanteen la relación con la naturaleza desde una perspectiva de sustentabilidad, que amplíen la noción de conocimiento desde la experiencia social, considerando los saberes ancestrales, así como el uso crítico y contextual del conocimiento académico. Un proceso que eduque desde la experiencia de formas activas, directas y comunitarias de participación ciudadana y que se reconozca en nuestra condición de plurinacionalidad e interculturalidad.

Educar para la vida digna, en un marco de comprensión post neoliberal implica transitar desde políticas que efectivamente materialicen los principios generales y que no se limiten simplemente a situarse en un nivel declarativo. Por dicha razón es exigible que la nueva Constitución tenga un alto nivel de precisión en estos temas y que, luego, se exprese en la elaboración de una nueva ley general de educación, así como en una amplia normativa que la concrete. Implica, por cierto, una nueva generación de políticas curriculares, evaluativas y de desarrollo profesional docente, orientadas por el nuevo enfoque de principios.

Para desneoliberalizar la educación no basta con ampliar la definición de derecho a la educación en la nueva Constitución. Si bien se requiere asegurar un marco jurídico y normativo amplio, es necesario contar con la agencia de sujetos, actores y movimientos para el desarrollo de una educación democrática, diversa y con justicia social. Desneoliberalizar la sociedad chilena tiene, como una de sus condiciones indispensables, avanzar de manera urgente hacia una educación unificada desde lo público, en el contexto de un modelo que vincule al Estado con la comunidad, en la tarea de conectar al sistema educativo con un proyecto de desarrollo que supere el actual modelo neoliberal.

Leonora Reyes y Miguel Caro
Leonora Reyes es doctora en Historia, académica del Departamento de Estudios Pedagógicos de la Universidad de Chile. Miguel Caro es profesor de Historia y Geografía, académico de la Universidad Metropolitana de Ciencias de la Educación (UMCE).

Fuente e Imagen: https://www.eldesconcierto.cl/opinion/2021/05/29/desneoliberalizar-la-educacion-hacia-un-modelo-estatal-comunitario-democratico-e-integral.html

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¿Por qué no abrimos las escuelas?

Por: Rafael de Hoyos

Los niños latinoamericanos son los que más días de clases presenciales han perdido desde que comenzó la pandemia. Con datos de la Unesco hasta el 30 de abril de 2021, los estudiantes en América Latina (AL) han perdido 217 días de clases presenciales, más de un ciclo escolar completo y 92 días más de lo que perdió el estudiante promedio en otras regiones del mundo. Como punto de comparación, en el Medio Oriente y África del Norte se han perdido 167 días; en África subsahariana, 116; en Asia, 107; en Europa, 93; y en Estados Unidos y Canadá, 46. En este ensayo trato de explicar, hasta donde me lo permiten los datos, lo que está detrás del largo cierre de escuelas en la región. Aunque hay algunos factores que nos ayudan a entenderlo, éstos no son suficientes para dar cuenta de la falta de prioridad que se les ha dado a las escuelas en el proceso de reapertura. Podría haber elementos subyacentes, difíciles de medir, como la falta de convicción de que la educación es un mecanismo de movilidad social, que pudieran explicar el injustificado cierre de escuelas durante tanto tiempo en AL.

A más de un año del comienzo de la pandemia, tenemos suficiente información para afirmar que, si se siguen protocolos sencillos, los riesgos sanitarios asociados a la reapertura de escuelas son relativamente bajos. Hoy también tenemos evidencia que comprueba lo que era obvio desde el comienzo de la pandemia: cerrar las escuelas disminuye los aprendizajes de los estudiantes. Al no tener un dispositivo con acceso a internet y padres con escolaridad suficiente, la pérdida de aprendizajes —con respecto al escenario en donde las escuelas permanecen abiertas— es mucho mayor entre los estudiantes en situación de pobreza. Las niñas y los niños en condición de pobreza no sólo han pasado más de un año sin adquirir aprendizajes curriculares, sin escuelas, muchos perdieron la ingesta calórica más importante del día a través de la comida escolar y para algunas y algunos el cierre de escuelas significó la falta de un espacio seguro, libre de la violencia, la negligencia y el maltrato que viven en su hogar.1 Esta información debería ser suficiente para que la autoridad educativa y la sociedad en su conjunto hicieran todo lo que estuviera a su alcance para reabrir las escuelas y, de no haber condiciones para hacerlo, se aseguraran de que las escuelas fueran las primeras en reabrir cuando el contexto lo permitiera.

A pesar de los altísimos costos económicos y sociales, de lo injusto que es empeñar el futuro de los niños más pobres al excluirlos del aprendizaje, las escuelas siguen cerradas en muchos países de AL. Todavía más difícil de entender es que, como sucede en México, otros sectores de mucho menor importancia para el bienestar futuro como restaurantes, bares, gimnasios y hasta estadios de futbol hayan abierto antes que los sistemas educativos. Estos sectores abrieron sin necesidad de demostrar que los riesgos sanitarios de su reapertura eran menores a los beneficios sociales, algo que sí es demostrable en el caso de las escuelas. Si debemos abrir o no las escuelas dejó de ser relevante, la verdadera interrogante es: ¿por qué no hemos abierto? ¿Qué características o condiciones nos ayudan a entender la decisión de mantener cerradas las escuelas en AL por un periodo mucho mayor al del resto del mundo?

El cierre de escuelas más prolongado en AL pudiera explicarse por un mayor impacto de la pandemia en la región, o bien porque los sistemas de salud tenían condiciones precarias para enfrentar el virus. Si éste fuera el caso, la intensidad de la pandemia —medida por el número de muertos por covid-19 por cada 100 000 habitantes— y el nivel de ingreso per cápita —el cual está altamente asociado a la capacidad de los sistemas de salud— deberían estar correlacionados con el número de días que las escuelas han permanecido cerradas. Utilizando información a nivel internacional, incluyendo casi todos los países del mundo, la figura 1 muestra que la pérdida de días de clases en cada país está correlacionada de manera positiva con la intensidad de la pandemia (medida por el desafortunado número de muertes por covid-19) y de forma negativa con los recursos para hacerle frente —medidos por el producto interno bruto (PIB) per cápita—. Quizá lo más relevante es que, con excepción de Chile, Perú y Uruguay, el número de días con escuelas cerradas en AL es mayor a lo que esperaríamos dado el número de muertes por covid-19 y el nivel de PIB per cápita y en la región.2

Cierre de escuelas, muertes por covid-19 y PIB per cápita

Otras dos variables pudieran ayudarnos a explicar el cierre de escuelas en AL. Si los sistemas educativos en la región no garantizan aprendizajes básicos a un porcentaje significativo de la población estudiantil, el cierre de escuelas podría ser visto como un costo menor para tratar de mitigar la propagación del virus. Por otro lado, la participación laboral de la mujer debería jugar un papel importante en el cierre o reapertura de las escuelas. En AL, el cuidado de los hijos mientras las escuelas han estado cerradas ha sido injustamente mayor para las madres trabajadoras, quienes han reducido su participación laboral.3 Por esta razón, en países con más participación laboral de la mujer se esperaría una mayor presión social por reabrir las escuelas.

¿Se pueden explicar los 92 días adicionales que han permanecido cerradas las escuelas en AL por diferencias, entre nuestra región y el resto del mundo, en muertes por covid-19 (por cada 100 000 habitantes), PIB per cápita, aprendizajes medidos por pruebas estandarizadas internacionales como PISA y participación laboral de la mujer? Para responder a esta pregunta, incluimos estas cuatro variables en un solo modelo estadístico en donde la variable a explicar son días con escuelas cerradas.4 Los resultados muestran que los cuatro factores (aprendizajes, muertes por covid-19, participación de la mujer y PIB per cápita) explican 15 de los 92 días adicionales que las escuelas han permanecido cerradas en AL. Otra forma de interpretar estos resultados es que las escuelas han permanecido cerradas 77 días en exceso o por encima de lo que se esperaría considerando los factores ya mencionados. Claramente que estos resultados son sólo asociaciones que no implican una relación causal y podría haber otras variables relevantes que no estoy tomando en cuenta, pero lo que muestran los datos es que los días de clases presenciales que se han perdido en México y el resto de AL están muy por encima de lo que ha sucedido en otras regiones del mundo, aun tomando en cuenta diferencias en factores relevantes en la decisión de abrir o mantener las escuelas cerradas.

El cierre de escuelas en exceso en AL tiene implicaciones que podrían ir más allá de sus terribles impactos económicos y sociales, pudiera ser una manifestación de un problema estructural que no se irá con la pandemia. Si entre las familias en AL la educación no se percibe como la vía para alcanzar un mayor bienestar futuro, poco harán para exigir rendición de cuentas a la autoridad educativa y demandar los cambios necesarios para garantizar aprendizajes para todos.

Una baja valoración de la educación entre las familias en AL, sobre todo aquéllas en pobreza, no es del todo sorprendente cuando la mayoría de ellas recibe una educación de baja calidad que no garantiza aprendizajes y, por lo tanto, no produce movilidad social. La falta de movilidad social puede hacer que la percepción del costo de mantener las escuelas cerradas y la pérdida de aprendizajes asociada a ésta sea menor que los riesgos sanitarios. Sin un sistema educativo que promueva la movilidad social no hay exigencia ciudadana para priorizar a las escuelas en el proceso de reapertura, no hay una demanda por llevar a cabo un plan de recuperación de los aprendizajes. Pero tampoco hay el apoyo social necesario para emprender reformas educativas complejas que atenten contra intereses de grupos de poder. Visto desde esta perspectiva, no resulta sorprendente que el cierre de escuelas más prolongado se haya dado en la región más desigual del mundo.

El proceso de reapertura durante la pandemia ha revelado nuestras verdaderas preferencias y la educación parece no ocupar los primeros lugares.5 Cambiar nuestras prioridades no será sencillo porque están insertas en un juego perverso de endogeneidad: para hacer de la educación una verdadera prioridad ésta debe mejorar su calidad; pero para mejorar su calidad, la educación tiene que ser una prioridad para la sociedad. Este ciclo se rompe con una autoridad educativa comprometida con los aprendizajes, priorizando a los más pobres. En México está claro que la construcción de un sistema educativo que genere aprendizajes no está dentro de las prioridades del gobierno federal, pero hay otras 32 oportunidades para que la autoridad educativa actúe con responsabilidad y haga del sistema educativo un motor de la movilidad social.

Rafael de Hoyos
Profesor de Economía de la Educación en el ITAM y socio fundador de Xaber


1 Para un resumen de la evidencia internacional sobre los riesgos sanitarios asociados al regreso a clases y los costos de mantener las escuelas cerradas ver: De Hoyos, R., y Saavedra, J. “Es hora de volver a aprender”, Banco Mundial, 24 de marzo de 2021.

2 Excluimos a Nicaragua del análisis por tratarse de un caso atípico en donde el gobierno nacional tomó la decisión de no cerrar escuelas.

3 Bergallo, P.; Mangini, M.; Magnelli, M., y Bercovich, S. “The impacts of COVID-19 on women’s economic autonomy in Latin America and the Caribbean”, UNDP LAC C19 PDS, núm. 25, 2021.

4 Se estimó una regresión lineal en donde la variable dependiente es el número de días con escuelas cerradas y las variables independientes incluyen cuatro factores (participación laboral de la mujer, aprendizajes, muertes por covid-19 y PIB per cápita) más una variable-indicador (dummy) para los países de AL, la cual captura el cierre de escuelas en exceso.

5 Con el movimiento Padres Organizados, la ciudad de Buenos Aires es una excepción en la región.

Fuente e Imagen: https://www.nexos.com.mx/?p=56391

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Universidades presenta la nueva Ley de Convivencia Universitaria que sustituirá al reglamento franquista de 1954

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Argentina: El 85% de las instituciones educativas de la provincia usa la nueva plataforma online

América del Sur/Argentina/11-06-2021/Autora: Fabiana Juarez/Fuente: www.diariodecuyo.com.ar

Innovatec se puso en marcha por la suspensión de clases presenciales.

Hace unas semanas la pusieron en marcha y su aceptación fue todo un éxito, según la opinión oficial. Se trata de Innovatec, la nueva plataforma que lanzó el Ministerio de Educación para hacer frente al confinamiento y a la suspensión parcial de las clases presenciales tras la segunda ola de la pandemia. Felipe de los Ríos, al frente de esta cartera, dijo que en la provincia el 85% de las instituciones educativas ya usa este medio para llevar adelante un proceso de aprendizaje que apunta a que los alumnos puedan desarrollar más aptitudes y capacidades. También adelantó que Innovatec seguirá vigente hasta el próximo receso invernal por lo menos. Cabe recordar que mañana se pone en marcha el sistema de presencialidad cuidada voluntaria, por el que los padres deciden si sus hijos van o no a la aulas.

El 22 de mayo lanzaron Innovatec como una opción para el dictado de clases virtuales para todas las instituciones educativas de gestión estatal y privada, y para Nivel Inicial, Primario, Secundario (orientado y técnico) y Superior, y también para Educación Especial. En total son 1.100 las instituciones que hay en la provincia y de ese total, un 85,4% ya usa la nueva aplicación. «Estamos muy conformes y contentos con el nivel de adhesión que hubo a esta nueva herramienta de aprendizaje por parte de la comunidad educativa en general. De las 1.100 instituciones educativas que funcionan en San Juan unas 940 ya están usando esta plataforma tras poner en marcha su propia página oficial homologada por el Ministerio de Educación. Esto demuestra que en la tierra de Sarmiento no bajamos los brazos en materia educativa y pese a las dificultades, y también que los padres pusieron en valor la educación de sus hijos», sostuvo el ministro.

El funcionario también agregó que en la provincia, y según los datos oficiales actualizados, hay 190.000 usuarios de Innovatec, entre alumnos, docentes y directivos. Además, aclaró que la utilización de este método no es obligatoria y que por eso destaca el nivel de adhesión.

«No se puede obligar con una norma a que las escuelas usen esta plataforma porque hay que darles tiempo para las capacitaciones y para asumir los cambios, mientras que otras no tienen los recursos para contar con la conectividad necesaria. Las primeras podrán seguir trabajando con el Aula en Línea, la otra aplicación, y las segundas seguirán recibiendo las guías impresas para distribuirles a los alumnos. Pero estamos seguros que, a medida que puedan, se irán incorporando a Innovatec», sostuvo.

El ministro agregó que el «éxito» de esta plataforma se debe a que intenta reemplazar el aula física y el Aula en Línea para brindarles a los estudiantes un espacio virtual que los haga sentir como en el contexto de escuela. Es por eso que fue diseñada meticulosamente para cumplir con este objetivo, dedicando un espacio para cada miembro de la comunidad educativa.

«Innovatec es una innovación de tecnología educativa que plantea un modelo diferente de aprender donde los chicos van adquiriendo otras habilidades en el ámbito de la tecnología y la comunicación. En síntesis, aprenden a aprender. Es por eso que Innovatec llegó para quedarse», sostuvo.

En este contexto, De los Ríos aseguró que esta plataforma seguirá vigente aún cuando vuelvan las clases presenciales con asistencia voluntaria mañana.

Cómo funciona este espacio virtual

Para acceder a Innovatec se debe ingresar al sitio www.sanjuan.magnaplus.org, utilizando como usuario tan sólo el DNI, e incorporando la contraseña genérica proporcionada por la institución educativa. Allí se encontrará tutoriales didácticos que orientan para acceder a gran cantidad de información y contenidos, y se podrá consultar la biblioteca online organizada por niveles.

Los docentes pueden subir las guías escolares con diferentes contenidos y realizar ejercicios prácticos dentro del espacio de clases. La plataforma ofrece también un tablero con una interfaz que puede ser enriquecido con trabajos y proyectos, proponiendo un rol activo entre profesor y alumno o entre diferentes grupos de estudiantes fomentando el aprendizaje colaborativo entre pares.

A través de esta plataforma los docentes también pueden participar de foros y los padres realizar trámites, reclamos y sugerencias.

Fuente e Imagen: https://www.diariodecuyo.com.ar/sanjuan/El-85-de-las-instituciones-educativas-de-la-provincia-usa-la-nueva-plataforma-online–20210605-0111.html

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Maestros rurales en riesgo

Por: Gloria Muñoz Ramírez

Los 17 normalistas de Mactumactzá, Chiapas, fueron excarcelados, pero no liberados, al igual que sus 74 compañeras quienes, además, fueron abusadas sexualmente sin que hasta el momento haya ningún responsable tras las rejas por esas agresiones. Fue la presión ejercida por sus compañeros, familiares y colectivos de profesores en diferentes estados lo que los y las puso en las calles, pero tendrán que continuar su proceso jurídico, no podrán participar en actividades políticas y tendrán que acudir a firmar periódicamente, con el riesgo latente de ser reingresados al penal de El Amate, como amenazó la Fiscalía de Chiapas.

Los y las futuras maestras rurales no están en libertad. Lo estarán no sólo cuando los absuelvan de todos los cargos, sino cuando, por fin, logren que el Estado deje de atacarlos y renuncie a tratarlos como delincuentes. Las jornadas de protesta que se iniciaron el 18 de mayo pasado para exigir exámenes presenciales para el alumnado mayoritariamente indígena y rural, no han terminado. No los conoce quien piense que con la represión va a callarlos. Tampoco quien imagine que se van a quedar solos, pues aunque grandes sectores de la sociedad los ignore, se tienen a ellos mismos y, por principios fundamentales, no se abandonan.

Así sucedió en la Normal Rural Carmen Serdán, en Teteles, Puebla, donde el fatídico 43 volvió a imponerse. Fueron 43 estudiantes detenidas en una movilización en la que exigían el esclarecimiento de la muerte de dos compañeras. Fueron liberadas, pero sus familiares desconocen los términos y condiciones de su excarcelamiento.

Las estudiantes de Teteles desmintieron al gobernador de Puebla, Luis Miguel Gerónimo Barbosa Huerta, quien las acusó de iniciar las agresiones contra los policías, cuando en realidad hubo excesiva fuerza pública y violentaron sus derechos.

Las normales atacadas insisten en mesas de diálogo. No viene de ellas la violencia, aunque sí la protesta y la exigencia de que se resuelvan sus demandas educativas, tales como que no se reduzca la matrícula de ingreso, porciones alimentarias justas y arreglos a la infraestructura escolar.

Resisten 17 escuelas normales rurales en el país y en todas se siembra el pensamiento crítico, por eso las quieren desaparecer los gobiernos en turno.

desinformémonos.org

Fuente: https://www.jornada.com.mx/2021/06/05/opinion/010o1pol
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Releer el informe del Banco Mundial 2020

Los países enfrentan en la actualidad desafíos sin precedentes en sus esfuerzos por lograr el desarrollo sostenible. La pandemia de COVID‐19 pone en peligro vidas, medios de subsistencia y economías enteras, borrando a su paso décadas de progreso económico, reducción de la pobreza y avances en el desarrollo humano. Durante las últimas décadas, el mundo ha dado grandes pasos en la reducción de la pobreza extrema; sin embargo, aun antes de sufrir el embate del coronavirus, no estaba en condiciones de alcanzar

la meta de ponerle fin para 2030. Ahora la pandemia podría empujar a unos 100 millones de personas más a la pobreza extrema en 2020. Y para 2030, es posible que hasta dos tercios de quienes viven en situación de pobreza extrema habiten en entornos afectados por fragilidad, conflicto y violencia (FCV).

El Banco Mundial trabaja en estrecha colaboración con los países para brindar asistencia donde más se necesita. Además de financiamiento, utiliza su experiencia y sus conocimientos sobre las diversas regiones y sectores para ofrecer observaciones basadas en evidencias y apoyo para la implementación
de políticas, ayudando a los países a abordar sus prioridades de desarrollo y facilitando el intercambio de ideas y de mejores prácticas. Estamos incrementando nuestro apoyo a los países más pobres a través de la Asociación Internacional de Fomento (AIF), que recibió un fuerte voto de confianza y un financiamiento de USD 82 000 millones en diciembre de 2019, en las reuniones relativas al ciclo de reposición más reciente, de tres años de duración. Seguimos ampliando nuestra labor en los países clientes de la AIF (así como en los afectados por FCV), aun cuando el distanciamiento físico genera desafíos desconocidos en el trabajo con

los clientes y las personas a las que prestamos servicios.

En estos tiempos sin precedentes, mantenemos nuestro compromiso de brindar soluciones flexibles, innovadoras y rápidas. El Grupo Banco Mundial (GBM) espera proporcionar hasta USD 160 000 millones en un período de 15 meses, hasta junio de 2021, para hacer frente a la crisis sanitaria, económica y social que atraviesan los países como consecuencia de la pandemia de COVID‐19. La combinación de financiamiento, conocimientos, experiencia y asociaciones internacionales que ofrece el Banco Mundial lo ubica en una posición única para ayudar a los países a responder a la crisis, proteger los avances en el desarrollo tan arduamente conseguidos y planificar la recuperación.

informe del banco mundial 2020

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