Pensamiento visual: pedagogías emergentes para tiempos de confinamiento (IX)

Por: Educación 3.0

El visual thinking se basa en la utilización de recursos gráficos para la expresión de conceptos e ideas, lo que facilita su comprensión. Luis Ángel Gómez Galdeano, profesor colaborador de la ONG Escuela de Paz, analiza su aplicación en las aulas de todos los niveles.

El auge de plataformas para compartir imágenes como Instagram responde a un importante cambio cultural: el paso del texto escrito como eje de nuestra comunicación hacia lo visual y lo audiovisual como medio principal de transmisión de la información.

En este sentido, es precisamente de la capacidad de interpelación de las imágenes de lo que se vale el pensamiento visual para producir aprendizajes significativos.

Durante un tiempo, no sabemos cuánto, no vamos a poder compartir el espacio físico con nuestros alumnos. Por ello, seguir dotando a nuestras clases a distancia de componentes creativos, cargados de emotividad y con una gran carga motivadora cobra mayor importancia que nunca. El pensamiento visual puede ayudarnos en esta tarea.

¿Qué es el pensamiento visual?

El pensamiento visual o visual thinking se basa en la utilización de recursos gráficos para la expresión de conceptos e ideas. Pretende transformar un contenido textual o audiovisual en representaciones gráficas para que la mente pueda comprenderlas de una forma más eficiente.

El pensamiento visual como pedagogía comienza con Rudolph Arneheim y su libro “Visual thinking”(1969). En él explica que mediante la vista, el individuo aprende de un modo más rico, tanto en sensaciones como en matices que si sólo lo hace mediante el lenguaje verbal. Según él, aprender sólo del modo “convencional” limita la capacidad creativa.

Más recientemente, autores como Dan Roam en ‘Tu mundo en una servilleta’ (2010) y Toni Buzan en ‘El libro de los mapas mentales’ (2013) redescubren el pensamiento visual no tanto para ‘comunicar mejor’, sino para ‘pensar mejor’.

Beneficios para los alumnos

El pensamiento visual puede ser un poderoso aliado de la docencia y el aprendizaje:

  • Ayuda a la comprensión de conceptos pues para dibujar una idea el alumno ha de pensarla, sintetizarla y finalmente representarla de manera original.
  • Fomenta la escucha activa y conecta significante y significado, desarrollando en el alumno capacidades de metacognición y retención.
  • Promueve la personalización y la libertad de pensamiento en su realización, lo cual hace que sea un proceso creativo, no sujeto a las limitaciones del lenguaje verbal.
  • Al tener el dibujo un fuerte poder metafórico y evocador, esta metodología puede ayudar al alumno a transmitir deseos y emociones provocadas por la falta de comunicación con el mundo físico.
  • El proceso de creación de imágenes representativas, más reposado que la toma de apuntes, lleva al alumno a detenerse, a observar y comprender lo que está haciendo, desarrollando el pensamiento crítico
Pensamiento visual pedagogías

¿Cómo preparar dinámicas mediante el pensamiento visual?

Algunas de las técnicas para la representación visual de contenido como los mapas mentales, el storytelling o el sketchnoting son utilizadas por los docentes para apoyar procesos de enseñanza-aprendizaje. Todas ellas cuentan con aplicaciones digitales, como comentaremos a continuación.

En primer lugar, es importante recordar a nuestros alumnos que el dibujo es una cualidad innata y que todos sabemos hacer flechas, letras dobles y garabatos.

También debemos enfatizar que no existe una sola manera de expresar ideas, acontecimientos o reflexiones y que el pensamiento visual es precisamente la puerta hacia la personalización de las mismas, animándoles a ser espontáneos y creativos.

Seguidamente podemos aplicar algunas de las rutinas que proponen Ritchhart, Church y Morrison (2014) para iniciarse con el visual thinking en el aula:

  • Rutina 1: Ve-Piensa-Pregúntate, que consiste en elegir una imagen o un tema y hacer tres preguntas: ¿Qué ves? ¿Qué piensas sobre eso? ¿Qué te hace esto preguntarte? Esta actividad ayuda a estimular la curiosidad y colabora a que los estudiantes sean cautelosos, observadores y a formular interpretaciones a partir de un pensamiento propio.
  • Rutina 2: Color-Símbolo-Imagen, que consiste en proponer a los estudiantes una imagen, lectura o audio para que capten su esencia y la plasmen en papel de manera no verbal colaborando con la comprensión y discusión entre pares. Lo que se hace es solicitar que, una vez concluida la lectura, audio o análisis de la imagen, dibujen 3 cosas: un color con el que identifican el tema, un símbolo que represente la idea, y una imagen que capte la esencia.

Siguiendo una progresión de dificultad creciente se puede introducir a los alumnos en el desarrollo cooperativo de un diccionario visual de imágenes o de un sencillo trabajo individual de sketchnoting.

A partir de aquí, podríamos pensar en llevar a cabo un proyecto como #Venta Pintorrea (Pintorrea las ventanas). En él, alumnos y alumnas  de 4º de la E.S.O utilizan el pensamiento visual para desarrollar la Historia de España del siglo XIX.

Tenemos un amplio abanico de recursos digitales, si preferimos “no mancharnos las manos”:

  • Spicynodes: desarrollo de mapas mentales (www.spicynodes.org)
  • Genially: infografías, mapas, apuntes o presentaciones interactivas (app.genial.ly)
  • Tawe: permite realizar videos animados a partir de nuestras notas y dibujos (tawe.co)
  • Storybird: permite crear cuentos utilizando su vasto universo de imágenes (storybird.com)

Estas cuatro aplicaciones comparten características que las hacen apropiadas para su uso cuando no existe la posibilidad de estar en clase con los alumnos: son sencillas de manejar, tienen tutoriales en castellano y se pueden compartir y evaluar en red. Igualmente, contienen herramientas que facilitan la cooperación en la creación de contenido, así como la evaluación entre iguales. Todo esto las convierte en magníficas propuestas para enriquecer la comunicación en tiempos de encierro, tanto entre profesores y alumnos, como entre ellos mismos.

Además, el pensamiento visual como metodología de trabajo puede funcionar como efecto disruptivo, ante el aluvión de trabajos escritos, o como vía de conexión con los sentidos y emociones; ambos son aspectos interesantes a fomentar para sobrellevar estos días de confinamiento.

Algunas ideas

Visual Thinking en educación es uno de los grupos de Facebook donde podemos encontrar muchas iniciativas e ideas interesantes sobre como utilizar el pensamiento visual para trabajar en remoto. Un ejemplo es #SalgamosAdelanteConArte, una propuesta del profesorado de la Associació Valenciana de Professorat de Dibuix para apoyar a través de la educación artística al personal sanitario.

En Twitter @dibujario, nos propone hacer mascarillas o batas para ayudar al personal sanitario utilizando Visual thinking

https://twitter.com/dibujario/status/1243829460455096321/photo/1
https://twitter.com/dibujario/status/1244907814025400320/photo/1

En está entrada, Philippe Boukobza, propone una selección  de juegos que puedes utilizar en el trabajo o en casa para fomentar el Visual Thinking.

Finalmene, hay una iniciativa interesante en Instagram para estos días de confinamiento: el reto #DibujoEnCuarentena2020, que nos animan a contar nuestros días de confinamiento haciendo garabatos.

Conclusión

Para poner en práctica el pensamiento visual sólo necesitaremos papel y lápices de colores. Además contamos con el apoyo de un sinfín de herramientas digitales para exponer ideas, reflexiones o sentimientos y estamos deseando de contar cosas. Así pues, frente al confinamiento, ¡pensamiento visual!

“Si no puedo dibujarlo es que no lo entiendo” Albert Einstein

Para saber más

Resumen del ‘Libro de los mapas mentales’ de Tony Buzan

Libro ‘Tu mundo en una servilleta’ de Dan Roam

Curso completo online sobre mapas mentales

20 herramientas para desarrollar visual thinking

Web con un gran número de artículos sobre pensamiento visual

Muy completo banco de recursos para Visual thinking

Entrevista a Elena Urizar, pionera del Visual thinking en España

Contiene vídeo y pdf con rubricas de evaluación del Proyecto Venta Pintorrea

Blog de Garbiñe Larralde experta en Visual thinking. Es también la creadora de un MOOC de Visual Thinking ofrecido por eI INTEF

Comunidad online de sketchnoters

Referencias:

https://www.icemd.com/digital-knowledge/articulos/una-historia-visual-thinking/

https://www.educ.ar/recursos/116342/infografias-aprender-con-imagenes

https://www.theflippedclassroom.es/making-thinking-visible-hacer-visible-el-pensamiento/

Ritchhart, R., Church, M., & Morrison, K. (2014). Hacer visible el pensamiento. Grupo Planeta Spain.

Luis Ángel Gómez Galdeano. Licenciado en Educación Física y Deporte. Director técnico de Running Park Madrid y profesor colaborador de la ONG Escuela de Paz. Este artículo forma parte de un proyecto de aprendizaje-servicio coordinado por el profesor Fernando Trujillo Sáez y Conecta13 dentro del Máster en Innovación Educativa de la Universidad Carlos III, la Fundación Estudio y la Institución Libre de Enseñanza.

Fuente e Imagen: https://www.educaciontrespuntocero.com/noticias/pensamiento-visual-pedagogias/
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La escucha activa: respeto, empatía y concentración en el aula

Por: Laura Román

Escuchar de manera activa conlleva una serie de habilidades relacionadas con la empatía, el interés o la concentración hacia lo que nos están contando. Explicamos en qué consiste y cómo aplicarlo con el alumnado o los hijos gracias a los consejos de la psicóloga Rocío Rivero.

Oír no es lo mismo que escuchar. Según las definiciones de ambos conceptos en la RAE, oír es, literalmente, “percibir con el oído los sonidos” mientras que escuchar es “prestar atención a lo que se oye”. El segundo de los términos se puede aprender a través de la ‘escucha activa’, una práctica que trata de enseñar a los seres humanos a realizar dicha acción desde la compresión y que requiere una serie de habilidades que se pueden entrenar en el aula o en familia, como la atención, la participación, la empatía o la concentración.

¿En qué consiste la escucha activa?

Esta forma de comunicación interpersonal, que fue creada por el psicólogo estadounidense Carl Rogers en la década de los cuarenta, se centra en aprender a escuchar. Para ello y según explicó el propio Rogers: “Escuchamos no sólo con nuestros oídos sino con nuestros ojos, con nuestra mente, corazón e imaginación”. Es decir, este tipo de técnica se basa en una serie de comportamientos por parte del oyente que preparan a la persona para escuchar y para concentrarse en el mensaje de su interlocutor realizando un vínculo especial con sus emociones.

escucha activa

La escucha activa requiere de atención, intención y también de la capacidad para no juzgar al otro. Rogers declaraba que la tendencia natural del oyente de evaluar al que está hablando o de aprobar o desaprobar lo que está diciendo lo consideraba como una de las principales barreras en una comunicación interpersonal de éxito.

¿Cómo se puede aplicar en el aula?

Rocio Rivero es psicóloga y muchos de los centros educativos en los que trabaja ponen en práctica la técnica de la escucha activa entre los estudiantes por los beneficios que aporta en distintos aspectos académicos y personales. “La escucha activa favorece la asimilación de contenidos porque obliga al estudiante a estar atento no solo al mensaje, si no también a los gestos y a las emociones de la persona que nos lo está transmitiendo. Y cuando conectamos un contenido con las emociones, el proceso de aprendizaje mejora ya que se fija en la memoria”.

escucha activa aula

Rivero también establece una serie de aspectos positivos en el propio desarrollo personal de estudiante: “El alumnado que practica la escucha activa es más respetuoso con los demás, desarrolla un buen grado de empatía con la persona a la que está escuchando y tiene más seguridad en sí mismo porque siente que lo que cuenta es interesante para sus compañeros”.

La experta aconseja introducir esta técnica en el aula a través del juego o establecer una serie de indicaciones para comprobar que el alumnado está atendiendo realmente. “Hay que hacer hincapié en que los estudiantes miren a la persona que está hablando para enterarse bien de lo que está diciendo y cómo lo está diciendo. Por ejemplo, podemos pedirles que tomen notas porque serán ellos quienes tengan que exponer un tema al resto de compañeros”.

En el caso del alumnado de Infantil se puede hacer uso del dibujo. “Tras escuchar lo que se le dice, tendrán que dibujar algo relacionado con ello, además de una carita con la emoción que han sentido o creen haber sentido mientras el docente les hablaba”.

Mensajes ‘activos’

La escucha activa se fomenta a través de características basadas en el interés, la no interrupción y el entendimiento hacia el interlocutor. Para aplicarla en el aula o en casa, Rivero propone colocar un tablero en la pared con mensajes como los siguientes:

  • ‘No se puede interrumpir al que habla’
  • ‘Cuando alguien habla, el resto escuchamos sin juzgar’
  • ‘No puedo estar hablando todo el tiempo. Tengo que dejar tiempo para los demás’.
  • ‘Cuando no entiendo algo lo pregunto y no me quedo con la duda’.
Fuente e Imagen: https://www.educaciontrespuntocero.com/recursos/educacion-emocional/escucha-activa-respeto-empatia-concentracion-aula/118929.html
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“Saber escuchar a los estudiantes es vital para el avance educativo”

Por: Marta Moreno.

A menudo nos referimos a la importancia de que los estudiantes aprendan a escuchar activamente pero, ¿qué pasa con el docente? José Antonio Fernández Bravo, maestro y autor de ‘La sonrisa del conocimiento’ nos cuenta cuáles son los beneficios y por qué todos los profesores deberían escuchar al que aprende.

José Antonio Fernández Bravo es docente, investigador educativo y el autor de ‘La sonrisa del conocimiento’ en el que propone ‘CEMA’, un método de aprendizaje que describe los pasos que debe dar el que enseña para provocar saber en el que aprende. En la obra hace especial hincapié en la importancia de la escucha activa por parte del profesor y de saber escuchar a los estudiantes y describe diferentes beneficios y herramientas para poder llevarlo a cabo dentro del aula.

Pregunta: ¿Cómo puede conseguir un docente que el estudiante crea en sí mismo?

Respuesta: Haciéndole sentir que los demás creen en él, al tener en cuenta en todo momento lo que quiere expresar. El docente debe dirigirse al alumnado con una actitud de encuentro, de cercanía, de búsqueda conjunta: “¿Qué podríamos hacer para…?” “¿dónde podríamos encontrar?” “¿cómo podemos saber si es cierto o falso?”, “¿qué se te ocurre a ti?”, “¿qué pasaría si?” Son formas de actuar que llevan por mensaje implícito un “cuento contigo”. Un mensaje que anima a respetar todas las respuestas, por absurdas que puedan parecer, y provoca la necesidad -entre los estudiantes- de formular nuevas preguntas que les ayudarán a encontrar el conocimiento; sin negar o afirmar, con bien o mal.

Les reforzamos su creer en sí mismos, cuando les ponemos en situación de tomar decisiones propias y se les ayuda a responsabilizarse de las consecuencias que se derivan de las decisiones que toman. De estas ideas podemos deducir que las metodologías activas son imprescindibles en nuestras clases -a cualquier edad-, y que la información verbal de forma exclusiva, por parte del que enseña, debilita seriamente la autoestima, la confianza, la seguridad, la implicación… de los que aprenden; variables todas fundamentales para el desarrollo personal.

» La información verbal de forma exclusiva, por parte del que enseña, debilita seriamente la autoestima de los que aprenden «

Una persona empieza a creer en sí misma cuando lo intenta, y termina creyendo en sí misma cuando lo consigue. El profesor, maestro debe favorecer, patrocinar, sostener y acoger situaciones en las que nuestros alumnos pierdan el miedo a intentarlo, y a reintentarlo, hasta que consigan un éxito mayor que el estimado.

Pregunta: ¿En qué sentido es importante que un docente sepa escuchar a sus alumnos?

Respuesta: Los criterios y valores culturales de la sociedad actual son diferentes a los de otras épocas. Incluso, dentro de una misma sociedad hay diferentes perfiles de personas (varias culturas, costumbres locales diferentes,…) Si a esta premisa se le añade que cada persona es única, la escucha no puede ser una propuesta hipotética, sino una incorporación categórica y vital para cualquier avance educativa.

Si enseñar es ante todo producir aprendizaje, la brújula del docente debe señalar en todo momento a la manera de aprender. Son los alumnos los que marcan las tendencias educativas, y los buenos resultados de aprendizaje los que garantizan su actualidad. Es necesario saber escuchar para enseñar desde el cerebro del que aprende con la sonrisa del conocimiento.

» Son los alumnos los que marcan las tendencias educativas «

Pregunta: A menudo hablamos de los métodos para que los estudiantes aprendan a escuchar pero, ¿cómo aprende un docente?

Respuesta: Obteniendo respuesta a las preguntas: “¿Por qué hacen lo que hacen?”, “¿por qué dicen lo que dicen?”, “¿por qué sienten lo que sienten?”, “¿por qué reaccionan como reaccionan?”, “¿Por qué perciben lo que perciben?” Para ello hay que distinguir las necesidades del que aprende de los deseos del que enseña. Es fundamental creer en el que aprende, entendiendo que:

  • Nadie responde por azar a no ser que haya sido intimidado,
  • Nadie quiere responder de forma equivocada cuando conscientemente conoce la respuesta correcta.
  • Siempre hay un porqué para lo que hacemos, lo que sentimos, lo que percibimos, lo que sentimos…
  • Ni existe, ni existirá método de enseñanza superior a la capacidad de aprendizaje de la mente humana.
José Antonio Fernández Bravo

Pregunta: ¿Debería otorgarse más importancia a la escucha activa en la formación docente?

Respuesta: Escuchar es un procedimiento que nos lleva a un objetivo previsto para alcanzar un determinado fin. En la formación docente el fin no es escuchar, sino sacar adelante a nuestros alumnos: que quieran saber, que sepan bien, que apliquen correctamente lo que saben… buscando siempre el desarrollo integral de la persona. La escucha activa implica escuchar para actuar, con el propósito de obtener respuestas, canalizar propósitos, justificar satisfacciones, resolver problemas, modelar soluciones, descifrar los códigos de la disposición y el encuentro, etc.; para devolverles mejorado lo que nuestros alumnos nos han ofrecido.

Pregunta: ¿De qué manera está vinculada la creatividad con el saber escuchar?

Respuesta: No tiene sentido enseñar -por ejemplo- a restar a todos los niños de una clase de la misma manera, porque ellos tienen distintos procesos de pensamiento y distintas formas de aprender. La misma idea podríamos transferirla al aprendizaje de cualquier otro contenido, tema o concepto. Cuando un colegio enseña con el procedimiento ‘ABC’, difícilmente escuchará a los niños que necesiten del procedimiento que se identifique con una letra distinta a esa. Saber escuchar implica aceptación y respeto por lo que te dicen, para transformarlo en conocimiento, y esa transformación precisa mucho de la creatividad por el potencial de éxito que tiene la pluralidad de alternativas, frente a un único camino de difícil previsión meteorológica.

Pregunta: ¿Qué puede aprender un docente (o un padre/madre) de los niños?

Respuesta: Aprenderán a desvelar enigmas, generar ilusión por descubrir cosas y tener oportunidades para aplicarlas.

De los niños, un docente aprenderá a ser docente, una madre a ser madre y un padre a ser padre. Parece obvio, pero quizás no seamos conscientes de lo esencial. ¿Cómo puede un docente aprender a ser docente de niños sin los niños? ¿Cómo puede un padre o una madre aprender a ser padre o madre sin sus hijos? Cuando imaginamos el saber lo único que sabemos es que imaginamos. La única realidad que contiene el saber es conocer la realidad.

No todos los docentes, padres o madres aprenden de los niños, pero ninguno podrá hacerlo sin ellos; es decir, que no aprenderán los que de los niños no aprendan; y, que lo que aprendan estará siempre en función de su actitud.

Pregunta: ¿En qué consiste el método CEMA?

Respuesta: Describe los pasos que debe dar el que enseña para provocar saber en el que aprende. Es como la ingeniería del camino para la adquisición del conocimiento.

José Antonio Fernández Bravo

En los métodos tradicionales, el docente es el proveedor de los contenidos elaborados y el alumno los consume. Es difícil obtener conocimiento si el proceso que se sigue consiste en aceptar la información que se recibe, memorizar la información recibida y, por último, asistir a la conjetura de esperar que el alumno entienda lo que ha memorizado. INFORMAR, MEMORIZAR y ENTENDER (I-M-E)

Muy diferente es la ruta que establece el método CEMA:

  • Comprender, dar sentido propio al correcto significado.
  • Enunciar, informar con rigor y claridad. Necesariamente después de que se haya comprendido.
  • Memorizar-retener-reproducir. Es el tercer paso; guardar en el recuerdo cómo se llama lo que ya se sabe qué es.
  • Aplicar para fortalecer el aprendizaje y adquirir el saber. Paso final para el resurgir, acoplar y transferir.

COMPRENDER-ENUNCIAR-MEMORIZAR y APLICAR (C-E-M-A). Es un método ontológico-epistemológico. Por un lado, comprende al que aprende (tiene en cuenta a la persona, al ser en todas sus dimensiones, cree en esa persona, encuentra una explicación para sus actos, busca el entendimiento de su manifestación y conducta …); por otro lado, exige que comprenda el que aprende (alcanzar el significado, adquirir conocimiento, declarar sentimientos, entender comportamientos, …).

Pregunta: Para terminar, un pequeño test… ¿qué te sugieren las siguientes palabras?

  • Escuchar: generosidad
  • Escuela: los múltiplos de las condiciones
  • Educación: el porvenir del respeto
  • Infancia: el tesoro que más enriquece
  • Enseñanza: rompecabezas de un sueño

Fuente de la entrevista: https://www.educaciontrespuntocero.com/entrevistas/jose-antonio-fernandez-bravo-escuchar-estudiantes/111192.html

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Entrevista a los pedagogos Robert Slavin y Nancy Madden: «La cooperación en clase reduce el bullying a cero»

España / 12 de agosto de 2018 / Autor: Carmen Jané / Fuente: El Periódico

Promotores del método basado en evidencias y fundadores de Success for All, una organización que propone una metodología para conseguir el éxito en todas las escuelas y todos los alumnos, Robert Slavin y Nancy Madden, son los gurús de la aplicación de las evidencias científicas en la escuela, destinadas a mejorar el éxito escolar, y del aprendizaje colaborativo. Recientemente visitaron Barcelona invitados por la Fundació Bancària Caixabank.

¿Qué permiten las evidencias?

Slavin: La evidencia permite ver que sea cual sea el método que escoja, funcionará. Cada vez que alguien encuentra una mejora, la puede aplicar. Es utilizar la lógica médica para realizar experimentos en el campo educativo. Buscamos programas replicables, de 12 semanas de duración con al menos 60 alumnos repartidos en dos grupos, uno de control y otro de experimentación, y con estándares admitidos.

¿Cómo definen el éxito en la escuela?

S: En la escuela, que puedan leer bien. Para algunas escuelas esto es un reto, pero también queremos estudiantes felices, motivados, implicados, capaces de relacionarse con otros estudiantes… También que sean capaces de resolver matemáticas.

¿Las pantallas han cambiado cómo los niños aprenden a leer?

S: Quizás en algún punto pero en las pantallas también necesitas leer. No obstante, los niveles de comprensión lectora, al menos en EEUU, no han cambiado desde hace años.

Madden: Lo que tampoco ha cambiado es que hay una gran brecha entre los niños que viven en pobreza, un 18%, respecto a los más ricos. Y eso no solo es una desventaja en la escuela sino en la vida. Y esto hay que cambiarlo.

¿Cómo se hace?

M: Trabajamos con las escuelas como unidad, usando investigación. En los años 90, las autoridades de Baltimore vinieron a pedirnos a la Johns Hopkins University que investigáramos para solucionar el problema del fracaso escolar y saber qué funcionaba en la alfabetización temprana. Empezamos a medir qué funcionaba, cuál era la implicación de las familias, el uso de tutorías, canciones como el Animated Alfabet… Si puedes leer, algo extraordinario tiene que pasar.

¿Cuál ha de ser el liderazgo en una clase así?

S: No solo hay que implicar al director sino también a los profesores en distintos grupos, y a los padres, lo que a veces requiere talleres específicos para ellos. El mejor es poner comida y dejarles traer a los niños, así que no sienten que están siendo enseñados sino que comparten la enseñanza con sus hijos. Tenemos una experiencia llamada ‘La segunda taza de café’, en la que los padres se quedan en la escuela después de dejar a los niños en el colegio, o el Walking School Bus, en el que los padres recogen a los niños de otros para ir a la escuela. Son actividades divertidas, que aseguran que si ves a tu vecino venir a buscar a tu hijo, te encargas de que tu niño esté listo. Hay que buscar maneras positivas de resolver los problemas.

Y las clases han de ser interesantes.

S: Totalmente. Y los niños han de darse cuenta de que avanzan y progresan, lo que resulta muy motivador.

¿Cómo se trabaja con las personalidades y los conflictos entre alumnos?

M: Cuando los niños se implican y tienen que hablar entre ellos como parte de la actividad, no tienen problemas de comportamiento. El primer paso para reducir el ‘bullying’ en clase es la colaboración e implicarlos en el aprendizaje y que vean que su éxito es importante para los profesores y para los otros alumnos. Esto reduce los problemas de conducta casi a cero, y luego darles instrucciones sobre cómo llevarse bien entre ellos, como darse cuenta de lo que les pasa a los demás (la llamada ‘escucha activa’). Hay muchas estrategias en este sentido.

S: Eso lo podemos enseñar también a los políticos (ríe). Es crucial hacerles ver que hay otra foma de comportarse, que puedes ser reconocido como un buen líder o como alguien que enseña a otros estudiantes en lugar de ser mezquino o pelearte. Pero lo más importante es el éxito en sí mismo. Chicos que creen que nunca van a triunfar no hacen nada nuevo. Es una cuestión de autoestima.

¿Su método sirve para aprender también matemáticas?

M: Hemos creado estrategias, aunque es algo distinto. Se usa aprendizaje cooperativo para que se corresponsabilicen de ayudarse.

¿Cómo se aprende a ser cooperativo en un mundo que pide la competición?

M: El mundo es ahora muy colaborativo fuera de la escuela.

S: Los chicos trabajan siempre en equipos, compiten con los demás pero colaboran entre ellos. En su perspectiva, es un elemento importante.

Su método exige cambiar la estructura de la clase. ¿Cuál es su estructura ideal de clase ahora?

M: Usamos instrucción psicológica efectiva, en la que el profesor presenta un reto que los alumnos evalúan en grupos. No hay filas, todos en corro.

¿Y cómo integran los ordenadores?

R: En tutorías, sirven para reforzar habilidades y complementar al profesor. Lo usamos para el trabajo en parejas, con Barrio Sésamo.

Fuente de la Entrevista:

https://www.elperiodico.com/es/educacion/20180805/entrevista-a-robert-slavin-y-nancy-madden-6942264

ove/mahv

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