80 % de los estudiantes no cumplió objetivos de la educación a distancia
Texto por Isabella Reimí
Los recortes de luz y la desigualdad en el acceso a la tecnología fueron razones que incidieron en que no se cumplieran los objetivos de la educación a distancia en el año lectivo 2019-2020, impuesta debido a la pandemia de COVID-19.
De acuerdo con el Sindicato Venezolano de Maestros, los estados más afectados fueron Zulia, Mérida, Táchira y Lara. Algunas instituciones en estas regiones solo completaron dos de tres lapsos este periodo escolar.
El pasado lunes 29 de junio, el presidente del Colegio de Profesores de Lara, Luis Arrollo, dijo a la prensa que el 80 % de los estudiantes venezolanos no pudo cumplir los requisitos académicos por falta de dispositivos tecnológicos.
Este martes 30 de junio, Carmen Salazar, sindicalista de Carora, dijo en una entrevista con Efecto Cocuyo que en el Liceo Edigio Montesinos ni siquiera se intentó enseñar el tercer lapso por las dificultades que supusieron contactar a todos los estudiantes. Menos de un 70 % de los alumnos del plantel pudo culminar a distancia satisfactoriamente el segundo lapso.
Atribuyó este fenómeno a la dificultad de comunicarse con la baja cobertura de las zonas rurales. Los cortes eléctricos de hasta ocho horas a diario agudizan este problema.
Menos de la mitad de alumnos con recursos tecnológicos en Zulia
Apenas el 39 % de los alumnos de Zulia pudieron conectarse a las actividades de contingencia. Según contó el docente sindicalista zuliano Gualberto Más y Rubí, únicamente lo hicieron 27.000 de más de 70.000 estudiantes.
“El resto se nos queda en el camino”, comentó el sindicalista sobre ese otro 61 %.
El Sindicato Unido de Maestros (Suma) Zulia recopiló la información en 16 de los 21 municipios del estado. Por problemas de conectividad Suma no pudo contactar a los docentes en la Guajira, Catatumbo, Sucre, Francisco Javier Pulgar y Jesús María Semprúm.
Desde el 16 de marzo la llegada de la pandemia a Venezuela obligó a las escuelas en todo el país a continuar el proceso de educación a distancia. Esta decisión del gabinete de Maduro tomó por sorpresa a los docentes, quienes no se imaginaban que el año escolar concluiría de la misma manera.
La encuesta, que finalizó el pasado 23 de julio, arrojó que el 65 % de los docentes en Zulia hicieron uso de la tecnología para cubrir la actividad pedagógica. Pero muchos educadores, advirtió Más y Rubí, tuvieron que acudir a los equipos de amigos y familiares.
Tercer lapso sin portafolio
El pasado lunes 29 de junio debía darse por finalizada la recepción de notas de los estudiantes. Sin embargo, el viernes de la semana que le antecedió a penas el 51 % de los alumnos habían entregado actividades del portafolio del tercer lapso.
Por eso este lunes 29 de junio “estaban pasando convocatoria para que los maestros fueran a las escuelas a recoger portafolio y la respuesta fue mínima, porque no hay transporte público”, dijo Más y Rubí.
Estima que apenas un 5 % o 10 % de los alumnos rezagados pudieron acercarse, por lo cual todavía más de 40% de los estudiantes no han dado constancia de avances el tercer lapso.
Por esto la prioridad de Suma Zulia al regreso a clases es planificar un curso de nivelación “para que los muchachos alcancen competencias y objetivos”.
Sin embargo, el regreso a clases podría ser virtual y debido a la disparidad en el acceso a la tecnología, el sindicato mantiene que “la educación a distancia en Venezuela es una fantasía mientras no se garanticen las condiciones sociales para alumnos y docentes”.
También recordó que Zulia sufre una gran crisis eléctrica con recortes de luz de seis a ocho horas y esto impide el manejo por internet.
Por otro lado, Más y Rubí alertó que el un 85% las escuelas en Zulia no cuentan con servicio de agua y casi el 70 % de los planteles tiene una sola zona sanitaria en funcionamiento. En este sentido exigió al estado que garantizara el regreso a clases de una forma higiénica si pudiera hacerse presencial.
En Mérida no cuentan con la tecnología
Pierina Taborada, docente sindicalista de Mérida, también respaldó que “durante la cuarentena los estudiantes han tenido serias dificultades para cumplir con cada una de las actividades académicas”.
Aproximadamente un 70 % de los estudiantes de Mérida y 80 % de los docentes no cuentan con un equipo que les facilite el trabajo virtual o de educación a distancia que deben desarrollar.
“La mayoría debe recurrir a algún vecino o familiar para poder grabarse o tomar fotografías, cuando se trata de enviar alguna vídeo exposición o actividad desarrollada en el cuaderno”, dijo Taborada en vía telefónica.
En este estado las interrupciones del servicio eléctrico también son reiterativas con cortes de seis o más horas.
“Al fallar la electricidad, falla la cobertura de datos y, por supuesto, el servicio Abba de Cantv”, explicó la representante del Sindicato de Trabajadores de la Enseñanza en el estado Mérida (Sinditem). Especialmente la inequidad del acceso a la educación se agudiza en las zonas rurales.
En su opinión, este 70 % de los alumnos que no se lograron conectarse serán promovidos al año superior “sin haber logrado las competencias necesarias”. Según la experiencia docente, algunos alumnos han contado con la complicidad de terceros para entregar trabajos plagiados con tal de no perder la nota.
“Las autoridades educativas muestran un afán absurdo por culminar un año escolar sin medir las consecuencias reales de lo que se está haciendo”, advirtió. Cuando en realidad en su plantel de trabajo, liceo estadal Claro Corredor Müller, tampoco impartieron el tercer lapso.
“Los reveses, contratiempos, las frustraciones durante el proceso evaluativo son innumerables”, se desahogó Taborada en la entrevista. En su opinión el Ministerio de Educación, ocupado por el chavismo, no se mostró consciente a estas realidades.
El verdadero engaño a la educación en Táchira
Para César Mendoza, de Suma Táchira, “en términos criollos” el programa de contingencia de educación a distancia exigido por el Estado es “el verdadero engaño a la educación”.
Según observó el sindicato regional los supervisores dieron a los docentes la instrucción de enviar actividades de una programación cuantiosa. Sin embargo, se quedó con “mandar tareas al alumno” sin medir su aprendizaje.
“Por la persecución de las zonas educativas (el maestro) intentó hacer un alcance cuantitativo y no pensó en el objetivo cualitativo”, dijo Mendoza.
Sobre todo, Mendoza duda que haya sido de provecho el contenido que los alumnos recibieron en las materias Física, Química y Matemática. Aseguró que los estudiantes de quinto año que ahora pasarán como bachilleres a la universidad “van muy mal preparados”.
Según su consideración esto sucedió porque los dirigentes “no pensaron en la situación del alumno y sus representantes”
“Muchos gozaron de que los padres son profesionales en su casa y pudieron orientarlos, pero tenemos la gran experiencia de que los padres no tienen idea de qué está ocurriendo”, mencionó.
Además, también insistió que el país no estaba preparado para una implementación virtual. Sobre todo, en un estado como Táchira en el cual “la mitad del tiempo hay luz y la otra no”.
Por otro lado, los padres que no tenían computadoras en casa debían asistir a un centro de conexión y asumir un costo por la educación “gratuita” de sus hijos. Y los docentes debían invertir dinero de su salario para pagar los datos de los teléfonos inteligentes, ya que, “escasamente un 40% de los docentes (de Táchira) cuentan con los equipos necesarios”.
En general, todos los sindicalistas acuerdan que sin un incremento salarial para el docente, el año escolar 2020-2021 se vendrá cuesta arriba.
Fuente de la información: https://efectococuyo.com/la-humanidad/80-de-los-estudiantes-no-cumplio-objetivos-de-la-educacion-a-distancia/