Entrevista a Humberto Maturana: “El futuro de la humanidad no son los niños, son los mayores»

Fuente: culto.latercera./Autor:Alejandra Jara

De visita en la Región del Biobío, el Premio Nacional de Ciencias conversó sobre la importancia de que los niños crezcan en un espacio que acoja, escuche, se diga la verdad y donde sus preguntas sean contestadas. “Sólo así se transformará en una persona reflexiva, seria y responsable”, aseguró.

“Cuando uno aplaude a alguien sin haber escuchado nada, entonces uno aplaude las expectativas”, dijo un sorprendido Maturana apenas subió al escenario de la escuela Hipólito Toro y Salas de Chiguayante, en la región del Biobío, donde fue invitado ayer miércoles a inaugurar el año académico.

La noticia de que visitaría la región se masificó rápido y decenas de personas, ajenas a la comunidad educativa del establecimiento, llegaron hasta el colegio para escuchar al Premio Nacional de Ciencias, arriesgándose incluso a que no las dejaran entrar.

Bastó que lo mencionaran como el invitado de honor de esta ceremonia, donde también se premió a los profesores destacados de Chiguayante, para que el público estallara en aplausos mientras las cámaras, que transmitieron en directo su presentación vía streaming, enfocaron a varios jóvenes y adultos que se acomodaron como podían al interior del auditorio donde reinó el silencio durante los poco más de 20 minutos que duró su presentación.

“Pero las expectativas nunca se cumplen, ni las propias, ni las ajenas. Lo cual es bueno. Uno puede escuchar sin prejuicios, sin supuestos, sin exigencias y uno puede hablar también desde la espontaneidad”, recordó el biólogo y autor de El árbol del conocimiento (1984), antes de comenzar a hablar de “Amar educa”, el tema central de su ponencia.

El futuro de la humanidad

“Los niños, niñas y jóvenes se van a transformar con nosotros, con los mayores, con los que conviven, según sea esa convivencia. El futuro de la humanidad no son los niños, somos los mayores con los que se transforman en la convivencia”, dijo Maturana en la mitad de su presentación.

El biólogo se dio cuenta de lo sorprendidos que quedaron los auditores con esta aseveración y continuó: “Nosotros hoy somos el futuro de la humanidad. Los niños se transforman con nosotros. Van a reflexionar, van a mentir, van a decir la verdad, van a estar atentos a lo que ocurre, van a ser tiernos, si nosotros los mayores, con los que conviven, decimos la verdad, no hacemos trampa, o somos tiernos”, explicó.

Por lo tanto, el enseñar, como parte de la convivencia, es indicar, apuntar la mirada, guiar la reflexión, pero “en cualquier caso los niños se van a transformar con los mayores con los cuales conviven”, agregó el biólogo.

“Cuando decimos que amar educa, lo que decimos es que el amar como espacio que acogemos al otro, que lo dejamos aparecer, en el que escuchamos lo que dice sin negarlo desde un prejuicio, supuesto, o teoría, se va a transformar en la educación que nosotros queremos. Como una persona que reflexiona, pregunta, que es autónoma, que decide por sí misma”, sostuvo.

Maturana explicó que una de las cosas que surge del lenguaje es la conciencia. Y que existen dos preguntas fundamentales que los niños viven. Una de ellas es “¿mamá cómo se hace?, lo que revela que el niño quiere hacerlo bien. “Todos queremos hacer bien las cosas que sabemos y por eso preguntamos”, aclaró el biólogo.

Y la otra pregunta es la que le hace la mamá o el papá al niño: “¿Te das cuenta de lo que estás haciendo?”. “Esa es una pregunta maravillosa, lleva la mirada sobre sí mismo. Abre el espacio de la reflexión”, dijo Maturana.

Y enfatizó: “Amar educa. Si creamos un espacio que acoge, que escucha, en el cual decimos la verdad y contestamos las preguntas, nos damos tiempo para estar allí con el niño o niña, ese niño se transformará en una persona reflexiva, seria, responsable que va a escoger desde sí”.

Porque el acto de escoger es fundamental y constituye un acto de conciencia, aseguró el Premio Nacional de Ciencias Exactas. “El poder escoger lo que se hace, el poder escoger si uno quiere lo que escogió o no, ¿quiero hacer lo que digo que quiero hacer?, ¿me gusta estar dónde estoy?”, son algunas de las preguntas que aparecen”, explicó Maturana.

El origen de los problemas

En su ponencia, Maturana también abordó que los problemas humanos nunca son de inteligencia, sino corresponden a conflictos de emociones. “Son todos conflictos de deseos y se resuelven con la reflexión”, dijo el experto.

También explicó que los humanos hacemos teorías, es decir, constructos lógicos que se fundan en premisas básicas aceptadas a priori desde la emoción. Y para resolver las discrepancias con los otros “hay que ver las coherencias del ámbito en el cual estamos hablando”, agregó el Premio Nacional de Ciencias.

Si no nos podemos poner de acuerdo, es porque estamos en ambos teóricos distintos. Estamos argumentando desde premisas básicas diferentes. “Y la única solución es mirar desde donde estamos diciendo lo que estamos diciendo”, sostuvo Maturana.

En este tema, el ex académico del MIT fue consultado por uno de los asistentes sobre cómo transformar la política pública en educación que está volcada a los indicadores.

“Conversando”, respondió el experto y agregó que “El colegio de profesores se transformó a lo largo de la historia en un sistema gremial, pero en su origen era un sistema de reflexión académica sobre la educación. Un modo de conversar sobre lo que hacemos. Porque si no conversamos ¿qué diremos ante las autoridades gubernamentales?”, se preguntó.

Por lo tanto, lo que hoy hay que responder es “¿qué queremos con la educación”, dijo el biólogo. Es decir, saber si queremos formar jóvenes que se preparen para la competencia del mercado laboral o para una convivencia democrática, honesta, de mutuo respeto, en la colaboración, en la reflexión.

“Ese es nuestro tema, tenemos que conversar. Pero no tenemos que tratar la conversación como algo banal (…) Tenemos que atrevernos no en una huelga, sino en la conversación y la reflexión”, aseguró el Premio Nacional de Ciencias.

Amar educa

“Para que el amar eduque hay que amar y tener ternura. El amar es dejar aparecer. Darle espacio al otro para que tengan presencia nuestros niños, amigos y nuestros mayores”, sostuvo Maturana.

Por eso, la educación es la tarea más importante de un país. “Define el ámbito de convivencia en el que ese país se va constituyendo, momento a momento, día a día”, agregó el biólogo.

Como yo lo había mencionado anteriormente, en este ámbito la reflexión juega un rol fundamental porque permite mirar dónde estamos. “Si no reflexionamos vamos a caer en un fanatismo, en un ámbito de autoridad absoluta para el que otro obedezca”, aseguró Maturana.

Pero a nadie le gusta obedecer, porque es una negación de sí mismo. Sin embargo, en el colaborar “tengo presencia, soy libre, escojo”, lo que recordó que es importante aplicar en la crianza de los niños.

“La educación es una transformación en la convivencia y seguirá un camino u otro según la teoría desde las cuales actuemos. Las teorías no son superfluas, definen el espacio en el que nos movemos y las aceptamos. Pero si aceptamos las teorías aceptamos las premisas básicas desde donde se constituyen, de modo que tenemos que ser siempre, o deberíamos ser capaces, de preguntarnos las premisas básicas desde donde se construyen las teorías, el sistema lógico con el cual fundamentamos lo que hacemos”, concluyó el Premio Nacional de Ciencias.

Fuente de la entrevista: http://culto.latercera.com/2017/03/23/maturana-la-humanidad-los-ninos-los-mayores/

Fuente de la imagen:http://culto.latercera.com/wp-content/uploads/2017/03/maturana.png

 

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Abuelos digitales, las nuevas estrellas de YouTube

26 Marzo 2017/Fuente y Autor: http://gestion.pe

No hay edad para alcanzar la fama. Y los abuelos youtubers lo saben muy bien. Algunos superan los ochenta años sin embargo, enseñando y disfrutando lo que hacen, han encontrado miles de seguidores y un trabajo divertido.

¿La Internet es terreno de jóvenes? Por favor. Uno de cada cinco usuarios web en Latinoamérica son ancianos. Es más, su padre o abuelo podría estar navegando tranquilamente YouTube en este instante, en donde el 10% de público pertenece a la tercera edad.

Y es precisamente acá en donde los patriarcas del mundo comienzan a resaltar. La categoría senior en YouTube es un fenómeno creciente, y no piensa detenerse.

Esperanza Rosas es una vecina limeña de 74 años, y desde hace siete publica religiosamente y todas las semanas una edición más de “Tejiendo Perú”, su videoblog sobre, adivinen, costura.

“Tejiendo Perú” ya tiene alrededor de 744,000 suscriptores en YouTube, y sobrepasa las 260 millones de reproducciones. ¿De qué trata? Esperanza se graba enseñando las técnicas ancestrales del tejido con palillos, crochet y demás.

Pero Esperanza no es la única ‘abuelita virtual’, como la llaman sus seguidores. Al otro lado del Atlántico, en España, encontramos a Juan José Cañas, el abuelo viajero.

A sus 80 años, Cañas decidió perseguir su sueño de conocer Cuba. Pero tuvo la incréible idea de tomar el camino largo.

Entonces, podemos encontrar vídeos del español en Vietnam, Venecia o Barcelona. Todo gracias a su canal: “Atrapatuabuelo”.

Estados Unidos, por supuesto, tampoco se podía quedar atrás. Shirley Curry es una youtuber gamer, y sí, tiene 80 años.

Esta divergencia tan curiosa ha provocado la curiosidad y atracción de sus seguidores, que ahora suman más de 270,000.

Fuente de la noticia: http://gestion.pe/tecnologia/abuelos-digitales-nuevas-estrellas-youtube-2185245

Fuente de la imagen:http://d2mcuc4z4njy7y.cloudfront.net/ima/0/0/2/1/1/211184.jpg

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Tras PISA , debate sobre la educación argentina

Por Natalia Meja

Las formas de enseñar no pueden compararse, advierten. Poner al estudiante en el centro es uno de los desafíos.

Era Finlandia, ahora es Singapur el país con los mejores resultados en educación a nivel mundial, de acuerdo al Programa para la Evaluación Internacional de los Alumnos (PISA, por sus siglas en inglés) 2015. En contrapartida, la Argentina directamente fue excluida de la prueba por un error, lo que reavivó la polémica sobre los exámenes que realiza la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE). Especialistas de la Educación consultados por El Tribuno dieron su punto de vista al respecto y analizaron si las características del sistema educativo de Singapur podrían funcionar en el país.
Para la exministra de Educación de Salta Adriana López Figueroa, las pruebas PISA no permiten la comparación de los sistemas educativos entre países. «El resultado de PISA lo que te dice es que el sistema educativo utilizado para Singapur funciona en Singapur. El sistema educativo que eligió Argentina evidentemente tiene que recibir mejoras, pero es imposible alguna comparación», señaló.
En la misma línea se pronunció el pedagogo Gerardo Bianchetti. «Son diferentes sistemas educativos, inclusive cómo se fueron conformando. Uno no puede analizar un sistema educativo y compararlo con los resultados solamente sino que hay que ver qué importancia se le dio a la educación y de qué manera se organizaron las instituciones educativas», señaló.
Bianchetti sostuvo que frente a determinadas situaciones problemáticas en una sociedad hay que ver cómo es la política educativa de ese lugar y qué se plantea para superarlas. Dijo: «Eso fue un problema en la Argentina por todas las interrupciones que se dieron; los cortes que hubo durante las dictaduras hacían que cada vez que se volvía a la democracia hubiera que volver a empezar. El mismo deterioro con las situaciones económicas en algunos momentos de nuestra historia también afectaron al sistema».
Por su parte, Oscar Ghillione, titular de Enseñá por Argentina, una organización que trabaja en varios puntos del país para mejorar la educación secundaria en las escuelas públicas, cree que «las comparaciones son difíciles» debido a que «hay tantas muchas cuestiones que hablan del contexto propio».
«Obviamente hay buenas prácticas que uno podría aprender, contextualizarlas y aplicarlas en la Argentina. Creo que eso es posible, sin embargo, son historias y culturas distintas», afirmó el especialista.
Exigencia
Julio Durand, decano de la escuela de Educación de la Universidad Austral, señaló que «en la Argentina todo lo que suena a exigencia es inhumano. Hay poco desarrollo de la laboriosidad, de la capacidad de estudio que después se va replicando en los distintos niveles del sistema educativo».
En este sentido, advirtió que están llegando a la universidad chicos que no saben comprender textos. «Quizá no sea necesario copiar un sistema meritocrático-militarista, pero capaz llegó el momento de pensar en algún tipo de prueba o exigencia que obligue a los chicos, a los jóvenes, a tratar de superarse y alcanzar rendimientos más altos», analizó.
Ghillione admitió que tiene curiosidad de conocer las mentalidades de los actores de aquellos sistemas educativos exitosos para aprender de ellos. «Me interesa ver de qué manera podemos nosotros encontrar el cómo en nuestro sistema: qué es lo que ellos hacen allá que podamos hacer acá, se pueden aprender algunas prácticas», dijo.
Si bien algunos tienen ciertos reparos con las pruebas PISA, los consultados coincidieron en la importancia de seguir participando para saber dónde está parada la Argentina en el mundo y así poder tomar decisiones. Los sistemas educativos exitosos ponen al estudiante en el centro, construyendo desde ahí, y, según los especialistas, «a la Argentina todavía le falta tener esa mentalidad».

SINGAPUR, A LA CABEZA

La República de Singapur, un pequeño país de Asia (tiene 5.535.000 habitantes, según datos de 2015), con la mayor densidad de población después de Mónaco, tiene el mejor sistema educativo del mundo, de acuerdo a las pruebas PISA 2015.
Desde la primaria, la educación está orientada a desarrollar aptitudes, carácter, valores en los estudiantes y a motivarlos para la investigación, la creatividad y el emprendimiento.
Singapur se caracteriza por buscar constantemente el vínculo entre la educación y el desarrollo económico.
El Gobierno de Singapur ideó un sistema educativo basado en la meritocracia, y junto con el Programa de Educación para Dotados, consiguió resultados excelentes. Hoy es considerado el sistema educativo más competente. La base es el mérito propio, mediante la capacidad individual y el espíritu competitivo.
Fuente: http://www.eltribuno.info/tras-pisa-debate-la-educacion-argentina-n809174
Imagen: www.eltribuno.info/adjuntos/170/imagenes/001/680/0001680619.jpg
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Consecuencias y recompensas: consigue que las normas de clase se cumplan

16 de noviembre de 2016 / Fuente: http://blog.tiching.com/

Por: David Soria

Ya hemos hablado de la importancia de establecer normas de clase desde el principio de curso y de cómo formularlas de forma positiva. También hemos visto qué número de normas es el adecuado o incluso qué tipo de normas se adaptan a nuestra forma de enseñar.

Creo que hay un consenso en la necesidad de normas de convivencia, si bien la forma de redactar estas normas varía bastante de unas clases a otras. Ahora bien, ¿qué pasa si las normas no se cumplen? Y si se cumplen, ¿cuáles son las consecuencias? De esto precisamente hablamos hoy.

Algún lector pensará que si las normas se cumplen no tiene que pasar nada, pues es “lo normal”. Yo no estoy de acuerdo. Creo que hay que reforzar positivamente a aquellos alumnos que cumplen las normas. Es más, hay que reforzar positivamente a aquellos alumnos que tienen verdaderos problemas para seguir las normas.

Lo que a nosotros nos puede parecer “lo normal” (por ejemplo, “no interrumpir al otro cuando habla”) puede no ser la norma establecida en su hogar. Además, está comprobado que aquellos comportamientos que se refuerzan, se repiten. “Echar la bronca”, sin más, refuerza ese comportamiento, pues muchas veces proporciona la atención que el alumno busca.

Tristemente, lo habitual en nuestras aulas es que quien cumple las normas no tiene ninguna recompensa o consecuencia positiva. En cambio, quien se las salta, muchas veces recibe una atención que en sí misma es una consecuencia positiva desde su punto de vista.

Lo que propongo en este artículo es un sistema claro de consecuencias negativas y, sobre todo, consecuencias positivas asociadas al incumplimiento y cumplimiento de las normas de clase.

Es importante que el alumno entienda que él ha elegido saltarse una norma. Y como toda elección en la vida, tiene consecuencias. No es un ejercicio de justicia divina ejercida por el profesor ni nada por el estilo. Por eso, es importante dedicar tanto tiempo a la explicación de las consecuencias como a la explicación de las normas.

Consecuencias negativas

Un ejemplo de consecuencias negativas sería un sistema donde se penaliza la repetición del incumplimiento de normas:

  • Primera vez: Aviso. Todos cometemos errores y hay que dar un margen de reacción al alumno. No es una consecuencia propiamente dicha, pues no tiene efecto alguno, excepto el de agotar una oportunidad.
  • Segunda vez: El alumno es separado de su lugar habitual de trabajo para poder centrarse, dejar a los demás trabajar y reflexionar sobre su comportamiento.
  • Tercera vez: Se llama al alumno aparte y se tiene una conversación privada con él. No es cuestión de humillar a nadie frente a la clase.
  • Cuarta vez: Es necesario ponerse en contacto con las familias. Quizás ellos puedan ayudar a reconducir el comportamiento de su hijo, o incluso que reconozcan el origen de ese comportamiento en algún aspecto familiar.
  • Quinta vez: Es necesario tener una conversación con el alumno, la familia y el alumno.

La mayoría de los alumnos rara vez pasan de 3 incumplimientos en un día cuando se aplican las normas con rigor.

Consecuencias positivas

Un ejemplo de consecuencias positivas sería un sistema de puntos en el que se consigue tiempo para hacer su actividad favorita en clase. Es importante hacer énfasis en que las recompensas no se dan, sino que se ganan. De nuevo: las elecciones en la vida tienen consecuencias y, a veces, estas son positivas.

Personalmente me gusta más dar las consecuencias positivas a equipos de alumnos o a la clase entera si llega el caso, más que a un único alumno, porque la presión de los compañeros puede hacer reconducir el comportamiento, para bien, de alumnos que no son capaces de hacerlo por sí mismos. Además de que todos los alumnos sienten que están aportando al bien común con su buen comportamiento.

Ejemplo de consecuencias positivas:

  • Cada día: Puntos para el equipo en el que todos sus miembros cumplieron las normas (los avisos  se excusan).
  • Cada semana: 20 minutos de la actividad que más les gusta en la última clase del viernes. Cualquiera que haya dado clase un tiempo sabrá por qué elijo el viernes 🙂
  • Cada mes: Los alumnos ven un vídeo o película en clase.
  • Cada trimestre: Los alumnos tienen una fiesta en clase.

En cualquier caso, la consecuencia positiva inmediata de que todos los alumnos cumplan las normas es que disfrutarán de una buena lección, sin interrupciones y centrados en el aprendizaje.

En conclusión, las normas de clase están incompletas si no tienen asociadas un sistema de consecuencias tanto negativas como positivas para incentivar su cumplimiento. Las consecuencias dan a las normas la efectividad que buscamos en ellas cuando las redactamos.

Fuente artículo: http://blog.tiching.com/consecuencias-y-recompensas-consigue-que-las-normas-de-clase-se-cumplan/

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