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Generación E: ¿La respuesta para poder acceder a la educación superior en Colombia?

Por:  UNIMINUTO Radio UVD.

“Generación E” la nueva apuesta del Gobierno Nacional para mejorar la educación en Colombia, esta consta de tres componentes los cuales son, Equidad, Excelencia y Equipo, con estos se busca brindar acceso a la educación superior a los jóvenes de bajos recursos y mejorar la calidad de las universidades públicas.

Antanas Mockus fue restituido en su curul del Congreso de la República luego de que un fallo de la Corte determinara que este no se encontraba inhabilitado para ejercer su puesto.  Luego de que abandonara su esquema de seguridad no se sabe nada del paradero actual de Jesús Santrich, se espera que se presente a indagatoriael 09 de julio para rendir cuentas sobre el caso que es desarrollado en su contra.

Recordamos el 20 de julio del 2003, día en el que se anunció la reforma constitucional que permitió el segundo mandato de Álvaro Uribe como presidente. En los tuits más polémicos de la política encontramos a Ernesto Yamhure, quien dio su opinión frente a la posible candidatura presidencial de la actual congresista Paloma Valencia, en el cuarto lugar está el trino de Julián Rodríguez en donde menciona la violencia que vive el país luego de que se presentaron amenazas en contra del futbolista William Tesillo.

Continuamos con Maria Fernanda Cabal quien tuiteó  sobre el porte de armas; propuso que este fuera legal en todo el país, Gustavo Bolívar quien pregunta a la Corte Suprema de Justicia cuando se realiza la indagatoria al Senador Álvaro Uribe, y en el primer lugar se encuentra el presidente del congreso, Ernesto Macías, quien trinó sobre el caso “Santrich” etiquetando a la INTERPOL y pidiendo que se encargaran del asunto, sin embargo, la etiqueta que realizó no fue dirigida hacia la entidad sino a la banda de rock estadounidense del mismo nombre.

En las voces de:
Wendy Estefani Romero Ostios, Ana Milena López Rojas, María Alejandra Arévalo Forero, Andrea Natalia Galindo Rodríguez.

Fuente de la entrevista: https://www.uniminutoradio.com.co/generacion-e-la-respuesta-para-poder-acceder-la-educacion-superior-en-colombia/
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Colombia: “Generación E” ha beneficiado a 18.240 jóvenes

América del Sur/ Colombia/ 22.04.2019/ Fuente: mba.americaeconomia.com.

Ministerio de Educación les informó esta semana a 15.456 personas que se les cubrirá su matrícula : para estudiar en instituciones de educación superior pública. Se suman a los 2.784 beneficiados del programa en lo corrido del año.

Tras las críticas que recibió el programa “Ser Pilo Paga”, que fue una de las banderas del Ministerio de Educación durante el gobierno de Santos, el presidente Iván Duque decidió reemplazarlo. En octubre de 2018, junto a la ministra de Educación, María Victoria Angulo, anunciaron el nacimiento de “Generación E”, una nueva iniciativa con la que se busca que los mejores estudiantes de Colombia puedan acceder a la educación superior, sobre todo pública.

Hasta el momento, según señalo el Ministerio de Educación en un comunicado, han sido 18.240 los jóvenes que se han beneficiado del nuevo programa. De este número, 15.456 casos de tratan de jóvenes de todas las regiones del país a quienes les informaron, esta semana, que recibirán la matrícula para estudiar su primer semestre en instituciones de educación superior públicas. “Estos primeros beneficiarios, 9.827 están estudiando en universidades públicas y 5.629 en instituciones técnicas profesionales, tecnológicas y universitarias que ofrecen programas académicos en 21 departamentos del país”.

En otras palabras, son beneficiarios del componente Equidad de “Generación E”, en el que se les paga la matrícula a los colombianos que tengan un puntaje Sisbén igual o menor a 32 puntos y estén admitidos en una institución de educación superior pública.

“La meta es vincular a 80 mil estudiantes del componente de Equidad en un proceso gradual cada año y beneficiar a 320.000 estudiantes colombianos, en este cuatrienio, con la financiación de hasta el 100% del valor de la matrícula y un subsidio de sostenimiento por el tiempo de duración del programa académico”, explica la cartera de educación.

Los otros 2.2784 casos se trata de beneficiaros del componente “Excelencia” del programa. Es decir, estudiantes con un puntaje Sisbén igual o menor a 57 y que además hayan tenido uno de los mejores puntajes en las pruebas Saber 11. Para estos casos, los estudiantes sí pueden elegir si quieren estudiar en una institución pública o privada, y tienen un esquema de financiación en el que el Estado da una parte, la universidad que elijan otra y una suma más la asume el estudiante. A la fecha, “el 42% de los estudiantes más sobresalientes del país seleccionaron a instituciones públicas y el 58% a instituciones privadas en ambos casos de alta calidad”.

La meta del Ministerio en este último componente es adjudicar el beneficio a 4.000 personas este año y llegar a los 16.000 jóvenes durante los próximo cuatro años.

Finalmente, para el último componente de “Generación E”, llamado Equipo y que busca rescatar a las instituciones de educación superior pública, la cartera reitera que “destinará nuevos recursos anuales para el fortalecimiento de las 61 instituciones de educación superior públicas con un monto de recursos de más de 4,5 billones de pesos”.

Se dividen así:

-1,34 billones de pesos serán destinados a fortalecer la base presupuestal. A partir de 2019, estos recursos, que anteriormente crecían solo con la inflación (IPC), comenzarán a aumentar durante los próximos años. A partir de 2019 se hará un aumento del IPC + 3,5%; para el 2020 + 4%; para el 2021+ 4,5%, y para 2022 + 4,65%.

-1,5 billones serán para mejor la infraestructura, los planes de bienestar, la capacidad investigativa y a fortalecer las Instituciones Educación Superior públicas. Los recursos vienen del recaudo de regalías.

-1,35 billones, a cuatro años, que irán a pago de pasivos e inversión en temas de infraestructura, bienestar estudiantil, dotaciones, formación docente de alto nivel y fortalecimiento institucional. Los recursos vienen del presupuesto de la Nación.

Fuente de la noticia: https://mba.americaeconomia.com/articulos/notas/colombia-generacion-e-ha-beneficiado-18240-jovenes

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“La mejor política sería tener una universidad pública de primer nivel”: experto del BID

Entrevista/07 Noviembre 2018/ Autor y Fuente: Semana Educación

Con Generación E, el país contará por otros cuatro años con un formato similar a Ser Pilo Paga, en el que se privilegia la excelencia como vía de acceso a la universidad. Por eso, Semana Educación conversó con Horacio Álvarez Marinelli, especialista en educación del Banco Interamericano de Desarrollo, quien evalúa los aciertos y desafíos del programa.

El 20 de octubre el presidente Duque dio a conocer Generación E, el programa para el acceso a la educación superior que reemplaza Ser Pilo Paga. Con él Duque planea fortalecer las universidades públicas y construir un país en el que sus estudiantes de bajos recursos económicos entren en equidad a la universidad.

El plan, en el que participarán el Ministerio de Educación, el Departamento de Planeación Nacional, el Icfes y el Icetex, constará de tres componentes: avance a la gratuidad (equidad), reconocimiento de los mejores bachilleres (excelencia) y fortalecimiento de las instituciones de educación superior públicas. Generación E contará con una inversión de 500.000 millones, los cuales serán divididos entre los tres componentes.

Es justamente el segundo componente el que guarda la esencia de Ser Pilo Paga: por medio de este programa se reconocerá a los bachilleres cuyos resultados en las pruebas Saber sobresalgan. Sin embargo, cuenta con algunas distancias del anterior programa: en vez de 40.000 estudiantes beneficiados, al finalizar el cuatrenio serán 16.000. Además, es una línea que esta vez contempla una estructura de corresponsabilidad para cuando los estudiantes elijan una universidad privada.

Como el formato de Ser Pilo Paga se mantiene de alguna forma, Horacio Álvarez, especialista en educación del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), analiza los aciertos del programa y los aprendizajes de ese programa. Algunas fueron aplicadas en Generación E.

Semana Educación: ¿Cuál es su opinión sobre Ser Pilo Paga?

Horacio Álvarez: Ser Pilo Paga es una buena idea. Sin embargo, se implementó muy apresuradamente y no se recogieron, en su diseño, las lecciones aprendidas de otros programas de becas existentes en el país e internacionalmente.

S.E.: ¿Qué lecciones se obviaron? ¿Qué no se tuvo en cuenta?

H. A.: Parte de lo que se pudo haber definido más favorablemente, en términos de financiamiento, es el copago de las universidades privadas o la reducción de la matrícula y las pensiones de estas a los estudiantes becados. Esta es una constante en programas de becas con financiamiento público. Por ejemplo, la Secretaría de Educación de Bogotá tiene un proyecto de becas para docentes en el que solo se paga el 75% del valor de la matrícula y pensiones.

S. E.: ¿Las universidades hacen descuento al sector público?

H. A.: Sí. Universidades privadas acreditadas, como el Externado y la Javeriana, hacen descuentos cuando paga el sector público. Esto porque la estructura de costos lo permite. Por ejemplo, agregar diez nuevos cupos a una cohorte de 100 estudiantes es sumamente rentable para una universidad. Si los 100 alumnos están en cuatro grupos de 25, y agregan dos más por grupo, no sufre la calidad, pero el ingreso por esos estudiantes adicionales es una ganancia para la universidad y el programa. Los costos fijos y variables (docentes, currículum, edificios, laboratorios, etcétera) están cubiertos con los 100 alumnos inscritos sin becas. Los ingresos por alumnos becados representan un monto adicional de las universidades.

S. E.: ¿Qué otro tema cree que se pudo tomar en cuenta?

H. A.: Desde la experiencia internacional, se pudieron estudiar los mecanismos para evitar la deserción y el cambio de carrera. En Estados Unidos, por ejemplo, algunos programas cuentan con un mecanismo institucional de apoyo a los estudiantes que ingresan, tanto para seleccionar la carrera como para sentirse confiados con el camino que escojan. Cuentan además con sistemas dentro de los programas, tales como grupos de estudiantes, de pares, que los apoyan para “sobrevivir” la experiencia universitaria.

 

S. E.: Pero uno podría decir que el programa ha sido exitoso, ¿no? Pocos estudiantes desertan…

H. A.: No existen datos publicados y actualizados sobre la deserción del programa para todas las cohortes. Se prevé que sea importante en algunas carreras y universidades. Se habla siempre de un dato de 2% de deserción, pero este solo se circunscribe a la primera cohorte, en su primer año de universidad. No se sabe cómo ha sido su trayectoria el resto de años, o el dato respecto a las otras tres cohortes. Además, esta información no tiene en cuenta el cambio de carreras.

S. E.: ¿Por qué el cambio de carrera se vuelve un problema?

H. A.: El tema es que, por lo general, el cambio de carrera incrementa el número de semestres que debe estudiar un estudiante, dependiendo del momento del cambio. Aunque lo hagan en la misma universidad, habrán cursado clases que no serán convalidadas en una nueva carrera porque no pertenecen al currículo. Por ejemplo, si un pilo comenzó en Leyes y decide pasarse a Ingeniería luego de un año, no tendrá muchas clases que convalidar, lo que implica más costos para el programa. Si estos estudiantes no terminan en los ocho semestres previstos, ¿quién asume la diferencia y el costo de los semestres adicionales?

S. E.: Se habla mucho de que los beneficios exceden los costos del programa. ¿Esto es cierto?

H. A.: Sí y no. El programa tiene beneficios claros para los estudiantes y sus familias, las universidades participantes y la sociedad. El tema está en definir quién debe pagar por los beneficios obtenidos. Por ejemplo, si el pilo tiene un beneficio directo –por tener mayor movilidad social al ser parte de una universidad privada versus una pública–, el costo de este no debería ser pagado por la sociedad en su conjunto a través de los impuestos.

Recordemos que así se financia un programa como Ser Pilo Paga: con los impuestos de la población. En este caso, si hubiera un beneficio adicional, por ejemplo de ser un estudiante graduado de Economía del Rosario versus uno egresado de la misma carrera en la Nacional, el costo adicional debiera ser pagado por el alumno, en un futuro, cuando esté trabajando. Estos son los programas de pago contingente al ingreso, que la exministra Giha ya había propuesto y que tengo entendido estará dentro del programa de la ministra Angulo. Ahora bien, no estoy seguro de que los estudiantes pilos tengan mayores ingresos por estudiar en el sector privado versus el sector público por la calidad de la universidad.

Luego mencionan el beneficio que tiene para los alumnos de estratos altos la integración social en sus universidades. El costo de este beneficio lo deberían pagar las universidades y los estudiantes de ingresos altos, si consideran que es importante, con becas para alumnos de ingresos bajos. Es por ello que universidades como Harvard y Stanford tienen tantas becas para estudiantes de escasos recursos. Pero no debiera pagarlo el gobierno, aunque sea una buena política la de lograr mayor integración en nuestras sociedades tan desiguales.

Ahora bien, la mejor política de integración en la educación superior sería tener una universidad y una educación públicas de primerísimo nivel, a la que asistan todos los estratos sociales, tal como sucede en la mayor parte de países europeos.

S. E.: Algunos argumentan que la inversión en Ser Pilo Paga es relativamente baja en relación con el presupuesto total del sector. ¿Qué opina sobre eso?

H. A.: Como porcentaje del total del sector puede ser. Pero recordemos que la inversión es para atender 40.000 estudiantes, mientras el resto del sector está atendiendo a más de nueve millones de alumnos desde preescolar hasta la media, y unos 600.000 estudiantes de educación superior. Lo que sí es un hecho es que la inversión en Ser Pilo Paga, que cubre a esos 40.000 alumnos, equivale a las transferencias totales que realiza el gobierno nacional para la cobertura de 600.000 estudiantes que asisten a educación superior pública.

Fuente: https://www.semana.com/educacion/articulo/un-experto-del-bid-analiza-lo-bueno-y-lo-malo-de-ser-pilo-paga/588972

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