La vida por educar: al menos 1.000 maestros fueron asesinados entre 1986 y 2010, dice informe entregado a la JEP

Por: Semana Educación

El informe que Fecode entregó a la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) busca que este organismo abra un macrocaso sobre lo que consideran ha sido un crimen de lesa humanidad de persecución y exterminio contra los activistas sindicales miembros de la agremiación docente.

¿Ser profesor es un trabajo de alto riesgo? Aunque en el imaginario de muchos la profesión docente no representa un riesgo para la integridad de las personas que la ejercen, a diferencia de carreras militares o relacionadas con el servicio en la Fuerza Pública, un informe que presentó la Federación Colombiana de Educadores (Fecode), es la clara evidencia de que ser profesor en Colombia es un riesgo latente, más aún si se hace parte de un grupo sindical.

‘La vida por Educar: crímenes de lesa humanidad, persecución y exterminio contra maestros y maestras sindicalistas, miembros de Fecode entre 1986 y 2010‘, es el nombre del informe que el gremio docente más grande del país entregó esta semana a la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) para demostrar que los profesores que han sido activistas sindicales han sido víctimas de un crimen de lesa humanidad de persecución y exterminio.

De acuerdo con el informe que fue elaborado por la Comisión de Derechos Humanos de Fecode, con la asistencia técnica de la Escuela Nacional Sindical y el Centro Internacional para la Justicia Transicional (ICTJ), entre el 1 de enero de 1986 y el 1 de diciembre de 2016, la Federación fue víctima de al menos 6.119 violaciones a la vida, libertad e integridad de los docentes sindicalizados.

De las más de 6.000 violaciones registradas, 990 corresponden a homicidios de maestros sindicalizado y 78 desapariciones forzadas. Además, dentro de la cifra 3.170 casos fueron amenazas, 1.549 desplazamientos forzados, 124 detenciones arbitrarias, 89 hostigamientos, 40 secuestros, 22 casos de tortura, siete allanamientos ilegales y 49 atentados con o sin lesiones.

Uno de los agravantes que expone el informe es la alta impunidad en estos casos, pues alrededor del 94% de estas situaciones se encuentran impunes.

«Cuando la brutal represión y los dolores juntos llevan a cerrar los recuerdos y olvidar nuestros muertos, nos atrevimos a abrir viejos archivos y recoger testimonios de los sobrevivientes, que estaban dispersos por todo el territorio nacional; la mayoría en manos de los familiares de los docentes víctimas, quienes han esperado por décadas que se haga justicia, que el sindicato asuma su historia de vidas truncadas, de sueños asesinados y de luchas que aún reposan en cada movilización que se convoca», señaló el Comité Ejecutivo de Fecode durante la entrega del informe al magistrado de la JEP, Gustavo Salazar.

El documento, que también fue entregado a la Comisión de la Verdad, precisa que los departamentos donde mayor cantidad de hechos en contra de los docentes son Antioquia, Valle del Cauca y Santander. A estos tres departamentos les siguen Magdalena, Nariño y Cauca.

Según lo expuesto, esta situación de violencia sistemática generó una desconfianza contra Fecode y sus sindicatos filiales por parte de los familiares de los docentes asesinados o desaparecidos. «En varios casos, se acusa la organización sindical de las pérdidas que han tenido, normalizando el hecho de que, en Colombia, persiguen y asesinan a los sindicalistas por realizar su labor, lo que ha contribuido a la ruptura del tejido social y ha sembrado graves prejuicios y estigmas a la acción sindical», dice el documento.

¿Quién los mató?

En el curso de los 25 años transcurridos entre 1986 y 2010, la justicia ordinaria ha avanzado muy poco en cuanto al esclarecimiento de los presuntos responsables de los crímenes de maestros y maestras, dice el documento.

De ahí, destaca Fecode, nace la necesidad de establecer la responsabilidad penal individual de los máximos responsables del ataque sistemático en contra de los sindicatos de educadores y señalar la responsabilidad de los diferentes actores.

En consecuencia, la Federación se propuso identificar y señalar la responsabilidad penal individual, por acción u omisión de garante, de al menos 411 presuntos responsables. Según las cifras del Sistema de Información en Derechos Humanos (Sinderh), el mayor peso de casos son los cometidos por grupos paramilitares; seguidos por la guerrilla y por la Policía.

A la guerrilla se le atribuyen 138 casos; a las Fuerzas Militares, Policía y DAS, 143; a los grupos paramilitares, el 16 % del total de las violaciones: «En el periodo 1986-2010, es claro que la lógica de exterminio y persecución se enmarcó en el proceso de expansión y consolidación del proyecto paramilitar, sus alianzas con élites locales y regionales y la aquiescencia (consentimiento) de los agentes estatales», señala el informe.

¿Qué se busca con la entrega del informe?

Desde Fecode precisaron que con la entrega del informe a la JEP, se busca abrir un macrocaso sobre el crimen de lesa humanidad de persecución y exterminio ejercido contra los docentes activistas sindicales: «Este informe y su investigación debe romper el ciclo de violencia establecido contra los sindicalistas y líderes sociales, y así contribuir a garantizar medidas de no repetición».

Una fuente de la JEP informó a SEMANA que al recibir este informe hay dos opciones de lo que puede suceder: primero, que con este informe se encuentren los datos suficientes como para abrir un macrocaso relacionado con la persecusión, exterminio y violencia sistemática contra los docentes tal y como busca Fecode; o la segunda posibilidad es que el informe sirva de insumo y se adhiera a uno de los siete macrocasos que ya está manejando la JEP.

La JEP determinará el destino de este informe de Fecode en febrero de 2020.

Fuente: https://www.semana.com/educacion/articulo/la-vida-por-educar-al-menos-1000-maestros-fueron-asesinados-entre-1986-y-2010-dice-informe-de-fecode-entregado-a-la-jep/642561

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S.O.S. No es Venezuela, es México

Ilka Oliva Corado

México está siendo secuestrado, torturado, masacrado y desaparecido nada más y nada menos que por el gobierno de Peña Nieto.

La pregunta urgente que nos hacemos muchos es, ¿qué está esperando Almagro y la OEA para aplicarle a Peña Nieto la Carta Democrática? ¿Acaso el gobierno no está violando los Derechos Humanos de los ciudadanos mexicanos? ¿Acaso no incita y ejerce la violencia desde su brazo armado?¿Acaso el gobierno de Peña Nieto no está secuestrando, torturando y masacrando ciudadanos? ¿No está saqueando el país? ¿Acaso no reprime las manifestaciones sociales? ¿Acaso no es un genocidio el que lleva acabo?

¿Qué más es lo que necesita Almagro para aplicar de urgencia la Carta Democrática y denunciar a nivel internacional la dictadura de Peña Nieto? Ajá, es que no es Maduro ni Venezuela. ¿En dónde están Hillary Clinton, Obama y Biden denunciando a nivel internacional la masacre que realiza Peña Nieto contra su propio pueblo? Así como denunciaron al “dictador” Maduro.

 ¿En dónde están Uribe y retahíla denunciando a Peña Nieto y exigiendo la intervención militar estadounidense en México? Así como exigen que lo haga con Venezuela.

¿En dónde están los presidentes del mundo manifestándose por el asesinato de los maestros en Oaxaca por parte del gobierno, así como se manifestaron por la masacre de Orlando? Ajá, es que no es Estados Unidos y ahí no hay que tratar de quedar bien.

 En México el terrorismo corre a cuenta del propio gobierno. ¿Por qué no están denunciando esto Telemundo, Televisa, Univisión y CNN en Español? Así como tienen sus diez minutos diarios del noticiero dedicado a Venezuela y a atacar a Maduro. Peña Nieto se da la libertad de asesinar estudiantes y maestros. Asesinar periodistas, defensores de Derechos Humanos, campesinos y sindicalistas. De asesinar niños, adolescentes y mujeres. Los feminicidios en México superan a los de Latinoamérica. Ha llenado de fosas clandestinas el país, hace correr ríos de sangre, ¿en dónde está la denuncia y la intervención internacional en defensa del pueblo mexicano?

 ¿En dónde están esos artistas internacionales que denuncian todos los días la “hambruna” que vive Venezuela por culpa del “dictador” Maduro, en dónde están denunciando la dictadura de Peña Nieto en México? ¿Qué sucede con los medios de comunicación internacionales que han creado un manto de impunidad como protección a los corruptos, violadores y asesinos del gobierno mexicano? ¿Por qué no denuncian y envían corresponsables y realizan enlaces en vivo como lo hacen con Venezuela, denunciando la “calamidad” que vive el pueblo en manos del “opresor” Maduro. Gran responsabilidad tienen los medios que callan en complicidad.

 ¿En dónde está el mundo diciendo “Todos somos México” así como hace una semana dijeron “Todos somos Orlando”? ¿En dónde están esos mexicanos que hace unos días enfurecieron por la monumental derrota ante Chile en el juego de la Copa América, en dónde están enfurecidos por lo que hace su gobierno con su pueblo? ¿Es acaso más importante un juego de fútbol, en un campeonato malogrado por la corrupción de la FIFA que la denuncia social en defensa de la vida? ¿En dónde está esa gente graduada de universidad, grandes oradores, intelectuales que viajan alrededor del mundo dictando conferencias en contra de Maduro, en dónde están denunciando el genocidio que realiza Peña Nieto?

 ¿En dónde está el mundo manifestándose por México? México pide ayuda a gritos, envía señales de alarma, de emergencia, de catástrofe, clama por una democracia, por un gobierno que respete a sus ciudadanos. Pide un alto al genocidio, a los secuestros, a las torturas; un alto a las desapariciones forzadas. Pide un alto al saqueo, a la corrupción, a la venta de la tierra.

 En México tenemos un espejo, lo que sucede en ese país es lo que quiere hacer Estados Unidos con el resto de América Latina, lo que sucede hoy en México ya lo vivimos en el triángulo norte de Centro América, hace unas décadas con las dictaduras y los genocidios de los cuales aún no logramos reponernos.

 ¿Tenemos el descaro de preguntarnos entonces el por qué de la resistencia de los gobiernos progresistas latinoamericanos hacia Estados Unidos? ¿Nos preguntamos entonces el por qué la fuerza del capital está en contra de Venezuela? Lo increíble, lo esperanzador es que en México, a pesar de tanta sangre derramada, de tanta opresión, el pueblo siga resistiendo. Digo, el pueblo real. Con la frente en alto y el pecho erguido, aunque literalmente le esté lloviendo balas.

No hay que ser mexicano, docente ni estudiante para apoyar la denuncia de los maestros mexicanos, hay que ser tan solo humano y saber que la causa cuando es justa despertará la furia de los traidores y contra ellos tenemos que unirnos los que queremos cambiar el mundo por uno más justo.

 El México de pies descalzos sigue resistiendo, ni Estados Unidos por tenerlo de patio trasero ha podido con él. Y vemos entonces a los herederos de las Adelitas, de Pancho Villa, de Emiliano Zapata y de Lucio Cabañas gritar desde las calles enardecidas: ¡Viva México, cabrones!

 Y aunque el mundo guarde silencio y la mediatización pretenda esconder la impunidad, ese grito que revienta desde el río Bravo hasta el Usumacinta, que se explaya por los mares de aguas internacionales, es el llamado de la sangre que solo escuchan los que a pesar de 500 años de genocidio y saqueos se rehúsan a que América Latina sea vasalla de traidores vende patrias. Y se unen al rugido para que estalle en todos los rincones del mundo y que quienes no lo quieran ver lo escuchen: ¡Viva México, cabrones! ¡Viva México, aunque nos despedacen a metralla!

 No, no es el gobierno de Maduro masacrando venezolanos, es el gobierno de Peña Nieto masacrando mexicanos en resistencia y dignidad.

 Yo soy México, ¿y usted?

Fuente del articulo: https://cronicasdeunainquilina.com/2016/06/21/s-o-s-no-es-venezuela-es-mexico/#more-5158

Fuente de la imagen:http://questiondigital.com/wp-content/uploads/2016/06/mex-oaxaca-represion4.jpg

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Aurelio envenenó la reforma educativa.

América del Norte/México/21.06.2016/Fuente:http://www.animalpolitico.com/

Alberto Serdán

Hay responsabilidades políticas de lo sucedido en Nochixtlán y recaen en el gobierno de Enrique Peña Nieto. En particular, existe una responsabilidad clara en el titular de la SEP, Aurelio Nuño, quien tomó la decisión de escalar su beligerancia contra la CNTE, con el pretexto de implementar la Reforma Educativa privilegiando la fuerza y no el convencimiento.

Los asesinatos de maestros y civiles ocurridos en Nochixtlán, Oaxaca, pudieron evitarse. Las responsabilidades penales relacionadas con el desastre de los servicios de inteligencia para identificar riesgos, la improvisación o franca saña de las fuerzas del orden para contener manifestantes, deben ir por el sendero de las investigaciones independientes y deben ser castigados de forma ejemplar.

Pero hay responsabilidades políticas de lo sucedido y recaen en el gobierno de Enrique Peña Nieto. En particular, existe una responsabilidad clara en el titular de la Secretaría de Educación Pública, Aurelio Nuño, quien tomó la decisión de escalar su beligerancia contra la CNTE, con el pretexto de implementar la Reforma Educativa privilegiando la fuerza y no el convencimiento. Caricaturizado a la Coordinadora y sus seguidores como un enemigo a vencer o aniquilar, la consecuencia visible de tal medida salta a la vista en los sucesos de Oaxaca. Pero, por otro lado, la otra consecuencia es, y hay que decirlo, que el secretario Nuño envenenó la Reforma Educativa que dice defender.

El núcleo de la Reforma Educativa descansó en la promesa de que fueran las capacidades académicas y profesionales, y no las lealtades personales, políticas o sindicales, las que determinaran los procesos de ingreso, permanencia, promoción, estímulos y reconocimientos de los maestros. Así, el sistema giraría en torno a lo educativo y no en el control político del magisterio.

Lejos de ser guardián del cumplimiento de esta promesa, Aurelio Nuño cometió cuatro errores garrafales:

Primer error. Decidió que el éxito inmediato de la implementación de la reforma se midiera en función de la continuidad del calendario escolar y del sometimiento de los profesores a los procesos de evaluación. En ese contexto, Nuño consideró prioritario despedir a los profesores que no se evaluaran o que faltaran tres días seguidos o con tres ausencias en el lapso de un mes. No conforme, decidió anunciar el número de maestros despedidos como trofeo de guerra.

Este error trajo diversas consecuencias.

Por principio de cuentas, dio la razón a quienes señalaron que se trataba una reforma “punitiva” diseñada para castigar profesores y alejó el beneficio de la duda con el que había nacido la reforma tanto en la opinión pública como en el magisterio. Ello limitó el margen de legitimidad de la reforma y su aplicabilidad.

Era claro que las resistencias a la evaluación y las ausencias del salón de clases se debían a las protestas de los maestros inconformes con la reforma, por las razones que fueran. En este sentido, priorizar el despido de profesores no era sino una señal de exigencia de disciplina política o franca sumisión a los designios del gobierno, lo que naturalmente fue inaceptable para los docentes.

Peor, lo que significó una “aplicación estricta de la ley” no resultó más que una simulación por lo que a continuación se menciona.

Segundo error. Promovió una manipulación política de la ley al perseguir judicialmente únicamente a los dirigentes de la CNTE cuando los delitos que presuntamente cometieron en realidad eran similares a los que caracterizaron a dirigentes del SNTE (lavado de dinero, cobro de comisiones ilegales, desvío de recursos) sin que éstos fueran tocados con el pétalo de un citatorio más allá delquinazo al inicio del sexenio contra Elba Esther Gordillo.

Peor aún, el gobierno puerilmente decidió que el mejor momento para reactivar y cumplir las órdenes de aprehensión contra los dirigentes de la CNTE fue cuando anunciaron una alianza política entre esta organización y Morena, el partido de Andrés Manuel López Obrador, principal contendiente en la elección presidencial del 2018.

Este es un error, desde el punto de vista educativo, del que no aprenden los gobernantes: los procesos del sistema educativo no deben estar regidos por los ciclos electorales o las ambiciones presidenciales del titular de la SEP en turno. La promesa de que el Estado recuperaría la rectoría de la educación la rompió el propio Nuño al supeditar los cálculos electorales a la implementación exitosa de la reforma. También rompió la promesa de que las autoridades educativas no estarían capturadas por los intereses electorales de gobernantes, sindicatos y grupos de presión a grado tal que hiciera inoperable cualquier decisión educativa.

Tercer error. Nuño descuidó lo que verdaderamente haría exitosa a la reforma: generar confianza en los maestros sobre los nuevos procesos de ingreso, permanencia, promoción, estímulos y reconocimientos.

Ello exigía varias tareas. De entrada, diseñar un verdadero servicio profesional de carrera. Las prisas, por entendibles que fueran, para sacar adelante la legislación secundaria de la reforma constitucional en materia educativa, no eximían del gobierno de la creación de un horizonte de carrera profesional que resultara en un incentivo poderoso para los maestros. Así, la perspectiva de los docentes de incorporarse al nuevo sistema por las opciones profesionales que ofrecía en lugar del miedo, era el camino a seguir. Por el contrario, el mandato constitucional terminó en un remedo del programa Carrera Magisterial que simplemente no cumplió con las expectativas de un nuevo modelo de carrera y peor desnudó las pulsiones autoritarias del régimen al pretender imponer la reforma a la fuerza.

Asimismo, estaba la tarea fundamental de comunicar eficazmente los propósitos de la reforma y sus mecanismos de implementación sobre todo a los docentes pero también a la sociedad. La cerrazón de Nuño a cualquier diálogo con los disidentes de la reforma a cambio de su sumisión lo condenó a perder la oportunidad de rendir cuentas sobre la reforma y deliberar su razón de ser y sus mecanismos. Lejos de ello, inició una persecución verbal y judicial contra la CNTE y dejó en manos del propio SNTE la comunicación con los docentes. Este fue un craso error pues se multiplican las historias de cómo la dirigencia sindical no sólo se encargó de no comunicar sino de sembrar rumores, falsas informaciones y confusión entre los maestros. Mientras, el gobierno se desentendió y prefirió emplear una visión vertical en la implementación de la reforma.

Por su parte, era indispensable que las plazas se entregaran a quienes tenían las mejores capacidades para ejercer la función docente, ello implicaba varios aspectos que van desde el supremo cuidado en la definición consensuada de los perfiles, parámetros e indicadores docentes, su adecuada socialización, la cuidada revisión y aplicación de los instrumentos de evaluación, así como la transparencia total en las listas de prelación para la asignación de las vacantes y la verificación pública de que las plazas docentes se entregaban conforme a derecho. Sintomático de esta negligencia es que el gobierno fue incapaz de echar a andar un sistema que permitiera recibir denuncias de casos en los que no se cumpliera con los procedimientos planteados en el servicio profesional docente y actuar en consecuencia.

Finalmente, nunca hubo un interés real por resolver los casos de corrupción pasados en el uso de los recursos para la educación mediante procesos administrativos y judiciales. Lejos de castigar los abusos contra los maestros por parte de la dirigencia sindical, se les apapachó con el Programa de Refinanciamiento de Créditos de Nómina para los Trabajadores de la Educación que legitimó la usura y el control autoritario de los dineros de los maestros. Mucho menos se establecieron controles para terminar con el pago de aviadores y comisionados a partir del Censo ordenado por la propia reforma. En este sentido, la conciliación de la nómina fue una auténtica burla. Ya ni preguntemos sobre el impulso de la democratización sindical.

El cuarto error quizá no fue propiamente de Nuño, aunque sin duda debió preverlo: la falta de alternativas económicas para los potenciales excluidos de la reforma.

En el país, pero en particular en Oaxaca, la nómina magisterial se convirtió en una fuente de movilidad social y de ingresos con prestaciones sociales que otros empleos simplemente no ofrecen. La débil economía, pobreza y marginación de estados como Oaxaca hacen que pertenecer al magisterio sea una auténtica fortuna al no existir otras fuentes de ingreso dignas ni permanentes.

Más aún, por ejemplo en 2012, mientras que la SEP contabilizaba a 48 mil 622 maestros de educación básica en Oaxaca, en la nómina se le pagaba a 98 mil 432 personas diferentes, cifra menor a los 81 mil 300 maestros que la CNTE consideraba según su “plantilleo”. Si en realidad todas esas personas dieran clases, aulas en Oaxaca tendrían de entre 9 y 11 alumnos por maestro. Ello no es así, por supuesto, pero una reforma que, de aplicarse a rajatabla, dejaría en la calle a entre 50 y 19 mil personas sin opciones productivas dignas, ¿qué esperaban que hicieran todas esas personas y sus familias si no resistirse a la reforma como fuera?

De ahí que la ausencia de proyectos productivos que dieran salida a toda esa población ha sido escandalosa. Las Zonas Económicas Especiales no cumplirán con ese propósito porque, de entrada, no fue diseñado así y, de salida, es un desarrollo ajeno a las características demográficas y económicas de la región.

Por todo lo anterior, Nochixtlán, Oaxaca, no es más que la consecuencia de una cadena de errores de juicio por parte del gobierno, en general, y de Aurelio Nuño, en particular. No se sabe si existirá voluntad política para corregir el rumbo. La presión de la ciudadanía no le dejará muchas opciones a su alcance. Si persisten en privilegiar las ambiciones personales y de grupo, ninguna solución será posible porque estará de lleno en la contienda electoral dejando lo educativo en lo secundario. Lo peor será que la cerrazón del gobierno provoque que la única medida que fue razonablemente aceptada en el gobierno de Peña Nieto, la Reforma Educativa, termine simplemente en la ignominia envenenada.

Investigar Nochixtlán, castigar a los responsables y establecer un diálogo franco, áspero, público, pero honesto con los disidentes de la reforma, son apenas los primeros pasos para corregir el rumbo. El gobierno tiene la palabra.

Fuente: http://www.animalpolitico.com/blogueros-el-dato-checado/2016/06/20/aurelio-enveneno-la-reforma-educativa/

Imagen: http://az778189.vo.msecnd.net/media/fotos/g/de30ca7ccc56478d13caf37701c460b4.jpg

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